Riqueza incomparable: Laboratorios naturales Con mucha frecuencia suele definirse a Yucatán como un lugar privilegiado en el escenario mun-
dial por las bondades de su paisaje, la inigualable herencia de su cultura maya, su exquisito arte culinario y por su posición geográfica que le brinda grandes posibilidades para participar de forma importante en la dinámica comercial y turística. Pero la riqueza de este hermoso estado no estaría completa sin agregar a sus grandes atractivos las bondades que representan sus laboratorios naturales, únicos en el mundo, conformados por un espectacular anillo de cenotes, el enigmático y cada vez más estudiado cráter de Chicxulub y la Cultura Maya. El Sistema de Investigación, Innovación y Desarrollo Tecnológico del Estado de Yucatán (SIIDETEY) realizó durante el mes de septiembre, en el marco de las conferencias conmemorativas por el bicentenario y centenario de la Independencia y Revolución mexicanas, su ciclo de conferencias “Laboratorios Naturales de Yucatán”, que reunió a cuatro investigadores del más alto nivel y reconocimiento nacional y mundial. Así, “Los jueves de ciencia del SIIDETEY estuvieron engalanados por los doctores Eugene Perry, Jaime Urrutia, Ella Fanny Quintal Avilés y Juan Carlos Seijo, en ponencias de la mayor relevancia para la ciencia en Yucatán, pues abordaron temas trascendentales como “El acuífero de Yucatán; el cráter de Chicxulub; la cultura maya contemporánea, y el cambio climático y pesquerías. Este esfuerzo se suma a la visión del “Yucatán científico y tecnológico” que busca integrar los trabajos de investigación con las problemáticas más apremiantes de los yucatecos y buscar soluciones desde los centros de investigación y universidades. Estas conferencias magistrales, además, tienen el firme propósito de apoyar en la formación de recursos humanos de alto nivel que favorezcan un mejor desarrollo académico y de divulgación científica, amén de motivar la inter-institucionalidad en materia de investigación científica y tecnológica que favorezca respuestas inmediatas y multidisciplinarias a temas fundamentales como alimentación, cambio climático, hábitat y desarrollo humano, agua, energía, salud y educación. Presentamos, amable lector, un resumen de las conferencias sobre Laboratorios naturales que fueron realizadas en cuatro instituciones pertenecientes al Sistema y a quienes agradecemos su hospitalidad: Centro de Investigación Científica de Yucatán, Cephcis/UNAM, Cinvestav-Unidad Mérida y la Universidad Autónoma de Yucatán. Muchas gracias.
La otra riqueza Laboratorios naturales únicos en el mundo ponen a Yucatán en la mira de instituciones e investigadores del más alto nivel académico y científico
De hecho, un estudio realizado recientemente por un equipo internacional de 41 investigadores, y del que da cuenta la revista Science, confirmó que un solo asteroide de 10 kilómetros de diámetro —cuya potencia equivale a mil millones de veces mayor que la bomba de Hiroshima— cayó a una velocidad de hasta 25 kilómetros por segundo hace 65 millones de años, que habría puesto fin al reinado de los reptiles sobre la Tierra. Según investigadores especializados en el tema, hay evidencia sólida para concluir que el impacto en Chicxulub está asociado con extinciones del orden del 75 por ciento de las especies, incluidas especies marinas y terrestres, todos los dinosaurios, los reptiles marinos y los reptiles voladores.
CHICXULUB
tiene una pronunciación tan extraña como su significado (“cuerno de venado prendido”), pero lo cierto es que esta pequeña comisaría del municipio de Progreso, se convirtió en el centro de la atracción científica mundial por los resultados de investigaciones que aseguran que este diminuto poblado es la prueba más contundente de la teoría sobre el impacto de un meteorito, que habría causado la extinción de los dinosaurios hace más de 65 millones de años. A sólo 32 kilómetros de la capital yucateca, comprendida entre los paralelos 21º 08’ y 21º 13’ de latitud norte y 89º 30’ y 89º 35’, longitud oeste, esta localidad puso a Yucatán en los ojos del mundo y convirtió a esta cabecera municipal en uno de los laboratorios naturales que atrae cada año a científicos de muchas latitudes y provocó una suerte de fascinación científica que motivó innumerables publicaciones en las revistas más prestigiadas en el mundo de la ciencia. Por si fuera poco, el anillo de cenotes que conduce grandes flujos de agua como enormes venas irrigando líquido vital por toda La Península de Yucatán, también se convirtió en un imán poderoso para investigadores que analizan la geología e hidrología de esta región y su relación con la caída del meteorito en Chicxulub, además de la formación de cenotes y cavernas en la roca calcárea típica de esta región del sureste del país. Además, los científicos sociales han encontrado en la cultura maya un laboratorio extraordinario para analizar los cambios sociales, culturales y productivos de una de las civilizaciones más estudiadas alrededor del mundo.
