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REDES SOCIALES
REDES SOCIALES ¿Cómo cuido a mi hijo?
Mtro. Alejandro Cisneros Aguilar Asesor Técnico Pedagógico del Centro de Actualización del Magisterio de Cd. Guzmán, Jal.
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Es sabido que el uso de las redes sociales no es exclusivo de los adultos, los niños desde temprana edad tienen acceso a ellas y no sólo a una sino a varias; esto a pesar de que las políticas de uso solicitan tener un mínimo de edad para crear una cuenta, por ejemplo Facebook requiere de una edad mínima de 14 años en sus usuarios (en algunas jurisdicciones podría ser superior), por su parte Instagram solicita que se tengan por lo menos 13 años al igual que Tik Tok, por nombrar algunas de las más utilizadas; pero ¿Por qué podría tener un niño menor de la edad mínima requerida una cuenta en alguna de esas redes sociales?, esto es fácil de responder, ya que sólo se llena un formulario en línea con algunos datos personales donde se puede establecer una fecha de nacimiento falsa para cumplir con dicha política de edad.
Pero ¿Cuál es el riesgo de que niños pequeños utilicen redes sociales?, uno es el tener contacto e interacción con un número exponencial de personas, mucho mayor del que podrían tener en físico, ya que por medio de las redes sociales podríamos tener literalmente miles de “amigos”, de los cuales ni si quiera sabemos si sus cuentas son reales ya que no los conocemos en persona. Por lo anterior un niño que utilice una red social podría creer que está platicando con su amigo de 12 años que vive en la misma ciudad que él, cuando en realidad es un hombre de 50 de otro país interesado en obtener sus fotografías o vídeos, por lo tanto, uno de los riesgos es aumentar la probabilidad de tener contacto con un pedófilo.
Otro riesgo es el caer en la trampa de los “retos”, donde se les invita a cumplir con cierta tarea, algunas podrían parecer inofensivas como por ejemplo el tomarse una fotografía sobre algún lugar simulando ser una tabla, es decir con el cuerpo completamente recto, pero hay casos donde adultos han resultado muertos al tratar de cumplir con este reto ya que lo han hecho sobre un balcón donde desafortunadamente perdieron el equilibrio y cayeron varios metros.
Otro reto que fue bastante popular fue el de la “Ballena azul”, donde se le iba pidiendo a quien participaba en el que hiciera una serie de tareas que parecían inofensivas al principio, pero cada vez se hacían más complicadas e iban aumentando el riesgo de resultar heridos hasta que finalmente se le pedía se suicidaran.
Por su puesto un riesgo obvio, pero del que se tienen casos documentados es el de compartir información, desde la escuela donde estudia, cuántas personas viven en su casa, horarios de la familia, etcétera, misma información es utilizada por delincuentes para cometer fraude, extorsionar o asaltar a las familias de estos niños.
Lo anterior no tiene el objetivo de satanizar las redes sociales o pretender que se prohíba rotundamente el uso de ellas a los niños, sino el que los padres de familia estén conscientes de que el uso sin supervisión de las mismas podría llevar a situaciones bastante dolorosas para las familias; por lo tanto, algunas recomendaciones para tratar de evitar el uso inadecuado de las redes son:
Tenga una comunicación abierta, cordial y de confianza con sus hijos, no se limite a suponer que por ver la a televisión en familia ya es una 1 convivencia con ella y por lo tanto sus hijos ya tuvieron la atención que requieren, mejor salga a caminar, juegue con ellos, platique de sus intereses, dudas, miedos, genere un ambiente de total confianza donde no sientan ni temor o pena platicar con usted de cualquier cosa. Hable con ellos sobre la edad adecuada para el uso de las redes sociales y los riesgos de los que se deben cuidar al usarlas. Explíquele que 2 pueden acercarse a usted ante cualquier situación sospechosa o incomoda que pasen y genere la confianza suficiente para que se la cuenten.
Si al utilizar usted alguna red social se encuentra con alguna cuenta de niños que considere se están poniendo en riesgo o son muy pequeños 3 para su uso denuncie la cuenta, en cualquier red social se tiene la opción de denunciar una cuenta, ahí especifique que el niño no tiene la edad suficiente para utilizar dicha red social. Supervise el tiempo de conexión de sus hijos, muchas veces no somos conscientes del tiempo que pasamos conectados en redes 4 sociales, procure que utilicen su tiempo en realizar otras actividades donde desarrollen habilidades, jueguen o aprendan algo.
