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No importa cuántas veces regresemos, Japón es un universo que siempre nos fascina y nos inspira. Ésta es una invitación para descubrir y enamorarse de un país donde la hipermodernidad convive con la tradición.
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Número 197 travesiasdigital.com
Contenido
Japón MÉ XICO $50
No importa cuántas veces regresemos, Japón es un universo que siempre nos fascina y nos llena de inspiración. Ésta es una invitación para descubrir y enamorarse de un país donde la hipermodernidad convive con la tradición.
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Japón NÚMERO 197
Número 197 travesiasdigital.com
En Portada Sakura Foto Angela Suarez
Yakushima Lo último que uno esperaba encontrar en Japón: playas de arena blanca y bosques tropicales.
66
Japón
Travesías Número 197 Junio 2019
Gastronomía Un recorrido gastronómico por Tokio y Kioto de la mano de una experta chef.
80
Japón 101 Todo lo que necesitas saber antes de comprar ese anhelado boleto de avión.
52
Portafolio Angela Suarez: Tokio y Kioto.
134
BIENVENIDA A BORDO:
CIUDAD DE MÉXICO La aerolínea que vuela a más países que el resto ahora te lleva a un nuevo destino
MÉXICO As of 22 August 2019 st
Contenido
Hoteles Siete opciones de alojamiento para todo tipo de viajeros (y de presupuestos).
24
Estación de Shinjuku Perderse en el centro de transporte más activo y transitado del mundo.
46
Omotenashi The Peninsula Tokyo: 314 habitaciones, servicio impecable y más de mil obras de arte.
28 Capital Contemporánea Galerías tokiotas que reflejan el vibrante momento cultural que se vive en el país.
30 Tokio 2020 Cómo se prepara la ciudad para recibir a los Juegos Olímpicos más esperados en la historia.
48 Expertos Entre jardines, tiendas y museos, cuatro insiders nos comparten sus lugares favoritos.
Odawara
50
Visitamos uno de los espacios de arte contemporáneo y arquitectura más espectaculares de Japón.
32 48 horas Una ruta por Osaka, la capital gastronómica del país donde el carácter nipón se sale del molde.
Atelier
36 Kamakura Cinco paradas obligadas en la ciudad costera de los templos y santuarios.
40 Bares en Tokio Desde un local miniatura en Golden Gai hasta una elegante propuesta en un edificio de Ginza.
42
Recuerdos de nuestros viajes por Japón.
99
Editorial
Hoy nuestros lectores tienen en sus manos un número de Travesías muy especial porque explora un destino que nos ha fascinado desde siempre —y al que soñábamos desde hace tiempo poder dedicarle un número completo—. Estas páginas son mucho más que una guía de viaje: son un pequeño homenaje a un país que nos ha descubierto cientos de maneras distintas de entender y mirar el mundo. Para empezar, y pensando en que para muchos aún es un destino desconocido, preparamos un artículo que pone en perspectiva la experiencia de viajar a Japón, con la intención de convencer a los indecisos de hacerse de un boleto e irse a descubrir esta maravillosa isla del otro lado del Pacífico. Se trata de un material práctico que esperamos funcione a manera de guía, con la finalidad de hacer más sencilla la planeación y el viaje. Siguiendo otro camino que no tiene pierde, invitamos a Brenda Legorreta a compartir con nosotros su aventura gastronómica por Tokio y Kioto en compañía de la chef Adriana Lerma, quien se encargó de que el desayuno, la comida y la cena fueran siempre experiencias para recordar. Desde un sencillo bowl de ramen hasta una cena de shabu-shabu, esta crónica está llena de sabores y estampas muy japonesas. Para salirnos de las rutas más conocidas, Debbie Pappyn y David De Vleeschauwer nos llevan a descubrir el sur tropical japonés: Yakushima, una isla en la prefectura de Kagoshima donde las playas tienen arena blanca y el interior ofrece una exuberante naturaleza. El Japón tradicional de los ryokanes y los onsen se combina con unos paisajes y un ritmo tranquilo que nada tienen que ver con el resto del país. Hay también historias sobre Osaka —la ciudad más alocada—, de Kamakura y su gigantesco buda, y rutas que recogen desde los mejores hoteles hasta las galerías y las tiendas que no hay que perderse. Y aun así, nos faltó mucho por contar, pero teníamos que comenzar por algún lado. Así que aquí les dejamos esta edición nipona que, sospechamos, no será la última.
María Pellicer Editora invita da
+1 646 375 08 07 | AUDEMARSPIGUET.COM | FOTOGRAFÍA CON INFRARROJOS
TO BREAK THE RULES, YOU MUST FIRST MASTER THEM.
Colaboradores
Alison Bradley Corredora de arte privada y curadora Especializada en arte japonés de la posguerra y la historia de la fotografía en general, Alison Bradley trabaja con clientes privados e instituciones públicas para adquirir piezas que conformen colecciones notables. Con más de dos décadas de experiencia en el ámbito artístico neoyorquino, ha sido curadora de múltiples exposiciones, colaboradora en publicaciones de artistas y encargada de brindar asesoría corporativa en Estados Unidos y Japón.
Angela Suarez Fotógrafa Angela es una fotógrafa y escritora española basada en la Ciudad de México. Fascinada por las culturas foráneas y por las personas y lugares fuera de lo común, siempre intenta comunicar una visión narrativa que se enfoca en los detalles personales, los momentos espontáneos y las pequeñas historias (todo con un sutil sentido del humor). Más de su trabajo en Instagram: @suarezangela.
Brenda Legorreta Escritora Brenda nació en la Ciudad de México y es maestra en Letras Modernas Inglesas por la unam. Fue coordinadora editorial en la revista Cine Premiere y ha publicado en medios como Travesías, Esquire Latinoamérica y National Geographic Traveler. En 2016 publicó la trilogía de cuentos de literatura infantil titulada Ivo, con editorial Uranito. Actualmente trabaja como Content Strategist para Travesías Media.
Debbie Pappyn y David De Vleeschauwer Periodista y fotógrafo Debbie y David son la pareja perfecta: ella escribe, él toma las fotos. Debbie supo que quería dedicarse a viajar desde la primera vez que se subió a un avión. David dice que sus momentos fotográficos favoritos han sido Corea del Norte, los luchadores de sumo en Tokio y los gorilas en el Congo. Colaboran con medios como Monocle, The Telegraph y National Geographic. Puedes seguirles el paso en Instagram: @classetouriste.
Directorio Editora invitada María Pellicer maria@travesiasmedia.com Editora para América Latina Leila Guerriero leila@travesiasmedia.com Editor Gráfico Ángel Gómez angel@travesiasmedia.com Editora Web Viviana Cohen viviana@travesiasmedia.com Coeditora Web Karen Martínez karen@travesiasmedia.com Coordinadora de Fotografía Rita Trejo rita@travesiasmedia.com Coordinadora Editorial Mariana Castro mcastro@travesiasmedia.com
Presidente Javier Arredondo Director General Antonio García Directora de Comunicación y Alianzas Creativas Luz Arredondo Director de Finanzas Juan Martín Osorio Directora Editorial Viajes María Pellicer Director Creativo Rigoberto de la Rocha Director de Fotografía Diego Berruecos Director de Plataformas Digitales Enrique Rocha
Gerente de Circulación Alejandro González Peña
Redacción Diego Parás dparas@travesiasmedia.com
Retoque Digital Armando Ortega
Coordinadora de Proyectos Especiales Evan Upchurch
Producción Oswaldo Rodríguez
Corrección de Estilo Paula Bouchot
Auxiliar de Circulación Eduardo Sánchez, Jorge Iván Díaz
Redactora web Paola Gerez Levy
Coordinadora de Marketing y RP Teresa Cristo
Becarios web Diego Ávila Frida Méndez Ortiz
Coordinadora de Alianzas e Intercambios Imelda Fuentes Asistente de la Dirección General María del Carmen García Anaya
Director de Nuevos Negocios Diego Sánchez dsanchez@travesiasmedia.com Directora Comercial Mar ía del Carmen Gómez-Palacio maricarmen@travesiasmedia.com Gerente Comercial Roberto Avelar roberto@travesiasmedia.com
Sistemas Joaquín Téllez Auxiliares en Contabilidad Claudia Reyes, Mónica Reyes, Rafael Montaño Auxiliares de Oficina Erika Arellano, Julio Lara, Arturo Ramírez, Alejandro López, Juan Gabriel Campos, José Luis Cortés, Valentina Guardado, Alberto López.
Gerente Comercial en Estados Unidos Lisa Turner lisaturner@lmtmedia.com Asistente de la Dirección Comercial Marcela Flores marcela@travesiasmedia.com
Travesías Número 197 Junio 2019 Los artículos, la publicidad pagada y los anuncios son responsabilidad exclusiva de sus autores o representantes legales y no necesariamente reflejan las opiniones y juicios de Travesías Media.
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Colaboradores en este número
Adriana Lerma “Miwi” › México Alejandro Paredes › México Alison Bradley › Estados Unidos Ana María Maldonado › México Angela Suarez › México Brenda Legorreta › México Carolina Peralta › México David De Vleeschauwer › Bélgica Debbie Pappyn › Bélgica Françoise Lavertu › Canadá/México Irene Arredondo › México Juan Felipe Botero › Japón Mario García Torres › México
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Distribución Nacional Ibermex Ibermex Distribuidora, S.A. de C.V. T. 5347 1165 y 5347 1151 Alfesa Alfesa Comercializadora y Logística S.A. de C.V. T. 6840 7791 y 5319 3020 Preprensa e Impresión Litoprocess Impresos San Francisco 102-A, col. Naucalpan, 53569, Estado de México Una publicación de Travesías Editores, S.A. de C.V. Amatlán 33, col. Condesa, 06140, Ciudad de México. T. 01 800 509 8933, 5211 4000 y 5211 0665 Todos los derechos de reproducción de los textos publicados son propiedad de Travesías Editores, S.A. de C.V. Número de reserva al título en derecho de autor: 04-2012-101710132400-102. Número de certificado de licitud de contenido: 8318 Número de certificado de licitud de título: 11758 ISSN 971665033009
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Compass Japón
令和 Reiwa: hermosa armonía
Este es el nombre de la nueva época que dio inicio en Japón el primero de mayo de 2019, cuando el emperador Akihito abdicó en favor de su hijo Naruhito. La nueva era comienza con muchas expectativas: falta poco más de un año para los Juegos Olímpicos de Tokio y el turismo continúa en constante crecimiento. Desde el año 2000, cuando apenas poco más de cuatro millones y medio de viajeros llegaban hasta la isla, la cifra se ha multiplicado por más de seis, con más de 31 millones de visitantes registrados en 2018. Desde México, 68 448 viajeros llegaron el año pasado y, aunque es un mercado menor, la cifra se mantiene en constante crecimiento.
¡Oyasumi! / ¡Buenas noches!
24 Dime qué buscas y te diré dónde dormir
Recopilamos siete opciones de alojamiento en distintos rincones del país —para todo tipo de viajeros y presupuestos— que garantizan un servicio inmejorable y, sobre todo, una habitación muy cómoda para recuperar la energía.
CLÁSICO Wanosato Takayama A la hora de elegir hospedaje en Japón no hay nada más clásico que un ryokan, un hotel tradicional donde el foco está en la experiencia de relajación completa. Uno no va a un ryokan sólo a dormir, se va a comer, a bañarse en las aguas termales, a admirar el paisaje y la naturaleza. Wanosato es el lugar ideal para eso. Ubicado muy cerca de Takayama, un encantador pueblito que parece como dormido en otro tiempo, aquí uno puede vivir la experiencia completa: cena kaiseki —la alta cocina japonesa, muy
Desde la izquierda: Hakone Retreat Fore, Four Seasons Kyoto y Wanosato.
elaborada y siempre presentada de manera impecable—, baño en un onsen —baños comunales con aguas termales— y noche en futón, sobre un tatami. Lo más japonés de la experiencia llega con el desayuno, una charola llena de platitos de colores y probaditas de pequeños manjares (incluido algo de pescado, aunque sean las siete de la mañana). CONTEMPORÁNEO Hakone Retreat Fore Hakone Aunque los viajeros suelen buscar opciones retro, muchos japoneses prefieren espacios
cortesía hakone retreat fore, four seasons y wanosato.
25
más modernos y de diseño. Hakone Retreat Fore es, justamente, una mezcla entre lo más clásico de un hotel japonés, pero en un espacio cuyo diseño tiene una clara influencia nórdica contemporánea. Pasillos blanquísimos, pisos de madera y un delicado y sencillo interiorismo que privilegia la ausencia de color para hacer de la
naturaleza que rodea a la propiedad el foco principal. Aunque hay turistas extranjeros, la mayoría de los huéspedes son japoneses que vienen a pasar el fin de semana. El desayuno, para tranquilidad de los menos aventureros, es un exquisito buffet europeo con pan recién horneado, huevos y cientos de mermeladas hechas en casa.
Estos hoteles garantizan un servicio inmejorable y una habitación muy cómoda para recuperar la energía.
SUPERLUJO Four Seasons Kyoto Kioto Hoteles de lujo en Japón hay muchos —y todos suelen ser espectaculares—. Four Seasons fue uno de los últimos en llegar a Kioto, donde la competencia es especialmente dura, pero su combinación de lujo, modernidad y lo más clásico del diseño japonés ha probado ser un éxito. El corazón del hotel es un estanque con más de 800 años, al igual que el jardín que crece a su alrededor. Las habitaciones y los espacios comunes miran a este apacible rincón que transporta a los huéspedes a otra época. Su ubicación, lejos de las zonas más turísticas de Gion y Pontocho, es bastante tranquila; se puede caminar al Museo Nacional de Kioto y a Sanjūsangen-dō, el templo de las 1001 esculturas. LA MEJOR UBICACIÓN Ritz-Carlton Tokyo Roppongi, Tokio ¿Quién pudiera vivir en Roppongi Hills? A un paso de Aoyama y Omotesando, cerca de Shibuya y de Nakameguro, Roppongi es ese barrio con el que todos soñamos, y no hay en toda la zona ningún edificio como Midtown Tokyo, uno de los desarrollos de usos mixtos más famosos de la ciudad. El complejo presume dos museos —Suntury Museum of Art, diseñado por Kengo Kuma, y 21_21, creación de Tadao Andō—, un centro comercial, supermercado, área de comida y cuatro hectáreas de jardines donde todo el año se organizan eventos al aire libre. El Ritz-Carlton ocupa los últimos nueve pisos de la torre. El hotel ofrece un superservicio, un restaurante de especialidades japonesas, Hinokizaka —dividido en áreas de tepanyaki, sushi, tempura y kaiseki— y la gran ventaja de tener toda la vida nocturna y gastronómica de Roppongi literalmente en la puerta.
26
Dime qué buscas y te diré dónde dormir
Derecha: OMO5 combina diseño y calidad. Abajo: Imano Tokyo Ginza Hostel, una gran opción para presupuestos limitados.
ON A BUDGET Imano Tokyo Ginza Hostel Ginza, Tokio Si el presupuesto es limitado no hay de qué preocuparse, ya que este hostal, ubicado muy cerca del distrito financiero, ofrece habitaciones privadas (con baño propio), muy limpias y bien mantenidas. Eso sí, son muy pequeñitas y de estilo japonés, lo que significa que hay que quitarse los zapatos antes de subir un pequeño escalón que separa la entrada del área de tatami. Hay espacio para el futón, una pequeña tele y poco más. En las áreas comunes hay mesas colectivas para sentarse a comer algo o a revisar correos. También hay lavadoras, secadoras y una cafetería que ofrece cervezas, cafés y bocadillos simples.
Otros infalibles en Tokio ANDAZ TOKYO - nuestro favorito de Andaz hasta ahora, diseño moderno y vistas espectaculares. AMAN TOKYO - los fanáticos de Aman suelen poner esta propiedad entre su lista de favoritos, en especial, por sus vistas y el tamaño de las habitaciones. PARK HYATT TOKYO – situado en el barrio de Shinjuku, no podemos negar que el hotel de Lost in Translation ofrece algo difícil de replicar. HOSHINOYA TOKYO - el único ryokan de lujo en la ciudad se encuentra en Ginza, y sí, además de tatamis y futones tiene un onsen en el último piso. OKURA TOKYO – a pesar de la renovación que modificó parte de su espectacular arquitectura, el encanto original de la propiedad aún permanece.
cortesía imano tokyo ginza hostel y omo5.
RECIÉN LLEGADO OMO5 Otsuka, Tokio Hoshino Resorts es una de las cadenas más respetadas de Japón. Sus hoteles de lujo, HOSHINOYA, son pequeñas joyas que han conseguido traducir al lenguaje de la hotelería moderna los valores clásicos de un ryokan. El año pasado, Hoshino Resorts inauguró su primer hotel para un público más casual —y a un precio mucho más accesible—. Ubicado en Otsuka, un barrio muy tradicional al norte de Tokio, OMO5 ofrece diseño y calidad. Las habitaciones funcionan con un inteligente sistema modular que aprovecha al máximo el espacio, con el área de tatami y futones arriba y un área común en la parte de abajo. Cada día se organizan salidas para descubrir desde la gastronomía hasta la vida nocturna local.
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Omotenashi
28 Peninsula Tokyo: 314 habitaciones y más de mil obras de arte Por Juan Felipe Botero
En la capital del país nipón del omotenashi —tradición japonesa de servir al cliente con miras a crear una experiencia memorable— la competencia entre los hoteles de lujo es de nivel olímpico. Con una ubicación inmejorable, The Peninsula Tokyo encuentra en el arte uno de sus distintivos principales (tanto así que se ha posicionado como uno de los patrocinadores principales de la reconocida Tokyo Art Fair). El hotel cuenta con una colección de más de mil piezas, incluyendo cuadros, esculturas e instalaciones que adornan un lobby donde ningún detalle estético es casualidad. De hecho, el concierge dispone de iPods con audio tours de 30 minutos para realizar una visita guiada a la colección, enfocándose
El hotel cuenta con una colección de más de mil piezas de arte y una decoración donde ningún detalle es casualidad. principalmente en las técnicas y materiales que el artesanado nipón ha sublimado a través de los siglos. La colección se complementa con The Peninsula Academy, una serie de programas diseñados para sumergirse en la cultura
local. Algunas de las actividades que propone el catálogo incluyen un taller de creación de campanillas de viento y un tour por algunos talleres de artistas en compañía de un reconocido curador. El traslado de los huéspedes se realiza en un Mini-Cooper del hotel, que igualmente hace las veces de concierge móvil (y gratis hasta por tres horas) para quienes duermen en las suites. Esta iniciativa de The Peninsula Tokyo celebra el —muchas veces olvidado— valor del aprendizaje análogo y añade una dimensión vivencial a sus opciones de bienestar. Para relajarse después de una caminata por la ciudad, nada como una visita al impecable spa del hotel, en especial, para disfrutar uno de los célebres tratamientos del podólogo Bastien Gonzalez.
cortesía the peninsula tokyo.