Hay, sin embargo, un misterio que la ciencia no ha logrado descifrar. ¿Cómo es que las aves, que son más vulnerables, sobrevivieron al impacto; y por qué no hay señales de iridio en los alrededores de la zona de impacto, si se sabe que el meteorito produce en abundancia este material. A esta riqueza habría que agregar la posibilidad de estudiar la cultura maya de primer contacto para ubicarla en medio de una dinámica social acelerada que está motivando cambios significativos en las estructuras básicas de esta población: su contacto con la biodiversidad, sus costumbres, los rituales y la pérdida del lenguaje, entre otros.
Tres laboratorios naturales únicos en el mundo representan una riqueza inmejorable para entender una buena parte de la vida en el planeta, sus antecedentes y las perspectivas a largo plazo, principalmente en lo referente a la utilización de los recursos hídricos y su estrecha relación con el cambio climático, el hábitat, y la ecología humana.
www.siidetey.org
Hay que poner atención, sin embargo, en el tema del cambio climático y las repercusiones para Yucatán en el mediano y largo plazos. La pesca, por ejemplo, es uno de los temas fundamentales que deben abordarse de manera integral con la finalidad de adelantarse a posibles panoramas caóticos que afecten una de las actividades económicas más importantes en Yucatán.
Por Juan Antonio Arenas
Septiembre-Octubre de 2010
GACETA SIIDETEY
3
El acuífero de Yucatán El desarrollo económico de la región depende de un manejo inteligente del agua subterránea; y más importante, la salud y bienestar de los habitantes.- Eugene Perry
Foto: Secretaría de Educación del Estado de Yucatán
El Dr. Eugene Perry se dirige a un auditorio pletórico de estudiantes e investigadores en el auditorio del Centro de Investigación Científica de Yucatán, el pasado jueves 2 de septiembre.
REDACCION SIIDETEY / Con información del Dr. Perry
El ciclo de conferencias “Los laboratorios natu-
rales de Yucatán”, organizado durante el mes de septiembre por el Sistema de investigación Innovación y Desarrollo Tecnológico del Estado de Yucatán (SIIDETEY), comenzó con la conferencia magistral “El acuífero de Yucatán”, impartida por el doctor en Hidrología y Geología de la Northern Illinois University, Eugene Perry. El Dr. Perry analizó los factores que afectan la Hidrología y Geología de la Península, como la caída del meteorito en Chicxulub, y la formación de cenotes y cavernas en la roca calcárea típica de la Península de Yucatán. “El anillo de cenotes es una cuenca muy importante con grandes flujos de agua, pero tenemos que saber hacia dónde se van estas aguas para que nos permita saber qué estamos haciendo y qué afectaciones puede tener a mediano y largo plazos”, señaló al iniciar su ponencia. El agua que se utiliza en la mayor parte de la Península de Yucatán para distribución de agua potable, agrícola, e industrial es extraída de pozos que penetran un acuífero regional de calizas. El desarrollo económico de la región depende de un manejo inteligente de ese recurso de agua subterránea; y más importante, la salud y bienestar de los habitantes presentes y futuros
4
GACETA SIIDETEY
Septiembre-Octubre de 2010
depende de la disponibilidad de agua de buena calidad, libre de bacterias patógenas y químicos tóxicos. El agua subterránea en Yucatán se almacena naturalmente en las rocas de lo que se conoce como un sistema cárstico, el cual consiste de espacios interconectados que varían en tamaño desde espacios microscópicos hasta dimensiones de cavernas. El acuífero de Yucatán, describe el Dr. Perry, tiene una característica en común con acuíferos de otras partes del mundo, y esa es que son vulnerables a la contaminación debido a la facilidad de movimiento que tienen los contaminantes a través de los espacios ampliamente interconectados. Las rocas sedimentarias de la Península forman capas prácticamente planas que se apilan en una secuencia regular como capas de un pastel, porque las capas más antiguas están cubiertas por capas más jóvenes que se extienden por cientos de kilómetros y es difícil o prácticamente imposible observar las capas más profundas de manera directa. En muchas otras partes del mundo, los geólogos pueden examinar las rocas cubiertas con relativa facilidad porque están expuestas debido a los efectos de la erosión en ríos, pero en la Península de Yucatán no hay ríos. Consecuentemente, algunas propiedades importantes permanecen desconocidas.
