Revista Somos Altos No. #6 by somosaltos04

ALTOS S O M O S

Proyectando los Altos de Jalisco

CARLOS TERRÉS ARTISTA 10

ENTREVISTAS ESTEFANÍA MUÑOZ 6 SERGIO MACÍAS 22

HERIBERTO ROMO “El valor de la honestidad como el gran patrimonio de la persona.”

Marzo 2020 NUM.6

www.somosaltos.mx

ÍN D IC E CARTA EDITORIAL

MUJERES EMPRESARIAS

CARLOS TERRÉS

JÓVENES EMPRESARIOS

SOMOS ALTOS TRAVEL

ALTEÑOS FUERA DE LOS ALTOS

EMPRESARIO DEL MES

DIRECTORIO EMPRESARIAL

Dirección General Ricardo de la Torre

Dirección de Contenidos Alfredo de la Torre

Dirección Comercial Brenda Ramírez Glez

Colaboradores Esmeralda Padilla Oscar Laris

Diseño y Edición Sofia Casillas

Distribución Altos Pack

Fotografía Brenda Ramírez Glez

Atención a cliente & Membresías Liliana Gómez Esthefani de la Torre

Relaciones Publicas José de Jesús Tostado

Foto Portada Brenda Ramírez Glez

PROMOTORA EMPRESARIAL SOMOS ALTOS S.A. DE C.V. Juárez No. 526 Capilla de Guadalupe, Altos de Jalisco C.P. 47700 contacto@somosaltos.com www.somosaltos.com

@somosaltos Somos Altos Impreso en México 2020 8,000 ejemplares

Todos los artículos aquí impresos son responsabilidad de quien los firma.

CA RTA ED ITO R I AL E MP R ESA FAM IL IAR O FAM IL IA EM P RESA RI A L

Ricardo de la Torre Gutiérrez Director General SOMOS ALTOS

En los Al tos n os s u cede con frecue nc ia q ue la ge nte mayor n os pregu n ta d e d ó nd e s o m o s o qu é apelli do llevamo s. L ue go ento nces va n en u n c i an do n ombre s d e p e r s o nas conoc i das para ver s i por a hí ha y un p unto de e n c u en t ro o con oc i mi en to . Y si lo h ay, hasta ci erta gen ealogí a s ale a re l uc ir. Y c l aro, en es e momen to de recon o c im ie nto n o s se ntim os más alteñ os . Este re co n oc i mi en to gen ealógi co e s un fe nóm e no mu y comú n en los pue b lo s y e n los Al tos de Jali s co n o es la exce p c ió n. L a fam il ia e s u n o de los gran des va lo re s q ue conse rva e l alteñ o como u n di st int ivo y un org ul lo m uy pers on al. Con tar con d e te rm in ado apel l id o es la mej or mu est ra d e q ue se es al te ño, de qu e la fami li a h a v iv id o e n estas tie rra s por s i glos . Es parte d e nue st ra i de ntidad y el ori gen de n u est ra s co st um b res y je rarqu í a de valores . Gracias a e s e apego a la fami li a s e p re se nta otro fenóm en o mu y exten di do… t ra b a ja r y h e re dar a l a fami li a. No s on pocos lo s ca so s d e los al teñ os qu e t rabaj an du ro sa c r ificá nd ose a sí mi s mos en s alu d y en p l a ce re s leg ítim os p ara qu e los h i j os ten ga n, p a ra q ue a l a fami li a n o le falte n ada en e l fut uro . Esa idea pen et ra h asta en los n e go c io s. Se fundan pensan do en dej árs elos a lo s hijo s y p onerlos a ellos al fren te. S i n e m b a rgo , a ho ra ya hay qu i en c u est i on a s o b re to d o esto úl tim o y parecen ten er razón. Es bue no preoc u pars e por el fut uro d e n uestros hi j os , pero n o tan bu en o p e nsa r e n q ue e l lo s, por el h ec h o de s er n u est ro s hijo s d ebe rán e star al fren te de los n ego c io s. Es u n tem a que n o t rastoca los valore s fa m il ia -

re s, sino lo s a p unta l a . U n h i j o p u ed e esta r a l fre nte sie m p re y c ua nd o sea ca p a z d e h a cer lo . A l a l te ño le c ue sta m uc h o tra b a j o p en s a r e n q ue un ex te rno a l a fa m i li a p u ed a oc u p a r p ue sto s d e co nfia nz a o ge ren c i a les . El L ice nc ia d o M a rio Riz o , d esta ca d o a lteñ o e n te m a s d e p ro to co lo fa mi li a r, i m p a r te u n a co nfe re nc ia c uyo t ít ulo e n s í m i s m o es m u y suge re nte : “ Em p re sa fa m il i a r o fa m i li a em p re sa r ia l” . De sa fo rt una d a m e nte fa m il i a s en tera s p er v ie r te n su re l a c ió n y sus valores p or u n li ti g i o fa m il ia r l ue go d e l a suce s i ón d el p a d re o el fund a d o r d e una e m p re s a . L os exp er tos sugie re n e l a b o ra r un p ro tocolo, u n a r u ta d e v ia je , un m a nua l d e p ro ce d i m i en to en ca s o d e q ue l a ca b e z a d e sa p a re z ca . D e i g u a l m od o, una d e finic ió n c l a ra d e lo s p u estos en la em p re sa , una p ro fe sio na l iz a c i ón d e q u i en es los o c up a n y a c t ua r e n m o d o con s ec u en te, com o e m p re sa . U n ne go c io fa m il ia r y “ d e tod os ” , n o s ólo a m e na z a a l a e m p re sa , ta m b i én a la fa m i li a .

Miguel Angel Gonzalez Ramirez Felicidades por difundir el Arte de nuestra gente..de los Altos. Jose Antonio Santoyo Garcia Felicidades orgullo Jaliciense. Nancy Franco Me encanta todo lo cultural felicidades por hacer lo que les gusta

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MUEJRES EMPRESARIAS

MARA ESTEFANÍA MUÑOZ MELANO Por: Brenda Ramírez Fotografías: Somos Altos

Para quien nada quiere aprender, ni la vida más larga le enseña nada. Para quien quiera aprender, por muy grande que sea, la corta vida de Mara le enseña algo. Mara es una chica con ideas y conceptos nuevos en el mundo del restaurante que hará de ella sin duda una gran empresaria. Apenas tiene 26 años pero el optimismo y la alegría que transmite son impresionantes. Quienes la conocen saben que ella es una mujer fuera de serie. Actualmente lidera un servicio de repostería para banquetes, talleres de introducción y educación de enología así como un restaurante muy exitoso llamado Estefana, a un costado del Hospital de Los Altos en Tepatitlán. Háblanos de ti, Mara.

