La narrativa de César Verduguez Gómez

LA NARRATIVA DE CÉSAR VERDUGUEZ GÓMEZ

Homero Gómez Valdés2 y Claudia Margarita García Contreras3

Al leer los cuentos de Cesar Verduguez, empezamos por los últimos y los encontramos llenos de misterios rodeados

2 Nació el 25 de junio de 1943. Saltillo, Coahuila. México. Ingeniero Industrial en Mecánica y control de calidad. Pertenece a la Asociación de Cronistas e Historiadores de Coahuila de Zaragoza A. C. (1999-2022). Miembro del colectivo virtual de Poesía Mundial. Autor de 17 libros. Libros recientes: Águila de Obsidiana; cuentos y leyendas de por acá y por allá (2007), ¡No te dejas amar! Poemario con filosofía del amor (2009), Chalchihuicoatl —Introducción a conceptos filosóficos del pueblo Mexica— (12014), De Arqueología y cosas de esas (2015), Pepinillo y el hada del saber —cuento en verso— (2017), La otra revolución: historias sobre cómo vivió el pueblo mexicano su propia revolución (2019). 3 Nació el 24 de marzo de 1968 en Saltillo Coahuila México. Diseñadora gráfica. Desde el año 2018 pertenece a la Asociación de Cronistas e Historiadores de Coahuila de Zaragoza. A. C. y desde 2021 y al Colectivo virtual de Poesía Mundial. Publicaciones: Surge de pronto mi primer verso (2022), Para mi hija en sus dieciocho. ¡Feliz cumpleaños! (2022).

de una deliciosa narrativa de hechos, y finalmente leímos los dos primeros donde habla del covid-19 y ya influenciada por los misterios de cada cuento del autor, nos dejamos llevar por el misterio que envuelve también las escenas del covid. Ya no lo vimos como una noticia repetitiva que ya ni queremos escuchar, sino que vimos una realidad disfrazada de misterio con el que César Verduguez narra sus cuentos y podemos decir que quizá el autor hizo estos cuentos incluidos en el tema del covid19 para emitir su opinión, un poco de periodismo, llevando al lector la idea del misterio.

Las mismas realidades se han vivido también en nuestra ciudad de Saltillo, Coahuila México; contaban los abuelos que a diario pasaba el carretón de la muerte donde las personas ponían a sus difuntos. No dudamos de la realidad de cada una de las posibilidades que causaron esta pandemia. Solo es necesario agregar que existen sociedades internacionales en donde los integrantes ya no se pueden salir, los amenazan con matar a su familia. Las reuniones son cada año, hay científicos de todo el mundo, políticos, y demás hiervas de olor, hasta laboratorios reconocidos andan durante la reunión mostrando bolsitas de virus, ¡Varicela! ¡Varicela! ¿Quién quiere varicela? Y

antes de terminar la reunión los políticos están obligados a comprar algún virus a los laboratorios para soltar en su país y los vigilan para que si lo hagan. Y con gran temor alguno dice yo quiero un virus. Aquí está. Aquel laboratorio te va a vender el antivirus. Y lo tienen que comprar para controlar el virus en su país. Claro que hay premios a quien se arriesga. Premios como, por ejemplo, que de pronto mejoró la economía de su país.

A Homero y a Claudia nos han sucedido cosas misteriosas, pero reales, y nos encantó leer los cuentos de César Verduguez. En México algunos indígenas sepultaban a sus muertos con monedas en los ojos decían que les ayudarían en su viaje hacia el más allá.

En suma, hallamos cuentos rodeados de misterio y de historia, más que de terror.