6
PROLOGO
Alguien dice que la ciudad es "una gran alma, (...) un cuerpo que siente, que se mueve". Esto no es, en sentido estricto, ninguna novedad. Las ciudades han sido, por los siglos, percibidas como seres dotados de vida propia. Su ritmo, su vitalidad, la cantidad de vida que aglomeran la hacen meritoria de tal sentimiento. Poetas, artistas, filósofos, científicos y locos se han encargado de recordárnoslo todo el tiempo.
Jahír Rodríguez Rodríguez siente y percibe, precisamente así, la ciudad. Y aquí, sí
que estamos ante una novedad.