Capital contemporánea
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Las galerías que dictan el pulso artístico de Tokio Alison Bradley en entrevista para Redacción Travesías
Desde Jingumae hasta Ginza, pasando por Minato y Roppongi, esta selección de espacios dedicados al arte contemporáneo y las propuestas japonesas emergentes reflejan el vibrante momento cultural que se vive en la ciudad. Take Ninagawa Fundada en 2008, Take Ninagawa es liderada por la elegante corredora de arte Atsuko Ninagawa. Se caracteriza por tener un sólido programa de exhibición y una selección de artistas occidentales, japoneses, consagrados y emergentes por igual. Visitar este lugar siempre resulta inspirador, ya sea para disfrutar de una exposición a cargo de Danh Vo, un performance de Aki Sasamoto o los intrigantes dibujos de Yukiko Suto. Ninagawa no es ajena a la escena artística internacional; su galería tiene una fuerte presencia en Art Basel, Basel Hong Kong e Independent, feria realizada en Nueva York.
En estos cinco espacios conviven por igual artistas internacionales consagrados y propuestas japonesas emergentes. Taka Ishii Gallery Con 25 años de existencia, Taka Ishii Gallery es conocida por representar una mezcla de artistas occidentales y japoneses, centrándose en los fotógrafos más importantes del país, como Nobuyoshi Araki, Daidō Moriyama y Naoya Hatakeyama. Con dos espacios de exhibición en Tokio —uno de ellos en el increíble Complejo de
las Artes en el barrio de Roppongi— y una tienda en Hong Kong, la galería cuenta con un programa que se enfoca en la obra de pintores emergentes y artistas japoneses de la posguerra, al igual que en un profundo conocimiento de la historia de la fotografía nipona. Gallery Koyanagi Bajo la dirección de Atsuko Koyanagi, esta galería abrió sus puertas a principios de los noventa, y representa a artistas internacionales de alto calibre, como Rei Naito, Olafur Eliasson, Micahël Borremans, Mark Manders, Marlene Dumas y Tabaimo. El reconocido fotógrafo Hiroshi Sugimoto —esposo de Koyanagi— colaboró en el diseño del espacio, ubicado de manera discreta en el último piso de un edificio de oficinas en la zona de Ginza. Maho Kubota Gallery Inaugurada en 2016, esta joven y vibrante galería tiene su foco en la nueva ola de artistas japoneses. Con más de 20 años de experiencia en el mundo del arte, Maho Kubota —dueña del espacio— posee un gran ojo para identificar talentos emergentes, esto se refleja en sus exposiciones, siempre fuertes y refrescantes. La galería está situada en Jingumae, una zona donde los barrios de Harajūku y Aoyama se encuentran, generando un interesantísimo cruce cultural. t.gallery En una pequeña calle en Minato se esconde t.gallery, un espacio dedicado a los ceramistas tradicionales y artistas contemporáneos japoneses. El lugar es diminuto, silencioso y sencillo; sin embargo, su programa curatorial es todo lo contrario. Teruko Miterai, propietaria de la galería, se encarga de seleccionar cuidadosamente cada pequeña y gran pieza que se exhibe aquí.
keizo kioku. ©michaël borremans/mark manders, cortesía de zeno x galeríaww antwerp y galería koyanagi, tokyo. / noriko ambe, the fold-desert bloom: fazal sheikh, 2016. ©︎noriko ambe/maho kubota gallery
Instalación de “Michaël Borremans | Mark Manders” en la Galería Koyanagi (2 de noviembre a 22 de diciembre de 2018). Photo: Keizo Kioku. Siguiente: Noriko Ambe, The FoldDesert Bloom, de Fazal Sheikh, 2016 en Maho Kubota Gallery.
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Odawara Art Foundation
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Un espacio arquitectónico único entre el mar y la montaña Por Mariana Castro
Situado en un espectacular escenario natural entre el mar y la montaña —a una hora de Tokio en tren—, Odawara Art Foundation es un espacio que invita a la reflexión a través del arte y la arquitectura. Su fundador: el icónico fotógrafo japonés Hiroshi Sugimoto. La historia de este lugar se remonta a 2009, cuando Sugimoto —un entusiasta de la arquitectura— estableció una fundación con la misión de preservar y promover la cultura japonesa tradicional por medio de un programa de exposiciones e investigación. Casi una década después, en octubre de 2017, el observatorio Enoura abrió sus puertas al público, convirtiéndose así en un complejo cultural único para materializar todo el trabajo de la fundación. Con un manejo impecable de la luz, los materiales y una arquitectura que
En la mañana del solsticio de invierno la luz solar atraviesa un túnel de 70 metros e ilumina una gran roca ubicada en el extremo opuesto.
Como un homenaje a la relación más antigua que existe entre el ser humano y sus construcciones, Sugimoto orientó cada uno de los espacios en torno a los movimientos anuales del sol. “En términos de hacer y proponer cosas, la naturaleza es infinitamente más creativa que nosotros”, asegura el fotógrafo. Aquí todo tiene una razón de ser y los pequeños detalles son los grandes protagonistas. En la mañana del solsticio de invierno, por ejemplo, la luz solar atraviesa un túnel de 70 metros de largo e ilumina una gran roca ubicada justo en el extremo opuesto. En otro de los pabellones, una serie de fotografías del océano —tomadas por Sugimoto— decoran un largo pasillo que, al final, se convierte en un mirador con vista al mar. El observatorio de Odawara Art Foundation abre de jueves a lunes con dos horarios: de 10:00 a 13:00 y de 13:30 a 16:30 horas. El número de visitantes está limitado por día, así que lo más recomendable es reservar y comprar el boleto con anticipación en la página web. Ahí mismo, los viajeros pueden reservar un lugar en el shuttle que va de la estación de Nebukawa (en Odawara) hasta el observatorio y de regreso. Sin duda, la forma más práctica de llegar.
Reglas a considerar: - La edad mínima para visitar el observatorio es de 12 años. - Está prohibido fumar en todo el complejo. - No se pueden tocar las paredes ni las ventanas de los pabellones (tampoco utilizar el celular).
mezcla lo clásico con lo contemporáneo, el observatorio mira hacia la bahía de Sagami y está compuesto por hermosas salas de exhibición, jardines, dos escenarios exteriores y un salón de té.
- Se pueden tomar fotos pero no utilizar tripié. - Hay que tener cuidado al caminar por los jardines, ya que puede estar resbaloso. - Las rocas colocadas en el piso con un trozo de tela amarrado significan “prohibido el paso”.
CORTESÍA ODAWARA ART FOUNDATION.
Hiroshi Sugimoto es el cerebro creativo detrás del proyecto de Odawara.
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48 horas en Osaka
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Una ruta por la capital gastronómica del país Por María Pellicer
DÍA UNO Tenjinbashi-suji Hay que empezar por este pasillo comercial, el más largo de todo Japón. Se trata de una especie de calle peatonal repleta de todo tipo de locales, desde tiendas de ropa hasta farmacias, pasando por infinidad de puestos que ofrecen delicias callejeras. Un buen punto de partida es Nakamura-ya, un local diminuto que siempre tiene fila y vende croquetas de papa. Suena simple y lo es, pero también es delicioso. La papa no está totalmente molida, lo que le da
Desde la izquierda: CAFE Osaka Chakai y comida callejera en Tenjinbashi-suji.
En Osaka, la tercera ciudad más grande de Japón, el carácter nipón se sale del molde y los locales no temen romper las reglas.
Los osakeños viven su día a día con mucho humor.
textura, y el capeado es crujiente pero no grasoso. Una croqueta se acaba en un par de mordidas y seguro hay espacio para varias más. Se puede seguir en CAFE Osaka Chakai, un café que se especializa en matcha y cuyo dueño presume una hermosa colección de tazas de té de cerámica —un estante y un mapa indican de qué parte del país viene cada una—. El recorrido puede terminar en Umai-Ya, un puesto muy sencillo que se especializa, desde hace dos generaciones, en preparar takoyaki, una de las botanas más clásicas
CORTESÍA CAFE OSAKA/GETTY IMAGES.
La tercera ciudad más grande de Japón no es especialmente hermosa. Su encanto es menos obvio que el de su vecina Kioto, y por eso descubrirlo es mucho más gratificante como viajero. Osaka, que es además la gran capital gastronómica del país, es también el sitio donde el carácter nipón se sale del molde: los osakeños no temen romper las reglas y son considerados los grandes cómicos de la isla. Para entender, pero sobre todo para disfrutar de su ambiente, ésta es una pequeña ruta infalible.
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de Osaka. Estas bolitas de masa con pulpo se sirven por toda la ciudad y tienen fama de ser grasosas, pero aquí no. En Umai-Ya, las bolitas van apenas barnizadas con una salsa casera, lo cual permite degustar el takoyaki, cuyo sabor es sumamente delicado —no por nada, madre e hijo son ahora estrellas del capítulo dedicado a Osaka en la serie Street Food de Netflix—. Para cerrar, vale la pena visitar alguno de los bares del pasaje comercial: espacios pequeñísimos donde los osakeños se juntan a compartir botellas de sake y pláticas interminables.
DÍA DOS D ōtonbori El corazón comercial y social de la ciudad bulle todo el día con turistas y locales que van y vienen cruzando el río, haciéndose fotos y comprando y comiendo en cada puesto y restaurante. Sin embargo, detrás del bullicio se esconden tranquilos callejones, ideales para buscar el mejor okonomiyaki de la ciudad. Este platillo tradicional, cuya receta original se disputa Osaka con Hiroshima, es para la mayoría de los japoneses el mayor exponente del
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Una ruta por la capital gastronómica del país
Izquierda: takoyaki de Umai-Ya, la botana más famosa de la ciudad. Derecha: restaurantes y tiendas en Dōtonburi.
comfort food. Se trata de una especie de hot cake que se sirve con col, noodles, tocino y huevo. La mal llamada pizza japonesa es una de esas cosas que no se ve bien, pero sabe, sorprendentemente, muy bien. En la versión de Osaka todos los ingredientes se mezclan y preparan en la parrilla. La cantidad de locales en Dōtonbori que ofrecen este platillo es infinita, recomendamos entrar al que tenga fila, incluso si eso implica esperar un rato. Nakazakicho Pocas cosas se disfrutan tanto en Japón como hallar un barrio como éste: pequeñito, estrecho y alejado del bullicio, donde es posible caminar y toparse con restaurantes y tienditas. Aquí la
modernidad no existe. No hay ruido ni anuncios luminosos. En su lugar, los restaurantes montan pizarrones escritos a mano donde indican el menú del día y donde una simple flecha busca convencer a los transeúntes de aventurarse en un callejón muy angosto (tanto así que apenas una bicicleta podría pasar). Hay que meterse en todas las callecitas, doblar donde parece imposible seguir y asomarse, sin ninguna pena, a todas las tiendas. Este es el barrio ideal para hacerse de recuerditos originales e irrepetibles. Cafe Muni puede ser un buen punto de partida para explorar esta zona. Hay que pedir café y alguna de las especialidades dulces, un tema que para los nipones es de suma importancia.
DÓNDE DORMIR El Ritz-Carlton Osaka es un hotel de diseño clásico y europeo, un estilo que atrae mucho a los locales, quienes aman visitarlo para tomar el té o disfrutar de sus distintos restaurantes, dándole así una vida única, siempre lleno y animado. Sus habitaciones tienen vistas espectaculares de Umeda y la estación del tren, y gracias a su gran ubicación es fácil encontrar cosas para hacer en los alrededores (el centro comercial de la estación del tren tiene literalmente todo lo imaginable). Imperdible: Hanagatami, el restaurante de especialidades japonesas donde, además de una barra de sushi, tienen otra que sirve el más delicado tempura.
Cinco paradas en Kamakura
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Una ciudad de templos y santuarios en la costa Texto y fotos Luz Arredondo
Gran Buda de Kamakura.
Nos despertamos temprano para salir en tren hacia Kamakura, una ciudad que se encuentra muy cerca de Tokio, por lo que es una excursión perfecta para conocer algo distinto sin viajar muy lejos. El tren es una maravilla, siempre limpio, siempre confiable. En menos de una hora estábamos en Kamakura. Este lugar tiene unas vistas impresionantes porque contrasta escenarios de montaña con la costa, además de una gran cantidad de templos y santuarios. Además, fue la capital del shogunato Kamakura, una dictadura feudal militar que duró casi 150 años, entre los siglos xii y xiv.
Gran Buda Kamakura tiene uno de los budas más grandes de Japón; de hecho, se construyó justamente para superar al de Nara. La escultura tiene 13.4 metros de altura y pesa alrededor de 121 toneladas. Se puede acceder a su interior, hueco y formado por placas de bronce. El buda se encuentra en posición de loto, y contemplarlo es toda una experiencia tanto por su tamaño como por su ubicación perfecta en medio de la naturaleza. Templo Hase-dera Este templo budista se encuentra enclavado en la montaña y tiene unos jardines muy bien cuidados, con una gran diversidad de flores que cambian dependiendo de la estación. Hay varias cuevas dedicadas a la diosa Benzaiten que hay que visitar, pero manteniéndose bien agachado porque son muy bajitas. Como
parte del luto de los padres que pierden a sus bebés, hay una tradición de comprar pequeñas estatuas Jizō que se forman en largas filas y se van cambiando cada año. Como en la mayoría de los templos, se pueden hacer peticiones por escrito; la diferencia aquí es que se escriben en conchitas en lugar de tablas de madera. Santuario Tsurugaoka Hachiman-gū Este santuario sintoísta es símbolo de la antigua capital y está dedicado al dios de la guerra. Los estanques son impresionantes
y el diseño del paisaje alrededor del agua es impecable. Aquí, cada objeto está pensado para que tenga su propio espacio, por lo que el santuario está lleno de rincones que transmiten mucha paz. Hōkoku-ji También conocido como “Templo de bambú”, en este sitio fueron enterrados diversos personajes del shogunato. El bosque donde se encuentra el templo es un espacio de meditación perfecto; caminar entre los senderos de bambú y
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Santuario Tsurugaoka Hachiman-gū.
Templo Hase-dera.
Chibi Jizō, guardián de los niños de Hase-dera.
Kamakura está muy cerca de Tokio (una hora en tren), así que es una gran opción para una excursión de un día. observar diferentes esculturas budistas ayuda a despejar la mente. Desde el punto más alto, la vista hacia el mar es espectacular. Komachi-dori Esta calle con locales comerciales es muy angostita y pintoresca. Hay tiendas de cerámica, textiles y souvenirs; también hay
restaurantes, cafecitos y mucha comida callejera. Vale la pena recorrerla para entender el ambiente de la ciudad y probar algunas de las especialidades, como las croquetas o el helado de camote. Una tienda que llama mucho la atención es IORI, donde puedes encontrar hermosas toallas para todos los usos y de la mejor calidad.
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Hora feliz en Tokio
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Ocho bares imperdibles Por Evan Upchurch
Izquierda: el famoso New York Bar del Park Hyatt Tokio. Abajo: infusiones caseras en los tragos de Benfiddich. Anterior: el bar de Trunk Hotel.
cortesía trunk hotel, park hyatt tokyo y bar benfiddich.
TRUNK (BAR) 5 Chome-31 Jingumae, Shibuya Con sólo 15 habitaciones, el Trunk Hotel —parte de la colección de Design Hotels— se ubica en Shibuya, el barrio más joven y enfocado en la moda de Tokio. Su bar es un punto de reunión para los creativos de la ciudad, con un menú de cocteles a cargo del célebre mixólogo Ryuichi Saito. Recomendamos el especial de la casa, Getting Trunk, con especies, té hojicha, almendras y ron japonés. Ya sea un local miniatura en un callejón de Golden Gai o una propuesta elegante en un edificio de Ginza, cada bar en Tokio se siente como un pequeño universo. En estos espacios, los viajeros interesados en el mundo de la coctelería no sólo se irán con el recuerdo de un trago delicioso, sino también con una historia que contar. Éstos son algunos de nuestros favoritos.
New York Bar 3-7-1-2, Nishi-Shinjuku Ubicado en el piso 52 del Park Hyatt Tokyo, este elegante y acogedor bar sirve excelentes cocteles, desde los clásicos hasta los más modernos. Sin embargo, el verdadero encanto del espacio es el ambiente, con luces tenues, vistas espectaculares y una ola de nostalgia para cualquiera que haya visto Lost in Translation. Hay que llegar temprano para conseguir una mesa junto a los ventanales de piso a techo.
Bar Trench 1 Chome−5−8, Ebisunishi En este lugar, Rogerio Igarashi Vaz —copropietario y jefe de bartenders de origen nipo-brasileño— prepara cocteles clásicos y modernos, además de creaciones interesantes para un público internacional. La decoración del espacio se inspira en la época de la prohibición en Estados Unidos, con elementos como madera oscura, ladrillos aparentes y una hermosa biblioteca. Por su parte, los nombres de las bebidas, como el Catcher in the Rye, te harán sentir curioso y abierto a probar cosas nuevas. Gen Yamamoto 1 Chome−6−4, Azabujuban Lejos de ser un bar ordinario, este pequeño local acomoda únicamente a ocho personas, quienes se sientan en una barra hecha de roble Mizunara de 500 años de antigüedad. El ambiente
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Ocho bares imperdibles
Bar Trench, inspirado en la época de la prohibición, ofrece tragos clásicos y también nuevas creaciones.
amables bartenders. Vale la pena llegar antes de las nueve para asegurar un lugar.
