Xe/iendo Sueños Boletín de la Campana "Un millón de Mujeres" Universidad Bíblica Latinoamericana Marzo 1999 Edición: Elisabeth Cook y Jeannie McGinnis / Diagramación: Damaris Alvarez / Fotos: Eduardo Chinchilla
El
TRASLAPO Eran las 8 de la mañana del martes 19 de enero de 1999, cuando vimos llegar la primera flota de cineo camiones que iniciarían el traslado de nuestras oficinas desde San José hasta Cedros, el lugar donde se encuentra nuestra nueva casa. Apenas habíamos regresado de vacaciones el día anterior. De previo sabíamos que al regresar, la primera tarea sería el traslado. Algunas personas habían estado empacando desde semanas atrás, y otras dispusieron del día anterior para empacar los haberes de sus oficinas. Pero todos y todas trabajaron arduamente para etiquetar las cajas y para la identificación y ubicación en el nuevo edificio. La mezcla de emociones era intensa. Por un lado tristeza al dejar el espacio que durante años nos había albergado, y por otro la sensación de novedad, la emoción de la casa nueva, la diferencia de estar en un sector lleno de zonas verdes, espacios para descansar y recrear la vista, mucha luz natural, aire menos contaminado y mucho frío. El cambio siempre hace que el ser humano sienta algo de temor y nosotros no fuimos la excepción; pero mayor resultó ser la novedad. Así, tardando 4 días completos, utilizando un total de 2.698 cajas y 18 camiones de 35 metros cúbicos con capacidad de 5 toneladas cada uno, finalizó nuestro traslado el viernes 22 de enero cerca de las 5pm. Al iniciar la semana en lugar nuevo, comenzó el desempaque: armamos estantes, colgamos espejos en los baños, pizarras en las aulas y colocamos escritorios en cada oficina. Trasladamos todas las plantas que adornaban bellamente los jardines del antiguo edificio para que ahora embellecieran el nuevo. Lentamente, cada persona empezó a adornar su espacio y se llenaron los espacios comunes. La espera para tener las líneas telefónicas se prolongó unos días y luego surgió la tarea de aprender y comunicar los nuevos números a todos los amigos y las
amigas de la institución dentro y fuera del país. Poco a poco iban surgiendo pequeños detalles que faltaban para completar el acomodo al nuevo edificio: un rótulo frente al edificio, un timbre en la puerta principal, pulir el piso donde se manchó durante el traslado. Mucho esfuerzo físico y mucha coordinación fueron necesarios para la mudanza, pero pasada esa etapa permanece la confianza de que representará una época muy positiva para el proyecto de la UBL. Lo que se convirtió en un traslado no ha sido más que un proyecto vivo del ministerio educativo de la UBL, de autogestión, de deseos de continuar participando en la transformación de comunidades eclesiales en América Latina. Nos esperan años difíciles, no estamos excluidos de sentir y sufrir las repercusiones macroeconomicas de la globalización comercial y de la transformación económica que afecta al mundo entero. No obstante, el ánimo y el compromiso de todas y todos los que trabajamos para esta institución, es un elemento que nos ayuda a seguir adelante. Gracias a todas las mujeres y todos los hombres alrededor del mundo que han apoyado esta campaña, y a las agencias amigas que se solidarizaron con este proyecto. A todos y todas, que Dios les bendiga. Roxana Arguedas Castro Administradora