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Chistes, Historietas y Cuentos a granel!!!
2 Ediciones Revistas digitales ‘‘Comics del Altillo’’ Director y Editor Responsable : Williams Gezzio Colaboradores: Ernesto Cantonnet, Pablo Dobrinin, Enrique Ardito, Lito, Kilo, Pedro del Pío, Sipa, Claro,Omar De los Santos,Willy, Chobi, y todos aquellos que quieran estar con sus cuentos y dibujos.
Pedidos para distribución de esta revista: egezzio@gmail.com BOLETIN DE SUSCRIPCION EDICIONES COMICS DEL ALTILLO JOSE E. RODO 2282 BIS-MONTEVIDEO-URUGUAY CP.11200
NOMBRE.......................................................... APELLIDO........................................................ DIRECCION..................................................... CP.......................................................................
E
r e Humosé E. Rodó stado d , Jo
LTILLO S DEL A GUAY ta COMIC o - URU N° 3 -Edi ontevide M 01120 . P C pl s em ar 2282 bi cada ej ay: $ 60 parcial ra Urugu o l pa ta o to ci Pre ucción la reprod mero ohibida este nú Queda pr icadas en bl pu DEL textos y S s IC jo de COM de dibu timiento o consen es pr ex s. re sin el os auto spectiv y sus re ALTILLO
TEL...................................................................
Invitamos...
CIUDAD...........................................................
...a todos los que crean que tienen alguna dote para el dibujo o el guión de humor
CON UNA X
a enviarnos sus colaboraciones para que, en caso de que llenen los requisitos de nuestra revista, sean publicados, pero eso sí, que sean buenas fotocopias y sin ningún compromiso de nuestra parte. ¡A dibujar y escribir! Esperamos sus obraspor email: egezzio@gmail.com.
REVISTA ’’ESTADO DE HUMOR’’ MARQUE
LA ELEGIDA
6 NUMEROS: $ 300 12 NUMEROS $ 550 FORMA DE PAGO: CONTADO
*EL FLETE SERÁ PAGADO POR EL CLIENTE AL RECIBIR LAS REVISTAS.
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¡RÁPIDO EL VIEJITO!
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¡Sonrí a TODAV que IA es gratis!
AQUÉL VIEJITO DE 80 AÑOS SE HABÍA CASADO CON UNA CHICA DE
20. UNO DE SUS BISNIETOS, LE PREGUNTA MUY CONFUSO: -NONO, ¿UD. SE CASÓ POR EL REGISTRO CIVIL Y TODO? -SEGURO, M´IJO... -NONO, UD. TIENE 80 AÑOS, ¿Y ELLA 20, NO? -SÍ, ¿Y QUÉ HAY CON ESO? -ES QUE CUANDO UD. TENGA CIEN, ELLA VA A TENER 40... -ES QUE A LOS CUARENTA ES LA MEJOR EDAD DE LA MUJER, M´IJO ...
últimas palabras
Cantidad La maestra dando su clase de ecología a sus alumnos. -Niños, como ustedes saben, se necesitan unas cincuenta nutrias para hacer un tapado... Y Juancito, que está sentado en la última fila, pregunta: -¡Pááá! ¿Y cómo hacen para enseñarles, maestra?
Estaban dos borrachitos en un velorio, al costado del cajón del amigo fallecido... -Pensar que hasta hace un ratito nomás estaba con él, tomando unos vinitos... ¡hic!...y se me vino a pelar, así nomás...y sus últimas palabras fueron para mi, compadre... -¡Qué tragedia, ¡hic!... compadre!...¿Y qué fue lo que le dijo el finadito? -¡Socorro, me muero!!!
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Retrato Aquella señora adinerada era muy poco agraciada pero ella quería hacerse un retrato con el pintor de la ciudad para darle envidia a sus amigas del club de rummy. Y cuando fue al estudio a verlo terminado, se puso furiosa: - Pero ¿qué retrato me ha hecho, anormal? ¡No se me parece en nada! ¡Me ha pintado con una cara de tarada que no cabe en la tela!!! - Disculpe, señora, -le señaló el pintor- Pero lo que Ud. está mirando no es su retrato. Es un espejo. - No te preocupes, Germán, que nosotros tenemos la preferencia...
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Alerta Dos compañeras de trabajo, en la oficina dialogan: -¡Uf, me caigo de sueño! ¡No pude pegar un ojo en toda la noche! -Pero, ¿no habías empleado a una chica para que cuidara a tu marido que está en convalescencia? -¡Por eso mismo no pude pegar un ojo!!!