Star Bar Ginza Sankosha Building B1F, 1-5-13 Ginza En el sótano de un edificio en Ginza, este bar es frecuentado por una clientela madura y elegante. El propietario, Hisashi Kishi, quien ha capacitado a varios mixólogos japoneses reconocidos, es famoso por tener sus propias técnicas para elaborar cocteles. Si no estás seguro de qué pedir, solicita la ayuda de los
Los viajeros interesados en el mundo de la coctelería no sólo se irán con el recuerdo de un trago delicioso, sino también con una historia que contar.
The Open Book 1 Chome-1-6 Kabukicho, Shinjuku Ubicado en Golden Gai —una serie de callejones estrechos llenos de pequeños bares y restaurantes en Shinjuku—, The Open Book compensa con peculiaridad y encanto lo que le falta en sofisticación. Asegúrate de pedir su especialidad, el Lemon Sour, y de explorar la pared trasera decorada con la colección literaria de Komimasa Tanaka, premiado autor japonés (y abuelo del propietario del local).
cortesía bar trench.
minimalista, que recuerda a una tradicional casa de té, se complementa con una carta de bebidas preparadas con gran precisión e ingredientes de temporada. La opción del menú degustación, con pequeñas porciones en hermosas copas de cristal, hace que beber aquí sea una experiencia única.
Benfiddich Nishi-Shinjuku 1 Chome−13−7, 9F En el noveno piso de un edificio en el barrio de Shinjuku, el bartender Hiroyasu Kayama —vestido de traje blanco como si fuera un mago— prepara cocteles experimentales y artesanales, además de infusiones botánicas caseras. También hay muchas opciones en cuanto a vinos y cervezas. Los precios son altos, pero la calidad del lugar amerita estirar el presupuesto (al menos una noche).
T R AV E S Í A S T HE C ENT URION LO UNGE
The Centurion® Lounge se renueva
Los Salones de la T1 Nacional del AICM y el de la Terminal A en el Aeropuerto Internacional de Monterrey reabren sus puertas a los viajeros.
Muchas veces el tiempo de
pueden disfrutar de un menú
espera en el aeropuerto
de coctelería diseñado por
puede ser más desgastante
el reconocido mixólogo Mica
que el mismo vuelo. Por
Rousseau, además de una
eso, los viajeros frecuentes
exclusiva selección de vinos
estarán felices al saber que ya
en cortesía —escogidos por la
pueden disfrutar del recién
sommelier Sandra Fernández—,
remodelado The Centurion®
un salón de belleza con
Lounge en la Terminal 1
productos de L’Occitane
Nacional del Aeropuerto
y deliciosas opciones
Internacional de la Ciudad de
gastronómicas.
México, y en la Terminal A
En Monterrey, el Lounge
del Aeropuerto Internacional
de la Terminal A ofrece a los
de Monterrey.
Tarjetahabientes un delicioso
El espacio en ambos
buffete y un menú para quienes
lounges fue totalmente
prefieran ordenar a la carta.
remodelado, pero la
Además, cuenta con una
experiencia sigue siendo
hermosa cava de cristal con
igual de extraordinaria que
una amplia selección de vinos
siempre. Los Tarjetahabientes
de todas partes del mundo.
P a r a m á s info r m a ci ó n y c ri t e ri o s d e a c c e s o , v isi t a : a m e ri c a n e x p r e ss. c o m /m x /c e n t uri o nl o u n g e
Un día en Shinjuku
46 Perderse en el centro de transporte más activo del mundo Por Irene Arredondo
Shinjuku es uno de los barrios con más movimiento de Tokio, solamente por debajo de Ginza y Marunouchi. Aún así, me sorprendió el tamaño tan inmenso de su estación, la principal conexión con otros barrios de la ciudad y los suburbios. Aquí hacen parada 12 líneas de metro y tren que juntas suman 51 plataformas; por si fuera poco, en el exterior también hay una terminal de autobuses. El Récord Guinness registró en 2007 a 3.64 millones de personas en un sólo día pasando por aquí, convirtiéndolo en el centro de transporte más activo del mundo. No hay mejor momento para perderse en este mundo subterráneo que un día lluvioso. Lo primero que me trajo hasta aquí fue conseguir un boleto de la Odakyu Line, una concesión privada que conecta a Tokio con Odawara y Hakone; opción ideal para los que no quieren hacer el gasto de un RailPass, pero sí salir de Tokio un fin de semana. Resuelto el tema del boleto, y después de una expedición por los
3.64 millones de personas pasan por aquí cada día, convirtiéndolo en el centro de transporte más activo del mundo. interminables pasillos de lockers —donde los viajeros pueden dejar su equipaje para no cargarlo durante el fin de semana—, me dispuse a explorar la estación. Mi parte favorita la encontré en los sótanos, en el área dedicada a la comida. Frutas que parecen cuidadosamente dibujadas, tan lindas que no querría morderlas jamás, conviven con pasteles en forma de catarinas y conejos que dan la
bienvenida a la primavera. También hay pan dulce —tan delicado que puede hacerle competencia a los franceses—, tempura que fríen frente a ti y bento boxes tan variados que elegir uno toma un buen rato. Alrededor de Shinjuku Station hay cerca de 12 tiendas departamentales distintas. Para los que quieran hacer compras más elegantes, la opción es asomarse a Takashimaya e Isetan, ambas especializadas en productos de lujo. Pero para los que quieran divertirse con curiosidades japonesas, mejor ir a Tokyu Hands, en Takashimaya Times Square. Desde plumas de todos los colores hasta gomas en forma de nigiris, botas de hule para la lluvia y artículos para la casa, esta tienda es como un museo de curiosidades japonesas, donde además uno puede hacerse de recuerditos para llevar de regalo. Otras tiendas a las que vale la pena asomarse son Bic Camera —para quienes anden en busca de lo más nuevo en aparatos tecnológicos— y Kinokuniya —para los que prefieran pasar un buen rato entre libros y revistas—. En las tiendas departamentales también hay restaurantes. Dentro de Takashima, por ejemplo, hay una sucursal de Din Tai Fung, el famoso local taiwanés que sirve dummplings de sopa. Para cerrar el día, una buena idea es refugiarse en alguno de los bares miniatura de Golden Gai, muy cerca de la salida este de la estación. En cada local caben apenas diez personas, lo que obliga a que la plática entre todos sea inevitable. Se puede tomar un trago en uno y luego seguir a otro más. Cada bar tiene una temática y una personalidad muy definida, así que depende de cada quien encontrar el que más le llame.
CORTESÍA DARYAN-SHAMKHALI/BANTER-SNAPS.
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Rumbo a Tokio 2020
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Cómo se prepara la ciudad para recibir a los JJ. OO. Por Mariana Castro
En 2012, el Comité Olímpico Internacional dio a conocer los tres destinos que competirían por ser la sede de los Juegos Olímpicos de 2020: Tokio, Estambul y Madrid. Un año más tarde, la capital japonesa se anunció como ganadora. Desde entonces, la ciudad no ha escatimado en preparativos para recibir a las segundas olimpiadas en su historia, que se realizarán del 24 de julio al 9 de agosto del próximo año. Éstas son algunas medidas que se están llevando a cabo:
Prioridad al inglés En cuanto Tokio se anunció como sede de los Juegos Olímpicos, las escuelas públicas y privadas incrementaron su oferta de estudios de inglés. En algunos casos, incluso comenzaron a ofrecer clases más especializadas para los potenciales voluntarios y algunos locales que buscan ser de utilidad en caso de encontrarse con algún visitante en apuros. Esta dinámica de capacitación también ha sido replicada por muchas empresas, tiendas y restaurantes con su personal.
El nuevo Estadio Olímpico fue diseñado por el arquitecto Kengo Kuma.
No es ningún secreto: de los próximos Juegos Olímpicos se espera un espectacular evento deportivo con el sello nipón de lo impecable.
Transporte público y movilidad Uno de los principales problemas en ediciones anteriores de los Juegos Olímpicos ha sido la movilidad de los asistentes. Para prevenir esto, se ha anunciado que habrá un horario especial del metro durante Tokio 2020, al igual que trabajos de mantenimiento en algunas calles y carreteras para disminuir el tráfico en la ciudad. Por su parte, East Japan Railway Company está trabajando en un sistema de señales digitales e inteligencia artificial —instalado provisionalmente en la estación de Tokio— que resolverá preguntas en japonés, chino, coreano e inglés.
CORTESÍA TOKYO 2020, (GIMNASIO NACIONAL) MARÍA PELLICER.
Nuevos símbolos olímpicos El antiguo Estadio Olímpico de Tokio —sede de las olimpiadas en 1964— fue demolido para construir uno nuevo con capacidad aproximada para 80 000 espectadores. Diseñado por el arquitecto Kengo Kuma, el estadio estará listo en noviembre y rendirá homenaje a la estética tradicional japonesa, incorporando mucha madera y vegetación a la estructura. Por su parte, la antorcha olímpica está inspirada en la flor del cerezo y cuenta con cinco pétalos que representan los cinco anillos olímpicos. Fue elaborada en un 70% con el mismo aluminio que se utiliza para la producción de los trenes bala japoneses. El 30% restante es aluminio reciclado (procedente de los alojamientos temporales para los damnificados del terremoto y tsunami de 2011).
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Izquierda: Musashino Forest Sports Plaza y (derecha) el parque Shiokaze. Abajo: el Gimnasio Nacional, obra de Kenzo Tange, fue remodelado.
Enfoque sustentable Con una gran estrategia que se apega a los principios de la onu, estos Juegos Olímpicos buscan ser los más sustentables de la historia. Este gran plan no dejará a un lado los pequeños detalles. Los uniformes que la delegación nipona utilizará en las ceremonias de apertura, clausura y premiación, por ejemplo, serán elaborados con ropa reciclada. Bajo esta misma línea, las medallas serán fabricadas a partir de materiales de reciclaje (de hecho, la ciudad lanzó una convocatoria para recolectar aparatos electrónicos en desuso bajo el nombre de “Tokyo 2020 Medal Project”).
Estilo de vida Actualmente, uno de los mayores dilemas preolimpiadas gira en torno a la regulación para fumadores. Mientras que el Comité Olímpico Internacional busca que Tokio 2020 sea libre de humo, muchos establecimientos han anunciado que aumentarán sus áreas designadas para fumar y otros más permitirán a los comensales hacerlo sin restricción alguna. La decisión oficial aún está por verse. Por otro lado, la implementación de sistemas de pago con smartphone —en especial en tiendas departamentales y de conveniencia— ha avanzado considerablemente en los últimos meses.
Los insiders recomiendan
50 Cuatro expertos nos comparten sus favoritos de Japón Entrevistas por Diego Parás
Juan Felipe Botero Abogado y emprendedor
Juan Felipe lleva seis años viviendo en Tokio. Para él la mejor manera de aproximarse al zeitgeist cultural tokiota es a través de caminatas. CAMINATA POR EL ESTE DE TOKIO “El recorrido empieza en el EDO Culture Complex, situado en los terrenos del templo Kanda Myojin. Al terminar, hay que caminar al centro de arte 3331 Arts Chiyoda, para después disfrutar un café en el mercado Aki-Oka Artisan. Se puede continuar hacia el Taito Designers Village, entrando a Kuramae, otra zona emergente con tiendas de estilo de vida como SyuRo. Para comer, un menú del día en Yuwaeru (restaurante-tienda especializado en comida casera japonesa). Si aún queda aliento, la recomendación es cruzar el río rumbo al Museo Sumida Hokusai, no muy lejos del Ryogoku Kokugikan, la arena más importante en la cultura del sumo”.
Arriba: los jardines del templo Saiho-ji, en Kioto. Abajo: el Museo Nezu, obra de Kengo Kuma.
CAMINATA POR EL OESTE DE TOKIO “Con sus nuevos desarrollos urbanísticos, se podría decir que Shibuya se está convirtiendo en el nuevo centro de la ciudad. La caminata puede comenzar en Shibuya Stream, flanqueando el canal hasta el nuevo desarrollo Shibuya Bridge. De ahí, hay que cruzar la avenida Meiji y visitar Doghouse Kuroda (para comprar una chaqueta de cuero hecha a la medida) y RDVS o Globe (para una aproximación japonesa a la ropa de trabajo). No muy lejos está Shibuya 8929, un restaurante que sólo sirve wagyu A5. Una conversación con el dueño revelará las novedades que están surgiendo en el barrio. Después de la cena, hay que ir a Inspiration Cult para disfrutar un buen whisky japonés (hay que pedir algún Ichiro de las destilerías de Chichibu)”.
CORTESÍA AFP AGENCY/DIEGO BERRUECOS/MUJI.
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Ana María Maldonado Arquitecta del paisaje
Mario García Torres Artista conceptual
Françoise Lavertu Fundadora de Utelias Curiosity in Action
Así como hay gente que se prepara para ir al teatro, el viajero tiene que entender que en este país también hay un protocolo para visitar un jardín. “Nuestro respeto como turistas tiene un papel muy importante en la armonía del lugar al que vamos, en Japón hay que adoptar una actitud de observación y escucha. Ir al jardín del santuario de Ise significa perderse en los senderos de la zona boscosa del centro de la prefectura de Mie. Éste es uno de los mejores ejemplos de jardines religiosos, aquellos que están ligados a un templo o construcción de este tipo. Los jardines de deambulación, por otra parte, son aquellos que pertenecían a la realeza, tal es el caso del jardín de Villa Katsura en Kioto, que solía ser la residencia oficial del shogunato Tokugawa (el tercer y último shogunatoen el poder). Podría parecer un poco triste, pero es una construcción de una armonía impresionante. Cuenta con todos los componentes del jardín japonés y es maravilloso imaginarse cómo solía ser la vida en ese lugar. Para conocer la diversidad de la cultura del jardín en Japón hay que visitar el jardín de piedras Ryoanji. Este jardín es un rectángulo con piso de grava y cinco montículos de piedras. Muy al estilo nipón, aquí todo tiene una razón de ser: cuando barres la grava creas una tensión, una relación que de otra forma no existiría. Así como en Ryoanji los japoneses siguen una filosofía de modificar el jardín, en Saihō-ji (también conocido como Kokedera) es todo lo contrario. La gente hace peregrinaciones a las afueras de Kioto para ver crecer el musgo. Aceptar que esta planta es parte de la formación del jardín limita el uso de senderos y deja correr al proceso natural del lugar”.
“La cultura japonesa es ancestral, única y compleja. Cuando te acercas a ella, es difícil pensar en el presente”. Estos son los lugares favoritos de Mario García Torres para disfrutar de ese arte ancestral nipón en Tokio. “El Museo Nezu es una institución que alberga la colección privada de más de siete mil objetos (pinturas, esculturas, obras en caligrafía, textiles y cerámicas, entre otros hallazgos arqueológicos) de Kaichiro Nezu. El edificio es una obra impecable del arquitecto Kengo Kuma, uno de los sitios que más paz genera en Tokio. La plaza Sogetsu es una obra monumental de piedra diseñada por Isamu Noguchi en 1978 para la oficinas generales de Sogetsu —la escuela de arreglos florales Ikebana, en Aoyama, Tokio—. Titulado Heaven, el jardín contiene esculturas y fuentes bajo el techo de un edificio de vidrio-espejo diseñado por Kenzo Tange. Si bien la Galería Nacional de los Tesoros Horyuji abrió sus puertas en 1999, tiene su origen a finales del siglo xix, cuando la isla vivió un movimiento para abolir el budismo en el país. Con el shinto como religión del Estado, el templo Horyu-ji de Nara presentó al Palacio Imperial una gran colección de objetos con la intensión de protegerlos de este movimiento en 1878. No fue sino hasta años después que fueron resguardados en un edificio minimalista, obra de Yoshio Taniguchi en el parque Ueno. El Folk Art Museum, también llamado Mingei Museum, es una colección privada dedicada a este movimiento artístico, que busca la belleza en objetos utilitarios hechos por gente ordinaria en las décadas de los años 20 y 30. Hay que tener en cuenta que el acceso es sin zapatos”.
Japón es un mundo por descubrir en cuanto a las compras se trata, ya sea por el diseño minimalista contemporáneo, lo tradicional o la oferta internacional. “Acaban de abrir el flagship store de Muji, la más grande del mundo, y que además está integrada a su primer hotel. Tiene cinco pisos de accesorios con mucho diseño y de precio accesible, incluyendo un restaurante para quienes quieran pasar más tiempo. Se pueden pasar horas explorando libros y revistas de todo tipo en el T-Site de Tsutaya. La recomendación es tomar un té en el bar o lounge del segundo piso, en un ambiente acogedor rodeado de libros de arte. El piso ocho de Hikarie es un espacio perfecto para conocer la oferta de negocios locales: ocho propuestas diferentes (que incluyen artesanías y diseño contemporáneo de todos los rincones de Japón) en un sólo lugar. Se puede seguir explorando la creatividad en diferentes rincones dentro del edificio, como D47 y el creative lounge. Finalmente, conocemos las tiendas de Dover Street Market en Nueva York y Londres, pero el de Tokio sorprenderá a los viajeros con su oferta nacional e internacional repartida en siete pisos”.
Japón 101 Todo lo que necesitas saber antes de comprar ese boleto de avión que te llevará del otro lado del Pacífico. Por María Pellicer Fotos Diego Berruecos, Alejandro Paredes y María Pellicer
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Arriba: vista de una calle anónima en Tokio. Izquierda: sacerdotes sintoístas cruzan el santuario Meiji, dedicado al emperador Meiji y su esposa.