www.siidetey.org
El grupo de colaboradores del Dr. Perry ha tratado de resolver este problema utilizando la química del agua (particularmente los iones de cloro, sulfato y estroncio, al igual que los isótopos de estroncio). Los objetivos han sido 1) ayudar a identificar la extensión de la intrusión salina (penetración del agua de mar en el subsuelo), 2) determinar la extensión sub-aérea de evaporitas, ricas en yeso, 3) demostrar la existencia de un flujo subterráneo interconectado entre la falla de Ticul y “el anillo de cenotes”, en la parte central y noroeste de la Península, y 4) investigar la hidrogeología y geomorfología del terreno cárstico desarrollado en capas de yeso en el sur de Campeche y Quintana Roo. Aunque estos estudios se llevaron a cabo con fines científicos, el Dr. Perry cree que la información obtenida puede ser útil para maximizar la calidad del agua suministrada a la red de agua potable para evaluar opciones de disposición final de residuos sólidos, y para monitorear la contaminación, especialmente en zonas de descarga de agua subterránea. El ion de cloro es importante como trazador porque prácticamente no participa en las reacciones que ocurren cerca de la superficie de la tierra; y al menos que haya una evaporación extrema no formara precipitados. Es por esto que el ion cloro se puede utilizar como factor “normalizante” para indicar procesos de dilución. Por ejemplo, la relación (en equivalentes) SO4/Cl es 0.103 en agua de mar; por lo tanto, el agua subterránea que tenga esa relación es seguramente una mezcla que contiene agua de intrusión salina.
A diferencia del ion cloro, el sulfato puede interaccionar con el acuífero de dos maneras. Puede provenir de la disolución de yeso (CaSO4•2H2O) o, en condiciones deficientes de oxígeno, puede reaccionar con materia orgánica para producir compuestos de sulfuro. Por lo tanto, una relación de SO4/Cl significativamente mayor que 0.1 puede indicar la presencia de una capa de evaporitas en el acuífero, mientras que una relación menor puede indicar condiciones anaerobias. El estroncio está presente en agua de mar con una concentración de aproximadamente 8 ppm. Los isótopos de estroncio en agua de mar han variado sistemáticamente con el tiempo geológico y la edad, para una relación de 87Sr/86Sr en particular, en el agua de mar, es heredada por los minerales que forman la roca, tal como calcita, aragonita, yeso, y celestita (SrSO4) que fueron precipitados en ese momento. Esto permite el fechamiento de rocas sedimentarias químicas; además de ser un delimitante en las posibles fuentes de iones en agua subterránea. La relación de 87Sr/86Sr tiene un valor de aproximadamente 0.70765 para el periodo del Cretacico al Eoceno. Desde entonces, la relación se incremento hasta tener un valor presente de 0.70915. El estroncio es extremadamente útil como trazador porque dependiendo de la fuente y del tiempo de deposición, varia en concentración y en composición isotópica. El bien conocido Impacto de Chicxulub, que se estima ocurrió hace 65.96 millones de años ha afectado la hidrogeología de la Península de dos formas significativas. Un efecto directo e inmediato fue la formación de un cráter que ha actuado como una cuenca que permaneció sumergida en el océano durante la mayor parte del Periodo Paleógeno. Esta cuenca, centrada aproximadamente en el puerto de Chicxulub, y que notablemente incluye Mérida, está rellena con rocas sedimentarías marinas que no han sido expuestas ni sujetas a un proceso de erosión intenso. El impacto ha contribuido de manera adicional a la hidrogeología en la creación de un conjunto de fallas a la orilla de la cuenca. El agua que fluye hacia el oeste, a lo largo de la Falla de Ticul, converge en el brazo oeste de este “anillo de cenotes” y desemboca en el Estuario de Celestún y por lo tanto, al Golfo de México. En el este de la cuenca, estas fallas del anillo (observadas en los perfiles sísmicos fuera de la costa) son probablemente responsables de una zona de dolinas y cenotes conocidos como “zona de columpios”.
El Dr. Perry en Yucatán, en esta imagen de 1943.
