Decálogo Ético. Una apuesta por la ética en la gestión de la comuna 3

Una apuesta por la 茅tica en la gesti贸n comunitaria de la comuna 3

Decálogo Ético Una apuesta por la ética en la gestión comunitaria de la Comuna 3 Coordinación Editorial Laura Rivera Ramírez Leider Restrepo Monsalve Natalia Mejía Escobar Corrección de estilo Jandey Marcel Solviyerte María Elena Durango R. Ilustraciones Andrés Sánchez López Diseño y diagramación Danilo García Giraldo Leider Restrepo Monsalve Asesoría Alcaldía de Medellín Diana Ortega Puerta Secretaría de Comunicaciones Medellín, Colombia Diciembre de 2012

Esta es una publicación de la Corporación para la comunicación social y comunitaria Corpomedios en asocio con la Corporación comunicación, cultura y desarrollo – Corpococullo, realizada con recursos del programa Planeación Local y Presupuesto Participativo, priorizados por habitantes de la comuna 3 Manrique, a través la comisión de Convivencia y Participación.

El contenido de esta cartilla podrá ser reproducido libremente con fines pedagógicos, informativos y educativos, siempre y cuando se cite la fuente.

Varios habitantes de Manrique, preocupados por su comunidad, además de líderes y lideresas, invitan a la población a reflexionar sobre la necesidad de contar con una ruta, con una carta de navegación que procure y consolide la buena atmósfera social, ya que continuamente se siguen viendo casos de corrupción y liderazgos negativos que impiden el desarrollo positivo de la comuna.

Es, entonces, desde esta necesidad que la Fundación Sumapaz en asocio con líderes sociales y algunos ciudadanos de la Comuna 3 Manrique construye el Decálogo Ético, el cual también pretende que las acciones que contribuyen al desarrollo del territorio sean buenas prácticas que potencien el espíritu ciudadano de toda persona que hace parte de un proceso comunal.

Este Decálogo Ético más que un manual del “deber ser” de los líderes y lideresas es un conjunto de acuerdos comunitarios que potencializan y promueven, a través de la acción y la reflexión, el desarrollo de la comunidad. Así, puede considerarse al Decálogo Ético como un orientador de la conducta de quienes trabajan en procesos comunitarios en el territorio de la comuna 3 Manrique. ¿Cómo promover su interiorización entre las personas que no conocen el proceso de construcción del Decálogo? A esta pregunta da respuesta la comisión de Convivencia y Participación de Presupuesto Participativo, la cual, considerando la importancia de que reconozcan y se apropien del Decálogo Ético quienes hacen parte de la comuna, prioriza los recursos para promover esta guía.

Hacer de “Manrique la comuna deseada”, proyecto planteado en el Plan de Desarrollo Local 2006-2016, es una tarea de todos los que habitan el territorio de la comuna 3, de la comunidad toda y de los líderes y lideresas sociales y comunitarios. Esta cartilla invita a reflexionar, especialmente, sobre acciones que determinan el buen vivir y sobre el papel que se asume frente a ellas.

PRESENTACIÓN

DEL DICHO AL HECHO HAY MUCHO TRECHO

Contenido ¿Qué es el Decálogo Ético?

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¿Quién es un líder?

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¿Qué es la gestión comunitaria?

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¿Qué es la ética ciudadana?

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¿Cómo participa un ciudadano?

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El Decálogo Ético

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¡Casos se han visto!

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¿Qué es el Decálogo Ético?

Para reflexionar ¿Hay que estar relacionado con un líder

para ver qué contrato da?

¿El dinero de los contratos de la Junta va a dar a los bolsillos de un líder? ¿Qué hace la comunidad? ¿Qué hacen los otros líderes? ¿Las juntas comunales se privatizaron? ¿Entonces, porque el líder social del barrio tiene privilegios? ¿Si se reciben beneficios no se denuncian ciertos actos de corrupción?

“Ser líder no implica tener el mando y tener el mando no implica ser líder”.

Un gran número de instituciones y comunidades, con la participación de varios de sus integrantes, formulan y plantean en un documento las normas que fijan el comportamiento de las personas en su interior.

Generalmente, allí se estipulan cuáles son las conductas correctas desde un punto de vista moral, y su principal objetivo suele ser mantener una línea de comportamiento institucional entre todos los miembros de una determinada organización.

En el Decálogo Ético, creado en la Comuna 3 Manrique en 2011, se establecen líneas y orientaciones de conducta y de acción que deben seguir todo líder o lideresa, independientemente de su cargo o función, en todas las actividades o procesos comunitarios en los que tenga relación.

