Nツコ
9 SEGUN GU DA A ETAPA A / Aテ前 201 0 2
Nツコ 9 SEGUNDA ETAPA Aテ前 2012
El Descenso
D escenso El
El Descenso
Mayo 2012 9 - II etapa El Descenso
nĂşmero
1
CREDITOS EDITA: Ilustre, Pontificia y Real Cofradía de Nuestra Señora de la Capilla. www.virgendelacapilla.es CONSEJO RECTOR: José Humberto Montero Fernández. Manuel Rodríguez Chica. Esperanza Macarena Calatayud Chamorro. Rafael Cañada López. Mª Dolores Ocaña Tirado. Miguel A. Antón Carrillo de Albornoz. José Antonio Martín Illescas. Jesús Llopis Olivera. Juan Alfonso Almagro Chamorro. Mª del Carmen Ruiz Armenteros. Juan Francisco Abolafia Pérez. Mª del Carmen Aranda Cerezo. Alfredo Guzmán Mansilla. Antonio Martínez Nieto. DIRECTOR: María Dolores Ocaña Tirado. CONSEJO DE REDACCIÓN: Mª Dolores Ocaña Tirado. Rafael Cañada López. José Humberto Montero Fernández. Esperanza Macarena Calatayud Chamorro. Antonio Martínez Nieto.
El Descenso
FOTOGRAFÍAS: Archivo de la Cofradía. José Tomás García Rivera. José Manuel García Armenteros. Ramón Calatayud Lerma. Jesús López Aranda. Juan Almagro López. Aurora Cañada López. Miguel Ángel Peragón. Aurora Guzmán. Sergio Manuel Rodríguez Ortega. Jesús Cobos Castillo. Lourdes Cañada López. Rafael Cañada López.
2
MAQUETACIÓN E IMPRESIÓN Gráficas La Paz de Torredonjimeno DEPÓSITO LEGAL: J - 271 - 2007
Sumario 5
Carta del Sr. Obispo de la Diócesis.
11
Saluda del Alcaldes de la Ciudad.
13
Carta del Capellán de la Cofradía. Carta del Hermano Mayor.
15
VIDA COFRADE 2011 / 2012
18
Presentación Cupón de la ONCE
17 19 20 21 22 23 24 25 30 31 33 34 35 36 37 38 39 40
Mes de Mayo, Mes de María
Presentación del cartel y de la revista El Descenso 2011 Pregón 2011 en honor a Ntra. Señora de la Capilla Novena 2011
Audiencia con el Sr. Obispo Rosario de San Bernabé Misa de Cabildos
Magna Procesión 2011
La Cruz y el icono de la JMJ ante la Virgen de la Capilla Jornadas benéficas
La Junta de Gobierno en el nombramiento de Basílica del Santuario de la Virgen de la Cabeza Ofrenda del Real Jaén
D. Pedro Ortega Ulloa nuevo párroco de la Basílica de S. Ildefonso Belén 2011
Día de la Inmaculada Concepción de María
Retiros de espirituales y Charlas de formación
Nuevas incorporaciones al Cuerpo de Camareras Cruz de Mayo 2012
El Descenso
9
3
41
Actualidad 2012
47
Ilmo. Sr. D. Pedro José Martínez Robles
43 48
Crónica de seis años
70
Años 2007-2009
75 81
Crónica de seis años
Seis años más de historia Años 2010-2012
89
Colaboraciones
93
San Juan de Ávila y la Virgen de la Capilla
91 97 99
113 115 116 117
118
121
129 134
El Descenso
Sor Isabel Guerra
57
59
4
Entrevista a los pregoneros
María, mujer «eucarística» Homilía
Pregón en honor a Nuestra Señora la Santísima Virgen de la Capilla, Patrona y Alcaldesa Mayor de la Ciudad de Jaén A Santa María de la Capilla, Madre nuestra A Santa María de la Capilla Moaxaja Inmaculista
Quiero ser, Virgen de la Capilla, costalero Aquel festival taurino de 1962
El pregón de las fiestas de junio historia y evolución
El Patronzago de la Virgen de la Capilla sobre Jaén. Unas precisiones In memoriam Paco: “un hombre bueno, un gran hombre”
LA FE DE MARÍA VIRGEN Ramón del Hoyo López. Obispo de Jaén
cierto que creer es un acto auténticamente humano. No es contrario ni a la libertad ni a la inteligencia del hombre depositar la confianza en Dios y adherirse a las verdades por Él reveladas” (nn. 153 y 154). La fe nos proporciona una certeza superior a toda certeza humana porque se apoya no en la autoridad del hombre, siempre proclive al error o a equivocarse, sino en la autoridad de Dios, que ni puede engañarse ni engañarnos. Ello nos proporciona una certeza absoluta pero no evidencia, pues trascienda la pura percepción sensitiva o intelectual para apoyarse en la sabiduría infinita de Dios. “Es prueba de lo que no se ve” (Hb 11,1).
2. Necesaria para nuestra salvación:
Me refiero a esa adhesión personal a la voz de Dios, la fe, desde su vivencia en nuestra Madre y como preparación próxima al “año de la Fe”, proclamado por Su Santidad Benedicto XVI a partir del próximo mes de octubre.
1. Características de la fe: El Catecismo de la Iglesia Católica, enseña que “La fe es un don de Dios, una virtud sobrenatural infundida por Él” “Sólo es posible creer por la gracia y los auxilios interiores del Espíritu Santo. Pero no es menos
Así lo manifestó con toda claridad el Señor y nos lo enseña el Apóstol San Juan con estas palabras: “Dios entregó al mundo a su Hijo unigénito para que todo el que cree en Él no perezca, sino que tenga vida eterna” (Jn 3,16), y San Marcos recoge algunas de las últimas palabras pronunciadas por Jesús en la tierra antes de su Ascensión en las que afirma: “el que crea y sea bautizado se salvará; pero el que no crea se condenará” (Mc 16,16). El autor de la Carta a los Hebreos nos da la razón cuando asegura: “sin la fe es imposible agradar a Dios” (Hb 11,6). La fe nos salva pero siempre que esa fe se haga vida en nuestra vida ya que, de lo contrario, sería una fe muerta y “¿de qué le vale a uno decir que tiene fe, si no tiene obras? ¿Podrá acaso salvarlo esa fe?... la fe si no tiene obras, está muerta por dentro” (St 2,14-17)
El Descenso
Les invito a reflexionar en una virtud fundamental para nuestra vida de cristianos junto a nuestra Madre la Virgen de la Capilla.
5
3. La Fe de María: Dijo en una ocasión el Beato Juan Pablo II que “La primera bienaventuranza que señala el Evangelio es la fe, y se refiere a María: `Feliz la que ha creído (Lc 1,45)´. Estas palabras, pronunciadas por Isabel, ponen de relieve el contraste entre la incredulidad de Zacarías y la fe de María. Al recibir el mensaje del futuro nacimiento de su hijo, Zacarías se había resistido a creer, juzgando que era imposible, porque tanto él como su mujer eran ancianos” (Audiencia del 6-V-1998). En la Anunciación, María está ante un mensaje más desconcertante aún, como es la propuesta de convertirse en la Madre del Mesías. Frente a esta realidad no reacciona con la duda; se limita a preguntar cómo puede conciliarse su virginidad, a la que se siente llamada, con la vocación maternal. A la respuesta del Ángel, que indica la omnipotencia divina que obrará a través del Espíritu Santo, María da su consentimiento humilde y generoso. Pero la fe de María Virgen no se reduce al acto de la Encarnación, sino que trasciende a todos los momentos de su vida. Así dice el Catecismo de la Iglesia: “Durante toda su vida, y hasta la última prueba, cuando Jesús, su Hijo, murió en la cruz, su fe no vaciló. María no cesó de creer en el cumplimiento de la palabra de Dios. Por todo ello la Iglesia venera en María la realización más pura de la fe” (n. 149). Bien podemos decir que es la Virgen María la primera destinataria de aquellas palabras de Jesús: “Dichosos los que no han visto y han creído” (Jn 20,29).
El Descenso
4. Una fe operativa y viva:
6
Como en María nuestra fe exige una constante conversión que supone quitarnos nosotros del centro de nuestra existencia para poner a Dios. No conduce a nada positivo una doble vida, o esquizofrenia espiritual, al contrario, toda nuestra existencia debería estar animada por la fe, sin dar cabida al desaliento ni al desánimo, y dedicando tiempo para fortalecerla. No olvidemos que es un tesoro en vasija de barro que fácilmente puede quebrarse.
Una fe viva y operativa debe conducirnos a fiarnos totalmente de Dios, como hizo la Virgen ante las palabras del Ángel, como hizo Abraham, nuestro padre en la fe, modelos ambos de fe para los cristianos. Fiarse por completo de Dios es el secreto de la seguridad de nuestra fe. Creer en el Dios que nos llama, que nos quiere, que camina junto a nosotros, que se revela en su Hijo Jesucristo, sobre cuya roca inconmovible asentamos nuestros pies con absoluta seguridad. Nuestra fe vivida es una preciosa aventura como la de Pedro cuando se lanzó a caminar sobre las aguas al descubrir que era Cristo quien le miraba y esperaba (Mt 14, 29).
5. Opción maravillosa por Cristo. No creemos en un ramillete de teorías, por hermosas que puedan resultar, creemos en una persona, Cristo, cuya aceptación supone la aceptación de un mensaje íntegro. No vale decir que se le acepta a Él y no admitir las consecuencias del tal aceptación. No vale considerar necesaria la adhesión a Cristo y rechazar los caminos concreto por los cuales ha dispuesto que llegamos a Él. Nuestra fe no reposa en un Cristo mudo, sino en Alguien que habló hace dos mil años y que sigue haciéndolo a través de la Comunidad que él mismo fundó y que cuenta con la garantía de su asistencia (cf. Mt 28,20). Este fe que ha sufrido y sufre los embates del laicismo y secularismo, es la que debemos renovar y afianzar durante el próximo Año de la Fe: Profundizar en el conocimiento de la doctrina católica, desde un renovado estudio del Catecismo de la Iglesia; lograr alcanzar y sentir, como experiencia vital, el amor cercano y real de Dios y entre nosotros hermanos con hechos concretos; sentirnos realmente implicados desde nuestra vocación y circunstancias concretas en las tareas de la Nueva Evangelización en la familia, Parroquia y sociedad; creer y defender a la
persona, a todos sin distinción alguna, como imagen y semejanza de Dios. Esta triple fidelidad a Jesucristo, a su Iglesia, y a toda persona deberían ser el programa operativo para todos los cofrades y devotos de la Santísima Virgen de la Capilla, siempre conducidos por su mano maternal.
6. NUESTRA SÚPLICA ANTE LA VIRGEN DE LA CAPILLA: Que nuestra fe sea fuerte y no vacile ante las dudas e incertidumbres que querían alejarle y hasta apagarla en nosotros, que se manifieste en la serena y firme adhesión a las enseñanzas de la Iglesia.
Que se manifieste en la disponibilidad y respuesta de comunión, con los demás fieles, a la iniciativas apostólicas programadas por la Iglesia en todos sus niveles. Que acertemos a abrir los ojos, desde nuestro testimonio, a quienes no creen o dicen no creer, hasta tener que interrogarse y convencerse de ¡cómo se aman!,¡Cómo se quieren!,¡Son felices y no sabemos cómo y porqué! Así lo suplicamos por su intercesión de nuestra Madre. Feliz fiesta para todos.
El DEscEnso
Que sea una fe gozosa y operativa, que se concrete en la caridad activa y generosa hacia los hermanos necesitados.
7
8
El Descenso
HE VISTO Pedro Ortega Ulloa. Capellán de la Cofradía
Pues que tú, Reyna del cielo, tanto vales, ¡da remedio a nuestros males! Esta joven madre sabía que la virgen, joven madre también, entendía su dolor: … pues que para nos valer tanto vales, ¡da remedio a nuestros males! He visto a un joven arrodillado, a primera hora, preocupado por la inestabilidad de su trabajo. Con esta su tribulación viene ante la Virgen. Y recordaba estas palabras: … pues en las tribulaciones tanto vales ¡da remedio a nuestros males! He visto a una joven con ansias de vivir la santidad a la que se siente llamada y que juntamente reconoce la presencia del pecado en su vida. Y me han sonado estas palabras:
Ante la Virgen ponía a su niña que había nacido con una grave enfermedad. Y recordaba estas palabras de un cristiano del siglo XV, Juan del Encina:
He visto a muchos que venimos ante la Virgen de la Capilla, la “bendita porque ha creído” y es que en nuestro camino de fe nos encontramos con la “noche oscura”. Y oigo:
El Descenso
He visto a una joven madre con sus ojos enrojecidos.
Tú, que tienes por oficio consolar desconsolados; tú, que gastas tu exercicio en librarnos de pecados; tú, que guías los errados y los vales, ¡da remedio a nuestros males!
9
Tú, que te dizen bendita todas las generaciones; tú, que estás por tal escrita entre todas las naciones; pues en las tribulaciones tanto vales, ¡da remedio a nuestros males! Cuando Santa María dijo “sí” comenzó a cambiar el rumbo de la historia entera de la humanidad. Ya la historia entera no terminará en la nada o en el triunfo de los fuertes. Ya no habrá nadie que quede como desecho, como escoria de la historia. Ya hay esperanza para todos. Tú, que del parto quedaste tan virgen como primero; tú, Virgen, que te empreñaste siendo virgen por entero; pues que con Dios verdadero tanto vales, ¡da remedio a nuestros males
El Descenso
Virgen santa,, Virgen de la Capilla ¿a qué vocación me está llamando tu Hijo bendito?
10
En nuestra vocación está la felicidad de otros. ¡ Cuantas veces miramos a la Virgen porque queremos ser fieles a nuestra vocación! Y es que hemos entendido que nuestra humanidad alcanza en María una nueva humanidad. Tú, que tenemos por fe ser de tanta perfeción que nunca será ni fue otra de tu condición; pues para la salvación tanto vales, ¡da remedio a nuestros males! Necesitamos suplicarle la misericordia. Necesitamos un corazón dispuesto a compadecerse. Necesitamos amar más la “justicia” que el “dinero”. Necesitamos superar la oposición entre mi bien y el de otros. ¡O, Madre de Dios y Hombre! ¡O concierto de concordia! Tú, que tienes por renombre Madre de misericordia, pues para quitar discordia tanto vales, ¡da remedio a nuestros males!
Saluda del Alcalde de Jaén José Enrique Fernández de Moya Romero que nos rodea, de convivir y de acoger a quienes nos visitan en estos días. Son unas fechas especiales para los jiennenses, porque nos gusta encontrarnos con nuestras amistades, y porque marcan un punto de inflexión en el día a día de esta ciudad que trabaja de forma incansable por el desarrollo, y que siempre ha sido un ejemplo de convivencia. La confluencia de tradiciones y costumbres hacen de las Fiestas de la Virgen de la Capilla un punto de referencia para todos. Desde pequeño he disfrutado de estos días de junio, y al igual que todos, guardo grandes recuerdos del ambiente que hay en las calles de nuestro castizo barrio de San Ildefonso.
La conmemoración de la festividad de la Virgen de la Capilla es un gesto de fe del pueblo de Jaén, y así hay que entender, en toda su grandeza, esta celebración. Este es un año especialmente difícil por la situación económica que atraviesa España, pero el Ayuntamiento no quiere que la capital pierda la oportunidad de poder disfrutar de estas fiestas patronales. Porque no se trata sólo de vivir, sino también de compartir unos días de celebración, un momento para dejar un lado la rutina diaria y disfrutar de lo
Desde el 8 de junio tenemos la ocasión de honrar a nuestra Patrona, a la Historia de esta ciudad y a todos los jiennenses. Una ciudad respetuosa con su pasado, pero que constituye su presente y futuro con optimismo.
El Descenso
Las Fiestas de Junio, en honor a nuestra Patrona, la Santísima Virgen de la Capilla, nos ofrecen a los jiennenses la oportunidad de mantener más vivas que nunca nuestras costumbres, nuestros valores culturales, nuestras creencias religiosas y las singularidades que nos distinguen.
Mi deseo de todo corazón es que compartamos unos días de celebración pese a esos momentos difíciles que estamos pasando. Como Alcalde, me pueden las ganas y la ilusión de servir a Jaén, que es tanto como el afán de dar lo mejor de todo el equipo de gobierno y del Ayuntamiento para mejorar la calidad de vida de los jiennenses. Jaén en fiestas nos llena de alegría; la emoción de escuchar el repicar de campanas que anuncia la salida de la Virgen de la Capilla por nuestras calles; vivir la ilusión de los más pequeños al hacer la ofrenda floral a nuestra Virgen; o vivir la solemnidad de la procesión, son momentos que sólo podemos sentir en estas fechas tan entrañables y especiales.
11
12
El Descenso
Carta del hermano mayor José Humberto Montero Fernández
ponsabilidad de llevar las riendas de esta histórica institución. Pronto esta carga se hizo muy llevadera, al sentirme arropado por mis compañeros de Junta, amigos, familia y sobre todo por nuestra Madre de la Capilla, cuyo aliento, animo y consuelo han estado presente en mi caminar durante estos años, Ella nos ha ayudado a salvar todos y cada uno de los obstáculos que se han ido presentando, seguro que sin su intersección, no hubiera sido posible culminar con éxito muchos de los retos y proyectos que nos hemos ido trazando.
El nombramiento supuso por un lado un alto honor, porque poder trabajar y servir a la Cofradía, que cuenta entre sus fines el de velar y fomentar la devoción y el culto de la Santísima Virgen de la Capilla, es uno de los mayores privilegios que un cristiano y cofrade puede tener, pero también, desde ese mismo instante, recaía sobre mis hombros la res-
Seis intensos años ofrendados y dedicados a honrar a nuestra Madre, Reina e intercesora ante nuestro Señor Jesucristo. Hemos trabajado con mucho cariño, ilusión e intensidad, por esta asociación pública de fieles de la Iglesia, muchas horas de dedicación y preocupación, por esta noble tarea de servir a Nuestro Señor Jesucristo y a su Madre. Aunque todos estos sacrificios son una mera anécdota, ya que Él y Ella se lo merecen todo, Él que dio la vida por nosotros, te-
El Descenso
El 6 de noviembre de 2006 tuve la dicha y el gozo, de ser nombrado por el Pastor de nuestra diócesis Hermano Mayor de la Ilustre, Pontificia y Real Cofradía de Nuestra Señora de la Capilla, Patrona y Alcaldesa Mayor de la ciudad de Jaén. En unos meses se cumplirán seis años de mi mandato, eso significa y así lo establecen los estatutos que se abrirá un nuevo proceso electoral, con el deseo y así se lo pido al Espíritu Santo, que las personas elegidas sean las más idóneas para la misión que habrán de acometer.
Este mi último año al frente de esta nuestra querida institución, está siendo muy especial, al ser el de mi despedida, continuamente me fluyen sensaciones y emociones difíciles de describir, sentimientos muy variados que en ocasiones me embargan. No ha concluido aún el mandato y la nostalgia a menudo se adueña de mis pensamientos, mi cabeza o mejor dicho mi corazón, repasa una y otra vez los momentos vividos, algunos de ellos de inmensa alegría, también los hay de profunda tristeza, muchos en los que me sentido muy acompañado y respaldado, unos pocos en los que he palpado la soledad, proyectos emprendidos y realizados, otros aunque muy soñados y deseados no han sido concretados.
13
El Descenso 14
niendo como inseparable testigo a su Madre. Ella que nos protege, nos escucha e intercede por sus hijos.
tenciar y difundir la que es, verdadera seña de identidad de esta tierra.
Todos nosotros somos parte activa, consciente y responsable de la misión que nos ha sido encomendada, en los tiempos que estamos no podemos mantenernos ociosos dentro de la Iglesia, os animo desde aquí a participar y colaborar con esta Institución, todos somos necesarios y tenemos que trabajar en comunión para poder cumplir con nuestros fines. Recordando la frase de San Gregorio Magno: «Fíjese cada uno en su modo de vivir y comprueben si ya son obreros del Señor. Examine cada uno lo que hace y considere si trabaja en la viña del Señor». Decía el papa Juan Pablo II “Los laicos no son simplemente los obreros que trabajan en la viña, sino que forman parte de la viña misma” «Yo soy la Vid y ustedes los sarmientos» (Jn 15,1-8). Todos los cofrades como parte integrantes de la Cofradía, podemos ser fermento, cada uno en las medidas de nuestras posibilidades, debemos colaborar y participar con los actos y actividades que organiza la cofradía. Hay sitio para todos, unos pocos difícilmente pueden hacer lo de muchos, es triste que se organicen actos de diversa índole, como conferencias, retiros y que casi siempre sean los mismos los que den respuesta al llamamiento de la Cofradía.
En estos años al frente de la Cofradía, he intentado dar lo mejor de mí, para tratar de estar a la altura que merece y requiere esta Institución, pero no he sido el único, he tenido la suerte de contar con un grupo de magnificas personas, algunos de ellos han trabajado encomiablemente. Gracias a la labor de todos ellos, hemos obtenido numerosos logros de los cuales nos sentimos plenamente satisfechos, especialmente todo lo referente a la dimensión caritativa. Quisiera expresar mi más sincera y profunda gratitud, a todos aquellos que de una manera u otra habéis servido a nuestra Cofradía y por ende a nuestra advocación de la Capilla; compañeros de Junta de Gobierno, Camareras, horquilleros, sacerdotes, colaboradores, amigos, belenistas y como no, a mis padres y mujer que ostenta a su vez el cargo de administradora de la Cofradía, los primeros fueron la fuente de los que yo bebí, ellos me transmitieron la fe que profesamos y el amor a nuestra madre y mi mujer, que ha sido mi bastión y pilar donde sujetarme, su capacidad de trabajo, tesón y saber hacer me han ayudado en mi misión al frente de esta Junta. Yo no podré pagar nunca, ni agradecer suficientemente la dedicación de todos vosotros, pero saber que vuestro trabajo ha dado muy buenos frutos y estoy convencido que nuestra amada Madre, desde el cielo intercederá por todos.
Hace 582 años, la ciudad de Jaén tuvo el extraordinario privilegio de asistir a una de las contadas apariciones de la Virgen, este hecho transcendental y extraordinario, lo es más si cabe, por tratarse de una aparición dinámica como así se recoge en el acta de Villalpando y no estática. Desde entonces el pueblo de Jaén, le profesa su amor y devoción y la invoca y erige como Patrona, a Ella, que es nuestro amparo y refugio. Sin embargo y a pesar de ello, tengo la sensación y así lo manifestaba en la presentación del extraordinario cartel de este año, obra de Sor Isabel Guerra, que tanto los que nos precedieron como nosotros, no hemos sabido transmitir, ni darle la importancia y transcendencia que un hecho de tal magnitud, naturaleza y relevancia se merece, me preguntaba ¿Qué proyección, repercusión y difusión habría tenido el Descenso de haber acontecido en otra localidad (Sevilla, Málaga…)?. Ciudadanos de Jaén, devotos de la Virgen, Instituciones y por supuesto Cofrades, tenemos que mimar, proteger, po-
Pero todo no ha sido dar, he recibido mucho más, de lo que yo he dado, he tenido la suerte de sentirme más cerca que nunca de nuestra Madre, en momentos de dificultad he sentido siempre su aliento y presencia, he tenido y vivido experiencias irrepetibles, he conocido a grandes personas con las cuales he podido estrechar lazos de amistad, ellos me han enseñado y ayudado a crecer como persona y por supuesto también me llevo el bello recuerdo de los momentos vividos, que siempre llevaré grabado en mi corazón. Esperando que nuestra labor haya sido fecunda, me despido con un hasta luego, porque siempre estaré unido y vinculado a esta Cofradía de una u otra forma, al servicio de ella, de nuestra venerada Virgen de la Capilla, de su hijo y de su Santa Madre Iglesia. Felices fiestas patronales.
El Descenso El Descenso
Vida Cofrade
15
16
El Descenso
Mes de Mayo, Mes de María
Bellísima estampa la que se observaba en la cara de los pequeños que se acercaban hasta el altar ma-
yor para depositar su humilde ofrenda, llena de sentimiento y bueno deseos. Uno de los propósitos de la actual Junta de Gobierno es hacer extensiva la devoción a la Virgen de la Capilla por todos y cada uno de los rincones de la ciudad, objetivo que se está viendo cumplido cada año con el aumento progresivo de las ofrendas florales y oracionales en el Santuario de la Patrona. Igualmente, durante varios días en este mes dedicado a María, el pueblo de Jaén pudo contemplar de cerca a su Patrona, y depositar su petición y acción de gracias en forma de oración en los días del Besamanto, que esta Pontificia Cofradía celebra, para que todo aquel devoto que lo desee se acerque a la Basílica y pueda contemplar su rostro frente a frente.
El Descenso
Un año más, la Cofradía de la Santísima Virgen de la Capilla se vio inmersa en el apretado calendario de actos y cultos en honor a su excelsa Patrona. El mes de mayo fue un ir y venir de fieles que rendían culto a los pies de la Sagrada Imagen. La Junta de Gobierno, en su afán por aumentar cada año el número de cofradías e instituciones que acuden a la Basílica-Santuario a rendir culto a la bendita Imagen, optó por invitar a los distintos colegios religiosos de nuestra ciudad. Masiva fue la respuesta por parte de dichos colectivos, que acudieron con orgullo a postrar ante las plantas de la Santísima Virgen de la Capilla sus flores.
17
Presentación del Cupón de la ONCE
El Descenso
La Junta de Gobierno de la Cofradía de la Santísima Virgen de la Capilla consiguió que la imagen de la Virgen estuviera presente en el cupón de la Organización Nacional de Ciegos, la ONCE para el sorteo del día 11 de junio de 2011, festividad de Ntra. Sra. El cupón se presentó a los pies del altar mayor de la Basílica-Santuario instantes antes de dar comienzo el ejercicio propio de las flores. El acto estuvo presidido por el párroco de San Ildefonso, don Manuel Bueno Ortega, que estuvo acompañado por la Alcaldesa de Jaén, doña Carmen Peñalver Pérez, el presidente de la ONCE en Jaén, don Pascual Gualda y el Hermano Mayor de la Cofradía, don José Humberto Montero. Tras el acto de presentación del cupón, los miembros de la ONCE depositaron a las plantas de la Patrona su ofrenda floral, de mano del presidente de la
18
organización en el ámbito provincial, don Pascual Gualda. De tal forma, la imagen de Nuestra Señora de la Capilla fue difundida por todo el territorio nacional gracias a la encomiable labor realizada para llegar a plasmar a tan venerada representación mariana en el cupón del día que se conmemora la solemnidad del Descenso de María a nuestra ciudad. Desde estas páginas queremos agradecer al presidente y la organización por ayudar a esta junta de gobierno en la difusión de la devoción de la Patrona principal de la ciudad de Jaén, haciéndoles extensiva la invitación para participar en la ofrenda floral durante el mes de mayo, junto a todas las demás organizaciones e instituciones que nos acompañan.
Presentación del cartel y de la revista El Descenso 2011
La pintura, obra de Francisco Galiano Gómez, un joven artista, nacido en Mengíbar y licenciado en bellas artes por la Universidad de Granada (2004). El autor ha realizado numerosos trabajos, algunas de sus obras más significativas son las pinturas realizadas para las parroquias de la Inmaculada (Mengíbar), la pintura para la Sacristía de San Pedro (Mengíbar), la de Sta. Mª Magdalena (Cazalilla), los carteles oficiales de la Semana Santa de Jaén en los años 2007 y 2009 y la talla de Ntra. Sra. de la Soledad de Arjona. Su obra está basada en un exhaustivo estudio de la figura humana desde la anatomía más descriptiva
hasta el aspecto más trascendente, siendo la mayoría de su obra de carácter religioso aunque también ha cultivado el género del retrato en bastantes ocasiones. En esta ocasión, el cartel dedicado a la Patrona Principal de la Ciudad de Jaén, tiene un marcado poder simbólico religioso, con la talla de la Virgen en primer plano, retratada con gran detalle y de forma profundamente natural, con la imagen de la Catedral de Jaén a sus pies, como símbolo de protección de los jiennenses y de la ciudad. En el mismo acto, y como viene siendo habitual, se procedió a la presentación de un nuevo número de la revista “El Descenso”; que con esta ya suman 8 en esta segunda etapa, presentación que estuvo a cargo del Secretario de la Cofradía, Rafael Cañada López y director de ese número.
El Descenso
La Sacristía de la Catedral de Jaén, acogió la presentación del cartel anunciador de las fiestas patronales 2011, acto que estuvo a cargo del Ilmo Sr. D. Francisco Juan Martínez Rojas, Deán de la Catedral.
19
Pregón 2011 en honor a Ntra. Señora de la Capilla
El domingo 29 de mayo de 2011, a las 12 de la mañana, en el teatro Darymelia, la Ilustre, Pontificia y Real Cofradía de Ntra. Sra. de la Capilla tuvo una cita con el pueblo de Jaén que asistió al Pregón de las Fiestas en honor a la Santísima Virgen.
El Descenso
El pregón fue pronunciado por el periodista D. Antonio Garrido Gámez, que nos deleitó con una exquisita mezcla de sentimiento, retórica y religiosidad. Un año más quedó exaltada la devoción e historia
20
que une a la ciudad con su Patrona y Alcaldesa Mayor, de una manera excelente por parte del orador. El pregonero fue presentado por D. Aniceto Eduardo López Aranda, encargado de pregonar a la Santísima Virgen en la anterior edición de dicho pregón. Un año más el Orfeón Santo Reino cerró el acto interpretando un selecto y variado repertorio que escogió delicadamente para dicha ocasión.
Novena 2011
La Junta de Gobierno designó al Ilmo. Sr. Deán de la Santa Iglesia Catedral para predicar el novenario del año 2011 al coincidir con el 50º aniversario del nombramiento del Cabildo de la S. I. Catedral como Capellán Mayor Honorario de la Ilustre Cofradía,
por el que fuera obispo de nuestra diócesis, D. Félix Romero Mengíbar. D. Francisco Juan hizo hincapié en el acercamiento a Dios mediante su Excelsa Madre, con una vida activamente caritativa. Una lección magistral teologal con la que meditamos acerca de la esencial labor realizada por María en la vida pública de Jesús de Nazaret. Nueve intensos días en los que la fe hecha palabra a través de las homilías del Ilmo. Deán catedralicio hicieron profundizar más en la imagen de la Madre de Dios: Una mujer que desde su sencillez, y su sí incondicional al Señor acogió en su seno el milagro de la Salvación de la humanidad.
El Descenso
Un año más, la Basílica Menor de San Ildefonso y Santuario de María Santísima de la Capilla quedó pequeña para acoger a todos los fieles y devotos que se dieron cita para asistir al Solemne Novenario celebrado en honor a la Virgen de la Capilla. Este año, presidía la cátedra el Ilmo. Sr. Dr. D. Juan Francisco Martínez Rojas, presidente del Excmo. Cabildo Catedralicio y Capellán de Honor de la Cofradía.
21
Audiencia con el Sr. Obispo
El Descenso
Como cada año, pocas fechas antes de la celebración de la festividad del Descenso de la Madre de Dios a Jaén, el 11 de junio de 1430, el señor Obispo de la Diócesis de Jaén, Monseñor don Ramón del Hoyo López, recibió a la Junta de Gobierno de la Cofradía de la Virgen de la Capilla. En este encuentro celebrado en sede episcopal, el Hermano Mayor tuvo opor-
22
tunidad de explicarle al señor Obispo las acciones que la Cofradía lleva a cabo, tanto en el ámbito de extender la devoción a la Patrona Principal de Jaén, como la actividad que a través de la Caridad la Cofradía lleva a cabo con acciones como la construcción del Orfanato en la República de El Congo.
El día 10 de junio, antesala del día grande de la Patrona de Jaén, la Cofradía de la Virgen de la Capilla, cumpliendo con la tradición, conmemoró el descenso de la Virgen a la ciudad de Jaén, siguiendo los mismos pasos que Ella recorrió en la noche del 10 al 11 de junio de 1430, bajo el rezo del Santo Rosario.
Numerosos fieles y devotos acompañaron durante el recorrido a la Cofradía, acto que concluyó con el rezo de la Salve ante la portada gótica de la Iglesia de San Ildefonso, en el cual, según la tradición, finalizó el descenso de la Santísima Virgen María.
El Descenso
Rosario de San Bernabé
23
Misa de Cabildos
El pasado 11 de Junio de 2011 se celebraba en la Basílica de San Ildefonso, la tradicional Misa de los Cabildos, Catedral y Municipal, en honor de la Santísima Virgen de la Capilla, Patrona y Alcaldesa Mayor de la Ciudad de Jaén.
El Descenso
La celebración de esta Eucaristía es el acto por excelencia de entre los organizados en torno a la Patrona de Jaén, ya que como es sabido, en la Santa Misa se rememora el sacrificio de Jesucristo en la cruz y su Resurrección, siendo, por tanto, el centro de nuestra vida cristiana.