Mi fascinación por Japón comenzó hace unos 20 años cuando un amigo me enseñó Japanorama, una serie de la BBC que conducía Jonathan Ross. Fue la primera vez que sentí curiosidad por un mundo diametralmente opuesto al mío. En pantalla, Japón era un paraíso pop repleto de neón y ruido; “Japan is the land where science fiction becomes fact”, decía Ross en el primer episodio. Pensar en conocer ese universo me parecía imposible. Sonaba lejano, exótico e inaccesible. Cuando finalmente lo conocí, en 2011, me di cuenta de que esa visión era muy limitada y que este país era mil veces más hermoso y complicado que los ruidos y los colores chirriantes. Desde entonces vuelvo cada vez que puedo. De Japón amo la dedicación y el esmero que ponen en cada cosa, amo el respeto hacia
el trabajo y la capacidad de poner la belleza en todo lo que hacen. Mientras intento aprender japonés —que no es tarea fácil— me entretengo planeando mi próximo viaje y, sobre todo, disfruto convencer a cualquiera que se deje de comprar un boleto a Tokio hoy mismo. Este artículo es una versión escrita de mi argumento. Por qué ir ya a Japón y no dejarlo para después Con tantos lugares para conocer en el mundo, ¿por qué insisto con empezar por Japón? A diferencia de lo que podría parecer, este país ya no es un destino exótico; de hecho, como mexicanos, éste es uno de los destinos internacionales más cercanos que tenemos. Cada noche, por ahí de la una de la madrugada, dos Dreamliners salen del Aeropuerto
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Kioto es una ciudad que ofrece a los viajeros un acercamiento al Japón más tradicional.
Internacional Benito Juárez a Narita, directo y sin escalas —primero Aeroméxico y después ANA—. Esto se debe, hay que decirlo, no al turismo propiamente, sino a la industria. Cada vez son más las compañías niponas que tienen negocios en nuestro país, incluso plantas de producción (como sucede con Toyota). Gracias a esto nació una gran demanda y, con ella, dos vuelos directos que en temporada baja pueden tener precios increíblemente accesibles. De hecho, es muy común encontrar mejores precios en sus rutas que en cualquiera europea (mientras escribo esto se puede comprar un boleto a Tokio durante varios meses de 2019 y principios de 2020 por unos 16 mil pesos). Razón número dos para escoger Japón sobre cualquier otro destino: este país no sólo resulta fascinante, sino que tiene mucho para enseñarnos. No es extraño volver de Tokio y deprimirse cuando uno ve basura tirada en la calle o a la gente rompiendo todas las normas mientras maneja. Ir a Japón es como un pequeño curso intensivo de civismo que nos viene muy bien a todos; además, es un país que combina naturaleza, cultura, y sí, tecnología y luces de neón. Grandes y chicos quedan encantados (ir con niños y adolescentes es muy buen plan, por cierto). Definir el presupuesto Uno de los errores más comunes a la hora de pensar en Japón es que se trata de un destino muy caro. Nada más lejano de la realidad; éste es un país que se puede disfrutar con todos los presupuestos. Efectivamente, cuando se trata
de lujo, no es un lugar barato. Los restaurantes con estrellas Michelin, los hoteles cinco estrellas y las boutiques de ropa en Omotesando no son precisamente sitios económicos. Pero Japón es mucho más que eso. Muchas de las mejores cosas que ofrece, de hecho, no cuestan o cuestan muy poco. Sus jardines y sus templos están siempre abiertos al público y son gratuitos, sus maravillosos tazones de ramen —bastos y generosos— no suelen costar más de 1000 yenes
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Aterrizar en Narita Los vuelos directos de México aterrizan en Tokio tempranito, entre las seis y siete de la mañana. Los vuelos de conexión, generalmente procedentes de la costa este de Estados Unidos o Canadá, suelen hacerlo sobre el mediodía. Una vez pasada migración y con maletas en mano, lo primero que hay que hacer es comprar una tarjeta SIM. Hay varios puestos que las ofrecen y hay también máquinas automáticas. El precio de una tarjeta es de más o menos 3000 yenes (500 pesos). Para los que no tengan desbloqueado el teléfono, una buena alternativa es rentar un wifi portátil. Una vez resuelto ese problema, hay que elegir cómo llegar a Tokio (o a la siguiente parada). Los que van a otros destinos pueden tomar directamente el tren, activando el Rail Pass en el aeropuerto y utilizando el Narita Express. Los que van a la ciudad tal vez prefieran tomar alguno de los camiones que conectan —por menos de 1000 yenes— casi todos los barrios. Ir en taxi queda descartado. Nadie lo hace, pues queda demasiado lejos.
(menos de 180 pesos) y su espectacular naturaleza siempre está abierta a todos. Un itinerario como Kumano Kodo, en la provincia de Wakayama, al sur de Kioto, ofrece hermosos paisajes naturales en una de las rutas de peregrinación más antiguas del país; lo mejor, puede realizarse con un presupuesto mínimo. En Japón, además, todo está limpio. Siempre. Esto incluye a los hoteles y baños públicos, incluso en las estaciones de metro y los
FamilyMart y Lawson —su versión de Oxxo que abre las 24 horas—. Moverse en transporte público es cómodo, eficiente y, en el caso del tren, los extranjeros pueden adquirir un pase superaccesible. En términos de compras, lugares como Muji o Uniqlo permiten que hasta el que va con el dinero contado tenga chance de hacerse de recuerditos; y si aún así hay que cuidar los yenes, siempre está Don Quijote (ドン キホーテ), donde un billete de mil rinde maravillas.
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58 TOKIO: ITINERARIOS POR BARRIO Ginza - Palacio Imperial - Tokio Central Jardines imperiales / Museo Nacional de Arte Moderno / Marunouchi y estación central / Ginza —Mitsukoshi, Uniqlo, Muji Hotel, Itoya, Ginza6— / Pola Anex. Roppongi Mori Art Museum / The National Art Center / 21_21 Design Sight / Tokyo Midtwon / Nezu Museum. El templo Tenryuji, en la zona de Arashiyama, en Kioto. Abajo: el Memorial de la Bomba Atómica, de Kenzo Tange, en Hiroshima.
Aoyama Nezu Museum / Watari Museum / Recorrido de diseño y arquitectura —Prada, Dolce & Gabbana, Miu Miu, Aesop, Comme des Garçons, Pleats Please Issey Miyake. Omotesando - Yoyogi - Shibuya Santuario Meiji / Estadio Olímpico de Tokio / Cruce de Shibuya y alrededores. Nakameguro - Daikanyama Se puede empezar por Tsutaya T-Site, seguir con una caminata por Daikanyama y bajar hasta Nakameguro. Ueno - Yanaka Museo Nacional de Arte Occidental / Museo Nacional de Tokio / Yanaka —SCAI The Bathhouse— / Asakusa.
Moverse en Japón Ya con el boleto de avión comprado, lo que sigue es conseguir un Japan Rail Pass. Estos pases se venden sólo en el exterior —exclusivamente a los extranjeros— y permiten moverse por todo el país, o por una región específica, a un precio muy accesible. En Japón no todas las líneas de tren pertenecen a la misma compañía, lo que muchas veces puede hacer muy confuso moverse entre regiones o, incluso, dentro de la misma ciudad. Por eso, y por la mínima diferencia de precios, lo ideal
es comprar el pase que lo incluye todo (más o menos 266 dólares por siete días de tren ilimitado). Las letras chiquitas dejan fuera un par de líneas privadas y los dos modelos más modernos del Shinkansen —el famoso tren bala nipón—: Nozomi y Mizuho. Vale la pena comprar el pase siempre que uno planee salir de Tokio, aunque sea sólo a Kioto, ya que comprar un boleto suelto del Shinkansen costaría lo mismo o hasta más. El pase se compra en línea y tarda en llegar un par de días nada más, pues se envía por FedEx.
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Qué comer y dónde SUSHI ¿Cuántos locales especiales de sushi habrá en Tokio? Cualquiera que haya ido seguro tiene una recomendación de alguno. Más allá de tomar nota con amigos, de las sugerencias de la Guía Michelin y de la fama —Jiro es literalmente imposible—, una buena idea es consultar al concierge del hotel y plantearle, sin ninguna pena, un presupuesto. Para los japoneses, decir abiertamente que uno está dispuesto a gastar una cantidad no es para nada ofensivo. Recomendamos Yoshinozushi Honten, en Nihonbashi, justo en la calle trasera de Takashimaya. Durante la hora de la comida suele haber fila, pues tienen precios muy razonables por los menús ya armados. El set de diez piezas costaba, hasta hace un mes, 570 pesos y siempre se pueden agregar extras. IZAKAYA Un izakaya es la versión japonesa de un bar: son ruidosos, generalmente se puede fumar y ofrecen infinidad de platos pequeños e ideales para compartir. Aquí es donde los kaishiain (かいしゃいん) —el godín nipón— se refugia después de un día de estrés laboral. Hay dos donde son especialmente amigables con los extranjeros: Uoshin Nogizaka, en la zona de Roppongi, y Kaikaya by the Sea, en Shibuya. La mejor idea es aventurarse a entrar al que se encuentre en el barrio donde uno se esté quedando.
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Cuatro rutas para principiantes LA INFALIBLE Una semana en Tokio y otra en Kioto. Hay suficiente para ver en ambas ciudades. Una semana es poco para entenderlas y aprender a navegarlas. INVIERNO NIPÓN Una semana en Tokio más otra en Karuizawa y Kanazawa. Estas ciudades ofrecen una gran cantidad de opciones para acercarse al Japón más tradicional. Durante el invierno suele haber nieve y es posible esquiar. DESDE HIROSHIMA Se puede volar a Hiroshima y desde ahí empezar el camino de regreso a Tokio, pasando por Himeji, Osaka, Nara, Kioto y, finalmente, Tokio. EL NORTE EN VERANO Si el plan es visitar Japón en verano entonces lo ideal es escapar de las altas temperaturas y la humedad de la capital y refugiarse al norte, en Hokkaido. Otra opción es explorar las provincias de Yamagata y Akita.
Para los que planean viajar a alguno de los extremos del país —Hokkaido, en el norte, o Kyūshū y Okinawa, en el sur— no está de más considerar el avión, pero la experiencia en tren tiene mucho más encanto. Comprar una bento box en la estación para comerse de lunch en el tren es una tradición que siguen todos los japoneses y que se disfruta muchísimo. Por eso, y porque no hay nada más preciso en el universo que la puntualidad nipona, siempre hay que llegar a la estación con tiempo. Tiempo para perderse, para comprar algo de comer
y para hallar la plataforma y el letrerito en el suelo que indica el número de vagón. Si el boleto dice que el tren sale a las 11:37, eso quiere decir que el tren puede entrar en la estación a las 11:36 y partir exactamente un minuto después. Esta puntualidad se replica en todo, desde un camión hasta un avión. Para los que tengan el presupuesto muy restringido, otra buena opción es moverse en camión. Hay rutas que recorren todo el país, y aunque toman bastante más tiempo que el tren son mil veces más económicas. Los más
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Izquierda: Watari Museum of Contemporary Art, un edificio de Mario Botta. Derecha: paseo por Nakameguro. Abajo: los venados, habitantes de la isla de Miyajima, en la bahĂa de Hiroshima.
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aventureros pueden rentar un coche, pero hay que tomar en cuenta que los japoneses tienen mil reglas a la hora de conducir y que, mucho ojo, conducen del lado derecho. Tokio, ¿por dónde empezar? Llegar a la ciudad más poblada del mundo no es cualquier cosa, y muchas veces puede sentirse abrumador. Pero no hay que tenerle miedo, Tokio es mucho más manejable de lo que parece y, sobre todo, muy caminable. Muchos de los barrios que hay que recorrer están cerca y se puede llegar de uno a otro a pie. Sin importar la cantidad de días disponibles, siempre hay que organizar los paseos por zonas para hacer más eficiente el viaje. Moverse en metro y tren es más sencillo de lo que parece: el mapa está diseñado para que pueda leerse sin hablar el idioma. Cada línea tiene un color y un número que la identifica, y lo mismo sucede con las estaciones. Además, todo está escrito en romaji, es decir, nuestro alfabeto. Lo que sucede es que hay mucha información y a primera vista uno se bloquea, pero con calma y sentido del humor se llega a cualquier lado. Dos tips infalibles: el primero, comprar una tarjeta Suica (cuesta 1000 yenes que se reembolsan al devolverla) y ponerle unos 5000 yenes. La tarjeta marca la entrada y la salida del metro y cobra automáticamente el costo del recorrido, lo que facilita mucho la vida (de otra manera los tramos se cobran dependiendo de la duración). Además, se puede usar para comprar refrescos en las máquinas automáticas y hasta para pagar en los FamilyMart y algunos restaurantes. Segundo tip, pedir ayuda. Los japoneses son extremadamente amables y siempre están dispuestos a auxiliar al turista perdido. Basta pararse delante del mapa con cara de perrito confundido y no tardará en aparecer un alma caritativa. Hasta hace poco no era común que los japoneses hablaran inglés, pero esto ha ido cambiando. Durante los últimos años se ha implementado una intensa campaña para que los japoneses estudien inglés, esto con miras a recibir a los miles de turistas que llegarán a Tokio para las olimpiadas de 2020.
Cuándo ir Para muchos, la experiencia completa de Japón tiene que ser durante la primavera, cuando se puede disfrutar del espectáculo de las flores de cerezo —sakuras—. No es poca cosa, desde luego, pero por la misma razón, ir durante abril puede costar tres o cuatro veces más de lo normal. Todo está más lleno, desde los hoteles hasta los sitios turísticos. Recomiendo ir en invierno. Es frío, cierto, pero hay algo de esta temperatura que va muy bien con muchas de las experiencias niponas: una sopa caliente, un paseo y, sobre todo, un onsen. No hay mejor momento para animarse a vivir la experiencia de un agua termal que durante el invierno, cuando el contraste entre la temperatura exterior y la del baño es tan extrema. Otra ventaja de ir en invierno es que hay mucho menos turismo y es más fácil encontrar hospedaje. El verano en Japón es intenso, en especial en Tokio y en el sur, por lo que hay que ir preparado para aguantar altas temperaturas. Otoño es, en cambio, un mejor momento. Posiblemente el mejor (aunque no todo mundo puede escaparse en esas fechas).
Aunque los taxis son un poco más caros, no cobran cifras estratosféricas, por lo que son una gran solución por las noches. Casi todos los taxistas hablan algo de inglés o tienen teléfonos inteligentes que les traducen; son educadísimos, van siempre uniformados y con guantes blancos. Además, no hay nada más bonito que subirse a uno de esos coches impolutos, cuyos asientos están siempre, siempre, recubiertos de un bordado en ganchillo. Más nipón, imposible.
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La cara más sonriente de Japón Yakushima, la isla favorita del excéntrico cineasta norteamericano Matthew Barney, es un refugio subtropical con playas de arena blanca y entorno selvático donde salir con camisa hawaiana no está fuera de lugar. Por Debbie Pappyn Fotos David De Vleeschauwer
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Finalmente, la locura y la intensidad de turistear por todo Japón terminaron. Todos los básicos listos y tachados de la lista. Pero no hay por qué irse sin un momento de relax. Ya no en un tradicional onsen, sino en una paradisiaca isla tropical de arena blanca, lejos del caos de Tokio, perdida en alguna parte, más cerca de Taiwán, en las interminables aguas del Pacífico. Uno podría elegir las islas de Okinawa, mucho más populares, pero hay más: la región de Kyushu, en el extremo sur del país, y algunas de sus islas. Una de ella es Yakushima, que es parte de las nueve islas volcánicas Umisumi. La isla, de 504.88 kilómetros cuadrados se ubica en el sur del mar de la China y solamente la habitan unas 13 000 personas —13 178 según los últimos datos— con un ritmo de vida bastante más tranquilo y lento que el resto de Japón. Junto a ellos unos 300 000 turistas, en su mayoría japoneses, visitan la isla cada año. Sólo hay que preguntarle a Matthew Barney, el excéntrico artista americano que estuvo casado con la cantante islandesa Björk. Alguna vez puso a Yakushima en su lista de los lugares más hermosos para conocer en el mundo. Esta pequeña isla subtropical está a dos horas en ferry de la ciudad sureña de Kagoshima. ¿Y qué le ve Barney de especial a la isla? Seguramente, tiene que ver el hecho de que la espectacular fauna al interior de la isla esté protegida por la unesco. La selva, muchas veces cubierta con un musgo esponjoso y venenoso, y repleta de antiguos sugi —cedros japoneses
En esta pequeña isla habitan unas 13 000 personas con un ritmo de vida bastante más tranquilo y lento que el resto de Japón. El viejo bosque subtropical de la isla resguarda más de 1 900 especies y subespecies, además de ejemplares de sugi o cedro japonés.
que tienen más de siete mil años—. Algunas veces hay sikas saltando por ahí, una especie de pequeños venaditos que no le tienen miedo a los curiosos que llegan con cámaras y selfie sticks. Todas las islas del país suelen tener algo de bizarro y de atípico comparado con el resto de Japón. Aquí los turistas japoneses vienen a bucear, a hacer hikes por la naturaleza, a practicar paddle board, kayak o, simplemente, a disfrutar de los baños termales y la naturaleza. Son felices cuando llega la hora de quitarse el traje y la corbata y cambiarlo por una kariyushi, la versión nipona de la camisa hawaiana, y entonces pueden dejar atrás la estricta vida del oficinista. Pieds-dans-l’eau, al estilo japonés Hay que hacer lo que hacen los japoneses. En Yakushima hay que dormir en un minshuku, ésta es la versión local de un albergue sencillo y accesible donde generalmente la cena está incluida. Para los jóvenes de espíritu, estos sencillos pero tradicionales hostales son la mejor manera de acercarse a este Japón tropical. Nuestro favorito fue Shikinoyado Onoaida. El desayuno japonés y la cena se sirven en una terraza con vistas al monte Moccyomu —si el buen clima lo permite, claro—. Y el lugar no podría ser más auténtico. Por la tarde, el dueño, que es muy amigable y que además habla un poquito de inglés, ofrece un menú de delicias niponas, muchas veces con énfasis en todo aquello que proviene del mar. Se instalan pequeñas parrillas en el centro de las mesas y el concepto de “hágalo usted mismo” automáticamente relaja la atmósfera y crea un ambiente amigable entre los viajeros. Uno no tarda en compartir el tarro de cerveza Sapporo helada con los vecinos. Shikinoyado Onoaida tiene incluso algunas habitaciones estilo occidental, con camas en lugar de tatamis y baños privados. Para los que estén buscando algo un poco más lujoso, entonces hay que quedarse en Sankara Hotel & Spa, un hotel que se ubica un poco más alto, escondido entre el verde del bosque y con hermosas vistas al mar desde donde cada mañana el sol monta un espectáculo al salir. Los huéspedes japoneses le tienen especial cariño al hotel y siempre están listos
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73 CÓMO IR Se puede llegar a Yakushima en avión, desde Osaka (90 minutos) o desde Kagoshima (30 minutos). JAL es la única aerolínea que ofrece vuelos a la isla. Hay también ferries rápidos desde Kagoshima, el recorrido toma cerca de dos horas y media. Para los que prefieran manejar, es importante señalar que hay que traducir la licencia al japonés. Esa traducción puede hacerse en cualquier compañía de renta o en JAF. rhinocarhire.com y jaf.or.jp Solucionado ese tema, manejar por la isla es muy sencillo.
