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MOVÁMONOS MÁS MOVÁMONOS MÁS MOVÁMONOS MÁS MOVÁMONOS MÁS

Me es grato y placentero hablar de uno de los temas más importantes, significativos, relevantes, conocidos y sobre todo necesario en la vida de todos nosotros; así es, estoy hablando de los beneficios que las actividades físico-deportivas pueden generar tanto en el aspecto físico como en el aspecto mental (emocional).

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Para esto, si me permiten, partiremos de los aspectos teórico-científicos; con la definición de los conceptos básicos universales de una cultura física; con el fin de ampliar el panorama y sobre todo la comparación e identificación de ellos; iniciamos con la: Educación física: conocida como una de las ciencias pedagógicas que se encarga de formar metodológicamente el desarrollo integral del ser humano, enfocado principalmente en el movimiento corporal, NO como una simple movilización mecánica del cuerpo, sino como una manera de expresión de sentimientos y emociones a través del juego, deporte, ejercicio, y la recreación.

Deporte: es una forma de actividad física y/o ejercicios regida por reglas, es meramente competitivo, puede practicarse de manera individual o en equipos y se clasifican por invasión y defensiva, de cancha propia, de combate, de apreciación, de precisión y puntería, y de tiempo y marca.

Ejercicio: es un tipo de actividad física que se realiza de manera planificada o estructurada, normalmente se enfoca en ob- jetivos y metas específicas, para lograr una salud física y mental, o simplemente para un beneficio físico estético, como bajar de peso, aumentar la masa muscular, mejorar tus marcas de tiempo y distancias, etc.

Actividad física: confundida muchas veces con ejercicios, sin embargo, este concepto se comprende con cualquier movimiento muscular-esquelético que se realiza y genera un gasto energético más allá de lo normal; puede ser cuando sales a la tienda, vas a tomar el camión, haces el aseo en tu casa, juegas unas retas de algún deporte, etc., o sea todas las actividades cotidianas que realizas por el hecho de estar con vida y con movimiento corporal, no hay un objetivo como tal.

Recreación: esta actividad generalmente se utiliza el juego con el fin de relajarse o divertirse; puede ser de manera activa como andar en bicicleta, nadar en el mar, las albercas, retitas con los amigos, juegos tradicionales, quemados, etc.; las pasivas como los juegos de mesa, la botella, algún video juego, etc., y las comunitarias como los rallys, caminatas colectivas, torneos de colonias, etc.

Y por último el tiempo libre y ocio: este es el periodo de tiempo que no tienes programada alguna actividad en específica y la puedes utilizar en lo que mejor te convenga y satisfaga, desde dormir, una actividad física o recreativa, lectura de un libro, escuchar música de tu agrado, etc.

Después de conocer, identificar y sobre todo poder comprender que cada uno de estos conceptos, son diferente entre sí, pero que, al mismo tiempo, si nos damos cuenta, tienen una relación transversal y de vinculación. Y si te pregunto, ¿si ubicaste dónde o de qué manera se relacionan? sé que tu respuesta sería “todos tienen que ver con movimiento, con una acción motriz, ya sea de segmentos corporales grandes (como jugar un deporte); o segmentos cortos, (como jugar un juego de mesa), pero todos con un movimiento muscular que impacta de manera directa en nuestro bienestar físico y mental.

Comprendiendo los conceptos básicos, ahora veremos qué pasa en nuestro cuerpo si lo realizas de manera recurrente; recordando que recurrente me refiero no solo hacer la actividad una o dos veces por semana o 30 minutos al día, como se menciona; una persona puede realizar una o dos horas de ejercicio al día, pero si todas las demás horas se la pasa sentado o poco movimiento; esto no generarías mucho impacto positivo en nuestra salud, sería un sedentario que realiza dos horas de ejercicio. Es importante movernos más durante el día, lo recomendable sería aparte de tu rutina de ejercicios, que te movieras y completaras al día 10,000 pasos acumulables al día. Aclarado el punto ahora si veremos los beneficios que el movernos nos generaría: Masa muscular y huesos más fuertes: al realizar contracciones musculares, provocamos el incremento de fuerza, resistencia, elasticidad y claro en la mayoría de las veces el incremento de la masa muscular, esto a la vez nos genera que más rápidos se oxiden las grasas y sea utilizada esa energía para más contracciones musculares y evitar la acumulación de grasa en nuestra sangre y cuerpo. Provocando que los huesos se calcifiquen de manera controlada estando más fuertes evitando a temprana edad problemas de osteoporosis.

Duermes mejor (recuperación durante el descanso): en ocasiones pensamos que nuestros resultados los tenemos cuando estamos haciendo el ejercicio, sin embargo, no es así; nuestro cuerpo se recupera físicamente y obtienes esa ganancia cuando descansamos; si tienes un buen descanso, tus fibras muscularas son reparadas, los nutrientes son asimilados en el organismo, dejamos que las hormonas del crecimiento hagan su función; pero si hacemos todo lo contrario y no dormimos ni descansamos;, nuestro organismo no se recupera y es muy probable que lo lesiones y muchas de las veces esas lesiones son irreversibles.

