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PERIODISMO
En Jalisco, al periodista no se le mata, se le despide: Alberto Osorio Perla Blas / Corresponsal en Jalisco
Alberto Osorio.
despiden. Esto corresponde a la ejecución de un acto soberano de censura contra la libre expresión aquí en Jalisco”. Explica que días antes de su cese de la empresa, él tuvo conocimiento de que el director regional de MVS Jalisco, Jorge Martínez del Campo, sostuvo una reunión con el jefe de gabinete del gobierno del estado de Jalisco, Alberto Lamas Flores. Después de dicho encuentro, el directivo de la estación de radio entabló una conversación con el productor del noticiario, Víctor Hugo Magaña, donde a decir de Osorio, a éste se le reclamó por algunos contenidos que se estaban manejando, pero muy en especial el que hiciera referencia a trabajos periodísticos que realizaba la revista Proceso Jalisco. “Yo siempre fui muy cauto en el manejo de Proceso al aire, porque les causaba ruido el alto contenido crítico. El pedir que no se manejara tanto el nombre de la revista o sus contenidos, era ya un destello de por dónde iban y lo que iba a ocurrir”.
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En ese tenor algunos medios y periodistas han optado por la autocensura para no perder las fuertes cantidades de dinero que entran por publicidad de parte del gobierno. Y en otros casos se opta por pedir la cabeza de periodistas críticos o incómodos y que contravengan a los intereses de la relación entre el medio-gobierno. Tal es el caso del periodista Alberto Osorio, quien estuvo escasos seis meses como titular del noticiario matutino de MVS Jalisco, el cual se transmitía de lunes a viernes por la estación EXA, en un horario de 9:00 a 9:30 horas, inmediatamente después de que se interrumpía la transmisión del noticiario nacional de Carmen Aristegui. Es también autor de los reportajes Gobierno de Jalisco reparte más de 360 millones en publicidad y La mesa de estrategia… sucia, en la revista Proceso Jalisco. Mismos que parece no gustaron a los integrantes del llamado “cuarto de guerra”. En la única entrevista que ha concedido Alberto Osorio, relata la experiencia de su despido de MVS Jalisco y la situación que vive la mayoría de los medios de comunicación a consecuencia de la censura, autocensura y el precio a pagar por cuidar los contratos publicitarios. El 10 de septiembre, Alberto Osorio informó a través del micrófono a su audiencia: “No me despido, me
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uadalajara, Jal.- Ejercer el derecho de la libertad de expresión y garantizar el de la información, sin el riesgo de ser despedido, pareciera que se vuelve cada vez más complicado en Jalisco. Con el destape de la existencia de un llamado “cuarto de guerra” desde el cual se desprenden las estrategias en comunicación y un proyecto para desestabilizar a las fuerzas políticas de oposición, en específico al Partido Movimiento Ciudadano, son aquellos que han sido críticos con el gobierno en turno los que han padecido las consecuencias. Desde este “cuarto de guerra”, como se detalló en Zócalo (176), además se planifican los recursos a distribuir por contratos publicitarios a diversos medios de comunicación. Al frente de dicho grupo se encuentra Alberto Lamas Flores, quien se desempeña como jefe de gabinete y se le considera una persona muy cercana al gobernador de Jalisco, Jorge Aristóteles Sandoval Díaz. A este personaje, quien se ha vuelto clave en la relación que lleva el gobierno del estado con medios y periodistas, se le identifica como el que concreta los contratos publicitarios y se encarga de cuidar la imagen de su jefe, esto incluye todo lo “malo” que se publique de él en los medios.
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“Semanas antes me habían dicho que el programa iba en primer lugar de audiencia en el espacio de 9:00 a 9:30. Nos presentan algunos datos de que incluso estábamos subiendo un poco la audiencia de Carmen Aristegui, que ya de por sí lo dejaba muy alto”.