Falsa alarma La temperamental señora se dirige hacia la puerta con una valija en la mano. Y mirando a su marido que lee el diario, le grita: -¡No te alegres, imbécil! ¡Sólo voy a hacer arreglar esta valija!
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nito sexoloco
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Un caradura como pocos
Don Gordo
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on Gordo arrinconó a su amigo “el corto” Paván y hasta que éste no soltó los 1.000 pesos –‘‘en calidad de préstamo’’, le dijo-; no lo dejó libre, resignándose el pobre “corto” a que nunca más los volvería a ver aquellos billetes. -¡Pero, ché! – exclamó el flaco Jorge, cuando vió que el gordo guarbaba celosamente los billetes en su bolsillo- ¿Y para llevar a tu novia al cine y a comer un cacho de pizza, necesitás tanta guita? -¿Cacho de pizza? ¡Qué sabés vos, flaco bichicome!...-repuso el gordo mirándolo despectivamente- ¡Andá sabiendo que cuando este macho saca a su minita de fiesta, lo hace como un verdadero gentleman! Y mucho más tratándose de la
‘‘Víctima de sabotaje’’ preciosura de Martita, que ha sido criada en cuna de oro y le escapa a la mediocridad...Cada vez que salgo con ella, me resulta más caro que si comprara un traje de Armani, mirá lo que te digo... -¿Quién es ese Armani, ché? –preguntó el desubicado Jorge -¿Otro de tus acreedores? El gordo se limitó a ignorarlo y se fue bamboléandose, feliz de tener el “capital” a buen recaudo... Al día siguiente, Don Gordo y Martita Pietralagua, elegantísimos ambos y en un remise alquilado por ella, fueron hasta un cine del shopping a ver una película con Brad Pritt, actor éste del cual Martita es ferviente admiradora. Al gordo, el asunto no le hizo mucha gracia. Y durante la proyección de la película, como ella lanzara grititos y suspiros de admiración cada vez que aparecía el tal Pritt, no aguantó más y le increpó, mordiéndo de rabia:
-¡Bueno, ché, terminala con tanto suspirar por ese esqueleto, porque me levanto y me voy, eh!...¿Yo soy tu novio o estoy pintado acá? ¡No sé que tiene ese coso que yo tenga, bah! -Pero, bichi...¿Es que una no puede admirar a un gran actor? -¡Actor ese, si no ha cambiado la expresión en toda la película! La gente al oir tanto resoplido tuyo me mira a mí. Como soy gordo, se cree que he reventado el fuelle de la butaca donde estoy sentado.¡Mirá el papelón que me estás haciendo pasar! Quedaron un largo rato alunados, sin decir palabra. Y al finalizar el espectáculo, como el gordo advirtió que su novia había quedado muy molesta, para rehabilitarse la llevó a cenar a la Plaza de Comidas del shopping, que a ella le gustaba mucho. Pero el sinverguenza ya tenía elaborado un plan. Para darse “dique” con su novia, pidió lo mejor de la carta; y lo más caro. Langosta en salsa a la
9 francesa, acompañada de un vino blanco chileno. Pavo trufado, bifes a la portuguesa, omelette surprise, sundae de marrón glacé...El pícaro gordo parecía un empresario en viaje de placer y tenía a los mozos corriendo de un plato para otro. Cuando estaba en la mitad del postre, disimuladamente sacó de uno de sus bolsillos un montoncito de vidrio molido y se lo echó al sundae, sin que Martita lo advirtiera, para lo cual la hizo mirar a una elegante dama, el vestido que llevaba. -¡Ay,ay,ay!...¡Memuero,me muero!... -gritó desaforadamente el atorrante, arrojándose al piso y tomándose el estómago con ambas manos- ¡Saboteadores! ¡Aquí hay vidrio molido y yo me lo comí todo, aj, aj!!!¡Ay, me muero! ¡Martita, no me dejes! ¡Ay, ay, ay! Se armó un revuelo de película. Corrieron los mozos, el due-
ño del local e infinidad de comensales curiosos para prestarle atención al gordo que se revolvía de “dolor” en el piso y seguía gritando y atacando a la comida del restaurat... -¡No me explico cómo ha podido ocurrir este desastre!-repetía deses-
peradamente el dueño del negocio, agarrándose la cabeza. El gordo, ayudado por varios comensales, fue llevado hasta el remise para que junto a su novia, lo trasladaran urgentemente a un centro médico. Al arrancar el coche, el desvergonzado se compuso... -¡Qué suerte, amor! ¿Te sentís mejor? –le preguntó Martita, temblando aún por la emoción. -¡Callate, sonza!...-le dijo el gordo soltando la carcajada- ¡Si yo no llegué a comer donde estaba el vidrio molido...! -Y entonces. ¿por qué te revolcaste del dolor y decías que te morías? – preguntó la chica que no entendía nada... Y el gordo, con total desverguenza le contestó: -Lo hice para ganar tiempo. ¡Porque al traerme la cuenta, que sería de varias cifras, me hubiera tenido que revolcar del dolor después que me agarraran a patadas...!!!!
