Sin Tapujos #SerMujer

P P U UJ A A J T T

OS SER MUJER

N S SII N

O OS S

SIN

EDICIÓN Nº 22

TA T J J U AP PU

SIN TAPUJOS

Dirección general María José Martínez Díaz mapidiaz42@gmail.com

Editores Fernanda Loutfe Orozco Gaby Ledezma Xyn Diseño de portada natt champ @nattchamp

Columna curiosa Daniela Nur

daninavaarre14@gmail.com

El pabellón #6 Gaby Ledezma D de Días(z) Mapi Díaz

mapidiaz42@gmail.com

Manzana de revólver Félix Delés La pluma de sancho Síguenos en : Luis Alberto Carmona Sánchez Personal-Lab Sin tapujos @sintapujos_revista Alexandra Lucía @soy_alexandralucia Sin tapujos

Sin tapujos Revista

sintapujosr@gmail.com

Desenredada-mente Ana Sofía Luna

lunasanasofia@gmail.com

D.A Ablanedo

dani.ablanedo@gmail.com

this is how i live xyN @xyneht

A través de un vidrio oscuro Jared Bernardo Velázquez Grunstein Netochka Ana.F Mendiburu

ÍNDICE

04 El papel de la mujer Ana.F Mendiburu

09 Cómo ser una buena esposa Ana.F Mendiburu

18 ¿Quién soy?

Margarita Birkide Rolan

22 Cecilia no aprueba Delia Cecilia Martínez Mestre

05 Las consecuencias de la revolución Luis Alberto Carmona Sánchez

13 Se acabo, se comienza Eveline Vieira

19 Espejismo entre pestañas Ivonne Ugartechea

26 Perspectivas Rolando Reyes López

08 Alma mujer Magdalena Páez Amador

15 Ser mujer Gabriela Ledezma

21 Mujer Raquel Pietrobelli

DE LAS QUE SOMOS EL GRITO

YA NO ESTÁN

#NIUNAMENOS

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ANA.F MENDIBURU

EL PAPEL DE LA MUJER Llega a casa después de haber buscado al bebé de la guardería. Le duelen los pies, las piernas, la espalda; fue un turno largo y está deprimida, tres pacientes jóvenes murieron hoy. Era una mujer fuerte e independiente. Pero en casa, una esclava. Las órdenes de su marido hacían que no tuviera que pensar. Mantener al bebé callado y a su marido con la panza llena y las bolas vacías. Limpiar, ordenar, cocinar mientras su marido mira la tele.

Mientras comen, mientras ella alimenta al nene, mientras se escucha el fútbol de fondo, mientras mastican, siempre la misma charla banal. Nunca hablar del hospital, sino de los vecinos. Del tráfico, siempre los mismos comentarios. Nunca de cine, de libros, nunca de amigos o de los viejos tiempos porque ella trabajando turnos de veinte horas no tiene tiempo para cine o libros o amigos. Incluso, esos turnos tan largos y tan depresivos y tan agobiantes la hacen alucinar. Como ahora, por ejemplo, que levanta la mirada de la mesa y encuentra que no hay fútbol, no hay comida, no hay marido y no hay beb. Vive sola.

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Las consecuencias de la revolución Luis Alberto Carmona Sánchez Universidad Nacional de Colombia

La

metamorfosis

de

víbora

o

serpiente

a

mujer

puede

ser

tan

imperceptible

que

pareciera no ser real. Quizás porque no haya transición alguna o porque suele ser a la inversa: de mujer a víbora o serpiente. El caso es que Hugo Hiriart logró demostrar que hay semejante paso. En su breve y delicioso escrito, Venenos, se pregunta el autor mexicano: “

para qué puede querer Helena ponzoña de víbora si el veneno más letal es

ella, ella misma con su perturbadora e irresistible belleza?”

Helena, a mi parecer, solo quería más de lo que ya tenía; quería la seguridad de la consecuencia

letal

de

su

ataque.

Y

es

que

más

ejemplos

podemos

aportar

a

la

metamorfosis de víbora en mujer o mujer en víbora, en letal, y eso es lo que me propongo en este escrito.