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Nací un tres de diciembre de mil novecientos noventa y tres. Tengo actualmente veintiséis años. Mi padre es doctor originario de Colotlán, Jalisco. Mi madre es de aquí, de Tepatitlán, es ama de casa. Ambos son mis mejores aliados en mi vida. Mi padre ha sido quien me ha apoyado con el local para abrir el restaurante. Ella ha sido quien me ha ayudado desde el inicio prestándome su cocina y asistiéndome en la elaboración de los postres que realizo. ¿Entonces empezaste con los postres en tu casa? Así es. Empecé en el servicio a los banquetes desde mi casa. Tuve que demostrar que se podía hacer carrera de chef y lo hice ahí, con el refrigerador, horno y todos, una pastelería principalmente. Hice el proyecto de la pastelería, pero al comenzar a trabajar, visualicé mucho más potencial. No solo quedarse en el ámbito de la cocina, también explorar la cultura del vino. ¿De dónde sale la idea del restaurante? Por mi propia experiencia en otros restaurantes es la de encontrar mesas muy juntas o amontonadas, los meseros te carrerean porque necesitan darle servicio a más gente. No te dan ni tu tiempo ni tu espacio. Yo quería algo donde la gente venga, llegue, se relaje, socialice, se siente, eche platiquita y donde la comida sea sólo un pretexto. Mi equipo de trabajo captó mi idea y comenzamos a trabajar. Elaboramos un menú de postres y bebidas, de entradas. Y por si alguien quiere venir a comer, entonces preparamos platillos, que no era nuestra principal oferta. Sin embargo la gente lo captó al revés… vengo, como y luego pido una bebida o un postre y me relajo.

¿Has estudiado algo sobre cocina? Sí, claro. Estudié gastronomía en la Escuela Culinaria Internacional (ECI) en Guadalajara con una especialidad en repostería. Originalmente mi proyecto era hacer repostería para eventos y catering… tapas, brochetas para eventos sociales o empresariales. Además de comida, eres una buena conocedora del vino. ¿Qué nos puedes contar de ello? Me encanta el vino y por experiencia personal me doy cuenta de que en muchos restaurantes no saben servir el vino ni saben de él. O viene muy frío, o viene muy caliente. Si yo quería degustar un buen vino tenía que hacerlo en casa con una buena tabla de carnes frías. Al regresar Tepa quería traer

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un concepto de restaurante de vinos y quesos, un concepto de más relax, de socializar que de restauración como tal. Pero me di cuenta de que aquí casi la totalidad de las personas ignoran la cultura del vino. Ese fue mi reto, la iniciación a la cultura del vino. Me interesa que la gente se introduzca en el vino, se instruya comenzando por la boca, evolucione con el paladar. Para ello realizamos catas una vez cada dos meses en domingo. Traigo un sommelier. Nos ha ido muy bien. Cada sesión está limitada a 25 personas y bajo reservación. Quiero que la atención sea personalizada por parte del sommelier y el asistente esté enfocado. La experiencia ha sido increíble. Tenemos que dejar fuera a personas porque la demanda supera el cupo. ¿Cómo te visualizas dentro de un mediano a plazo? Primero, ampliar el restaurante. La gente lo pide a gritos. Segundo, replicar el concepto en más restaurantes pero debo pensarlo bien pues implica muchas cosas. No es fácil. Es complejo pero igualmente satisfactorio. Mucha gente disfruta mi restaurante. Cuando entra me dice que ni se siente en Tepa. Tenemos calidad, el lugar está bien empezando.

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miedo también viene porque me rozo con grandes tiburones. De todos modos aprendo mucho de ellos. Con ellos he tenido la oportunidad de convivir en el Gremio Restaurantero de Tepatitlán. Me veo con también con un servicio integral de banquetes, completar lo que ya hago. En algún evento siendo tú conferencista hablaste ante el público de un capítulo muy personal de tu vida. ¿Nos podrías hablar del tema nuevamente? Es un tema muy interesante. Pues es un tema que me ha ayudado a madurar y a crecer como mujer. Yo me embaracé a los veintiún años. Ya estaba en los banquetes. Yo enfrenté la situación prácticamente sola con el único apoyo de mi familia. Al inicio duré meses con el shock. Te soy franco, el aborto pasó por mi cabeza como una tentación, pero jamás lo consentiría. La tentación no duró nada. Sería tan fácil… nada más que me sacaran lo que me “estorba” y seguir la vida. Nadie se daría cuenta y seguiría siendo la hija perfecta. Pero decidí continuar con mi embarazo. Tenía muchos planes, ir a Toronto, ir a las Vegas a trabajar y de repente todo se cae. Pero al poco tiempo reacciono y me dije a mí misma: ¡basta! Comencé a vivir mi vida, a amar mi embarazo, a mi hijo y a mí misma.

¿Cómo te sientes como empresaria?

¿Pensaste en casarte con el padre de tu hijo por la situación en la que vivías?

Contenta porque hago lo que me gusta, disfruto lo que hago. El

Por supuesto que no. Sí se me propuso y también me vino por la

cabeza. Pero no iba a cometer un error nada más para darle una salida a la situación, para darle gusto a la sociedad. ¿Y qué hiciste luego de tu embarazo? Pues me tomé un receso para dedicarle el tiempo a él pero igualmente no tardé mucho en activarme, retomé mis proyectos y me ha ido muy bien, afortunadamente. Los proyectos de Toronto y de Estados Unidos se quedaron atrás. Mi realidad ha superado esos proyectos.

con las bases. Me llegaron mal hechas esas bases e iba contra reloj. La situación me hizo desvanecerme. A pesar del evento pude salvar la situación. De igual manera, el mismo día de la apertura de mi restaurante tuve otro evento. Era la mañana y caí nuevamente. Debo trabajar conmigo misma. Laboralmente no he tenido ningún evento particular a excepción de la responsabilidad y compromiso de la gente que contratas.

¿Qué lección te deja este embarazo no planeado?

¿Cómo eres con tu equipo de trabajo?

A veces tú te crees chiquita. Pero nunca eres demasiado chiquita para los retos que se te enfrentan. Pero ante el reto nada más tienes dos opciones: o ponerte a llorar o enfrentar el momento, asumir los actos y no mirar hacia atrás. Por otro lado, me dio mucha seguridad para valerme a mí misma. No dependo de la sociedad y no me da de comer. Los miedos igualmente se presentan y son grandes, pero una vez que los vences, estás preparada para vencer otros aún más grandes. No es fácil. Muchos suben de escalón en escalón, pero la vida a mí me exigió subir ocho escalones de golpe.

Trato de ser humana. Si te pedí una hora extra, te la voy a pagar porque al fin de cuentas es tu tiempo que pones a mi disposición. O quizá cuando mi personal necesita un tiempo o un permiso, por supuesto que los apoyo y vemos la manera de acomodarnos. Si los pongo a trabajar en una situación de mucho trabajo, les comparto de mis ingresos pues al fin y al cabo gracias a ellos se logran los eventos. La relación laboral trata de motivación, no de explotación.