Suginoya, el artista local que trabaja en madera sostenible.
para tomarse todas las fotos necesarias en la grandísima alberca. Pero ¿qué más hacen los locales además de tomarse fotos en la excéntrica isla? Hay onsens —aguas termales— naturales a lo largo de toda la línea de la costa, donde también se han tenido que levantar barreras naturales menos atractivas para detener a las tormentas y tsunamis que pueden llegar a la isla. La mayor parte del tiempo uno está solo: tú, las aguas termales y el mar. De vez en cuando aparece un pequeño pueblito en la costa o alguna playa de arena blanquísima donde algunas veces hay alguien tomando un baño. Nuestra favorita fue Inakahama Beach, el lugar donde las tortugas llegan a desovar y donde nacen desde agosto hasta principios de octubre antes de encaminarse al mar azul. Justo en la playa está Soyotei ryokan, un antiguo hotel familiar de apenas 11 habitaciones, con sus tradicionales pisos de tatami en una construcción de madera con vistas al mar. El precio de la habitación incluye el desayuno y la cena, y los huéspedes pueden literalmente disfrutar del menú casero y delicioso con los pies en el agua.
El famoso cedro Pero Yakushima es mucho más que playas de sol. El interior de la isla es verde, salvaje, mohoso, húmedo y un poco miedoso por esos gigantescos cedros que parecieran casi tocar el cielo desde esta isla pequeñita. A los japoneses les encanta. Se visten como si fueran boy scouts y recorren todos los caminos del interior, a lo largo de senderos bien trazados que atraviesan ríos y cascadas. La madera de cedro es sagrada para los japoneses, la atesoran, y por eso nada les parece más hermoso que llevarse a casa un souvenir hecho con ella —de árboles muertos, ojo, no talados. Si uno sigue la circunnavegación de Yakushima, de preferencia en un coche rentado, sin duda habría que hacer una parada en Suginoya, donde un artista local hace trabajo en madera y ha conseguido convertir este oficio en todo un arte. Sus delicadas piezas utilizan solamente madera vieja o sostenible. También se pueden comprar piezas únicas a precio un poco más elevado: una cuchara de madera cuya curvatura es natural y sería ideal para una ceremonia del té, o delgadísimas cha-
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74 CUÁNDO IR El clima es muy húmedo y muy caliente durante los meses de verano. Las temperaturas casi nunca bajan de los 17º C. La mejor temporada sería ir en otoño.
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75 Dร NDE DORMIR En Yakushima Shikinoyado Onoaida Desde 66 euros por persona, con desayuno y cena incluidos. h3.dion.ne.jp Sankara Hotel & Spa Desde 490 euros, para dos personas, media pensiรณn. sankarahotel-spa.com Soyotei ryokan Desde 100 euros por persona, media pensiรณn. yesyakushima.com Suginoya cottages Desde 80 euros por noche en un cottage para dos. booking.com/hotel/jp/ wa-no-cottage-sen-no-ie. en-gb.html En Kagoshima Gajoen ryokan 560 euros por noche para dos personas con todo incluido. gajoen.jp
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Soyotei ryokan, un proyecto familiar de apenas 11 habitaciones sobre la playa de Inakahama.
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rolas de formas caprichosas donde las vetas del cedro todavía se aprecian. Por menos de nueve dólares uno puede hacer sus propios palillos chinos, obviamente, también de madera de cedro. En Suginoya también es posible pasar la noche en unos chalets de madera ocultos en el denso bosque y donde el sonido de fondo será el paso del agua en el arroyo cercano. También aquí hay un onsen con vistas a la abundante naturaleza y rodeado de la densa jungla de cedros de Yakushima. Tal vez fue aquí donde Matthew Barney tomó un baño, y después de haber compartido un vaso de sake con el señor Suginoya, decidió que éste era uno de los lugares más mágicos del planeta. Más de Kyushu Kagoshima es una agradable ciudad portuaria, vecina de un impresionante estratovolcán, el Sakurajima. Nosotros tomamos el Hayato no Kaze, el tren histórico que nos lleva a Kareigawa Station, una de las paradas de tren más antiguas y pintorescas del país. Por un momento nos da la impresión de que el Hayato es hermano menor del Orient Express: negro brillante con letras doradas y ventanas panorámicas que miran hacia el verde y exuberante paisaje de Kyushu. La mujer que se encarga de revisar los boletos va impecablemente vestida y nunca pierde la sonrisa, dándole la bienvenida a cada pasajero. En Kareigawa, una estación que fue construida en su totalidad en madera oscura, la pequeña plataforma hace que todos los viajeros sientan un poco de nostalgia. Al salir tomamos un taxi a Wasure no Sato Gajoen, una joya de ryokan que se esconde junto a un río con fuertes corrientes y unas humeantes aguas termales. Los viajeros llegan hasta aquí para relajarse y entregarse al régimen de ryokan-onsen. Uno se registra y recibe a cambio una yukata —un tipo de kimono informal, además de calcetines y chanclas de madera—. Hay también una especie de saco, para la época de frío y una pijama, para la hora de dormir. En un ryokan la idea es que uno no tiene que usar su propia ropa, sino enfundarse en la yukata y relajarse, como lo hacen los japoneses.
En Suginoya, un artista local transforma pedazos de madera vieja o sostenible en delicadas piezas de formas caprichosas. En Wasure no Sato Gajoen hay varios baños termales públicos de fuentes naturales con agua calientísima, pero también hay algunas habitaciones que ofrecen su propio baño privado, para aquellos que prefieran un poco de privacidad a la hora de entrar desnudo al agua (en Japón es impensable entrar a un onsen con traje de baño o cualquier tipo de prenda). La mayoría de los ryokanes siempre incluyen las comidas, especialmente el desayuno nipón (hay que olvidarse de los croissants o incluso del café, aquí se empieza el día con té verde, arroz, pescado, sopa miso y otras delicias locales), mientras que la cena suele ser un catálogo de pequeños platitos además de un platillo principal. Wasure es un tesoro bien oculto donde uno puede toparse con elegantes pollos que deambulan por los caminos que llevan a las habitaciones, y donde los únicos sonidos que llegan provienen del río y de la naturaleza combinados con el olor de las chimeneas. En las noches, después de la cena —en la privacidad de la habitación, pues cada huésped tiene una host que se encarga de servir la cena en el cuarto— todo el mundo se encuentra para tomar un sochu alrededor de una fogata al aire libre. De vez en cuando un pollo japonés se asoma, como para revisar que todo transcurra en orden. Y es que esta vida tranquila y llena de calma, en el sur de Japón, puede ser increíblemente simple y hermosa.
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Las piezas de Suginoya pueden admirarse en este estudio dentro de la propiedad.
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De qué hablamos cuando hablamos de comida japonesa Éstos no son “los mejores” restaurantes de Japón, sino las experiencias que nos regalaron más momentos ricos, divertidos, amables y fuera de lo común. Por Brenda Legorreta Curaduría de la chef Adriana Lerma “Miwi” Fotos Diego Berruecos
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“En la cocina, no importa de quién ni cómo sea, o en cualquier sitio donde se haga comida, no sufro”. Banana Yoshimoto, Kitchen
En Butagumi se ofrecen 50 variedades de cerdo, en distintos cortes, preparadas como tonkatsu.
Los cuervos sobrevuelan los cielos de Tokio y Kioto. Ambas son ciudades accesibles que facilitan la vida a los débiles visuales, ya que cuentan con paneles en braille sobre las banquetas. Las calles se organizan por bloques en lugar de nombres. Las fachadas de los edificios tienen azulejos blancos y grises. Los cables de luz están revueltos. Si llueve, los japoneses andan en bici con el paraguas abierto; y si van al béisbol, las aficiones se turnan para echar porras cuando su equipo batea. Los niños van y vienen solos a la escuela. Los ancianos suben las colinas con un bastón y una
joroba que no les permite levantar la mirada. En el metro se escuchan melodías que salen de bocinas invisibles, pero la gente anda en silencio: cada vagón es como una biblioteca. Se siente la humedad de la isla. Se piensa primero en el otro. Éstas son algunas de las cosas que nadie nos había contado sobre Japón. Tampoco se habla mucho de su variedad gastronómica más allá del arroz y el pescado. Nosotras decidimos hacer un viaje culinario fuera del lugar común para averiguar qué ofrece la comida japonesa más allá de esas ideas preconcebidas.
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TONKATSU El plato con el que inauguras un viaje marca la bienvenida al país que visitas, y existe una alta probabilidad de que sea la comida que más recuerdes. Por eso, no hay mejor manera de iniciar tu viaje a Tokio que con un banquete de tonkatsu: un corte de cerdo premium con la proporción exacta de empanizado crujiente. A nosotras nos recibió con brazos abiertos el Butagumi, en la zona de Nishi Azabu. Lo reconocerás por ser una pequeña casa con una puerta de madera y un letrero de bienvenida con una media luna. Además de acogedor, este restaurante tiene 50 variedades de cerdo. Destaca el ibérico de bellota y el mangalica; de los japoneses, el Hokkaido y el Gunma. Nos sentamos en el segundo piso, sin zapatos, en una mesa de banco corrido que quedaba como sumergida al ras del suelo. A nuestro lado dos parejas jóvenes estaban en una mesa baja, sentados en cojines con las piernas cruzadas en el piso. El menú parece una enciclopedia por la cantidad de páginas que tiene y te muestra un diagrama del cerdo con las partes a elegir. Pedimos belly y tenderloin, pero no hay por qué preocuparse, cualquier decisión será correcta. También ordenamos nuestras primeras cervezas japonesas que nos acompañaron a lo largo del viaje: Asahi, Kirin y Sapporo. A la hora de servir los platillos, la mesera se sentó de rodillas (lo que los japoneses llaman seiza) para acomodar todo en la mesa, dándonos la sensación de formar parte de un ritual. En este lugar colocan el tonkatsu so-
bre unas rejillas de cobre del tamaño del plato para que el borde empanizado con hojuelas de panko no se humedezca y se mantenga crujiente. El cerdo dorado a la perfección, jugoso y tierno, viene con arroz al vapor, ensalada de col, verduras encurtidas y una exquisita sopa miso. Es costumbre remojarlo en una salsa casera espesa, hecha a base de tomates, ciruelas, dátiles, manzanas, limón y apio. Con esta comida sentimos que Japón nos abrazó. Cuando dejamos los platos vacíos, miramos a las parejas de al lado: para ellos era una tarde cotidiana de sábado; para nosotros, inolvidable. Hay otro tonkatsu imperdible en Tokio, no sólo por tener una Bib Gourmand Michelin (que reconoce las buenas mesas asequibles), ni por la personalidad seria y atractiva del chef, Seizo Mitani, quien desde la cocina controla el restaurante con la mirada y atiende a los comensales en la barra, sino también por la oportunidad de ver cómo preparan el mejor cerdo del mundo: el de Okinawa. El restaurante se llama Narikura, y se encuentra en Takadanobaba, es un sótano y el menú está sólo en japonés. Nosotras elegimos a ciegas el corte y el tipo de cerdo. Sin saber qué significaba nada, cada una señaló algo diferente en la carta y, de nuevo, no hubo error: todo fue espectacular. Hay que llegar temprano para hacer la fila que va desde la calle hasta las escaleras que descienden al restaurante. Los horarios de comida en Tokio son de 11:30 de la mañana a 14:00, y tiene que estar el grupo completo para entrar. Si bien son algo estrictos durante la espera, una vez dentro te tratan como rey. Las porciones de cerdo aquí son más grandes y se fríen en ollas de cobre a baja temperatura, por lo que la carne queda en su punto, de un color rosa claro y muy tierna; el empanizado también es más crujiente. Quien haya inventado la frase de “barriga llena, corazón contento” seguro comió este tonkatsu.
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Para disfrutar del tonkatsu de Narikura hay que hacer una larga fila, pero por ese sabor bien vale la pena la espera.
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TEMPURA Localizar cualquier restaurante en Japón requiere de paciencia y perseverancia. Por más que el mapa digital indique que has llegado, casi nunca lo verás a la primera. Toda esta búsqueda se convierte en un verdadero reto, casi como resolver un misterio, ya que tampoco es fácil preguntarle a cualquiera. Para llegar a Tempura Abe, en Ginza, dimos como 30 vueltas en la misma esquina durante media hora, pero no claudicamos. La clave fue buscar entre los letreros el ideograma japonés que coincidiera con el de nuestro mapa. La pista la encontramos en un elevador en plena calle que señalaba al botón del sótano. Pensamos que quizás invadíamos propiedad privada, pero en cuanto descendimos y se abrieron las puertas supimos que habíamos llegado al lugar indicado. La recepción es un espacio muy pequeño, y el restaurante, sin ventanas, cuenta tan sólo con 12 asientos en la barra y una mesa chica para cuatro personas. Esperamos en la fila con algo de claustrofobia, hombro a hombro con otras siete personas. Éramos las únicas extranjeras. El elevador se abrió un par de veces con gente que ya no cupo y tuvo que resignarse. Por suerte, a los pocos minutos, nos asignaron la mesa de cuatro con una pareja de locales que nos enseñó a comer tempura como se debe. Este platillo consiste en verduras y mariscos con un capeado fino, como escamas de pan. La degustación es parecida a una de nigiris, por presentarse pieza por pieza. Hablamos en inglés con nuestros compañeros de mesa y nos sugirieron pedir el Tempura Abe Special Course. Abe es el chef y dueño del lugar con más de 30 años en este oficio. El menú consistió en berenjena, seta, calabaza, camote, cebolla, una pieza de pescado blanco y dos camarones. La fritura era ligera, crujiente, apenas dorada y a la temperatura exacta
Arriba: la solemne barra de Miyakawa, en Aoyama, una institución desde hace más de 50 años. Abajo: dos piezas de camarón —ebi— perfectamente fritas en panko.
para que tanto los vegetales como las proteínas se mantuvieran frescos, en su punto. Al singularizar los ingredientes, el tempura por sí solo te enseña a disfrutar cada bocado y a conectarte con el tiempo presente a través del sentido del gusto. Ese día también aprendimos que vale la pena añadir los distintos tipos de sal en la mesa para sazonar las verduras y los mariscos a tu antojo. Estos condimentos ayudan a realzar las diferentes propiedades de cada elemento y vale la pena consultar al chef para saber qué va mejor con qué. Como guarnición nos dieron la habitual sopa miso, arroz al vapor (que nuestros nuevos amigos locales pidieron en dos ocasiones como si fueran tortillas), y de beber, té verde. Aun cuando este restaurante tiene una Bib Gourmand Michelin, sentimos que descubrimos un lugar clandestino (el cual no íbamos a compartir con nadie, hasta ahora). Y hay más información secreta: cuando llegó la cuenta no creímos el precio, pagamos 1500 yenes (13 dólares, cerca de 255 pesos mexicanos). Dato importante: fuimos a la hora del lunch; por la noche, la misma degustación cuesta cinco veces más. Otro tempura muy especial fue Miyakawa, en Aoyama. El chef Isao Kanemasa se encarga él mismo de su restaurante, que abrió hace 50 años, sólo lo apoya una persona más para servir y retirar los platos. El lugar es más elegante que Tempura Abe, hay más turistas y su especialidad son los mariscos. La calidad del capeado del tempura y de los ingredientes tiene el mismo nivel que el anterior; sin embargo, el carisma y la alegría del chef por su trabajo le dan un valor agregado a esta experiencia. La realidad es que mucho de la gastronomía japonesa gira en torno a una persona hiperespecializada cocinando sus platillos con paciencia y dedicación durante toda su vida. Conversar con ellos, en la medida de lo posible, fue muy valioso para nosotras. Al chef Kanemasa, como a muchos otros, le dijimos “oishii” (delicioso) y “gochisosama deshita” (gracias por una comida exquisita), e hicimos una reverencia al despedirnos. Era nuestra manera de rendir tributo y agradecer a estos grandes maestros.
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Ramen en Afuri, donde el pork belly se cocina al carbón para profundizar su sabor.