Los revolucionarios franceses quizás no fueron tan radicales como se les conoce, y eso a pesar del régimen del terror. El 13 de diciembre de 1793 se decretó la supresión de los monasterios: aires de libertad con la supresión de la autoridad religiosa y superación de

toda

francesa

fuente bajo

de

ignorancia

garantía

del

eran

decreto.

los

nuevos

Una

joven

huéspedes de

22

que

años

esperaba de

edad,

la

nación

quien

por

circunstancias familiares tuvo que ingresar desde los 13 al monasterio de Caen, fue una de las beneficiadas con la medida revolucionaria.

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La joven simpatizaba con el partido de los Girondinos y detestaba al “amigo del pueblo”, un jacobino que, según ella, desvirtuaba la revolución misma con sus medidas extremas. El mundo la recordará como la joven que asesinó a Jean-Paul Marat un 13 de julio de 1793. Así relata el hecho Lamartine en su Historia de los girondinos: “tomó de su seno un cuchillo y lo hundió hasta el mango con fuerza sobrenatural en el corazón de Marat”.

La joven Charlotte Corday fue guillotinada el 17 de julio del mismo año bajo orden de la

Revolución,

la

misma

que

la

había

liberado 3 años atrás, y que privó a los mismos

revolucionarios

de

uno

de

sus

destacados hombres.

Por su parte, a los 19 años de edad, Fanni Kaplán

participaría

en

el

mes

de

diciembre de 1906 en el atentado fallido en

contra

del

entonces

gobernador

de

Kiev. Dos años después y hasta 1912 fue reclusa de la prisión de Máltsev. Debido a problemas visuales y la necesidad de un tratamiento regresaría

dejó

la

gracias

prisión, a

los

a

la

que

resultados

positivos de este.

Fue una activa anarquista que le debió al triunfo de la Revolución de febrero su liberación definitiva de la prisión en 1917. Con seguridad no llegó a saber de las razones que consideró la joven Charlotte Corday para decidirse

asesinar a Marat,

no obstante, le embargaban las mismas. El 30 de agosto de 1918, Fanni Kaplán decide atentar en contra de la vida de Lenin en el momento en que el líder revolucionario pronunciaba un discurso ante trabajadores de una fábrica de armamento en Moscú.

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Segundo atentado fallido que perpetraba, solo que ahora no iría a la cárcel. En su confesión liberada

del por

hecho,

a

los

la

ex

convicta

revolucionarios,

dijo:

“tomé la decisión de matar a Lenin hace ya mucho tiempo. Lo considero un traidor a la Revolución.” La suerte de Lenin fue vivir

algunos

físicas

años

serias,

más

con

dolencias

consecuencia

de

los

impactos de bala en aquel atentado; la de la anarquista fue ser ejecutada el 03 de

septiembre

contra

el

líder

del

año

más

en

que

destacado

atentó de

la

Revolución de Octubre.

“El veneno más letal” de las revoluciones, claro

está,

violencia

no

son

(sustantivo

las

mujeres,

femenino)

ni

con

la

que

combaten el orden existente, sino lo que dejan en pie para ser liberado como acto

¡

de nobleza. Fatal!

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CUBA

ALMA DE MUJER MAGDALENA PÁEZ AMADOR

El guiño de unos ojos que arrebatan.

Tu mirada gracia, dulzura, altivez al caminar cintura acomodada apenas sin respirar caderas al compás de la música a ella le dicen !!vaya mujer !!...cuanto se equivocan.

Quien se levanta en las noches y vela por su familia despeinada por el sol que le quema en sus entrañas.

Tiende tanta ropa lavada por sus manos.

Recorre mañanas enteras buscando que cocinar trapea hasta el cansancio sin fuerzas para exprimir.

Sudor desde la frente hasta los muslos.

No se detiene.

Todos duermen bajo el manto de la noche.