Fin
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es e u q o c o p n u Sonrei g r a t is ! Unico -¿Cómo te das cuenta cuando entra un gallego a una zapatería? -...Mmmm, no sé... -¡Porque es el único que se prueba las cajas! Sincero -¡Guenas, don Braulio! ¿Cómo amaneció hoy? -¡Ah, no sé, cuando yo me levanté, ya había amanecido!
De a tres -Decime, ché, ¿ a vos te gusta el sexo de a tres? -Sí, seguro... -Entonces apurate. Andá pa´ tu casa que ya empezaron sin vos...
Angustia Aquél hombre lloraba en la entrada de la iglesia y le comenta a su amigo: -No acostumbro a llorar en los casamientos, Pepe, pero éste es el mío...
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El Canilla LIBRE / Gezzio
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a que h c u c Es on! notici
Esta revista nos da la posibilidad de publicar cuentos, chistes, dibujos, historietas; cualquier cosa que sepamos hacer y así dar a conocer nuestros dibujos! Pero eso sí: que sean ideas originales, tanto los cuentos como los dibujos, porque si nos damos cuenta que son copiados no los publicamos. Pueden enviarlos por email(resolución 240 dpi y en jpg) a egezzio@gmail.com
Exprimite esa neurona y date el gusto de publicar en ’’estado de humor‘‘!
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s i s to r i a h s e d as Gran ontad c s á jam por Pedro del Pío
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uenas, vengo por la cuestión de los seguros; quisiera asegurarme... -¡Ha llegado al lugar indicado, señor! Nuestra empresa, “Servidora segura”, es pionera en seguros y afines desde hace más de cincuenta años...¿Qué clase de seguros desea el señor? -Y, vea...yo no entiendo mucho. He visto un folleto de ustedes que tienen un seguro contra la lagarta, ese bicho... -Así es, señor...¿Desea asegurarse contra la lagarta usted? ¿En qué lugar tiene sus campos? -¡Campos? ¡Yo no tengo ni un terreno! ¿Para qué quiero campo?
¡Quiero arme me,, asegur gurar ase gur ar me or...! por ffa avor ...! -Pero...si no tiene campos... ¿Adónde quiere que vaya la lagarta? -¡Qué se yo! Ese es problema de ellas, y no mío... -Pero es que sin campos no hay lagartas y sin lagartas no hay seguro contra la lagarta...¿Me explico? -¿Y granizo? ¿No me puede asegurar contra granizo? -¿Y el campo? Usted tiene que tener un campo sembrado, para que le caiga el granizo, le destruya todo y entonces, el seguro le pague...¿Comprende? -Yo creo que ustedes lo que buscan son solo inconvenientes para no asegurarme...
-No, señor, no...¿Por qué no toma un seguro contra robos, por ejemplo? -¿Contra robos? ¿Contra robos de qué? -De sus propiedades...Alhajas, muebles, libros, ropas, cuadros, alfombras, etc... -No tengo nada de eso... -Hágase un seguro contra rotura de cristales...¡Eso! ¡Asegúrese los cristales y listo! -¿Los cristales? ¿Qué cristales? -Los de las vidrieras...Usted tiene cristales en la vidriera...Piense, los chicos juegan frente a su comercio...un chico patea, otro le sale a la defensiva, éste lo gambetea y apunta y tira y
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LA REVISTA DE BOLSILLO
¡Pronto aparecerá!
