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Cebada: todo listo para la campaña 21/22

Perfiles cargados, buena humedad y precios hacia arriba, la campaña cebadera arranca con viento a favor. El Ing. Agr. Fidel Cortese pasó por la jornada virtual de la regional Bolívar para hablar de manejo y mercado en este cultivo.

Por: Cortese, F. Regional Bolívar

La zona cebadera de Bolívar arrancó la campaña con muy buena humedad y perfiles cargados, lo que hace prometer un muy buen comienzo de cara a la siembra. En esa línea, la Regional Bolívar le dedicó un espacio importante a este cultivo dentro de su jornada virtual sobre cultivos de invierno y convocó al especialista Fidel Cortese para que brinde pautas de manejo y analice cómo está el mercado de cebada.

Un dato a tener en cuenta es que, en este cultivo, es clave obtener un alto número de espigas/m² ya que se trata del factor que más define el rendimiento.

A diferencia del trigo, la cebada prácticamente no tiene respuestas a la vernalización y es muy poca la respuesta que tiene al fotoperiodo. La única variedad que responde al fotoperiodo es la Alhué, que asegura espigazón en una siembra tardía, independientemente del tiempo térmico que haya acumulado.

El periodo crítico del cultivo va de 20 días antes de la floración a 10 días después de la misma, por lo que cualquier limitante que haya en ese periodo afectará directamente al rendimiento.

En cebada, la floración ocurre cuando todavía la espiga está embuchada y recién aparecen las primeras aristas sobre la hoja bandera. En cambio, en trigo ocurre cuando la espiga está totalmente afuera. Esto le da una ventaja a la cebada, ya que el principal problema en floración es el daño de helada al polen. Al tener la espiga embuchada, el polen tiene una protección física.

Pautas de manejo

Entre las pautas a tener en cuenta para una cebada exitosa, se destacan:

Elegir bien el lote: tener en cuenta la rotación y la historia de herbicidas residuales, así como otros factores como la influencia de napa (la cebada es mucho más sensible que trigo ante el encharcamiento y, si falta oxigenación en las raíces, el cultivo se pierde).

Hacer un buen barbecho.

Diagnosticar fertilidad: si bien en la provincia de Buenos Aires la cebada es uno de los cultivos para los que más se hace análisis de suelo, solo se analiza el 20% de la superficie. Es importante medir MO, P, N, Nan, S y Zn para definir dosis y momento de fertilización.

Elegir bien la variedad: conocer el comportamiento sanitario y hacer análisis de semillas para conocer la carga patogénica de la misma.

Definir correctamente fecha, densidad y profundidad de siembra.

Hacer buen monitoreo y controlar malezas, insectos y enfermedades.

Controlar la cosecha y los cuidados post cosecha.

Carry Over

Los problemas de fitotoxicidad en cebada por arrastre de herbicidas de la campaña anterior es un tema que demanda atención. Los productos más complicados son Diclosulam, Clearsol y Fomesafen. Estos herbicidas son de degradación hidrolítica, es decir que si ocurren lluvias no habrá problemas, caso contrario seguramente tengamos residuos en el suelo y potenciales daños.

Siembra y fertilización

Las siembras tempranas permiten menores densidades (200 y 300 plantas/m²), pero en siembras tardías ( julio) conviene aumentar ese número a 350 plantas/m2. La profundidad debe ser de 3 a 5 cm, ya que el crecimiento del coleoptile en cebada es determinado, a diferencia del trigo. Por lo tanto, sembrar a mayores profundidades provoca pérdidas de plantas y plántulas con menor vigor y capacidad de macollaje.

Para la fertilización con nitrógeno, dependiendo de la variedad, época de fertilización y el ambiente, se puede tomar como regla general que para una cebada maltera (entre 10.5 – 12% de proteína), se necesitan 32 a 34 kg de N por tonelada de grano. Para una cebada forrajera, 25 kg de N es más que suficiente. Teniendo en cuenta que en cebada, el factor que más define el rinde es la cantidad de espigas/m2, la fertilización en macollaje resulta clave.

Control de malezas y adversidades

Las malezas gramíneas es un tema que está preocupando cada vez más, principalmente raigrás. Se apunta a controles con herbicidas en preemergencia, tratando de limpiar el lote con Glifosato + Cletodim o Haloxifop unos 30 – 40 días antes de la siembra, y unos 15 días antes, con herbicidas como Flumioxazin o Pyroxasulfone, que están funcionando muy bien.

Respecto de las enfermedades, las más importantes en la zona centro norte de la provincia de Buenos Aires son mancha en red, que ocurre con temperaturas medias mayores de 10-12 °C, y mancha borrosa o mancha marrón, que necesita un poco más de temperatura, alrededor de 20 °C, y por eso se ve más hacia fin de ciclo.

Las enfermedades son unos de los principales reductores de crecimiento y por eso es clave seguir ciertas pautas, como:

Conocer la historia del lote y el origen de la semilla.

Elegir el curasemilla adecuado.

Conocer el perfil sanitario de la variedad elegida.

Hacer monitoreo temprano.

Fijar umbrales de acción y hacer seguimiento posterior a la aplicación.

Mercado de cebada

Hoy la cebada tiene los mejores valores de los últimos 7-8 años, siendo China el principal jugador que tracciona el mercado e impulsa los precios hacia arriba.

En el mundo se producen 150 – 160 millones de toneladas de cebada al año, un número relativamente chico al lado granos como el maíz. De esa producción mundial, 4.5 millones de toneladas se producen en Argentina, y junto con Australia son los dos únicos países que producen este cultivo en el hemisferio sur

Los principales exportadores son la Unión Europea, Australia, Rusia y Ucrania, y le siguen Canadá y Argentina. Nuestro país exporta cebada forrajera y cervecera en proporciones 50/50. China y Arabia Saudita son los principales importadores, capturando casi el 60% del mercado.

El principal uso del cultivo es forrajero (60%, contra el 20% que es uso industrial 20% y 5% destinado a la alimentación). La importancia del uso forrajero explica porqué el precio de la cebada sigue los mercados de maíz y trigo.

El año pasado en Argentina se sembraron 850 mil hectáreas, con 4 millones de toneladas producidas. Para esta campaña, con esta tendencia de suba de precios, seguramente se va a sembrar por encima del millón de hectáreas.

Los rindes en nuestro país vienen subiendo a través de los años, producto de los nuevos materiales y variedades disponibles en el mercado, así como toda la tecnología que se le aplica.

En lo que respecta a calidad a la hora de comercializar, hay bonificación por proteína de un 3% en porcentajes que van de 10.6% a 11.5%, descuento del 1% para menos del 10% de proteína. Por debajo de 9% y por encima de 12.5%, se toma como cebada forrajera.

¿Cómo estamos para arrancar este año?

Contamos con muy buena humedad para comenzar la siembra, los perfiles están cargados, toda la zona productora cebadera esta para arrancar muy bien

Conclusiones

Estar preparados ante diferentes situaciones. Decisiones flexibles.

Tener en cuenta historia de herbicidas y cultivo antecesores.

Seleccionar variedad de acuerdo con fecha de siembra y destino. Calidad de semilla.

Hacer análisis de suelo y chequear durante el cultivo.

Monitorear malezas y enfermedades desde estadios tempranos.

Tener en cuenta pureza varietal y calidad de almacenaje.

Seguir de cerca los mercados para tener las mejores oportunidades de venta.

Ver la evolución del clima en Argentina y en las principales regiones productoras.

Ojo cómo impacten las futuras políticas del agro (tipo de cambio y retenciones).

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