Ella, ella, vuelve a recoger pero esta vez su pelo deseando descansar

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Cómo ser una buena esposa

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Ana.F Mendiburu

Está de moda hoy en día el tema de la reivindicación de las biografías de las mujeres. Desde comics del tipo de Valerosas a compilaciones de distintas biografías del tipo de Frida Kalho. Pero en esta nota, no quiero reivindicar a algunas mujeres sino a todas las mujeres, y cómo, casi sin darnos cuenta, el mundo cambió para nosotras. Sin embargo, este no fue un proceso simple, pensamos

que

apenas

dos

generaciones

atrás,

vivieron

una

realidad

tan

distinta a la nuestra. Una vez, mi abuela me dio un consejo para la vida: “A los maridos hay que tenerlos con la panza llena y las bolas vacías”. Como si las mujeres fuéramos un anexo a ellos, estuviéramos simplemente a su servicio.

Antes de ser mujeres, éramos esposas y madres.

¿Quién

diría en los años 30

que una mujer hoy puede ser madre y trabajadora, sin necesariamente ser revolucionaria?

Para ilustrar mejor mi punto, voy a citar un libro muy interesante, pero, para mí, algo tétrico. Lo encontré en el depósito de una librería para la que trabajaba, olvidado en el último estante, detrás de unas cajas. Publicado por primera vez en 1936, Do’s and Don’ts for Wives (Qué hacer y qué no hacer para las esposas),

de

Publications,

Editorial

ahora

Universal

reeditado

por

editorial Alianza.

El libro habla, desde los años 30, del papel

de

la

mujer

en

la

casa.

Es

opresivo, anticuado y horrible, pero en ese

momento

funcionaba consejos

era

de para

real,

esa

la

sociedad

manera.

mujeres,

o

Son más

específicamente,para esposas.

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ST |MAYO 2022 Pensé, para hacer esta nota, hacer un análisis de este. Pero después de pensarlo decidí dejar al libro hablar por sí mismo. Y simplemente voy a copiar algunas citas que me parecen las mejores (o las peores) y que, usted, lector, saque sus propias conclusiones.

“De una esposa a otra. No cabe la menor duda: las mujeres pueden contribuir

al

éxito

o

al

fracaso

de

una

asociación

matrimonial

en

mayor medida que los hombres. Por consiguiente, si usted tiene la impresión de que su matrimonio va a la deriva y directo al precipicio, no le eche toda la culpa a su marido: pregúntese imparcialmente y sin rodeos si usted ha hecho las cosas lo mejor posible. Recuerde que la felicidad en el hogar depende en gran medida de sus esfuerzos. Si su hogar no es un sitio alegre, no espere que su esposo pase más tiempo en

él

de

lo

estrictamente

necesario.

No

tendrá

más

remedio

que

quedarse en la oficina hasta muy tarde y tendrá visitas urgentes de amigos misteriosos”.

“No sea usted una de esas esposas que exigen que sus maridos le hagan esto o aquello. Ningún esposo digno de ese nombre tolera que le mangoneen. Por otro lado, no sea usted una dócil gatita, ni un felpudo, ya que los maridos menosprecian a las mujeres sin carácter.

Tome por el camino de en medio y su esposo apreciará su sabiduría”.

“No espere que su esposo le atienda en todos sus caprichos cuando está en casa. Si le gusta hacerlo, que lo haga. Pero usted no tiene derecho a aspirar a este tipo de atenciones. Recuerde que su parte del trato es traer dinero a casa y la suya llevar los asuntos del hogar”.

“Las esposas son unas criaturas verdaderamente afortunadas, aunque muchas de ellas no lo saben. Tienen un reino para ellas solas, pueden ser sus propias jefas, y ni tienen que trabajar siguiendo un horario, como hace mucha gente. Por consiguiente, no refunfuñe usted por los inconvenientes cuando goza de tantas ventajas”.

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“A

fin

de

cuentas,

los

maridos

no

resultan

demasiado

difíciles

de

manejar. Desde luego, no son ni mucho menos tan difíciles de manejar como se creen en su fuero interno. Si su marido es del tipo más difícil, lo más probable es que usted haya elegido un mal esposo, o bien que usted

desconozca

las

normas

básicas

del

manejo

de

maridos.