¿Cuál ha sido tu mayor reto empresarial? Quizá haya sido mi capacidad de producción. En un inicio elaboraba todo en mi casa y de repente me llegaban solicitudes para cubrir un evento que me rebasaban como cuando me pidieron postres para un evento de 900 personas. Estaba apenas aliviada de mi hijo. Cuando me dijeron, acepté y el reto salió perfecto. Otro reto fue la credibilidad. Inicié mi actividad empresarial a los veintiún años y mi juventud y falta de currículum no estaban a mi favor. En una ocasión llegué a hacer una degustación de postres y la persona comentó: “¿Esta niña va a hacer los postres de mi boda? De ninguna manera”. A pesar de la resistencia inicial, al término de la degustación la convencí. Y no sólo eso, en alguna ocasión ha venido a mi restaurante y me ha presumido ante sus amigas como la chef que le elaboró sus postres de su boda. ¿Algún fracaso en tu vida? Pues fracaso no, pero dificultad sí, mi epilepsia. Bajo situaciones de estrés caigo bajo un episodio de estrés. En una ocasión tenía que entregar unos postres y le pedí a un externo que me ayudara

¿A quién agradeces el éxito de tu corta vida? A mis papás y en particular a mi papá. Él es quien me ha ayudado económicamente. Ambos han confiado en mí y ella como que siempre ha empujado, vamos, no te rindes, vamos para adelante. Ella se ha puesto a hacer cosas de cocina que nunca ha hecho, ha tenido la paciencia también de cuidar a mi hijo. Agradezco sin duda a la gente que aquí trabaja todos los días conmigo. Yo sola no puedo con el trabajo. Esa gente hace que esto funcione.

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C U LT U R A

CARLOS TERRÉS Por: Ricardo de la Torre Fotos: Página web Carlos Terrés

Si de algo se precia Lagos de Moreno a lo largo de su historia es de su intensa vida cultural, no en vano se le llama La Atenas de Jalisco, apelativo que le otorgara el escritor jalisciense Agustín Yáñez pasada la Revolución Mexicana. Cuenta de ello dan los numerosos escritores, artistas y mecenas que ha habido en esa población desde épocas coloniales. Grandes figuras han surgido de las cuales el último gran artista de Lagos es sin lugar a dudas el pintor Carlos Hernández Martín del Campo conocido artísticamente como Terrés por el segundo apellido de su padre. Nació en Lagos de Moreno el 30 de octubre de 1950 en una familia que se dedicó a cultivar el arte… música, pintura, dibujo. De abuela y madre pintoras, desde pequeño se inició en el arte. Vendió su primera obra a los ocho años cuando producía dibujos de pirograbado sobre unas pequeñas tablas que servían de souvenir de Lagos de Moreno y que se vendían en el hotel París de esa ciudad.

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En 1963 se abre la escuela de artes y oficios en Lagos. Ingresa al área de artes plásticas recibiendo clases de los mejores maestros de la Universidad de Guadalajara de ese entonces. Al cursar la licenciatura de artes plásticas de esa universidad encuentra a los maestros que para él ya eran viejos conocidos, trabajó en sus talleres, como el del maestro Zamarripa. Su primera exposición se llevó a cabo en su tierra natal en 1968 a sus 18 años.

S A L

Como todo artista, es riguroso en la crítica de sus propias creaciones.

T O S

“Mi peor obra, es la última que acabo de hacer” Y su mejor obra… “todas” afirma.

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En todas sus obras hay un reflejo de su persona, de sus sentimientos y experiencias. Es más barato hacer obra que ir a ver un psicólogo. Es terapéutico. Mi vida como la de todo artista es como una escalera, secundaria, prepa, universidad, Guadalajara, Ciudad de México, California, Nueva York, París y al final vuelves al origen. Es importante volver a la raíz. En el año de 1968 sale de Lagos y regresa a Lagos alrededor del 2005. De acuerdo a lo que se lleva registrado, su obra está presente en 43 países y prácticamente en todos los continentes. Prepara material para sus próximas exposiciones internacionales en Medellín, España con motivo de la semana de la Hispanidad y en Bruselas, sede del Parlamento de la Comunidad Económica Europea. Para Terrés ser alteño es una fortuna y haber nacido en Lagos de Moreno más, con esa satisfacción de que sea llamada la Atenas de Jalisco. “Me tocó nacer en un lugar especial. Aparte, mi familia es de las fundadoras de estos lugares. Lagos me da tranquilidad, paz. Llevar a los nietos a la escuela no tiene precio”. Cuenta con un museo en una parte de su casa en Lagos de Moreno abierto de martes a domingo.

Para conocer más de la obra de Terrés, puedes visitar su página oficial: https://carlosterres.com.mx

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JÓVENES EMPRESARIOS

JOSÉ LUIS MARTÍN GUERRERO Por: Somos Altos Fotografías: Somos Altos

José Luis pertenece a esa nueva generación, nueva camada si cabe el término, de empresarios que vienen a reconfigurar el rostro de los Altos de Jalisco. Nuevos en edad pero también en ideas, en giros comerciales, en empuje. Dialogar con José Luis se convierte en una inyección de optimismo. Además es interesante su visión del empresario actual. Está convencido de que los empresarios que se ponen primero a ellos y después a la sociedad están condenados a desaparecer poco a poco. Eso lo vamos viendo localmente y en todo el mundo, el egocentrismo es lo de ayer; el incluir a todos sin importar su clase social, estudios o condición física y ser un motor de oportunidades es lo de hoy. Nos comparte José Luis que cuando uno tiene éxito en la vida lo tenemos que devolver, tenemos que lograr que México cambie de raíz. José Luis es licenciado en administración de profesión con apenas treinta años es ya un empresario consagrado quien desde los veintitrés supo escudriñar las necesidades y enfrentarlas con competitividad y responsabilidad. Hoy en día preside una entidad llamada MCBERRY dedicada a la manufactura de cosmética, suplementos alimenticios, tópicos, productos para el hogar, bisutería fina entre otras que brinda el abasto a dos diferentes divisiones.

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¿Con qué divisiones cuenta tu empresa? MCBERRY NETWORK MARKETING. Esta división suma una gama de más de quinientos productos en venta por catálogo con la marca propia MCBERRY en movimiento con un poder de distribución en multinivel de 25,000 mercantiles independientes con presencia en todo el territorio nacional.

S A L T

Esta división cambia vidas todos los días, tenemos incontables testimonios de éxito por la oportunidad de negocio y el uso de nuestros productos.