Es probable que esta región es una característica cárstica, en la cual, la subsidencia ocasionada por la disolución de calizas cerca de la superficie es amplificada por la disolución a lo largo de las fallas del anillo a profundidades mayores. Combinando información de la geoquímica del agua con datos limitados de núcleos de roca, perfiles geotérmicos, altura del agua sobre el nivel del mar, información sismológica y núcleos de sedimentos del lago Chichancanab, el equipo del Dr, Perry llegó a las siguientes conclusiones: 1) La intrusión salina penetra hacia el continente por varios kilómetros. A lo largo del sistema de fracturas del “anillo de cenotes”, y se extiende desde el estuario de Celestún sobre el oeste y norte hasta casi 200 km tierra adentro hacia el Lago Chichancanab. 2) Los datos de Sr, 87Sr/86Sr, y Sr/Cl confirman la presencia de una capa que contiene yesocelestita de edad Cretacica/Eoceno que se encuentra en el fondo del cenote Xkolac. No existe información suficiente para distinguir si es proveniente de material del impacto (de edad K/Pg), o es una evaporita más joven del Paleógeno, o las dos. 3) En contraste a la probable disolución de evaporitas que ocurre en el este y oeste de la cuenca de Chicxulub, en la cuenca misma, es muy poco probable que haya existido formación de evaporitas o erosión sub-aérea, por lo que la posibilidad de formación de cavernas e incremento de la permeabilidad dentro de la cuenca es muy baja. El estudio de exploración en la parte sur de la Península de Yucatán reporta que no hay evidencia de intrusión salina entre Escárcega, en la costa oeste, y Cenote Azul en la parte este. Existen también otros aspectos en los que difiere la parte sur de la parte norte de la Península.
www.siidetey.org
1) Hay una secuencia de capas de yeso, con un espesor de al menos 25 m a lo largo de la carretera 186 en la parte sur de Campeche. Estas evaporitas son la fuente de sulfato en el agua subterránea, en cantidades tales que exceden la concentración máxima permitida en la norma por un factor de hasta cuatro veces. 2) Los trabajos recientes de ampliación de la carretera 186 han puesto al descubierto capas de arcilla entre mezclada con aquellas de evaporitas. Estos afloramientos contribuyen al esclarecimiento de las características geomorfológicas de la región, sugiriendo que mucho del relieve local es el resultado de la disolución de yeso que libera arcilla de las capas de argilita para formar un acuitardo en la superficie. 3) La formación de poljes, tal como el Valle de Edzná (el cual, probablemente fue intruído por un brazo de mar durante el Oligoceno), y la formación de lagos someros, tales como el lago Silvituc, son una consecuencia de la erosión e intemperismo que han sufrido las evaporitas expuestas. 4) En contraste con el agua subterránea de la parte sur de Campeche, contaminada con altas concentraciones de sulfato, el agua superficial de lagos y lagunas de la zona esta aislada de las capas de yeso por un acuitardo residual que esta relativamente libre de iones. Los arqueólogos han estimado que en el área de Calakmul, al sur de Campeche, hubo una población de más o menos 1.5 millones de personas, esto durante la florescencia del periodo clásico maya (el cual empezó alrededor del año 500 DC). Esta área justamente corresponde al área que actualmente tiene problemas de contaminación de sulfatos. Los mayas no construían pozos, pero en su lugar utilizaban el agua almacenada en aguadas. Las aguadas son depresiones naturales que fueron modificadas con el fin de hacerlas semi-impermeables y de canalizar el agua. Rosario Domínguez y William Folan estimaron que las aguadas en Calakmul tuvieron una capacidad combinada de almacenamiento de aproximadamente 230 millones de litros. Esto sugiere que los residentes modernos del área pueden experimentar con la tecnología hidrogeológica maya para el aprovechamiento de fuentes de agua superficial de buena calidad química, con el fin de complementar o reemplazar agua subterránea contaminada con sulfatos. Sin embargo, como una nota precautoria, vale la pena mencionar que hay evidencia de que Calakmul fue posteriormente abandonado durante un periodo de severa sequía.
Septiembre-Octubre de 2010
GACETA SIIDETEY
5
Un laboratorio natural único que explica en gran medida la desaparición de la mayoría de las especies vivas hace más de 65 millones de años Por Redacción SIIDETEY
El misterio continúa: Más de 65 millones de años de historia, más de 200 kilómetros de diámetro y la desaparición de 75% de las especies vivas que poblaban el planeta, se ha convertido en una suerte de fascinación científica mundial por explicar uno de los temas más importantes sobre la desaparición de los dinosaurios: El meteorito que impactó el planeta en la Península de Yucatán.
Ante una asistencia que rebasó las expectativas, en la Facultad de Ingeniería de la UADY, el Dr. Jaime Urrutia Fucugauchi, investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM, señaló que el impacto del asteroide que cayó en Chicxulub es muy pequeño, pero tuvo fuertes efectos en el planeta. La capa de arcilla, característica de los efectos del impacto, llegó a Italia, donde se ha descubierto
la misma que en Yucatán, señaló el investigador durante su ponencia “El cráter de Chicxulub”, el pasado 9 de septiembre. El cráter Chicxulub, localizado en el sector noroeste de la península de Yucatán ha sido asociado al impacto meteorítico ocurrido hace unos 65.5 millones de años y a los eventos relacionados al límite Cretácico-Paleogeno (K/Pg). Los estudios sobre el cráter presentan un carácter multi- e interdisciplinario y se relacionan con un amplio rango de investigaciones sobre extinción de organismos, evolución de la vida, impactos de cometas y asteroides, evolución de las superficies planetarias, comportamiento de materiales en altas presiones y temperaturas, evolución tectónica, geohidrología en ambientes carbonatados y cambios climáticos globales.