En

cualquiera de los dos casos, una parte de la culpa debe echacársela a usted misma”.

“Un dicho nos aconseja abrir bien los ojos antes del matrimonio, pero mantenerlos entrecerrados después”

“La mujer que baja a desayunar con una bata y unas chinelas viejas y deslucidas

no

admite

comparación

posible

con

la

mecanógrafa

inteligente, joven y bien vestida de la oficina de su marido. No olvide que el deber de toda mujer casada es bajar cada mañana con una sonrisa”

“No se vista en función de los demás, ya sean hombres o mujeres, ni siquiera para lucir mejor que otras mujeres, vístase para su marido”

“No olvide que la mejor forma de masaje facial es estar sonriendo constantemente. Las arrugas no pueden existir en un rostro sonriente y además es bien sabido que la felicidad es la fuente de la juventud”

“No olvide que entre las cosas más perjudiciales para el amor están un cabello desalineado, una bata descolorida, los rulos y las pantuflas a la hora del desayuno”.

“No deje de reírse de los chistes de su marido. Aunque sean malos, sonría cuando se los cuente, de lo contrario, si usted le decepciona, se sentirá frustrado, y con razón”

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“La mujer es un enigma mayor que el hombre. Por consiguiente, si su esposo

no

ha

comprendido

inmediatamente

como

una

sus

necesidades,

persona

insensible

no o

le

califique

cruel.

Es

muy

probable que no pueda desentrañar sus misterios; y de eso tiene usted más culpa que él”

“El deber de una esposa es tener el mejor aspecto posible. Si usted no se arregla después de terminar el conjunto de tareas domésticas, no se

sorprenda

de

que

su

esposo

empiece

a

compararla

desfavorablemente con la mecanógrafa de su oficina”

“Intente, en la medida de lo posible, que los intereses de su marido sean también los suyos. Si, por ejemplo, a él le interesa la política, intente participar de ella de forma inteligente, de modo que usted pueda hablar más o menos con él más o menos en pie de igualdad. La mujer que se niega a hacer esto no puede quejarse de que su marido la considere más una muñeca que una compañera”

Sin duda, el texto refleja cómo la mujer era considerarda la reina del hogar, sí.

Pero era un hogar pagado por el marido. El trato era: el trae plata y nosotras vivíamos para él. Siempre sonriente y limpia, nunca imperfecta: una Barbie de vestidos

ajustados

a

la

cintura,

dispuesta

a

trabajar

para

él.

Todos

sus

defectos eran culpa nuestra. Es más, el texto no lo dice, pero queda muy claro: si él hombre era infiel, era nuestra culpa. Sí, todavía hay muchísimas injusticias, pero mirando para atrás, podemos ver cuánto hemos avanzado.

La mujer, hoy en día, es infinita. Antes era esposa y madre, pero hoy es guerrera,

libre.

Hoy

es

símbolo

de

una

revolución.

Y

eso

lo

vemos,

más

claramente, en la ropa que usamos. En los 30 las mujeres se vestían para los hombres. En los 60 aparecieron las minifaldas. Hoy no nos dejamos encerrar en categorías, hay ropa que es válida tanto para hombres como para mujeres.

Somos indefinibles e infinitas. Hemos ganado, con los años, en materia de política. Pero aún queda un gran recorrido hacia adelante. No en todos los países somos libres. Hoy en día se siguen casando niñas, y las mujeres siguen tapando todo su cuerpo con un velo. Hay lugares donde las mujeres no pueden estudiar, es nuestro deber seguir buscando la libertad, para las niñas, para las futuras generaciones.

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Se Acaba, se comienza.

Eveline Vieira

Nuestra vida, Perece y renace, Se crea día a día.

En grandes o pequeñas, Actitudes, Momentos, jornadas.

Cada día se duerme, Cada día se oculta, Cada día se amanece.

Somos cada día, Fuimos cada día, Seremos cada día.

Cada día fui, Cada día soy, Cada día seré.

