1 minute read

LA VIRTUALIDAD DRAMÁTICA EN TIEMPOS DE COVID

Por Alfredo Millan

twitter e instagram @millanfoto

Advertisement

Un virus que se aferra con toda su fuerza a no dejar de existir como lo ha hecho el teatro durante cientos de años, un virus que irrumpe el estado canónico de la representación con su máximo exponente que es el cuerpo ante las preguntas irruptivas. ¿Qué se hace con ese cuerpo? ¿Cómo adaptarlo a los distintos lenguajes? –Esta intervención artística a través de las plataformas digitales, lo llamaría, un lenguaje más audiovisual–, es una metamorfosis constante que obliga al hacedor del teatro al pensamiento analítico y reflexivo, es decir, el desarrollo expansivo de las ideas a través de la creatividad, el conocimiento heredado para encontrar un nuevo lenguaje en las plataformas digitales, con autocrítica y no posturas fundamentalistas o una patología narcisista.

Son las preguntas que se generan de la acción misma del hecho teatral ante lo digital y no solamente a un nivel de artes escénicas, también toca la preocupación de la pedagogía teatral en sociedad digital ante la pregunta de cómo se va enseñar las artes escénicas en los centros de formación cuando el artista futuro se forma en colectivo, además, las dificultades que lo digital puede representar a la distancia en un país con una tremenda desigualdad social; es importante replantear nuevos sentidos a través de la investigación, el artista es un investigador y su obligación es observar, es aprender algo para ser otros, esa es la tarea del teatro y del hacedor artístico. Reivindicar la relación con nuestro propio cuerpo y con el cuerpo del otro que es de suma importancia entendiendo el lenguaje digital como una virtud, si se sabe hacer, el cuerpo en ese espacio, pero con una intervención más seria y no el cuerpo en el lugar del entretenimiento.

Reivindicar la relación con nuestro propio cuerpo y con el cuerpo del otro que es de suma importancia entendiendo el lenguaje digital como una virtud, si se sabe hacer, el cuerpo en ese espacio, pero con una intervención más seria y no el cuerpo en el lugar del entretenimiento. ¿Cómo el cuerpo va intervenir ese lenguaje audiovisual?, ¿cómo encontrar esa respuesta del otro al momento de la acción? En la conciencia está no perder la realidad que se vive y a su vez cómo llevar la representación teatral a la plataforma digital.

This article is from: