NIHILISMO

CAPITULO 3.

- LA PRÁCTICA DEL MINIMALISMO BASADA EN EL NIHILISMO

El nihilismo es una palabra que encontramos en la historia de la filosofía de la mano de varios autores y aunque en otros contextos pudiera tener una

significación negativa, se me

ha solicitado que para los fines de este texto deje bastante claro que sostendremos el concepto como la negación de la existencia y el valor de las cosas El mundo de la forma es justamente la ilusión que llamamos real. Dejamos que lo que queremos nos engañe y olvidamos que lo que necesitamos, ya se nos dio!

Esta premisa la interpretaremos como una forma de ver los objetos a nuestro alrededor con carencia de valor o de aporte real al alma ya que su naturaleza es absoluta y desde ese punto de vista, inmutable, completa, perfecta e infinita. Así las cosas, lo finito y mutable (el objeto), nada puede aportarle a lo infinito e inmutable (sujeto).

Sin embargo y siendo coherente con lo manifestado en la introducción de este texto en relación con la composición humana, comprenderemos que somos alma contenida en un cuerpo denso, de movimientos atómicos lentos que requieren la existencia de elementos materiales para la satisfacción de esas necesidades corporales. El conflicto se presenta cuando el cuerpo se desconecta del alma y se olvida de su naturaleza creyendo que sólo existe como materia y da lugar a la presencia de comportamientos compulsivos:

- necesidad de acumular - miedo a perder - ansiedad por tener - desesperación por estar en otro lugar porque concebimos la percepción de que nos estamos perdiendo de “algo” que veo a través de redes sociales, por ejemplo - autoexigencia de mostrar o exhibir mucho de lo que no somos

Todo ello, dado porque nuestros constructos sociales y políticos han asignado una pesada carga al “no tener” , “no hacer” , “no estar” .

Básicamente todos los comportamientos mencionados están relacionados con una necesidad enorme a ser aceptados / aprobados por el colectivo en el que elegimos desarrollarnos y traen consigo conflictos económicos, familiares y si lo miramos a nivel macro, hasta geopolíticos. Basta citar el conflicto que detonó con el pedido de Ucrania de ser parte de la OTAN, activando en Rusia la construcción colectiva de exclusión y pérdida de territorio.

Explicado lo anterior, diremos que el minimalismo está semánticamente conectado a las palabras minimun (mínimo) y al sufijo alisista (relación-partidario), lo cual aplicado al arte, arquitectura, diseño y decoración ha significado aprecio por lo absolutamente necesario para alcanzar la belleza. Si sustituimos la palabra “belleza” por la palabra “paz” que en términos espirituales tendría el mismo sentido, obtendremos como resultado actos concretos de simpleza con gran aporte de valor en el camino de expansión.

Este modo de vivir no es nuevo, la filosofía china antigua que data aún antes del budismo explica ya la necesidad de encontrar un balance entre simplicidad, quietud y acción.

El minimalismo se traduce - en la práctica espiritual - en el poder de vivir con menos, disminuir actividades que nos causan estrés, comprar sólo lo necesario, desarraigar pensamientos lesivos, desperdiciar y botar menos basura cada día, dejar de cargar con responsabilidades que no nos corresponden y con las que además interferimos en el proceso de aprendizaje de los demás.

Ello nos deja más tiempo libre para vivir y disfrutar, concibiendo el gozo o disfrute como actividad individual. En este punto quisiera introducirlos en la idea de encontrar tiempo a solas - sin sentir soledad ni culpa - dado que son estos paréntesis los que nos permiten reflexionar acerca de los cambios que requerimos accionar

en nuestra vida y conectarnos con la felicidad como

responsabilidad “otro” . personal y no como una esperanza puesta

una en el

Comprendo perfectamente que la sola idea podría sonar a sacrificio dado que se nos ha mostrado al sujeto solitario como “antisocial” , “resentido” , “sin habilidades” , etc. sin embargo, es requerido establecer la diferencia entre el silencio restaurativo escogido voluntariamente del que se vive porque - en efecto - se nos dificulta aceptar o desarrollar la interacción equilibrada con otros, no desde la libertad sino desde un ilusorio determinismo.

Siendo mamá en un país capitalista, podría hablar muchísimo en este acápite dado que provengo de una cultura en la que a la madre que se preocupa excesivamente, sufre y se sacrifica por sus hijos se le levanta un monumento. Nuevamente, desde lo espiritual, no hay comportamientos malos o buenos, hay capítulos en nuestra vida que nos llaman al aprendizaje, a la sanación y al encuentro con la paz y la felicidad. El de la maternidad definitivamente es uno de esos grandes y gordos capítulos en donde el minimalismo funciona de maravilla.

A continuación, enunciamos varias actitudes minimalistas, objetos de maravillosas meditaciones activas. Con la práctica, fluirán diariamente apartándonos del estrés y aportándonos liviandad en el viaje:

Practica activa 1: el tiempo personal, el tiempo del silencio

Para mamás: saca un tiempo a solas para ir al cine, para escribir, para comer en una mesa acompañada de un buen libro, piérdete en tu librería favorita o simplemente disfruta de tu serie con una copa de vino sin

Observarnos es darnos la compasión y caridad que a otros otorgamos sin pensarlo siquiera

interrupciones.