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EVELINE

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VIEIRA

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AMZEDEL ALEIRBAG

Ser mujer hoy

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Tomando las palabras de Simone de Beauvoir de su libro El segundo sexo (1949); ser mujer hoy: “Es ser el otro”, objeto que no forma parte del género humano para algunas mentes.

El otro ser, el que se hace cargo de las labores domésticas y los cuidados para que el hombre pueda concentrarse completamente en su trayectoria profesional y en sí mismo. La que prepara la comida para todos y come al último en soledad.

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Es

ser

el

objeto

que

complace

sus

necesidades sexuales y al que pueden clasificar como si fuera una cabeza de ganado:

“Esta

para

una

noche,

ésta

para divertirme unos meses y ésta sí se la puedo presentar a mi familia”. Cuyo deseo

no

placer

cuenta

con

y

el

hasta

niegan

argumento

su

de

la

entre

las

inexistencia del clítoris.

Es

ser

la

que

tiene

vulva

piernas en lugar de un cuerpo colgante al cual la sociedad le rinde culto como si

fuera

una

fuente

que

les

otorga

poder o supremacía.

Es ser la que temen que muestre su talento

y

pueda

ustedes.Por siglos

nos

destacar

tanto han

a

lo

más

largo

señalado

que

de

que los

nuestro

lugar es la crianza y el hogar.

Ser parte del género femenino hoy es tener

un

legado

de

lucha

por

los

derechos básicos como la educación, la propiedad, el voto. Por cosas que tal vez

podrían

ser

vistas

como

insignificantes, como conducir un auto o usar pantalones, pero que mientras unas

mujeres

mundo

en

pueden

varias hacerlo

partes

del

libremente,

otras pierden la vida por ello.

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Ser

mujer

hoy

es

vivir

con

miedo,

perder la libertad de no poder salir a correr dejar

sola, de

cambiar

usar

esa

de

banqueta

blusa

de

y

tirantes

gracias a que somos señaladas como provocadoras cuando a los hombres no se les enseñó a respetar.

Es

cargar

un

enojo

a

causa

de

la

ceguera de ustedes, los hombres, que se niegan a aprender nuevas formas de ser, a entender que un ser humano no es

más

ni

menos

por

pertenecer

al

género femenino, ser parte de la niñez o ser de otra especie.

Es aguantar que te llamen loca y se ofendan cuando los llamas “machistas” al señalar sus violencias.

Ser femina, otra forma de nombrarnos, es esperar a que comprendan nuestro dolor

y

entiendan

que

hoy

nuestro

verdugo está en la cultura, la misma por la cual pueden perder a una mujer que quieren.

Hoy ser mujer es dolor y sufrir nuestra feminidad en una sociedad en la que no

quieren

cuestionar

su

trato

hacia

nosotras.

Hoy es pensar que la próxima puedo ser

yo,

mi

amiga,

mi

madre

o

mi

hermana

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¿QUIÉN SOY?

MARGARITA BIRKIDE ROLAN Colombia-España

Soy una mujer eternamente resiliente.

Aprendí a ser intrépida y diferente; aunque navegué mil veces contra la corriente, pese a todo, he conseguido estar constante, empoderada, siendo más inteligente.

Aunque con alguno que otro incidente, la melancolía se acercaba paulatinamente.

Desde ese entonces, decidí ser sabia y coherente.

Manteniéndome siempre independiente, evitando al máximo, absurdos inconvenientes”.

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ESPEJISMO ENTRE PESTAÑAS IVONNE UGARTECHEA MONTERREY, N.L

¡Era

fácil, tan fácil! Me miraba al espejo tan

bonita

y

tan

molestaba, hermosa,

brillante

me

no

pero

reflejaba

entendía

algo

cada

como

me

vez

más

pasaba,

me

sentía tan orgullosa de mí misma y satisfacía mi ego. Jamás pensé que sucediera.