24
La Eucaristía, fue presidida, como tradicionalmente se viene haciendo, por el Sr. Obispo de la Diócesis, Monseñor D. Ramón del Hoyo López y concelebrada por el Cabildo Catedral y demás sacerdotes de la ciudad, actuando como maestro de ceremonias D. Manuel Carmona García. Presentes, tradición venidera de siglos, estuvieron los cabildos catedralicio y municipal, presididos por el Ilmo. Sr. Dr. D. Francisco Juan Martínez Rojas, Deán de la S. I. Catedral, y el Ilmo. Sr. Alcalde de la ciudad, D. José Enrique Fernández de Moya, respectivamente.
También estuvieron presentes el Subdelegado de Defensa D. Ángel Sanz, el Presidente de la Agrupación de Cofradías y Hermandades de la Ciudad de Jaén, Hermanos Mayores de las distintas cofradías de Pasión y Gloria, miembros de la Academia Bibliográfica Mariana, “Nuestra Señora de la Capilla”, Camareras de la Virgen, Caballeros Horquilleros, cofrades y fieles en general, que abarrotaban la Basílica Menor de San Ildefonso, Santuario de la Patrona de Jaén. La Imagen de la Virgen presidía el Altar Mayor, iluminada con cera y adornada profusamente con flores y plata, luciendo el manto rosa de la Coronación Canónica de 1930, así como el bastón de mando y la venera de oro, como Alcaldesa Mayor de esta ciudad del Santo Reino. La parte musical corrió a cargo del Orfeón “Santo Reino”, como tradicionalmente lo viene haciendo desde 1.953, solemnizando con sus melodías y cánticos propios de la Virgen en su Descenso, esta Misa Votiva de los Cabildos.
La ilustre, Pontificia y Real Cofradía de Nuestra Señora de la Capilla, Patrona y alcaldesa Mayor de Jaén, cerró un año más los actos y cultos dedicados a la Virgen con la Magna Procesión en la tarde del 11 de junio. Es el punto culminante de todo un año cofrade, así como la manifestación pública de fe y devoción.
la magna procesión con la cruz de guía, acompañada de la agrupación musical de María Auxiliadora, encabezando el frente de procesión; le siguen todas las Cofradías y Hermandades de la ciudad, tanto de Pasión como de Gloria rindiendo homenaje a la Excelsa Patrona, portando las insignias de sus respectivas hermandades y engalanadas para tal ocasión.
A las 8 de la tarde, las puertas de la Basílica de San Ildefonso se abrieron para dar paso al cortejo procesional de Nuestra Señora de la Capilla, iniciándose
Seguidamente, acompañaban cofrades y devotas ataviadas con la tradicional mantilla blanca, con cirios y rosarios en las manos, alzando sus plegarias
El Descenso
Magna Procesión 2011
25
en tan importante día para la ciudad de Jaén. La corporación municipal desfilaba igualmente ante el paso de la Señora con el Sr. Alcalde presidiéndola. Ya en el último tramo de la procesión, el cuerpo de camareras de Ntra. Sra., escoltaban el trono de la Santísima Virgen, así como largas filas de cofrades que alumbraban el desfilar de la Corporación. La Presidencia del paso iba encabezada por la Junta de Gobierno de la Ilustre Cofradía con su hermano mayor al frente, junto con Deán de la catedral, don Francisco Juan Martínez Rojas, predicador del novenario en el año 2011 y el capellán y párroco de San Ildefonso, don Manuel Bueno Ortega, además de otros sacerdotes de la diócesis que quisieron acompañarnos a tan importante evento.
El Descenso
Presidía todo el cortejo el imponente paso de la Santísima Virgen de la Capilla, portando este año el manto azul marino, de 230 x 1’90 metros bordado en plata. Al centro, lleva bordado el escudo de los ingenieros de caminos. Fue Regalado por D. Pedro Pareja Leiva y su esposa Dña. Virginia Sánchez, con moti-
26
vo de un acontecimiento familiar y fue bendecido y ofrecido el 8 de Marzo de 1959. El Paso de la Virgen era llevado por los Caballeros Horquilleros como tradicionalmente se les ha llamado, 80 jóvenes uniformados y colocados bajo sus largos varales, que con todo el cariño y el amor de buenos hijos, portaban a la Reina, Madre y Patrona de esta bendita Ciudad del Santo Reino. Finalmente la banda de música municipal de Jaén cerraba el Cortejo Procesional, y que durante todo el recorrido, interpretó magnificas y alegres marchas procesionales. Un año más la Virgen lució sus mejores galas, preciosamente engalanada por el cofrade y vestidor de la misma, D. José María Francés Morillas. La Señora de la Capilla se encontró con el pueblo de Jaén, por las calles de la ciudad, momentos de júbilo que todos los jiennenses pudieron vivir, mostrando su amor y devoción a la Excelsa patrona de esta ciudad del Santo Reino.
27
El Descenso
28
El Descenso
29
El Descenso
El Descenso
La Cruz y el icono de la JMJ ante la Virgen de la Capilla
30
El pasado sábado 4 de junio dentro de los actos organizados por la Delegación Diocesana de Juventud, y tras el espectáculo realizado en la plaza Santa María, la Cruz y el Icono, símbolos de las JMJ 2011 bajó hasta la Basílica menor de San Ildefonso, Santuario de Ntra. Sra. de la Capilla. Ante la Patrona de la Ciudad se celebró un concierto - oración a cargo de los grupos “Ixcis” y “Brotes de Olivo”; que dieron un breve repaso a sus temas
más conocidos, siempre en un ambiente de oración y reflexión. La Santísima Virgen de la Capilla fue testigo privilegiado de un templo abarrotado de jóvenes que demuestran, como pidió el beato Juan Pablo II, que llevan la cruz por el mundo como signo del amor del Señor Jesús a la humanidad y anunciando a todos que sólo en Cristo, muerto y resucitado, hay salvación y redención.
El pasado día 23 de junio, en el Patio del Salón Mudéjar del Patronato de Cultura del Excmo. Ayto. de Jaén, la Cofradía de la Virgen de la Capilla celebró su II Cena Solidaria para recaudar fondos para la construcción de un orfanato en la República Democrática de El Congo.
La cena solidaria contó con la presencia del misionero de África y Padre Blanco, D. Francisco Manuel Ostos, quien explicó cómo se encuentra el desarrollo de las obras del orfanato, así como la situación real que en la actualidad se vive en la República Democrática del Congo.
Los beneficios que se recaudaron fueron íntegramente donados para la construcción del orfanato que se está levantando en la región de Ituri (República Democrática del Congo), una zona afectada por las guerras étnicas en la que más de 50.000 personas han sido asesinadas en los últimos años y donde muchas niñas adolescentes de la zona son violadas por ex-milicianos o soldados, algunas de ellas fallecen en el parto.
Por otro lado, y buscando el mismo fin, la construcción de un hogar para unos niños huérfanos en una de las zonas más devastadas por los conflictos bélicos en el planeta, los empresarios de la Calle Nueva se unieron el 25 de junio a tal causa, con un rastrillo solidario, donde los comerciantes sacaron las ventas a la calle para colaborar con el proyecto de caridad.
El Descenso
Jornadas benéficas
31
32
El Descenso
La Junta de Gobierno en el nombramiento de Basílica del Santuario de la Virgen de la Cabeza El pasado 3 de julio de 2011, miembros de la Cofradía de la Santísima Virgen de la Capilla acudieron a la Basílica Santuario de la Virgen de la Cabeza, en Sierra Morena, invitados por la Cofradía Matriz de la citada Cofradía, para participar en el solemne acto de dedicación de la Basílica Santuario, título que con motivo del año Jubilar concedió Su Santidad el Papa. En el citado acto, también se bendijo el nuevo altar del Santuario, obra del autor iliturgitano, Manuel López Pérez.
El Descenso
El acto, presidido por el Obispo de la Diócesis, don Ramón del Hoyo López, contó con numerosas representaciones de cofradías de toda la Diócesis que quisieron acompañar a la Hermandad Matriz de la Cofradía de la Virgen de la Cabeza en la conclusión de los actos con motivo de su año jubilar.
33
Ofrenda del Real Jaén
Como ya es tradición en cada comienzo de temporada, la Patrona de Jaén recibió una ofrenda floral por parte de los miembros del equipo de fútbol local, Real Jaén. Durante el acto los miembros del equipo del Real Jaén se acogieron bajo el manto de la Patrona para tener suerte en el campo de juego durante la temporada de fútbol 2011-2012.
El Descenso
Este acto solemne tuvo lugar en la Capilla de la Virgen del Santuario de San Ildefonso. Al primer equipo de la ciudad lo acompañó su Capellán, Rvdo. Sr. D. Tomás Colmenero.
34
D. Pedro Ortega Ulloa nuevo párroco de la Basílica de S. Ildefonso
El acto estuvo presidido por el Obispo de nuestra Diócesis Monseñor D. Ramón del Hoyo López, y acompañados por numerosos sacerdotes de la ciudad. En el Santuario se dio cita un gran número de feligreses que querían de esta forma mostrar su agradecimiento a D. Manuel por tantos años de infatiga-
ble trabajo en la parroquia; al tiempo que mostraban la bienvenida a quien sería el nuevo rector de la Basílica y capellán de la Virgen de la Capilla. El domingo, 2 de octubre, la feligresía de san Ildefonso le ofrecía un merecido homenaje a quien había sido su párroco durante largos años, D. Manuel Bueno. Primero, una eucaristía de acción de gracias en la Basílica de san Ildefonso y posteriormente una comida- almuerzo en el hotel Condestable Iranzo de nuestra capital.
El Descenso
El pasado 12 de septiembre tomaba posesión como nuevo párroco de la Basílica menor de San Ildefonso, el Rvdo. D. Pedro Ortega Ulloa, sustituyendo en el cargo a Mons. D. Manuel Bueno Ortega.
35
Belén 2011 La Casa Museo de la Virgen de la Capilla sirvió, como cada año, para acoger el tradicional Belén que cada año organiza la Cofradía de la Patrona de Jaén. Después de dieciséis años consecutivos de ser Rafael Baena el encargado de montar el laborioso nacimiento, este año, lo elaboraron Ana Mesa y Teresa Quesada, que contaron con la colaboración de Suli Colmenero, Teresa Calatayud y Juana Ortega, miembros todas del Cuerpo de Camareras de la Santísima Virgen. En lo referente al montaje eléctrico, éste lo ejecutaron los hermanos José Manuel y Alejandro García.
El Descenso
El Nacimiento, que cada día recibió unas 250 visitas de jiennenses, contemplaba las imágenes más representativas de la Anunciación, Nacimiento e Infancia de Nuestro Señor Jesucristo, todo ello con un particular toque jiennense, ya que muchas de las escenas que describe el Nuevo Testamento se trasladaron a lugares típicos de Jaén, como el Castillo de Santa Catalina o el Convento de las Bernardas.
36
Día de la Inmaculada Concepción de María
Dicha solemnidad fue celebrada con una ofrenda floral a la imagen que preside la afamada plaza donde se encuentra el templo, seguida del canto de la salve y bendición solemne. La celebración estuvo presidida por el estandarte de la Virgen de la Capilla, alumbrado por los hacheros que portaban los fieles, orando ante la Virgen Inmaculada.
El Descenso
El día 8 de diciembre, gran cantidad de fieles y devotos de la Santísima Virgen acudieron a la Basílica de San Ildefonso para acompañar a la Cofradía en la celebración de la Inmaculada Concepción de María que se celebra en el mundo desde que el 8 de diciembre de 1854, el Papa Pío IX, promulgara un documento llamado “Ineffabilis Deus” en el que estableció que el alma de María, en el momento en que fue creada e infundida, estaba adornada con la gracia santificante.
37
Retiros de espirituales y Charlas de formación
La formación y el encuentro con Dios a través de los retiros ha sido este año también, uno de los pilares donde se apoya la vida cofrade de los miembros de la Ilustre, Real y Pontificia Cofradía de la Virgen de la Capilla. Pocos días antes de la Navidad, el sábado 17 de diciembre, el nuevo Capellán don Pedro Ortega Ulloa sería el encargado de preparar nuestro corazón para vivir con intensidad la llegada de Jesucristo, un nacimiento que cada año se repite, y que debe ser vivido con la misma intensidad por los cristianos. El retiro comenzaría con la celebración de la Santa Misa en la Capilla de la Virgen.
El Descenso
Del mismo modo, y en tiempo de Cuaresma, el retiro espiritual corrió a cargo de don Manuel
38
Carmona García, Canónigo de la S. I. Catedral y Delegado episcopal de liturgia, quien nos habló de la importancia de entender y vivir la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo, ya que Él padeció por nuestra salvación, y es sin duda, éste el tiempo más importante para los cristianos a lo largo y ancho del orbe: comprender que la Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo da razón de ser a nuestra fe. Pasados los días de Semana Santa, en Pascua, don Manuel Carmona nos convocaba nuevamente en una charla de formación celebrada en el salón de actos de la cofradía. El tema elegido “La Pascua para ser llenados con María del Espíritu Santo”.
Nuevas incorporaciones al Cuerpo de Camareras
El domingo 11 de marzo, Once de Mes, juraron su cargo como Camareras de Ntra. Sra. de la Capilla dos nuevas integrantes para este cuerpo, Dª Mª Jesús Oya Amate y Dª Pepita Quesada Cañada.
El Descenso
El acto tuvo lugar en la capilla de la Virgen, a los pies de nuestra Patrona, una vez finalizada la eucaristía dominical y el canto de la Salve.
39
El Descenso
Cruz de Mayo 2012
40
La solidaridad es uno de los puntos claves en nuestra formación cristiana y humana, y es por ello que la Junta de Gobierno de esta Cofradía hace de ella uno de sus objetivos fundamentales. Es por ello que se realizó un año más en la plaza de San Ildefonso la ya tradicional cruz de mayo solidaria, haciendo su sexta edición, en la que los beneficios fueron destinados íntegramente al proyecto de caridad que la Hermandad está llevando a cabo en la República Democrática de El Congo, como es la construcción de un orfanato.
Toda la información acerca del proyecto estaba disponible en folletos y un tótem para que todo aquel que quisiera colaborar con alguna otra aportación pudiera hacerlo. En un ambiente distendido con cofrades, amigos y conocidos se refuerzan los lazos de amistad a la vez que con una aportación económica se contribuye a mejorar la situación de vida en las zonas más devastadas del Congo. Desde la Cofradía se anima a todo el pueblo de Jaén a continuar colaborando en ediciones venideras.
El Descenso
El Descenso
Actualidad 2012
41
42
El Descenso
Entrevista a los pregoneros Ramón Molina Navarrete y José Ramón Molina Hurtado, Pregoneros de la Virgen de la Capilla 2012
Ramón: ¿Qué recuerdos guarda de la Patrona de Jaén, Nuestra Señora de la Capilla?
¿La Devoción Mariana es el camino para llegar a Jesucristo? Sin duda. Eso ya nos lo dice el Evangelio, especialmente al hablar de la boda en Caná y cuando Cristo está en la cruz y nos la deja como madre. La Virgen María es un ejemplo y un modelo a imitar, porque siendo una mujer totalmente humana alcanzó la máxima santidad. Tuvo que decidir si quedaba encinta sin conocer varón, ver que su hijo nacía en un pesebre, huir a Egipto, sentirlo crecer en Nazaret, perderlo en Jerusalén... Y tuvo que verlo morir en la cruz... Gravísimas situaciones que supo aceptar y superar con mucha entrega, lucha, sacrificio, dolor, resignación... y amor, y también con mucha alegría y gozo, guardando todas estas
cosas en su corazón. Todo un espejo María para la humanidad que, además, desde su exquisita humildad, sólo nos pide que hagamos lo que su Hijo nos diga. ¿Cómo no va a ser María un camino para llegar y estar en el Camino, la Verdad y la Vida? Usted ha pregonado distintas fiestas religiosas, incluso, como ha dicho, en el año 1985, las de la Virgen de la Capilla ¿Es la primera ocasión que tienen la oportunidad de compartir escenario con su hijo? Como pregonero sí. Hemos compartido otros muchos actos. Especialmente hemos compartido actuaciones de teatro. Él, desde su infancia, ha venido actuando a mi lado, interpretando distintos personajes en diferentes obras mías. Tengo espe-
El Descenso
Mis recuerdos vienen de la infancia, cuando un día mi padre me llevó por primera vez a Jaén para que viera la ciudad y el castillo. También vimos la catedral. Después visitamos a la Virgen de la Capilla. Fue la primera vez que la vi. Tengo vagos recuerdos de todo esto, pero hermosos. Para un niño de pueblo, que no había salido de la provincia, encontrarse de golpe con la capital y sus tesoros fue algo especial. A partir de ingresar en la Academia Bibliográfica conservo ya en el corazón grandes recuerdos de la Virgen de la Capilla. Sobre todo cuando el 9 de junio de 1985 pronuncié el pregón en su honor.
43
ciales y emotivas vivencias al respecto en la obra “Maranatha”, cuando él hacía de San Juan y yo de Jesús de Nazaret.
tuar los cultos en honor a Nuestra Patrona, a la vez que dar a conocer y difundir la historia de la Virgen de la Capilla?
En la sociedad actual, ¿es la fe una herramienta indispensable para mantener unida a la familia?
Creo que la cofradía, vista desde fuera, ha cumplido, para mí, con lo que debe ser una cofradía de nuestro tiempo: vivir el Evangelio, evangelizar, dar culto y ayudar a los más necesitados. Y esta cofradía, especialmente, ha dado a conocer a la Virgen María desde distintas formas y maneras, nos la ha mostrado como una luz que nos guía para llevarnos a Dios. Ha cumplido, evangelizando, con los cultos, hechos con dignidad y grandeza Y, sobre todo, ha puesto en el centro de su hacer la ayuda a los demás, realizando a lo largo del año numerosas obras sociales y colaboraciones, especialmente creando una escuela en la India y un orfanato en la R.D. del Congo.
A la familia la une el amor. Pero el amor que se alimenta de la fe se hace trascendente y pone a Dios en medio de ella. Y todo toma mayor sentido y fortaleza. La vida que nos nace se valora desde la concepción, el caminar diario se considera un regalo que no termina, y en él, la alegría de ser todo lo impregna, y el dolor y el sufrimiento se aceptan desde la dimensión de la esperanza, y hasta la muerte tiene sentido en cuanto la entendemos como un paso al encuentro con la felicidad total y la oportunidad de seguir unidos en la máxima expresión del AMOR, con mayúsculas. Como miembro de la Academia Bibliográfica Mariana, ¿qué funciones desempeña ésta en la actualidad? ¿Cree que de alguna forma debería renovarse, actualizarse, hacerse más visible en la sociedad de Jaén?
El Descenso
Cuando me propusieron ser miembro de la Academia sentí un gozo enorme. Desde entonces lo he venido considerando un honor. Durante muchos años la Academia tuvo una actividad muy a destacar. Fue una piedra angular en la cultura de la provincia. A ella han pertenecido y pertenecen ilustres personalidades. Pero también es cierto que desde hace algunos años la Academia anda en estado latente. No sé qué motivos puede haber. La verdad es que estoy ajeno a las circunstancias que han podido llevar a esta situación. De todos modos sería muy loable que la Academia que lleva el nombre de la Patrona de Jaén ocupara de nuevo un lugar destacado en el mundo de las letras, la investigación, las asambleas...
44
Después de 6 años de mandato de la Cofradía, José Humberto Montero se despide a finales de año como Hermano Mayor de la Ilustre, Pontificia y Real Cofradía de Nuestra Señora de la Capilla, ¿puede hacer una valoración de estos 6 años? Para usted, ha cumplido con su labor de perpe-
José Ramón: ¿Qué significa seguir la estela de tu padre con la representación de Maranatha? Ante todo es un regalo de Dios, además de un inmenso orgullo, porque realizar el papel de Jesús es la cima a la que puede aspirar un cristiano al que le gusta el teatro. No hay ningún otro papel como éste. Después de pasar por otros muchos personajes llegar a interpretar a Jesús es la culminación de un sueño, siendo también especial porque sustituir a un padre en una acción como ésta, es agradecerle la educación en la fe recibida, sin duda la mejor herencia posible. Ahora vamos a hacerle unas preguntas a ambos. Hace 27 años Ramón Molina Navarrete pregonó las fiestas patronales de la Virgen de la Capilla. En esta ocasión compartiréis la tribuna; una experiencia novedosa en cuanto a pregones en nuestra ciudad. ¿Qué esperáis que vea en vuestro pregón el pueblo de Jaén? Ramón Molina Navarrete (RMN): Cuando me lo propuso el Hermano Mayor de la Cofradía me quedé un tanto confuso. Después creí que podría ser algo distinto y original, ya que nunca, como pregonero, había vivido una experiencia parecida. Bien es cierto también que en Úbeda, hace años, le hice una proposición, un poco parecida, a
José Ramón Molina Hurtado (JRMH): Primero nuestro testimonio cristiano de fe. Segundo el amor que sentimos por nuestra Madre de la Capilla. Y tercero el agradecimiento a todos los jien-
nenses que tan bien nos han acogido siempre en cualquier actividad. ¿Qué va a suponer para ustedes pregonar de forma conjunta las fiestas en honor a la Virgen Santísima de la Capilla? (RMN): Para mí algo muy grande, especialmente porque lo haré por segunda vez. Todo un privilegio. Y mucho más en esta ocasión en la que estaré al lado de mi hijo, compartiendo una experiencia cristiana y literaria que, salga como salga, se hará inolvidable. Algo que me llevaré en el corazón a la eternidad.
El Descenso
la Unión de Cofradías: la de hacer un pregón de Semana Santa con doce personajes, cada uno, con un tiempo de cinco minutos, representaría a un apóstol del Señor. Casi me toman por loco. Hubiera sido algo muy especial. El pueblo de Jaén no verá otra cosa en el pregón que la fe de un padre y un hijo que buscan, por María, a la que aman y cantan, caminar hacia la Verdad y la Vida en la que sentirse realizados y unidos para siempre.
45
(JRMH): Principalmente un reto, ya que no tenemos noticias de esta forma de pregón tan original. Además es un honor y una enorme responsabilidad. También un gozo, porque poder hablar de Dios y de su Madre, y más en estos tiempos, es siempre motivo de satisfacción para un cristiano. Ramón, usted ha representado durante muchos años el papel de Jesucristo en Maranatha, ahora lo hace su hijo, ¿qué supone para ambos ponerse cada año en la piel del Salvador y vivir sus momentos más difíciles? (RMN): Representar a Jesús de Nazaret ha sido uno de los grandes regalos que me ha concedido Dios. Es algo inexplicable. Es sentir a Cristo vivo dentro del alma, apreciar lo que sintió, vivió y sufrió, y lo grande que fue su resurrección. Algo que va más allá del teatro, algo que crea un sello indeleble en la conciencia, en cuanto a que, aunque te desvistas del personaje al terminar la escena, te sigue obligando ante ti mismo y los demás, te sigue comprometiendo de por vida. (JRMH): Ponerse en la piel de Jesús para alguien que lo ama es una sensación indescriptible y maravillosa. Vivir la institución de la Eucaristía, la muerte en la cruz y, sobre todo, la resurrección marcan para el resto de la vida, por supuesto, en positivo.
El Descenso
¿Qué papel representan y desarrollan las cofradías dentro de la vida de la Iglesia Católica? ¿Están vinculados a alguna cofradía de manera activa?
46
(RMN): Las cofradías, desde hace siglos, han ejercido una labor impresionante dentro de la Iglesia. Ellas sirvieron para comprometerse, hacer unidad y fuerza para alcanzar logros y derechos, rezar, hacer penitencia, catequizar, sentirse hermanos y, sobre todo, cuando no había protección pública ninguna, ayudarse mutuamente ante las necesidades, las enfermedades y la muerte. Ahora, aunque han cambiado los tiempos, las cofradías, que se van sucediendo de padres a hijos manteniendo viva una hermosa tradición en la que nos unimos las generaciones, siguen haciendo una labor encomiable tanto desde el culto, la formación y la evangelización, como desde el hecho de fomentar la creación de puestos de trabajo. Y algo muy importante, no han perdido la necesidad de preocuparse por el hermano, por lo que son un medio extraordinario para ayudar a los más necesitados. En cuanto a si estoy vinculado a alguna cofradía, diré que sí. En Úbeda a varias. En Jaén a la Santa Cena desde sus comienzos. (JRMH): Son un elemento destacado para acercar a las personas a Jesús y vivir la religión en comunidad. Representan también la valentía de profesar públicamente la fe y de entregarse a los demás a través de la caridad. Todo un ejemplo en nuestra sociedad. Mi Cofradía es la Columna de Úbeda. También pertenezco a las Cofradías de Jesús Nazareno, el Santo Entierro y La Virgen de Guadalupe. En Jaén soy hermano de la Cofradía de Jesús Salvador en su Santa Cena y María Santísima de la Caridad y Consolación.
Ilmo. Sr. D. Pedro José Martínez Robles Predicador de la Novena en honor a Ntra. Sra. de la Capilla 2012 La Junta de Gobierno de nuestra Cofradía ha confiado en la persona del Ilmo. Sr. D. Pedro José Martínez Robles, Vicario judicial de nuestra Diócesis, el Solemne novenario en honor a Ntra. Sra. de la Capilla, Patrona de la ciudad. La novena se celebrará desde el día 1 al 9 de junio, a partir de las 20 horas. Es por eso que la Junta de Gobierno hace un llamamiento para que durante los nueve primeros días del mes de junio los cofrades y devotos de la Virgen de la Capilla oremos juntos, y reflexionemos sobre nuestra vida cristiana y el reflejo que debemos llevar a la sociedad; siempre con María como ejemplo.
pado de Jaén, cargo que ostenta con otros, como el de Canónigo y Secretario de la S. I. Catedral de Jaén, Vicario parroquial en la Basílica de San Ildefonso, profesor de Derecho Canónico en el Seminario Diocesano, profesor también del Instituto Superior de Ciencias Religiosas “San Agustín” (Jaén). Don Pedro José ya predicó en el año 2008, y lo hizo de una manera extraordinaria, en la que cada día del novenario sirvió de catequesis, de encuentro con Dios, y de profundización en la figura de Nuestra Señora, la Virgen María.
El predicador de la Novena a María Santísima de la Capilla de este 2012, nació en Cazorla en el año 1972. Con 25 años fue ordenado sacerdote en Jaén el día de la solemnidad de San Pedro.
El Descenso
En la actualidad, Don Pedro José es Vicario Judicial del Obis-
47
Sor Isabel Guerra
El Descenso
autora del cartel anunciador de las Fiestas en honor a Ntra. Sra de la Capilla 2012
48
A las puertas del Mes de Mayo, tiempo especialmente consagrado a la Virgen María; la Cofradía de Nuestra Señora de la Capilla, Patrona Principal de la Ciudad de Jaén, se dispone todos los años a comenzar una larga serie de actos y cultos en su honor.
Con él no sólo se pretende dar a conocer los actos organizados en honor a la Stma. Virgen, sino acercar a cada rincón de la ciudad a la que es MADRE, PATRONA Y REINA de Jaén, como bien describía don Vicente Montuno en su “ensayo histórico”.
Como viene siendo habitual, uno de los actos más esperados por cofrades y devotos, es la presentación del Cartel anunciador de la Fiestas Patronales que cada año edita la Cofradía.
Desde el año 2004 se han ido sucediendo diversos artistas de nuestra tierra. Cada uno de ellos plasmando de una manera diferente, pero todos con una gran calidad artística, han sabido reflejar la singularidad de la Virgen de la Capilla, sus fiestas e historia.
Las diversas juntas de gobierno de la Cofradía de la Patrona han apostado todos estos años por artistas de la tierra. Todos con un referente en común, que es la calidad con la que han sabido trabajar durante años. Esta Junta de Gobierno, continuando con el trabajo comenzado en la anterior etapa, ha realizado un gran esfuerzo por conseguir que la devoción a María Santísima, en su advocación de la Capilla, llegue a todos los rincones de nuestra ciudad. Es por esto, que para el CARTEL ANUNCIADOR DE LAS FIESTAS 2012 se ha buscado a una artista de prestigio internacional. Sabedores de la dificultad que suponía dicho proyecto, se emprendió el camino poniendo siempre las miradas en una mayor proyección, que diera a conocer la advocación de nuestra Patrona, la Stma. Virgen de la Capilla, no sólo en Jaén, sino fuera de nuestros límites geográficos. Es por esto, que el CARTEL 2012, es obra de SOR ISABEL GUERRA PÉREZ-PEÑAMARÍA, conocida como la “Monja Pintora”. Todo cofrade comprenderá el importante esfuerzo que se ha tenido que realizar para conseguir que una obra de esta firma recaiga en nuestra Cofradía. Pieza artística que se irá a sumar al amplio catálogo del que ya disponemos; y que Dios quiera, en un futuro no muy lejano pueda admirarse en una remodelada Casa Museo.
Sor Isabel Guerra. Biografía. Nace en Madrid el 30 de abril de 1947. Vive en Zaragoza desde los 23 años, cuando ingresó en el Monasterio Cisterciense de Santa Lucía. Desde entonces allí “ora et labora”.
A los doce años comienza su dedicación plena a la pintura. A los 15 años realiza su primera exposición en la Sala Toisón de Madrid. A partir de esa fecha ha expuesto en la Galería Eureka de Madrid hasta en once ocasiones, entre los años 1965 a 1985. Siete exposiciones en la Galería Sokoa, también de Madrid, entre los años 1986 a 2004. “El asombro por la vida” fue el título de la exposición retrospectiva que realizó en noviembre de 2010 en la Lonja de Zaragoza. Además de numerosas participaciones en diversos certámenes, ferias, exposiciones institucionales y colectivas. Sus obras están presentes en distintos puntos de la geografía nacional e internacional: en la Catedral de la Almudena de Madrid, en la Catedral Primada de Toledo (templo y galería de retratos), en Catedral Basílica de Ntra. Sra. del Pilar de Zaragoza, en el Museo Diocesano de Zaragoza (Mural de entrada y Galería de retratos), en el Museo Provincial de Zaragoza (Colección permanente), en el Obispado de Barbastro, en el Obispado de Jaca, en el Arzobispado de Tarragona, en el Arzobispado de Madrid, en el Arzobispado de Vitoria, en el Obispado de Córdoba, en el Obispado de Santander, en la Nunciatura de la Santa Sede en España, en la Sede de la Conferencia Episcopal Española, en el Museo Nacional de Dibujo del Castillo de Larrés (Huesca), en el Ayuntamiento de Zaragoza, en la Academia General Militar de Zaragoza, además de en numerosas colecciones de instituciones y empresas privadas en España, Estados Unidos, México, Inglaterra, etc. La obra de sor Isabel Guerra ha sido muy reconocida, basta comprobar los premios que ha recibido la artista: Tercera Medalla (sección de pintura) en el “Salón de Otoño” de Madrid (1964), Segunda Medalla (sección pintura) en el “Salón de Otoño” de Madrid (1965), Primera Medalla (sección pintura) en el “Salón de Otoño” de Madrid (1966), Trofeo “Pincel de Plata” al artista más joven galardonado con primera medalla del ”Salón de Otoño” de Madrid en el año 1966, Premio “Cajas de Ahorros del Sudeste de España”, Primera Medalla (sección dibujo y grabado) en el “Salón de Otoño” de Madrid (1967).
El Descenso
Pintores de la talla de Francisco Huete, Francisco Carrillo, Francisco J. Ochando Melgarejo, David Padilla, Jacinto Linares Talavera, Nicolás Sánchez Cubillo y Francisco Galiano Gómez.
49
En 2003 es nombrada de Académica de Honor de la Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San Luis, de Zaragoza, y Académica Correspondiente de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas, de Toledo.
- “Desde luego la revista es monumental, es espectacular… es absolutamente espectacular, en contenido y continente”.
En 2005 publicó “El Libro de la Paz interior”, de la que es autora, y donde recoge sus pinturas y pensamientos, reflejados en forma de oración.
- “No sé cómo ha surgido la cosa, ya no me acuerdo cómo dije que sí; porque yo no hago encargos, y además de temas religiosos mucho menos, porque mi obra no tiene nada que ver con esos temas.”
Entrevista.
El Descenso
El pasado 24 de marzo, miembros de la Junta de Gobierno de la Cofradía visitaban el Monasterio de Santa Lucía en Zaragoza para entrevistarse con sor Isabel Guerra.
50
Dicha expedición encabezada por el hermano mayor, José Humberto Montero Fernández, y acompañados por el deán de la Catedral giennense, el Ilmo. Sr. Dr. D. Francisco Juan Martínez Rojas, la formaba la administradora, Esperanza Calatayud Chamorro, la vocal de publicaciones, Mª Dolores Ocaña Tirado y el secretario, Rafael Cañada López. En esta cita tuvieron oportunidad de hablar distendidamente con la religiosa, quien muy gustosamente los recibió junto con la madre abadesa.
- “Tengo el año más complicado de mi vida.”