¡gooollll! -¿Para qué me cuenta un partido de fútbol? ¡Y de niños todavía...! -¡Para hacerle imaginar que la pelota que ese chico pateó pegará en su vidriera rompiendo todos sus vidrios! ¡Vidrios valorados en varios miles de pesos que a usted le ha costado desembolsar de su bolsillo! ¡Pero...usted viene a nuestras oficinas de la “Servidora segura”, con la póliza del seguro y nosotros le pagamos los vidrios rotos! ¿Qué le parece? -Pero si yo no tengo vidriera...¡Y menos comercio! ¡Ni lentes uso! Así que, de vidrios nada... -¿Y por qué no saca un seguro
de vida? ¡Idea genial; asegúrese la vida y asunto arreglado! -¿Y cuando cobro? -Primero tiene que morirse, mi amigo. La compañía paga enseguida de su muerte...apenas el médico extienda el certificado de defunción, un empleado nuestro, pagará a su esposa la suma de... -Debo decirle que no soy casado... -A sus hijos, entonces...O a su abuelo, a sus cuñados, a sus primos o hermanos o tíos, o a su amante...Firme aquí, por favor y liquidemos el asunto... -No tengo parientes...; ni un pa-
riente...; ni medio pariente siquiera... -¡Pero mire que da lástima usted! ¿Por qué no se mete en un asilo, señor? En sus condiciones, lo mejor que puede hacer es meterse en un asilo... -Gracias, muchas gracias: ese es el consejo que estaba necesitando...¡Adiós y muchas gracias! -Adiós, amigo, y no se olvide que “Servidora segura”, está siempre a las órdenes de quienes quieran un buen seguro...pero SEGURO que no para usted...
Fin
ACCION-A VENTURAS-HUMOR CCION-AVENTURAS-HUMOR
EL ESCURRIDIZO 18
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22 rato apenas un Drama en
Ella y Por ÉlOmar De los Santos ‘‘Un amigo de la facultad’’
ÉL: (Llega al apartamento. Pone cara de cansancio y tira el maletín en el sofá.) -¡Uf, qué día, señor, qué día! ELLA: (Sigue mirando el teleteatro como si nada.) –No dejes el maletín sucio en cualquier lado... ÉL: -¡Qué bien la señora! ¡Uno llega muerto de cansancio, luego de todo un día de trabajo en esa oficina de miércoles y ella solo dice:‘‘¡No dejes el maletín sucio!” ¡Como si este maletín trajera droga o que se yo qué cosas! ELLA: (Sigue mirando la tele. Muerde una galletita dietética, con miel dietética, of course.) –Te lo pedí con buena educación...
ÉL: (Entrando en cólera, pero no mucho.) -¡Sí, la que te dieron en tu casa! ¿No? ¿O acaso tu viejo no dejaba sus puchos tirados por todos lados y tu vieja vivía rezongándolo?... ELLA: (Sin quitar la vista de la telenovela, donde la actriz derrama litros de lágrimas televisivas.) Yo no me meto con tus padres...Dejá a los míos tranquilos... ÉL: (Pone marcha atrás y disimulando) –Bué...¿tomaste mate?... ELLA: -¿No te acordás que estoy a régimen? ÉL: -¿Y el mate qué te hace? ¡No me vas a decir que te engorda ahora! ELLA: (Llorando junto a la actriz de la tele y secándose las lágrimas
con papelitos descartables.) –No tengo ganas ...¡Snif, snif! Tomá vos...¡Snif, sniff!!! ÉL: (Abriendo el grifo, con la caldera en la mano) -...tá bien. Linda forma de atender al marido que viene del trabajo. Después no quieren que uno no se deprima y... ELLA: (De pronto recuerda algo) ¡Ah, te llamó un tal Horacio!... Dejó dicho que lo llamaras... ÉL: (Casi se prende fuego un dedo con el encendedor) -¡Horacio! ¿Y recién me lo decís? ELLA: -Recién llegás... ÉL: (Sacándole la yerba seca al mate) –Pero, ¡Horacio! ¿No sabés que es el tipo que hizo más guita que el Banco Central, en los últimos tiempos? ELLA: (Haciendo zapping. La telenovela acaba de terminar.) -Mmmm, en algo andará... ÉL: -¡Es mi amigo de la infancia y adolescencia! Fuímos a la facultad juntos...Ël siguió...y mirá vos, es abogado...A mí me quedaron algunas materias...pero, ¡qué bocho para los negocios el Horacio!