Mis compañeros de trabajo murmuraban al verme

llegar

a

la

oficina,

no

sabía

con

certeza si era porque me estimaban o por envidia, no me importaba, en el fondo sabía que era completamente hermosa; mi novio, siempre amable, gentil y lleno de bondad, me

¡de

admiraba,

madre,

orgullosa

verdad de

su

me

hija,

amaba!; siempre

mi me

¡

aconsejaba: “ tú puedes, hacia arriba, que nadie

te

venza,

lucha

con

fuerza,

sueña,

nunca te rindas!”

Un mañana despierto y me miro al espejo

¡que

hermosa

abrirlos

me

soy!,

cierro

observo

los

ojos

y

detalladamente:

al mi

cara, mis labios, mis manos, mi cabello, mi cuerpo, todo

todo

a

empieza

momento

abrí

mi

alrededor;

a

girar,

mis

ojos

no y

de sé

mis

repente en

sueños

qué se

convirtieron en pesadillas.

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Mi interior desvaneció y no entendí si era real, los muros se desplomaron segundo a segundo,

la

pesadez

en

mis

hombros

aumento, las miradas de mis compañeros de trabajo se transformaron en llagas en mis pies,

la

obsesión

proteger

y

la

de

mi

novio

exigencia

de

mi

al

querer

madre

lo

hicieron cada vez más difícil.

Ahora

odio

mi

reflejo,

como

quisiera

hacerme invisible, claro que puedo hacerme invisible, claro que puedo desaparecer, que ya no me vean, que ya no me hablen, tapar los espejos y ser libre, podre disfrutar de mi belleza;

mi

incómodo

novio

al

no

tendrá

tomarme

de

la

que

sentirse

mano

para

protegerme y mi madre no tendrá que llamar y

exigirme.

espejos

y

tranquila.

Sí,

lo

por

haré,

fin

Hoy,

cubriré

podré al

abrir

todos mis

despertar,

los ojos

estoy

respirando, miro hacia mi ventana y observo a

mi

alrededor

creyendo

entender

un

entorno

quién

quiero

diferente ser:

libre,

exitosa, amorosa y capaz de tapar cualquier obstáculo, aun así, sea mi propio reflejo.

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ST |MAYO 2022 De un huracán es la fuerza para iniciar tanta vida, del precioso jade la dureza para defender un hijo, del jilguero la dulzura para restañar las heridas, y de las brujas el hechizo, para acallar dolores con una simple canción de cuna.

Voluntad templada de acero no conoce de domingos,

Mujer

RAQUEL PIETROBELLI

ni de pausas, ni de esperas porque su reinado es: siempre, por la paz, los alimentos, por la injusticia, la morada…

Es la cara de mil aristas, es la madre, es la esposa, la compañera, la amiga, la jefa… va por la vida mudando etiquetas más su esencia de velos descree, arrasa las cáscaras, infunde respetos detrás de esos muros, descorre polleras que dictan las modas, llega a tierras sacras, que son sus honduras, su música más íntima, su alma desnuda, la parte más bella.

Y nace la amazonas, tal vez la doncella, o quizás princesa, o una walkiria…

Por qué no guerrera, vencida, agobiada, sombra desteñida de tantos pesares.

Lacerantes callos vistan sus manos, sofocando sedas y fulgores vanos.

Todas son el nido, de extrañas sapiencias que arcanos magos, legendarios sabios depositaron en un alma noble, de algodón y estrellas.

Es un mar de azúcar, es caricia en brotes, es pecho ardiente y regazo que acuna.

Es un premio enorme para nivelar el Universo todo, el mejor regalo a todos tus sueños, es la mujer que Dios te ha obsequiado para sentir el milagro de una vida plena.

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C E C I L I A N O A P R U E B A DELIA CECILIA MARTÍNEZ MESTRE

Aquella mañana Cecilia estaba pensativa; se

preguntaba

sobre

el

sueño

que

había

tenido. Después lanzó una mirada de odio contra su esposo, quien bajaba la escalera, e inmediatamente se retiró de la sala sin hablarle.

Cecilia a menudo era una mujer empática y sonriente,

pero

destrozada,

tanto

esa así

semana que

no

estaba hacía

ni

siquiera el intento fingido de sonreír. Hace tres días, Antonio, su esposo, había llegado de viaje después de tres meses de ausencia.