Ponencia del Dr. Jaime Urrutia en la Facultad de Ingeniería de la UADY. (Foto: Cortesía SEGEY)
El impacto de Chicxulub ha sido relacionado a la extinción de un 65-75 % de las especies (entre ellas los dinosaurios y las amonitas e incluye especies marinas y terrestres, los reptiles marinos y los reptiles voladores), marcó el inicio de la era Cenozoica (con la diversificación de los mamíferos) y los eventos que marcan la transición del Mesozoico al Cenozoico. Entre este total, se incluye una gran cantidad de especies marinas, desde microorganismos hasta organismos emblemáticos como las amonitas, que son como los Nautilus característicos del Mesozoico. El cráter tiene un diámetro aproximado de 200240 km y constituye uno de los tres cráteres de mayores dimensiones identificados en el planeta. Por su menor edad (los otros dos cráteres datan de hace unos dos mil millones de años) y las características en la zona carbonatada de la península de Yucatán, han permitido la preservación de la estructura y de las litologías formadas en el impacto. El cráter representa un laboratorio natural para investigar impactos de grandes dimensiones en la Tierra y otros cuerpos del Sistema Solar.
En los últimos años se han llevado a cabo diversos estudios geofísicos y geológicos, y programas de perforación en Yucatán, incluyendo los estudios geofísicos (gravimetría, aeromagnetometría, electromagnéticos, sísmica de reflexión y refracción, imágenes de satélite, perforaciones profundas) en la zona marina y terrestre del cráter, que han aportado nueva información sobre la estratigrafía, estructura, formación del cráter, emplazamiento de las brechas de impacto y los efectos regionales y globales del impacto. Según los científicos el impacto expulsó materiales hacia todo el planeta que incluso llegaron a la Luna, quizá a Marte. Al reingresó, estos materiales cubrieron todo el planeta, elevando su temperatura hasta 800 grados. Esto ocasionó una mayor cantidad de sulfuro, polvo y cenizas que cubrieron la Tierra. Tal afirmación fue posible mediante el análisis de las capas que marcan la transición geológica entre el Cretácico y el Paleógeno, donde se estudió el material expulsado durante el impacto del asteroide, el cual contiene altos niveles de iridio y cuarzo.
Gradiente horizontal de la anomalía gravimétrica de Chicxulub. Los círculos blancos representan los cenotes en la península. Observe el semi-círculo de cenotes que coincide con una anomalía en el cráter.
Con estas investigaciones, los científicos ahora desestiman otras hipótesis que buscan explicar el fenómeno geológico, entre ellas que diversos impactos en el mundo había provocado el colapso de especies. Otra argumentaba que tuvo como origen la intensa actividad volcánica en la península de Decán, en la India, cuyos restos de flujos en la zona sugieren que las erupciones duraron 1,5 millones de años. Sin embargo, ninguna cuenta con las suficientes bases geológicas para ser sustentada como lo ha determinado recientemente el cráter de Chicxulub. “El cráter de Chicxulub está una parte en tierra y otra en mar. De la parte terrestre tenemos más cinco mil muestras, pero ahora queremos explorar la parte marina, que es mucho más profunda”, explicó el Dr. Urrutia.
Jaime Urrutia. Imagen tridimensional de la anomalía gravimétrica del cráter de impacto Chicxulub- Observe el patrón radial de las anomalías sobre la estructura multi-anillo del cráter.
Los Mayas
contemporáneos
Un factor determinante que influye en la disminución del uso del idioma maya es el estigma del racismo contra este sector social Por Redacción SIIDETEY
Los “Encuentros con la ciencia” tuvieron su tercera exposición el 23 de septiembre con un recorrido histórico muy puntual de la maestra Ella Fanny Quintal Avilés, reconocida investigadora del Instituto Nacional de Antropología e Historia, quien repasó las etapas de los mayas de Yucatán, su pasado, presente y los cambios en sus estructuras sociales, económicas y culturales.