O S

En segundo lugar MCBERRY MANUFACTURING. Esta división está concebida para fabricar productos para otras empresas con su marca y diseñar estratégicamente desde la idea del proyecto, hasta cristalizarlo en un producto y colocarlo en manos del consumidor final. Hay varias empresas que son mi competencia de catálogo o

bien que atienden a otros sectores como las tiendas de auto servicio que ponen en nuestras manos la manufactura de sus productos ya que ellos están enfocados en la más ágil comercialización y no quieren preocuparse por lo que implica la compleja manufactura y los problemas que conlleva. Esta última división atendió en varias ocasiones al sector gobierno como lo fue en la influenza con antibacteriales para todo México. La circunstancia actual de coronavirus también nos brinda la oportunidad de participar en el mercado. Actualmente apuntamos para licitar en el sur del país. ¿Qué te apasiona de tu empresa? Esta pregunta me pone la piel chinita, con el tiempo esta respuesta se va puliendo... por ahora puedo decir que en una ocasión visité a una vendedora que tenía techo de cartón y tierra suelta como piso de su casa, la segunda vez que fui tenía una casa cómoda y hasta aire acondicionado... gracias a los frutos de su trabajo como distribuidora en la empresa. ¿Qué sentí? ... No hay palabras. ¿Para ti cuál es la clave del éxito empresarial? Que tus acciones empresariales te acerquen a un comportamiento que apruebe la doctrina de Dios y bueno, creo que cuando una persona responde a su creatividad y traza con responsabilidad su plan de acción, todo paradigma empresarial se convierte en nada ¿Cómo empezaste? Empecé llenando antibacteriales con un bote de catsup en mi habitación literalmente. Con reinversión y empeño la empresa tomó forma día a día. Estudié y empecé en Guadalajara. Volví a los Tepatitlán a establecerme ya que como lo dice Chavela Vargas ¨uno siempre vuelve a donde amó la vida¨ ¿Cómo te forjaste como empresario en ausencia de un mentor? A mis 18 cuando era vendedor de autos fue cuando conocí el dinero y ahí conocí la avaricia, eso me llevó a ser víctima de dos fraudes de gente que se pasó de lista conmigo y entendí que la cultura empresarial era una cosa y la avaricia era otra. El que persigue dinero finalmente no logra mucho, el que persigue resultados logra más.

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Perseguir resultados te lleva a mejorar procesos, por ende se da la calidad y finalmente tu consumidor lo percibe y te da su preferencia... así es como la competencia que se veía en griego alcanzar, empiezas a verla en español y después a dejarla atrás. ¿Qué mensaje le quieres dar a los Empresarios? Que sean pagadores, que no sean “gachos”… yo platico mucho con mis proveedores. Tristemente escucho que en la zona es costumbre de muchos retrasar pagos o incluso no pagar. Pasan por encima de pequeñas empresas pequeñas a las que mandan a la quiebra. ¡Qué responsabilidad de ellos! Solo quiero decirles que sin los proveedores no somos nada y que por el hecho de que cadenas comerciales de fama lo hagan, no significa que está bien. No hay derecho a colgarse de otro o debilitar un capital ajeno para crecer. Eso no lo considero justo. Hay que fomentar el comercio justo. ¿Qué tanto consideras que un empresario debe de estar informado de su entorno? Si quieres mantenerte a largo plazo el conocimiento es básico. Yo soy fanático del conocimiento que me compete a tal grado de dedicar un poco de presupuesto para informarme. Lo hago sobre todas aquellas empresas o personas que me generan un interés en particular sobre su trayectoria analizando sus fortalezas y debilidades. La información se procesa para su buen uso y siempre con ética; jamás para copiar o usarla de manera ventajosa. Yo aprendo de ella y me sirve para evitar las vulnerabilidades que muchos no saben que tienen en tiempos tan retadores como los de hoy. ¿Cómo visionas el mañana con la empresa?

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Me gusta ser silencioso con mis planes a nivel Empresa. Si les platicara hacia dónde vamos pondrían cara de ¿what?.. No soy predecible en nada, si les genero interés… pues espérenlo pronto. Mientras tanto, trabajo duro. ¿Cuál consideras que es la mayor fortaleza de tu empresa? El manejar la valentía y la prudencia en la toma de decisiones, el pensar que somos gigantes desde que la empresa no era más que mi habitación y comportarte como tal, y el no perder la sencillez cuando vas creciendo. Es un comportamiento que la sociedad valora y te permite seguir en el campo empresarial.

Sí, claro... es más bien un escrito que leo todos los días, el poema If de Rudyard Kipling, se los recomiendo mucho. ¿Qué te hace sentir orgulloso? Llamarme José Luis Martín, representa a dos hombres de generaciones anteriores enteros, hechos de buena madera y honrados. Uno fue comerciante y otro médico, ambos referentes tepatitlenses, mi abuelo y mi padre que Dios los tenga en su gloria. ¿Qué haces en tu tiempo libre? Me gusta estar en mi casa, ver documentales de arquitectura... soy un arquitecto frustrado, salgo con mis amigos a veces, hago ejercicio todos los días, no soy fanático del alcohol, viajar solo y acompañado, ver propiedades en venta en internet aunque no tenga dinero para eso ahora (risas).

T O S

¿Cómo eras de niño o de dónde te vino el talento para lo que haces? Un principio de educación que me dio mi madre es mejorar mi entorno. No fui un niño o adolescente muy popular, no me gustaba el fut. Mientras todos mis amigos jugaban, yo era un poco diferente. Siempre fui muy analítico con las cosas y eso me hizo pensar de una manera que hasta la fecha uso a mi favor.

Sabemos por algunos conocidos que tienes un carácter muy fuerte ¿Qué nos puedes decir? (Risas) Quieres decir enojón... ¿no? En realidad tengo un carácter muy firme. No se debe confundir el carácter geniudo con el carácter firme. A veces hablo de una forma que puede mal interpretarse, esa forma de ser viene desde Pachuy del Terrero, mi bisabuelo. ¿Qué te hace fuerte todos los días? Mis empresarias (haciendo referencia a sus distribuidoras en MCBERRY) no se imaginan lo fuerte que me hace sentirlas, escucharlas, ver como cumplen sus metas cotidianas. Es la gasolina que en su combustión genera ese deseo ardiente por mejorar como empresa. ¿Qué mensaje le quisieras dar a los que apenas inician? Que la magia no existe, que no le crean mucho a la gente, que mucho de lo que se habla es SPAM o bien reflejo de la frustración de otras personas. Usen su sentido común de lo que es bueno y lo que no. Háganse de buena fama haciendo las cosas bien. ¿Lavas coches? ¡Hazlo bien! ¿Cargas cajas? Hazlo bien, ningún trabajo es poco mientras puedas ver a los ojos a los demás y no bajar la mirada. ¿Qué les quisieras decir a los que ahora te leen? Primero que nada gracias por su tiempo, y que ahora que tengo su atención visiten la pagina www.mcberry.com.mx ahí están los íconos de las redes sociales oficiales para que nos sigan. Dense la oportunidad de probar nuestros productos y si desean emprender con nosotros tienen las puertas abiertas.