¿Quién es un líder?

En el Decálogo Ético se define como líder o lideresa social a todas aquellas personas con cualidades especiales, que son aceptadas voluntariamente como actores sociales, por un grupo de individuos a los cuales guían y orientan en la realización de diversas actividades encaminadas a mejorar sus condiciones de vida y a propiciar el desarrollo comunitario.

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FUNCIÓN DEL LÍDER La principal función de un líder o lideresa es “poner en movimiento e incitar a la acción”, ya que tiene la habilidad especial de identificar con mayor facilidad las necesidades de su grupo, de encontrar caminos efectivos para satisfacerlas y de orientar a los demás integrantes durante todo este proceso.

El liderazgo posee unos componentes que actúan de modo interactivo y permiten que en determinado momento cualquier persona pueda ser líder de un grupo. Estos componentes son las habilidades y conocimientos del líder, las características del grupo y el contexto de la situación actual en la que está inmerso.

¿Qué es la gestión comunitaria?

Facilita la capacidad de liderar el…

Conseguir el apoyo de los demás sin necesidad de dar órdenes Fomentar la colaboración y el compromiso antes que la obediencia Dar ejemplo y convertirse en un modelo a seguir Incentivar la creatividad y la innovación.

Visualizar el futuro

La gestión comunitaria es la capacidad de movilizar recursos de manera eficiente y eficaz. Implica la búsqueda de cambios significativos en la calidad de vida de los habitantes de un territorio, mediante la aplicación de técnicas, principios y prácticas, y de la construcción de relaciones sociales sólidas.

¿Qué es la ética ciudadana?

La ética ciudadana busca la convivencia entre los individuos de una sociedad. Define unas pautas mínimas que permiten el desarrollo tanto de las individualidades como de los proyectos colectivos.

Mediante el diálogo, la solidaridad, la responsabilidad y el respeto, la ética ciudadana propicia también el reconocimiento de la igualdad y de la diferencia entre los seres humanos.

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Efectividad: Alcanzar los objetivos haciendo un uso adecuado de los recursos Efectividad = Eficiencia + Eficiencia Eficacia: Logro de los objetivos propuestos Eficiencia: Adecuada utilización de los recursos

¿Cómo participa un ciudadano?

La Ley 850 de 2003 define como Veeduría Ciudadana al “mecanismo democrático de representación que le permite a los ciudadanos (…), ejercer vigilancia sobre la gestión pública, respecto a las autoridades, <sic> administrativas, políticas, judiciales (…), así como de las entidades públicas o privadas (…), encargadas de la ejecución de un programa, proyecto, contrato o de la prestación de un servicio público”.

Ejercer la ciudadanía implica disfrutar de los derechos y cumplir con los deberes. Requerir el cumplimiento de los principios éticos por parte de los líderes y lideresas es un derecho y un deber de todos los ciudadanos. ¿Cómo participa un ciudadano?

Ejercer la ciudadanía implica disfrutar de los derechos y cumplir con los deberes. Requerir el cumplimiento de los principios éticos por parte de los líderes y lideresas es un derecho y un deber de todos los ciudadanos.

La Ley 850 de 2003, mediante la cual se reglamentan las veedurías ciudadanas, otorga a la ciudadanía plena atribución para ejercer vigilancia en todas las actuaciones de sus representantes, incluidos los líderes y lideresas sociales.

Ejercer este derecho y deber contribuye a consolidar la transparencia y la credibilidad mutua, enriqueciendo la democracia y las organizaciones sociales.

Un buen ciudadano participa activamente de la vida comunitaria, se vincula a organismos sociales, asiste a jornadas de rendición de cuentas, se involucra en la toma de decisiones, participa en las actividades que se desarrollan en su barrio, denuncia y repudia cualquier acto de corrupción, contribuye a buscar y dar soluciones a los problemas de su comunidad y vela por la buena administración de los recursos públicos.

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El Decálogo Ético Un asunto de corresponsabilidad Los líderes y lideresas tienen una gran responsabilidad con la comunidad a la que representan. Tienen a su cargo la ejecución de diversas actividades y proyectos, la administración de recursos públicos, la planeación de estrategias que conlleven a la mejora de la calidad de vida de sus conciudadanos, entre otras.

La veeduría ciudadana y el seguimiento de los procesos comunales por parte de la comunidad son fundamentales en cualquier proceso de desarrollo comunitario.

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El Decálogo Ético de la Comuna 3 define que estas actuaciones tienen que ser caracterizadas por la probidad, la transparencia y por una conducta ética, para permitir que los recursos económicos y humanos con los que cuenta la comunidad sean empleados con la máxima racionalidad y efectividad, de tal manera que se cumplan los objetivos sociales para los que fueron utilizados.