RAMEN Comer ramen en su lugar de origen es cruzar un umbral sin retorno. Es como ver una obra de Shakespeare en Londres, por más que se replique —y hasta supere— en otras partes del mundo, nada se compara a disfrutarlo en el contexto debido. A simple vista, el ramen parecería sólo una sopa de fideos, pero la realidad es que desde la primera cucharada te sumerges en un potaje de complejidad culinaria. Nuestro preferido en Tokio fue Afuri, en Omotesando. Se trata de una cadena que tiene varias sucursales, pero ésta, en particular, se encuentra en un barrio con increíbles tiendas de diseño e interesante arquitectura en los alrededores. Después de hacer fila por casi una hora, llegamos a la máquina en donde ordenas tu pedido, y nos pareció el monolito de Kubrick. Por intuición desciframos las opciones, elegimos: base de caldo, tipo de noodles, nivel de
picante. También, los toppings: cerdo, huevo, alga, y el tamaño de la cerveza. Optamos por una pinta. Al finalizar la compra, con efectivo o tarjeta, se imprimen unos boletitos con lo que seleccionaste y debes entregárselos a alguno de los cocineros. Nos sentamos en la barra alrededor de la cocina abierta para observar la preparación del platillo y abrir el apetito con una cerveza helada. Lo que hace a este ramen tan diferente es el método de cocción: asan la pieza de cerdo (pork belly) al cabrón y el ahumado permea el caldo. El huevo perfecto (no es adjetivo, así se le llama), con la yema blanda y la clara dura, también le da una particular consistencia cremosa. Y el balance precio-calidad es maravilloso. El plato llegó más pronto de lo que imaginamos y muy caliente. Del caldo salía un vapor denso, como el de las caricaturas. Nos detuvimos por un instante a
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apreciar su belleza. Fue imposible resistirnos a tomarle una fotografía, y una parte de mí se sintió apenada por romper el orden de ese universo con la cuchara. Al igual que en muchos restaurantes (menos los izakayas, que son como cantinas) aquí no hay tradición de sobremesa. Comes y te vas. Los japoneses degustan el ramen a gran velocidad, sorbiendo los noodles aun cuando el caldo está hirviendo. Se nos antojó poder comerlo así algún día, estamos seguras de que se disfruta más de esa manera que a cucharadas lentas. Al salir coincidimos en una idea: “Comer ramen en Tokio y después morir”. La variedad de ramen en la capital nipona es enorme, desde los que tienen mención Michelin, como el Menya Ishin, hasta los sobas milenarios hechos de trigo sarraceno, como el Sarashina-horii; pero otro que a nosotras nos cautivó se llama Ichiran y tiene sucursales en
todo el país, desde su natal Hakata hasta Tokio y Kioto. Al igual que el anterior, el ramen se le ordena a una máquina para armarlo a la medida, como si fuera el avatar de un videojuego. La experiencia aquí es fascinante porque no ves a ninguna de las personas que atienden. La barra alrededor de la cocina está diseñada con cabinas que dividen los lugares de manera individual y ocultan a los cocineros. Sólo se escuchan sus voces trabajando, y sabes de su existencia hasta que abren una cortinita y aparecen unas manos con tus alimentos. Para llamarlos hay que pulsar un botón y apuntar en una hoja de menú lo que necesitas. Tanto el sabor potente del caldo de cerdo, reducido por un mínimo de 14 horas, como la opción de pedir otra taza de noodles para alargar ese deleite en solitario son un distintivo de este ramen, al igual que la salsa picante que es la receta secreta y sello del lugar.
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YAKITORI A diferencia del resto del mundo, en Japón se puede fumar en locales cerrados y no en la calle. La lógica detrás dicta que el ciudadano elige libremente asistir a un lugar privado a diferencia del espacio público, que es de todos y no debe estar supeditado al gusto de unos cuantos si dañan a los demás. En el delicioso yakitori de KushiWakaMaru, en Nakameguro, se puede fumar. Contrario a lo que se pensaría, la atmósfera del lugar es muy agradable y no se percibe ningún tipo de humo por la tecnología de los extractores. Este platillo, que consiste en sencillas brochetas, se ofrece en espacios mucho más relajados, menos sobrios y más ruidosos. Las mesas casi se enciman unas con otras, como si estuviera hecho a propósito para obligar a la convivencia mientras los platos llegan conforme van saliendo de la cocina abierta desde el centro del restaurante. Se podría pensar que el yakitori se trata sólo de un acompañamiento a la charla, la bebida y el cigarro, pero nada es secundario en Tokio, cada pedazo de comida prensado en ese palito de madera es un manjar. Aquí cocinan las brochetas en asadores especiales, con un tipo de carbón cuadrado que se consume más lento y dura más tiempo, aunque de vez en vez los cocineros reviven el fuego con sus abanicos de palma. Constantemente las giran para lograr la cocción perfecta, y luego las barnizan con una pincelada de salsa a base de soya agridulce que las carameliza. Probamos pollo, pescado, res y una variedad de verduras del menú. Todo estaba jugoso por dentro, perfectamente sellado, saladito y ahumado. El yakitori es ideal para acompañar con cerveza y sake. En este local lo sirven en unos vasos de bambú (que ojalá los vendieran). Del techo de la barra cuelgan tablas de madera con el nombre de las brochetas que aún hay disponibles, que van quitando conforme se terminan, y la cuenta se cobra a partir de la cantidad de palitos de madera que dejas al centro de tu mesa en un vaso de porcelana. Tan bien nos la pasamos aquí, que regresamos a los dos días.
SHABU-SHABU No sé si es por el imaginario de nuestra infancia, pero siempre habíamos querido conocer una casa tradicional japonesa. Nuestro deseo se hizo realidad en el barrio de Gion, en Kioto, en el restaurante Junidan-ya, en donde además presumen la creación del shabu-shabu, un platillo de carne y verduras que uno mismo se cocina en la mesa al sumergir los ingredientes en la olla del centro con agua hirviendo. El lugar es una casa de madera, que los japoneses llaman machiya, la cual fue construida hace más de un siglo y se conserva en su disposición original. Conviene ir de noche para que sea una experiencia aún más interesante por la atmósfera que crea la iluminación interior. Al entrar, nos presentaron a nuestra host vestida en un precioso kimono azul marino. La seguimos sin zapatos hasta nuestro cuarto privado (previamente reservado), que parecía la sala de un samurái poderoso, con sus clásicas puertas corredizas, conocidas como shōji, de marco de madera y papel washi traslúcido. En las paredes colgaban como guardias los grabados en blanco y negro de unos monjes de ojos grandes, obras originales del artista Shikō Munakata. La mesa en el centro a la altura del piso era la protagonista en espera de sus comensales, y en vez de sillas había cojines. El menú de shabu-shabu lo elegimos previamente, así que nos pusimos en sus manos, un acto de desapego muy recomendable en Japón. Como entrada nos dieron una serie de platillos por pieza que debían comerse en sentido opuesto a las manecillas del reloj. Algunos fueron imposibles de descifrar, una especie de canapés de huevo y tofu con texturas desconocidas para nuestro gusto; otras, consistían en sashimi, alitas de pollo, miniberenjenas. Después, llegó la olla de cobre con agua hirviendo, como una especie de lámpara de Aladino, las charolas con verduras (col, hongos, enoki) y seis delgados filetes de carne wagyu de Tamba (región cerca de Kioto) para cada una. Las vacas de las que proviene esta carne han tenido una buena vida: han sido masajeadas diario para que la grasa quede distribuida equitativamente. Nuestra
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Sake, cerveza y brochetas, la especialidad de KushiWakaMaru. El tip: no tener miedo y pedir hĂgado, corazĂłn y otras rarezas, siempre son las mejores.
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GastronomĂa
93 Izquierda: aperitivo en Junidan-ya, con camarones, mejillones, pescado asado, alitas de pollo y rollitos de tofu. Abajo: delicado corte de wagyu de Tamba para el shabu-shabu.
host nos explicó que la col debíamos dejarla por más tiempo, pero para la carne nos dio una técnica: tomar el filete con los palillos de madera, meterlo en el agua y moverlo de un lado al otro diciendo dos veces en voz alta: “Shabu-shabu, shabu-shabu” y ¡listo! Probablemente nos relajamos demasiado al estar en un cuarto privado, porque no censuramos ninguna de nuestras exclamaciones de “mmmm” con la carne que se derretía en segundos en nuestra boca. Al terminar la cena, que acompañamos con sake y cerveza, nos escapamos a inspeccionar la casa. Con una sensación onírica, caminamos por los pasillos entre las puertas de papel blanco cerradas. El piso crujía debajo de nuestros pasos, y los murmullos en japonés se enlazaban como estrofas de poesía renga. Ahí, descalzas en esa machiya, escuchando ese rompecabezas lingüístico mientras afuera caía una lluvia de otoño, hicimos conciencia de estar del otro lado del mundo.
94
CAFÉS, TÉ VERDE, BARES Y UNA PIZZERÍA Al pan tostado, huevo y café, los japoneses lo llaman “desayuno occidental”, ya que ellos suelen comer por la mañana pescado crudo y vegetales. Para no perder tiempo buscando nuestro habitual alimento matutino, optamos por los exquisitos sándwiches de huevo duro empaquetados y los onigiris (triángulos de arroz envueltos en alga y rellenos de delicias como ume o salmón) que venden listos para llevar en los 7 Eleven. Y después, eso sí, buscábamos un buen café. Hay excelentes opciones por todos lados, pero hay uno muy diferente que vale la pena conocer: el Koffee Mameya, en Omotesando. El lugar es un cubo de concreto, un espacio impecable y silencioso de pequeñas dimensiones, atendido por tres baristas vestidos con bata blanca como de laboratorio. A diferencia de la tendencia de servir el café en serie, aquí no tienen prisa, le dan tiempo y atención a cada cliente, como si fueran a recetarte un medicamento. No hay comida, ni galletas, ni revistas, ni tazas a la venta: sólo café. Tampoco sillas, sillones y mesas, el café se toma de pie en la barra o lo puedes llevar. Te harán preguntas sobre tus gustos y preferencias para darte su mejor recomendación. El expreso doble que probamos estaba cremoso, sin ser cortado, con una amargura balanceada y un aroma que se disfruta desde antes de tomarlo. Es posible también comprar granos del café que más te haya gustado. Yo elegí el Ogana. Te lo entregan en un hermoso costal de tela, en donde incluyen la fórmula exacta para prepararlo en casa, cantidad de agua, el nivel de temperatura y la manera de molerlo. Otros dos cafés muy agradables, y con desayuno occidental, son el Clamp Coffee Sarasa, en Nakagyo-ku, Kioto, y el Kayaba Coffee, en Yanaka, Tokio. El primero es un lugar contemporáneo; el segundo existe desde 1938. En Clamp crearon un concepto interesante al tostar café in situ. Parece una especie de fábrica con una gran selección de música (en ese momento sonaba un acetato de Count Basie y Dizzy Gillespie), objetos de diseño y libros para consulta (nos encantó el de Cooking with Scorsese and Others de Hato Press). Se encuentra
Aquí no tienen prisa, le dan tiempo y atención a cada cliente, como si fueran a recetarte un medicamento. en una zona residencial, de camino nos acompañaron los cantos budistas de un templo. Junto al local hay una tienda increíble de antigüedades (Artifact 32) y otra muy bonita de plantas (Cotoha). Por su parte, el Kayaba es un local de principios del siglo xx en el barrio más antiguo de Tokio. Ofrecen un café de gran calidad y desayunos deliciosos con una guarnición de sopa de cebolla. Nosotras empezamos el día aquí y después recorrimos las calles de Yanaka, las cuales conservan la atmósfera de otra época. Si en lugar de café buscas té verde, el mejor lo hacen desde hace 300 años en Ippodo; donde hay salones especiales para disfrutar del ritual o para tomar un taller. Durante el viaje también conocimos algunos bares. En Kioto descubrimos el Common Bar, escondido al final de un camino de piedras dentro de una casa con un típico jardín japonés. El mayor atractivo es el diseño de la barra de madera brillante, larga y pesada, con sillas bajas. Los bartenders se encuentran del otro lado en un nivel más abajo del piso. Probamos un delicioso martini seco, con la aceituna servida por separado en su propia copa de cristal. Es un buen lugar para tomar una copa antes de cenar. En Tokio nos fascinó el Imperial Bar, que es lo único que se conserva de la estructura original del Imperial Hotel de Frank Lloyd Wright. Fuimos a mediodía, aunque quizá sea mejor ir de noche, pues el espacio es completamente cerrado. La barra de madera también es achaparrada y con sillas bajas para los clientes, pero aquí tienen una iluminación
Gastronomía
95
Desde arriba: Common Bar, en Kioto, la barra de cafĂŠ de Koffee Mameya, en Omotesando, y una inigualable pizza marinara en Savoy, en el barrrio de Azabujuban.
GastronomĂa
96
Para desayunar y empezar bien el dĂa, Kayaba en el barrio de Yanaka, muy cerca de Ueno.
97
especial que proyecta varios círculos que delimitan el área donde sirven cada trago. La decoración mezcla murales tipo frescos, con piedras de estilo prehispánico y columnas adornadas, todo conectado de manera simbólica, geométrica y minimalista. Como muchos otros locales en la ciudad, el Ginza Music Bar se encuentra en un cuarto piso. El espacio es rectangular con sillones de terciopelo e iluminación azulada. Los ventanales ofrecen una increíble vista a los edificios delgados y los letreros luminosos. Nos enteramos de que para abrir un bar no necesitas permiso. Una vez que lo inauguras sólo tienes que dar aviso al gobierno de que has iniciado labores, y ellos confían en que los ciudadanos respetarán las reglas de convivencia. Así cualquiera puede compartir edificio con el bar más popular y nunca escuchará ruido, ni será molestado por los comensales. El Ginza Music Bar nos hizo pensar en el escritor Haruki Murakami. Se notaba que el dueño era un melómano apasionado con la colección de acetatos más impresionante que haya visto, no por la cantidad sino por la selección. El volumen al que se escuchan los discos era perfecto para conversar, pero también para notar el sonido raspado de la aguja sobre el vinilo. Sólo había dos personas atendiendo el lugar, ambos servían tragos y ponían los discos. En la repisa de arriba colocaban la portada del que vendría y en la de abajo el que escuchábamos, lo cual hace que continuamente prestes atención a la música y te quedes por más tiempo. Sin duda, fue uno de nuestros bares favoritos. Otro gran detalle es que en las servilletas viene apuntado el número telefónico del bar como si estuviera escrito con pluma. Una tendencia en Japón es la recuperación y reinvención del pasado, los negocios no dan nada por pasado de moda. Aunque turístico, el Memory Lane de Shinjuku es una experiencia única de bares diminutos, entre callejones, uno tras otro. Son más de sesenta. Nuestro objetivo fue encontrar el bar al que asiste el fotógrafo Daidō Moriyama. Utilizamos nuestra misma estrategia detectivesca de buscar la pista a partir de la letra japonesa en nuestro mapa, y lo ubicamos rápido, pero desafortunadamente estaba cerrado. De cual-
quier forma seguimos caminando. Todos los bares estaban llenos, tuvimos suerte de encontrar lugar en uno llamado Euphoria. Sólo cabíamos ocho personas en la barra, escuchamos buena música y no nos quedó de otra más que convivir con las personas que estaban ahí, una pareja local y otra de australianos. Hablamos de las costumbres alrededor del trago en nuestros países, algo de política y futbol. Y brindamos por la ciudad en la que Moriyama ha caminado desde hace 50 años para transformar los instantes urbanos, como ése, en imágenes monocromáticas como expresiones del deseo. Por último, aunque parezca extraño, tenemos que hablar de una pizzería en Tokio. Abrió en 2016 en Azabujuban, se llama Savoy y tiene fama de ser una de las mejores del mundo (en parte culpa de David Chang y su serie Ugly Delicious). El chef Tsubasa Tamaki decidió únicamente cocinar dos tipos de pizza: marinara y margarita. Una vez más, nos sentamos en la barra con espacio para diez personas alrededor del horno de piedra para observar la forma de preparación. La masa la sacó de unas cajas de madera que conservan la humedad, el ajo lo cortó rapidísimo en las capas más finas que jamás habíamos visto y no escatimó en el aceite de oliva, el cual vertía de una jarra de cobre sobre la pizza antes y después de meterla al horno. Por el sabor puro, simple, la sensación del tomate, el aceite de oliva que parece mantequilla, el aroma del ajo y el orégano, la marinara fue nuestra preferida. Los japoneses saben llevar las cosas a la perfección, y esta pizza fue una sorpresa que rebasó nuestras expectativas. Cuando volvimos a México, nuestra visión había cambiado. Japón nos confrontó con nuestro anterior concepto de civilización y evolución. Las comparaciones fueron inevitables, aunque tampoco nadie nos lo advirtió. En el terreno gastronómico, se sembró en nosotras una nueva forma de apetito: ahora cuando tenemos antojo de comida japonesa en lo último que pensamos es en sushi.
Agradecemos a Toshi, Riku, Maru y María por sus recomendaciones.
Gastronomía
99 Atelier
Atelier OBJETOS, MODA, TECNOLOGÍA, BELLEZA E HISTORIAS DE MARCA
Seleccionamos algunos objetos que hemos ido adquiriendo en nuestros viajes por este país, desde piezas de papelería que rescatan técnicas tradicionales hasta jarras para sake con un diseño más contemporáneo. Hace más de 20 años, Sony lanzó su primer perro robot al mercado. Hoy, el modelo Aibo ERS-1000 presume grandes avances tecnológicos, como reconocimiento facial de hasta diez personas. sony.com.mx
Recuerdos de Japón
100 Atelier Fotos tomadas con Nikon
Washi Washi Delfonics es una de las marcas de papelería más respetadas de Japón; su colección de libretas Rollbahn refleja su calidad y atención por el detalle. Craft Design Technology es otra compañía nipona que se ha especializado en piezas de diseño que rescatan técnicas tradicionales. No podemos dejar de incluir a Traveler’s Factory, una papelería que se especializa en productos para viajeros, y Midori, tal vez la más internacional de las marcas de papelería japonesa. delfonics.com / craftdesigntechnology.co.jp / travelers-factory.com / midori-japan.co
102 Atelier Fotos tomadas con Nikon
Destilado nipón Si bien la producción de whisky en Japón comenzó a principios del siglo
xx ,
los últimos años han sido testigos de un boom
importantísimo a cargo de marcas como Suntory Whisky Toki, Yamazaki, Hibiki y Akashi, las cuales han sido acreedoras a múltiples reconocimientos internacionales. La mayoría de los whiskies japoneses son una combinación de varios blends, aunque también es posible encontrar single malts de gran calidad. En México, uno de los pocos lugares especializados en esta bebida es Le Tachinomi Desu, donde también puedes encontrar una muy buena selección de sake y cervezas japonesas. whisky.suntory.com
103 Atelier Fotos tomadas con Nikon
Ceremonias En Japón, comer y beber siempre involucran un protocolo. Para preparar el té, un batidor de bambú ayuda a mezclar el agua con el polvo de manera delicada, y los cuencos de cerámica funcionan para servir el arroz blanco que acompaña todas las comidas. Los palillos se apoyan en una sencilla pieza de cerámica para evitar que toquen la mesa y, finalmente, para el sake, un diseño más contemporáneo que incluye los vasos y la jarra creado por Daisaku Choh para Plus-D. plus-d.com
T R AV E S Í A S NIKON
Nikon en la historia
Nikon Model I, lanzada al mercado en 1948.