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S O M O S A LT O S T R A V E L

ATOTONILCO EL ALTO Cada uno de los pueblos y ciudades de los Altos de Jalisco tienen una historia única y su arquitectura lo plasma. Atotonilco es una de esas ciudades históricas. Está ubicado a 1 hora 40 minutos aproximadamente de la Zona Metropolitana de Guadalajara se encuentra Atotonilco el Alto, un municipio de Jalisco que se distingue por sus elementos culturales y espacios naturales. Es una de las ciudades más viejas de la región que data de 1528. Según la tradición, fue fundada por el monarca purépecha Tzintzincha Caltzonzin al cumplir la promesa que hizo a su dios al sanar a su hija con las aguas termales del manantial del Ojo Caliente actualmente el parque Taretán, Se trata de un parque abierto al público con alberca, juegos y asadores para la convivencia familiar. Atotonilco es palabra náhuatl que significa "lugar de agua caliente"

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Palacio Municipal

Plaza de armas

Café Extracto

La aventura en esta ciudad comenzará en su Plaza de Armas, uno de los espacios culturales más importantes del lugar. Aquí te encontrarás con un kiosco estilo chinesco, único en la región y que fue donado por el presidente Porfirio Díaz a la ciudad. En la plaza, además del Palacio Municipal se ubica la Parroquia San Miguel de Arcángel que data de 1616 así como numerosos locales comerciales donde puedes encontrar tiendas de huaraches hechos a mano de forma artesanal y muchos antojitos. No puedes perderte los famosos churros rellenos de cajeta.

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Debes saber que Atotonilco cuenta con uno de los mercados más bonitos de todo Jalisco y pueden encontrar todo tipo de artículos como canastos, jarros, jaulas para aves hasta los periquitos mismos. No dejes de probar el café extracto, cultivado y cosechado aquí mismo, le pueden agregar el rompope tipico de la cuidad, ¡mmm delicioso! Y el famoso chatazo tequila con jugo de toronja. Si el antojo es mucho, busca también las guasanas con chilito, el rompope, camote de cerro o birria. Y ¿qué decir de su estación de tren? Aún se conserva la estación que ahora sirve de museo de la ciudad donde se exponen piezas arqueológicas y otros artículos relaciona-

Monumento Tren dos con la historia de Atotonilco. Esta estación hace referencia al famoso tren llamado La Guayaba que unía Atotonilco con Ocotlán y que en su época convirtió a la ciudad en un poderoso centro regional de distribución y venta de mercancía de todo tipo. En el parque El Vergel, donde se encuentra la estación aún pueden verse algunos vagones de ese legendario tren.

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Churros Rellenos de Cajeta

Chatazos

A L T O S

ALTEÑOS FUERA DE LOS ALTOS

SERGIO MACÍAS SAINZ Por: Ricardo de la Torre Fotos: Sofia Casillas

Don Sergio, Es una persona que va al grano. La entrevista que nos ofreció amablemente duró realmente poco. Breve, conciso, práctico… al grano. Es un reflejo de su personalidad que reluce cuando se platica con él. Vivaz, afable y siempre de buen humor. A cada colaborador que encuentra por la planta la saluda y le dispensa una broma o una palabra que la hace sentir bien, una palabra de estima. Sin duda un líder.

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A sus ya setenta y seis años físicamente se mantiene vigoroso. De hecho está orgulloso de sus logros como corredor. Ha participado en variados maratones y dan fe de ello las numerosas medallas que muestra con orgullo en un espacio reservado de su oficina. Originario de Tototlán de padre militar y campesino, y de madre ama de casa. Nación en 1943 y estudió licenciatura en administración de empresas. Egresado del IPADE, la escuela de negocios prestigiosa. Tiene una hija que da clases… sobre empresa y familia en la Universidad Panamericana. Orgulloso de ser ex alumno del IPADE, instituto que califica como “una herramienta muy útil para su crecimiento personal primero y de su empresa después”.

Usualmente estudiaban universidad quienes provenían de familias con recursos. ¿Ese fue su caso? En absoluto. La condición económica de mi familia era precaria. Jodido y sin recursos son la misma cosa. Pero el apoyo de mi madre era decisivo. Los estudios los saqué adelante con mucho trabajo. ¿Cómo llega al ramo del aluminio? Porque por azares del destino empleé en una empresa de ese giro hace cuarenta y seis años. Tuve la suerte de que me corrieron y tuve que iniciar por su propia cuenta con una sola representación de una marca. A partir de ahí el crecimiento fue constante. Fue un proceso largo y arduo. Valoro mucho lo hasta hoy logrado. Lo que más trabajo te da más aprecias. Lo que fue fácil no tanto. Hoy por hoy tenemos tres mil quinientos productos diferentes que ofrecemos a nuestros clientes y vamos por más.

Don Sergio, háblenos de su preparación académica.

Además de comercializador, es usted productor, ¿correcto?

Muy simple. Estudié porque mi madre fue quien me empujó a hacerlo. Mi padre ya retirado de la vida militar era de la idea de que me fuera a trabajar al rancho, a cuidar vacas. La primara la estudié en Tototlán, la secundaria en Ocotlán con los Maristas y en Guadalajara cursé la escuela vocacional (preparatoria). Mis estudios profesionales en la Universidad de Guadalajara. Mi generación fue la segunda de licenciatura en administración de empresas. En la primera generación sólo hubo cuatro personas y en la segunda, la suya, doce, los doce apóstoles. De los Altos de Jalisco prácticamente no había alumnos en la universidad. Éramos contados.

Así es. Iniciamos solamente comercializando y ahora tenemos ya quinientas personas en la planta fabricando herrajes desde hace más de veinticinco años.

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¿Exporta sus productos? Sí, sobre todo a Centroamérica. Panamá, San Salvador y Guatemala son los puntos de venta principal. También mandamos mucho a la franja fronteriza del norte que de ahí otras personas se encargan de venderlo a USA. ¿Cuál es su modelo de negocio actualmente?

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Fabrico productos propios, comercializo mi marca y otras internacionales a través de distribuidores mayoristas. Actualmente estamos estableciendo una especie de franquicia llamadas tiendas alianzas. Ya son 25. Le estamos apostando mucho, no es fácil porque fácil no hay nada. Apoyamos en la apertura, en la imagen, en el crédito. El aliado la administra la tienda y tiene obligación de exclusividad con nuestros productos, con nuestra marca. Son propiamente tiendas Herralum. Nosotros como fábrica no vendemos al público. Para este proyecto buscamos a la persona idónea; lo capacitamos, le damos el Know how, lo apoyamos con mejor descuento, imagen, para que se desarrolle. Lo llevamos de la mano. Ahora ya Herralum como marca ya vende. La marca es lo que vale y cuesta mucho posicionar la marca. Me decía que también distribuyen otras marcas.