23 ELLA: (Sigue con el zapping) –No salvaste primero... ÉL: -¡Qué decís! Yo dejé por los líos...La vieja pasaba muchos nervios por aquellas huelgas y me dediqué a otros estudios... ELLA: -¿Vas a tomar mate?... ÉL: -Primero voy a llamar a Horacio. ¡Quién te dice que me tire con algún negocito o algún milloncito! Total, uno más, uno menos, qué le hace a él...¡Ese sí que está forrado de verdes! ELLA: -Mmm... (Empezó otra telenovela y se borró de escena) ÉL: (Discando los números) -¡Qué gran tipo este Horacio! ¡Se acordó del amigo Antonio!...¡Estos son los amigos de
fierro que uno hizo en la juventud!...Como cinco años que no lo veo...¡Hola! ¡Sí!...¡Hola! ¿Quién habla? ¡Ah, señora, habla Gambelli, el amigo de Horacio!...¿Que qué amigo? Fuímos juntos a la facultad de Derecho...Sí, él se recibió... No, yo no soy abogado...No...
¡Sí!...¡No!...¿Qué si conozco alguno? ¿Y que sea bueno? ¿Muy, muy bueno?...Y...mañana consulto en la oficina...Ah, tiene que ser rápido...¿Que nadie le quiere salir de abogado? ¿Y dónde lo tienen? Ah, en la Central... Eeee, bueno, señora, si sé de alguien la estoy llamando. Sí, hasta mañana. No, ¡no se preocupe!...Me hago cargo... ELLA: (Comiendo la primer galletita dietética de la segunda bolsa abierta y casi absorta por la novela) –No me cuentes nada. Andá a tomar mate... ÉL: (Todavía con el tubo en la mano) -¿Dónde tenés las pastillas de tranquilizantes?... Si llega a llamar de vuelta la señora de Horacio, decile que me fuí al Japón...¡Por tres o cuatro años; por asuntos de negocios!... ¿Quién conoce a las personas? ELLA: -Dale, que después no cenás nada... Telón piadoso sobre Él que sigue con el teléfono en la mano...
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Nicolás Parletti Padrón 31112 funcionario público, UN CARADURA
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es t s i 3 ch un r o p eso p por Ernesto Cantonnet
d e l de p or te
cosas
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29 Curso El de la escuela de conductores intenta convencer a una futura alumna: -Nuestro curso es el más completo de hay en plaza, señorita –le aseguró- Además de enseñarle a manejar, también le enseñamos un montón de palabrotas para que las use contra
chispazos Olvido
-¡Otra vez te olvidaste! ¡Te dije que hicieras un nudo en el pañuelo! -Lo hice...¡Pero me olvidé del pañuelo!
otros automovilistas... Inoportuno
El lechero acaba de tocar el timbre de la casa a las seis de la mañana. Cuando aparece la dueña, aún medio dormida, éste le pregunta: -¿Puede usted leerme la nota que me dejó? Olvidé los anteojos...
Despistado -Nunca me olvidaré de la noche en que Felipe me llevó a la rambla –le decía la chica a una amiga – Era una noche extraordinaria; con una brisa fresca y perfumada, y una luna enorme que brillaba tanto que hasta se podía leer el diario... -¡Qué romántico, ché! ¿Y, qué pasó? -¡Felipe se puso a leer el diario nomás!...
borrachazos Iban Don Curdelli y un amigo en un auto, cuando éste le gritó: -¡Eh, ese puente se nos viene encima! ¡Hic! ¡Desviá el coche, ché! -¿Qué? -dijo Don Curdelli - ¿Qué me desvíe? ¡Hic! ¿Pero es que, acaso, el que va manejando soy yo?
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LOS CUENTOS DE DON LARA
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quella mañana, el hijo de la cocinera de la estancia estaba contento como no lo habíamos visto nunca desde nuestra llegada. A la hora del almuerzo, aprovechamos para preguntarle el porqué de aquella alegría. Y el muchachito nos dijo que Nubarrón, su gato negro preferido, había vuelto después de dos días de ausencia.