No obstante, el cumplimiento de estas obligaciones y el logro de metas comunes es un asunto de corresponsabilidad entre los líderes y los ciudadanos. No es un deber únicamente de los líderes y lideresas trabajar por el desarrollo comunitario bajo principios éticos, sino que todos los que habitan la comuna son responsables.

CAPÍTULO I Artículo 1. Finalidad.

El presente Decálogo Ético tiene por objeto establecer líneas y orientaciones de conducta y de acción que deben observar todo aquel líder o lideresa social que anime procesos comunitarios, bajo cualquier modalidad, en el territorio de la comuna 3 - Manrique.

Artículo 2. Alcances.

El presente Decálogo Ético guía la conducta de los líderes y lideresas sociales de la comuna 3 - Manrique en sus actividades comunitarias y en las del carácter de su mandato organizativo, con ocasión del ejercicio de su función, cualquiera sea la denominación del cargo o jerarquía que ostente dentro o fuera de su organización.

Artículo 3. Concepto de Líder y Lideresa Social – Comunitario.

Es la persona que dirige, que tiene condiciones para hacerlo y cuya jefatura es aceptada voluntariamente por sus seguidores. Es quien guía y orienta la integración de individuos, quienes por tener intereses comunes se unen para realizar y coordinar sus actividades.

Es el individuo que toma la dirección en el grupo o comunidad, posee la habilidad de captar lo que sus compañeros y la comunidad piensan y desean, descubre la manera de satisfacer sus aspiraciones con mayor perfección y rapidez que otros, comprende lo que una situación dada exige del grupo a que pertenece, y mejor que otros sabe comprender la tarea y convencer a los demás para que se integren a realizar su parte. Su función es poner en movimiento, incitar a la acción.

Los líderes emergen en un grupo porque las cualidades personales les confieren una eficacia social y los hacen ser aceptados como actores sociales adecuados que permiten el crecimiento del grupo y el desarrollo de la comunidad (Diccionario de Trabajo Social, 2002).

Artículo 4. Concepto de Gestión Comunitaria.

Capacidad de movilizar recursos de manera eficiente y eficaz, así como de construir relaciones sociales, ganar capacidad de inducir y producir cambios, buscando una mayor racionalidad de la inversión social a escala local y mejorando la calidad de vida de sus habitantes y no el lucro personal. También puede ser entendida como el conjunto integrado de principios, prácticas y técnicas que permiten, mediante su aplicación, producir cambios significativos en la población del territorio, mediante el uso efectivo y racional de recursos.

Artículo 5. Concepto de Ética Ciudadana.

La ética civil, cívica o ciudadana busca la convivencia entre los seres humanos, en una sociedad moralmente pluralista, mediante la

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definición de unos principios éticos que permitan el desarrollo de las individualidades y de los proyectos colectivos, a través del diálogo, la responsabilidad, la solidaridad, el respeto activo, el reconocimiento de la igualdad y de la diferencia entre los seres humanos.

Artículo 6. Principios Éticos.

El respeto a la dignidad humana por encima de todas las cosas, la honradez, solidaridad, modestia, verdad, prudencia, la responsabilidad y el deber, la lealtad, la libertad, la justicia, la igualdad y la templanza.

CAPÍTULO II Valores Éticos del Líder y Lideresa Comunitario de la comuna 3 Manrique.

Artículo 7. Generalidades de los Consejos Éticos.

Los líderes y lideresas sociales y comunitarios de la Comuna 3 Manrique, interiorizarán los consejos éticos y acatarán sus recomendaciones.

Por esto, la comunidad y sus líderes y lideresas han instaurado los siguientes deberes: • Deber de probidad: Actuar con honradez, tanto en ejercicio de su cargo como en el uso de los recursos de las organizaciones que le son confiados por razón de su labor. Repudiar, combatir y denunciar toda forma de corrupción.

• Deber de responsabilidad: Es deber de toda persona que maneja bienes o dinero público, o que ha recibido la encomienda de realizar cualquier tarea por parte de otros, de responder sobre la forma en que cumple sus obligaciones, incluida la información suficiente sobre la administración de los fondos y bienes.

• Deber de imparcialidad: Deber de actuar con legalidad, justicia e imparcialidad, tanto en sus relaciones como líder o como persona habitante del territorio, sin tratar con privilegio o discriminación, en cuanto a la forma y condiciones del servicio, a persona jurídica alguna o a persona natural, sea cual fuera su condición económica, social, ideológica, política, sexual, racial, religiosa o de cualquier otra naturaleza.