Cecilia

y

los

ansiosamente,

niños

lo

habían

anhelaban

esperado

compartir

esos

días con él.

Las pocas oportunidades de empleo en la ciudad donde vivían hicieron que Antonio se mudara a trabajar a otra ciudad. Durante tres años sólo compartía con su familia un fin de semana cada mes, en esa ocasión tenían más de tres meses sin verse. Sin embargo, la alegría por su llegada no duró mucho, el estar lejos debilitó la relación, ya cada uno se

habían

acostumbrado

a

estar

solos,

tal

vez

ya

no

se

necesitaban.

Esa

vez

la

convivencia familiar fue terrible. Cecilia comprendió que la relación funcionaba solo por videollamadas, presencialmente era un caos. Sentía que su rol se había relegado a realizar las actividades domésticas y criar a los niños, no era vista como una esposa, como una consejera, su opinión no era tenida en cuenta ni para comprar un televisor.

Antonio le decía “estás loca” cada vez que ella hacía algo que a él no le parecía. Esto le dolía pero a él parecía no importarle, ni siquiera notaba como ella cambiaba su semblante.

P Á G

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T A P U J O S

ST |MAYO 2022 Durante ese tiempo, Cecilia buscó empleo, se postuló a ofertas laborales en su ciudad pero nunca le llamaron. Antonio solo le decía “No quieres trabajar, ni siquiera buscas empleo”, ella no le respondía. Se dedicó a sus hijos, al perro, al jardín, se decía así misma “es la voluntad de Dios, el mejor empleo que tengo es este, estar con mis hijos, preparar su comida, acompañarlos en su proceso de aprendizaje, disfrutar de sus abrazos, verlos dormir tranquilos”. Recordaba cuando sus hijos, Daniel y Juana, eran pequeños; ella tenía que dejarlos para ir a trabajar, partía angustiada, su calma no regresaba hasta que los volvía a ver. Cecilia era ingeniera ambiental de profesión, trabajaba en proyectos de conservación donde permanecía varios días en campo, dejaba a los niños bajo el cuidado de Antonio, que en ese entonces no trabajaba.

Estando

afuera

siempre

pensaba

en

sus

pequeños.

-

¿Alejandro

tomaría su tetero?

sido paciente con ellos?

¿Antonio

¿Mariana

habrá

pasaría frío

durante la noche?

La bebé siempre se desarropaba mientras dormía.

Estando

en

campo,

muchas

veces

quedaba en zonas donde no había cobertura telefónica,

entonces

se

imaginaba,

a

los

pequeños con fiebre, hospitalizados... En fin, cuando los volvía a ver regresaba su calma. Por eso, cuando quedó sin empleo, Cecilia le dio gracias a Dios, porque tenía un día para ellos, para enseñarles, para prepararles el almuerzo, para acompañarlos en su presentación escolar, para arroparlos durante la noche.

Tiempo después, esas ideas y recuerdos no eran suficientes para llenar el dolor que le causaba el trato de Antonio. Esa semana en especial, se sentía derrotada, lo único que quería era iniciar el divorcio, saber que no había ningún vínculo legal entre ellos, así no le volvería a lastimar. Se llenó de razones para odiarlo, recordaba todas las veces que la había hecho sentir mal, durmió todas esas noches en la habitación de huéspedes, esperaba que sus días de estancia en la casa se acabaran.

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T A P U J O S

ST |MAYO 2022 En esa semana también hubo algo particular, tuvo un sueño recurrente por cinco días donde

ella

regresaba

a

la

universidad,

tenía

que

aprobar

una

asignatura

para

graduarse. Ella llegaba desorientada, no sabía cuál era, no tenía horario de clases, ni número

de

salón,

ni

nombre

del

profesor.

No

sabía

a

dónde

dirigirse,

caminaba

abrumada y confundida por los pasillos entre la turba de estudiantes. Al final del sueño Cecilia no aprobaba.

Por

fin

ese

día,

regresaba

Antonio

a

su

trabajo y no regresaría en unos tres meses.