El Sistema de Investigación, Innovación y Desarrollo Tecnológico del Estado de Yucatán realizó 4 ponencias magistrales durante el mes de septiembre sobre laboratorios naturales de Yucatán y en esta tercera entrega tocó el turno a las ciencias sociales. La cultura maya es uno de los temas sobre civilizaciones del pasado de mayor estudio. Yucatán, en ese sentido, se convierte en un enorme laboratorio de estudio histórico sobre los cambios de una de las culturas prehispánicas de mayor relevancia.
El Centro Peninsular en Humanidades y Ciencias Sociales, de la Universidad Nacional Autónoma de México, fue el escenario para la presentación de la ponencia magistral: “Los mayas Contemporáneos”, un tema que (en opinión de la propia investigadora) resulta muy complicado y cuya definición aún no acaba de satisfacer a muchos investigadores, porque los referentes que se emplean dependen del punto de vista de quien los define. A este respecto, señaló la Mtra. Quintal, nos encontramos con las modificaciones realizadas a la Constitución Política de México, como a la de Yucatán, en materia de los artículos que a esto se refieren. Y fue más allá: “En muchas ocasiones, los académicos tendemos a establecer planteamientos esencialistas, definiendo a los mayas con conceptos estáticos, sin considerar los cambios que ellos mismos experimentan”.
8
GACETA SIIDETEY
Septiembre-Octubre de 2010
“Hay que recordar que, de hecho, hasta el siglo XIX el concepto de mayas no existía. Se les llamaba indios, y ellos se definían como macehuales, término que aún se utiliza en la región central de Quintana Roo”, agregó.
www.siidetey.org
La especialista se refirió a las dificultades que representa para los investigadores la definición de la identidad, pues ahora se ha reconocido a México como un país pluricultural, ya no sólo multiétnico y multicultural, en el cual la primera condición para ser considerado indígena es la propia conciencia, el propio sentido de pertenencia a determinado grupo. En ese sentido, explicó la Maestra Quintal no hablamos estrictamente de una cuestión de cultura, sino de una representación del yo individual o colectivo, que se expresa en determinadas situaciones a través de símbolos o emblemas determinados. “Por ejemplo, mi abuelo era maya, pero yo no me considero maya. Tengo ascendencia maya, como casi todos aquí. Si escarbamos un poquito, el abuelo, el bisabuelo, o cuando mucho entre los tatarabuelos, casi siempre encontramos en nuestra familia el elemento maya, pero eso no basta para ser maya, me tengo que asumir como tal”, subrayó. “En nuestro trabajo de campo, como parte del Proyecto Nacional de Etnografía, a cargo del INAH, en el que participa una docena de investigadores para la Península, encontramos que los referentes que la propia gente de las comunidades emplea son precisamente el uso de la lengua maya y la participación en rituales ancestrales. No son los únicos, pero sí son los más significativos”. La investigadora destacó que entre los elementos culturales propios más relevantes de la cultura maya para definir su identidad, están el idioma y la religiosidad, en los cuales basó una buena parte de su ponencia. En cuanto al lenguaje, Quintal Avilés destacó la disminución del número de maya hablantes en el siglo XX: del 63 por ciento en 1950 hasta 37 puntos porcentuales en el año 2000, donde la merma más significativa se dio en las décadas ochenta y noventa, cuando el número se redujo en un diez por ciento motivada, principalmente, por las migraciones del campo a la ciudad focalizada con mayor intensidad a partir de los años setenta.
Mtra. Ella Fanny Quintal Avilés.
Foto: Cortesía SEGEY.
Una de las cuestiones fundamentales que influyen en la disminución del uso del idioma maya en escenarios sociales como el trabajo o la escuela, es el estigma del racismo contra la población maya hablante, tanto externo como interno, lo cual genera la negación de su propia cultura que, como una forma de sobrevivencia, les permite acceder a oportunidades en las ciudades yucatecas, principalmente la capital, Mérida.
l
Quintal Avilés destacó la importancia de programas radiofónicos en lengua maya y que existan señalamientos en zonas arqueológicas en este idioma, ya que esto permite que la población maya de la región peninsular comprenda que su lenguaje materno “es tan válido y valioso como cualquier otra lengua”.
El tema cultural es quizás el menos afectado. Para la investigadora los rituales mayas siguen practicándose, aunque en mucha menor proporción, incluso ahora con propósitos diferentes a los originales, como el afán de reivindicar la identidad cultural, o en el ámbito turístico y comercial. En este sentido, los rituales mayas -aún en menor número son practicados cotidianamente, en especial en el oriente del estado: el Ch´a´cháak, el Jo´obesjnal, el Loj kaaj, el J´eetz méek, o el Hanal Pixán.
www.siidetey.org
Septiembre-Octubre de 2010
GACETA SIIDETEY
9
y pesquerías: Un enfoque bioeconómico El cierre fue con broche de oro. Los “Encuentros con
la ciencia” culminaron septiembre con una ponencia magistral sobre pesquerías y cambio climático desde un enfoque bioeconómico, a cargo del Dr. Juan Carlos Seijo Gutiérrez quien destacó la importancia de la prevención en aspectos que tienen que ver con los esquemas de producción pesquera y su estrecha relación con los fenómenos climáticos en el mundo.