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“Gato aquerenciau”
astó aquella información del muchachito para que la conversación se generalizara sobre “gatos que habían sabido volver a la querencia en que los llevaran a leguas y leguas de lejos”... Y así fue como cada uno de los comensales colocó su consabida narración. Y cuando parecía que el tema estaba totalmente agotado, Don Lara, que según su costumbre había estado escuchando en silencio mientras preparaba la pava, comenzó diciendo: -“No solo pa´ la gente sino pa´los animalitos del Señor, que a todos los quería, cariciaba y protegía el güeno del Florencio. Ansí jué, como güelta a güelta era como cáiba al rancho con un tero con una pata quebrada, una vizcacha que había sacau diuna trampa, un tordo enganchau en un alambre é púa. ¿Y saben pá qué los yebaba al
rancho? ¡Pá curarlos y dejarlos en libertá! Era el único consuelo que le quedaba, porque la Meneca, un ají é mala, que era su mujer, no le toleraba el más insignificante ´e los bichos en el rancho. Solamente dispués de mucho pedirle y rogarle el Florencio, le dejó tener un gato. Lo había encontrau nun nidal, que no tendría más de cuatro días. Con su santa pacencia, el Florencio lo crió con leche, y de noche lo dejaba dormir en la cocina pa´que no se lo matara el frío. Ansí jué qu´el animalito creció y se hizo gato robusto y querendón. Y el Florencio vivía feliz con su gato. Hasta quin buen día, la mujer que había encontrau pelo ´e gato en un almohadón del rancho, puso el grito en el cielo y le dijo, digo, dijp, que esa mesma noche se yevara el gato ese y lo dejara tirao al otro lao del arroyito...Mala la
31 Meneca cuando se le ponía una cosa... Obediente y mansito, el Florencio con tal de no oir los gritos ´e la Meneca, agarró el gato, lo acarició un güen rato, lo metió en una bolsa ´e arpillera, ensiyó el tobiano y al galope tendido, se jué hasta el otro lao del arroyo. Volvió triste y aplastau. Pero a los tres días el alma le volvió al cuerpo cuando estaba en la cocina con el mate recién empezau, “¡miau, miau!” ¡el barcino que había güelto! ¡Vieran la alegría di aquél crestiano! ¡Y hubieran oído los alaridos ´e la Meneca!... ¡Cómo haberán sido qu´esa mesma noche partió el Florencio de güelta con el gato embolsau y campo ajuera!
Galopió tres días antes de encontrar un lugar bien escondido y alejáu pa´dejar el gato. Y ayí, partiéndosele en dos el corazón, abrió la bolsa y en un santiamén, dió vuelta el cabayo y talonió juerte p´alejarse cuanto antes del lugar...
Pero no le valió de nada... Apenas habería pasau una semana, cuando “¡miau, miau!” ¡el gato que había güelto! ¡El pobrecito era cuero y güesos nomás pero mauyaba feliz de verse otra vez al lau del patroncito que lo había criau!... Pero bien dice el refrán que lo güeno dura poco: ver la Meneca el gato y ponerse como loca jué la mesma cosa. Los alaridos se oyeron en leguas y leguas a la redonda...Y ayá salió otra vez el pobre del Florencio a cabayo con el gato en la bolsa pa´yebarlo bien lejos... Imagínen lo que habrá galopeau durante días y días, qu´esta vez el gato no volvió al rancho...” Ibamos a interrumpirlo con una exclamación de asombro, cuando el viejo, con aquél tono socarrón que ya le conocíamos, finalizó: -“...¡ni el Florencio tampoco!” Omar de los Santos
Fin
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l lito en e desierto
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Tenía ochenta años. Llevaba cincuenta de matrimonio. Cuando se enojaba con su esposa, amenazaba: -¡Un día de éstos, me mato! Pero un día su esposa se
cansó y le dijo: -¡Ma sí, matate! -El viejo lo pensó, se rascó la cabeza y murmuró: -Y...Ahora, no. ¡Total...para lo que me falta!...
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Ya sale la revista para todos los chicos.
No te la pierdas! Pronto en la red, para leer y descargar gratuitamente .
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estribo... los del estribo ... Apur Apuraado
Can ib al it is Canib ibal alit itis
-¡Siempre el mismo impaciente, Julio!- dijo uno de los médicos- ¡Esta autopsia bien que podía esperar hasta mañana! -¡Está bien; reconozco que tenés razón! –admitió el otro. – El pobre pedía a gritos una anestesia.
-Para esta noche, invité a un amigo a cenar -advirtió el caníbal a su mujer. -Muy bien -dijo ella. -¿Cómo querés que te lo prepare?
Dibujos: Lito
Parec Pareciido –Papá -dijo el niño -Esta mañana, en la escuela, un chico me dijo que yo era igualito a vos... -¿Ah, sí?...¿Y vós que le contestaste, Carlitos? -Nada. Si era más grande que yo...
¡ Hasta el p ró x im o número a m ig o s
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¡COMPLETA LA COLECCIÓN! BALAZO N° 1.........$ 100
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El último y nos vamos...
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? O D N A R E P S E S a T S E e U Y Q