¿Cómo ve la pintura actualmente en España? Los mejores artistas y el peor público. En España, en pintura, nos podemos sentir sanamente orgullosos de nuestros antepasados. Como ejemplo decir que tenemos la mejor pinacoteca del mundo. Pinacoteca como el Prado, no existe otra en el mundo. Y en el presente, nombres como el suyo, el de Antonio López y un largo etc… Bueno…, (risas…) Tenemos a Antonio López y otros muchos artistas… (risas…). Sí, me tienen a mí también, pero no sé en qué lugar. Pero quiero decir, que tenemos grandes artistas. Pero se confunde mucho, al haber mucha menos preparación… precisamente, como no hay un
Es una verdadera pena, porque no estamos mucho mejor en preparación. Yo diría que se ha bajado en preparación en todos los aspectos de la vida. Eso sí, hay mucho nombre de ambiente cultural, eso sí.., pero se ha bajado mucho el nivel. Ha dicho anteriormente que usted no hace pintura religiosa. ¿Por qué…? Bueno, vamos a ver. Hay dos conceptos. Yo creo firmemente que hago pintura religiosa; porque a mí me lo demuestra que a la gente la pintura le habla de Dios. Pero no es de asunto religioso. Son dos cosas diferentes. Hacer pintura religiosa quiere decir algo que reviva con el trascendente, con lo trascendental. Con la búsqueda de un algo muy superior a ti, que te está envolviendo y que a lo mejor no conoces. Te estás dando cuenta de que estás completamente rodeada de esa omnipresencia. Yo pretendo que a través de esas actitudes meditativas, en los personajes de un cuadro, o en los ambientes de un paisaje, se puedan percibir eso. Yo eso no lo considero mío, lo considero que el Señor se vale de mis pobres manos y mi pobre trabajo, para que a personas que contemplan una obra mía, le hable de un más allá. De un Dios que a lo mejor no conocen para nada, o que no quieren creer en Él. Y digo que se vale de ello, porque yo cuando trabajo recojo el ambiente en el que vivo, que es fundamentalmente religioso. Eso se tiene que notar, pero yo no soy consciente de hacer algo especial para que un cuadro resulte religioso o hable de Dios. No soy muy consciente, aunque intento trabajar para Él, por Él y con Él, y además en su Casa. Pero yo trabajo libremente, y si ese fenómeno se produce es lo más gratificante que me puede aportar mi profesión. Que alguien haya llegado a la fe a través de contemplar una obra, es lo más bonito que le puede pasar a un pintor creyente; y para una persona consagrada, ¡qué
decir!, que en ese sentido, vale la pena el esfuerzo que pueda suponer realizar una obra. Hermana, ha sido mucha la información que se le ha facilitado para que Vd. pudiera trabajar ¿que le llamó la atención a la hora de realizar esta obra? ¿Y qué le inspiró esta escena? La espontaneidad de verla al aire libre, en la calle. Más que el encajonamiento de la capilla, pues me pareció que tenía más frescura, que podía empastarla más, que podía hacerle algo que no pareciera un cuadrito de la Virgen con el Niño. Sino precisamente que tuviera vida, que tuviera movimiento. Vd. No se considera una pintora hiperrealista… Realmente me considero una pintora realista, pero no hiperrealista. El hiperrealismo es el que intenta ser más fotográfico que la fotografía. Simplemente yo hago una pintura en la cual se reconocen personas y objetos, muy aproximados a la realidad pero pintados con empaste y soltura. El hiperrealismo es más perfilado y más relamido que la propia fotografía. Yo creo que de hiperrealista no tengo nada y los que dicen eso, lo dicen por el desconocimiento que hay de los que son los estilos en la pintura. Una cosa es el hiperrealismo, otra cosa el naturalismo, otra cosa el realismo… La pintura realista tiene también muchos derivados. Y lo más importante es que cada pintor, en realidad, no sea de un grupo determinado, sino que cree su propio mundo. Que lo encasillen a uno es lo malo. Pues al pintor lo encasillan los críticos… Nadie tendría que ser un seguidor “de…”; en cuanto seas un seguidor ”de…”, no tienes personalidad. No tienes una firma. Al decir firma, no me refiero a poner el nombre en una esquinita del cuadro. La firma tiene que estar en la impronta del cuadro; ahí es donde está verdaderamente la firma. Ninguno de los que estamos aquí tenemos que ver la firma para distinguir un Goya de un Velázquez, o de un Greco. ¿A que no…?. ¿Por qué…? Pues porque tiene su nombre, en su personalidad. Y su labor como pintora, ¿Cómo convive paralelamente con su labor de persona consagrada, que vive en un convento?
El Descenso
público preparado. Hoy estamos pasando una crisis, época de vacas flacas, pero es que hace un tiempo vendía todo el mundo, todo el mundo exponía. El que se compraba una cajita de óleos en la tienda de la esquina se permitía el lujo de exponer.
51
El Descenso 52
Es muy, muy fácil. Yo creo que lo he dicho en muchas entrevistas. Que San Benito cuando escribió su regla estaba pensando un poquito en mí. Pues tiene un capítulo entero dedicado a los artífices de los monasterios, a los artistas, a los artesanos de los monasterios. Quiero decir que es un trabajo muy adecuado para la vida monástica. ¿Cuántos pintores, escritores, músicos, cuando están cerca de realizar una obra importante tienen
que retirarse a un lugar apartado, al campo, a la hospedería de un monasterio; para poder dedicarse a su obra con paz y tranquilidad? Pues eso es un ambiente que a mí se me ha regalado permanentemente. Por eso digo que no tengo ningún mérito. Recojo continuamente un ambiente de religiosidad. La verdad es que es muy compatible las horas de trabajo con los momentos de oración comunitaria, las horas de coro y de oración personal.
¿No tiene una discípula aquí en el convento que siga sus pasos? No, yo no he querido tener jamás un alumno. Precisamente, porque creo fundamentalmente que el pintor debe hacerse a sí mismo. Mal asunto tener un maestro y querer seguirle, y querer ser el otro, y querer hacer como el otro. No. Aprende de todos. Que en todos hay algo importante; y de esa mezcla de extraordinarias ideas que te proporcionan todos los grandes que hay va a salir tu personalidad. Porque si taponas tú personalidad con la tonta idea que debes hacerlo como este como aquel o como el otro, nunca crearas ese mundo del que hablaba. Ese mundo que no necesita firma. Esa expresión que llevas dentro. Y la expresión que llevas dentro es en la manera de hacer, en cómo hacerlo. Usted, además es académica de Toledo Sí, soy académica correspondiente de Toledo. De la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo. Fue una sorpresa mayúscula pues no lo esperaba, hasta que me llamaron para darme la noticia. Fue muy bonito y me hizo mucha ilusión. No sabía el porqué, pero se ve que ellos me seguían la pista, y tomaron como base el retrato que le hice al Cardenal D. Francisco Álvarez, que gustó mucho. De la misma manera que soy académica de la Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San Luís, aquí en Zaragoza. Sor Isabel, usted tiene una extensa obra. ¿Dónde se encuentran sus obras? Hay muchas obras, muy repartidas. En el Museo Provincial de Bellas Artes de Zaragoza, que es
de la Academia, tengo dos obras. Una de ellas es por mi ingreso como académica, algo que es preceptivo cuando el elegido es pintor. Tengo también una obra en la Academia de Toledo, por el mismo motivo de mi ingreso en ella. En el Museo Nacional de Dibujo del Castillo de Larrés (Aragón) tengo un par de cosas. En varias catedrales españolas. Entre ellas las de Toledo, que está la obra “Y el almendro floreció”, que representa la muerte de Santa Teresa de Jesús en brazos de la Beata Ana de San Bartolomé, compañera inseparable de la santa. ¿Cómo ve usted la pintura que ha realizado para nuestra cofradía, en la que ha representado magistralmente a la Patrona de Jaén? Bueno, ha pasado seis años desde mi última exposición. En estos años creo que mi pintura ha ido evolucionando, y el tema no es lo que yo suelo hacer, no tiene nada que ver. Es un cuadro todo menos una cosa de laminita. Es una obra que tiene textura, que está empastado y que yo quería que tuviera fuerza, que siguiera siendo un cuadro realista, completamente figurativo. Pero al menos, ya que no he podido tener una gran originalidad en su forma, si en su manera de hacer tuviera unas texturas y un algo que le diera una personalidad y una calidad especial. ¿Qué es lo que espera que vean los giennenses cuando vean la obra? Me gustaría que reconocieran que era algo suyo, interpretado por una persona cuya forma de pintar le guste. Sobre esto va a haber para todos los gustos y colores, porque el cuadro nunca está terminado por el pintor. El cuadro realmente adquiere toda su potencia y su significado entre la mirada del espectador y su presencia. Ahí es donde se produce el hecho artístico, y son tantos y tan diferentes cuantas personas ven una obra de arte, oyen una pieza musical o lean un libro. Todas las personas hacen una lectura, y cada una es muy válida. Eso es lo que hace rica una obra, que diga muchas cosas y muy variadas, y que diga mucho a cada uno. Eso es lo que hace rica a una obra. Lo que no me gustaría que la gente quedara indiferente, ni frío ni calor, eso es lo pero.
El Descenso
Por eso para San Benito era tan importante una cosa como otra. Y de ahí el gran invento de su frase: “Ora Et Labora”. ¿Qué quiere decir? Que hay unas horas de trabajo para el monje sin las cuales el monje no sería monje. Porque dice también: “Monje es el que vive del trabajo de sus manos”. El trabajo es una liturgia más. Mientras mi hermanas trabajan en el taller de restauración, en la encuadernación, etc.. Yo me dedico a la pintura, que es perfectamente compatible. Otra cosa es la compatibilidad con las fuerzas más menguadas del carnet de identidad.
53
Disfruté mucho haciéndolo porque a mí me gusta mucho empastar, me gusta hacer texturas. Me ha costado más de lo que yo pensaba, pues está muy trabajado. Yo creo que es mucho más trabajoso realizarlo así que hacerlo muy perfilado. Yo encontraba en esa fotografía, ya que la Virgen no la he visto al natural, encontraba la cara de la Virgen y del Niño muy bonitas, muy simpáticas. Además, quería esa escena por estar en la calle, por tener una frescura, un movimiento.
Presentación del Cartel 2012 El pasado 26 abril, tenía lugar en la Sacristía de la S. I. Catedral la presentación del cartel anunciador de este año 2012, obra de la religiosa cisterciense sor Isabel Guerra Pérez-Peñamaría.
El Descenso
Una vez más, y por tercer año consecutivo, el templo mayor de nuestra diócesis nos acogía para tan relevante acto.
54
Recordemos que ya en edicciones anteriores se presentaron en la misma sala las obras de los artistas Nicolás Sánchez Cubillo y Francisco Galiano Gómez. Es por esto, que mostramos, una vez más, nuestro más sincero agradecimiento al Excmo. Cabildo por tal motivo. Tras las preceptivas salutaciones a las autoridades presentes, religiosas y civiles, se iniciaba la presentación de la obra, que corrió a cargo del hermano mayor de la Cofradía, D. José Humberto Montero Fernández, y del deán de la Catedral D. Francisco Juan Martínez Rojas. El hermano mayor, quien explicó todo el proceso y encargo de la obra, expuso que “contar en la Cofradía con un pintura de este nivel artístico es todo un privilegio. Como lo es, el que este haya sido pintado por una monja pintora, o mejor dicho, por una monja que reza pintando. Una artista con una gran calidad humana, que pinta con el alma, que es capaz de crear a través de sus lienzos una atmósfera donde se respira paz, amor, esperanza y misticismo. En definitiva la belleza…”
Por su parte, el deán de la Catedral giennense, D. Francisco Juan Martínez Rojas, basó su exposición en dos partes claramente definidas: una primera, “María en la historia del arte”, y la segunda: “La Virgen de la Capilla, según Sor Isabel Guerra”. Exponía el deán que “definiría su estilo como más cercano a lo que, tomado de la literatura, se puede aplicar a la pintura como “realismo mágico”, que estaría caracterizado por el contenido de elementos mágicos/fantásticos, percibidos parte de la “normalidad”. También una presencia de lo sensorial como parte de la percepción de la realidad, que en las obras de Sor Isabel Guerra se ve sobre todo en el protagonismo de la luz, que parece paralizar el tiempo de la escena. Así, con ese ambiente trascendente, la pintora transforma lo común y cotidiano en una vivencia que incluye experiencias “sobrenaturales” para la óptica de quien contempla la obra, sin que ello excluya
la experiencia de lo real. También se puede citar la mezcla de planos de realidad y fantasía: hay hechos de la realidad cotidiana combinándose con el mundo irreal de luz, que no es hiperrealista.” “Sor Isabel ha representado a la Virgen de la Capilla bajando por la calle Campanas, desde la Catedral. El tejado del obispado, que se divisa al fondo de la pintura, así lo evidencia. Ha querido focalizar la atención del espectador en la sola figura de la Virgen, sin personajes costumbristas ni otros elementos que distraigan la atención de quien contempla el cuadro. Desde el punto de vista técnico, y como podrá comprobar quien contemple la obra de cerca, ha elaborado concienzudamente el cielo que sirve como de baldaquino a la imagen de la patrona de Jaén, recurriendo a un uso generoso y abundante de la pintura, que casi distribuida en grumos ofrece un cierto resalte tridimensional. La combinación de diversos colores en el cielo ofrece un mensaje polícromo que habla de una dimensión no real para el ojo humano, pero cierta: es el cielo donde María asunta vive la plenitud de la gracia junto a Dios, y del que desciende en la noche del 10 al 11 de junio de 1430 para socorrer a la ciudad de Jaén. Es el cielo en la tierra.”
El Descenso
Haciendo un repaso del proceso que llevó a contactar con sor Isabel para el encargo del cartel, José Humberto Montero Fernández, mostró a los presentes la sencillez y amabilidad que posee la autora.
55
El Descenso
El Descenso
Cr贸nica de seis a帽os
57
58
El Descenso
Crónica de seis años
al servicio de la Cofradía de la Junta de Gobierno presidida por José Humberto Montero Fernández
Adquisiciones de la Cofradía de Nuestra Sra. de la Capilla 2006-2012 El patrimonio de una cofradía pasa de generación en generación. Este patrimonio se va obteniendo con gran esfuerzo por parte de sus cofrades, devotos y por parte de muchas donaciones anónimas. La Cofradía de Nuestra Señora de La Capilla a lo largo de los años ha ido adquiriendo enseres, muchos de ellos regalos y donaciones, como los mantos que luce la Santísima Virgen.
Las piezas que forman parte de este ajuar, fue cincelado en alpaca plateada en los talleres de Orfebrería Andaluza. Su estilo responde a un concepto barroco, a base de un cincelado muy fino y detallista. Es de alpaca plateada con baño del mismo metal. Cada candelero simula que se apoya sobre tres patas de león con pie liso. Siendo su base de forma triangular con decoración en motivos vegetales y tarja central, donde pasado va cincelado el
El Descenso
Esta Junta de Gobierno se propuso adquirir enseres necesarios, que en muchos casos tenía que pedir prestadas a otras hermandades. Es por ello, que se compró la candelería. En el año 2008, la Junta de Gobierno decidió en Asamblea la adquisición de ésta, que sería pagada con donaciones de los devotos y cofrades. La casa elegida para el diseño y ejecución de la citada obra fue la casa sevillana “Orfebrería Andaluza” de Manuel Ríos e hijos.
59
escudo de la Cofradía. Su astil se apoya sobre cuatro marcollas con decoraciones geométricas, vegetales o mixtas, que a su vez se apoya sobre una macolla con decoración vegeta, finalizando en un cubilete completamente liso dentro del cual habrá que colocar el cirio.
El Descenso
Del mismo, durante estos dos mandatos también se ha restaurado de manera integral el trono procesional de la Santísima Virgen. Construcción de una nueva parihuela, realizada en los talleres Mesa de nuestra capital, y el arreglo y restauración de los frontales de plata que compone el trono, a cargo del orfebre jiennense Juan Francisco López Pareja. Se acometió el arreglo de los varales del mismo, que unido a la restauración del mismo realizada hace tres años, ve complementada de una manera muy digna este conjunto de orfebrería para la salida procesional de cada once de junio. El pasado 2011 el trono estrenó el Puente Campana, obra del maestro jaenero, Juan Francisco López Pareja. Este año, y para concluir la restauración integral del trono, también se han cambiado los terminales de los varales, obra también de López Pareja Además, de este mismo artista, son las
60
61
El Descenso
nuevas varas para las representaciones adquiridas durante este mandato.
(Faldón altar de cultos y ambón. Manga para la cruz procesional).
Del mismo modo, se han restaurado dos jarrones grandes de plata, que fueron arreglados y plateados para tenerlos preparados y en las mejores condiciones para las fiestas, unidos a otros cuatro jarrones que también se arreglaron. Se adquirieron una serie de albas blancas para los acólitos que acompañan tanto en los cultos como en la procesión. Para la Misa Votiva de los Cabildos se estrenaron una serie de sotanas azules con roquete que dieron color a los niños y niñas que acompañan a la Santísima Virgen.
Restauración integral de la Imagen de Ntra. Sra. de la Capilla, Trono-Basamento de plata labrada y adecuación medioambiental del camarín.
El Descenso
Por último, cabe mencionar la compra de un juego de dalmáticas azules para el servicio de paso, unos resposteros de tela bordada con los escudos de la Ciudad y de la Cofradía para la Misa de Cabildos y el arreglo de unos jarrones de plata completan el esfuerzo realizado para aumentar y mejorar el ajuar de la Cofradía, pequeños grandes tesoros que pasarán de padres a hijos.
62
La Caridad, nuestra razón de hacer Cofradía “Aunque yo hablara todas las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo caridad, soy como una campana que resuena o un platillo que retiñe”. Estas palabras de la Carta de San Pablo a los Corintios han sido el Leit Motiv de esta Junta de Gobierno. Desde el inicio del mandato en el año 2006 los miembros de la Junta se propusieron dos objetivos sobre los que apoyar su actividad dentro de la Cofradía. El primero, promover y difundir el culto
Es por ello, que a lo largo de estos años se han buscado distintos caminos cuya meta ha sido siempre la misma, procurar con nuestra ayuda económica, hacer un poco más felices a aquellas personas que carecen de casi todo. Desde el año 2007 y hasta este 2012, las Cruces de Mayo han servido para que la Cofradía de Nuestra Señora de la Capilla organizara una solidaria en la Plaza de San Ildefonso cuyos fondos se han destinado de forma íntegra a distintos proyectos de Caridad. Entre ellos cabe destacar el Colegio que construimos en India a través de la ONG Manos Unidas y cuyo importe, aportado de forma íntegra por la Co-
fradía gracias a la colaboración de cofrades, devotos y jiennenses de buena fe, ascendió a los 20.834 euros. Este colegio que ya luce el nombre de Nuestra Señora de la Capilla se localiza en Karankadu, una pequeña aldea perteneciente al Distrito de Kanyakumari, situado a 12 Km. al Oeste de Nagercoil, capital del distrito y no lejos del puerto de Colachel. Su población pertenece a distintas castas y credos, pero tienen en común su pobreza y retraso en muchos aspectos de la vida. Generalmente trabajan como jornaleros por cuenta ajena. La agricultura es una de sus principales ocupaciones, pero falla con frecuencia debido a sequías o inundaciones. Por tratarse de un trabajo estacional y dependiente de las condiciones climáticas, sus ingresos son muy inseguros. La mayoría viven en chozas con tejado vegetal. Debido a que un tsunami afectó seriamente a toda la zona costera del distrito, se ha producido un colapso en el crecimiento económico. La falta de educación de los padres influye en los niños, muchos de los cuales abandonan la escuela antes de terminar la educación primaria, incrementando con ellos el círculo de la pobreza. Desde la Cofradía promovimos la construcción de un edificio muy sencillo, de una sola planta con seis aulas, a la que también habría que
El Descenso
a la Virgen María en su advocación de la Capilla, en su Descenso a la Ciudad de Jaén. El segundo, poder, a través de la Cofradía, contribuir con un pequeño grano de arena a hacer de éste un mundo mejor. La actividad de la Ilustre, Pontificia y Real Cofradía de Nuestra Señora de la Capilla a través de la Caridad se ha convertido en el hilo conductor que ha unido y fortalecido en la fe a los miembros de la Junta que han buscado a Dios y lo han hallado en los demás, en los más necesitados.
63
dotar de un bloque de aseos. La situación de las familias de estos niños no les permite emprender estos trabajos de construcción por si solos, aunque sí se ha comprometido a colaborar en la construcción como mano de obra no cualificada y mediante el aporte y traslado de materiales. Después de este pequeño gran proyecto, quisimos seguir en esta senda, buscando la ayuda de los jiennenses para hacer realidad otras obras que son necesarias en países en vías de desarrollo, y nos embarcamos junto con los Misioneros de África, los Padres Blancos, en la construcción de un orfanato en la República Democrática de El Congo en una en zona afectada por las guerras étnicas en la que más de 50.000 personas han sido asesinadas en los últimos años y donde muchas niñas adolescentes de la zona son violadas por ex-milicianos o soldados, algunas de ellas fallecen en el parto. El orfanato, cuyo importe asciende a 46.400 euros, consta de: cocina, lavandería, almacén (para los alimentos y otras cosas), salas de baño, servicios, tres grandes salas dormitorios (una para los pequeños y dos para los niños y niñas que vayan creciendo), comedor, porche, 5 dormitorios (dos para las monjas, dos para dos mujeres que trabajen allí, y una para algún visitante) y un despacho para la monja responsable.
El Descenso
Para hacer realidad este ambicioso proyecto, además de la Cruz de Mayo solidaria se han puesto en marcha otras actividades como la Cena Benéfica y un Rastrillos Solidario, en los que hemos contado con la colaboración inestimable de devotos y cofrades de la Santísima Virgen, como la firma Ángela Serrano, que ha hecho posible poder concluir este proyecto
64
A lo largo de estos seis años, también hemos colaborado con otros proyectos como la Casa de los Sin Techo de Cáritas, la aportación de comida a comedores sociales y conventos y campañas de recogida de juguetes para los niños más desfavorecidos.
6 años, 6 pregoneros A lo largo del mandato de la Junta de Gobierno presidida por José Humberto Montero Fernández periodistas, sacerdotes, cofrades y devotos han sido los elegidos para pronunciar el pregón anual con motivo de las fiestas de la Virgen de la Capilla. En el año 2007 el encargado de hacerlo fue el Deán de la Catedral, don Francisco Juan Martínez Rojas. Erudito, devoto y como siempre magistral, así fue el pregón pronunciado por el presidente del Cabildo quien, a través de un viaje en el tiempo, los presentes vivimos el momento del Descenso de Nuestra Señora a la Ciudad de Jaén acompañando a los cuatro testigos citados en el acta de Villalpando, en el mismo momento en que las plantas de la Virgen Santísima se posaban en las calles del Arrabal de San Ildefonso. En el año 2008, el periodista jiennense, ya fallecido, Fernando Arévalo pronunció el pregón dedicado a la Santísima Virgen de la Capilla como preludio de su festividad, presentado por su predecesor, don Francisco Juan Martínez Rojas, definió al pregonero como “artesano de la palabra” recorrió pasajes de la infancia del pregonero a través de imágenes de su Alcaudete natal. Arévalo, hizo vibrar a un auditorio repleto con su imponente voz de radiofonista de siempre, y sus palabras dedicadas a la Patrona de Jaén. El anterior obispo de la Diócesis, Monseñor Santiago García Aracil, actual arzobispo de Mérida Badajoz pregonó las fiestas de la Patrona en el año 2009. Una magnífica catequesis de la devoción Mariana en la ciudad de Jaén, que intercaló con sus vivencias durante sus dieciséis años al frente de nuestra diócesis. El cofrade, fiel devoto de la Virgen y antiguo Hermano Mayor de la Cofradía de la Buena Muerte, Aniceto Eduardo López Aranda fue el designado por la Junta de Gobierno de pregonar las fiestas en honor de María Santísima de la Capilla 2010. López Aranda pronunció un pregón de exaltación de la figura de la Virgen, en el que uniendo pasado y presente manifestó que María ha sido vínculo a lo largo de toda la
La imagen de Nuestra Señora de la Capilla vista por los ojos de 6 grandes pintores
El pasado año, 2011 el periodista y director del periódico Viva Jaén, Antonio Garrido, se encargó de exaltar la devoción y tradición de la Virgen de la Capilla con su pregón.
Aunar arte y devoción a través de los carteles anunciadores de las fiestas en honor a Nuestra Madre de la Capilla. Con esta premisa, y siguiendo con la estela ya iniciada por la anterior Junta de Gobierno, durante estos seis años la Cofradía ha querido contar con los mejores pintores de Jaén. Con nombres importantes del arte y la pintura jiennense para que, a través de sus ojos de artista, nos ofrecieran la mejor imagen de la Patrona Principal de Jaén.
En 2012, último de este mandato, el pregón será algo innovador y profundamente emotivo y cargado de fe. El que pronuncien Ramón Molina Navarrete (autor y director de Maranatha) y su hijo, José Ramón Molina Hurtado.
El Descenso
cristiandad. El pregonero tuvo también palabras de ánimo y aliento para aquellos jóvenes que viven su fe cristiana a través de las Cofradías.
65
Es por ello que en el año 2007 se encargó la obra a Francisco Javier Ochando Melgarejo. Desde su infancia, la pintura era el medio de expresión que tenía más importante, pero cuando llegó a la adolescencia la abandonó. Por avatares de la vida dejó de pintar sobre los catorce años y se dedicó a escribir durante los siguientes años, que coincidió con aquella época en la que se encontraba un poco triste y deprimido. Quizás fue eso lo que le hizo volver a dedicarse a la pintura. Según nuestro querido pintor “Puede ser que fuese ella misma, la pintura, la que le hubiese llamado a volver”.
escultor cordobés afincado en Granada, Juan Antonio Corredor Martínez. En 1.996 obtuvo la Licenciatura en Bellas Artes y en este momento es Profesor de Dibujo de Enseñanza Secundaria en el IES “María Bellido” de Bailén. Actualmente para él, lo es todo, tanto la pintura como la esculturar, Francisco Javier Ochando se considera al cincuenta por ciento escultor y el otro cincuenta por ciento pintor, pero sobre todo lo que realmente se considera es “aprendiz de artista”, como a él le gusta autodenominarse.
El Descenso
David Padilla fue el encargado de diseñar el cartel anunciador de las fiestas en honor a Nuestra Señora de la Capilla 2008. El pintor, siguiendo sus habituales técnicas de pintura basadas en tintas industriales y aerográficas, y su particular mirada de artista en la que se funde la fotografía con el realismo más clásico, ha querido mostrar a la Virgen de la Capilla en su Santuario, envuelta en una luz que ella
66
Inició su formación artística en la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de nuestra capital y en 1.991, ingresó en la Facultad de Bellas Artes “Alonso Cano”, de la Universidad de Granada. Compaginó sus estudios universitarios con la iniciación a la talla en madera, de la mano de Vicente Castillo Gutiérrez y con el trabajo en el estudio del
misma irradia, todo ello en tonos ocres y dorados: la curva sobre la línea, el barroco con el gótico. Todo ello conjugado a la perfección bajo el pincel de un autor pop, pero a la vez íntimamente ligado con el día a día de la ciudad que le vio nacer. En el año 2009, Jacinto Linares Talavera, autor de la obra de ese año, ha reflejado a la Santísima Virgen en su camarín, pudiéndose contemplar el retablo en todo su esplendor con sus columnas salomónicas. El autor fue presentado por D. José Domínguez Cubero, Doctor en Historia del Arte, quién en su exposición dio un repaso a la iconografía de Ntra. Sra. de la Capilla. El pintor jiennense Nicolás Sánchez Cubillo fue el designado por la cofradía en el año 2010, para realizar el cartel anunciador de las fiestas de ese año.
El Descenso
El Cartel, sobrio y colorido a la vez, representa un primer plano de la talla de Nuestra Señora de la Capilla, con el manto rojo de los Condes de Corbull, rodeada de flores de tal detalle que parece puedas tocarlas. Además, y con motivo del 350 aniversario
67
68
El Descenso
de la Consagración de la Santa Iglesia catedral, el autor quiso estampar en la obra el escudo del Cabildo, como homenaje a la especial vinculación entre la Cofradía y el Cabildo Catedral. El pasado año 2011, el cartel anunciador de las fiestas fue obra de Francisco Galiano Gómez, un joven artista, nacido en Mengíbar y licenciado en bellas artes por la Universidad de Granada (2004). Ha realizado numerosos trabajos. Algunas de sus obras más significativas son las pinturas realizadas para las parroquias de la Inmaculada (Mengíbar), la pintura para la Sacristía de San Pedro (Mengíbar), la de Sta. Mª Magdalena (Cazalilla), los carteles oficiales de la Semana Santa de Jaén en los años 2007 y 2009 y la talla de Ntra. Sra. de la Soledad de Arjona. Su obra está basada en un exhaustivo estudio de la figura humana desde la anatomía más descriptiva hasta el aspecto más trascendente, siendo la mayoría de su obra de carácter religioso aunque también ha cultivado el género del retrato en bastantes ocasiones.
El Descenso
Este último año, 2012, una autora genial, una mujer llena de amor de Dios, Sor Isabel Guerra Pérez-Peñamaría ha sido la encargada de poner el acento femenino a una gran pinacoteca, que esperamos sigan promoviendo y conservando Juntas de Gobierno venideras.
69
Aテ前S 2007-2009
El Descenso
2007
70
71
El Descenso
El Descenso
2008
72
73
El Descenso
El Descenso
2009
74
Seis años más de historia
de la Ilustre, Pontificia y Real Cofradía de Ntra. Sra. de la Capilla, Patrona y Alcaldesa Mayor de la Ciudad de Jaén Antonio Martínez Nieto. Vocal adjunto a cultos y secretaría
Una gran figura del toreo como es Enrique Ponce, estaba interesado en vincularse aún más a la ciudad dónde ha cosechado tantos éxitos taurinos, y a la que es su tierra natal sentimentalmente hablando.
Como estaba previsto, Enrique Ponce estrenó un capote de paseo el día 18 de octubre en la corrida más sobresaliente de nuestra feria de San Lucas. Dicho capote llevaba bordada la imagen de la Stma. Virgen de la Capilla, donado a la cofradía en la corrida contra el cáncer que organiza la AECC de Jaén cada año. En el ruedo se hizo entrega al hermano mayor del capote de paseo que más tarde se llevaría a las plantas de la Patrona de Jaén en un sencillo acto que abarrotó la por entonces Parroquia de San Ildefonso y con el que se hizo entrega de la medalla de la cofradía al diestro y a su esposa Paloma Cuevas.
El Descenso
Hace 6 años que D. José Humberto Montero Fernández se aventuró junto a un grupo de cofrades a ponerse al frente de la Ilustre, Pontificia y Real Cofradía de Ntra. Sra. de la Capilla, Patrona y Alcaldesa Mayor de la Ciudad de Jaén, y desde entonces, grandes acontecimientos han ido sumándose a la tan enriquecida historia de la Corporación.
75
La devoción de la Santísima Virgen en todas sus advocaciones llevó a un nutrido grupo de cofrades de la Virgen de la Capilla a peregrinar hasta Huelva para encontrarse con la Reina de las Marismas, la Virgen del Rocío.
El Descenso
Esta peregrinación, la primera de la nueva junta de gobierno tuvo lugar en el mes de noviembre, coincidiendo con el puente de Todos los Santos. La peregrinación unió a los hermanos de la patrona de Jaén con los vecinos de Cárchel y Carchelejo que estuvieron acompañados de su párroco, D. Francisco Carrasco Cuadros, predicador de la Novena a la Virgen, y reconocido devoto rociero.
76
Uno de los objetivos propuestos por la junta de gobierno de la Hermandad era completar el conjunto de enseres procesionales y de altar que se utilizan durante todo el año cofrade, como es la adquisición de una candelería para el altar de cultos de Ntra. Sra. En el mes de abril tuvo lugar la presentación y bendición ante los cofrades y devotos de la Virgen de la Capilla, la nueva candelaria, donada en su totalidad por éstos. Este proyecto era una antigua aspiración de la cofradía, que año tras año tenía que solicitar a distintas cofradías la cesión de sus candeleros para nuestro solemne altar de cultos.