Existen herramientas que puede instalar en el equipo que utilicen sus hijos para acceder a Internet, estas aplicaciones le permiten revisar el historial de 5 conexión, horas de usos y horarios permitidos, muchas de estas herramientas son gratuitas, lo invito a buscar la más adecuada a sus necesidades.
EL USO DE LAS HERRAMIENTAS DE G SUITE
Propuesta básica (Primera parte)
Mtro. Gilberto Flores Ruiz Asesor Técnico Pedagógico de la zona 9 federal de Educación Especial
Las “nuevas tecnologías” con las que hoy estamos trabajando no son tan nuevas. Al menos no lo que subyace a lo propuesto en los últimos meses, como Classroom y otros sistemas de aprendizaje en línea. De hecho,
“Tecnología” no es sinónimo de
“Internet” y menos aún, de “Videoconferencias”, como podría pensarse superficialmente.
El tema de la aplicación de la informática en general, y de los dispositivos personales en particular, da para más que el espacio que aquí amablemente nos facilita el editor. Ojalá nos abra un espacio para resumir, estudiar, proponer y dar continuidad a muchas de las herramientas que ya llevan tiempo entre nosotros y que, por una u otra razón no hemos aprovechado en su totalidad.
Nos enfocaremos en una propuesta general, sencilla y abierta de trabajo con algunas de las herramientas que proporciona Google, ya sea en su versión libre, o recientemente en G Suite For Education. Con la esperanza de que nos faciliten este espacio en números posteriores, quiero exponer algunas observaciones sobre tres de sus aplicaciones, a manera de introducción, guía, narrativa de experiencia o como gusten llamarlo. Estas aplicaciones son El Google Drive, El Google Sites y el Google Formularios. Google DRIVE, repositorio en línea.
Prácticamente la totalidad de los docentes ya tiene experiencia, cual más cual menos, con el manejo de carpetas, subcarpetas y archivos (también llamados ficheros) en Windows® y seguramente están acostumbrados a organizar en su computadora o en una USB los documentos que se generan en sus actividades cotidianas, como planeaciones e informes, así como aquellos enviados por la Secretaría para su estudio y aplicación, desde planes y programas hasta oficios sobre alguna normatividad específica, además de audios y videos cada vez más necesarios para el desarrollo del trabajo con los alumnos.
Pues bien, la lógica del Google Drive es la misma: la de organizar y proveer un respaldo de toda esa documentación, tal y como lo mantenemos en el Explorador o en la USB, con algunas diferencias que tenemos que precisar, entender y aprovechar. A continuación, un listado no exhaustivo de las mismas: *La presentación, que es un poco distinta a la del Explorador de Windows. Quizá a algunos docentes les cause un poco de angustia o dificultad ver de otro tamaño y forma las carpetas y los documentos, con iconos un poco distintos, pero con un poco de esfuerzo, no tardamos en acostumbrarnos. De todos modos, quienes conocen otras alternativas (como Dropbox) ya están habituados a diferentes presentaciones. *Uso a través del navegador de Internet, usualmente el Google Chrome, que es el de la misma empresa, pero que funciona igual, o casi igual en otros, como el del zorrito o el de la “e” azul. Una aclaración para avanzados: con el Chrome es posible trabajar fuera de línea y descargar una imagen virtual a la computadora. Esto último representa una ventaja muy interesante que, por razones de espacio no podemos ahondar aquí. Reitero, ojalá el editor nos permita un espacio en subsecuentes publicaciones y profundizamos.