El cambio climático impactaría la distribución, tamaño y ciclo de reproducción de las especies marinas
Y es precisamente como comenzó el Dr. Seijo si exposición, señalando que el cambio climático impactaría la distribución, tamaño y ciclo de reproducción de las especies marinas. Durante la charla “Cambio climático y pesquerías: un enfoque bioeconómico”, realizada en la unidad Mérida del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (CInvestav), el Doctor Seijo Gutiérrez expuso que los cambios en la temperatura tendrían influencia sobre el metabolismo de las especies marinas, que a su vez impactarían en la ubicación espacial. “Se esperan tres grandes cambios: en la abundancia, disponibilidad y en la composición de las especies que sustentan las pesquerías. Esto genera una mayor incertidumbre”, expresó. El director de Investigación de la Universidad Marista dijo a estudiantes y especialistas que una hipótesis plantea que los cambios darían como resultado que la productividad de los ecosistemas decrezca en las áreas tropicales y subtropiciales –donde se encuentra Yucatán- y se incremente en las latitudes altas, hacia los polos.
10
GACETA SIIDETEY
Septiembre-Octubre de 2010
Foto: José Acosta.
El Dr. Juan Carlos Seijo explica a estudiantes e investigadores el modelo bioeconómico de la pesquería, en el Auditorio B de la Unidad Mérida del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (CInvestav).
www.siidetey.org
El Dr. Seijo sugiere modificar tiempos de captura, la duración de las temporadas y el volumen del producto.
“En esencia se afectan procesos fisiológicos y el efecto va a depender de la sensibilidad de las especies a cambios en la temperatura, en la salinidad y a su capacidad de movilidad para migrar a ambientes más propicios y adecuados para su desarrollo”, comentó.
Estas estrategias deberán prever que algunas especies comunes en una zona determinada, se desplacen, y lleguen otras que antes no se encontraban. Además, tomando en cuenta los cambios en los ciclos de reproducción, se deberían modificar los momentos de captura, la duración de las temporadas, así como el volumen del producto, entre otros factores.
Ante estas transformaciones y la falta de información al respecto, los investigadores buscan evidencias de los cambios supuestos y se enfrentan a un reto importante en lo que respecta a la evaluación de riesgos, pues “no sabemos cuándo sucederán los cambios y de qué magnitud serán”, dijo el especialista en economía marina. En este contexto, propuso no realizar estudios uni-específicos de las especies con mayor interés económico, sino investigaciones integrales que reflejen la situación de un ecosistema completo.
Asimismo deberá identificarse las vulnerabilidades de las comunidades costeras y analizar dónde ubicar las áreas marinas protegidas. La conferencia, con la que finaliza el ciclo “Laboratorios naturales de Yucatán” organizado por el Sistema de Investigación, Innovación y Desarrollo Tecnológico del Estado de Yucatán (SIIDETEY), fue transmitida vía Internet, a la unidad de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, del Colegio de la Frontera Sur.
Para ello, se debe monitorear el cambio en abundancia de las especies, en los factores ambientales, el hábitat y la dinámica de los pescadores. Además, continuó, para plantear estrategias que permitan enfrentar los cambios, es necesario realizar investigaciones interdisciplinarias e involucrar a las comunidades de pescadores, ofrecerles información confiable e integrarlos a la búsqueda de soluciones pertinentes, en un contexto de cooperación, confianza y respeto.
Juan Carlos Seijo Gutiérrez es presidente de la Asociación Norteamericana de Economistas Pesqueros, miembro del Consejo Directivo del Instituto Internacional de Economía Pesquera y del Consejo Asesor del SIIDETEY.