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Es correcto. Se trata de marcas líderes a nivel mundial distribuidas exclusivamente por nosotros en México, por ejemplo la marca Ryobi, japonesa. Nos ayuda mucho el que tiendas como Oxxo especifican que las bisagras hidráulicas de sus puertas deben de esa marca. De igual modo instituciones como el Tec de Monterrey. Eso nos favorece, sin duda. Tengo 20 representaciones de diferentes marcas a nivel nacional. Por otro lado, también estamos fabricando de manera que podamos competir con los productos chinos. Sabemos que competir contra ellos no está fácil pero lo estamos logrando.

¿Desde cuándo fabrica? Hace 25 años comenzamos a fabricar. Y vamos por más. Vamos a crecer más. La solución hoy por hoy es exportar, nos estamos haciendo más competitivos y más eficientes. Para lograrlo hay que mejorar nuestros procesos internos, nuestros costos. Debemos tener carácter y apostarle a nuestro país, que es muy grande y noble. No tenemos otro país, no tenemos otro estado. Tenemos éste. Hay que buscar el lado bueno de nuestro país. ¿Es usted el líder en su ramo en la República? No sé si soy el líder a nivel República pero por suerte tenemos competencia y eso te ayuda. Hay que temerle a la incompetencia, no a la competencia. Pero sí llevamos el liderazgo.

¿La base de su éxito comercial? Lo más importante: ser derechos, ser éticos. Con ética poco a poco uno se va posicionando. Un ejemplo de nuestra ética comercial es que todos nuestros productos tienen garantía mínimo un año. Respondemos por cualquier cosa que vendemos sin tanto trámite. Eso nos da mucha ventaja y al cliente le genera confianza. Nosotros no engañamos a nadie.

para trabajar. Hacer un cliente no te cuesta, mantenerlo está en chino. Nosotros nos hemos diversificado porque está muy complicado depender de un solo cliente y de un solo producto. Aquí ya estamos buscando cómo ofrecer más líneas nuevas. Yo lo veo muy entusiasta, muy dinámico. ¿Alguna vez ha tenido depresión?

Como empresario, supongo que tiene claro que hay que multiplicarse y ser eficiente. Que el trabajo no lo absorba a uno.

No, para nada. No tengo tiempo de pensar en eso.

Exactamente. No hay que trabajar como diez, sino hay que poner trabajar a diez.

Por supuesto. Estamos trabajando en ello. Ya tenemos mucho avance. Tengo cinco hijos de los cuales tres trabajan con nosotros. La sucesión es mi prioridad pues ya estoy llegando los ochenta años. Se siente feo llegar a viejo pero se siente más feo no llegar. Hay que tener fe y formar equipo de gente competitiva. Rodearte de buena gente no es fácil. No pienso retirarme, pero sí he pensado en no ser jamás indispensable. Pensar en ser indispensable es la peor tontería que se puede cometer. Por eso trabajo en delegar, delegar. Jamás buscar ser el único.

¿Alguna vez ha tropezado? ¡Ah, claro! Muchísimas veces. El mayor de nuestros tropiezos fueron las deudas que habíamos contraído con el banco y que en la crisis del 94 amenazaban con doblegarnos. Fueron momentos muy complicados pero afortunadamente negociamos todo con el banco y pudimos salir adelante. Era una deuda en dólares. Ante los problemas la actitud cuenta mucho. Hay que tener fe, ser positivos. Son más las fuerzas que las debilidades que tenemos. Tenemos mucho potencial. ¿Qué valores lo sustentan en su trabajo? Crear fuentes de trabajo. Mínimo sostener lo que tenemos. Crecer, vamos este año por un 15% de crecimiento. El hambre, el deseo de superación es el mejor satisfactor

¿Ha pensado en la sucesión familiar?

¿Algún vicio? Pedir prestado. De todos modos cuido mucho la liquidez como persona y como negocio. ¿Algún hobbie? Caminar y correr.

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EMPRESARIO DEL MES

HERIBERTO ROMO RANGEL Por: Somos Altos Fotos: Brenda Ramírez Glez

Una vida dinámica y versátil es la de Don Heriberto Romo, un hombre acostumbrado a los giros, a los cambios de 180 grados. Eso sin duda implica un temple y una seguridad para adaptarse a las nuevas circunstancias. No cualquiera abandona la comodidad de lo poco que ha logrado para arriesgarlo y volver a comenzar. Con mucha apertura nos recibió en su terraza, nos presentó a su familia. Además de su esposa a quien cariñosamente le llama Chelita, nos acompañaron Heriberto el mayor, Jesús, Yadira y faltó Hernán, actor quien en la serie Narcos da vida al papel de Benjamín Avendaño. También nos acompañaron, sus hijos, nueras y nietos. Una muestra de la unidad familiar que vive en su entorno. Es un caballero, de buenos modales y con anécdotas de su vida de sobra. La charla fue de algunas horas incluyendo una sabrosa comida preparada por su hijo Chuy. Hoy por hoy, se dedica a la inyección de plástico y a la fabricación de bolsa. ¿Don Heriberto, le preocupa la prohibición del uso de bolsas de plástico de un solo uso?

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Claro que me preocupa. Pero antes déjeme aclarar que el término está mal empleado. Estas bolsas no son estrictamente hablando de un solo uso, pues el plástico se puede reciclar de manera infinita y usarse una y otra vez. Pero sí me preocupa porque el problema no está en la fabricación ni el material de las bolsas, sino en la cultura de la sociedad, de cada una de las personas. Inclusive en parte radica en el mismo gobierno que no crea condiciones para que las cosas se den. No estimula el reciclaje ni apoya a los particulares para que se preocupen por él. ¿Por qué hay sociedades tan avanzadas que sí reciclan todo y otras no?

como reciclado, fabricamos bolsa para uso automotriz, bolsa negra, asientos y respaldos para sillas, piezas especiales también para la industria automotriz, etc. Cuenta con sus hijos a tiempo completo, supongo… Es correcto. Sin embargo, yo no los eduqué para que trabajaran conmigo sino para que siguieran su propio vuelo. He sido muy respetuoso de sus decisiones. Beto es ingeniero electricista que trabajó por algunos años con una empresa líder en Monterrey y luego volvió a casa para ayudarme en el proyecto de la inyección del plástico. Más tarde, Chuy también se incorporó luego de estudiar en el TEC de Monterrey y realizar un intercambio académico en Argentina. Debo aclarar que en relación con mis hijos, yo les dejé libres para que decidieran trabajar donde ellos desearan. Antes de trabajar conmigo, ambos hicieron la experiencia trabajar para otras empresas y regresaron valorando lo que tenían. No es lo mismo dar una orden que recibirla. Don Heriberto, háblenos un poco de su vida. Yo nací en Encarnación de Díaz, Jalisco, antes llamado El Sauz de los Macías el 6 de mayo de 1953, de padre agricultor y de madre ama de casa. Estudié la primaria en la escuela Felipe Ramírez y la secundaria en el colegio Morelos de la Chona (como es conocida comúnmente la ciudad de Encarnación). Yo fui de la segunda generación de esa secundaria. Fue todo lo que estudié. No había realmente posibilidades de estudio en esa época. Yo quería estudiar para piloto de aviación, pero no había los medios y tuve que trabajar, máxime siendo hombre de campo. Mi padre sabía leer y escribir muy poco. Solo el campo era la opción.