• Deber de integridad: conducirse en el desarrollo de sus funciones con honradez, rectitud, dignidad y decoro, poniendo en la ejecución de sus labores toda su capacidad, conocimiento y experiencia en procesos comunitarios e institucionales. En cualquier circunstancia deberá actuar de tal forma que su conducta genere y fortalezca la confianza de la colectividad organizada o no.

• Deber de conocer las leyes y reglamentos: Emitir juicios veraces y objetivos sobre asuntos inherentes a su papel, evitando la influencia de criterios subjetivos o de terceros. Debe hacer caso omiso de

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rumores anónimos y en general de toda fuente de desinformación que afecte a la honra, al servicio o a la toma de decisiones.

• Deber de dignidad y respeto: Ser justo, cuidadoso, respetuoso, amable, culto y considerado en su relación con las personas que representa, los habitantes del territorio y con sus compañeros (as).

Debe comprender que su condición de líder y lideresa implica asumir una delicada responsabilidad ciudadana que le encarga la institución comunitaria y poblacional para el servicio de la colectividad.

• Deber de respetabilidad: El derecho a la dignidad, a la honra, al buen nombre, a la buena reputación y a la intimidad personal y familiar. Así como el deber de respetar esos derechos en los demás.

• Deber de armonía: Promover un clima de armonía, proyectar siempre una imagen positiva de los otros compañeros líderes comunitarios y contribuir a la cultura organizacional.

• Deber de superación: Promover la autoestima, reconociendo su valor como ser humano y como líder y lideresa comunitaria, procurando la superación personal y profesional, que le permita incrementar sus conocimientos, experiencias y solidez moral.

• Deber de creatividad: Hacer parte de las soluciones usando responsablemente los recursos para plantear alternativas que permitan superar los obstáculos que surjan en el desempeño de la actividad comunitaria y social.

• Deber de actuar con transparencia y evitar conflictos de intereses: El líder y lideresa social y comunitario debe actuar en todo momento con absoluta transparencia y abstenerse de participar en cualquier proceso administrativo decisorio, incluso en su fase previa de consultas e informes. De igual forma, deberá abstenerse de participar en el proceso decisorio cuando esa vinculación exista respecto a su cónyuge, hermano, ascendiente o descendiente hasta el segundo grado de consanguinidad o afinidad inclusive o de un socio o persona jurídica.

CAPÍTULO III Impedimentos éticos Artículo 8. Generalidades.

Sin perjuicios de las prohibiciones de orden jurídico, que para casos particulares se establezcan en las leyes y reglamentos, rigen para todos los líderes y lideresas de la comuna 3 - Manrique, los impedimentos de orden ético y moral contenidas en este capítulo.

• En el ejercicio del liderazgo: Usar el poder derivado del cargo y papel de liderazgos social y comunitario o la influencia que surja del mismo, para conferir o procurar servicios especiales, nombramientos o cualquier otro beneficio personal que implique un privilegio a favor suyo, de sus familiares o de cualquier otra persona.

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• Emitir o apoyar normas o resoluciones en su propio beneficio.

• Usar el reconocimiento y potestad que le da la investidura de líder o lideresa social y comunitaria para utilizar equipos de oficina, papelería o el prestigio de su cargo para asuntos de carácter personal o privado.

• Participar en negociaciones o transacciones financieras utilizando información que no es pública o permitiendo el mal uso de esa información, para posteriormente lograr beneficios privados.

• Aceptar o solicitar regalos de cualquier valor monetario de los usuarios o contratistas con ocasión de la prestación de los servicios institucionales y comunitarios.

• Recibir directa o indirectamente beneficios originados en contratos o concesiones que celebre u otorgue la institución pública o privada.

• Solicitar o aceptar, directamente o a través de terceros, regalos, donaciones, favores, propinas o beneficios de cualquier tipo y de personas que busquen acciones de carácter oficial en virtud del beneficio concedido, lo que se presumirá cuando el beneficio se dé en razón del cargo que se desempeña.

Artículo 9. De los bienes comunitarios.

• Utilizar las instalaciones físicas comunitarias para fines distintos a los cuales fueron destinados.

• Utilizar el equipo de oficina y demás bienes de trabajo para asuntos distintos del propósito a que fueron destinados.

CAPÍTULO

IV

De la participación Artículo 10. De la participación.