Esta antigua aspiración comenzó a fraguarse cuando el Hermano Mayor se puso al frente de este proyecto, y se ha visto hecha realidad. El estilo de los candeleros responde a un concepto barroco, a base de un cincelado muy fino y detallista. Son de alpaca plateada con baño del mismo metal, simulando que se apoyan sobre tres patas de león con pie liso. Siendo su base de forma triangular con decoración en motivos vegetales y tarja central, donde se encuentra cincelado el escudo de la cofradía. Desde entonces el altar de cultos de la Santísima Virgen de la Capilla luce espléndido durante el mes de mayo y el novenario en su honor, gracias a la aportación de los diversos cofrades. Desde que la Junta tomo posesión de su cargo, uno de sus principales objetivos era prestar especial atención a la Caridad, es obligación de un cristiano ayudar a los más desfavorecidos. Así se recoge con claridad en el Decreto sobre Apostolado de los laicos (Concilio Vaticano II). Por eso en el primer año de mandato se hizo especial hincapié en atender estos fines, como muestra de ello, entre otras actividades se realizaron campañas de recogida de alimentos y de juguetes, y la colaboración con la Casa de los Sin Techo que construía Cáritas. Al margen de todas estas colaboraciones, se creyó conveniente participar en un proyecto de construcción de un Colegio en la
El año 2008 estuvo marcado por la visita de la Stma. Virgen de Torreciudad al Santuario de Ntra. Excelsa Patrona. Una eucaristía sirvió como punto de unión y hermanamiento del emotivo acto que se celebró en el templo de San Ildefonso, en el mes de junio. La exposición titulada “Me llamarán bienaventurada todas las generaciones” visitó nuestra ciudad y se clausuró con la citada visita. Allí cientos de personas, llenas de fervor a María, en éstas dos advocaciones se reunieron para orar juntos. Tras compartir la eucaristía, la Junta de Gobierno de la Cofradía, recibió ante la imagen de la Patrona a los comisarios de la exposición, a quienes entregaron un cuadro con la imagen de la Virgen de la Capilla.
Otro de los viajes en el que miembros de la Cofradía de la Virgen de la Capilla y devotos de la Patrona de Jaén han participado fue una peregrinación a Tierra Santa, que les ha llevado durante diez días a visitar los lugares más emblemáticos de la vida de Jesucristo. Jerusalén fue el epicentro del viaje que la junta de Gobierno de la Cofradía de la Virgen de la Capilla organizó para el verano 2008. Más de 40 cofrades y devotos de la Virgen han visitado los santos lugares en los que se desarrolló la vida de Cristo. Todo ello acompañados por el sacerdote, don Antonio Robles Gómez. En el mes de marzo del año 2008, la Cofradía de la Virgen de la Capilla, Patrona de Jaén, organizó un retiro - peregrinación a tierras extremeñas, por las ciudades de Cáceres- Trujillo, y posteriormente al Monasterio de Guadalupe, para postrarse ante la Virgen, en su Santuario. La expedición, estuvo compuesta por miembros de la Junta, y hermanos cofrades, todos ellos acompañados por el Deán de la Santa Iglesia Catedral, Ilmo Sr. D. Francisco Juan Martínez
El Descenso
India junto con la colaboración de Manos Unidas. Dicho colegio, con el título de “Colegio Virgen de la Capilla” fue edificado en el primer mandato de la junta de gobierno, un ilusionante proyecto que vio la luz gracias a las diversas aportaciones y esfuerzos por parte de cofrades y devotos de la Stma. Virgen
77
Rojas. Los allí presentes disfrutaron de unos días de convivencia y religiosidad a las plantas de la advocación mariana, guiados por el director espiritual.
de Orfebrería y Escultura Juan Pareja, para proceder a la restauración de una de las joyas de orfebrería de nuestra cofradía.
Gracias a la buena relación mantenida con la Hermandad Matriz de la Stma. Virgen de la Cabeza, nuestra Cofradía fue invitada en abril de 2009 a la Apertura del Año Jubilar en honor de la Patrona de nuestra Diócesis. Durante este periodo especial de gracia divina, la Diócesis de Jaén celebrará varias efemérides: la conmemoración del Centenario de la Proclamación de la Virgen de la Cabeza como Patrona de Andújar, Centenario de la Coronación Canónica, Cincuentenario de la Proclamación como Patrona de la Diócesis de Jaén, así como el Cincuentenario de la Recoronación Canónica. Con una Solemne Eucaristía Pontifical presidida por el Nuncio de Su Santidad en España, Monseñor Manuel Monteiro de Castro, junto con el Sr. Obispo de Jaén, D. Ramón del Hoyo López, concelebraron Monseñor Santiago García Aracil, Arzobispo de Mérida Badajoz, Monseñor Francisco Javier Martínez Fernández, Arzobispo de Granada, Monseñor Adolfo González Montes, Obispo de Almería, Monseñor Antonio Ceballos Atienza, Obispo de Cádiz, Monseñor Antonio Algora Hernando, Obispo de Ciudad Real, Monseñor José Manuel Estepa Llaurens, Arzobispo Emérito Castrense, Monseñor Ignacio Noguer Carmona, Obispo Emérito de Huelva, además de más de sesenta sacerdotes.
El 9 de julio de 2009 nuestra imagen titular, y Patrona de la ciudad de Jaén, fue trasladada al Instituto Andaluz de Patrimonio para analizar su estado, para su posterior restauración. Además, se incluyó el Trono-basamento de plata labrada desde donde se expone en su Camarín Ntra. Sra. de la Capilla. Pieza de orfebrería de elegante y bello trabajo, datada de 1742, pero que desgraciadamente se encontraba bastante deteriorada por el uso y el paso de los años. La Junta de Gobierno dirigiéndose entonces a los cofrades, informaba de la Eucaristía de despedida que se celebró el miércoles 8 de julio de 2009, en la Iglesia Parroquial de San Ildefonso. Donde cofrades, devotos y el pueblo de Jaén en general despidió la Imagen de su Patrona antes de trasladarse a Sevilla. Al día siguiente, en la Casa Museo, la Junta de Gobierno, en representación de todos los cofrades, hizo entrega de la Imagen y la peana de plata a la Consejera Rosa Torres en un sencillo acto. En el mismo tomaron la palabra el Hermano Mayor de la cofradía, la Alcaldesa de la ciudad, Carmen Peñalver Pérez y la Consejera de Cultura. Además estuvieron presentes en el mismo, el Delegado Episcopal de Patrimonio, D. Francisco J. Martínez Rojas, el Capellán de la Cofradía, D. Manuel Bueno Ortega y concejales del Excmo. Ayuntamiento de la ciudad.
El Descenso
A estos actos que estuvo invitada la Junta de Gobierno de nuestra Cofradía, quién acudió devotamente a rendir homenaje a la Patrona de nuestra Diócesis, la Stma. Virgen de la Cabeza.
78
Continuando con la labor de completar el ajuar procesional de la Stma. Virgen, se procedió a restaurar el trono que porta a la imagen en el desfile de la tarde del 11 de junio cada año. El trono se encontraba en un estado de deterioro bastante reseñable, por ese motivo, la Junta de Gobierno de la Cofradía decidió que fuese sometido a un proceso de restauración por parte de profesionales. Una nueva parihuela que reforzaría y aligeraría el trono procesional. El cambio de la parihuela fue sólo el primer paso de este proceso, que se realizó en los Talleres Mesa de la Capital. El resto del trabajo se realizó en el taller
En el verano de 2009, la Junta de Gobierno de la Cofradía de la Virgen de la Capilla, acompañada de devotos y cofrades, peregrinaron a tierras turcas para seguir los pasos de San Pablo, en el año declarado por el Papa Año Jubilar Paulino. Durante once días, los peregrinos pudieron conocer de cerca la historia del inicio de la cristiandad tras las huellas de Pablo de Tarso y de los Padres de la Iglesia. Guiados por el Deán de la Catedral jiennense, D. Francisco Juan Martínez Rojas, los miembros de la Cofradía celebraron diversas Eucaristías en lugares emblemáticos. El día 3 de octubre de 2009, la Ilustre Cofradía se vio inmersa en un proceso electoral que desembocaría en la reelección de D. José Humberto Montero
Con motivo de la Cuaresma 2010, la Junta de Gobierno de la Virgen de la Capilla, junto a devotos y cofrades participaron en un retiro espiritual que se ha celebrado en el Santuario de la Virgen de la Cabeza en Andújar. Éste fue impartido por el párroco del Santuario, y actual Hermano Mayor de la Cofradía Matriz, Don Rvdo. Rafael Márquez Mejías. Además, y con motivo del año Jubilar Mariano, las Cofradías de la Virgen de la Capilla, y la Matriz de la Virgen de la Cabeza vivieron un emotivo acto de hermanamiento frente a la imagen de la Virgen de la Cabeza, patrona de la Diócesis de Jaén. El Hermano Mayor de la Virgen de la Capilla, José Humberto Montero y el Presidente de la Cofradía de Andújar, José María González hicieron un intercambio de regalos tras participar en una eucaristía presidida por el hermano mayor y rector del Santuario.
Continuando con la labor de caridad, la nueva junta de gobierno de la Hermandad se embarcó en el proyecto de construcción de un Orfanato en la República Democrática de El Congo, que llevará el nombre de Nuestra Patrona la Virgen de la Capilla. Gracias a cenas benéficas que se han ido realizando a lo largo de estos tres años, así como cruz de mayo y cantidades aportadas por firmas colaboradoras y devotos, se está completando tan ansiado proyecto. Ojalá en un tiempo mínimo se vea terminado el Orfanato, del cual está al frente el padre blanco, D. Francisco Ostos Palma, junto con la Junta de Gobierno de nuestra Hermandad. Tras el proceso de restauración llevado a cabo por el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico de Sevilla, la imagen de Ntra. Sra. de la Capilla volvió un 10 de mayo del año 2010, donde fue recibida en la Sacristía Mayor de la S. I. Catedral. El pueblo de Jaén abarrotó el lugar para ver a su amada patrona tras la ausencia de 10 meses y un día. Excelente la labor realizada por el IAPH con la imagen y el trono basamento que la porta en el camarín y el apoyo recibido por el Excmo. Ayuntamiento de Jaén junto con la Junta de Andalucía, que corrieron con los gastos de dicha restauración.
El Descenso
Fernández como Hermano Mayor en los siguientes tres años. Acompañado por D. Manuel Rodríguez Chica y Dña. Esperanza Macarena Calatayud Chamorro como Vice-Hermano Mayor y Administradora, respectivamente. Nuevas incorporaciones a la Junta de Gobierno que hasta este presente año ha trabajado por y para la Corporación de la Patrona de la ciudad.
79
Para continuar con el proceso de conservación de la talla, el Camarín donde todo el año reposa nuestra Excelsa Patrona fue sometido, gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Jaén, presidido por Carmen Peñalver, a un proceso de adecuación medioambiental en el que se sustituyeron los focos que lo iluminan por otros de luz fría, de forma que la temperatura que se alcanza dentro del camarín sea bastante menos elevada. Para terminar dicha adecuación se procedió a retirar el cristal a través del cual la Santísima Virgen de la Capilla se observaba en su Camarín. Este año 2010 también fue especial por el 350º aniversario de la consagración de la S.I.Catedral de Jaén, conmemoración que fue celebrada por nuestra Cofradía con la realización de la misa votiva de los cabildos en el altar mayor de la misma. Esa misma tarde el cortejo de Ntra. Sra. de la Capilla comenzó su caminar desde el templo mayor de nuestra diócesis, donde se pudo contemplar a la bendita madre de Dios bajo las naves del gigante renacentista. Todos los fieles de la parroquia de San Ildefonso acudieron junto a nuestra hermandad al nombramiento como Basílica Menor del Santuario de Ntra. Sra. de la Capilla, nombramiento que se recibió con los brazos abiertos tras una década solicitándolo a la Santa Sede. El cardenal Antonio Cañizares Llovera, prefecto de la Congregación para el Culto y la Disciplina de los Sacramentos presidió dicho nombramiento en una eucaristía en el mes de noviembre. El 22 de febrero de 2011, la Imagen de la Virgen de la Capilla junto a la de Santa Catalina de Alejandría, recibió el galardón del Sello de Plata de la Ciudad de Jaén, a título especial en la gala de entrega de estos galardones creados durante el mandato 2007-2011 a la cual asistió la Junta de Gobierno.
El Descenso
Junto a todos estos acontecimientos extraordinarios, nuestra Ilustre Cofradía se ha visto inmersa en los cultos ordinarios en honor a nuestra patrona como es el ejercicio de las flores, novenario, sabatinas, cruz de mayo, presentación de carteles y revistas…, por lo que son 6 años más los que se añaden a la historia de esta institución religiosa encargada del cuidado y culto de Nuestra Madre de la Capilla.
80
Aテ前S 2010-2012
El Descenso
2010
81
82
El Descenso
83
El Descenso
El Descenso
2011
84
85
El Descenso
86
El Descenso
El Descenso
2012
87
88
El Descenso
El Descenso
El Descenso
Colaboraciones
89
90
El Descenso
María, mujer «eucarística» Pedro José Martínez Robles. Vicario parroquial de San Ildefonso
«Este año volverá el Señor a pasar por San Ildefonso, sus torres se inclinarán ante el Santísimo Sacramento que procesiona frente a sí; todas sus campanas repicarán de alegría y el Santo Obispo desde el cielo lucirá orgulloso su casulla y nos bendecirá; el Retablo de Ánimas sólo tendrá cielo y Santa Marta saldrá de su capilla ansiosa de servir a su Señor. Este año, la Virgen de la Capilla saltará de gozo porque pasaremos por su puerta alabando al Hijo de sus entrañas; este año, el Niño que tallara unido a su Madre aquel escultor lleno de piedad y amor a la que “descendió del cielo a la ciudad de Jaén”, sonreirá más aún y el mismo Creador que se ha hecho Pan será ahora quien refleje en su rostro la alegría de saber que va caminando entre su mismo pueblo junto a su Madre purísima».
Y por eso, para meditar el misterio de la Madre y el Hijo que se nos da en el pan de la Eucaristía, os recomiendo vivamente retomar y saborear de nuevo las palabras que el beato Juan Pablo II escribiera en el
último capítulo de su última Encíclica, la “Ecclesia de Eucharistia”, en la que el Papa pretendía que “la Eucaristía siga resplandeciendo con todo el esplendor de su misterio” (n.10) en la Iglesia del nuevo milenio. Yo sólo voy a citar el n. 58 en el que Juan Pablo II nos dice que «En la Eucaristía, la Iglesia se une plenamente a Cristo y a su sacrificio, haciendo suyo el espíritu de María. Es una verdad que se puede profundizar releyendo el Magnificat en perspectiva eucarística. La Eucaristía, en efecto, como el canto de María, es ante todo alabanza y acción de gracias. Cuando María exclama “mi alma engrandece al Señor, mi espíritu exulta en Dios, mi Salvador”, lleva a Jesús en su seno. Alaba al Padre “por” Jesús, pero también lo alaba “en” Jesús y “con” Jesús. Esto es precisamente la verdadera “actitud eucarística”. Al mismo tiempo, María rememora las maravillas que Dios ha hecho en la historia de la salvación, según la promesa hecha a nuestros padres (cf. Lc 1, 55), anunciando la que supera a todas ellas, la encarnación redentora. En el Magnificat, en fin, está pre-
El Descenso
He querido comenzar estas palabras con otras que pronuncié hace dos años en el Acto de Exaltación del Corpus Christi celebrado en la Santa Iglesia Catedral; porque los avatares del calendario, de la sucesión de los días y las noches, de las lunas y las estaciones, han hecho que este año 2012 el día del Descenso de Nuestra Señora a la ciudad de Jaén prácticamente coincida con el del Corpus Christi. Los avatares del calendario de la Iglesia, que tiene como único Sol al Hijo resucitado de María, han hecho que el día en el que el Señor sale a nuestras calles bajo la apariencia humilde de un trozo de pan, coincida prácticamente con la noche en el que aquellos testigos humildes vieron aquel cortejo en el que “esta dueña llevaba en los brazos una criatura pequeña vestida eso mesmo de blanco, y que llevaba dicha criatura en el brazo derecho”. Y es que los avatares del calendario han unido este año 2012, como lo están desde siempre, a la Madre y al Hijo.
91
sente la tensión escatológica de la Eucaristía. Cada vez que el Hijo de Dios se presenta bajo la “pobreza” de las especies sacramentales, pan y vino, se pone en el mundo el germen de la nueva historia, en la que se “derriba del trono a los poderosos” y se “enaltece a los humildes” (cf. Lc 1, 52). María canta el “cielo nuevo” y la “tierra nueva” que se anticipan en la Eucaristía y, en cierto sentido, deja entrever su ‘diseño’ programático. Puesto que el Magnificat expresa la espiritualidad de María, nada nos ayuda a vivir mejor el Misterio eucarístico que esta espiritualidad. ¡La Eucaristía se nos ha dado para que nuestra vida sea, como la de María, toda ella un magnificat!». Madre e Hijo unidos, sí. Como unidos están en la Encarnación, en las bodas de Caná o en el Calvario; Madre e Hijo unidos entre sí y con nosotros cuando participamos de la Eucaristía, porque «vivir en la Eucaristía el memorial de la muerte de Cristo… significa tomar con nosotros –a ejemplo de Juan– a quien una vez nos fue entregada como Madre. Significa asumir, al mismo tiempo, el compromiso de conformarnos a Cristo, aprendiendo de su Madre y dejándonos acompañar por Ella» (n. 57).
El Descenso
El Papa nos pedía “dejarnos acompañar por Ella”, por la “mujer eucarística” que da gracias siempre, en cada momento de su vida entregada al Señor. Seguro que si pensamos y meditamos en estas palabras, los devotos de Nuestra Señora de la Capilla nos daremos cuenta de que caminamos en medio de los
92
avatares del calendario y del tiempo acompañados por ella. Así sucedió la Noche del Descenso, cuando aquella “dueña” nos acompañó para fortalecernos en medio de tribulaciones y desdichas; así sucede hoy, cuando la Virgen de la Capilla nos acompaña consolándonos en tiempos recios y ofreciéndonos y mostrándonos a su Hijo, la fuente de nuestra esperanza y de nuestra alegría. Y así sucederá mañana, cuando María nos acompañará y hará que nos sintamos cada vez más unidos al Hijo de sus entrañas. El día 11 de junio María nos acompañará en nuestro caminar por Jaén, y su procesión será como el signo de lo que ha sucedido, sucede y sucederá siempre aquí; y es que en medio de la vida cotidiana, de nuestras idas y venidas, de nuestros trabajos y dificultades, Ella está serena y a la vez radiante de alegría acompañándonos, sosteniéndonos y dándonos, como Madre de la Iglesia que es, la semilla de una nueva historia en la que habrá sólo amor y gozo y para la que todos en la Iglesia trabajamos y ejercemos la tarea que el Señor nos ha confiado. Quiera el Señor, que procesionará por nuestras calles el día 10 de junio, y su Madre Santísima, que lo hará al día siguiente, que seamos capaces de experimentar en nuestra vida cotidiana, en nuestra vida familiar, en la vida de esta Ilustre, Pontificia y Real Cofradía, en nuestra vida parroquial y en nuestra vida inserta en la Iglesia que camina por estas tierras de Jaén, que Él mismo camina con nosotros junto a su Madre y nos pide que vivamos en comunión y auténtica fraternidad.
SAN JUAN DE ÁVILA Y LA VIRGEN DE LA CAPILLA Francisco Juan Martínez Rojas. Deán de la S. I. Catedral
El pasado 20 de agosto, durante la Jornada Mundial de la Juventud, el Papa Benedicto XVI anunció en Madrid que en este año 2012 San Juan de Ávila sería reconocido oficialmente como Doctor de la Iglesia. La propuesta había partido de la Conferencia Episcopal Española, y tras completar el proceso exigido por la Santa Sede para otorgar ese título a un santo, falta sólo que sea señalada la fecha en que solemnemente el Apóstol de Andalucía se convierta en el trigésimo quinto Doctor de la Iglesia.
San Juan de Ávila (1499-1569)1 fue definido por el Papa que lo canonizó en 1970, Pablo VI, como un sacerdote, que bajo muchos aspectos podemos llamar moderno2. Esta aseveración encuentra una justificación
1 Entre la amplísima bibliografía sobre S. Juan de Ávila se pueden consultar como introducción a su biografía Q. ALDEA, Ávila, Juan de, en Diccionario de Historia Eclesiástica de España (Madrid 1972), vol. I, 162-164 (con abundante bibliografía); L. MUÑOZ, Vida y virtudes del venerable varón el Padre Maestro Juan de Ávila, predicador apostólico. Con algunos elogios de las virtudes de sus más principales discípulos (Madrid 1635), L. SALA BALUST – F. MARTÍN HERNÁNDEZ, Santo Maestro Juan de Ávila (Madrid-Roma 1970), y J. J. GALLEGO PALOMERO, Sacerdocio y oficio sacerdotal en San Juan de Ávila (Córdoba 1998) 319-327. 2 Citado por J. DEL RÍO, Santidad y pecado en la Iglesia. Hacia una eclesiología de San Juan de Ávila (Córdoba 1986) 257.
razonada cuando, leyendo sus numerosas obras3, se repasa la mariología del Apóstol de Andalucía, y se comprueba cómo ésta aparece íntimamente unida a la visión de Cristo y de la Iglesia que el Apóstol de Andalucía ofrece en sus escritos4. 3 L. SALA BALUST (ed.), Obras completas del Beato Juan de Ávila (Madrid 1952-1953), 2 vols. Cf. L. SALA BALUST – F. MARTÍN HERNÁNDEZ, Santo Maestro Juan de Ávila, 19*-47*; DEL RÍO, Santidad y pecado, 259-268, J. ESQUERDA BIFET, Doctrina teológica del Beato Maestro Juan de Ávila en tiempos de postconcilio, en Miscelánea Comillas 47-48 (1967) 95-128; ID., Diccionario de San Juan de Ávila (Burgos 1999); A. HUERGA, La vida cristiana en los siglos XV-XVI, en AA.VV., Historia de la Espiritualidad (Barcelona 1969), vol. II, 90-94. 4 Cf. DEL RÍO, Santidad y pecado, 163-166; J. ESQUERDA BIFET, Síntesis mariológica de los escritos de Juan de Ávila, en Ephemerides Mariologicae 11 (1961) 169-191; ID., Espiritualidad sacerdotal mariana en Juan de Ávila, en Estudios Marianos 35 (1970) 85-114; ID., La oración contemplativa en relación a la devoción mariana según el Maestro Juan de Ávila, en Anthologica An-
El Descenso
Es conocida la amplia labor de apostolado que Juan de Ávila y la escuela sacerdotal que él formó realizaron en la diócesis de Jaén, teniendo como epicentro la ciudad de Baeza. El Santo Maestro fomentó la vida eucarística en los fieles giennenses y la devoción a la Santísima Virgen, por lo que su próxima declaración como Doctor de la Iglesia constituye un momento privilegiado para recordar su rico magisterio, sobre todo en su vertiente mariana.
93
María es, según Ávila, el miembro singular de la Iglesia que mejor traduce y visibiliza la santidad de la Cabeza. Es la primera santa en Cristo, que, por su respuesta de santidad, es prototipo de toda santidad eclesial. Y esta principalidad de María se expresa fundamentalmente con los títulos de Madre Reina y figura de la Iglesia. De S. Agustín tomó Juan de Ávila la idea de María como la criatura que ha concebido a Cristo en la fe más perfecta, y así lo manifestó en repetidas ocasiones, concluyendo que la Virgen es más alta que nadie y cerca de Dios en bondad y alteza, y cerca de nosotros por misericordia5. La santidad de María, según el Santo Maestro, no se redujo a un momento determinado de su vida, sino que siempre fue santa, así en su santa Concepción como en toda su vida6. En cuanto a la santidad positiva, María es la cumbre de gracia y virtud que excede a cualquier criatura. Ella, en su fidelidad a Dios, es tan superior a los ángeles y a los santos, que es incomparable porque, mientras que en los santos se da la gracia por partes, mas a la Virgen se derrama toda la plenitud de la gracia divina […] mas ansí como fue llena de gracia y santidad, así fue también en esta vida muy lastimada con trabajos7.
El Descenso
Es notable la insistencia con que S. Juan de Ávila relaciona a la Virgen María con la Iglesia. María es la suprema realización de la santidad eclesial, y por eso él la llamaba la Santa de los santos. De ahí que según el pensamiento del Santo Maestro, la presencia de María en la comunidad eclesial sea siempre dinámica, ejemplar, silenciosa y fecunda8, haciendo que sus hijos, que aún se encuentran en este mundo en lucha con el pecado, descubran en ella el modelo más perfecto y acabado de virtud y santidad. Por esto María es un punto de referencia necesario de todo creyente, que para alcanzar su madurez plena
94
nua 24-25 (1977-78) 499-550; ID., Diccionario, 377-379, 590-601; T. HERRERO, La Inmaculada en el Beato Juan de Ávila, en Estudios Marianos 18 (1957) 371-380; R. JIMENO, La mariología estática en el Maestro Ávila (Granada 1955); A. MOLINA PRIETO, Presencia de María en el epistolario del Santo Maestro Juan de Ávila, en Estudios Marianos 36 (1972) 281-304; B. G. MONSEGU, Los textos mariológicos de la Escritura en las obras del maestro J. de Ávila, en Estudios Marianos 23 (1962) 327-356; N. PÉREZ, S.J., Historia mariana de España (Valladolid 1947), vol. II/2, 280-281. 5 Citado por DEL RÍO, Santidad y pecado, 164. 6 Ibíd. 7 Ibíd. 8 Cf. MOLINA, Presencia de María, 303.
como miembro de la Iglesia, debe contemplar el ideal al que aspira, plenamente realizado ya en María. Ése es el sentido que encierra la conocida expresión de S. Juan de Ávila: Más quisiera estar sin pellejo que sin devoción de María9. Es sobradamente conocido cómo Juan de Ávila estuvo directamente implicado en la puesta en marcha de la universidad de Baeza, y cómo imprimió al estudio general baezano un sello nítidamente pastoral, de modo que, antes de la creación de los seminarios tridentinos, ya el centro universitario beaciense tenía como fin primordial la formación sacerdotal, según la impronta cisneriana de la universidad de Alcalá de Henares. Baeza se convirtió en un intenso foco de espiritualidad, en perfecta sintonía con los postulados más genuinos de la reforma católica. Evangelismo y paulinismo se dieron la mano gracias a la figura de Juan de Ávila, que, durante su estancia baezana, no restringió su presencia a los asuntos meramente académicos, sino que desarrolló una amplia labor pastoral, entregándose a un fecundo apostolado por las tierras del Santo Reino, continuado posteriormente por el círculo de discípulos que en Baeza se reunió a la sombra de su rico magisterio, y que es conocido comúnmente como la escuela sacerdotal avilista10. Dentro de ese ámbito de clérigos influídos por San Juan de Ávila se puede incluir al Dr. Gaspar Salcedo de Aguirre11. Natural de Baeza, donde nació en 9 Sermón 63, citado por ESQUERDA, Espiritualidad sacerdotal mariana, 90. 10 J. ESQUERDA BIFET, Escuela sacerdotal española del siglo XVI: Juan de Ávila, en Anthologica Annua 17 (1969) 1-55; ID., Diccionario, 302-305, 351-360. 11 Sobre este interesante personaje a caballo entre el XVI y el XVII cf. los numerosos trabajos de su mejor conocedora, la Dra. Dña. María Dolores RINCÓN GONZÁLEZ, Aproximación al humanista Gaspar Salcedo de Aguirre (1545-1632), en Boletín del Instituto de Estudios Giennenses 188 (2004) 61-90; ID., Las idea pedagógicas de Gaspar Salcedo de Aguirre, en Iberoromania 61 (2005); ID., Criterios de selección en la Universidad de Baeza: Huarte de San Juan y los planteamientos avilistas: Quod natura non donat, Academia non praestat, enim vero labor omnia vincit improbus, en Elucidario 1 (2006) 135-146; ID., La literatura emblemática en la obra de Gaspar Salcedo de Aguirre, en D. CHICHARRO, Literatura Giennense en el olvido, Instituto de Estudios Giennenses, Jaén 2007, 173-216; ID., El género emblemático en Baeza: la obra del Dr. Gaspar Salcedo de Aguirre, en M. A. MORENO, Estudios de Humanismo Español. Baeza en los siglos XVI-XVII, Baeza 2007, 485618. La Dra. Rincón González está preparando en la actualidad la edición de tres obras de Salcedo de Aguirre: Allusiones Novi Testamenti ad Vetus, y Relación de algunas cosas insignes... y Des-
En el último tercio del s. XVI, Don Gaspar Salcedo de Aguirre se había manifestado ya como un consumado humanista, no sólo por haber ocupado una cátedra de teología en la universidad de Baeza con el aplauso general del alumnado, sino por haber cripción del Reino de Jaén. Cf. igualmente A. TARIFA – R. FRÍAS, Don Gaspar Salcedo de Aguirre, un clérigo giennense en la España de los Austrias. Noticias sobre su vida y sus escritos, en Boletín del Instituto de Estudios Giennenses 173 (1999) 195-223.
estampado algunas obras de notable interés. Buena prueba de ello es el mapa del Reino de Jaén, que realizó Salcedo siendo prior de Arjonilla, corriendo el dibujo a cargo de Juan Domenico de Villarroel, cosmógrafo real, y siendo cortado en Sevilla por Baptista Camillo. Este mapa se conserva en la actualidad en la Biblioteca Nacional de Madrid. En 1594 Salcedo dio prueba de su fecunda erudición en un curioso libro que vio la luz en las prensas baezanas de Juan Bautista de Montoya: Pliego de cartas en que ay doze epistolas dedicadas a personas de diferentes estados y officios12. Finalmente, en 1608 publicó en Jaén una obra más especializada, fruto de su actividad como docente de teología y afamado orador: Allusiones Novi Testamenti ad Vetus, estampadas por Fernando Díaz de Montoya13. Las Allusiones pretenden servir al predicador para facilitar un uso más provechoso de la Escritura, y ofrecen como dato curioso el texto de algunas importantes homilías que corrieron a cargo de Salcedo de Aguirre, como por ejemplo, la tenida en una fiesta de Sto. Tomás de Aquino en el estudio baezano, y el sermón fúnebre en las solemnes exequias de Felipe II, que predicó siendo prior de Arjonilla. Pero por su vinculación con la Virgen de la Capilla, la obra que atrae nuestra atención es la publi12 Se conserva un ejemplar de esta interesante obra en la Biblioteca Nacional de Madrid, signatura R – 2679. 13 Se conserva un ejemplar de esta obra en la Biblioteca del Seminario Diocesano de Jaén.
El Descenso
1545. Estudió en la universidad baezana, donde pudo conocer personalmente a Juan de Ávila y sus discípulos más directos: Bernardino de Carleval, Pedro de Ojeda y Diego Pérez de Valdivia. Como estudiante, Salcedo de Aguirre obtuvo el grado de doctor en Artes, en 1568 –un año antes de la muerte de Ávila-, y en Teología, en 1574. A lo largo de su formación en la universidad baezana, fue aprehendiendo el idearium avilista, donde la devoción mariana ocupaba un lugar fundamental en la vida de piedad, tal y como él reflejó posteriormente en sus obras. La carrera docente de Salcedo de Aguirre se inició ya en 1568 como catedrático de Artes y Filosofía, llegando a lograr la prestigiosa cátedra de Prima de Teología. Ahora bien, la culminación de su colaboración con esta universidad la alcanzó con la aceptación del cargo de Rector, en 1578, tras la marcha a Barcelona de Diego Pérez de Valdivia. Asimismo, fue sucesivamente párroco de la Magdalena de Jaén, Arjonilla y San Ildefonso, también de Jaén, donde recibió sepultura el 21 de enero de 1632.
95
cada en Baeza en 1614: Relación de algunas cosas insignes que tiene este Reyno, y Obispado de Jaén14. Como en la misma portada se especifica, las cosas insignes en las que se centra este pequeño volumen de 44 hojas son la venida de la Virgen a la iglesia de S. Ildefonso, de Jaén, la Santa Verónica, la Crucifijo de la Yedra y Nuestra Señora de la Cabeza, de Andújar. Pero el autor no se ciñe exclusivamente a estos cuatro núcleos, sino que amplía el contenido ofreciendo breves noticias sobre la cruz del puerto Muradal y Navas de Tolosa, la predicación de S. Vicente Ferrer en Baeza, en 1411, la universidad y escuelas de esta misma ciudad, y el nombre y antigüedad de Baeza. En la Relación de algunas cosas insignes, el Dr. Salcedo de Aguirre se revela como un humanista erudito que conoce con detenimiento las fuentes históricas giennenses de aquel tiempo, y con un lenguaje moderado y atrayente, extraña mezcla de estilo culto y popular a la vez, expone esa serie de realidades insignes de un singular modo que está a caballo entre el aséptico relato histórico y la narración hagiográfica y edificante.