¿Cuántas toneladas recicla en su planta? Nosotros contribuimos a la cultura del reciclaje procesando más de seiscientas toneladas al mes. Puede parecer poco o mucho pero es con lo que contribuimos. En esta tarea me ayudan mis dos hijos, Beto y Chuy. Con material tanto virgen

Supongo que esas circunstancias hacían que los jóvenes maduraran pronto. Al parecer sí. El trabajo había que realizarlo desde muy niño y se llegaba a la madurez muy temprano. A mi edad de 14 años yo ya araba con mula y ponía el arnés. Poco a poco aprendí a

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operar tractores y maquinaria pesada. Al poco tiempo de cumplidos los 16 viajé a Estados Unidos buscando el sueño americano y con la bendición de mis padres. Pasé algunas experiencias chuscas en el viaje que si se tienen en cuenta la edad que tenía, hablan por sí solas. Eso fue en 1969. Me dirigí a Tijuana pero en Culiacán había caído tanta agua que los puentes se colapsaron. Quedamos varados durante tres días. Dormí primero en la central de autobuses y luego nos trasladaron al estadio de béisbol a todos los varados. Un empresario nos apoyó y nos daban una ración consistente en una lata de sardinas, otra de jugo y un paquete de galletas saladas. Eso para todo el día. Cuando llegué a Tijuana me dirigí a migración para pedir permiso de internarme. No llevaba ningún documento y por supuesto me rechazaron. Unos coyotes me vieron salir y enseguida me abordaron. Me ofrecieron sus servicios y llevarme a San Bernardino por 225 dólares. Todo fue rápido. Pasé la malla ciclónica que había, me subieron a un vehículo, me sentaron en el asiento trasero. No hubo sobresaltos. Al tercer día ya estaba con mi hermano mayor y trabajando. ¿Qué hacía allá? Trabajé de sepulturero y en el mantenimiento en un cementerio judío. El primer día de trabajo me dieron unas herramientas que no estaban en las mejores condiciones, ni bien aguzadas. Era difícil cavar con esas herramientas. Las manos me sangraban a pesar de haber trabajado en el campo toda mi vida. En esos momentos difíciles recordaba a mi padre en el momento en el que me despedí de él y me dio su bendición: “Está bien, se va a ir pero no lo quiero de regreso derrotado y diciendo que no pudo con el trabajo. ¿Quiere ir? Adelante”. Ahí duré año y medio. El rabino del panteón me tomó buena voluntad y aprecio a

tal grado que en una ocasión que viajó a Israel me dejó cuidando su casa durante dos semanas. Me quiso a tal grado que quería adoptarme como hijo pues no tuvo familia. Sin embargo, cuando mi hermano decidió regresar a Encarnación de Díaz, me decidí acompañarlo. Hasta ahí duró mi experiencia en USA.

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¿Y qué sucedió a su regreso? Mi padre compró una camioneta de tres toneladas para el servicio de fletes locales. Yo era el chofer y muy inquieto. Si me decían: “Hay que llevar cebollas a Guadalajara.” Pues, ¡vamos!

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Ahí vi la posibilidad no sólo ganar en flete, sino en la compraventa de lo que transportaba. En aquella época se cultivaba en La Chona mucha cebolla en épocas de cabañuelas. Le propuse a mi padre no solo fletar, sino comprar la cebolla. Mi papá tenía sus temores pues lo consideraba riesgoso en caso de no venderse. Salió una oportunidad. Una persona me vendió su cosecha a 45 centavos el kilo. Tuve la suerte de encontrarme con una persona de Michoacán que me la compraba a 80 centavos. El primer peso que gané en el comercio fue con cebollas. Cuando se acabó la temporada de cebollas alguien me propone llevar ollas y alfarería típica de La Chona para vender en Durango. No lo pensé dos veces. Me dirigí hacia esa ciudad pero empecé a vender ollas en Río Grande, Zacatecas. Luego Villa Unión, Sombrerete y finalmente Durango. Ya casi acabando todo un comerciante me

compró todo lo que me quedaba. Y la suerte no quedó ahí. Conocimos a una persona que me sugirió comprar manzana en Canatlán, Durango, para llevar de regreso. No lo pensé dos veces. Cargué mi camioneta de manzanas que vendí en La Chona. Me estacioné frente a la parroquia temprano. Abrí las dos redilas traseras. La gente salía de misa. De tres, cinco, ocho pesos iba vendiendo mis manzanas. Ese viaje, de ida y vuelta me dejó dos mil pesos limpios. Después de ese viaje, mi padre tuvo temor de que algo me pasara como chofer. Le pareció arriesgadas mis aventuras. Además pretextaba que no me veía ni estaba en casa. “Ve y entrega la camioneta a tal persona, ya la vendí”. La experiencia de los fletes duró alrededor de un año. Vaya, veo que no tenía flojera para iniciar de nuevo. ¿Qué siguió después? Luego de entregar la camioneta, venía caminando y un amigo me alcanzó y me preguntó qué hacía. “-Nada, le dije, acabo de entregar la camioneta de mi papá”. “-Necesito chofer que me lleve a Monterrey”. “-No se diga más”. Llegué a casa con un carrazo. Duré solo seis meses de chofer de Chuy Hernández, muy conocido en mi pueblo. Fue una experiencia única donde conocí muchas partes de la república, socialicé, aprendí a tratar a las personas, a usar cubiertos, aprender buenos modales. Don Chuy Hernández era una persona de mucha educación y aprendí mucho de él. Mientras yo estuve con él, jamás dijo que yo era su chofer. Me trató como un hijo. Aprendí también a tener vehículos limpios. Luego me confió una granja porcícola, me capacitó. Crecimos en cerdos. Sacrificábamos cerdos a diario y todo lo procesábamos.