Sede original de Nikon en Tokio (1917).
Con más de 100 años de existencia, la empresa japonesa ha estado presente en momentos clave de la humanidad, preservándolos para siempre.
Binoculares MIKRON, de los primeros diseñados por Nikon.
La historia de Nikon se
todo lo referente a instrumentos
remonta a 1917, cuando dos
ópticos, como periscopios y
de las empresas líderes del
binoculares.
sector de la óptica decidieron
En 1946, poco después de
unir sus fuerzas para la
haber terminado la guerra, la
creación de Nippon Kōgaku
compañía cambió su nombre al
Kōgyō. La empresa comenzó
que conocemos hoy en día. Nikon
fabricando lentes, binoculares,
es resultado de la mezcla de
microscopios e instrumentos
Nippon Kōgaku (óptica japonesa)
de medición y de precisión
y de Ikon, como referencia a las
para cámaras fotográficas
cámaras Zeiss Ikon, fabricadas
y otros aparatos. Uno de
por una subempresa del gigante
los acontecimientos más
alemán Karl Zeiss.
importantes en esta etapa de
Guiada por una filosofía
la empresa japonesa fue haber
corporativa de confiabilidad y
sido el principal proveedor
creatividad, Nikon ofrece una
del ejército nipón durante la
amplia gama de productos
Segunda Guerra Mundial en
y servicios a nivel mundial,
Telescopio Subaru.
La selfie espacial de Akihiko Hoshide.
Nikon F3 AF.
Nikon Z7.
aprovechando las tecnologías
DSLR, tanto profesionales
avanzadas de optoelectrónica
como semiprofesionales,
y de precisión. Esto se ha
posicionándolos a la cabeza de
visto reflejado en fotografías
la industria fotográfica. Ahora,
icónicas a lo largo de la historia,
para mantener su puesto como
como la ejecución de un
líder en la cultura de la imagen,
guerrillero del Viet Cong de
su siguiente apuesta es el
Eddie Adams (1968), la chica
lanzamiento de la Serie Z.
Afgana de Steve McCurry (1984)
La nueva montura Nikon Z promete ser el futuro en la cultura de la imagen.
La nueva montura Nikon Z
y la selfie espacial de Akihiko
está compuesta por cámaras
Hoshide (2012), así como
sin espejo y lentes compatibles
intuitiva y alta confianza.
defendiendo la tradición
momentos clave en eventos
NIKKOR Z y accesorios. El
La letra “Z” representa la
de calidad nipona mientras
deportivos, como las Copas del
sistema fue realizado a través
culminación de Nikon en la
responde a la evolución de la
Mundo de futbol y los Juegos
de la búsqueda de una nueva
búsqueda incesante del máximo
tecnología de imágenes. Se trata
Olímpicos.
dimensión en el rendimiento
rendimiento y un puente hacia
de redefinir las posibilidades que
óptico, heredando la tradición
un nuevo capítulo.
proporcionan a los fotógrafos
El crecimiento de la empresa se ha centrado
de calidad, tecnología de
principalmente en sus modelos
imágenes superior, operatividad
Nikon busca expandir el valor de las cámaras sin espejo,
(profesionales y amateurs) para conseguir una mayor creatividad.
P a r a m á s info r m a ci ó n , v isi t a : niko n . c o m. m x
106 Atelier Por Diego Parás
Japón presente en la Bienal de Venecia “Enseñar o experimentar el universo de
lo macroscópico. El resultado: un juego
los datos usando los datos del universo”.
audiovisual estético (y ligeramente
Éste es el concepto detrás de “data-
estresante) que materializa la información
verse”, la primera entrega de la trilogía
que nos rodea, pero no logramos percibir. El meticuloso trabajo detrás de la
en la preapertura de la edición 58 de la
obra de Ryoji Ikeda fue reconocido por
Bienal de Venecia el pasado 10 de mayo.
Audemars Piguet, cuya misión de apoyar
Para realizar este proyecto, el artista
artistas con una compleja manufactura
japonés recolectó información pública
y precisión artesanal refleja el espíritu
de varias instituciones —como CERN, la
de creatividad e innovación que ha
NASA y el Proyecto Genoma Humano—
caracterizado a la marca suiza desde 1875.
para sumergir al espectador en el vasto
La segunda parte de la trilogía de Ikeda se
universo de datos científicos en el que
dará a conocer en octubre de 2019 como
vivimos. Dicha información fue procesada,
parte de la Exposición Audemars Piguet
transcrita, transformada, metaconstruida
en Tokio. La tercera y última variación
y orquestada para visualizar las diferentes
se presentará en 2020, año en el que
dimensiones que coexisten en nuestro
culminará la fructífera relación entre el
mundo, desde lo microscópico hasta
artista y la casa relojera.
CORTESÍA AUDEMARS PIGUET.
audiovisual de Ryoji Ikeda, presentada
T R AV E S Í A S PA RK M G M
Park MGM: deleite gastronómico
Bajo el concepto de “Anything Is Possible”, la primera sucursal de Eataly en Las Vegas incluye dos restaurantes, tres bares y más de 5 000 productos gourmet.
Eataly es una institución de
Por su parte, Best Friend
comida italiana a nivel mundial;
es la propuesta de BBQ
un concepto de “comer, comprar
coreana del famoso chef
y aprender” que comprende una
Roy Choi. Inspirado en la
amplia variedad de restaurantes,
evolución culinaria del barrio
mercado gourmet y escuela de
de Koreatown, en Los Ángeles,
cocina. Eataly cuenta con 37
este restaurante fue creado
tiendas en el mundo, la mayoría
para que los clientes se
en Italia, pero con locaciones
diviertan y disfruten de platillos
en países como Japón, Turquía,
que mezclan inspiraciones
Las Vegas es uno de esos
Las Vegas—, este proyecto de
Brasil, Alemania y Estados
clásicas con toques modernos
destinos en donde siempre
MGM Resorts International y
Unidos. Con una extensión de
y creativos. Los imperdibles: el
hay algo nuevo, ya sea un bar,
Sydell Group se ha convertido
más de 3 700 metros cuadrados
BBQ Spicy Pork —marinado en
un casino, un espectáculo
en un referente de lujo en Las
y bajo la temática de “Anything
una deliciosa salsa kochujang—,
o un gran resort de lujo.
Vegas. Uno de los mayores
Is Possible”, el primer Eataly
Slippery Shrimp —la versión
Prueba de ello es el Park MGM,
atractivos de Park MGM es su
en Las Vegas cuenta con dos
de Roy Choi de los clásicos
que después de una gran
propuesta gastronómica, que
restaurantes, tres bares, un
camarones con miel y nuez—
remodelación abrió sus puertas
va desde el NoMad Restaurant y
mostrador educativo, un
y el Fried Bologna Sandwich,
en 2018 donde anteriormente
el NoMad Bar hasta el Bavette’s
concepto de “counter to table”,
un snack que el chef solía
se alzó el icónico hotel Monte
Steakhouse. Sin embargo, dos
una mesa del chef y más de
preparase en casa y que es
Carlo. Con 2 700 habitaciones
propuestas se han posicionado
5 000 productos de óptima
ahora uno de los bocadillos
y un hotel boutique en los
como favoritas de los viajeros:
calidad, desde gelato hasta
nocturnos más codiciados de
niveles superiores —el NoMad
Eataly y Best Friend.
botellas de vino.
toda la ciudad.
P a r a m á s info r m a ci ó n , v isi t a : p a rk m g m. m g m r e s o r t s. c o m
108 Atelier Por Carolina Peralta Fotos Ángel Gómez
Tokyo Music Bar: tragos, vinilos, mármol verde y terciopelo rosa Tokyo Music Bar tiene un hermano gemelo en
La carta de autor —que es completamente
invitado que toca hasta las dos. Antes son
Tokio: Ginza Music Bar. El Ginza es un lugar
artesanal— cambia constantemente y los
los propios baristas los que ponen música
pequeño y escondido en el cuarto piso de un
tragos tienen nombres de canciones. El
(y lo hacen muy bien).
edificio en el barrio homónimo. Por su parte,
Unsaid, por ejemplo, tiene como base un
Tokyo Music Bar está en el segundo piso de
cordial de fresa quemada, luego le agregan
el terciopelo rosa, aunque la barra —donde
un edificio en la Cuauhtémoc, el barrio que
whisky y lo terminan con té oolong. El Pink
está el equipo de sonido y hacen los
ya comienza a sonar como el “Little Tokyo”
+ White, por su parte, es el clásico negroni,
tragos— es la protagonista del espacio. De
de la ciudad; un título que se le debe (en gran
pero con jugo de sandía.
comer, hay que pedir los chocolates que
parte) al grupo Edo Kobayashi, dueños de
Todas las bebidas se sirven en una
En este bar predomina el verde pino y
Hiyoko, el restaurante que está justo abajo
Rokai, Hiyoko, Le Tachinomi Desu, Enomoto y
hermosa cristalería traída desde Japón,
del Tokyo, prepara exclusivamente para ellos
ahora Tokyo.
tallada a mano y que no pesa nada. Y es que
con ingredientes como soya, miso y otros
en Tokyo, la cristalería es la vara con la que
productos japoneses.
En Tokyo Music Bar cabe poca gente. Se siente como la sala de un departamento (uno
se miden los tragos. Así de exquisitos. La
muy bonito) o como la fiesta más pequeña y
colección de vinilos también viene de Japón
entrañable. La carta de bebidas está dividida
y es bastante variada; otros discos son de los
en tragos de autor y tragos clásicos. En la
socios del bar (melómanos genuinos) o de
parte de coctelería clásica son puristas, lo
amigos de ellos. Alrededor de las nueve de
hacen lo más apegado a la receta original.
la noche llega un seleccionador de música
http:// local. mx
¿Necesitas más inspiración para redescubrir la ciudad? Échale un ojo a nuestra guía de locales para locales.
110 Atelier
Sony, ícono de la cultura japonesa Uno de los principios básicos de la
empezó a colaborar con cineastas para
manera, es pionera y líder en calidad
tecnología es mejorar la vida de las
estandarizar formatos como el 4K —y
musical, tanto en bocinas como en
personas. Por eso, en 1946, los ingenieros
recientemente el 8K—, esto con la intención
reproductores y amplificadores. Un
Masaru Ibuka y Akio Morita fundaron
de reproducir películas con la mejor calidad
gran ejemplo son los Sony 1000XM3, que
Tokyo Tsushin Kogyo Kabushiki Kaisha
posible. Los televisores Bravia MASTER
fueron reconocidos el año pasado como
(Tokyo Telecommunications Engineering
Series, por ejemplo, fueron diseñados para
los mejores audífonos de alta definición
Corporation). El objetivo: brindar
ofrecer una calidad de imagen comparable
por los What Hi-Fi Awards.
experiencias de entretenimiento integrales.
a la de los monitores profesionales que
A partir de 1958 conocemos a la empresa
utilizan los directores de cine. En 2006, Sony adquirió el área de
ha mantenido el mismo compromiso
cámaras de Konica Minolta, lo que dio
de brindar las mejores experiencias de
por superar los límites de la calidad de
inicio a una nueva era en el mundo de la
entretenimiento a través del desarrollo
imagen en televisores. En el año 2000
fotografía. La empresa japonesa, de igual
tecnológico de alta calidad.
Desde sus inicios, Sony se ha distinguido
CORTESÍA SONY.
como Sony Corporation.
Con más de 50 años (25 de presencia en México), no queda duda de que Sony
T R AV E S Í A S GUADAL AJARA
Guadalajara presenta: Semana del Restaurante
La oferta gastronómica tapatía
verdaderamente especiales—
representativos a un precio
crece cada año a sabiendas
durante la Semana del
especial, buscando acercar
que un buen bocado puede
Restaurante, que se llevará a
a los comensales a distintas
darle la vuelta a un día
cabo del 12 al 22 de julio.
experiencias de cocina gourmet.
cualquiera; en Guadalajara,
Este año, la Semana del
Con una selección de
ningún día es común para el
Restaurante promete ser toda
participantes aún más exclusiva
viajero que decide explorar
una experiencia culinaria.
que la del año pasado, la
sus sabores. Por eso, esta
Durante 11 días, seguirá
Semana del Restaurante busca
ciudad —consciente de su
la misma dinámica de la
dar lugar a platillos de autor,
capacidad para seducir
edición anterior, permitiendo
cocinas espectaculares y
paladares exigentes— llama a
a cientos de comensales
sabores que ningún viajero
los apasionados de la cocina,
explorar nuevos sabores y
podría imaginar. Se trata de
foodies y curiosos del buen
conocer de cerca el talento
la oportunidad perfecta para
sabor a vivir experiencias
de los grandes cocineros de
que expertos culinarios, ávidos
únicas en sus restaurantes
la ciudad. Los restaurantes
buscadores de experiencias
más destacados —a precios
participantes ofrecerán menús
trascendentes y entusiastas
Vuelve el celebrado evento gastronómico a la capital tapatía, esta vez con un sabor más exclusivo.
del mundo de los sabores conozcan un destino tan completo a través de su gastronomía.
P a r a m á s info r m a ci ó n , v isi t a s e m a n a d e lr e s t a ur a n t e. g u a d a l a j a r a mi d e s tin o . c o m
112 Atelier Por Diego Parás
Nissan Crossing: viajar al futuro en Ginza Japón ha ido ganando terreno como
protagonizadas por los modelos más
uno de los países más innovadores en
recientes de la firma, al igual que vehículos
diferentes industrias alrededor del mundo, y la
concepto presentados en autoshows de
automotriz no es la excepción. Nissan, uno
talla internacional. El Frente Virtual, una
de los principales exponentes nipones de la
pantalla transparente de luces LED que se
tecnología aplicada al automóvil, cuenta con
extiende a lo largo del segundo piso de la
un showroom en Tokio donde da a conocer
fachada, ha convertido a este lugar en una
el presente, pasado y futuro de la empresa:
gran e inconfundible atracción.
Nissan Crossing. Ubicado en una de las intersecciones
Otro de los encantos de la galería —que recibió el primer millón de visitas
más concurridas del distrito de Ginza, Nissan
tan sólo cuatro meses después de su
Crossing es una especie de museo-galería que
apertura— es el Café Crossing, donde
permite a los viajeros de todo el planeta
se puede pedir un latte con arte
experimentar el concepto de Movilidad
personalizado, ya sea con vehículos Nissan
Inteligente de la marca; una visión que
o incluso con el rostro de los mismos
a cabo la edición número 46
aborda la particular relación entre vehículos
visitantes. Definitivamente, este lugar es
del Tokyo Motor Show. Nissan
y personas.
un imperdible para los amantes de los
Crossing será un punto clave para
Este espacio —que abrió sus puertas en 2016— tiene exhibiciones permanentes
autos pero también para los que quieran explorar temas de movilidad.
Tokio Motor Show 2019 Del 24 de octubre al 4 de noviembre del 2019 se llevará
el anuncio de nuevas tecnologías y las últimas tendencias de la industria automotriz.
T R AV E S Í A S ANDAZ TOKYO
Andaz Tokyo Toranomon Hills
The Rooftop Bar —uno de los espacios más emblemáticos del hotel— ofrece un gran ambiente, increíbles vistas y deliciosos cocteles.
Si tuviéramos que resaltar
se esconde detrás del Rooftop
un espacio del hotel, ése sería
Bar hasta un delicioso corte
The Rooftop Bar, ubicado en una
de carne en The Tavern - Grill
terraza semiabierta en el piso
& Lounge. Para disfrutar una
52 del edificio. El bar ofrece un
hamburguesa y una cerveza
gran ambiente, espectaculares
artesanal está BeBu Café &
vistas de la bahía de Tokio y la isla
Bar, y para algo dulce, nada
de Odaiba y mixología de primer
como Pastry Shop. Además,
nivel inspirada en ingredientes
las bebidas y snacks locales en
Situado en Toranomon Hills
locales de temporada. La carta
todas las habitacion se ofrecen
—uno de los edificios más altos
incluye una amplia selección de
en cortesía.
de la ciudad—, Andaz Tokyo
cerveza, vino, sake y cocteles;
Toranomon Hills abrió sus
nuestro favorito: Kyohime
Spa emerge como un oasis
puertas en 2014 para convertirse
Amazake, elaborado con sake
de relajación en el piso 37,
en un referente de hospedaje en
dulce, matcha, yuzu, vodka de
combinando los elementos más
la ciudad. Este hotel se inspira
pera y servido con una esfera
puros de bienestar japonés
en las tradiciones locales y las
de hielo tallada a mano. Los
con productos y tecnología
ejecuta con una perspectiva
huéspedes también pueden
de punta. Antes de recibir su
moderna, desde la decoración
disfrutar de una hora de cocteles
tratamiento —ya sea un facial
de los espacios hasta la calidad
(cortesía de la casa) en Andaz
o ritual completo de belleza—,
del servicio. Ya sea en una de las
Lounge, el corazón del hotel.
los huéspedes pueden crear su
156 habitaciones o en una de las
Por su parte, la oferta
ocho suites, dormir aquí es una
gastronómica de Andaz Tokyo
frutas, especias y aceites en
experiencia única y acogedora;
tiene opciones para todos los
el Blend Bar; también pueden
llena de pequeños detalles e
gustos a cualquier hora del día,
disfrutar del gimnasio con
incomparables vistas del paisaje
desde la experiencia omakase en
entrenador personal y una
urbano de Tokio.
la pequeña barra de sushi que
alberca de 20 metros de largo.
Para cerrar el día, AO
propio exfoliante con hierbas,
P a r a m á s info r m a ci ó n , v isi t a a n d a z t o k y o . c o m
114 Atelier
INTERESES QUE DEFINEN AL CLUB
ARTE A R Q UI T ECT UR A D I SEÑO A R Q UEO LO G Í A HI ST O R I A G A ST R O NO MÍ A
Experiencia #163 Molino El Pujol.