Obesidad (control de tu peso): acompañada la actividad física y el ejercicio con una alimentación adecuada, previenes el riesgo de sufrir obesidad, recuerda que la cantidad de calorías que nuestro cuerpo consume debe de ser utilizada a través de los movimientos activos de nuestro cuerpo, para liberar esa energía de calor y evitar que nuestro cuerpo la almacene y provoque enfermedades.

Infartos (evita riesgos vasculares): como sabemos nuestro corazón es el musculo más importante de nuestro organismo, ya que es nuestro motor (coloquialmente dicho). Así como fortalecemos los bíceps, pectorales, piernas etc., cada que hacemos actividad física y ejercicios, nuestro corazón se hace mucho más fuerte, interna y externamente, generando más resistencia en cada latido, esto aumenta nuestras probabilidades de evitar la presión arterial, colesterol alto, enfermedad arterial coronaria, triglicéridos altos y por consecuencia evita los infartos a corto y largo plazo.

Diabetes tipo 2 (control de azúcar e insulina): las fibras musculares ocupan la energía de las calorías que consumimos de los alimentos, el azúcar contienen una alta cantidad de energía, es por eso que se utiliza de manera regular en nues- tro organismo, sin embargo en cantidades innecesarias en nuestro cuerpo, provoca una descompensación en los niveles de insulina que nuestro páncreas produce, provocando enfermedades metabólicas y claro diabetes tipo 2; es por eso que la actividad física y el ejercicio regula este inusual consumo de energía en nuestro cuerpo.

Alzhaimer (cerebro activo): la oxigenación cerebral y el pensamiento estratégico, es activado cada que tu cuerpo se mueve, nuestro cerebro recibe más cantidad de sangre, oxígeno y nutrientes, al mismo tiempo se mantiene atento y alerta a las ac- ciones que genera salir a realizar un deporte, ejercicios al aire libre, las actividades recreativas, se genera una gimnasia cerebral. Ansiedad y depresión (salud emocional): cada que hacemos ejercicio nuestro cuerpo produce sustancias químicas tanto en nuestro cerebro como en nuestros músculos, como las endorfinas, mejor identificadas como las hormonas de la felicidad, que nos provocan esa sensación de euforia, felicidad, paz, tranquilidad, etc., y otras de las más importantes que es la serotonina que es un neurotransmisor que nos regula el control de nuestras emociones y el estado de ánimo.

Reduce el riesgo de cáncer (colón, mama, uterino y de pulmón): cada vez existen más estudios que confirman que la actividad física recurrente, tiene un alto probabilidad de evitar y reducir el riesgo de sufrir algún tipo cáncer; esto porque nuestro organismo está en constante depuración de las toxinas que nuestro cuerpo adquiere o produce, gracias al movimiento y fortalecimiento de nuestro sistema inmunológico.

Accidentes por caídas (en adultos mayores): el tiempo no pasa de en balde (dice el dicho), cada que envejecemos nuestros músculos, huesos, neuronas, van disminuyendo su efectividad de reacción y claro en su fortaleza física y mental. De tal manera que cuando inicias o decides iniciar una vida más activa el riesgo de sufrir daños provocada por la vejez es mucho menor.

Elixir de la juventud: como ser humano siempre deseamos vivir más tiempo y desearíamos una pócima que nos dejara vivir más tiempo; pues ¿qué crees?, la pócima que estás buscando se llama “Moverme Más”.

Podríamos seguir hablando de más beneficios que el “movernos más” nos daría, sin embargo, no nos alcanzaría una sola publicación para hacerlo, sino toda una tesis de investigación, de cómo muchos literalmente fueron salvados por el hecho de ser más activos.

Como docente de educación física, en su momento deportista y ahora como un dependiente de la actividad física y el ejercicio; he tenido la fortuna de compartir experiencias de vida con niños de preescolar, primaria, secundaria, bachillerato, licenciatura, maestría, adultos mayores, con personas con discapacidad, etc.; y gracias a esta experiencia, puedo asegurarles y comprobarles que los beneficios antes mencionados por el hecho de “movernos más”; “NO” es lo único que genera un impacto positivo en nuestra salud integral.

Me refiero, que el ejercicio, la actividad física, la recreación, etc., debe de ir acompañada de la satisfacción de realizar estas actividades, puede ser por un objetivo de estética o por el hecho de ganar un torneo en al- gún deporte o demostrarte que eres más fuerte, resistente, veloz, flexible que los demás, si es por salud física, mental, social, etc. Siempre disfrútalo por ti y para ti; ahora que, si de plano “NO” te motiva nada hacer ejercicio, ni te genera ningún placer, pues ni modo, como le digo a mis hijos y alumnos, háganlo por necesidad y compromiso, verás que con el tiempo te llamará la atención, luego te va a gustar y al final te vas a enamorar y no podrás vivir sin él. “Movámonos más”.

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