recursos del Gobierno Central, dejando a sectores en el desamparo y a los gobiernos estatales solos frente a los retos. Para no ir lejos, literalmente hemos tenido que enfrentar la crisis de salud solos, ni siquiera lo que estaba comprometido y firmado ha llegado en tiempo y forma. Por si esto fuera poco, el panorama para el 2021 se presenta más dramático y desalentador, porque de acuerdo al proyecto de presupuesto enviado por el Gobierno Central a la Cámara de Diputados, se pretende profundizar y agregar más recortes, como la desaparición del Programa de Fortalecimiento para la Seguridad, el FORTASEG, que durante los años de su vigencia, ha ayudado a que los municipios enfrenten su responsabilidad. Sobre todo, para el mejoramiento de las capacidades institucionales de sus policías municipales, es el caso de Morelia, Uruapan, Lázaro Cárdenas, Apatzingán, Zamora, Pátzcuaro, La Piedad, Ciudad Hidalgo y Zitácuaro. El próximo año estos municipios no contarán con estos recursos, de no corregirse esta iniciativa. Sumado a esto, está prevista una reducción del Gasto Federalizado en todas las Entidades y Municipios del país, para Michoacán el recorte en el año 2021, como ya lo dije, asciende a siete mil 728 millones de pesos. Estos recursos se han utilizado para la seguridad pública, educación, salud, combate a la pobreza, obras en regiones y municipios, apoyos alimentarios, construcción y rehabilitación de escuelas y centros deportivos. El próximo año el estado no recibirá estos recursos, y se quedará sin inversión. Y por si fuera poco, perdemos además 900 millones de pesos por la cancelación del Fondo Regional y del Fondo Metropolitano. Para completar el cuadro, se cancelan 12 programas educativos, destaco el programa de tiempo completo para Michoacán, que afecta
a más de 25 mil maestras y maestros. Por cierto, esta decisión perjudica a la población más vulnerable y más necesitada, porque cubría educación, alimentación y estancia de 125 mil niños y niñas. A todo lo anterior, como mencioné al inicio, se suma la reciente desaparición de 109 fideicomisos, por parte de diputados federales y senadores de las fracciones parlamentarias de MORENA y sus aliados en el Congreso, sin un análisis previo y suficiente, de todo el impacto negativo que esto implica, y sin tener construido un mecanismo claro que sustituya y dé certeza a los beneficiarios, para compensar todos los compromisos que se cubrían con estos recursos, incluso, violando o eliminando derechos adquiridos de personas y grupos vulnerables. Es falso que el motivo de su eliminación, hayan sido los malos manejos y la corrupción, otra vez el mismo “cuento”. Si algún instrumento financiero tiene reglas y mecanismos de auditoria y transparencia, son justamente los fideicomisos. Hay que recordar que esta figura no nació ayer, sino hace varios siglos, y desde entonces ha sido utilizada en muchos países, porque da certeza del manejo del dinero, para que llegue a los beneficiarios. Sin embargo, lo que es real, es que con la falsa justificación, de que todo es corrupción, se ha concentrado el poder y los recursos públicos en el Gobierno Central, atentando contra toda lógica, incluso por encima de los ordenamientos legales. Contra todo lo que se ha dicho, hay que precisar, que eran muchas y muchos los michoacanos los que recibían apoyos directos, gracias a 109 fideicomisos federales. Por ejemplo. • Diez mil ex braceros michoacanos, adultos mayores que trabajaron en Estados Unidos, aún no reciben su pago de pensión, y hoy se encuentran en la incertidumbre ante la
desaparición del fideicomiso a través del cual se les pagaría. • Miles y miles de productores del sector agroalimentario se quedarán sin poder tener acceso al financiamiento rural con la eliminación del Fideicomiso de Financiera Rural. • También, se verán afectados todos los deportistas mexicanos y medallistas olímpicos de alto rendimiento, que recibían apoyos de los fideicomisos deportivos ahora desaparecidos. • Además, quedará trunco el apoyo para la rehabilitación de miles de viviendas de familias afectadas, caminos, vialidades, cosechas, por la desaparición del Fondo Nacional de Desastres Naturales, FONDEN. • Se reduce toda la posibilidad de desarrollo de infraestructura con la desaparición del Fondo Minero, de los Fondos Regionales y del Fondo Metropolitano, de los cuales se contaba con recursos para el desarrollo de obras de alcantarillado, de tratamiento de aguas residuales, de tratamiento de basura y de desarrollo urbano. Al concretarse la eliminación de estos, Michoacán dejará de recibir más de mil 300 millones para el próximo año. Hay que decir también, que la desaparición de estos 109 fideicomisos también afecta el trabajo académico, de investigación y de enseñanza, afectando desde luego, todos los centros de investigación de Michoacán. Eso es gravísimo, si se considera que nuestro país tiene un retraso de décadas, en las áreas de desarrollo e investigación tecnológica. Sin los apoyos que garantizaban los fideicomisos, la situación se va poner peor todavía. En el estado, por ejemplo, tenemos varios centros de investigación de excelencia como el Colegio de Michoacán, que durante años ha sido casa de muchas generaciones de académicos, investigadores y estudiantes, y que desafortunadamente MACROECONOMÍA 10 DE NOVIEMBRE DE 2020 19