Es un derecho y un deber de los ciudadanos requerir el cumplimiento de los principios éticos en la conducta de actuación de los líderes y lideresas de la comuna 3 - Manrique, a fin de consolidar una mutua credibilidad y transparencia que enriquezca la democracia y contribuya al desarrollo de la organización social institucional. La ciudadanía tiene plena atribución constitucional y legal para ejercer la vigilancia en las actuaciones de sus representantes.

De la divulgación.

Para lograr este objetivo se realizarán periódicamente actividades como seminarios, talleres, charlas, conferencias y cualquier recurso didáctico que sea posible para el mejoramiento de las prácticas de los líderes y lideresas sociales, además de difundir este Decálogo Ético como orientador de la conciencia social de los y las habitantes de la comuna 3 - Manrique.

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¡Casos se han visto!

Un viernes en la mañana… ¡Yo! Yo soy Justo Buendía, yo antes tenía un ranchito pero con platica de PP lo he ido mejorando.

Deber de probidad.

Actuar con honradez, tanto en ejercicio de su cargo como en el uso de los recursos de las organizaciones.

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Todo esto es gracias a la gente del barrio que no pregunta en que se va la plata de los proyectos, o si preguntan, uno no más les echa un poquito de carreta y listo.

¡Yo sí agradezco que a la gente se le olvide que esto de la política somos todos! ¡Yo sí les agradezco mucho que me sigan eligiendo!

Deber de responsabilidad.

Responder sobre la forma en la que cumple sus obligaciones, incluida la información suficiente sobre la administración de los fondos y bienes.

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Ese mismo viernes en la tarde…

A mí gracias a Dios no me falta nada, ni a mi familia tampoco.

- Que el computador pa´l muchacho.

- Que la platica pa´ la peluquería de la mujer.

- Que una cosa y la otra.

- Eso todo sale de aquí.

Impedimento ético.

Usar el reconocimiento y potestad que le da la investidura de líder o lideresa social para utilizar equipos de oficina, papelería o el prestigio de su cargo para asuntos de carácter personal o privado.

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Ese viernes en la oficina del salón comunal…

Don Justo se encuentra sentado mirando las fotos de varias jóvenes, entre las cuales elegirá a quien otorgarle la beca para estudiar en la universidad.

uy m uy es m ta a y da s E nit ri e bo qu

no e dar u q ta uiso . s E q da e a m n

te es que , a o, No n n ... a va m

Deber de imparcialidad.

Actuar con legalidad, justicia e imparcialidad (…) sin tratar con privilegio o discriminación.

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Más tarde...

Don Justo está reunido con otros tres líderes para tomar decisiones logísticas sobre el Consejo Comunal que se realizará en pocos días.

¿Entonces quién va a hacer la comida pa´l consejo?

Ya habíamos dicho que doña María.

¡Doña María, no!

Ella con esas hijas que tiene. ¿No supieron que la una dejó al marido pa´ irse con otro y que la otra está de fufurufa?

Yo creo que mejor le decimos a Martica, mi hermanita. Es que ya casi no hay tiempo y ella cocina muy bueno.

Deber de conocer las leyes y reglamentos.

Hacer caso omiso de rumores anónimos y en general de toda fuente de desinformación que afecte la honra, al servicio o la toma de decisiones.

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Al otro día, en la noche…

Impedimento ético.

Usar el poder derivado del cargo y papel de liderazgo social (…) para conferir o procurar servicios especiales, nombramientos o cualquier otro beneficio personal que implique un privilegio a favor suyo, de sus familiares o de cualquier otra persona.

Impedimento ético.

Fiesta de quince años de la sobrina de don Justo, la hija de Martica.

Utilizar las instalaciones físicas comunitarias para fines distintos a los cuales fueron destinados.

Martica: ¡Ay, Justo! Gracias por prestarnos el salón comunal. Eso nos ahorró una platica.

Justo Buendía: Lo que sea pa´ la familia. ¡Ve! Te conseguí ese contrato pa´que hagás la comida pa´l Consejo Comunal.

Martica: ¡Vos siempre tan querido! ¿Y que yo sea tu hermana no es problema?

Justo Buendía: ¡Nah, vos creés! A la gente no le importa uno a quien contrate, no más le importa que la comida esté buena.

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La misma noche...

Don justo, muy borracho y gritando a todos los que se encuentran en la fiesta.

Eso nadie se da cuenta, la gente se queja y se queja pero nadie hace nada.

A todos los que están aquí les voy a dar un subsidio.

¡Se lo merecen por aguantar la fiesta toda la noche!

No es el líder quien debe decidir qué debe hacer el grupo, es un deber de todos los miembros el asumir la responsabilidad de las tareas que deben realizar, guiados siempre por un principio de cooperación igualitaria. (Ayestarán, 2002).

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