*Almacenamiento permanente y siempre accesible. Esta es una de las características que nos atrapan desde el primer momento cuando nos iniciamos a las unidades virtuales (que es básicamente el GDrive). Señalaba arriba que si ya guardamos archivos en computadora o en USB (¡Qué tiempos aquellos cuando lo hacíamos en discos de 3.5!). La novedad es que ya no tenemos que estar copiando en esas memorias y llevando de un equipo a otro nuestros archivos, sino que basta que accedamos en cualquier computadora a nuestra cuenta, al Drive… y como por magia, ahí está el archivo que trabajamos en casa, en el salón de maestros, en el ciber… donde haya sido. Igual, claro está, podemos hacer respaldo en memorias personales y guardalo a piedra y lodo por si acaso. Nunca se sabe. *Compartir archivos y trabajar documentos de manera colaborativa en tiempo real o asincrónicamente. Son dos de los puntos fuertes del trabajo con el Drive. Ya no se trata de tener un archivo y “pasarlo en la memoria” o mandarlo por correo a los compañeros; basta con compartirlo y ya es posible visualizarlo y trabajarlo en equipo. Insisto, no es nuevo, porque en otros sistemas, como Microsoft Teams y Dropbox se ha estado haciendo desde hace tiempo, no se diga quienes ya están habituados en su cuenta personal de Google a usar documentos compartidos. Es tiempo que quienes aún no lo han probado, se acerquen a esta forma de trabajo. *Capacidad de almacenamiento. Aquí sí tenemos novedades. No sé ustedes, pero yo recuerdo el primer equipo que cayó en mis manos, una PC 286 de escritorio, con disco duro que podía almacenar ¡hasta 40 Mb! Luego adquirí una mejorcita, que tenía capacidad de 7 Gb. Todavía recuerdo que alguien me dijo que nunca se me iba a llenar. Recordarán aquellos disquetes que con los que podíamos transportar documentos con un espacio máximo de 1.44 Mb, aunque algunos sabrán de otros anteriores. Bueno, el punto es que cuando usamos una USB promedio, podemos transportar desde 4 hasta 32 Gb, teniendo, claro, de menor y mayor capacidad, dependiendo de necesidades, presupuestos, inquietudes, etc. Bien, al iniciarnos en el Drive, descubrimos que, en su versión libre nos otorga una capacidad de 15 preciosos Gb, capacidad más que suficiente para la mayoría de las necesidades cotidianas de trabajo, estudio o hasta esparcimiento. Cuando ya excedimos esta capacidad, que tampoco es difícil, siempre contamos con la posibilidad de pasar a la versión de paga, con 1, 10, 20 o 30 Tb, si tienes demasiado qué guardar. Por ahora no puedo extenderme en detallar a cuánto equivale esta capacidad de almacenamiento, pero es mucha, créanme. Pero ahora sí, aquí está la novedad, que muchos seguimos sin creerlo… G Suite nos ofrece capacidad de almacenamiento ilimitada, así como lo leen, ILIMITADA. Si es así, de verdad, hay que aprovecharlo.
Bueno, esta lista puede seguir, pero baste para darnos una idea de cómo podemos aprovechar como herramienta de trabajo el Google Drive. La idea básica es que nosotros, como ATP´s, podríamos tener en nuestra cuenta institucional y en su correspondiente Drive, una organización de carpetas y archivos en donde, junto con la Supervisión, mantendríamos actualizada la documentación oficial, los formatos técnicos propios de la misma zona, los que en las unidades acuerden para el trabajo cotidiano, etc. Todo ya dependiendo de la sistematización y orden que la comunidad escolar y los consejos técnicos mantengan. Es posible y sería deseable que todo el personal de la zona tuviera acceso a estas carpetas compartidas para siempre tener acceso de primera mano a la reglamentación, la filosofía, los principios, acuerdos, sistemas comunes, etc. que desde la supervisión y la asesoría se maneje en línea con los lineamientos estatales y federales. Esto implica, por supuesto, que a nivel de Dirección de Nivel tengan también la organización correspondiente que a su vez compartan con las supervisiones, y que esté vinculada con lo que a nivel básica se determine. A eso me refiero cuando hablo de organización a varios niveles.
Se pensará que esta no es labor del ATP, por ser de tipo administrativo. No sé, pero desde mi punto de vista, lo organización del trabajo cotidiano nunca sale sobrando y, sobre todo, este sistema dado por el Drive sienta la base para un trabajo más eficiente y productivo. Dejo abierta la cuestión por si alguien desea opinar.
He de reconocer que aún no tengo un sistema final, establecido e inamovible de cómo se administrarían esas carpetas a nivel de la zona. Tengo mi propia visión, con la que he trabajado por años y que con gusto comparto con quien guste, o si bien alguien me quiere compartir la suya, sería muy enriquecedor.
No se pierdan la segunda y tercera parte, sobre Google Sites y Google formularios respectivamente.