El Descenso
La estrecha vinculación de Salcedo con la iglesia de S. Ildefonso de Jaén, de la que era párroco cuando publicó la obra en cuestión, se manifiesta en la epístola dedicatoria del epítome, que su autor dirige a Nuestra Señora de la Capilla de Santo Ilefonso. Tomando como punto de partida un texto del santo Arzobispo toledano, Salcedo de Aguirre se acoge filial y confiadamente a la intercesión de la Virgen para obtener el auxilio del Espíritu Santo y poder llevar a cabo dignamente una empresa tan alta como es describir los acontecimientos que recoge su libro:
96
Os suplico Señora mía, Reyna mía, Patrona mía […] que me concedays el espíritu de vuestro hijo, Redentor mío para sentir y escrevir cosas verdaderas dignas de vos, para gloria de vuestro hijo y vuestra, para consuelo de los fieles, y por la gracia que hallastes ante Dios, le halle yo ante vos para alcançar lo que os suplico; y porque tengo inflamados desseos de notificar al mundo este celestial fabor que hizistes a esta Iglesia de vuestro sapientísimo Dotor, os dedico y ofrezco esta obrita a vos Reyna de los Angeles, Emperatriz
14 Se conserva un ejemplar en la Biblioteca Nacional de Madrid, signatura R – 35428.
de los cielos: deseando que mi lengua y mi pluma merezcan emplearse en vuestro servicio15. El tratado primero lo dedica D. Gaspar Salcedo de Aguirre a describir el Descenso de la Virgen a la capilla de S. Ildefonso, acontecimiento ocurrido en la noche del 11 de junio de 1430. Para su relato, se sirve del proceso testifical que dos días después de aquel hecho sobrenatural levantó el provisor Villalpando. Por ello, la pretensión del autor de este libro no es ofrecer datos que resulten novedosos o descubrir aspectos del Descenso desconocidos hasta entonces. De cara al lector, su intención primordial es edificante, queriendo hacer caer en la cuenta a quien lee sus páginas de la singularidad de este favor con que la Virgen había distinguido a la ciudad de Jaén, y que por ello equiparaba a la parroquia de S. Ildefonso con otros famosos santuarios marianos, como los que Salcedo cita: el Pilar, Montserrat, el Puig, la Peña de Francia, Loreto, etc. La misma intencionalidad hagiográfica y edificante se prolonga en los tres tratados siguientes, que, como el primero, quedan ilustrados no sólo por un texto atrayente y colorista, sino también por unas xilografías, que sin duda enriquecen el valor bibliográfico de este pequeño libro. La Relación de algunas cosas insignes de D. Gaspar Salcedo de Aguirre, junto con el resto de su producción literaria, hace merecedor a su autor de un puesto de honor entre los escritores giennenses del Seiscientos. En el estudio del origen de la devoción a la Virgen de la Capilla, Salcedo de Aguirre será continuado por otras obras inmediatamente posteriores, como el Memorial del licenciado Becerra16, y el que fuera profesor de la universidad de Baeza y párroco de San Ildefonso se convierte en nexo de unión entre el fomento de la devoción a la Virgen que llevó a cabo San Juan de Ávila en la diócesis de Jaén y la principal devoción mariana de la capital del Santo Reino. Una vinculación, la de el Apóstol de Andalucía y la Virgen de la Capilla, que conviene recordar cuando la Iglesia se apresta a declarar Doctor al Santo Maestro Ávila. 15 Ibíd, s.p. 16 A. BECERRA, Memorial en que se hace relación de la descensión de la Virgen Santísima Nuestra Señora y de la milagrosa imagen de Nuestra Señora de la Capilla (Jaén 1639). En la Biblioteca Nacional de Madrid se conserva un ejemplar de este libro, con la signatura R – 2 62145.
Homilía de la misa de cabildos 2011 Mons. d. ramón del hoyo lópez, obispo de jaén
“Dichosa tú, Virgen María, que has creído, porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá.” (Lc 1, 45)
1. Desde la primera vez que la Providencia quiso que celebrara con ustedes esta Solemnidad de la Santísima Virgen de la Capilla, Patrona de la ciudad de Jaén, capté, como en otras celebraciones marianas, la profunda piedad del pueblo cristiano de estas tierras que ama a la Santísima Virgen y exterioriza sus emociones fuertes de fe. En esa atmósfera tan especial, pudimos contemplar hace pocas fechas vibrar a miles de personas por las calles de Jaén contemplando y acompañando “la cruz de los jóvenes cristianos del mundo”, vísperas de la JMJ, que se celebrará en Madrid. Esa misma atmósfera de fiesta se capta en estas fechas en honor de la Virgen María de la Capilla, año tras año. Alguien dirá que todo esto es sentimentalismo, pero tendríamos que decirle que nuestra sociedad se ha sumido en no pequeños sectores en una especie de indiferentismo a todo y por eso huye, quiere ocultar el sufrimiento, y es incapaz también de la verdadera y auténtica alegría. Tal represión del sentimiento lleva a la frialdad mental y al endurecimiento del corazón. Nosotros, por el contrario, celebramos con gozo y así lo exteriorizamos la alegría de esta Fiesta en honor de nuestra Madre del Cielo. 2. Cuando el pasado día 14 de noviembre el Emmo. y Rvdmo. Mons. Antonio Cañizares Llovera,
Prefecto de la Congregación para el Culto Divino, declaraba este insigne templo de San Ildefonso como Basílica Menor, siempre se tuvo muy presente, al preparar la documentación oportuna para solicitar de la Santa Sede este título, sobre todo los frutos espirituales que se derivarían de esta concesión. Queríamos que esta gracia fuera un acto de reconocimiento a un largo recorrido histórico de este lugar de culto, unido a la piadosa y venerable tradición del Descenso glorioso de la Madre de Dios a la ciudad de Jaén, en la noche del 10 al 11 de junio de 1430. Estábamos seguros de que el título pontificio de Basílica Menor afianzaría e incrementaría la devoción del pueblo cristiano de Jaén a la Patrona principal de la ciudad, como la declaró el Papa Pío XII en el año 1950, y que, desde esta Basílica – Santuario, no cesaría de interceder por nosotros y llenarnos de bendiciones divinas bajo la forma de indulgencias especiales. El Sello pontificio de las “llaves cruzadas” que puede usar este templo desde esta declaración en su logotipo oficial, ajuar litúrgico, ornamentos, banderas o estandartes, es también motivo y razón para estrechar la comunión pastoral con nuestro Santo Padre el Papa y orar diariamente por sus intenciones. 3. Santa Isabel, en la escena evangélica proclamada de la Visitación de Nuestra Señora, denomina
El Descenso
Hermanos y hermanas en el Señor.
97
a la Santísima Virgen “Bienaventurada la que ha creído”. Destacar hoy el valor y la riqueza de la fe en nuestra vida tiene mucha importancia. Hasta no hace mucho tiempo, en nuestra cultura y ambientes podíamos decir que se crecía como creyentes. La fe formaba parte de la vida y sólo era necesario profundizarla y plasmarla en la vida. En estos tiempos y en estos ambientes resulta frecuente lo contrario para muchas personas. El hecho de Dios está ausente en su vida y se pretende presentar la fe de la Iglesia como un pasado superado. A lo más, sería suficiente cumplir los deberes para con Dios mediante el compromiso en favor de los demás. Ese sería su alcance y contenido. Pero la fe, como lo era en la Santísima Virgen, es sobre todo fiarse de Dios, invocarle, esperar en su constante providencia por nosotros. Esta centralidad de Dios en nuestra vida es luego lo que se trasluce en nuestro pensamiento y en nuestras obras. Es esa fuerza interior la que después anima nuestros pasos, sin degenerar en un activismo vacío “del hacer por hacer”, sino para cumplir la voluntad de Dios, para manifestarla con palabras y obras ante los demás. La fe, por tanto, mira siempre a Dios y nos impulsa a vivir en sus manos. En un cristiano -y ejemplo tenemos en María, nuestra Madre- la fe debe ser centro de nuestra existencia. “Tu fe te ha salvado”, decía con frecuencia el Señor a los que curaba. No se curaban aquellos enfermos porque fueran tocados físicamente por Cristo, sino porque creían en Él.
El Descenso
4. Aumenta nuestra fe, Señor, le pedimos en esta Fiesta por intercesión de nuestra Madre, Santísima Virgen de la Capilla.
98
Queridos hermanos: Cristo está siempre con nosotros y camina siempre con su Iglesia, la acompaña y la protege. “Yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.” (Mt 28, 20). Nunca dudemos de su presencia. Busquemos cada día al Señor Jesús, por medio de nuestra Madre Santísima, para crecer en la fe, esperanza y caridad, que es crecer en su amistad. Aprendamos a escuchar y conocer su Palabra y a reconocerlo en los pobres y en quienes nos necesiten y convivan o trabajen con nosotros. Vivamos nuestra existencia con alegría y entusiasmo, seguros de su presencia y amistad gratuita, generosa y fiel hasta su muerte en Cruz. Demos también testimonio a todos de la alegría por su presencia. Digámosles con hechos y, si es preciso, con palabras, que merece la pena seguir a Jesucristo y su Evangelio. Su presencia no está a dos mil años de distancia, sino que está realmente entre nosotros. Pone en nuestras manos la verdad, nos proporciona la luz que ilumina nuestras vidas y nos ayuda a encontrar el camino hacia nuestro futuro. Está presente y operante, superando la distancia de los siglos vivo y resucitado. Se nos manifiesta una y otra vez, sobre todo, en su Palabra, al partir el pan de la Eucaristía y en el rostro de nuestros hermanos. 5. Repetimos en su presencia las palabras que hemos escuchado de San Pablo a los Efesios (Ef 1, 3-6): “Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en la persona de Cristo, con toda clase de bienes espirituales y temporales... Él nos eligió en la persona de Cristo...” Busquemos cada día la protección de María, Madre del Señor, para que cuide y aumente nuestra fe, para que nos ayude a ser fieles testigos y discípulos de su Hijo Jesucristo. Feliz fiesta.
Pregón en honor a Nuestra Señora la Santísima Virgen de la Capilla, Patrona y Alcaldesa Mayor de la Ciudad de Jaén Antonio Garrido Gámez. Periodista. Jaén a, 29 de mayo de 2011
Es la plegaria más conocida y repetida, que nos legó Vicente Montuno, uno de los escogidos en el amor a María Santísima en su advocación de la Capilla y que tanto hizo por transmitir su devoción desde su labor periodística llamando siempre al amor de los jienenses. Gracias a gente como él ha llegado hasta nuestros días con esta fuerza y como un gran activo, cada vez con más entusiasmo, la transmisión de un sentimiento que nos sobrecoge de alegría. Recordamos esta jaculatoria cada día a la hora del Ángelus y está metida en el fondo de nuestro corazón y forma parte de nuestro devocionario. Ojalá que esto sea así por muchos años, porque será el mejor síntoma de que se ha grabado en el alma del pueblo de Jaén, como todo lo bueno y todo lo grande que encierra nuestra ciudad. Sr. Hermano Mayor y Junta de Gobierno de la Ilustre, Pontificia y Real Cofradía de Nuestra Señora de la Capilla, Patrona y Alcaldesa Mayor de la Ciudad de Jaén. Cofrades todos. Señoras y señores, amigas y amigos.
Quiero dedicar este modesto pregón a los que me han precedido en este título de pregonero que ejerzo con humildad y entusiasmo, porque todos ellos antes que yo exaltaron a una de las grandes verdades de esta ciudad, que es nuestra Patrona, y quiero dedicarlo a personas que para mi fueron entrañables como Lorenzo Molina, Fernando Arévalo o Isidoro Lara, a quienes me unía una gran amistad; y lo hago extensivo a todos los cofrades jienenses que ya no están con nosotros y que amaron profundamente a su Patrona, y a todos cuantos en el momento actual sienten y viven con fe la devoción a la Virgen de la Capilla. Agradezco de corazón las palabras pronunciadas por mi presentador y anterior pregonero, Aniceto Eduardo López Aranda, por la cordialidad que han transmitido. Conservo en la memoria, seguro que como la mayoría de ustedes, recuerdos entrañables no sólo de las fiestas que estamos en disposición de conmemorar, sino de sus vísperas, este mes de mayo mariano por excelencia, el mes de las flores más bonitas para colocarlas a los pies de nuestras vírgenes, el mes de las plegarias, el mes del “venid y vamos todos con flores a María, con flores a porfía, que Madre nuestra es” y de tantas y tantas canciones dedicadas a la Virgen. El mes en el que se produce el intenso peregrinar de gentes hacia la que hoy es, a Dios gracias, Basílica Menor de San Ildefonso, como nuestra segunda Catedral, el santuario de Nuestra Patrona, para participar de los cultos y honrar a la Patrona, e
El Descenso
Bendita sea la hora en que María Santísima descendió del Cielo a la Ciudad de Jaén para socorrer a nuestros mayores. Por siempre sea bendita y alabada. Virgen Santísima de la Capilla. Rogad por nosotros
99
ir preparando los corazones para una de las citas más entrañables y queridas de Jaén.
El Descenso
Mis únicos méritos para ocupar en la mañana de hoy esta tribuna son mi condición de jienense militante, convencido de que tenemos muchos motivos para el orgullo, y desde luego los sentimientos hacia la Patrona a la que he visitado cientos de veces en su Santuario de San Ildefonso, la he acompañado en sus salidas procesionales, como miles de jienenses he acudido muchas tardes de sábado a cantar la preciosa Salve popular en ese ambiente enfervorizado que tenemos el deber de conservar como una de las expresiones de nuestra religiosidad y de la comunión con nuestra Madre con mayúsculas. Vengo pues como uno más de los cientos de jienenses que en estos días se van a acercar a Ella con el corazón abierto, implorando su bendición.
100
blemente con ese templo de San Ildefonso para no saber por las referencias de otros, sino por la propia, lo que se siente estando en la sintonía de la Virgen de la Capilla y en la misma onda de emoción con una multitud que la busca desesperada. Por eso le cantamos cada sábado la Salve del maestro Cándido Milagro, tan repetida, tan profunda, y tan nuestra. La letra de una canción muy andaluza dice así: Me gustan las romerías las ermitas de mi pueblo las vírgenes bajo palio y los cristos nazarenos. Yo soy así, y tienes que comprender, que mis costumbres son esas y no las puedo perder.
Menuda responsabilidad tratar de hacer una aportación que no caiga en los tópicos y que traslade lo que tiene que ser cualquier pregón que se precie, una llamada a los corazones de los jienenses para vivir con plenitud la cita anual con las fiestas en las que la ciudad conmemora nada menos que un acontecimiento que cambió los signos de la historia. No sabemos lo que hubiera ocurrido si aquella memorable noche del 10 al 11 de junio de 1430, ya va para seis siglos, no se produce el glorioso y milagroso Descenso a la ciudad y que ha dado vida durante mucho tiempo y esperemos que tenga mucho futuro, a algo tan grande para el patrimonio de los jienenses como es su historia mariana.
Éste al que alude la letra de la canción es el mensaje que quiero que presida mis primeras palabras ante las fiestas que pregonamos de la Virgen de la Capilla. Se trata de una idea clara y precisa de la defensa a ultranza de nuestra identidad como pueblo. No quiero abrumaros con datos históricos, que para eso están los expertos que los hay y muy buenos, lo que sí quiero es proclamar a los cuatro vientos que todos los jienenses, pero en especial los que están llamados a alguna responsabilidad pública, tienen y tenemos que defender los valores, las tradiciones y el patrimonio que heredamos de nuestros antepasados y que al mismo tiempo nosotros tenemos que devolver también como legado a las futuras generaciones.
Pues de todo esto tan hermoso somos herederos y es el primer mensaje que considero importante para transmitir, el de que estremece sólo pensar en una ruptura. Por eso me alegra que la fiesta goce de buena salud, que es tanto como decir que la fe del pueblo crece a medida que otras ilusiones se derrumban. Que en la Basílica Menor de San Ildefonso, su santuario, no hay nada material que nos atraiga, porque lo material se acaba. Y sin embargo lo que allí existe es un alimento espiritual dispuesto a hacernos más llevadero este valle de lágrimas a nosotros, aunque tantas veces seamos traidores de lo que ello representa. Hay muchas cosas que nos unen entraña-
Para mi en esta mañana, los signos, el corazón de nuestra identidad, la bandera que hemos de enarbolar, es la de una trilogía compuesta por el pueblo de Jaén propiamente dicho, sus tradiciones y como culmen el Patronazgo sobre esta entrañable y querida ciudad de María Santísima de la Capilla. Y tenemos el deber de transmitir esta herencia. Como se hizo en tiempos pasados, porque por eso hemos llegado a 2011 con este magnífico estado de salud de la Cofradía por un lado y la devoción a la Virgen de la Capilla, por otro. No podemos pararnos. Estos días, cuando preparaba este pregón, he vuelto a leer viejas estampas, cómo jienenses de to-
EL PUEBLO DE JAÉN. Es el centro de nuestra atención y sin él nada tendría sentido, ni siquiera esta efeméride tan especial que estamos exaltando con el mayor gozo. Nuestro pueblo no es ni más ni menos que otros, pero tiene la singularidad de que es el nuestro y por eso nos parece el mejor, y por ello tenemos la responsabilidad de que en verdad lo sea no sólo bajo nuestra mirada sino para la óptica de los demás. Todos nos enorgullecemos cuando se valoran los grandes activos de Jaén, su impresionante Catedral que deseo fervientemente que sea declarada Patrimonio de la Humanidad, su Castillo, sus Baños Árabes, y en general todos y cada uno de los signos que nos recuerdan historia y leyenda para nuestra satisfacción. Somos muchos los que no seríamos capaces de respirar fuera de este ámbito, y es enorme lo que admiramos a esta Muy Noble y Muy Leal Ciudad de Jaén, Guarda y Defendimiento de los Reinos de Castillo, como la consideró el Rey Enrique IV, en 1833, justificado la concesión de tan sonados títulos en “la mucha lealtad y fidelidad que siempre en vosotros he hallado y para honrar y sublimar porque de la dicha lealtad siempre queda memoria”. Y ya lo creo que queda. Es muy importante para nosotros, que Jaén sea una ciudad de presente y de futuro. Porque los pueblos no pueden vivir, ni siquiera pretenderlo, sólo de sus glorias pasadas y las sociedades con sentido de la verdadera medida han de mirar al futuro. Necesitamos un pueblo con el porvenir resuelto y que sea garantía de menos angustia por problemas tan dolorosos y dramáticos como el paro, de más armonía, de una mejor convivencia, de un alto nivel de
satisfacción de las necesidades básicas de los vecinos como son trabajo, salario digno y vivienda. Un pueblo que sea un referente para la juventud de trabajo y diversión. Esta ciudad, les confieso, siempre me ha cautivado. Ya saben que no nací en Jaén, pero igualmente conocen todos que se es también de donde se ama, de donde se sueña, de donde se sirve y de donde uno tiene acumuladas tantas vivencias. He tenido la oportunidad de irme varias veces de Jaén y ha podido más mi apego a esta ciudad, es más, estoy convencido de no haberme equivocado. Porque Jaén es para mi un paraíso, una ciudad privilegiada de la historia y de la tradición, de la vida en definitiva. Y me cautiva por ser como es, por parecer tan señora y tan dueña de sí misma. Jaén, único y vario, con sus múltiples funciones de ciudad, con todo lo que el tiempo ha ido mezclando en torno a ella. Muchos escritores han derramados hermosas frases sobre Jaén y la han llenado de piropos que cualquiera que la ame y se haya enamorado de ella puede compartir. Una reflexión silenciosa de Ortega Sagrista o de su mejor discípulo, Manuel López Pérez, amantes de su Virgen de la Capilla, puede revelarnos el carácter de Jaén, como lo está en sus deliciosos libros y artículos, de la misma manera que un texto de Juan Eslava o de Vicente Oya, por no hacer la relación interminable, proyectan de distintos modos a este pueblo nuestro, o con los versos del Canto a Jaén de Federico de Mendizábal con las vibrantes y reconocidísimas notas del maestro Cebrián se desnuda el alma grande de Jaén, lo mismo que con el himno de Nuestro Padre Jesús porque universalizan el corazón y el sentimiento de los jienenses. Tenemos mucho que cuidar y proteger. Hay un viejo dicho que nació en el Islam y que decía: “Habla de muchas ciudades, pero vive en Jaén”. No necesita mayor comentario. Estamos en una capital en donde la suma de su historia compendia muchos acontecimientos y al tiempo que el discurrir de una ciudad es la suma de muchas vivencias, sueños, ilusiones y frustraciones. Esto no debemos perderlo de vista
El Descenso
dos los tiempos se dedicaron en cuerpo y alma a mimar este patrimonio religioso de la ciudad, como ocurrió con la celebración y desde mucho antes los preparativos del V Centenario, que tanto trabajo dio a la junta presidida por la Marquesa del Rincón de San Ildefonso, y al mismo tiempo la coronación, que igualmente fue un hito en la historia mariana de esta capital del antiguo Santo Reino. Esos acontecimientos se utilizaron para transmitir a los vecinos de una manera muy popular, las historias y leyendas que nos atan tan agradablemente a una de nuestras más emotivas tradiciones.
101
nunca para que sea eje de las actuaciones de quienes vivimos en ella, la queremos y propugnamos lo mejor. Para Jaén siempre lo mejor, lo más grande y lo más digno. Entre otras razones por una de egoísmo cívico: las personas pasamos, los cargos públicos pasan, las juntas de gobierno pasan…la ciudad permanece con sus signos indelebles y hemos de cuidar de ella en todos los tiempos. Pues bien, en orden a las rémoras, parece que esta ciudad que tanto se ha merecido, siempre ha estado esperando, que un cierto carácter que se le ha atribuido también históricamente, de resignación y de apatía, ha jugado en su contra, razón por la que hay que luchar por las asignaturas pendientes y por evitar en el futuro los complejos de inferioridad. Ahora da la impresión de que estamos en una racha de reconocimiento de la autoestima que nos parece positiva, sobre todo porque va inseparablemente unido a un indiscutible empuje cultural, y al crecimiento de expectativas como ha propiciado nuestra Universidad, uno de los mayores logros de toda la historia de esta tierra olvidada que tantos sueños quitó pero a la que tanto se le sigue debiendo para que Jaén esté en definitiva en el escaparate y no en la trastienda como en su día la situó, en una acertada interpretación, el que fuera mi profesor, amigo y maestro, el escritor ubetense Juan Pasquau.
El Descenso
Recordando el Plateado Jaén de Manuel Machado, el bueno de Pasquau nos equiparaba precisamente con ese metal que es la plata, un metal de gran valor pero, claro, menos vistoso que el oro y sus superiores en categoría. Hoy podemos y debemos decir a voz en grito, Plateado Jaén, pero plata de ley de Jaén, oro auténtico que representa una riqueza no para esconder en el arca, como el buen paño en tiempos pasados, sino para vender y enseñar en una sociedad cada vez más exigente y ávida de descubrir lo desconocido, como los grandes secretos, la riqueza y la belleza de este pueblo.
102
No nos extrañará por ello que en el futuro se encuentren motivos para llegar y quedarse. Y desde luego es un privilegio nacer en ella como dice la bella sentencia: “Para nacer y nacer bien, ¿hay una cuan más grande que un olivo de Jaén?
Todas las culturas han dejado la impronta de su afirmación jaenera, desde el origen de la ciudad hasta nuestros días. Desde el moro Alí que se recreó en la construcción de sus baños y se dice que vivió en Jaén quieta y pacíficamente, hasta el propio Condestable Lucas de Iranzo. No menos repetidos son los dichos de que a Jaén se entra llorando y se sale llorando, que encierra una verdad confirmada en todos los tiempos, en la que se recoge, a la vez, el irritante desconocimiento que se tiene de Jaén que acaba en admiración cuando se le conoce y el sugestivo encanto que ejerce esta tierra. Este sentimiento, donde más bellamente lo he visto expresado es en la despedida de esta nuestra ciudad de un predicador musulmán: “Te digo adiós, mi Jaén; te digo adiós y derramo mis lágrimas como se dispersan las perlas, y yo no quiero separarme de ti. Pero es la sentencia de los tiempos”. Aunque permitan que les diga que para mí lo más importante en el ámbito de la ciudad en el que ahora estamos, en pleno siglo XXI, es que Jaén sea siempre Jaén. En un tiempo de cambios y de transformaciones, en el que otros lugares imponen o tratan de imponer sus modas, sus conductas, esta capital han de hacer un necesario esfuerzo para que lo nuestro brille siempre con su luz, de manera que tengamos motivos para poderlo expresar. Y estemos unidos cuando llega el momento de decir “Viva Jaén”, que es señal de que esta ciudad nos importa, nos duele y nos entusiasma a la vez. Y que somos sanamente ambiciosos. Recordemos el viejo cantar que se cree procedente del siglo XV cuando los más optimistas, la otra cara de este Jaén a veces tan indiferente, repetían: “Tres cosas tiene Jaén que no las tiene Sevilla: Santo Rostro, Cruz de Jaspe y Virgen de la Capilla”. Amigas y amigos, si no hubiera tratado de explorar en el corazón y en el alma de Jaén, y abrir el mío, sería indigno pregonero de lo más sublime que tenemos en Jaén. La ciudad y su gente son con otros muchos, un argumento de peso que llevo en el corazón y en la razón y me hacen sentir cada día más orgulloso de esta tierra. Esta ciudad, en definitiva, es un haz de atractivas sugerencias. ¿Quién no se ha emocionado alguna vez con las notas del himno a Jaén? En esa entrañable pieza está recogida la
impronta de esta bella ciudad de luz, gentil sultana favorita del amor…
dice la canción: “Y tienes que comprender, que mis costumbres son esas y no las voy a perder”.
En fin, la palabra se tiene que transformar en heraldo de ilusión y de esperanza ante una celebración inminente. De ilusión ya anunciada por el ambiente profundamente mariano de esta estación primaveral, esta estación al propio tiempo tan jienense, a pesar de las alergias, que se traduce en optimismo, y en ganas de divertirse al estilo de Jaén.
Quiero destacar a modo de ejemplo, y podría poner algunos más, la labor de instituciones culturales como la Asociación Lola Torres, cuya única razón de ser, no hay otra, es mantener vivas las tradiciones más queridas por el pueblo de Jaén, y lo demuestra ahora en la Virgen de la Capilla y en muchos momentos a lo largo del año en que se moviliza para preservar que los grandes tesoros de esta ciudad estén bien guardados en nuestra memoria.
Sé que hay mucha gente que guarda y cuida en los mejores cofres del corazón, primero, y del día a día, después, el rosario de nuestras ricas tradiciones, que deberemos no sólo tener como oro en paño, sino que debemos informar de ellas, enseñándole sus secretos, a nuestras nuevas generaciones de jienenses. Me refiero a todas y cada una de las fechas del almanaque que están en rojo para la consideración popular de nuestro vecindario, todas las celebraciones que lo fueron o lo son en el ámbito religioso, social o de cualquier otra índole. Y hay mucho que guardar porque es mucho el legado de siglos, es mucho el acopio que hemos ido haciendo y que constituye un incontestable argumento para nuestra autoestima. La apuesta por la tradición tiene que ser seria, participativa, y ha de estar liderada, que no dirigida, por nuestras principales instituciones. Sin la tradición, el tesoro más hermoso de los pueblos, se corre un serio peligro. Por eso este Jaén nuestro que la tiene y la conserva como una de las mejores expresiones de nuestros ancestros, debe luchar por colocarla entre sus prioridades, en un lugar de privilegio. Lo
LA VIRGEN DE LA CAPILLA. Y ahora llego al tercero y principal de los argumentos de la trilogía a la que hacía referencia al principio. Y esta es mi declaración solemne. Me gusta, os lo confieso, el colorido de las fervorosas expresiones marianas que alegran nuestra primavera andaluza y sobre todo jienense, me gustan nuestras vírgenes, una sola en sus diferentes y enriquecidas advocaciones de las que se regocija la religiosidad popular bien entendida, tan rica y tan positiva como muestra de nuestro compromiso con la fe; y me gusta sobremanera la Virgen de la Capilla, que es lo más sagrado, es la imagen que mis ojos ven con frecuencia y es también uno de los grandes signos de unión para los jienenses, que a veces perdemos el tiempo discrepando de tantas cosas cuando hay realidades tan trascendentes con las que tenemos plena comunión. El imán de nuestra devoción es por tanto esa imagen de expresión bellísima con su Hijo en brazos, que ha sido siempre, desde antiguo, el testimonio de lo que dice la Salve popular: vida, dulzura y esperanza nuestra. En la Virgen de la Capilla hemos depositado alguna vez todos, sin excepción, nuestras plegarias, las peticiones ante hechos desgraciados, o le hemos confiado nuestras alegrías, porque así es la vida…Me gustan la Virgen y su fiesta, todo lo que la rodea, porque a veces los detalles más sencillos colaboran enormemente a hacerla grande. La fiesta lo es para Jaén desde que meses antes, en realidad durante todo el año, la Cofradía se moviliza, preparan sus cultos, realizan sus actividades religiosas y sociales, programan sus publicaciones y
El Descenso
LAS TRADICIONES. Otrosí digo. Entronizado el pueblo de Jaén en el sitio de honor que le corresponde, pues sin este pueblo no podríamos estar exaltando la conmemoración que nos reúne en esta mañana de domingo, en él deben tener un lugar destacado las tradiciones y las costumbres, sin las cuales un pueblo deja de serlo. Si no hay una trayectoria, si no somos capaces de rescatar el pasado para sacarle provecho, si no nos apegamos a esos signos que nos definen y representan, estamos haciéndonos un flaco favor y renunciando a lo más sobresaliente que una comunidad puede exhibir.
103
cuidan la devoción y los símbolos, que son igualmente importantes. Y hacen que la Virgen luzca en todo su esplendor tanto en el templo como en sus salidas procesionales, y esto inunda de ternura nuestra mirada de jienenses enamorados del misterio que encarna. Hay mucha gente a la que nos gusta creer, asirnos a todo lo que sea luz frente a tanta tiniebla. Esta devoción cuando es sincera y limpia se exterioriza de modo alegre y espontáneo y el estallido festivo es una expresión natural. Y para eso sirve de foco la Virgen de la Capilla a la que tanto ama este pueblo que durante siglos ha sabido recoger, mimar, y cuidar lo más hermoso de su patrimonio. Pues yo os digo, conservadlo como lo más valioso, lo más querido. Sé que no corre ningún peligro, pero hay que hacer una afirmación categórica a nuestras propias raíces en todos los órdenes de nuestra condición de jienenses.
El Descenso
Es una forma de dar respuesta al privilegio otorgado por la Virgen de la Capilla y una manera de decir un sí rotundo al reconocimiento de nuestras propias raíces. Porque estamos rememorando el prodigio de la veneración de una imagen durante siglos, en el viejo templo del arrabal de San Ildefonso, porque la Reina de los Ángeles nos quiso regalar para la eternidad su glorioso descenso. Y esta ciudad no ha olvidado ni podrá olvidar nunca que en horas difíciles para Jaén fue precisamente la Divina Señora la que disipó las sombras con su luz y nos alumbró para siempre.
