Más características productivas evaluadas: circunferencia escrotal y talla corporal

predecir la longevidad de las crías, y de hecho, también su productividad, pues si una vaca se queda en el hato, significa que es fértil, produce leche y es funcional.

Por lo general, esta característica está relacionada con la capacidad de adaptación de los animales. Por estas razones los toros que tienen DEP’s positivos para permanencia productiva son muy convenientes para los ganaderos que buscan criar sus propias vacas de reemplazo.

Dada la importancia de las DEP’s para la selección y mejoramiento de los hatos, la Asociación en los últimos años se ha dedicado a ampliar las características evaluadas, para contar cada vez con más información. Por ello, en 2005 nuestro Comité Técnico comenzó a recabar mediciones de circunferencia escrotal (CE) y talla corporal (TC), aunque no fue sino hasta el año 2009 cuando los datos de estas características comenzaron a plasmarse en las evaluaciones genéticas.

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35 AÑOS DE VERDADEROS PROPÓSITOS

La evaluación de estos dos aspectos resulta de gran ventaja para los socios, ya que ambas contribuyen a predecir el comportamiento productivo y reproductivo tanto de las hembras como de los machos.

Para el caso de la CE, se trata de una característica altamente heredable (entre 30 y 50 por ciento), por lo que se trasmite muy rápidamente a la descendencia. La principal razón por la que se busca una CE superior al promedio es su impacto en la fertilidad. Se ha encontrado que a mayor CE, existe mayor cantidad y calidad de semen, es decir, utilizando toros con valores de CE positivos aumenta la probabilidad de que un macho pueda cargar más vacas de manera efectiva. Pero además, la CE también es un indicador de la fertilidad en hembras. Algunos estudios indican que las hijas de animales con mayor CE llegan a la pubertad a menor edad. Por lo tanto, esta característica, resulta una buena herramienta para predecir la fertilidad que tendrá la progenie de un animal.

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El otro indicador que se comenzó a evaluar a partir de 2009 fue la talla corporal, la cual también ayuda a tomar decisiones que repercutirán en los pesos vivos a la edad adulta y el peso de la canal de la progenie. La talla se refiere al tamaño del animal que tiene con respecto a otros de su edad. Para determinarla solo es necesario conocer la edad y la altura a la cadera del animal y ubicarlo en una escala del 1 al 10. Aunque aumente la edad del animal, este valor normalmente no cambia. Desde el nacimiento, se puede determinar la talla y por lo tanto, el tamaño y peso que tendrá el animal en su edad adulta si se cría en condiciones adecuadas.

Para el caso de la raza Simmental la talla promedio es de 5.5, pero la moda estadísticamente hablando es de 6.7. Es decir, que en su edad adulta las vacas pesarán aproximadamente 600 kg. Conocer este valor nos permite inferir el comportamiento que un animal tendrá en el futuro: por ejemplo, como cualquier ganadero sabe, los animales más grandes comen más. Las vacas con tallas muy altas tienen mayores requerimientos nutricionales y por lo tanto necesitan más comida para poderse desempeñar adecuadamente en condiciones de pastoreo. Así es que si tenemos vacas demasiado grandes, vamos a tener que reducir la cantidad de vientres en nuestros ranchos para que puedan mantenerse a sí mismas y a sus becerros.

Para calcular mejor la cantidad de animales de acuerdo a la capacidad de carga de nuestros ranchos, hay que evitar animales demasiado grandes que puedan sobre-pastorear nuestras tierras. Además, en una producción extensiva de sistema vaca-becerro, normalmente se busca que cada vaca produzca un becerro al año y que lo destete a los 7 meses de edad con alrededor del 50 porciento del peso de la vaca. Pero en el caso de las vacas con tallas demasiado altas es poco común ver que realmente lo logren: rara vez vemos, por ejemplo, que una vaca de 800 kg de peso vivo destete un becerro de 400 kg. En el otro extremo, las vacas de talla demasiado pequeña, pueden producir becerros tan livianos que son castigados con precios más bajos por parte de los compradores. Por lo tanto, conocer la talla de los animales, permite a los productores mantener un ganado adecuado para el pastoreo extensivo y las condiciones de cada terreno, así como las exigencias del mercado de la carne.

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