SED DEUS

DISPONEIT”

QUO VADIS? Esta frase en latín significa ¿a dónde vas? Y es un expresión que me ha acompañado toda la vida, pues la escuché muy pequeño en el catecismo, en el pasaje donde Pedro huye de Roma, se encuentra a Cristo cargando la cruz y le pregunta “¿quo vadis Domine?” (¿A dónde vas Señor?) Y contesta: “regreso a que me crucifiquen nuevamente”. Pedro, quien huía, reflexionó, regresó y después fue crucificado de cabeza. Este pasaje me impactó pues él iba a un lado y terminó en otro a pesar de que sabía cuál era su destino.

En Semana Santa de 1953 volví a escuchar esta frase después de un hecho espantoso: el incendio del cine Encantado, ¡en donde se anunciaba precisamente la cinta Quo vadis!. Esta sala quedó reducida a cenizas en pocas horas. Dicho cine fue construído para perdurar muchos años, con columnas de mármol y al estilo art déco, figuras de Venus dorada a los lados, iluminadas con luz neón azul que les daba tonos verdosos a la usanza del arte griego Criselefantino, emulando a Atene cubierta con láminas de oro y de marfil en cara y brazos, bañada con aceite de oliva y refulgente como el oro bajo la luz del sol. Nadie se imaginó el destino siniestro del cine Encanto.

Nos preguntamos frecuentemente ¿a dónde voy? Voy al sur y termino en el norte. ¿Por qué les menciono esto? En 2014 mi vida tuvo un gran cambio. No estaba en mis planes ser director de la Facultad de Medicina, pero fuí llamado por el rector C.P. Enrique Carlos Etienne Pérez del Río para ser candidato a la dirección debido a que en ese año se pasaba por uno de sus peores momentos. Cuando me eligen, empezamos a trabajar con su misión y visión. La visión era tener la mejor Facultad de Medicina, aceptando únicamente a los mejores alumnos, maestros e instalaciones, además, que fuera reconocida internacionalmente, porque se dio inicio a los intercambios, así como a la movilidad académica (que no se había hecho anteriormente) yendo con nuestro rector a Estados Unidos para reforzar convenios con distintas ciudades de

Texas y Whastington, por nuestra parte a Colombia, al norte de España y a las Islas Canarias, quedando muy satisfechos con la visita y haciendo planes para intercambios y movilidad académica de los alumnos y docentes, terminando este recorrido por Santiago de Compostela, Vigo, Santander, Navarra, Barcelona y Tenerife, en los primeros días de diciembre del 2019.

En esas fechas, la etapa de la pandemia por COVID-19 se estaba conociendo en el mundo, dando inicio en el estado de Tamaulipas el 16 de marzo del 2020. Por lo que… ¿qué iba a pasar con nuestros proyectos, planes y sueños?

Nuevamente la frase ¿quo vadis? Fue un acontecimiento brusco, pues nuestros compañeros en Europa nos comentaron que se encontraban preocupados por esta enfermedad. Hicimos cambios de planes, empezamos el aislamiento en nuestro país. Hablamos con nuestro nuevo rector, el Ing. José Andrés Suárez Fernández, sobre la actualización en la modalidad en línea para clases y conferencias del COVID-19, durante el período febrero-marzo del 2020. La Facultad de Medicina tuvo la iniciativa de recomendar la suspensión laboral y las clases presenciales para cambiar completamente a modalidad en línea hasta nuevo aviso. Era un gran reto, pero se logró superar, ya que no se interrumpió la enseñanza y tuvimos una buena adaptación a dicha modalidad, sin suspender los congresos, pláticas y sesiones, simplemente se efectuaron de manera distinta.

Nuevamente, ¿quo vadis? Regresamos a clases presenciales con cambios normativos, nueva logística de entrada y salida, así como seguimiento de las medidas sanitarias contra COVID-19 en cada salón de clases. Hemos superado dichos obstáculos, sin embargo nos seguiremos preguntando: ¿quo vadis?