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Cañada del Italiano
En este Entorno, quiero dejar constancia de un hallazgo botánico que hice hace más de medio siglo. Los mayores de la generación anterior, me enseñaron una cañada que nace casi en las llamadas “curvas cuatas” de la carretera libre Rumorosa-Tecate. Se trata de una larga cañada que corre hacia el norte y desemboca en el llano del Ejido Jacumé (de color rojo en el mapa). Siempre tuve curiosidad por recorrerla pero no conseguía compañía. Un invierno me decidí a visitarla solo, para lo cual dejé a mi padre en el jeep esperándome de regreso por la tarde. Era temporada de cacería de venado y me llevé un rifle Ruger en calibre .243 conmigo.
Mi primer hallazgo fue que en aquel lejano invierno, había tinajas con agua, elemento natural para soportar vida animal silvestre y doméstica. Visité varias de ellas en la medida que caminaba siempre perdiendo altitud hacia el plano de Jacumé. En el trayecto escuche el inconfundible silbido de la codorniz de montaña, o perdiz bajacaliforniana (Oreortyx pictus). Luego con un poco de paciencia pude observarlas. Más adelante en los espacios con arena de la cañada vi huellas de venado y de gato montés. Avanzaba preocupado por los días tan cortos del invierno y de que hubiese dejado sólo a mi padre, por lo que no pude llegar hasta el plan jacumense.
“La ubicación más esteña del árbol aliso en Baja California”
ESCRÍBELE Alberto Tapia Landeros Investigador ambiental independiente. Cuéntale altapialanderos@gmail.com FOTOS alberto Tapia
Las Tinajas
También vi a una parvada de codorniz de California, (Callipepla californica) pero ambos pájaros no son noticia en estas soledades, es su hábitat natural. Cuando entré a lo más profundo de esta cañada entonces aún sin la huella humana, me topé con árboles alisos, o sicomoros (Platanus racemosa), que como usted puede ver, se llama así pero no es el plátano que todos conocemos. La hoja del aliso es similar a la hoja del maple, cuya representación más conocida está en la bandera del Canadá. Este árbol es común en las cañadas que bajan al Océano Pacífico, pero no en estas longitudes. El aliso más “esteño” lo había encontrado en el rancho Hacienda de los Ojos Negros, de mi querido amigo don Manuel Monter Gándara.
Los alisos
El aliso siempre está presente en cañadas con agua permanente aunque sea en el subsuelo. Pero en los arroyos que bajan de las sierras de Juárez y San Pedro Mártir nunca hemos visto alisos, por ello deseo dejar esta constancia en este Entorno. Instalé mi cámara en un pequeño trípode de bolsillo y me auto retraté al pie de algunos viejos alisos, como prueba de mi hallazgo. Hecho y fotos esperaron más de medio siglo para ser compartidas con los ecológicos lectores de La Crónica.
Mapa
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Los alisos