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-¿Cómo fue su despido? -El argumento concreto fue: “no eres el perfil de conductor que estamos buscando”. Su salida la describe como una situación abrupta y enfatiza que Jorge Martínez del Campo no se presentó en persona para decirle los motivos. “Ni siquiera tuvo los tamaños para decírmelo a la cara, que si hubiera sido así, yo en un acto de osadía le digo cómo se debe de negociar el pellejo de un reportero para que saque el mayor beneficio. “Yo fui a darle honorabilidad al espacio de MVS Jalisco y los resultados estaban a la vista, incluso ellos lo reconocían cuando andaban presumiendo que yo era lo que andaban buscando y luego se dieron cuenta de que quizá no los estaba beneficiando para amarrar los contratos publicitarios por lo que representa mi imagen en los medios y mi trabajo en Proceso Jalisco”.
Ni siquiera tuvo los tamaños para decírmelo a la cara, que si hubiera sido así, yo en un acto de osadía le digo cómo se debe de negociar el pellejo de un reportero. Al paso de los días para Alberto Osorio es claro que en realidad el perfil del conductor para el noticiario es el de una persona que les ayude a vender el espacio desde el punto de vista publicitario, y explica que el principal cliente es justamente Alberto Lamas Flores, “ahí
es donde todo se conjunta como en una pieza de la realidad que vive MVS Jalisco”, afirma. -¿Qué pasa en MVS Jalisco? -La periodista Cecilia Márquez abrió la plaza de MVS Jalisco en Guadalajara, en junio de 2013, dicho lanzamiento que se anunció con bombo y platillo duró apenas 10 meses al aire, trascendió que por presiones políticas y financieras, ésta había dejado el noticiario. Así también, dos meses después salió de la dirección que mantenía en la televisión pública del estado, el Sistema Jalisciense de Radio y Televisión (SJRTV), en el área de noticias, dicho sea de paso, se perfilaba como una de las “consentidas” por los directivos de la televisora. Cuando salió Cecilia Márquez, a Alberto Osorio lo llaman en calidad de “bateador emergente” para cubrir el espacio. Relata Osorio que su ingreso fue en el mes de marzo de 2014, y se le pidió que estuviera “un día o una semana”. “Cuando empiezo a trabajar de lo primero que me doy cuenta es que no estaba claro qué se quería”. A nivel nacional la marca de MVS y en especial el noticiario de Carmen Aristegui, se ha distinguido por el alto nivel crítico de sus contenidos y cuenta con prestigio y credibilidad entre la opinión pública y distintos sectores políticos y empresariales, es por ello que para Alberto Osorio es lamentable que en las regiones, como Jalisco, se busque no incomodar a las instituciones por los intereses que existen de por medio en cuanto a la firma de contratos publicitarios. Por las investigaciones que él ha realizado para Proceso Jalisco, afirma que existe evidencia de que la mayoría de los medios de comunicación en el estado “traen un cheque en la boca”, y se corre a los periodistas que incomodan en el
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trámite para amarrar los contratos de publicidad. -¿Vive Jalisco un momento de censura o autocensura? La mayor parte de los comunicadores en Jalisco viven bajo el yugo de la censura o amenazados por la autocensura que sin darse cuenta la dinámica ya los llevó ahí. Ya saben qué notas les van a parar en la edición o saben ya qué temas no se pueden tocar, afirma. Se está perfilando una situación muy compleja para los medios de comunicación y en particular para los reporteros que creen que pueden ir por la libre sin ser molestados o amenazados por sus redacciones o por personas al interior de los gobiernos. -¿Entonces, no se puede ir por la libre? -Tienes que vivir las consecuencias, y de por medio está la posibilidad de mantenerte activo en el medio y tu sueldo que es importantísimo. Si tú dependes únicamente de tu trabajo intelectual, llega el punto donde o respondes de manera graciosa ante esa situación, o empiezas a buscar otro tipo de trabajo si no estás en una casa editorial fuerte y que responda por ti en situaciones de hostigamiento o despido. Es dramático. Todos tienen evidencia de que hay presión. Se pueden hacer buenos negocios a cambio del silencio.
-¿Qué opinión le merece el desmentido por parte del gobierno del estado con respecto a que no existe el “cuarto de guerra”? -Que es una burla. La mejor forma de poder demostrar hasta dónde están metidos los funcionarios, es la forma en cómo operan.