Asistentes a la conferencia del Dr. Seijo leen atentamente la Gaceta SIIDETEY, momentos antes del inicio de la ponencia.
www.siidetey.org
Septiembre-Octubre de 2010
GACETA SIIDETEY
11
LAS
Energías alternas
Las preocupaciones son básicamente dos: El fenómeno del cambio climático y la seguridad en el suministro de energéticos primarios Redacción SIIDETEY
Una de las grandes preocupaciones a nivel mundial sobre la sustentabilidad energética es el alto consumo de energías no renovables y la incipiente utilización de las alternas, en contraste con el incremento en la emisión de gases invernadero (Bióxido de Carbono, Metano, Oxidos de Nitrógeno, etc.) a la atmósfera, situación que está incrementando la temperatura de la misma, debido a que estos gases absorben la radiación infrarroja que emite la tierra. El Sistema de Investigación, Innovación y Desarrollo Tecnológico del Estado de Yucatán presentó, el 7 de octubre ppdo, la ponencia magistral “Las energías alternas”, del Dr. Pablo Mulás del Pozo, investigador titular del Instituto de Investigaciones Eléctricas y director ejecutivo del Capítulo México, Consejo Mundial de Energía. “En el presente, sustentabilidad quiere decir el proveer y mantener una calidad de vida adecuada para todos los habitantes de la Tierra, tanto en el presente como en el futuro, asegurando al mismo tiempo, la salvaguarda de la calidad y la diversidad del mundo que nos rodea”, citó el Dr. Mulás el texto: “Living in One World”, del Consejo Mundial de la Energía. Las preocupaciones son básicamente dos: El fenómeno del cambio climático y la seguridad en el suministro de energéticos primarios, entendiendo por seguridad energética la “disponibilidad física ininterrumpible de los productos energéticos en un mercado, a un precio adecuado para todos los consumidores”. El investigador expuso que el sector eléctrico mundial es responsable del ~40% de las emisiones causadas por el hombre (71% carbón, 18% gas, y 11% petrolíferos).
Dr. Pablo Mulás del Pozo.
El Dr. Mulás del Pozo señaló que la falta de seguridad energética implica la incapacidad para satisfacer el incremento en la demanda de los productos energéticos; la amenaza a la integridad física de las instalaciones (terrorismo, clima,...); las restricciones a la oferta de energéticos primarios por acciones de naturaleza política y la volatilidad extrema en los mercados de energéticos primarios. Para ello, dijo, la forma de contrarrestar esta situación es diversificando la oferta y la canasta de los energéticos utilizados; incrementando la oferta de energéticos primarios locales y reduciendo la demanda final en los sectores consumidores. Comentó el especialista que el Grupo de los 8 países más desarrollados y los países invitados, en julio 2005, le pidieron a la Agencia Internacional de Energía de la OCDE que desarrollara una ruta tecnológica y al Banco Mundial un plan de financiamiento para esa ruta con el fin de reducir la emisión de Gases Invernadero a niveles adecuados.
12
GACETA SIIDETEY
Septiembre-Octubre de 2010
www.siidetey.org
A nivel mundial, la aplicación de las energías renovables se ha orientado básicamente a la generación eléctrica, y con menor énfasis a la producción de combustibles para el sector transporte. Poco o casi nada de importancia se le ha dado a la generación de calor/frío. En el Balance Nacional de Energía 2007 se destaca que el uso de energía en los sectores consumidores (residencial/comercial/ servicio público, agropecuario, transporte, e industrial) es de la siguiente manera: Electricidad 17.7%; Combustibles transporte 45.5% y Combustibles para generación de calor 36.8%. A nivel mundial, en 2008, las producciones fueron; BIOETANOL: 65.4 millardos de litros: EUA: 34.7 millardos (52%); Brasil: 24.5 millardos (37%); China: 1.9 millardos; Francia: 1 millardo y Canadá: 0.9 millardo. A nivel mundial, en 2008, la producción fue; BIODIESEL: 16,084 millardos de litros; Alemania: 3.2 millardos; (Unión Europea:54%); EUA: 2.7 millardos (16.5%); Francia: 2.0 millardos; Argentina: 1.2 millardos; Brasil: 1.1 millardos (Arg.+Bra.= 14%). El especialista reveló que en México la Estrategia Nacional de Energía proyecta para el 2024 un incremento en la demanda a una tasa promedio anual del 4.1%. De 247.3 TWh saltará la demanda a ~450 TWh. El 35% deben ser energías limpias; además, los sistemas eléctricos inteligentes (redes y equipos) así como la electrificación del sector transporte incrementaran la generación base. Por limitaciones relacionadas con el cambio climático, en México ésta solo podrá realizarse con energías fósiles/captura y secuestro de carbón, algunas energías renovables y energía nuclear. La propuesta no oficial de 10 unidades (~12,000 MWE) para 2030 implican aproximadamente el 10% de la capacidad instalada y el 15% de la generación en ese año. Para el Dr. Mulás, en situaciones de alta incertidumbre, la práctica es la de diversificar el portafolio en base a los posibles escenarios futuros y básicamente señaló que se deben de actualizar los escenarios cada 3-5 años, ya que el entorno cambia y es muy conveniente tener una visión actualizada de largo plazo en base a escenarios.