Licenciatura en Sociología. Unidad: Sociología de México. Ma. Yesenia Yáñez Carmona. 23/agosto/2019.
EL COLONIALISMO INTERNO Los problemas internacionales son intercambiables. La idea de civilización ha correspondido sobre todo a un análisis internacional o universal de la historia; mientras la noción de sociedad dual o plural ha correspondido a este mismo análisis, que además abarca territorios subdesarrollados. El concepto colonialismo ha buscado señalar sobre todo un fenómeno internacional, que se lleva a cabo entre pueblos y naciones distintas como las “naciones proletarias” o “estratificación social de naciones”. El objetivo es precisar el carácter relativamente intercambiable con la noción de colonialismo y de estructura colonial, haciendo hincapié en el colonialismo como un fenómeno interno. Se busca desarrollar no solo un fenómeno internacional, sino intranacional, como lo es la explicación de las antiguas nuevas colonias de América donde existe una sociedad plural. La noción de colonialismo interno solo ha podido surgir a raíz de un movimiento de independencia de las antiguas colonias. A partir aquí aparecen diversos tipos de independencia, como la política, la integral y se habla también de un neocolonialismo, con la creación del Estado-nación. Las clases altas están preparados para manipular a las masas desamparados, en una forma muy similar a la que emplean los amos extranjeros, cuyo dominio han roto, provocando la lucha de clases. El registro es esporádico, casi circunstancial, busca una definición estructural que pueda servir a la explicación sociológica e histórica del desarrollo, hace la distinción de clases sociales y la solución de conflictos. Interesa particularmente la capacidad explicativa de un colonialismo interno, su potencial de explicación sociológica del subdesarrollo y de explicación práctica de los problemas de las sociedades subderrarrolladas, para esto se necesita la tipificación del colonialismo como fenómeno integral, intercambiable de categorías y otra forma es ver como se ha comportado el fenómeno en una nación nueva. Originalmente el termino colonia se emplea para designar un territorio, ocupado por emigrantes de la madre patria. A mediados del siglo XIX, Merivalde le dio otro significado, lo describió como toda posesión de un territorio en que los emigrados europeos dominaban a los pueblos indígenas, a los nativos. Hoy colonialismo se traduce en el dominio que unos pueblos ejercen sobre otros, teniendo en cuenta que este término se ha caracterizado como violento. La delegación francesa señalo tres hechos para describir colonia: la dependencia en relación con un Estado, la responsabilidad ejercida por ese Estado, y la existencia de una población que no ha logrado completamente gobernarse a sí misma. Las características de una colonia: un territorio sin gobierno propio, que se encuentra en cuestión de desigualdad respecto a la metrópoli donde habitantes si se
gobiernan así mismos, que la administración y la responsabilidad de la administración conciernen al Estado que la domina, que sus habitantes no participen en la elección de los más altos cuerpos administrativos, que los derechos de sus habitantes, su situación económica y sus privilegios sociales, son regulados por otro Estado, esta situación corresponda a lazos artificiales, producto de una conquista, de una concesión internacional, y que sus habitantes pertenezcan a una raza y una cultura distintas de las dominantes, y hablan una lengua distinta. El concepto neocolonialismo, que surge después a lo colonial, no permite el análisis estadístico del colonialismo como una verdadera variable, un análisis dinámico que valla de la estructura colonial a la estructura independiente. El objetivo de las colonias que escribe Montesquieu hace más de doscientos años, es hacer el comercio en mejores condiciones del que se hace con los pueblos vecinos en que las ventajas son reciprocas, además de que solo la metrópoli puede negociar con la colonia, de esta manera impediría cualquier competencia. Las ganancias en cuestión deben ser algo exclusivo y monopolizado. Cuando el dominio colonial se extiende y fortalece es porque el monopolio también lo hace. La política colonialista, de acuerdo a Myrdal, consiste precisamente en reforzar el monopolio económico y cultural, mediante el domicilio militar, político administrativo. El monopolio aísla la colonia de otros imperios y otros países, y en particular de otros países coloniales. Myrdal redacta una serie de fenómenos característicos de la sociedad colonial: La colonia adquiere las características de una economía complementaria de la metrópoli, se integra a la metrópoli. La explotación de recursos naturales de la colonia, en función de la demanda de la metrópoli, los niveles de vida de las colonias son inferiores al de la metrópoli, pues es usada como monopolio, así los sistemas represivos predominan en la solución de conflictos de clases violentamente y perdurables. Todo es desigual. Esta desigualdad universal tiene particular importancia para la comprensión de la sociedad colonial, y está estrechamente vinculada a la dinámica de las sociedades duales o plurales, en el que la cultura dominante oprime y discrimina a la colonizada. La existencia de la sociedad dual o plural coincide y se entrelaza en efecto de la existencia de la sociedad colonial, aunque quepa distinguir entre colonias emigrantes, colonias de granjeros y colonias de explotación. Las sociedades coloniales tienden a ser plurales y una deshumanización de los colonizados. México es un país que hace 150 años logro una independencia política; que ha repartido 48 millones de hectáreas de tierra cultivable entre 2 millones y medio de campesinos, acabando con el antiguo sistema latifundista. El problema indígena de México se contempla en los círculos gubernamentales e intelectuales a pesar de la independencia. La explotación es combinada, mezcla del feudalismo, esclavismo, capitalismo, trabajo asalariado y forzado, aparecería el peonaje, servicios gratuitos, fue una manera de la discriminación y explotación que se dio en el país. [ CITATION Cas06 \l 3082 ] Casanova, P. G. (2006). Sociologìa de la explotación . Buenos Aires : CLACSO .