Nosotros publicamos antes de que sucediera, el rompimiento del gobierno estatal con el Ayuntamiento de Tlajomulco de Zúñiga (único de oposición en la Zona Metropolitana de Guadalajara encabezado por Movimiento Ciudadano), y todo organizado desde el “cuarto de guerra”; a pesar de todo lo que publicamos, nada ni nadie los detuvo. -¿Tenemos algo de qué preocuparnos por la existencia de este “cuarto de guerra”? -Sí, porque se está trabajando desde una estrategia político-electoral. Si este “cuarto de guerra” estuviera diseñado para la elaboración y planificación de políticas públicas, de agenda para la sociedad y las problemáticas que enfrenta Jalisco, estaría justificado. Algo preocupante que ocurre en este “cuarto de guerra”, es que desde ahí sale el presupuesto que se le está dando a los medios de comunicación, porque por ejemplo son 380 millones de pesos actualmente gastados en medios, tal vez no es mucho para lo que tiene asignado de forma global, pero si lo comparas con todo ese presupuesto que no llega a los municipios más pobres, y que ese gasto en medios no da nada más que imagen, yo creo que es una forma perversa de estar invirtiendo el dinero. @BlasPerla
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-¿Hay un retroceso en Jalisco en libertad de expresión y transparencia? -Si se hace una comparación con el gobierno anterior que era panista, en su momento sí se ejerció el autoritarismo y se manejaba un doble discurso, pero siempre amarró muy bien sus contratos publicitarios con las principales empresas de medios. Actualmente hay un retroceso con relación a comparar con los gobiernos panistas, que ya es mucho decir. Todo lo que ha publicado Proceso tiene que ver con la información que hasta hace pocos meses estaba disponible en la página de transparencia del gobierno del estado de Jalisco, pero de repente transformaron totalmente el portal, los encargados de esto dicen que es para poner la página más accesible, pero en el fondo hay una seria afectación a la transparencia.
-¿Hay evidencia de que Alberto Lamas es accionista del periódico La Crónica de Hoy Jalisco? -En la edición de octubre de Zócalo (176) se hace referencia a las publicaciones de la revista Proceso Jalisco, resultado de las investigaciones de Alberto Osorio acerca de que el jefe del gabinete del gobierno del estado, es uno de los principales accionistas del periódico de reciente creación (11 meses), La Crónica de Hoy Jalisco, una filial de La Crónica de Hoy en la Ciudad de México, Hidalgo y próximamente en Michoacán. De este grupo editorial, es presidente el empresario Jorge Kahwagi Gastine y en Jalisco dirigen el diario los hermanos Guillermo y Benjamín Ortega Ruiz. Nosotros obtuvimos información que hacía referencia a que funcionarios de primer nivel del gobierno estatal son accionistas de La Crónica de Hoy Jalisco y no han podido demostrar que no, al contrario. Pero lo más curioso es lo que ocurre en el momento de amarrar, desde la presentación de los medios de comunicación, la primera plana, y no es propio de Crónica. De repente da la impresión de que otros medios como La Jornada Jalisco, Milenio Jalisco y otros, sufren cada 24 horas porque la primera plana se las dictan desde el gobierno del estado, no tengo la certeza de que así ocurra, ojalá ellos pudieran demostrar que no es así.
Algo preocupante que ocurre en este “cuarto de guerra”, es que desde ahí sale el presupuesto que se le está dando a los medios de comunicación.
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El fichaje de periodistas En Zócalo (176) se hizo referencia a la existencia de expedientes o fichas con información sobre el historial laboral y vida personal de reporteros que para el “cuarto de guerra” resultan incómodos. Dicha información fue publicada en Proceso Jalisco y conforme fue del conocimiento de más integrantes del gremio periodístico, esto causó molestia y preocupación. Alberto Osorio enfatiza que no se trata de un invento de Proceso. Si la revista tuvo acceso a esa información es porque la misma gente, dentro y fuera de la administración, interesada en que esto no ocurra, nos hace llegar estos datos tan preocupantes para cualquier gobierno que se diga democrático. El estar buscando la elaboración de fichas que contenga información de los reporteros que ellos consideran que hacen más ruido, hace pensar que pretenden controlar a como dé lugar.
Y todo parte de las publicaciones de Proceso donde se pone en evidencia cómo se están gastando 380 millones de pesos o más y los reparten entre diversos medios de comunicación.
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Yo no sé cuántos medios en Jalisco se puedan jactar de ir por la libre, atendiendo la agenda social.
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