104
Todo es hermoso en esta cita anual de mayo y junio, cada elemento juega su papel y en la conjunción está el éxito, la brillantez. Para muchas personas que están más directamente implicadas, la fiesta dura todo un año, en sus corazones y en la mente que la sueña, porque es el culmen de una intensa tarea. Si no fuera así difícilmente podría llegar este momento en el que todo está listo para que Ella, nuestra protagonista, luzca como se merece. Nada de improvisaciones, no se miran esfuerzos, porque cualquier cosa que se mire tiene una extraordinaria pequeñez comparada con el gran objetivo que es honrarla y venerarla como se merece. He dicho que me gusta la fiesta y todo lo que la rodea:
Ahí situaría la figura de la Junta de Gobierno y del hermano mayor de la Cofradía, José Humberto Montero Fernández, que tienen el legítimo orgullo de la cercanía con la Virgen y han de encargarse, menuda responsabilidad la suya, de que la tradición vaya a más y me consta que lo hacen por amor. Les felicito por haber promovido que la bellísima talla de nuestra Patrona se restaurara en el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico, gracias a la colaboración de Junta y Ayuntamiento, y haya quedado de nuevo en condiciones tan óptimas, que es muy importante porque tenemos el deber de velar por este patrimonio tan importante y de tan altísimo valor, sobre todo religioso y sentimental; felicitación que amplío asimismo por sus iniciativas sociales de ayuda a colectivos desfavorecidos, ya sea la obra de un colegio en la India o de un orfanato en la República del Congo, para dar sentido a su fe y dar respuesta y testimonio ante problemas graves por los que merece la pena apostar. La Virgen de la Capilla les premiará sus desvelos. Hay gente joven y muy comprometida, que es buen síntoma de cara al futuro, porque si es importante la devoción mariana y todas sus expresiones de las que nos sentimos tan satisfechos, gran parte de esta realidad no sería posible sin el motor de una Cofradía pujante, tirando del carro, con iniciativa y tratando de colocar este signo de la identidad jienense en el lugar que le corresponde. Por supuesto no me puedo olvidar de todo el entorno cofrade, de la Academia Bibliográfica Mariana Virgen de la Capilla y la Casa Museo, depositarias de un riquísimo legado cultural que lo más importante es que sea transmitido a las generaciones venideras como ha ocurrido hasta ahora. Ese es un gran tesoro que legitima documentalmente todas las vivencias marianas que Jaén ha acumulado durante siglos. No me puedo ni me quiero olvidar de las camareras de la Virgen, por su entusiasmo, su entrega generosa, la enorme responsabilidad y sensibilidad que contraen para presentarnos a nuestra Virgen de la Capilla con sus mejores galas, cuidando y mimando sus mantos y enseres, muchos de ellos ofrendados por el pueblo a lo largo de los años, y sobre todo, mi
Quiero tener unas palabras de agradecimiento de manera especial a monseñor don Manuel Bueno, prelado de honor de Su Santidad, párroco de San Ildefonso y capellán de la Patrona, su venerable y celoso guardián durante muchos años, como antes lo hicieron otros sacerdotes. En el caso de don Manuel, con el resto del clero parroquial y directos colaboradores de la Parroquia, por la especial dedicación al culto a la Virgen de la Capilla, y que merece por ello nuestro afecto y reconocimiento especial. Un recuerdo lleno de admiración para todos los predicadores de la novena de la Virgen, porque han contribuido y contribuyen a aumentar en los fieles las claves de una religiosidad profunda. El Cabildo Catedralicio y la Corporación Municipal, que históricamente han hecho honor al papel que la historia les ha otorgado, y que han asumido en nombre de lo que representan, que tiene su concreción en la fiesta de los Cabildos de la mañana de cada once de junio, cuando la hoy Basílica Menor de San Ildefonso honra a Nuestra Señora de la Capilla. Me van a permitir puesto que después habrá un concierto del Orfeón Santo Reino bajo la dirección de mi admirado Pedro Jiménez Cavallé, que haga un encendido elogio de la música coral dedicada a la Patrona en composiciones como el Himno a la Virgen de la Capilla (Gozos), de José María Balart; la Salve Popular de Cándido Milagro García; el Himno a la Virgen de la Capilla, de Arciniega; Cortejo Blanco, del recordado maestro José Sapena Matarredona; el canto a la Virgen de la Capilla, de mi querido don Guillermo Álamo Berzosa; la Alabanza a la Virgen de la Capilla, de Damián Martínez Linde, o Capilla Tú, de Jiménez Cavallé con una preciosa letra de Concep-
ción Agustino. Algunas de estas composiciones han sido instrumentadas para Banda de Música y todas grabadas por el Orfeón Santo Reino-CajaSur. No me quiero olvidar de la marcha de procesión Ofrenda a la Virgen de la Capilla, de la que es autor mi estimado amigo Francisco Avilés Gil. El Orfeón Santo Reino es una institución muy jienense que está próxima a cumplir sesenta años de vida y que en su día fue impulsada por la Agrupación de Cofradías y el maestro Sapena, y al que tanto debe la música en esta ciudad, y en especial la música religiosa. También una alusión especial a un trabajo entrañable que admiro en todo su valor, que lo tiene y mucho, se trata de las cartas del cofrade Ernesto Medina Cruz cada 11 de mes, desde hace muchísimos años, que se publican en el diario Jaén y que constituyen un testimonio cofrade verdaderamente singular y una expresión de creyente y devoto, verdadero ejemplo y testimonio de que la devoción mariana se expresa colectiva y personalmente con estos gestos tan expresivos y generosos. Y qué decir del barrio de San Ildefonso, que se hace altar permanente y donde como he dicho en la revista El Descenso, sin este barrio nada sería lo que es. San Ildefonso, que es un barrio de todo Jaén como la Patrona, tiene esa singularidad, le da un valor añadido a las fiestas, y es un espléndido escenario, el mejor, para que en él viva la Virgen de la Capilla y por él se pasee cada vez que sale en procesión por sus calles. Este barrio tan singular, foco de atracción para todo Jaén, sobre todo con motivo de grandes conmemoraciones como lo es esta cita de junio, demuestra lo que es, un lugar abierto y hospitalario, que ha sido a lo largo de la historia, centro de la religiosidad popular, especialmente porque tiene en él a una vecina predilecta y porque en el templo están erigidas canónicamente varias hermandades jienenses de pasión y de gloria. Pero sobre todo San Ildefonso ha sido testigo a lo largo del tiempo del propio discurrir de la fiesta, de las muchas iniciativas que se llevaron a cabo por parte de las juntas de gobierno de la Cofradía de
El Descenso
felicitación más sentida a estas camareras porque son garantes de nuestro patrimonio mariano y por proximidad les pueden pedir casi al oído en su nombre y en el nombre de todos nosotros también, como así se lo pedimos confiadamente. A las camareras por todo lo dicho y por muchas razones más, muchísimas gracias. Y gracias también al vestidor de la Virgen, otra figura íntima, que me consta que le pone todos los sentidos a tan alto honor y responsabilidad.
105
Nuestra Señora de la Capilla o los respectivos ayuntamientos, siempre con el deseo de buscar el mayor realce para esta cita de junio, como lo fueron en su tiempo las célebres y alegres verbenas que alegraban esta zona, que llegaron a ser verdaderamente populares y marcaban la vida de la ciudad cada primavera, y que han desembocado en la fiesta de hoy en sus calles. Han cambiado las formas, pero los jienenses aprovechan la cita del calendario para divertirse, porque la devoción no está reñida con la sana alegría y la convivencia entre jienenses. En cuanto a la parroquia fue erigida en 1.248 en el Arrabal de San Ildefonso, y tras el descenso de la Virgen adquirió un mayor protagonismo. Está muy relacionado con la Catedral ya que en él se encuentra enterrado el arquitecto Andrés de Vandelvira, el artista artífice del Renacimiento, protagonista indiscutible de esta obra cumbre de nuestra capital. Este templo es hoy uno de los grandes centros de la religiosidad jienense.
El Descenso
Por cierto, en general es que hay una relación estrecha entre la Virgen de la Capilla y la Catedral. Aún está reciente la presencia de la Patrona con motivo del 350 aniversario de la consagración del templo, el 60 aniversario de su proclamación como Patrona Principal y el 80 aniversario de su coronación canónica, pero como nos recuerda el director de la Academia Bibliográfica Mariana Virgen de la Capilla, Manuel López Pérez, en el anterior número de la revista El Descenso, en realidad desde el siglo XVII ha sido frecuente la visita de la imagen hasta nuestro primer templo, unas veces para presidir devotas rogativas, en tiempos de aflicción; otras para acoger la acción de gracias por su poderosa protección y otras para realzar acontecimientos singulares. Además, y para mayor abundamiento, el propio Cabildo Catedralicio es Capellán Mayor Honorario de la Patrona
106
Pero es el pueblo de Jaén siempre el protagonista. Porque la Virgen de la Capilla tiene a su pueblo detrás, como se puede apreciar cada año cuando sale en procesión por las calles en la tarde del 11 de junio, fecha grabada en el calendario y en el corazón de todos los jienenses. Como pregonan viejos cánticos: “El once de junio, por siempre ha de ser, el día más grande de todo Jaén!
La primera gran cita con la Virgen, superados estos prolegómenos, como ocurrió la semana pasada con el acto celebrado en la Catedral, o con el devoto besamanto en su parroquia, y lo es este pregón, la devoción a la Virgen de la Capilla se encontrará un año más con el solemne novenario, una explosión de fe y religiosidad que llena las naves del templo y que tiene como protagonistas a diferentes colectivos de la ciudad que acuden a presentar sus ofrendas delante de la querida Patrona. En la tarde del día 10 el acontecimiento es muy especial, porque el Descenso es el origen, es el principio de esta relación de siglos que se ha hecho tan sólida. El itinerario recuerda lo que es historia y leyenda viva, con el barrio de San Ildefonso como protagonista, un barrio, dicho sea de paso, que forma parte del corazón de la ciudad, de ese Jaén de siempre al que antes me refería, y que es un gran foco de atracción en las puertas mismas del casco antiguo, y tanto su paisaje como su paisanaje son entrañables en el conjunto de esta ciudad nuestra que tiene a este barrio y a su gente colocados en lo más alto de su consideración popular. Relatan las viejas crónicas de una manera muy sencilla pero bella al mismo tiempo la llegada del llamado Celestial Cortejo que se detuvo en San Ildefonso donde fue construida una Capilla para la Virgen, de donde precisamente parece provenir el nombre. Como recuerda el cronista de la ciudad, Vicente Oya, mi admirado amigo y compañero, la conmemoración del Glorioso Descenso, se ha celebrado desde hace mucho tiempo con cultos y fiestas en honor a la Virgen de la Capilla. Los cultos constituyen una constante en la vida religiosa de la ciudad, prácticamente desde el mismo 1.430. En el libro “Nuestra Señora de la Capilla, Patrona y Reina de Jaén”, ensayo histórico de Vicente Montuno Morente, editado en Madrid en 1950, y en el titulado “La Virgen de la Capilla. Cuatro siglos de devoción mariana a través de documentos históricos conservados en la ciudad de Jaén”, obra de Isidoro Lara Martín-Portugués, editado en 1994, se hace amplia y rigurosa recopilación de textos de obras y documentación de diversas épocas en los que expresamente se habla de los actos religiosos ofrecidos por la ciudad a su Virgen de la Capilla.
La imagen de la Virgen de la Capilla que es una talla en madera de 0,70 metros y de color moreno y lleva un Niño en sus brazos. En la iglesia de San Ildefonso, además de su capilla, hay un retablo llamado del Descenso, trazado por Pedro Duque Cornejo, que representa el Cortejo de la Virgen por la ciudad. Unida al templo de San Ildefonso está la Casa Museo de la Virgen que guarda el patrimonio histórico-artístico que, a lo largo de los siglos, ha generado la devoción a la Virgen. Al lado también de la Parroquia, en la calle Montuno Morente, se sitúa además la Academia Bibliográfica Mariana Virgen de la Capilla, que es un centro cultural dedicado al estudio e investigación de temas marianos y especialmente relacionados con la Virgen de la Capilla. Estas fiestas, que no nos cansaremos de repetir, conmemoran el Descenso de la Virgen a la ciudad “para socorrer a nuestros mayores”, han tenido un especial esplendor en el último siglo, cuando verdaderamente han alcanzado solemnidad, brillantez y popularidad. Recuerda asimismo el cronista de la ciudad que en el año 1939, tras la guerra civil española, se constituyó una Junta de Vecinos del Barrio de San Ildefonso, que tuvo como objetivo celebrar, en la Parroquia, estas fiestas marianas. Dicha Junta solicitó del Ayuntamiento de Jaén, y éste, con fecha de dos de junio de 1948, concedió la organización de las fiestas populares, haciéndose cargo de los festejos el propio Ayuntamiento, y a partir de entonces fue cuando tomaron auge. En aquel año de 1948 el alcalde de Jaén, don Antonio Álvarez de Morales, y el hermano mayor de la Cofradía, don José Gómez Soriano, invitaron a los actos en honor de la Virgen publicando un mensaje conjunto.
En un principio eran unas fiestas populares y una verbena con el Rosario de San Bernabé entre otros actos religiosos. Luego, con el tiempo, estas fiestas tuvieron una mayor resonancia, tal y como ahora se celebran, y mantienen su principal motivación religiosa.
La página del Descenso, ese impresionante hecho histórico, está deliciosamente descrita en el libro del licenciado Becerra, donde se recoge el momento crucial en la vida de Jaén, en que se produjo el portentoso suceso: “Con mucho ceño parece miraba a esta afligida ciudad, cuando, a la verdad, más favorable la atendía. Llegó a un infeliz estado y último aprieto y tan sin remedio se hallaba, que intentaron sus moradores desampararla, por redimir, huyendo, las grandes y continuadas vejaciones que de los moros padecían, pues cada noche hacían correrías y se llevaban los ganados y a muchos cautivos; por cuya causa, de orden a guarecerse, hicieron una contracerca o muralla, que hoy está poblada, donde retiraban los ganados y se recogían las personas, de noche. Está el convento de San Francisco en esta segunda cerca y muchas noches los moros la quebrantan y entraban hasta el dicho Convento y alanceaban las imágenes, que estaban en la misma puerta, las cuales hay muchas personas que las vieron, porque se conservaron así muchos años por esta memoria….” Y sigue contando en otro momento del libro el significativo y crucial acontecimiento: “El año de 1430, a once de junio, día del Apóstol San Bernabé a la media noche, bajó esta Soberana Reina del Cielo con su Hijo benditísimo en sus brazos, con un lucido acompañamiento y pompa celestial, llevando a su derecha a su devoto capellán y glorioso prelado San Ildefonso; vino a su Iglesia que está en esta ciudad de Jaén en una gloriosa procesión”. Y agrega: “Y así fue que desde esta misma noche en que esta Angelical Señora honró esta ciudad con su presencia, decayeron los moros, se alentaron los cristianos; ni aquellos más la ofendieron ni éstos la desampararon; ni aquellos prevalecieron y estos experimentaron toda bonanza y dicha”.
El Descenso
Existieron distintas cofradías de la Virgen de la Capilla desde el siglo XVI, siendo por tanto muchas las fechas históricas y entrañables de Jaén vinculadas a su Patrona. El 1 de junio de 1930 fue la coronación canónica de la Virgen. En 1950, y con fecha 31 de mayo, el Papa Pío XII declaró a la Virgen de la Capilla Patrona Principal de la Ciudad de Jaén. Con fecha de 5 de mayo de 1967 el Ayuntamiento de Jaén concedió a la Virgen el título de Alcaldesa Mayor Honoraria de la Ciudad.
107
El Descenso
Por otra parte en el Romancero de Jaén que se publicó en honor de doña Isabel II cuando vino a Jaén en 1862, Antonio Bedmar recoge la tradición religiosa en torno a la aparición de Nuestra Señora de la Capilla. Recojamos una parte porque es verdaderamente expresiva y todo un documento:
108
“Érase del siglo quince los treinta primeros años; diez días del mes de junio se contaban, y era sábado. Nuestra diócesis regía el Obispo don Gonzalo, varón tan esclarecido en cuna y fervor cristiano, como valiente adalid siempre que al campo contrario salió esgrimiendo la espada contra el africano bando. Cerca de la media noche marcábase ya en los astros, y al rezo de los maitines las campanas, entre llanto, convocaban a los fieles en lúgubre son pausado. Una brillante aureola se presenta en el espacio, que ilumina la ciudad y esclarece todo el ámbito. Misteriosa procesión que entonaba dulce cántico, salió de la Catedral con majestuoso paso. Siete cruces parroquiales iban delante, marchando una de otra en pos, llevadas por hombres con trajes blancos. Tras de las cruces seguían hasta veinte tonsurados, vestidos de albo ropaje y rezando en tono bajo. De belleza nunca vista una Señora con manto, más que todos elevada, llevaba un Niño en los brazos; sus rostros, sus vestiduras, como de la nieve el campo,
despedían más fulgores que el sol en un día claro. A un lado de esta Señora (vestido también de blanco) con diadema, un religioso la servía de diácono; llevaba estola, manípulo y un libro, abierto, en las manos. A otro lado una mujer con ademán recatado, vestida de humildes tocas, también iba acompañando. Seguían, dando realce a tan lucido espectáculo unas trescientas personas con traje y aspecto cándido. Cerraban la comitiva, produciendo ruido extraño con sus espadas y lanzas, hasta cien hombres armados, Y no se llevaban luces en tan solemne aparato. Esta procesión la vieron muchos vecinos del barrio que por fortuna no habían entregádose al descanso. Y a tan sublime cortejo gozosos acompañaron, con la fe respetuosa que inspira todo milagro”. Han pasado casi seis siglos y Jaén ha perseverado, gracias a Dios, en el amor y en la devoción a quien ha querido como Madre y Señora. Sigamos avanzando. Y llega el gran día, el día 11. Primero la fiesta de los Cabildos, un reconocimiento de la armonía y el respeto a la tradición, en conmemoración de acuerdos históricos y afortunadamente vigentes. A esta misa votiva de la mañana del día 11 lo verdaderamente solemne es que acudan los Cabildos Catedralicio y Municipal en Corporación, para dar realce a acto tan singular. He visto en la gloriosa mañana del día 11 de junio larguísimas filas de niñas y niños, y de mayores, depositando sus flores en la Plaza de San Ildefonso
En esta ofrenda como en otros actos colaboran estrechamente la Cofradía y la Asociación Lola Torres. Creo que es especialmente emotiva y digna de ser potenciada, la imagen de nuestras pastiras y chirris, porque son atuendos propios de la ciudad y porque tenemos la obligación de preservarlos y hacer que no se pierdan y en lo posible se hagan presentes en otras actividades ligadas al costumbrismo local, como por fortuna hace la asociación fundada en su día por la recordada María Dolores de Torres. Su corte de honor, instaurada en tiempos de Ramón Calatayud Sierra, tan amante de su Jaén, debe seguir siendo una imagen de esta fiesta. Tenemos que procurar que nuestros símbolos, nuestros distintivos, no pierdan fuerza. Nada que objetar a que se vean en la calle y se luzcan los trajes de gitana, pero tenemos que preservar el valor de lo propio. Nos recuerda Riquelme, en la revista Don Lope de Sosa, en el año 1913, como una estampa costumbrista más de nuestro Jaén el valor del traje de pastira, que se liga entrañablemente a esta fiesta y a la tan cantada mujer jaenera: Lleva la falda corta, el pie ceñido, guarda negro jubón el talle airoso, mantoncillo de flecos espumoso lucen los hombros con gentil descuido; enriquecen el clásico prendido cruz de esmeraldas en el cuello hermoso, pendientes de dibujo caprichoso, anillos de la fé que ha prometido. Adornan ricas trenzas la cabeza que ostenta con pudor roja mantilla; y así ataviada la ideal belleza, cuando en el templo dobla la rodilla ¡ella es el pueblo de Jaén que reza a su Virgen, sin par, de la Capilla! Por la tarde de ese 11 de junio, memorable para esta ciudad, Jaén entero en los alrededores de
la parroquia y en todas las calles del trayecto para acompañar la solemnísima procesión. Un grandísimo repique de campanas y la Patrona de Jaén está en la calle, como siempre guapísima y convertida en el centro de todas las miradas. ¿Qué le pasa a la Virgen de la Capilla que cada año está más guapa y congrega a más gente junto a Ella? Un grupo de personas, jóvenes en su mayoría, la pasean a sus hombros y un largo cortejo la acompaña con todas las representaciones, cofradías jienenses, la mujer jaenera con su mantilla y una comitiva en la que Ella y el pueblo son los protagonistas. En la calle una madre habrá pedido por su hijo ausente, otra mujer está llorando, ruega porque una enfermedad no se lleve al ser querido. ¡Cuántas historias personales y cuántas peticiones individuales a nuestra querida imagen! Otros simplemente dan gracias. Y la Virgen escucha siempre. Hoy que tan dados somos a las encuestas, qué pasaría si en la calle preguntáramos a todas y cada una de las personas que se congregan a qué van, qué esperan encontrar, qué es para ellos la Virgen de la Capilla y qué compromiso adquieren para multiplicar este enorme activo de Jaén. Pero no nos entretengamos. Todos los corazones sintiendo al unísono, es como decirle a la Madre, estás con nosotros, el pueblo de Jaén que te quiere. Es verdad, en este suelo, a la sombra de este Santuario de San Ildefonso, muchos descubrieron el fervor mariano, por eso dichosos vosotros que sois los pregoneros de esta fiesta tan jienense, porque le dais sentido a esta devoción. Hemos ascendido en influencia delante de la Virgen. También sus horquilleros, muchos de ellos voluntarios y veteranos, junto a decenas de jóvenes que se han ido multiplicando y que son una imagen de buena salud de este desfilar solemne por las calles de la ciudad. Preguntar eso, ¿quién les paga? ¿quién puede pagar la fe, quién puede ponerle precio a los hombros que rivalizan en llevarla? Cientos de jienenses se apiñan y desbordan como en torrente de fervores. Se vive el entusiasmo y se repiten escenas entrañables. Una ves más felices. La procesión nos invita entre vítores a la Señora de la Capilla. Ya está aquí la que nos hace sentir alegría, se dirán, y si pue-
El Descenso
ante un cuadro de la imagen. Cientos y cientos de flores elegidas, las mejores sin duda, para ponerlas a sus plantas. No he conocido acontecimiento igual, gentes de Jaén llegadas desde sus cuatro puntos cardinales, todo un pueblo con su ofrenda. Es así como se estimula la tradición, esta es la mejor lección que puede dar una comunidad deseosa de transmitir a otras generaciones lo que siente y lo que vive.
109
den se acercarán, doblarán la rodilla o saludarán a la Virgen cada uno como sabe hacerlo. Algunas lágrimas se derramarán y se rezará, y nos reencontraremos con entrañable recuerdos en nuestra mente, los recuerdos y tantas cosas como unen entrañablemente a los que sintonizamos la misma onda de la emoción. Incluidas las sombras queridas que acuden en este momento, devolviendo a la actualidad las grandes ternuras de antaño. Jaén se encuentra con su Virgen de la Capilla y por fortuna lleva muchos años haciéndolo de forma ininterrumpida. Gracias, gracias…y habrá en muchos casos como una especie de nudo en la garganta que impida exteriorizarse de otra manera. Y las manos tomarán por su cuenta el camino del aplauso, y se repetirá una y otra vez, con emoción en los ojos y sinceridad en las palabras, el nombre más querido y popular de esta ciudad.
El Descenso
El paso de la Virgen tiene que ir con lentitud. Hay que saborear la presencia en la calle de la Madre. La Virgen de la Capilla nunca está sola, un pueblo la sigue, aunque tras Ella, porque así es la vida, quede en muchos casos la resignación, que no el desconsuelo, porque Ella con su presencia viene a dar respuesta en nuestros días, pero en especial, cómo no, de quienes por alguna adversidad más lo precisan. Se mezclan la alegría y la tristeza, cierto, pero esto es lo que hace el pueblo, tal es su vocación y su voluntad. Y un pueblo nunca se equivoca, especialmente cuando durante siglos atesora una riqueza tan inmensamente grande como la de querer y haber sabido transmitir este cariño a quien yo también rindo mi más sincero homenaje, uniéndome de corazón a este fervor colectivo, sintiéndome un fiel devoto de María Santísima de la Capilla. Tened la seguridad de que me llena de orgullo. Cada pueblo escribe su historia, cada pueblo se regocija con lo suyo, cada pueblo quiere a su patrimonio más rico.
110
En estas vísperas solemnes anticiparía mi oración a la Virgen de la Capilla que nos congrega. Mirad, sería una oración por la paz, sobre todo por la paz. Por la amistad, por el trabajo, por la solidaridad, por los niños, por los ancianos, por los que sufren, por la libertad, porque desaparezca el odio, el tre-
mendo problema del paro que como consecuencia de la crisis es en este momento lo que más nos inquieta y tenemos el deber de colaborar en lo posible, como ya lo hacen instituciones como Cáritas, de colaborar ofreciendo nuestro apoyo a cientos de familias que viven una situación desesperada; por el hambre, por el terrible mal de las drogas, por esta sociedad en la que poco a poco se pretenden cercenar grandes valores morales y sociales…Y también, cómo no, porque estas fiestas nos acerquen a un mayor compromiso. Quisiera que constituya el pórtico de unas jornadas alegres en las que todo el protagonismo sea para la Virgen de la Capilla que debe seguir siendo el estandarte de nuestras aspiraciones como pueblo. Y nos transmitan la sana alegría de nuestro compromiso cristiano, que debe ser visionado por los demás en nuestro entusiasmo y en la defensa respetuosa de la fe que profesamos y al tiempo contundente de nuestras más profundas convicciones. Lo que tiene la vida. La fiesta es una ocasión para la nostalgia, hay gente que no saldrá porque le faltan los suyos que han partido para estar más cerca de María. Especialmente quiero pedir por los que fueron devotos amantísimos de la Señora de la Capilla. Rezamos por ellos y por todos los que se han ido con el deseo de que arriba celebren una fiesta mariana para la eternidad. El tiempo apremia y el gran pregón de las fiestas de la Virgen de la Capilla de Jaén jamás podrá quedar concluido. Se precisarían horas y horas y no terminaríamos nuestro cometido, aunque todo viene a decirnos lo que somos, tradición, historia y grandeza. Y lo grande, por buena voluntad que se tenga, no se puede plasmar en una hora, ni en el más grande de los cuadros, ni en la más sublime de las músicas,. Por lo tanto terreno abonado para los mejores productos del amor jienense en estos días. Cantar y pregonar estas fiestas marianas de Jaén y hacerlo como yo esta mañana, con el amor de un hijo hacia una Madre, y con la responsabilidad de un principiante, que eso me siento, abrumado por esta distinción que me hace definirme como describe Unamuno, en sus “Paisajes del alma”, un jienense más de “educación, de cuerpo, de espíritu, de lengua y hasta de profesión y oficio”.
Es Madre que escucha a todos, especialmente también a los más pequeños. Y es Madre que sabe invitarnos a estar atentos al Hijo Mayor, que tiene palabras de vida, palabras de verdad y de justicia. Nos invita a escuchar las supremas palabras de amor y de perdón en una sociedad a veces tan insensible y tan perdida. Ella es un altavoz de las palabras de su Hijo, que son siempre palabras que alaban. Nunca palabras que ofenden. Palabras que devuelven la vida y la confianza. Y es una Madre que comparte, que está atenta para compartir con nosotros el gozo de la Resurrección y los regalos que nos hace Jesús Resucitado. El regalo de la paz, de la alegría y de la valentía. La Madre del Cenáculo, la Madre que con su presencia disipa los miedos y trae a nuestros corazones la paz y la serenidad. Ella es la Reina de la Paz en esta Pascua gozosa. No debemos tener miedo al lado de nuestra Madre de la Capilla porque ella comparte con nosotros la realidad de saber que a su lado todo lo veremos con más claridad. Cuando acudimos a rezarle salimos con una sensación de serenidad y complacencia. Ella nos transmite también y tenemos que verlo, la alegría de la Pascua y con ella corremos para ver la tumba va-
cía. No está el Señor entre los muertos, sino entre los vivos y nos enseña a verlo en la tristeza de quienes lloran sus fracasos, en el sudor de los que trabajan en busca del pan y del sustento, en la crítica de los que piensan para hacer un mundo mejor, en el esfuerzo de los trabajadores, en el dolor de los enfermos, en tantas y tantas situaciones de cada día. Ella nos enseña a ser testigos del Hijo, y a dar la cara por Él. María alienta nuestro servicio a todos, un servicio callado y silencioso en medio de esta sociedad que necesita el evangelio de las obras que decía el beato Juan Pablo II. Una sociedad harta de discursos y que necesita de gente comprometida. A ella el discurso de la palabra le duró poco porque pronto lo tradujo en el discurso de las obras. Corrió en ayuda de su prima que la necesitaba. Y es que todo el discurso cristiano tiene que huir de las palabras y traducirse en compromisos, esta es la exigencia de la fe y tenemos que definirnos con claridad, saber qué dirección tomamos y con quién estamos alineados. En efecto Jaén es hoy como un Cenáculo, esta ciudad es estancia abierta que espera la presencia del Resucitado y mantiene la esperanza con María, la Virgen. La fuerza del Resucitado llegará a todos y cada uno de los que entre nosotros buscan y trabajan por un mundo mejor. No sólo a los creyentes, también a los que buscan con sincero corazón. Madre de la Iglesia de Jaén que nos congrega en esta mañana para sentir su mano que acaricia, su sonrisa que nos devuelve la alegría pascual, su mirada que nos da plena confianza. También nosotros y nuestra Iglesia que peregrina en Jaén necesitan, Virgen Santísima de la Capilla, de tu dulzura, de tu mirada, y de tu mano generosa., No nos dejes, danos tu mano. Danos tu mano, cúbrenos con tu manto, María Santísima de la Capilla, y acompáñanos en el camino. Y como la fiesta de la Virgen de la Capilla llega sólo una vez al año y se espera con tanto entusiasmo, el deseo del pregonero es que todas y todos los jienenses aprovechen para vivirla como saben hacerlo, en plenitud, y colaboren para que la cita festiva sea de nuevo un motivo más para nuestro orgullo legíti-
El Descenso
Por esto no me quiero olvidar de que antes que nada estamos rindiendo homenaje a la Madre, y lo hago extensivo a todas las madres de Jaén que han sufrido alguna vez como lo hizo la Virgen, pero que en sus corazones de mujeres valoran, desde su especial sensibilidad, la importancia de esta palabra. Pero María en este tiempo de la Pascua es Madre de la Iglesia que acoge, escucha y sirve la Palabra de Dios, que es la Palabra del Resucitado. Ella, nos pone en su regazo, nos mira y nos señala el Fruto Bendito de su Vientre, Jesús. Madre de la Iglesia de la ciudad de Jaén, Madre de todos nosotros en esa entrañable advocación que nos llena de orgullo. La Iglesia, que somos todos, mira el rostro de la Madre para contemplar en Ella una actitud de escucha. Sabe escuchar los lamentos de los hermanos, qué bien seguros estamos de eso, el sufrimiento de quienes están atados al dolor, de quienes atraviesan por la noche de la desesperación.
111
mo y nuestra afirmación de jaenerismo, que hay que saber exhibir de vez en cuando para nuestra propia satisfacción y para exteriorizar y vender, como se dice ahora, como un valor, y además como un valor en alza, a este pueblo noble que mira hoy más que nunca a un barrio especial y elegido, San Ildefonso, donde la Virgen de la Capilla es la guardiana de esta ciudad en su calidad de Patrona y Alcaldesa Mayor. Hay un dicho, también muy cierto sobre Jaén que viene a cuento en esta mañana. A quien Dios quiso bien, casa le dio en Jaén. Tanto quiso Jesús a su Madre que en su advocación de la Capilla le buscó un paraíso, una ciudad, la nuestra, y una gente en la que estaba seguro que se iba a encontrar amada por los siglos de los siglos, donde la Virgen es feliz y los jienenses nos sentimos protegidos. El Descenso fue para Jaén y lo seguimos recordando, un extraordinario regalo. Lo dice el relato poético con toda rotundidad: “Virgen santa que a nos descendiste hoy, en alas del más puro amor, desde el solio eternal donde reinas como Madre bendita de Dios, a tu amparo se acoge este pueblo, que a tus plantas sirvió de escabel: mira siempre con ojos de Madre a la noble ciudad de Jaén”.
El Descenso
En general la leyenda de la Virgen de la Capilla es una bellísima pieza y tiene gran valor popular y sentimental. Ayer pensaba, al tratar de concluir el pregón, en el hecho prodigioso de que a diferencia de otras muchísimas ciudades, donde la Virgen se había aparecido a una persona o como mucho a varias de
112
ellas, en nuestro caso tuvimos también el privilegio de que fuera a todo un pueblo, en aquella vistosa procesión bajo la apariencia de Cortejo Blanco, de la que tenemos constancia a través de los testimonios de quienes presenciaron el acontecimiento que como dije al principio ha dado sentido a un gran sentimiento de Jaén que va para seis siglos. Ayer fue la última vez que me incliné a sus pies en el santuario donde preside ahora el altar mayor y le pedí su protección y su bendición para poder estar a la altura de las circunstancias y para merecerla como todo lo que es. ¡Cuántas cosas más podríamos decir en esta mañana como exaltación a la Virgen! Aunque lo podemos resumir en estas estrofas del canto popular: Viva la Virgen, nuestra Patrona, que en nuestro pecho tiene su altar y reine siempre, triunfante Cristo. en nuestro pueblo noble y leal. Y concluyo. Yo también quiero a Jaén como a una Madre, como quiere cada hijo de Jaén a su Madre con mayúsculas, la Virgen de la Capilla. Por eso me gustaría terminar con un verso del Cantar de los Cantares: Pone me un signaculum super cor tuum. Ponme, querida Virgen de la Capilla, amadísima Patrona, como una señalita sobre tu corazón y sobre tu manto protector. Y ponla sobre todos y cada uno de tus hijos de este Jaén que se rinde hoy ante ti y valora con orgullo y con todo el sentimiento de que es capaz, que la tradición, la religiosidad, el amor, la devoción, la fe y la esperanza, en Jaén tienen un nombre: Santísima Virgen de la Capilla.