Club Travesías, en donde la revista Travesías cobra vida
L A FÓRMUL A DE NUES T R A S E XP ERIENCIA S
Club Travesías es el club de experiencias que lanzamos en 2016 para celebrar nuestros 15 años de viajeros. Con tu membresía obtienes acceso a un calendario
Curaduría El calendario de Club Travesías se
de experiencias diseñadas por el equipo de editores de Travesías, Gatopardo y
basa en la experiencia y los intereses
local.mx. Arte, arquitectura, gastronomía, historia y otros temas culturales que
de nuestro consejo de editores y
reflejan nuestros intereses son algunos de los ejes conductores detrás de cada
expertos.
una de las experiencias. Cada año podrás asistir a recorridos únicos, creados especialmente para aquellos que, como nosotros, ven el mundo con ojos curiosos y quieren formar parte del grupo que abre las puertas que parecían cerradas.
Accesos Club Travesías abre las puertas de lugares fascinantes e invita a interactuar con la gente que está
Próximas experiencias
detrás de ellas.
En CDMX Lucha libre
Expertos locales
Luisa Restrepo y María García Ibáñez
Club Travesías reúne una red de
Arte y arquitectura en Tacubaya
conocedores que nos acompañan
Molino El Pujol
y transmiten sus experiencias e
Apariencia desnuda. Duchamp y Koons
historias de primera mano.
Casa-estudio Max Cetto Visita privada a Seminario 12 Cantinas históricas de la ciudad
Experiencias Los grupos de Club Travesías son de 16 a 20 personas por evento. Trabajamos con los mejores guías, editores y viajeros que disfrutan clubtravesias.com
@ClubTravesias
compartir sus intereses.
115 Atelier Por Karen Martínez
La Roma: recuerdos de un barrio judío A principios del siglo
para los jóvenes durante los fines de
donde se mezclaba la gastronomía de dos
sirios encontraron en la Ciudad de México
xx ,
cientos de judíos
semana. Sin embargo, las familias numerosas
mundos: tacos y salchichas árabes (todo
una oportunidad para reformular su
optaban por arremolinarse frente al carrito
kosher) acompañados de tortillas y salsas.
calidad de vida. Primero se instalaron en
de La Heroica, donde las paletas y helados
La segunda, hoy da lugar al Centro de
La Merced, luego en el Centro Histórico y,
eran mucho más baratos. Entre las calles
Documentación e Investigación Judío de
posteriormente, llegaron a la Roma, donde
de Mérida y Guanajuato había una especie
México (Córdoba 238), donde se resguardan
dieron vida a una suerte de barrio judeo-
de cocina comunitaria donde los vecinos se
al menos un millar de títulos bibliográficos.
mexicano. Hoy, basta con pararse en el
reunían a hornear pan, y muy cerca de ahí
camellón de Álvaro Obregón y Orizaba para
estaba el ahora inexistente cine Royal, que
descubrir pequeños detalles arquitectónicos
funcionó como ventana al exterior para los
que revelan su esencia judía. Con la guía
judíos que no hablaban español.
de Mónica Unikel —directora de la Sinagoga
de vicio”, que eran espacios cerrados
los socios de Club Travesías, recorrimos
—sólo para hombres— donde las horas
algunos de los sitios más relevantes de
pasaban entre cafés, apuestas y juegos.
¿Quieres vivir las
En cuanto a las sinagogas, podemos
experiencias que
aquella época. JORDANA BTP.
También existían los llamados “sitios
Histórica Justo Sierra— y en compañía de
Ubicada en la calle de Orizaba, La Bella
encontrar dos en la Roma Norte. La primera
Italia es una heladería —aún en servicio—
es Monte Sinaí (Querétaro 110), que en
que funcionaba como punto de reunión
aquel entonces tenía enfrente un puesto
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Inspiración para viajeros 24x7
Los tiemp os camb ia n
Es pecial de re l o j e s
Estamos viviendo una etapa de grandes cambios en la industria de la relojería. Las ferias, que antes eran la manera perfecta para comunicar los lanzamientos tanto a prensa como a joyeros, están evolucionando. Hay manufacturas muy importantes, como Audemars Piguet, que decidieron que 2019 fuera su último año en el Salón de Ginebra. La otra gran feria en Suiza, Baselworld, tuvo un formato diferente porque muchas marcas ya no estuvieron presentes. Los avances en la tecnología y la cercanía con el cliente final están haciendo que los formatos evolucionen para ser más inmediatos. Por L uz A r r ed ond o
E s pe c ial de re lo je s
Movimiento mecánico automático, 42 mm, caja en oro blanco de 18 quilates (kt), bisel bidereccional, carátula en laca
Y at c h – Mas t e r 42
Oys t e r Pe rpe t u al
Ro l ex
negra y brazalete Oysterflex.
Rolex tiene una larga tradición con diferentes disciplinas deportivas y la navegación siempre ha sido una de sus favoritas. Este nuevo modelo del Yatch – Master en 42 milímetros es un reloj con una legibilidad excepcional en todas las circunstancias, especialmente en la oscuridad. Permite navegar con toda la precisión y avances tecnológicos, además de que su estética es muy especial al contrastar la mayoría de sus elementos en negro con toques de blanco. Tiene la certificación de cronómetro superlativo que asegura siempre un perfecto funcionamiento.
Con más de 144 años de trayectoria, un gran conocimiento en alta relojería y un equipo de relojeros talentosos, Audemars Piguet lanza una nueva colección con un espíritu que pone a prueba los límites. La colección se llama CODE 11.59. El nombre está compuesto por las siglas que vienen de las palabras challenge, own, dare y evolve; y el número 11.59, el segundo antes de las doce, refleja el espíritu de anticiparse a los grandes momentos. Esta colección de 13 modelos, que incluyen cuatro
Cronógrafo automático, 41 mm, caja de oro blanco de 18 kt, esfera y contadores en azul lacados, y correa de piel de aligátor color azul.
CO D E 11 .5 9
Aud ema r s Pi g uet
complicaciones, es uno de los lanzamientos más completos y exhaustivos de la marca.
Montblanc presentó este año piezas inspiradas en el montañismo. Los relojes profesionales de sus archivos históricos de los años veinte y treinta se tomaron como referencia para crear esta nueva colección que rinde homenaje al legado de la manufactura Minerva, la cual lleva más de 160 años creando piezas excepcionales de alta relojería. Esta colección es perfecta para exploradores modernos que disfrutan la naturaleza y las aventuras extremas. El diseño de estos modelos incorpora el color verde caqui con cajas
42 mm, hora mundial, caja en bronce con cerámica verde, carátula verde caqui, correa NATO color verde caqui.
G eosphe re 185 8
Movimiento mecánico automático,
Mo ntbl an c
en bronce para dar un toque vintage. El Geosphere es una edición limitada a 1858 piezas.
Movimiento mecánico automático,
naranja, correa reversible.
Desde su fundación, los relojes Bell & Ross han acompañado a pilotos profesionales en sus misiones. Este nuevo reloj es un tributo al vuelo MA-1 de 1958 de las fuerzas armadas de Estados Unidos. Es una edición limitada a 999 piezas. Su diseño toma como referencia al bomber jacket que se usaba en esos tiempos, con colores naranjas intensos en el reverso que permitían localizar fácilmente a alguien que estaba esperando ser rescatado.
B R 03- 92 MA- 1
esfera sobrepuesta mate caqui con
Be l l & R o s s
42 mm, caja en cerámica mate caqui,
E s pe c ial de re lo je s
Movimiento mecánico automático, 43 mm, caja en bronce, esfera gris pizarra y correa en tela o en piel de
Bro n z e
Blac k Bay
Tud or
cuero negro envejecida.
Este nuevo modelo se inspira en los relojes submarinos de Tudor de los años cincuenta. Tiene las características agujas snowflake o copo de nieve que aparecieron en 1969, así que integra diferentes elementos emblemáticos de la marca para convertirlo en una pieza muy especial. El bronce es un material que desarrolla una pátina con el paso del tiempo y que hará único a cada reloj. Es un metal vivo que adopta la personalidad de quien lo usa. Su correa también está inspirada en los relojes que personalizó la marina francesa con tela de paracaídas reciclada.
Movimiento mecánico automático, 46.2 mm, verde oliva y correa en piel de becerro marrón.
Este año aparece una nueva línea de IWC Schaffhausen, acompañada de la restauración de un avión Spitfire, que volará alrededor del mundo. Christian Knoop, director creativo, explica que los “colores presentes en el diseño, con su caja de acero inoxidable, esfera negra y correa de tejido verde se han seleccionado para evocar las cabinas de los Spitfire“. Por su parte, los modelos con caja de bronce, esfera verde oliva y correa de piel de becerro marrón “poseen un carácter propio, ya que el bronce desarrolla con el tiempo una pátina especial que convierte cada modelo en único. Los relojes presentan un grabado del Spitfire en el fondo de caja“.
G ra n R eloj d e Av ia d or
IWC
Edición limitada a 250 unidades.
Ca lend a rio P erp et uo S p it fire
calendario perpetuo, caja de bronce, esfera
El año pasado se lanzó esta nueva familia de relojes de la manufactura suiza sico, es uno de los talentos que representa el espíritu de esta colección y los Abbey Road Studios de Londres fueron el escenario perfecto para darla a conocer. Este año se lanzan nuevas versiones del Fiftysix con esferas en color azul petróleo. Son relojes ideales para usar a diario, ya que incorporan un diseño contemporáneo con toques retro.
Movimiento de carga automática, calendario
Comple to
Fi ftysix Cal en dari o
V ache r o n C on stan tin
Vacheron Constantin, inspirada en una edición de 1956. Benjamin Clementine, el mú-
completo, caja en acero inoxidable, esfera en azul petróleo, correa en piel de aligátor color azul.
Movimiento mecánico automático, 42.2 mm, caja en oro blanco, esfera y brazalete
5 168 G – Aqu an au t
Pa tek Ph i l ippe
verde caqui.
Este nuevo modelo de Aquanaut en color verde caqui es ultradeportivo, joven y sofisticado. Tiene un tamaño jumbo y su color inspira a actividades de naturaleza y aire libre. Como todos los relojes Patek Philippe, cada uno de sus elementos está hecho a mano por expertos que han aprendido el oficio relojero de generación en generación. Como si fuera una joya, se toman en cuenta todos los detalles para lograr que el acabado sea impecable.
E s pe c ial de re lo je s
Movimiento mecánico de cuerda manual, modelo grande, caja en acero, puentes esqueletizados y correas
No c t am bu le
San t o s Es qu e le t o
C a rt ie r
intercambiables.
“Vuelo para alejarme de la sociedad y reflexionar”, decía Alberto Santos Dumont. En 1904, Cartier creó el primer reloj de pulsera moderno para poder medir el tiempo durante el vuelo. Así nació el modelo icónico Santos, que se ha mantenido como un clásico por su diseño innovador y funcional. Esta edición esqueletada permite ver todo el movimiento y se ilumina en la noche, ya que sus puentes tienen un recubrimiento de pigmentos que se cargan durante el día y en la noche emiten luz.
En 1815, Abraham-Louis Breguet fue reconocido por el rey de Francia como relojero de la marina por sus excepcionales cronómetros. En 2019, la casa francesa sigue haciendo relojes dignos de cualquier nombramiento real. Los tres nuevos relojes de la línea Marine de la maison están inspirados en la navegación y la resistencia. Hechos en titanio, con un color sobrio y contemporáneo, estos modelos son a prueba de corrosión y resisten al aire salino. Perfectos para una
Movimiento mecánico de carga automática, 42.3 mm, caja de titanio con carrura acanalada, esfera color pizarra soleada de oro y correas
55 27
Chr onogr aph e
de titanio.
Mar in e
Bre gue t
aventura marítima.
E s pe c ial de re lo je s
Movimiento mecánico automático, 41 mm, caja en acero y oro rosa, esfera en gris antracita y correa en piel café
Au t o m at ic 41
Navit im e r 1
Bre i tl i ng
o en acero.
Con una nueva estrategia liderada por Georges Kern, uno de los ceo más famosos de la industria, Breitling presenta sus nuevas colecciones y embajadores de marca bajo el lema “Squad on a Mission”, que incluye a celebridades como Brad Pitt, Charlize Theron y Adam Driver. Esta edición del Navitimer combina el diseño del modelo icónico de 1952, con nuevas configuraciones que se adaptan al estilo de vida de los viajeros. Es un modelo contemporáneo que nunca va a pasar de moda.
Movimiento mecánico de carga manual, 42 mm, caja, brazalete y esfera en oro Moonshine de 18 kt, bisel cerámico en
Se cumple el 50 aniversario de la llegada del hombre a la luna. Omega fue el primer reloj que acompañó a los astronautas en esta hazaña. La misión Apollo 11 fue un parteaguas en la historia de la manufactura porque refleja una confianza absoluta en su precisión y confiabilidad. Después de muchas pruebas en la nasa, el modelo Speedmaster fue seleccionado para la misión espacial. Este nuevo modelo se inspira en el que fue a la luna, con los logotipos e inscripciones originales, y tiene un estuche muy especial que simula un cráter. Es una edición limitada, perfecta para coleccionistas.
Apollo 1 1
Speed m a s t er
Om e ga
color burdeos.
de cuerda manual, 45.6 x 27.4 mm, caja de acero, esfera rojo burdeos y brazalete
S mall S ec o n ds
en piel.
Rev er so Tribu t e
J ae g e r -L eCou ltr e
Movimiento mecánico
Jaeger-LeCoultre representa el arte de la precisión en sus nuevas colecciones al reflejar los orígenes de la ubicación de su manufactura en la Vallée de Joux, así como la magia e inspiración del bosque y la montaña, donde trabajan todos los días, y toda la tradición artesanal de sus creadores. La manufactura tiene muy claros dos objetivos: exactitud en el movimiento y precisión técnica, acompañados del talento artístico de los diferentes oficios que ha mantenido vivos: el guilloqueado, el grabado, el engastado de gemas y el esmaltado. Esta edición del icónico Reverso es muy especial por la combinación del color y por todos los valores de marca que representa.
“La caída libre es fascinante porque eres eso: libre. Estás volando en el agua”, dice Guillaume Néry, que se especializa en buceo profundo y es campeón del mundo de apnea. Con una sola respiración puede sumergirse hasta 126 metros. Néry es uno de los embajadores de Panerai. Estos nuevos relojes profesionales de submarinismo tienen un rendimiento técnico excepcional, inspirado en este deportista, y pueden llegar hasta una profundidad de 300 metros. Son ediciones limitadas y su entrega
Movimiento mecánico automático, 47 mm, caja en titanio, esfera gris tiburón y bisel en cerámica negra mate.
e dic ió n Gu illau m e Né ry
Su bm e rs ible C h ro n o
Pa n e r a i
va acompañada de una experiencia con Guillaume en la Polinesia Francesa.
E s pe c ial de re lo je s
Movimiento mecánico automático, 38 mm, caja en oro blanco, esfera lacada blanca con contadores de tres colores y
Re vival
El Prim e ro A386
Z eni th
correa en piel de aligátor negra.
Hace cincuenta años se lanzó un cronógrafo automático de alta frecuencia en Zenith. Su nombre fue El Primero y fue una innovación impresionante en su momento. Ahora, en su cumpleaños número cincuenta, Zenith lanza ediciones limitadas de este reloj tan famoso con sólo cincuenta piezas de cada una. Es una trilogía en tres oros: blanco, amarillo y rosa. El Revival toma los rasgos característicos de la primera edición de 1969. Su movimiento es capaz de medir la décima de segundo. Esta serie de aniversario tiene una garantía de cincuenta años que asegura su funcionamiento a largo plazo.
T R AV E S Í A S SHANGRI - L A TOK YO
Shangri-La Hotel, Tokyo
El mejor punto de partida para recorrer una de las ciudades más cosmopolitas del mundo. los 11 pisos superiores de la
Existe una fusión única entre el
Marunouchi Trust Tower—
diseño de interiores —a cargo
cuenta con acceso directo
del despacho estadounidense
a la estación de trenes de
Hirsch Bedner Associates—, las
la ciudad, donde se puede
notas chinas de André Fu en el
tomar el metro y la red
Horizon Club Lounge, Piacere,
ferroviaria de trenes bala
el exclusivo restaurante
Shinkansen, que se extiende
italiano, y Nadaman, el
a nivel nacional; es decir,
auténtico restaurante japonés
dormir aquí facilita moverse
con cocina kaiseki.
dentro y fuera de la capital.
Finalmente, la estética
Además, a poca distancia del
nipona está presente en la gran
hotel, se encuentra el famoso
escalera principal del hotel,
Shangri-La Hotels and Resorts,
distrito comercial de Ginza,
los arreglos florales de Nicolai
una de las cadenas más
los jardines imperiales, la zona
Bergmann —uno de los floristas
respetadas del mundo, llegó
comercial de Marunouchi y el
más célebres de Japón— y
a Japón en marzo del 2009;
epicentro histórico y cultural
los elegantes candelabros. De
desde entonces, este hotel se
de Tokio, Nihonbashi.
hecho, cada pieza de vidrio
ha vuelto uno de los favoritos
Otra importante razón
de los viajeros para descansar
para hospedarse en una de las
The Lobby Lounge fue hecha
en la ciudad por varias razones.
lujosas 200 habitaciones (de al
artesanalmente en forma de
menos 50 metros cuadrados)
hoja de gingko, el símbolo de la
de este hotel es su diseño.
planta de Tokio.
Por un lado, Shangri-La Hotel, Tokyo —ubicado en
que conforma el candelabro de
P a r a m á s info r m a ci ó n , v isi t a : s h a n g ri - l a . c o m / t o k y o /s h a n g ril a
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Tokio y Kioto Por Angela Suarez
“Lo primero que me llamó la atención fue su manera de moverse y expresarse, el tiempo. Me enseñaron que menos es más y que no siempre hay que mostrar todas las cartas que uno tiene en su baraja... Japón sigue siendo, para los que no lo conocen, ese secreto, esa flor en capullo que deseamos ver abrir, pero que reserva su explosión de belleza solamente para cuando llega el momento que el destino determina”. Angela es una fotógrafa y escritora española basada en la Ciudad de México. @suarezangela