Para entonces ya estaba casado con mi esposa Chelita y en 1976 nace mi hijo Beto, el primogénito. ¿De ser empleado, cuándo pasó a dar órdenes? Luego de mi trabajo con el Sr. Jesús Hernández busqué opciones y con mi esposa decidí irme a Estados Unidos pero antes nos fuimos a Aguascalientes unos días con mi cuñado. Él me dijo que vendían una tienda y me alentó a comprarla. “¿Con qué la compro? Es un dineral” pensé. Se trataba de una tienda grande de abarrotes, en esquina, bien surtida de vinos y licores. Llegamos con el dueño, un señor ya mayor. La familia no estaba interesada en la tienda y él la quería vender. “Yo solo pido por la mercancía, deme un 40% de entre y lo demás a mensualidades”. Don Eduardo me ayudó mucho. No sólo con fiarme la tienda sino con sus consejos. Antes de la primera Navidad con la tienda me aconsejó que me preparara. Me dijo cantidades que a mí me parecían exorbitantes. Seguí su consejo. Me ayudaba mi esposa embarazada a dos semanas de aliviarse y otra jovencita. La venta de ese día fue una locura. Era tal que aventábamos los billetes a una caja porque no teníamos tiempo de acomodarlos. Terminó el día y vino la calma. Íbamos muertos a casa. Al subir las escaleras ayudaba a mi esposa a subirla empujándola por la espalda. Nuestra cena de navidad… frijoles de la olla, unas tortillas, un chile colorado y una cerveza. Vendimos 36 mil pesos en un solo día. ¡Era increíble! Tengo entendido que usted también fue fabricante de ropa. Cuéntenos de esa experiencia. Todavía estábamos en Aguascalientes cuando recibimos la invitación a ir a apadrinar a Ramos Arizpe, Coahuila. Buscando la manera de ahorrar en el viaje se nos ocurrió, a mí y a Chelita, llevar ropa, juegos para bautizo que las sobrinas de mi esposa ya comenzaban a hacer…

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cobijas, mamelucos y demás. Llenamos el coche con esos artículos para venderlos y costear el viaje. La comadre nos llevó a una tienda donde vendían ese tipo de artículos. El encargado de la tienda nos escuchó y solo nos dijo: “Muy bien, ¿cuánta mercancía traen?” Le mostramos la mercancía. “De acuerdo. ¿Cada cuánto van a venir?” Adelantándome me aventé “cada mes”. No estaba planeado. Yo lo que quería es que se vendieran las cosas. “Está bien, déjeme todo lo que trae, aquí va el cheque”. Así nació la idea de comercializar las prendas de vestir. Iniciamos con las sobrinas de Chelito, luego con personas de Villa Hidalgo hasta que en 1980 inicié la fabricación con esta convicción: Si otro lo hace, yo también lo puedo hacer. Empecé a viajar cada mes. Inicialmente Saltillo y Monterrey. De ventas no sabía prácticamente nada. Pero pasando por una librería me topé con un título: El vendedor más grande del mundo, de Og Mandino. “Por cada cliente que te diga que no, busca diez, alguien te ha de comprar”. Lo apliqué. En un solo viaje llegué a vender tres mil vestidos. La que me surtía hacía sólo cuatrocientos al mes. Buscamos quiénes nos maquilaran, pero al no encontrar, lo hicimos nosotros también. La casa donde vivíamos la convertimos en fábrica. Pusimos más máquinas. Teníamos dos turnos de trabajo. Desde las 7 am hasta las 10 de la noche. Era una locura. Una ruta muy rentable fue la del Pacífico. Me llegó un cliente de Culiacán que compraba enormes cantidades. Comenzó poco a poco hasta ser el principal. Eran épocas de Caro Quintero y de una región dinamizada por su cártel. Había dinero. Pero todo se vino poco a poco abajo cuando fue capturado. Fue entonces que mis ventas fueron también cayendo. Mientras tanto yo ya veía otra opción de negocio: el plástico. Siempre tuve la inquietud de ingresar a esa industria. Yo veía las máquinas de bolsa para los vestidos. Me apasionaba. Mi proveedor de entonces se enfermó, no podía trabajar y sus hijos no estaban interesados. Me ofreció la maquinaria pero la inversión estaba fuera de mi alcance. La oportunidad de entrar al plástico vino cuando un amigo compró una máquina de inyección de plástico que no pudo trabajar. Me ofreció la máquina en sociedad… “No gordito, yo no tengo sociedad ni con mi mujer”. Mejor véndeme la máquina. Pasaron unos meses y me ofreció la máquina, hicimos el trato. De ahí Adquirí un crédito del banco. Esa fue mi primera máquina inyectora que la usé para hacer gancho para ropa. Poco a poco y con más máquinas hemos desarrollado numerosos productos. Uno de ellos el casco de bésibol para las grandes ligas de Estados Unidos. Pasaron los años. Con dificultades y apoyos pero con mucho entusiasmo nos fuimos haciendo de una y dos, y tres máquinas hasta el 2006 con 16 máquinas de inyección para la fabricación de gancho. En esa época logramos hacer 2 millones de ganchos mensuales. Abrimos mercado en Moroleón, vendíamos a distribuidores, no usuarios. Mis hijos salían a repartir temprano a las dos o tres de la mañana y regresaban a mediodía a comer y enseguida a la preparatoria. Hasta nos pagaban por adelantado.

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Todo con lo que contamos ha sido con ayuda de la familia. Todos nos involucramos en este proyecto y es un negocio

familiar al grado que el trabajo no dio ni para ir a un partido de futbol o de béisbol. Solamente los domingos se hacían días de campo familiar. De hecho toda nuestra vida gira en torno a la familia

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De todo esto que ha vivido, Don Heriberto, ¿qué rescata como experiencia de vida?

M O S

Primero, el valor de mi familia, mis hijos y mi querida esposa Chelita. Ella ha sido mi gran apoyo. No tengo palabras para describir todo lo que he vivido con ellos. El valor de la palabra. En los tratos hay que defenderse pero una vez adquirido un compromiso, hay que cumplirlo. El valor de la honestidad como el gran patrimonio de la persona. No se requiere dinero si tienes honestidad. El dinero viene como consecuencia. La gente confía en ti como lo hizo conmigo. Recuerdo que un día fuimos a Aguascalientes a comprar una cuatrimoto para mis hijos. No tenía idea de cuánto costaban. El dinero que llevaba no alcanzaba pero desde el fondo de la agencia de motos salió una voz: “Lucy, para ellos, las motos que se quieran llevar”. Cuál fue mi sorpresa al darme cuenta de que la persona que dijo eso era un antiguo proveedor de productos de limpieza cuando yo tenía la tienda. En ese momento subimos la moto a la camioneta, sin un papel, sin firma, sin nada. Todo a la confianza. Tampoco faltaba quien me prestara dinero para hacer negocios. Recuerdo que otro gran amigo, Raúl Padilla también me apoyó con préstamos para hacer compras de contado cuando tenía la tienda. Me aventaba la chequera y me decía: “Haz el cheque por lo que quieras. No le pido a Dios que me pagues, le pido a Dios que tengas para que ya no me pidas”. Mis negocios han comenzado siempre de la misma manera… sin dinero.

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