A SANTA MARIA DE LA CAPILLA, MADRE NUESTRA Manuel López Pegalajar. De la Academia Bibliográfica Mariana “Virgen de la Capilla”
Nos alegramos, más si cabe, desde hace 582 años de tu presencia entre nosotros. Recordamos que eres Madre de Jesucristo y en esta verdad radical se apoya tu maternidad espiritual respecto a todos los hombres. Como vino por Eva la muerte, por ti María vino la vida a nosotros y eres así, en verdad, Madre de todos los hombres. Así eres Madre de los hombres: actuando como Madre de Jesús, y cooperando de modo singular a la obra de la salvación para restaurar la vida sobrenatural de las almas. “Por tal motivo, ella fue para nosotros Madre en el orden de la gracia” (Lumen Gentium, 61). Esta maternidad la tuviste desde el momento de la Encarnación del Verbo, pero fue proclamada en la Cruz. “Se puede decir que, si la maternidad de María respecto a los hombres ya había sido delineada precedentemente, ahora es precisada y establecida claramente… La Madre de Cristo es entregada al hombre – a cada uno a todos- como Madre… Madre de Cristo, Madre de los hombres” (Redemptoris Mater, 23) Si eres Madre de todos los hombres, eres de forma efectiva y especial Madre de la Iglesia. “Madre de los hombres, particularmente de los fieles, pues la Maternidad de María respecto a la Iglesia es el reflejo y prolongación de su maternidad respecto del Hijo de Dios” (R.M. 24)
Desde muchos puntos de vista, en toda la vida de la Iglesia han ido apareciendo con espontaneidad los argumentos que avalan esta verdad entrañable que desde siempre ha vivido la Iglesia. Sin embargo hasta el siglo XII no aparece claramente este título. El Concilio Vaticano II afirma que “la Iglesia Católica, ilustrada por el Espíritu Santo, le tributa el piadoso homenaje de su afecto filial, como Madre amantísima” (L.G. 53) Fue Pablo VI al terminar la aprobación del documento del Concilio quien te proclamó: María Madre de la Iglesia. “La Maternidad Divina… constituye el fundamento principal de las relaciones de María con la Iglesia, por ser Madre de Aquel que desde el primer instante de la encarnación en su seno virginal se constituyó en cabeza de su cuerpo místico, que es la Iglesia. María, pues, como Madre de Cristo es Madre también de los files y de los pastores”; es decir, de la Iglesia, sin dejar de ser miembro de ella, como una madre lo es de sus hijos y, a la vez, forma con ellos parte de la familia. Considerarte y tratarte María como nuestra madre con un cariño real y entrañable, favorece profundamente dos dimensiones claves de nuestro ser de cristiano: María nos llevas a Jesús, la razón de ser de tu vida y la meta de tu misión. Tú eres como camino recto para el encuentro con tu Hijo. Quererte a Ti es querer lo que Tú quieres: Jesús. La devoción a Ti es siempre lugar de encuentro con Jesucristo. Esa es tu razón de ser y de servir. Además, como Madre de
El Descenso
Cada año, el 11 de junio, nos reunimos, Madre, para honrarte tus hijos e hijas fieles en la conmemoración de tu Descenso a la ciudad de Jaén.
113
una familia grande, Tú eres ocasión y cauce para vivir el amor hacia los hermanos, hijos tuyos también. Quererte a ti, María es también querernos más entre nosotros mismos. La devoción a la Madre ha de llevarnos a vivir con más exigencia la fraternidad, con un sentido más humano y más divino a la vez. María traigo aquí las palabras que pronunció tu hijo, hoy Beato Juan Pablo II el 13 de mayo de 1982 como resumen de mi hablar contigo:
El Descenso
“La maternidad de María se manifiesta de un modo particular en aquellos lugares donde ella se encuentra con los hombres, donde ella habita y se deja sentir especialmente su presencia materna. Son lugares o edificios numerosísimos y variadísimos. Desde las hornacinas en las casas o en las calles, donde figura la imagen de la Madre de Dios, a las capillas o templos construidos en honor suyo. En algunos de estos lugares la presencia de la Madre se hace ex-
114
traordinariamente viva y su luz se difunde ampliamente, atrayendo desde lejos a los hombres. Esta irradiación se extiende a veces a toda una diócesis, a una entera nación o a varias naciones, incluso a continentes. Son los santuarios marianos. En todos estos lugares se cumple maravillosamente aquel testamento del Señor crucificado. El hombre se siente allí encomendado a María, acude allí para estar con ella como con la propia Madre, le abre su corazón y le habla de todo, la lleva a su casa, es decir, a sus problemas, propios y ajenos, a los problemas de las familias, de los grupos sociales, de las naciones, de la humanidad entera”. Y ante todas estas consideraciones hechas en tu presencia Tú me dices: “Haced lo que él os diga”. Con estas palabras me despides. Son tus postreras palabras en nuestro encuentro y las últimas que de Ti nos han conservado los evangelios. Siempre tuyo.
A SANTA MARIA DE LA CAPILLA
Patrona de la ciudad de Jaén
Santa María de la Capilla Divina Aurora de Jaén, Socorro del que te implora. Rendidos a tus plantas acudimos desde hace siglos los hijos de esta ciudad para obtener de tu Gracia remedio del mal, consuelo en los dolores, cura de las enfermedades. Los creyentes te invocamos, te damos gracias, pedimos tu protección en las alegrías y en las tristezas. Santa María de la Capilla, serenidad en las tempestades, escudo y defensa en el pecado. Corona de la inocencia, comendadora de las almas, más que el oro resplandeces. Virgen bella, Virgen Santa, estrella de la mañana, faro y guía cotidiano del hogar cristiano, del laborar honrado. Abogada nuestra, ruega por nosotros Madre de los creyentes. Intercede ante Jesús, Hijo tuyo y hermano nuestro Por siempre…
El Descenso
Manuel López Pegalajar. De la Academia Bibliográfica Mariana “Virgen de la Capilla”
115
MOAXAJA INMACULISTA Manuel López Pegalajar. De la Academia Bibliográfica Mariana “Virgen de la Capilla”
Madre Oferente Amante Xantidad Admirable Jubilosa Agradecida
El Descenso
Ígnea llama
116
Nimbo estrellado Mar sosegado Alma ardiente Corazón entregado Ubérrima caridad Luz fúlgida Inmensa palabra Saludable gracia Transparente cristal Aurora humanada
Quiero ser, Virgen de la Capilla, costalero Concepción Agustino Rueda
Quiero, ser, Virgen mía, costalero, y tu grácil figura de azucena abrazar con mi mimo cofradiero, fundiendo, así, tu manto con mis penas. Quiero llevarte por nuestros caminos, entre piropos y plegarias nuevas; sentir tu amor con corazón de niño que acaricia la eterna primavera. Quiero, con estos hombros, acunarte, en un suave vaivén acompasado; quiero, con dulce nana, descansarte, aliviando el pesar de tu costado. A Tí está ya mi alma encadenada, y encadenado a Tí mi andar inquieto. Mi vida, ya prendida en tu mañana, halla, en tus dulces ojos, su consuelo.
Quiero ser, Madre mía, costalero, cuando tu paso alegre nuestras sendas; que rompa el tibio aire un “te quiero”, y un beso anide en tu faz serena. !Quiero ser, Madre mía, costalero, y abrazarte con mimo cofradiero!.
El Descenso
Paseas tu silencio y galanura por estas calles, Virgen Coronada, y tus hijos, al ver tal hermosura, a Tí, Rosa escogida, te proclaman.
117
AQUEL FESTIVAL TAURINO DE 1962 Domingo Echevarría
El Descenso
Corría el año 1962 y la irrupción en los ruedos del hoy V Califa del toreo, Manuel Benítez “El Cordobés”, de manos de Rafael Sánchez “Pipo”, convulsionó el “Cotarro Taurino”. En una verdadera legión de chavales despertó el “gusanillo del toro” queriendo emular a aquel ídolo de multitudes, en el que se había convertido el ciclón de Palma del Río. Por casinos, tabernas y demás locales de reunión se hablaba de toros, y surgieron los Clubes y Peñas taurinas por doquier con el nombre de aquel revolucionario que despertó a la fiesta de su letargo, volviendo a colocar, tarde tras tarde, “El no hay billetes” en las taquillas, bajo titulares como “El Cordobés y dos más”. Por caminos y carreteras, “hatillo al hombro”, se sucedían “los maletillas”, en busca de fama y dinero. La fiesta de los toros volvía a su máximo esplendor.
118
El 18 de marzo de 1962, recayó uno de ellos a las puertas de la plaza de toros de Jaén, solicitando una oportunidad. Se trataba de Pedro Mengual Aguayo “El Carloteño”, al que se une otro aficionado de Benatae, pueblo serrano de la provincia de Jaén, de nombre Ramón Rodríguez, apodado “El Mere”, que
al igual que Pedro, deseaba abrirse camino pidiendo también una oportunidad.
Después de 21 días de esta guisa, soportando las inclemencias climatológicas de aquella primavera, la empresa decide concederles una oportunidad que se fija para el 8 de Abril de 1962. Junto a los dos maletillas, otros dos aspirantes: José Arias “El Espontáneo de Madrid” y José Gómez Hueso “Gallito de Jaén”, con dos novillos para cada uno. “El Mere” y “El Carloteño”, a uno por barba. Aquella tarde de la oportunidad, se colocó el cartel de no hay billetes. El ganado fue de don Leon-
Para aquel día, tan señalado entonces, se monta una novillada a beneficio de la Hermandad de la Virgen de la Capilla, cuyos beneficios se destinarían a engrosar una suscripción abierta a favor de un trono de plata para tan venerada imagen. Respondió el público llenando la plaza. En el cartel, de nuevo, los dos maletillas “El Carloteño” y “El Mere”, junto a Anto-
nio Delgado, natural de Lucena, con ganado de don Demetrio Risoto de Navas de San Juan. El triunfo fue de nuevo para “El Carloteño”, saliendo a hombros y consiguiendo el capote de paseo que “Galerías Preciados” regalaba al triunfador. Presidió el festejo el comisario de policía don Juan Antonio Porras, asesorado por el exmatador de toros don Julio Chico. Económicamente fue un éxito. El público respondió. Se vendieron 5996 localidades y se obtuvo un beneficio de 103.156,20 pesetas de las de entonces. Cedieron sus honorarios el empresario don José Pérez y el personal de servicio. Incluso los hoteles “Suizo” y “La Española”, no cobraron el hospedaje, ni las comidas de los toreros. Radio Jaén hizo una gran campaña a través del micrófono, llegando donativos de Almería, Cádiz, Lérida, Madrid y Zaragoza. La Hermandad gratificó a “El Carloteño” con 5000 pts., y con 3000 a “El Mere”, más el regalo a ambos de un pantalón. La noche del 2 de mayo, en la iglesia de San Ildefonso, tuvo lugar la bendición y entrega de medallas de oro por el Capellán Mayor de la Patrona don Manuel Maroto, a los toreros de aquel festival y a la niña Capillita Pérez Serrano, hija del empresario taurino citado. Asistió la junta de gobierno de la Hermandad presidida por su entones Hermano Mayor don Ramón Calatayud, y el director de “Radio Jaén”, don Francisco González Quero, que fue el delegado de la junta para la organización del festival. “El Carloteño” tocó la gloria, llegando a tener mucho cartel, en España y Francia, sobre todo en San Sebastián de los Reyes, “Vista alegre” de Madrid, y aquí en Jaén donde triunfó muchas tardes, y en sus alrededores, con el sobre apodo de “Novio de la Muerte”, con el que honró su condición de Legionario, pues sirvió en el Tercio Duque de
El Descenso
cio Sorando, de Baños de la Encina. “El Carloteño” destaca junto al “Mere” ganándose ambos la repetición, el siguiente 1 de Mayo.
119
El Descenso
Alba de Ceuta. Llegó a intervenir en tres películas. A pesar de ello, su temperamento y su carácter bohemio lo llevaron de nuevo al anonimato, y finalmente
120
murió tristemente en una pensión Alicantina donde se hospedaba, en octubre de 2009. “El Mere”, siguió la profesión pero sin fortuna. Se casó y vivió en el Puerto de Santa María, donde también falleció. Así es la singular y grandiosa fiesta de los toros. Desde aquí nuestro recuerdo a estos dos hombres que un día, con su ilusión y entrega, entraron a formar parte de la historia de la Hermandad de Nuestra Señora la Virgen de la Capilla, a la que rogamos les guarde siempre un lugar selecto en su bendita gloria.
EL PREGÓN DE LAS FIESTAS DE JUNIO HISTORIA Y EVOLUCIÓN Manuel López Pérez Director de la Academia Bibliográfica-Mariana “Virgen de la Capilla”
Un Pregón de moderna instauración y de muy inestable configuración, que a pesar de todo está firmemente asentado en el calendario festero de la capital y que sin duda supone un notable aporte literario y devocional a la historia de la venerada imagen de Nuestra Señora de la Capilla, Patrona de Jaén. Dada su trascendencia histórico-religiosa consideramos de interés ofrecer en estas páginas una síntesis de su historia y evolución, esquema para un estudio de mayor envergadura sobre el que venimos trabajando desde hace años. I.- El primer Pregón tuvo por marco el entrañable Teatro Cervantes y se pronunció el 16 de junio de 1930 dentro del programa de actos con que se celebraba la Coronación Canónica de la Virgen de la Capilla y el V Centenario del Descenso. No fue un pregón, en el sentido estricto del término, sino un “acto literario en honor de Nª Sª de la Capilla”, según se especificaba en el programa. En este acto, el poeta granadino –aunque de ascendencia jaenera- don Manuel de Góngora y Ayustante (18891953) dio lectura a su inspirado romance “Nuestra
Señora de la Capilla, Patrona de Jaén”,1 poema galardonado en el certamen literario convocado al efecto y seguidamente actuó como mantenedor-pregonero, don Manuel Enríquez Barrios (1877-1956), abogado cordobés, alcalde de Córdoba en los años 1913-1916 y exdirector general de Instrucción Pública. La idea inicial, auspiciada por el incansable propagandista de la Virgen don Vicente Montuno Morente (1892-1975), fue que en años sucesivos el Pregón iniciara solo la apertura de los Años Jubilares –aquellos en que el Once de Junio cayese en domingo- en acto organizado conjuntamente por la Cofradía y el Excmo. Ayuntamiento. II.- Así, el I Año Jubilar, el Pregón se encomendó al catedrático don Ángel Cruz Rueda (1888-1961), Hijo Predilecto de Jaén, Premio Nacional de Literatura 1929, biógrafo de “Azorín” y catedrático de Filosofía en el madrileño Instituto “Lope de Vega”. Motivos familiares le impidieron el desplazamiento, por lo que el Pregón lo leyó desde el balcón del Ayuntamiento, su buen amigo don Luis González López, Cronista Oficial de la Provincia. El acto tuvo lugar al anochecer del 9 de junio de 1944 y se complementó con una “charla” que al día siguiente pronun1 Vease GÓNGORA, M.: Romance descriptivo de los gloriosos Descenso y Visitación de la Santísima Virgen a la ciudad de Jaén. Jaén, 1949. Talleres de la Diputación Provincial.
El Descenso
Los festejos con que se conmemora el Descenso de Nuestra Señora de la Capilla a la ciudad de Jaén en la noche del 10 al 11 de junio de 1430, vienen teniendo, como toda fiesta que se precie, el prolegómeno de un pregón anunciador.
121
ció en el Teatro Cervantes el insigne académico don Federico García Sanchiz (1886-1964), que ofreció una de sus famosa “charlas” con el tema “Los caminos del Santo Grial”, en la que incluyó unas consideraciones para glosar las fiestas de la Virgen. De este Pregón se hizo una edición especial.2 III.- El II Año Jubilar, lo abrió el 10 de junio de 1950 el Pregón del poeta y académico Gerardo Diego Cendoya (1896-1987), Premio Nacional de Literatura 1925 y uno de los elementos mas representativos de la generación del 27, que acabaría obteniendo en 1980 el prestigioso Premio Cervantes. Lo ofreció desde el balcón del Ayuntamiento, actuando seguidamente en la Plaza de Santa María la Banda Municipal que interpretó los himnos de Jaén y de la Coronación. Hay que señalar que el servicio de megafonía no funcionó correctamente por las deficiencias de fluido que eran habituales en la época. En este Pregón incluyó su inspirada “Letrilla de Mariem”. Pregón de gran belleza literaria, fue solamente recogido por los medios de comunicación local. IV. Las Fiestas de la Re-Coronación de Nª Sª de la Capilla se abrieron el 7 de junio de 1953 con el Pregón que desde el balcón del Ayuntamiento pronunció nuestro ilustre comprovinciano don Rafael Laínez Alcalá (1899-1982), catedrático de Arte en la Universidad de Salamanca. Este Pregón tendría como complemento una solemnidad académica celebrada en la mañana del 11 de junio en el salón de la Excma. Diputación Provincial, en la que don Vicente Montuno Morente pronunció su discurso de ingreso en el Instituto de Estudios Giennenses, disertando sobre “Nuestra Señora de la Capilla en la poesía castellana de los cien últimos años”.3
El Descenso
V.- El impulso que el recordado párroco de San Ildefonso y capellán mayor de la Virgen don Manuel
122
2 Ver CRUZ RUEDA, A. : “Pregón del Primer Año Jubilar en loor de Nuestra Santísima Virgen de la Capilla, Patrona de Jaén”. Jaén, 1944. Talleres del diario JAÉN. 3 Ver MONTUNO MORENTE, V. : “Nuestra Señora de la Capilla, Patrona de Jaén, en la poesía castellana de los cien últimos años”, en Boletín del Instituto de Estudios Giennenses, núm. 9, julio-septiembre de 1956, pp. 9-59.
Maroto Castro (1905-1992) quiso dar a las fiestas de junio, trajo como consecuencia el deseo de instaurar anualmente el Pregón en honor de la Virgen de la Capilla, si bien este empeño solo consiguió continuidad, por el momento, en el periodo 1957-1963. El año de 1957, el Pregón estuvo a cargo del periodista don José Chamorro Lozano (1915-2006), secretario de la Cofradía. Fue un Pregón sin grandes pretensiones que se pronunció ante los micrófonos de Radio Jaén a las tres de la tarde del 9 de junio. Para ediciones sucesivas se diseñó una nueva y sugerente modalidad: restablecer la edición de los “Obsequios Poéticos a Nª Sª de la Capilla” que el impresor don Francisco López Vizcaino y la Cofradía de la Corte de Nuestra Señora de la Capilla habían patrocinado en los años de 1860-1885, asociando a la anual ofrenda poética el acto del Pregón. VI.- Con esta idea, el 9 de junio de 1958 y en el Teatro Cervantes, el veterinario don Salvador Vicente de la Torre González (1897-1974), director de la Real Sociedad Económica, Consejero del Instituto de Estudios Giennenses e inspirado poeta, pronunció el Pregón, tras el que varios poetas locales recitaron sus composiciones, cerrando el acto la Banda Municipal de Música, que estrenó dos marchas en honor de la Virgen de la Capilla, Cortejo Blanco, original del maestro José Sapena Matarredona (1908-1987), director de la Banda Municipal de Jaén y Nuestra Señora de la Capilla, compuesta por el maestro Valentín Ruiz Gámez, director de la Banda Municipal de Alcázar de San Juan. El texto del Pregón, junto con las poesías leídas, se recogió en un hermoso cuaderno al que se dio el título generalicio de Nuevos Obsequios Poéticos.4 VII.- El 7 de junio de 1959 y en el salón de actos de la Real Sociedad Económica de Amigos del País volvió a celebrarse el Pregón, en esta ocasión a cargo de don Alfonso Montiel Villar (1906-1991), abogado, delegado provincial de Información y Turismo, alcalde de Jaén en los años 1950-1955 y exdecano del Colegio de Abogados. Al Pregón siguieron las com4 Ver Obsequios Poéticos y Pregón del año de 1958 en las Fiestas del Descenso de Nuestra Señora la Virgen María a la ciudad de Jaén. Jaén, 1958. Edición de la Cofradía.
VIII.- El Pregón de 1960 lo pronunció el miércoles 8 de junio y en el salón de la Real Sociedad Económica, don Manuel Vilaplana Ugena (1912-1985), prestigioso maestro y secretario de la Cofradía en los años de 1957-1963. Los poetas leyeron sus composiciones y cerró el acto la Banda Municipal de Música. El cuaderno literario recogió todos los textos.6 IX.- Para el año de 1961, III Año Jubilar, no hubo Pregón propiamente dicho, pues se estimó que el evento quedaba saldado con la celebración, por parte del Instituto de Estudios Giennenses, de la Fiesta de la Poesía en honor de la Virgen de la Capilla. Como mantenedor de la misma se designó al P. Ramón Cué Romano (1914-2001), jesuita, que hubo de renunciar por un imprevisto viaje a Tierra Santa. Fijada la celebración del acto para el 9 de junio, tras nombrar mantenedor al P. Félix García Vielba (1897-1983), agustino, una grave enfermedad sobrevenida horas antes del acto obligó a su suspensión.7 Fue una decisión no muy acertada, pues con ella se puso fin al esperanzado resurgir de los “Obsequios Poéticos” y se sentaron las bases para hacer del Pregón un acto inestable y de escaso arraigo, como se vería en años sucesivos. X.- El año de 1962 el Pregón del III Año Jubilar volvió al salón de la Real Sociedad Económica, pero ahora ya sin complementos poéticos ni musicales. Lo pronunció el martes 6 de junio el profesor y académico cordobés don Pedro Palop Fuentes. Como complemento del mismo, el 12 de junio y en el Auditórium de la Alameda hubo un Acto de exaltación mariana en homenaje a la Santísima Virgen de la Ca5 Ver Obsequios Poéticos y Pregón de las Fiestas de la Santísima Virgen de la Capilla (Patrona de Jaén). Año de 1959. Jaén, 1959. Edición de la Cofradía. 6 Ver Corona Poética en honor de Nuestra Señora la Virgen de la Capilla, Patrona de Jaén y Pregón de las Fiestas anuales de sus gloriosos Descenso y Visitación a esta ciudad. Jaén, 1960. Edición de la Cofradía. 7 Ver Boletín del Instituto de Estudios Giennenses, núm. 29, Julio-Septiembre 1961. Incluye los trabajos premiados y una breve reseña sobre las vicisitudes de la fiesta.
pilla, organizado por la Cofradía en el que intervino como mantenedor el P. Ramón Cué Romano, jesuita de la residencia de Santiago de Compostela, que declamó su Nocturno Mariano. XI.- Al año siguiente -1963- volvieron los titubeos y el Pregón se remplazó por un recital que ofreció el 13 de junio en el Cine Lis Palace, el jesuita P. Ramón Cué Romano. Se cerraba entonces una etapa de contradictoria valoración que evidenciaba que, tanto en la Cofradía como en el Ayuntamiento, no se acababa de tomar conciencia de la aportación cultural que podría suponer un pregón de estas características y que a la postre, con su supresión, reforzaba la errónea idea de que la Virgen de la Capilla y sus fiestas eran algo exclusivamente identificable con la parroquia y barrio de San Ildefonso y con tan marcado carácter localista que no merecía los honores de un Pregón. XII.- Casi un decenio tardaría en recuperarse el Pregón con motivo de la celebración del V Año Jubilar, pues se había dado el caso, realmente incomprensible, de que el IV Año Jubilar no tuvo pregón. Fue el 31 de mayo de 1972 cuando en el salón de la Diputación pronunciaba el Pregón don José Ruiz de Gordoa y Quintana, Gobernador Civil de la Provincia, que fue presentado por don Francisco González Quero, Hermano Mayor de la Cofradía. Ruiz de Gordoa, desempeñó el Gobierno Civil de Jaén en los años de 1968 a 1972. Tenía ciertas inquietudes literarias, que su entorno áulico magnificaba en demasía. De ahí que partiese de él la propuesta de pronunciar el Pregón, cuyo texto fue inspirado por don Francisco González Quero. Para este acto, el pintor Luis Espinar Barranco (1910-1988) pintó un lienzo de la Virgen de la Capilla, con la idea institucional de que una copia sirviese en éste y años sucesivos, como regalo para los pregoneros. Del Pregón se hizo una copiosa edición. 8
8 Ver RUIZ DE GORDOA Y QUINTANA, J.: Pregón en honor de la Santísima Virgen de la Capilla en su V Año Jubilar. Jaén, 1972. Edición de la Cofradía.
El Descenso
posiciones poéticas escritas para ese año, editándose todo ello en el consabido cuaderno.5
123
XIII. Para 1973 se decidió reemplazar el Pregón por unos Juegos Florales en honor de la Virgen de la Capilla, que se celebraron con el ceremonioso ritual de este tipo de solemnidades, en la noche del 10 de junio en el Teatro-Cine Asuán, actuando como mantenedor el magistrado don Rafael de Mendizábal y Allende, Subsecretario de Educación y Ciencia e ilustre hijo de Jaén, que contaba con muchos afectos en la capital, pues era hijo del poeta Federico de Mendizábal, el autor del Himno a Jaén. XIV.- En 1978, VI Año Jubilar, luego de un intenso y apasionado debate, la Cofradía asumió la necesidad de regularizar e institucionalizar para el futuro el acto del Pregón. Y en consecuencia, en el salón de la Diputación Provincial pronunciaba el Pregón el M. I. Sr. don Miguel Sánchez Martínez, arcipreste de la Catedral de Almería y fundador del Colegio Mater Asunta, buen amigo de don Manuel Maroto del que partió la propuesta.
El Descenso
XV.- En la mañana del domingo10 de junio de 1979, en el salón de actos de la Casa de la Cultura, pronunció el Pregón don Manuel López Pérez , consejero secretario general del Instituto de Estudios Giennenses, que fue presentado por el Cronista Oficial de la Provincia don José Chamorro Lozano. Tras el Pregón ofreció un concierto el “Orfeón Santo Reino”. El Pregón está publicado. 9
124
XVI.- Al año siguiente volvieron de nuevo los debates y titubeos, pues un sector de la Junta de Gobierno de la Cofradía entendía que el Pregón entorpecía los actos religiosos. Otro sector, apoyado por el párroco don Manuel Maroto, era partidario de fundir el Pregón con la novena, asegurando que así “se complicaban menos las cosas y se hacía menos gasto” (¿…?). Por ello, el Pregón de 1980, celebrado el 31 de mayo, tuvo lugar en la iglesia de San Ildefonso al término de los cultos del día. Estuvo a cargo del Cronista Oficial de la Ciudad y académico de la Bibliográfico-Mariana don Vicente Oya Rodríguez, que fue presentado por el pregonero del año anterior. Dado el lugar, las continuas entradas y salidas del público al templo, 9 Ver LÓPEZ PEREZ, M. : Pregón de las Fiestas de clausura del VI Año Jubilar de Nuestra Señora de la Capilla. Jaén, 1979. Gráficas Catena.
el fervorín que don Manuel Maroto pronunció como colofón del acto y la inclusión del canto de la Salve al final del mismo, convirtieron el Pregón en un acto híbrido y excesivamente dilatado. XVII.- Para 1981 se optó por recuperar la independencia del Pregón. Este año se celebró el domingo 31 de mayo en el patio del Museo Provincial y estuvo a cargo del que fuera secretario de la Cofradía y creador del Archivo Mariano, don Manuel Vilaplana Ugena, a la sazón residente en Sevilla y que ya había pronunciado el Pregón en 1960, al que presentó el pregonero del año anterior. Culminó con un concierto ofrecido por el Orfeón “Santo Reino”. XVIII.- A iniciativa del Hermano Mayor don Ramón Calatayud Sierra, se propuso que para años sucesivos fuese la recién creada “Academia Bibliográfico-Mariana” la que en íntimo acuerdo con la Cofradía propusiera anualmente la posible terna de pregoneros y diseñara con rigor académico el protocolo a que debía sujetarse el Pregón, con el fin de dar el máximo esplendor al acto, hasta conseguir el debido y necesario arraigo, evitando las improvisaciones y titubeos que hasta entonces habían sido habituales. Igualmente se encomendó a la Academia la recepción del texto del Pregón, con el fin de que cada año se publicara en el anuario “Once de Junio”. Así se hizo en los años de 1982 a 1987. El pregón de 1982, lo pronunció el lunes 31 de mayo en el patio don Rafael Ortega Sagrista (19181988), abogado, académico de la Real de la Historia, Consejero del Instituto de Estudios Giennenses y miembro numerario de la Academia BibliográficoMariana, que fue presentado por el Cronista Oficial de la Provincia don José Chamorro Lozano. Tras su intervención ofreció un concierto el Orfeón Santo Reino. XIX. El 31 de mayo de 1983, también en el patio de Museo Provincial, pronunció el Pregón don José Chamorro Lozano (1915-2006), director del Diario “Jaén”, académico de la Historia, consejero del Instituto de Estudios Giennenses, Cronista Oficial de la Provincia y miembro numerario de la Academia Bibliográfico-Mariana, que ya había sido pregonero
XX.- La celebración en 1984 de la I Asamblea de Estudios Marianos, vino a suplir el Pregón, reemplazándolo por el acto académico de apertura de la Asamblea, celebrado el 8 de junio en el recién estrenado salón parroquial de San Ildefonso, interviniendo el director de la Academia Bibliográfico-Mariana don Manuel López Pérez que expuso el tema “María y Jaén. Razones para una Asamblea”. XXI.- A partir de 1985 el Pregón va a mantener un planteamiento uniforme, si bien año tras año habrá que luchar con el imponderable que siempre estuvo unido al Pregón: la fecha y la climatología que no facilita precisamente la afluencia de cofrades y oyentes. En esta ocasión, en la mañana del domingo 9 de junio de 1985, el pregón lo pronunció en el salón de Radio Jaén, el poeta ubetense Ramón Molina Navarrete, miembro de la Academia Bibliográfico-Mariana. Fue presentado por don Manuel López Pérez. Como anécdota hemos de consignar que la preparación del pregón suscitó bastantes reticencias entre el sector mas integrista de la Cofradía, por aquello de que el pregonero “no era de Jaén” Su texto está publicado, si bien por las reticencias a que antes aludimos no llegó a ver la luz hasta 1994. 11 XXII.- El poeta don Felipe Molina Verdejo (19241997), Consejero del Instituto de Estudios Giennenses y académico de la Bibliográfico-Mariana fue el encargado del Pregón de 1986, que se pronunció en el salón de Radio Jaén en la mañana del domingo 1 de junio, siendo presentado por don Manuel López Pérez Culminó con un concierto ofrecido por la Coral de la Escuela Universitaria del Magisterio. El Pregón está publicado. 12 10 Ver ONCE DE JUNIO. (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1984. Academia Bibliográfico-Mariana pp. 35-48. 11 Ver ONCE DE JUNIO (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1994. Academia Bibliográfico Mariana. Pp. 19-36. 12 Ver ONCE DE JUNIO (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1994. Academia Bibliográfico Mariana. Pp. 37-50
XXIII.- El Pregón de 1987 lo pronunció en la mañana del domingo 31 de mayo, en el salón de Radio Jaén, don Manuel Caballero Venzalá (1925-1995), Canónigo de la S. I. Catedral, académico de la Real de la Historia, Consejero del Instituto de Estudios Giennenses, Cronista Oficial de Martos y numerario de la Academia Bibliográfico-Mariana. Fue presentado por el pregonero del año anterior. A su término hubo un concierto en el que intervino Maruja Yera Quintana, acompañada al piano por Miguel Moya de Moya. Tras este Pregón volvería a plantearse el eterno debate, lastrado de personalismos cofrades, del quien, como y donde del Pregón, asumiendo ya en solitario la Cofradía la organización del acto. La experiencia de los años 1979-1987 no fue –hay que consignarlo en honor a la verdad- lo gratificante que debiera, pues al existir un sector disconforme con la celebración del pregón afloraron las desidias y menudearon las faltas de colaboración, por lo que aspectos básicos en materia protocolaria y de organización (invitaciones, decoración del estrado, difusión del acto, etc) ofrecieron excesiva precariedad y espartana modestia, lo que no ayudaba precisamente a consolidar el acto, que no obstante se consiguió perpetuar. La secuencia de los pregones pronunciados desde entonces ha sido la siguiente: XXIV.- Año 1988. Año Mariano. El sábado 28 de mayo y en el Paraninfo del Conservatorio pronuncia el Pregón el M. I. Sr. don Fernando Gallardo Carpio (1930-2006), canónigo de la S. I. Catedral, que fue presentado por el pregonero del año anterior. Se acompaña con un concierto de trompa de Miguel A. Colmenero, del Real Conservatorio de Madrid, acompañado al piano por don Gerardo López. XXV.- Año 1989. VII Año Jubilar. El domingo 4 de junio por la mañana y en el Paraninfo del Conservatorio pronuncia el Pregón don Ramón Guixá Tovar, cronista de la Agrupación de Cofradías, que fue presentado por el pregonero anterior. Le sigue un concierto de piano de José M. Cuenca Moral. Este Pregón está publicado.13 13 Ver ONCE DE JUNIO (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1995. Academia Bibliográfico-Mariana. Pp. 59-84.