Cecilia

aún

meditaba

sobre

ese

sueño

y

sobre el divorcio. Fue a su habitación, buscó fortaleza

en

la

Biblia,

pero

su

corazón

afligido estaba cerrado al perdón. Cerró sus ojos, de repente recordó las veces que ella había

lastimado

a

Antonio,

se

dio

cuenta

que lo había hecho a un lado en la crianza de los niños, principalmente de Alejandro, recordó que ella fue quien tuvo la idea de no mudarse de ciudad para no someter a Alejandro a la presión del cambio, el niño había

sido

diagnosticado

con

autismo,

padeció equis número de crisis al adaptarse a la escuela, los docentes, el uniforme, el ruido

del

timbre

etc.

Cambiarlo

a

una

ciudad principal, con decenas de vehículos pitando,

andenes

personas,

una

congestionados

escuela

con

dos

de mil

estudiantes, era someterlo a una carga de estrés muy grande, para ella mudarse no fue una opción.

Decidió hablar con Antonio viendo las cosas desde una perspectiva amplia y no la de víctima, le pidió perdón, sabía que ella también lo había relegado en su rol de padre - perdóname a mi primero, soy un estúpido- dijo Antonio. Estar lejos de su familia, lo había hecho pensar que él era el único que se sacrificaba y que Cecilia no hacía nada para ayudarlo. Todos los planes de divorcio, se desvanecieron en un abrazo de perdón mutuo.

P Á G

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S I N

T A P U J O S

ST |MAYO 2022 Pero el perdón más importante se lo dio a ella misma por exigirse de más, por no cumplir con las expectativas que la sociedad les impone a las mujeres, que se imponen ellas mismas, porque deben poder con todo, ser amas de casa, madres, esposas, tener una carrera exitosa y si no lo logran, son incompetentes. Por sentirse menos por no poder contribuir con los gastos del hogar, por no tener un empleo, por no tener un hogar perfecto, por quedarse callada y no expresar sus sentimientos.

Antonio

se

marchó,

tenía

que

buscar

una

casa grande, pues toda la familia se iba a mudar.

Entre

todos

ayudarían

a

Daniel

a

adaptarse a la nueva ciudad, en ese tiempo Cecilia

había

aprendido

pequeño

manejara

procesos

de

la

cambio

a

lograr

que

frustración los

superaba

y

el los

más

fácilmente.

Esa noche Cecilia volvió a tener el mismo sueño donde ella regresaba a la universidad, pero esta vez caminaba segura y sabía para donde iba, al último piso. Abrió la puerta de la oficina de rectoría, donde la esperaban Daniel

y

Juana,

se

sentó

en

el

escritorio

porque ella era la rectora, abrió la gaveta del escritorio donde reposaba su certificado de aprobación firmado por ella misma.

P Á G

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S I N

T A P U J O S

ST |MAYO 2022

MATANZAS, CUBA

PERS

Mujer es comunión, pacto, beatitud, promesa cumplida, jardín rebelde, los mejores momentos,

PECT IVAS

pasión

que

alivia,

predicadora

del

bien

y

palabras bondadosas, paisaje sonriente, el gran amor de la naturaleza, selva

protectora,

nido

de

ternuras

e

ilusiones, arpegio dulce, hechizo de verano,

ROLANDO REYES LÓPEZ

esperanza, niña por siempre, agua fresca y penetrante, el círculo completo, todo lo posible, luz encendida en lo más alto, estrella,

… destino.

mano firme y luminosa, flor, beso

Yo regalo una flor a una diferente todos los días con la inocencia del que porta una lumbre para el ángel; también llevo una caricia sin llagas.

Todas

se

descubren

ante

mi

gesto

irrebatible; por eso la flor, la caricia; por eso, cuando retomo el camino a casa llevo la mirada puesta sobre la luna, hasta que me hundo, vencido y complaciente, en el interminable universo de sus nombres.

P Á G

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S I N

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Directorio de especialistas: María del Pilar Fernandez Baro psicoterapeuta. cel: 222464723 Gerardo Peláez Psicoterapeuta.

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