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CONSTRUCCIÓN

naugurado el 5 de enero de 2012, por el entonces presidente Felipe Calderón; con una longitud de 1,124 m de longitud, 20 m de ancho, un vano de 520 m y una altura sobre el río Baluarte de 402,57 m, el Puente Bicentenario Baluarte, fue hasta 2016 el puente atirantado más grande del mundo.

Localizado en la Sierra Madre Occidental, sobre la Autopista Durango-Mazatlán, entre los municipios de Pueblo Nuevo en Durango y Concordia en Sinaloa, su construcción duró cerca de 4 años, dando inicio el 21 de febrero de 2008.

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Fue la necesidad de atender el déficit de vías de comunicación que conectan al océano Pacífico con el norte y el golfo de México, que se concretó la iniciativa de construir el puente atirantado Baluarte, el cual, está dentro de la súper carretera Durango-Mazatlán como parte del corredor carretero número 5, con lo cual se beneficia gran parte de la región noroeste del país, donde se encuentran ciudades como Monterrey, Gómez Palacio y Torreón; representando además un ahorro en el tiempo de recorrido, que anteriormente era de 6 horas, por el peligroso tramo carretero conocido como el Espinazo del Diablo, construido en 1940 y ahora tan sólo dura dos horas y media.

El puente de cuatro carriles y 20 m de ancho, durante sus 1,124 m de longitud, es soportado a 402,57 m sobre el río Baluarte por 12 pilares, de los cuales, dos de ellos son torres de alta tensión. Cada una de las dos torres mide 18 por 8,56 m en su base, se ensancha en el centro para llevar a la calzada, antes estrechándose hacia arriba a 8 por 4,10 m de ancho en su parte superior; el punto más alto es de 169 m de alto, 76 cables de acero pasan por encima de monturas en las torres de alta tensión para formar 152 tirantes reforzados en sus dos secciones. El muelle más alto intermedio es de 148 m de alto. acido el 28 de septiembre de 1956 en Dortmund, Alemania, Manfred Curbach es un ingeniero civil y catedrático universitario. Es una de las figuras líderes en el desarrollo del hormigón con armadura textil y de fibra de carbono.

Para su construcción se invirtieron 2,035 millones de pesos, cuatro años de obras y trabajaron 1,500 personas. Aproximadamente son 2,000 vehículos los que transitan día con día.

Completó sus estudios de bachillerato en el instituto Albert-Einstein en Dortmund en junio de 1976. De 1977 a 1982 estudió ingeniería civil en la universidad técnica de Dortmund, especializándose en ingeniería de estructuras. En 1980 fue admitido en la Fundación de be- cas académicas alemanas de la República Federal de Alemania (Studienstiftung des Deutschen Volkes). Tras su graduación obtuvo una beca en la Universidad de Princeton, con David P. Billington en la investigación sobre “construcción de puentes en Estados Unidos” y sobre

“Robert Maillart“. Recibió el grado de Doctorado en 1987 por la Universidad de Karlsruhe.

Desde 1997, es ingeniero inspector de análisis estructural en la especialidad de estructuras de hormigón. De 1999 a 2011 fue representante del área de investigación especial SFB 528 “Armaduras textiles para refuerzo y reparación de estructuras”. Este hormigón se puso en práctica en proyectos piloto iniciales en cooperación con empresas, principalmente de la industria de la construcción.

En diciembre de 2014, junto a dos socios fundó la empresa CarboCon GmbH, especializada en el diseño, cálculo y la construcción de estructuras de hormigón armado con fibra de carbono.

En 2016, Manfred Curbach recibió junto a Chokri Cherif y Peter Offermann el premio “Deutschen Zukunftspreis” que otorga el presidente federal alemán. Los investigadores desarrollaron un nuevo material compuesto que utiliza refuerzo de carbono en lugar de acero. El carbono es cuatro veces más ligero y seis veces más fuerte que el acero. El potencial del innovador material compuesto es inmenso. A diferencia del hormigón armado, el hormigón al carbono es más resistente y al mismo tiempo más duradero porque no se oxida, alargando la vida de edificios, puentes, entre otros. on 89 años de edad, el Ing. Eugenio Laris Alanís, egresó de la carrera de Ingeniería Civil por la Universidad Nacional Autónoma de México en 1956, posteriormente en 1959 obtuvo la Maestría en Mecánica de Suelos, igualmente por la UNAM.

Sus estudios de mecánica de suelo realizados en la UNAM y diseño de presas, en Suiza y Francia, han impulsado el mejoramiento de la infraestructura nacional, como Subsecretario de la Industria Paraestatal de Transformación, Director Gene- ral de Altos Hornos de México, S.A. de C.V y Vicepresidente de Infraestructura Hidráulica Triturados Basálticos y Derivados, S.A. de C.V, entre otras actividades profesionales.

Durante su actividad profesio- nal ha colaborado con diversas instituciones privadas y públicas para el desarrollo de infraestructura carretera, hidráulica y eléctrica; y en proyectos integrales de saneamiento urbano. En el ramo inmobiliario ha contribuido en la elaboración de nuevos desarrollos inmobiliarios, industriales y comerciales.

Laris Alanís, en su vida gremial ha sido Presidente del Consejo Directivo del Colegio de Ingenieros Civiles de México (19961998); Miembro de la Asociación Mexicana de Hidráulica; Vicepresidente de la Cámara Nacional de la Industria de la

Construcción (1978-1981); Presidente de la Sociedad de Exalumnos de la Facultad de Ingeniería (SEFI) (2007-2009)

Recientemente coordinó las acciones del proyecto del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAIM), fue Director de Proyectos de Inversión Financiada de la Comisión Federal de Electricidad y en la actualidad forma parte del Consejo Consultivo Técnico de la misma CFE

Eugenio Laris Alanís, recibió el Premio Nacional de Ingeniería Civil en 2021.

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