El Descenso
en 1957. Fue presentado por el pregonero del año anterior. Este pregón está publicado.10
125
XXVI.- Año 1990. El domingo 27 de mayo, por la mañana y en el Paraninfo del Conservatorio pronuncia el Pregón don Carlos María López Fe, doctor en Psicología, al que presentó el pregonero anterior. A continuación hubo un concierto de piano a cargo de Rafael Quero Castro. El Pregón está publicado.14 XXVII.- Año 1991. El viernes 31 de mayo y en el Paraninfo del Conservatorio pronunció el Pregón don Miguel Calvo Morillo, poeta, Pregonero Mayor de Martos y académico de la Bibliográfico-Mariana. Fue presentado por el anterior pregonero. Se complementó con un concierto de la Coral “Virgen de Guadalupe”, de Úbeda. Está publicado.15 XXVIII.- Año 1992. En la noche del sábado 31 de mayo y en el Paraninfo del Conservatorio pronuncia el Pregón don Andrés Molina Prieto, canónigo de la S. I. Catedral, de la Sociedad Mariológica Española y la Pontificia Academia Internacional de Roma, Consejero del Instituto de Estudios Giennenses y miembro de la Academia Bibliográfico-Mariana, que fue presentado por el pregonero anterior. A continuación el Orfeón Santo Reino ofreció un concierto. Este Pregón está publicado. 16 XXIX.- Año 1993. El sábado 28 de mayo, en el Paraninfo del Conservatorio, pronuncia el Pregón don Pedro Morales Gómez-Caminero (1922-1996), periodista, exdirector del Diario Jaén y académico de la Bibliográfico-Mariana, que fue presentado por el Hermano Mayor don Juan Carlos Escobedo. Se acompañó con un concierto del Orfeón Santo Reino. Está publicado.17
El Descenso
XXX.- Año 1994. El viernes 27 de mayo en el Paraninfo del Conservatorio pronuncia el Pregón don
126
14 Ver ONCE DE JUNIO (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1995. Academia Bibliográfico Mariana. Pp. 85-104. 15 Ver ONCE DE JUNIO (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1995. Academia Bibliográfico-Mariana. Pp. 105-118. 16 Ver ONCE DE JUNIO (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1994. Academia Bibliográfico Mariana. Pp. 51-66. 17 Ver ONCE DE JUNIO (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1994. Academia Bibliográfico Mariana. Pp. 67-84.
Isidoro Lara Martín-Portugués (1942-2010), historiador y académico de la Bibliográfico-Mariana, al que presentó el pregonero anterior. Después el Orfeón Santo Reino ofreció un concierto. Está publicado. 18 XXXI.- Año 1995. VIII Año Jubilar. El viernes 26 de mayo, en el Paraninfo del Conservatorio pronuncia el Pregón el Excmo. Sr. don León Herrera y Esteban (1922-2003), General del Cuerpo Jurídico del Aire, ex ministro de Información y Turismo e Hijo Ilustre de Jaén, al que presentó el pregonero del año anterior. Le siguió un concierto del Orfeón Santo Reino. Está publicado. 19 XXXII.- Año 1996. El viernes 31 de mayo en el Paraninfo del Conservatorio pronuncia el Pregón don Guillermo Sena Medina, Fiscal del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, Cronista Oficial de La Carolina y miembro numerario de la Academia Bibliográfico-Mariana. Fue presentado por su antecesor. Hubo un concierto del Orfeón Santo Reino. Está publicado. 20 XXXIII.- Año 1997. El viernes 30 de mayo, en el Paraninfo del Conservatorio, pregona las fiestas don Luis Coronas Tejada, catedrático de Historia de la Universidad de Jaén y miembro de la Academia Bibliográfico-Mariana, al que presentó el pregonero anterior. Le siguió un concierto del Orfeón Santo Reino. Está publicado. 21 XXXIV.- Año 1998. El viernes 5 de junio y en el salón de actos de la Real Sociedad Económica pronuncia el Pregón el periodista y dibujante José Villar Casanova “Vica”, al que presentó su antecesor. Hubo
18 Ver ONCE DE JUNIO (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1995. Academia Bibliográfico Mariana. Pp. 119-138. 19 Ver ONCE DE JUNIO (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1996.Academia Bibliográfico Mariana. Pp. 119-138. 20 Ver ONCE DE JUNIO (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1997. Academia Bibliográfico Mariana. Pp. 55-76. 21 Ver ONCE DE JUNIO (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1998. Academia Bibliográfico Mariana. Pp. 31-42.
XXXV.- Año 1999. El viernes 4 de junio y en el salón de actos de la Real Sociedad Económica pronunció el pregón la popular cantaora Rosario López Carrascosa (Charo López), presentada por su antecesor. Le siguió un concierto del Orfeón Santo Reino. XXXVI.- Año 2000. IX Año Jubilar. El domingo 28 de mayo por la mañana y en el Teatro Darymelia pronunció el Pregón el periodista don Lorenzo Molina Gallego (1930-2002), director de Radio Jaén en los años 1973-1995., al que presentó la pregonera anterior. Cerró el acto el Orfeón Santo Reino. XXXVII.- Año 2001. El domingo 3 de junio, a las doce de la mañana y en el teatro Darymelia, pronuncia el Pregón el poeta Javier Cano Expósito. A continuación hubo un concierto del Orfeón Santo Reino. XXXVIII.- Año 2002. En la noche del viernes 31 de mayo, en el salón de la Real Sociedad Económica, pronuncia el Pregón don Emilio Luis Lara López, Licenciado en Humanidades y profesor de Enseñanza Secundaria, al que presentó su antecesor. Le siguió el consabido concierto del Orfeón Santo Reino. XXXIX.- Año 2003. El sábado 31 de mayo en el salón de la Real Sociedad Económica de Amigos del País pronunció el pregón el abogado don Vicente Herrera del Real, presentado por el pregonero anterior. Seguidamente hubo un concierto del Orfeón Santo Reino.23 XL.- Año 2004. El 28 de mayo, viernes, en el salón de la Real Sociedad Económica, pronuncia el Pregón el P. Santiago Martín Rodríguez, periodista y fundador de los Franciscanos de María. Cerró el acto el Orfeón Santo Reino. Mas que un pregón, fue una conferencia. 22 Ver ONCE DE JUNIO (MISCELANEA DE ESTUDIOS MARIANOS). Jaén, 1999. Academia Bibliográfico Mariana. Pp. 165-198. Incomprensiblemente se interrumpió aquí esta miscelánea y con ello la recogida y publicación sistemática de los pregones, lo que ha motivado la pérdida de muchos de ellos. 23 En la revista EL DESCENSO , núm. 1 (2004), pp. 88-92 se recogen fragmentos del Pregón.
XLI.- Año 2005. El viernes 27 de mayo, en el Teatro Darymelia pronunció el Pregón el M. I. Sr. don Rafael Higueras Álamo, Deán de la S. I. Catedral. Fue presentado por don Manuel Bueno Ortega, capellán de la cofradía. Intervino el Orfeón Santo Reino con un repertorio específico sobre la Virgen de la Capilla. Está publicado. 24 XLII.- Año 2006. X Año Jubilar. El sábado 27 de mayo y en el salón del antiguo Hospital de San Juan de Dios, pronuncia el Pregón don José Luis López Fuentes, magistrado de la Audiencia Provincial de Málaga. Fue presentado por don César Carazo Gil, secretario de la Cofradía. Cerró el acto el Orfeón Santo Reino. Está publicado. 25 XLIII.- Año 2007. El viernes 25 de mayo y en el Teatro Darymelia, pronunció el Pregón el M. I. Sr. Don Francisco-Juan Martínez Rojas, Deán de la S. I. Catedral. Fue presentado por el cofrade don Esteban Espinilla Ortiz. Intervino el Orfeón Santo Reino. Está publicado. 26 XLIV.- Año 2008. El viernes 30 de mayo, en el Teatro Darymelia, pronuncia el Pregón el periodista Fernando Arévalo Ruiviejo (1946-2009). Fue presentado por el pregonero del año anterior. Cerró el acto el Orfeón Santo Reino. XLV.- Año 2009. El 28 de mayo y en el Teatro Darymelia, pronunció el Pregón el arzobispo de Mérida-Badajoz y antiguo obispo de Jaén don Santiago García Aracil. Fue presentado por el canónigo don Juan Herrera Amezcua. Cerró el acto el Orfeón Santo Reino. Como dato anecdótico hay que consignar que el pregonero sufría una inoportuna afonía. Está publicado. 27 XLVI.- Año 2010. El sábado 29 de mayo y en el Teatro Darymelia pronunció el Pregón don AnicetoEduardo López Aranda, cofrade. Fue presentado por el canónigo don Pedro J. Martínez Robles. Actuó el Orfeón Santo Reino. Está publicado.28 24 25 26 27 28
Ver revista EL DESCENSO, núm. 3 (2006), pp. 61-70. Ver revista EL DESCENSO, núm. 4 (2007), pp.. 59-67. Ver revista EL DESCENSO, núm. 5 (2008), pp. 26-36. Ver revista EL DESCENSO, núm. 7 (2010), pp. 21-28. Ver revista EL DESCENSO, núm. 8 (2011), pp. 82-90.
El Descenso
un concierto del Orfeón Santo Reino. Está publicado.22
127
XLVII.- Año 2011. El domingo 29 de mayo, a las doce de la mañana, en el Teatro Darymelia, pronuncio el Pregón el periodista don Antonio Garrido Gámez. Fue presentado por el pregonero del año anterior. Cerró el acto el Orfeón “Santo Reino”. De lo expuesto se deduce que el Pregón de las Fiestas de Nª Sª de la Capilla, Patrona de Jaén, ha sido un acto que a lo largo de su dilatada trayectoria ha tenido distintas etapas y formatos, estando siempre condicionado por una serie de factores exógenos que a la larga han malogrado, que al igual que ocurre con el Pregón de Semana Santa y otros pregones cofrades de la ciudad, tenga el rango y el atractivo que exige y merece. Ciertamente la nómina de pregoneros ha sido excelente, pero los continuos cambios de fecha, hora, espacio, ceremonial…, motivados esencialmente porque en estas fechas del año resulta complicado atraer público a eventos de estas características, hicieron que el Pregón haya estado envuelto, un año tras otro, en no pocas incertidumbres, e incluso que en ocasiones se experimentase sustituyéndolo por otro acto cultural. Otro aspecto a considerar es la necesidad de recoger el texto de los pregones y perpetuarlos con la perennidad que da la letra impresa. Sería pues conveniente efectuar una paciente tarea de recopilación de los muchos pregones que no vieron la luz y formar con ellos un volumen que permita su re-difusión y re-lectura. Aunque mucho nos tememos que tan necesario empeño pudiera ser complicado, dado que son bastantes los pregoneros ya fallecidos. No estaría pues de más, abrir un sosegado debate sobre el tema, pues la singularidad de nuestras fiestas patronales bien que lo merece.
El Descenso
PREGONEROS DE LAS FIESTAS DE NUESTRA SEÑORA DE LA CAPILLA, PATRONA DE JAÉN.
128
1.- 1944: Ángel Cruz Rueda. 2.- 1950: Gerardo Diego Cendoya. 3.- 1953: Rafael Laínez Alcalá.
4.- 1957: José Chamorro Lozano. 5.- 1958: Salvador Vicente de la Torre González. 6.- 1959: Alfonso Montiel Villar. 7.- 1960: Manuel Vilaplana Ugena. 8.- 1962: Pedro Palop Fuentes. 9.- 1972: José Ruiz de Gordoa y Quintana. 10.- 1978: Miguel Sánchez Martínez. 11.- 1979: Manuel López Pérez. 12.- 1980: Vicente Oya Rodríguez. 13.- 1981: Manuel Vilaplana Ugena (Lo fue también en 1960) 14.- 1982: Rafael Ortega Sagrista. 15.- 1983: José Chamorro Lozano. (Lo fue también en 1957) 16.- 1985: Ramón Molina Navarrete. 17.- 1986: Felipe Molina Verdejo. 18.- 1987: Manuel Caballero Venzalá. 19.- 1988: Fernando Gallardo Carpio. 20.- 1989: Ramón Guixá Tovar. 21.- 1990: Carlos María López Fe 22.- 1991: Miguel Calvo Morillo. 23:- 1992: Andrés Molina Prieto. 24.- 1993: Pedro Morales Gómez-Caminero. 25.- 1994: Isidoro Lara Martín-Portugués. 26.- 1995: León Herrera Esteban. 27.- 1996: Guillermo Sena Medina. 28.- 1997: Luis Coronas Tejada. 29.- 1998: José Villar Casanova. 30.- 1999: Rosario López Carrascosa. 31.- 2000: Lorenzo Molina Gallego. 32.- 2001: Javier Cano Expósito. 33.- 2002: Emilio-Luis Lara López. 34.- 2003: Vicente Herrera del Real. 35.- 2004: Santiago Martín Rodríguez. 36.- 2005: Rafael Higueras Álamo. 37.- 2006: José Luis López Fuentes. 38.- 2007: Francisco-Juan Martínez Rojas. 39.- 2008: Fernando Arévalo Ruiviejo. 40.- 2009: Santiago García Aracil. 41.- 2010: Eduardo Aniceto López Aranda. 42.- 2011: Antonio Garrido Gámez.
EL PATRONZAGO DE LA VIRGEN DE LA CAPILLA SOBRE JAÉN. UNAS PRECISIONES Manuel López Pérez Director de la Academia Bibliográfica-Mariana “Virgen de la Capilla”
Una antigua tradición asentada, no sobre la realidad documentada y cierta, sino sobre ingenuas leyendas y hagiografías, aseguraba que la ciudad de Jaén fue tomada por el Santo Rey don Fernando III de Castilla el día 25 de noviembre de 1246, festividad de Santa Catalina de Alejandría. En su virtud, desde aquel mismo momento quedó aceptada como Patrona y celestial protectora de la ciudad. Y así quedó admitido, sin más, por la piedad popular, de lo que todavía es vestigio una inscripción labrada sobre los muros del Castillo jaenés, donde se dice: “…Según tradición / el XXV de Noviembre / de MCCXLVI día de / Santa Catalina, Alhamar / Rey de Granada entregó / este Castillo a Fernando / III el Santo, quedando / desde este día proclamada / la Santa, Patrona de Jaén…”. La fundación en 1382 del Real Monasterio de Santa Catalina Mártir, de los PP. Dominicos, vino a reforzar de manera interesada esta piadosa creencia,
estableciendo la costumbre de celebrar cada año en dicho convento y el 25 de noviembre, una solemne fiesta en honor de la Santa de Alejandría, a la que se asociaba el Concejo Municipal que corría con los gastos. Así se aceptó generalmente, de manera que en los sínodos diocesanos celebrados en 1478 y 1492 durante los pontificados de los obispos don Iñigo Manrique y don Luis Osorio, en su constitución séptima se estableció: “…E por cuanto la ciudad de Jaén, título y cabeza de nuestro Obispado, fue ganada de los infieles día de Santa Catalina Virgen por revelación y milagro suyo, cuya fiesta la dicha ciudad tiene en gran veneración, mandamos que de hoy en adelante sea celebrada de seis capas…”. Y luego en las Sinodales de 1511, 1586 y 1624 la fiesta se ratificará, de forma que cuando en 1644 el obispo don Baltasar de Moscoso y Sandoval ordena el calendario de los santos propios de la Diócesis, al 25 de noviembre señala: “…In festo Sanctae Catharinae Virgini et Martyris, civitatis giennensis Patronae, duplex primae clasis cum octava Gienni tantum…”. (“… En la fiesta de Santa Catalina, Patrona de la ciudad de Jaén, doble de primera clase con octava; pero solo en Jaén…”) Finalmente, el Ayuntamiento, en sesión de 2 de junio de 1597, fijó por ordenanza el modo y manera en que había de celebrarse la festividad de Santa Ca-
El Descenso
Con mas frecuencia de la deseada y como un ritornello localista y cofradiero, hay quien desde posiciones interesadas e integristas pretende reavivar una inexistente polémica sobre el patronazgo compartido en Jaén entre Santa Catalina de Alejandría y Nuestra Señora de la Capilla, instaurando, incluso, unos inexistentes “co-patronazgos”, por lo que consideramos oportuno y conveniente divulgar una precisiones merecedoras de atenta lectura con las que trataremos de aportar algo de luz al tema.
129
talina, insistiendo una vez más en que la raíz de la devoción era por haberse liberado Jaén de manos de la morisma, el 25 de noviembre de 1246. Con lo que ya en 1654, Jimena Jurado podrá aseverar: “…Es Santa Catalina Patrona de Jaén y su día en ella es de fiesta y se celebra con oficio doble de primera clase, con octava en toda la ciudad y el Cabildo Secular de ella va todos los años en forma de ciudad desde las casas de su Ayuntamiento al convento de religiosos de Santo Domingo, cuya iglesia está dedicada a esta Santa, a asistir la tarde antes del día de la fiesta a las Vísperas y en el día siguiente a la misa mayor…”.
El Descenso
Sabido es, que desde muy antiguo la Iglesia considera Patrón/a de un lugar a una advocación del santoral bien arraigada y señalada, a la que la piedad del pueblo tiene por intercesor/a y de quien impetra protección y ayuda para un colectivo o un pueblo concreto. Este patronazgo, en la mayoría de las veces, no tiene otra certificación jurídico-canónica que la de ser una tradición piadosamente admitida por sucesivas generaciones. En determinadas ocasiones ha sido la autoridad episcopal quien mediante decreto ha validado el patronazgo. Y en muy contadas veces, es la Santa Sede la que de forma solemne y universal proclama la legalidad de tan ansiado título.
130
En nuestros casos mas cercanos hay Patronas tan señaladas como la Virgen de la Fuensanta, Patrona de las Cuatro Villas; Nª Sª de Zocueca, Patrona de Bailén; Nª Sª de Tíscar, Patrona de Quesada; Nª Sª del Alcázar, Patrona de Baeza; Nª Sª de Guadalupe, Patrona de Úbeda…, cuyo patronazgo es admitido simplemente por una lejana e histórica tradición. Hay otras, cuyo título ha sido expresamente avalado por un decreto del Obispo, caso de Nª Sª de Linarejos, Patrona de Linares así declarada en 1757; Nª Sª del Castillo, Patrona de Vilches, por decreto episcopal de 1784; Nª Sª de la Estrella, Patrona de Navas de San Juan, con declaración de 1897 o mas recientemente, el polémico caso de Mancha Real, donde por decreto del obispo don Miguel Peinado, de 1972, se declaró Patrona a la Inmaculada Concepción, en detrimento de la Virgen del Rosario cuyo patronazgo había sido el aceptado y celebrado desde tiempo inmemorial. Y se cuentan con los dedos los casos en que ha sido la Santa Sede, a través de la Sagrada Congregación de
Ritos, la que ha avalado el patronazgo con declaración expresa, como ocurrió cuando Pío X en 1909 declaró a la Virgen de la Cabeza, Patrona de Andujar. En el caso concreto de Santa Catalina de Alejandría, su patronazgo sobre la ciudad de Jaén remanece de una antiquísima tradición, impulsada por los PP. Dominicos, aceptada por los obispos de la Diócesis y apoyada por el Concejo de la ciudad, pero sin una declaración expresa y formal recogida en documento adecuado. Sería el Ayuntamiento de Jaén el que, en cumplimiento de lo dispuesto en la Real Orden de 14 de mayo de 1822 que prohibía a los ayuntamientos españoles encabezar y patrocinar fiestas religiosas, a excepción de la del Corpus Christi y la del Patrón/a de la localidad, determinó, por acuerdo de 8 de junio de 1822, oficializar a Santa Catalina de Alejandría como Patrona y Protectora de la ciudad, celebrando su fiesta con solemnidad. Perdida la vigencia y utilidad castrense del Castillo de Santa Catalina y extinguido el convento de los PP. Dominicos, la fiesta y figura de Santa Catalina y su tradicional patronazgo cayó en olvido, si bien el obispo don Antolín Monescillo consiguió que en 4 de mayo de 1876, Pío IX restableciera la festividad de Santa Catalina como fiesta local de Jaén, bajo el doble precepto para los vecinos de Jaén de oir la Santa Misa y abstenerse de trabajos serviles. De modo y manera, que ya en las primeras décadas del siglo XX tal patronazgo no pasaba de un recuerdo histórico, sobre el que el cronista Cazabán Laguna escribía pesaroso en 1921: “…Mañana, día de Santa Catalina, Jaén no alterará sus costumbres. Nada de regocijo tradicional habrá en él. Unos cuantos muchachos subirán a la cruz del Castillo…; algunas familias irán a comer al cerro coronado por la antigua fortaleza…; la Iglesia rezará sus preces de rúbrica…El pueblo, un año más, pasará indiferente, frío, ajeno a lo que representa el día…”. Y es que ya la crítica histórica había puesto de manifiesto, con contundentes aportes documentales, que Jaén no se ganó a los moros el 25 de noviembre de 1246, sino en la primavera – un día indeterminado de marzo/abril- de 1246 y que la intervención de la
Hasta que en 1964 el entusiasta de Manuel Pestaña Sánchez creara la Cofradía de Santa Catalina de Alejandría y en 1966 empezase a celebrar con pompa y solemnidad la romería al Castillo, el patronazgo de Santa Catalina no tuvo otra trascendencia pública que la de un nostálgico recuerdo histórico. Paralelamente a este culto a Santa Catalina, desde el siglo XVI, empieza a tener especial relevancia, tanto en la religiosidad oficial como en la popular, la imagen de la Virgen María venerada en la recoleta Capilla de la Visitación de Nuestra Señora, que se alzaba anexa y a espaldas de la iglesia parroquial de San Ildefonso. Imagen que empieza a conocerse bajo la peculiar advocación de Nuestra Señora de la Capilla y a la que con frecuencia el pueblo de Jaén acude en los días en que se celebran rogativas públicas, momento en que el Cabildo Catedral, el Concejo Municipal y los obispos y Curia Diocesana la invocan, celebran y agasajan como celestial protectora y Patrona de Jaén, instaurando así un patronazgo mas emanado de la tradición admitida por el pueblo. La devoción de las gentes a esta imagen alcanzará ya en los años finales del siglo XVI altas cotas de popularidad, de forma que cuando en 1639 el licenciado don Antonio Becerra, prior de San Ildefonso y capellán mayor de la Virgen, publica su celebrado “Memorial en que se hace relación del descenso de la Virgen Santísima Nuestra Señora”, no duda en proclamar algo que ya era común en los muchos sermones que se predicaban ante su imagen en su capilla-santuario de San Ildefonso : “…Que bienes, Santísima Señora, no nos podemos prometer los moradores de esta ciudad, habiendo Vos en ella puesto vuestros soberanos ojos, prometiendo en esto ser nuestra peculiar Patrona, abogada, medicina y remedio singular de los afligidos…”. Desde entonces fue uso común, que sin otra declaración expresa que la de la ferviente devoción comunitaria, a la imagen de la Virgen de la Capilla se la empezase a considerar Patrona de Jaén, título que se populariza con intensidad a partir del siglo XIX en
convocatorias de fiestas, “tablas” de cultos, publicaciones, sermones, poesías…, etc. Y como los afanes del animoso don Vicente Montuno Morente (1892-1975) por enxtender y engrandecer la devoción a la Virgen de la Capilla, la creación de su Real Cofradía en 1926 y la celebración de los fastos de la Coronación Canónica de la Virgen de la Capilla en 1930, propiciaron en algunos “eruditos” disquisiciones localistas sobre en quien había de fijarse el Patronazgo de Jaén si en Santa Catalina, la Virgen de la Capilla o Nuestro Padre Jesús -así lo entendía y pretendió don Manuel Mozas Mesa (18981980)-, ante la celebración del Año Santo de 1950, coincidente además con el II Año Jubilar de Nª Sª de la Capilla y auspiciado por la Cofradía, se generó una entusiasta iniciativa comunitaria para solicitar de la Santa Sede la declaración expresa y oficial, del Patronazgo de la Virgen de la Capilla sobre Jaén. A tal efecto se promovió un expediente al que se unieron informes y peticiones razonadas del Excelentísimo Cabildo Catedral, Excmo. Ayuntamiento de Jaén, Venerable Universidad de Curas Párrocos, Seminario Diocesano, autoridades locales y provinciales, las diferentes ramas de Acción Católica, cofradías y asociaciones piadosas y la Real Cofradía de Nuestra Señora de la Capilla, expediente que el obispo don Rafael García y García de Castro elevó a S. S. Pío XII acompañado de esta ferviente exposición: “…Beatísimo Padre: El infrascrito Dr. Don Rafael García y García de Castro, Obispo de Jaén, en España, a los pies de Vuestra Santidad humildemente postrado, ruega con el mayor encarecimiento, en nombre propio y de toda la ciudad de Jaén que en la antiquísima imagen de la Santísima Virgen María, que con el título de Nuestra Señora de la Capilla es venerada con singular culto y devoción, sea declarada por Vuestra Santidad, juntamente con Santa Catalina Virgen y Mártir, Patrona Principal de esta ciudad de Jaén. Nos mueve a tal petición los escritos a Nos enviados por el Cabildo Catedral y la Universidad de Curas Párrocos, Autoridades civiles y militares, Diputación y Audiencia Provincial y por los dirigentes de la Acción Católica y de todas las cofradías.
El Descenso
Santa en tal hecho histórico no pasaba de ser una ingenua leyenda, luego revestida de supuesta certeza y verosimilitud por los “falsos cronicones”.
131
De esta declaración esperamos gran provecho para las almas y para honra de la Madre de Dios. Jaén, 18 de marzo del Año Jubilar de 1950…”. Corrían entonces vientos muy favorables para este empeño ya que desde diciembre de 1948 era Embajador de España ante la Santa Sede don Joaquín Ruiz-Giménez Cortés (1913-2009). Este eminente hombre público, aunque no era de Jaén, sentía un especial afecto por nuestras cosas, ya que su progenitor fue el ilustre hijo de Jaén don Joaquín Ruiz Jiménez (1854-1934). De ahí que atendiera con predilección cuanto desde Jaén se le solicitaba, máxime si las peticiones las recomendaban fraternales amigos de su padre como el abogado don Virgilio Anguita Sánchez (1879-1960), de cuya casa fue huésped en mas de una ocasión. El expediente al que antes hemos aludido encontró en don Joaquín Ruiz-Giménez Cortés un firme valedor ante la Santa Sede, de forma que en breve plazo desde Roma llegaba al Obispado de Jaén la siguiente comunicación:
El Descenso
“…Sagrada Congregación de Ritos.- G. 14-950.
132
El Excmo. y Rvmo. Sr. Don Rafael García y García de Castro, Obispo de Jaén, en España, recogiendo de grado los votos del Rvmo. Capítulo Catedral y Universidad de Curas Párrocos, de los Gobernadores Civil y Militar, Alcalde del Municipio, Diputación y Audiencia Provincial, así como de los dirigentes de la Acción Católica y de todas las cofradías, con todas las veras rogó al Santísimo Señor Nuestro Pío Papa XII, que benignamente se dignase declarar y constituir Patrona Principal de toda la ciudad de Jaén a la Santísima Virgen María bajo el popular título de Nuestra Señora de la Capilla, cuya antigua imagen es venerada con singular devoción y culto. La Sagrada Congregación de Ritos, haciendo uso de las facultades peculiares que le han sido concedidas por el mismo Santísimo Señor Nuestro, ha accedido benignamente, según las preces y ha constituido y declarado a la Santísima Virgen María con el título popular de Nuestra Señora de la Capilla, Patrona Principal de toda la ciudad de Jaén, junto con Santa Catalina Virgen y Mártir, con todos los derechos y privilegios convenientes según las rúbricas, sin que obste nada en contrario.
Día 29 de mayo de 1950. J. Cardinales Micara, Prefe. Acarini, Arzobispo de Seleucia, secretario…”. Tan pronto se conoció tan venturosa noticia, a través de un telegrama recibido en el Obispado a las doce de la mañana del día 11 de junio de 1950, el obispo García de Castro la confirmó en una vibrante alocución a través de los micrófonos de “Radio Jaén”. Al atardecer, todas las campanas de la capital empezaron a repicar jubilosamente, siendo muchos los balcones y ventanas que empezaron a engalanarse espontáneamente con colgaduras, banderas y reposteros para manifestar la alegría colectiva. En San Ildefonso la imagen de la Virgen se colocó en el altar mayor y a las nueve de la noche, con el templo repleto de fieles, se ofició un Te Deum de acción de gracias, tras el cual el obispo don Rafael García y García de Castro pronunció un fervoroso sermón. Al ser Año Jubilar, se dispuso que todos los sábados acudieran ante la Virgen de la Capilla, una tras otra y en masiva peregrinación, las distintas parroquias de la capital, para oficializar, simbólicamente la “toma de posesión” del Patronazgo. Finalmente, el 16 de junio, fiesta del Corazón de Jesús, el obispo hacía pública una carta pastoral anunciando de manera oficial la concesión del Patronazgo. Como vemos, no hay motivos fundados para insinuar ningún tipo de disfunciones patronales u honoríficas, ni para inventar interesados “co-patronazgos”. El decreto de la Santa Sede lo deja bien claro: la Santísima Virgen María, bajo el título de Nuestra Señora de la Capilla, queda declarada Patrona Principal de toda la ciudad de Jaén, junto con Santa Catalina Virgen y Mártir. Es decir, la declaración de la Sagrada Congregación de Ritos de 29 de mayo de 1950 fija canónicamente el Patronazgo de la Virgen de la Capilla sobre Jaén y a su vez valida de manera pública y solemne el patronazgo de Santa Catalina, hasta entonces solo sancionado por una dilatada tradición popular y devocional. Hermosa ligazón que había quedado plásticamente recogida en el bellísimo Retablo del Descenso, donde las gubias de Francisco Calvo y José de Medina representaron a la Madre de Dios acompañada en su visita a Jaén por las figuras de San
favores y recuerdo están tan vinculados a nuestra historia local…”.
No caigamos, pues, en bizantinas disquisiciones de adjudicación de patronazgos ni “co-patronazgos”, ni en prelaciones honoríficas, ni en rivalidades devocionales. Porque como bien dijo en su día don Juan Montijano Chica (1899-1988), Arcipreste de la Santa Iglesia Catedral de Jaén, meticuloso historiador y ferviente panegirista de ambas advocaciones, “…conviene tener las ideas claras en este asunto y dar gracias a Dios, aun con mayor fervor por habernos concedido tener ante su trono como Patronas y protectoras a la Santísima Virgen de la Capilla, que tanto dice y recuerda a los hijos de Jaén, y a la virgen y mártir Catalina, cuyos
Quédanos por apuntar, que no estaría de mas se promoviese una paciente búsqueda ante los archivos de la Sagrada Congregación de Ritos, en Roma y del Obispado de Jaén, para localizar el expediente de solicitud y concesión del Patronazgo y darlo a conocer, pues curiosamente las gestiones que en diversos momentos se realizaron para ello no tuvieron éxito. Y ese es documento que bien merece detenido estudio y adecuada publicación. Entre otras cosas para disipar dudas y documentar precisiones históricas y devocionales.
El Descenso
Ildefonso y Santa Catalina de Alejandría tan veneradas desde el medievo en nuestra ciudad.
133
IN MEMORIAM PACO: “UN HOMBRE BUENO, UN GRAN HOMBRE” Juan Francisco Pancorbo Rueda
Las primeras palabras que se me vienen a la cabeza son aquellas mismas que repetí hace pocos meses, “un hombre bueno, un gran hombre”, porque así de sencillo y humilde quiero recordar a mi padre. Un hombre bueno por y para su familia, en su trabajo, en su vida cotidiana, para con la Iglesia y la Virgen de la Capilla, y todo eso hace que sea un gran hombre. Cuando me ofrecieron la posibilidad de escribir estas líneas lo primero que hice fue ponerme en manos de nuestra Virgen de la Capilla, para que de alguna manera me ayudara a redactar este pequeño homenaje a mi padre, a “Paco el que reza el rosario”, como todo el mundo lo conocía.
El Descenso
Venimos de una familia humilde y trabajadora y desde pequeño siempre me visto en mi casa una imagen, un cuadro, una estampa de nuestra Señora de la Capilla. Mis padres me enseñaron a rezarle, a mirarla a pedirle pequeñas cosas y hoy compruebo que muchas de esas peticiones se han ido haciendo realidad.
134
Siempre ha tenido una sonrisa, un detalle de cariño para con su familia y su Virgen y desde hace muchos años ha venido colaborando en su parroquia y con la Cofradía en multitud de eventos, siempre de forma desinteresada y con la humildad de quien hace las cosas con la devoción de un hijo hacia su Madre. Y tuvo que ser un día 11 pero del mes de Enero cuando Nuestra Señora de la Capilla tuvo el detalle de llevárselo a su lado. No podía ser otro día, no
podía Dios haber elegido un día mejor para subirlo al cielo, donde está, y estoy convencido de que está muy cerca de su Virgen, mirándola por fin frente a frente y permitidme la licencia de poder decir que en muchos momentos le cogerá de la mano y hablaran de sus cosas y le pedirá que no nos deje y nos ayude siempre bajo su manto protector.
Muchísimas personas han sentido como nosotros el dolor por su pérdida y desde estas líneas quiero agradecerles todas las muestras de cariño y los rezos que por mi padre han realizado. Ahora que pasan 5 meses desde que “Paco ya no reza el rosario” en su querida Parroquia de San Ildefonso, se nota un vacío irremplazable y como hijo solo puedo decir que se que esta bien, que no os preocupéis que desde arriba nos está sonriendo y velando por nosotros.
El Descenso
No quiero despedirme sin hacer mención a un sentimiento que me corre por el alma en estos momentos y que quiero compartir con vosotros y es que tengo la certeza de que cuando el próximo día 11 salga por las calles de Jaén Nuestra Señora de la Capilla mi padre irá a su lado, rezando la Salve y con su vela iluminando el hermoso rostro de Nuestra Madre.
135
Nツコ
9 SEGUN GU DA A ETAPA A / Aテ前 201 0 2
Nツコ 9 SEGUNDA ETAPA Aテ前 2012
El Descenso
D escenso El