Materializar este espacio pasa por la decisión de escoger pensamientos que te recuerden el gran amor de Dios que eres, y, por tanto, lo importante de que tomes el tiempo de nutrir tu vida consintiéndote con silencio.

Esto aplica, en lo que corresponda,

al esposos, parejas y compañeros de camino. tiempo personal entre

Identifica las causas por las cuales se te dificulta o se

ha entorpecido el momento de estar en silencio y a solas, lo más probable es que encuentres una sanación pendiente con mamá y/o papá que se traduzca, además, en dificultades para generar proyectos y ser abundante/próspero (a).

Lo que nos enseña esta práctica es que no necesitamos de grandes cosas, emociones intensas, ruido abundante, compañía permanente para ser felices. Además, liberamos a otros de la enorme responsabilidad de hacernos felices.

Practica activa 2: Quédate con lo esencial

Comprar muebles, artefactos, decoración, comida en la confianza de que el Universo nos provee de lo necesario para la vida y no la billetera o la tarjeta de crédito. Adquirir sólo aquello que realmente el cuerpo requiere diferenciando “lo que se necesita” de “lo que se quiere” .

Ejercítate en el arte de desprenderte de lo que no usas, de lo roto, de lo que ya no funciona. Revisa lo que esos objetos sin utilidad significan en tu vida y la causa por las cuales no quieres desprenderte de ellos, es posible que te encuentres con heridas en tu alma [2] que sea tiempo de sanar. Empieza por limpiar cada rincón de tu casa y sacar todo aquello que no hayas usado en los últimos 6 meses. Quédate con lo esencial.

Siento que inclusive el acumular actividades en nombre de

la independencia espiritual como cultivar muchas cosas diferentes, hacer tu propia masa madre, hacer tu propio pan, tener y criar tus propias gallinas, hacer tu propia mascarilla para el cabello, acudir a todas las marchas activistas por muy noble que sea la causa, pueden caer en la antípoda del minimalismo, en la dependencia. Quédate con lo que disfrutes hacer y puedas ejecutar sosteniblemente en el tiempo, desde la confianza y no desde el miedo a la escasez.

Practica activa 3: el delicado arte de decir “NO”

Practica el delicado arte de decir “NO” . Con frecuencia llenamos la agenda de actividades a las que se nos dificulta negarnos porque nos sentimos “comprometidos” , “en deuda” , porque hemos malinterpretado los conceptos de empatía y compasión o simplemente por alimentar la imagen que queremos construir de nosotros mismos. Decir “NO” no tiene que ver con el otro, tiene relación única y directa con nosotros mismos, disminuye el estrés, la ansiedad y con la práctica genera enorme dosis de serotonina y dopamina.

Practica activa 4: la desconexión del acto compulsivo

Desconectarse de redes sociales para recargarse. Muchos estudios se han publicado ya acerca de la conveniencia de este hábito para disminuir la ansiedad por lo que intentaré animarlos más bien a buscar qué es lo que hay detrás de la actitud compulsiva de hacer “scrolling” , “stalking” , “scoping”: ¿miedo al rechazo?, ¿necesidad de aceptación?, ¿percepción de traición?, ¿sensación de injusticia?, ¿miedo a perder? baraja las posibilidades y toma acción sobre ello buscando liberarte. ¡Pide ayuda a tus seres de luz directamente, solicita un milagro! Luego de ello, será más fácil seguir las recomendaciones de tomarte un break tecnológico, colocar horarios, concentrarte en una pantalla a la vez, priorizar tus notificaciones o simplemente eliminar suscripciones y aplicaciones que no usas. Te darás cuenta inclusive de todo el dinero que puedes ahorrar.

La identificación de la causa de los actos compulsivos relacionados a las redes sociales nos hace mirarlos con gratitud pues nos permiten sacar a la luz lo que podemos sanar, sin que ello signifique de manera alguna que debemos continuar en la rutina que nos ha venido lesionando por años.

Practica activa 5: primer acto de liderazgo, regenerar, reusar, crear

Optar por lo reusable cuidando con gratitud lo que se tiene es una práctica que nos saca rápidamente del círculo de consumo masivo y que bien podría ser una actividad parte del capítulo de meditación activa. Reutilizar los “leftovers” que encontramos en el refrigerador para preparar nuevas recetas[3], limpiar, ordenar, clasificar/donar

los juguetes de los niños, pedir prestado lo que necesites antes de comprar, usar lo que ya tienes, utilizar en la receta de hoy los vegetales que se dañan más rápido antes de tomar los que tienes a la mano, son actividades que activan nuestra creatividad y nos conectan inmediatamente con la sensación de placer porque el cerebro genera dopamina cuando nos sentimos capaces, suficientes y únicos.

Practica activa 6: adoptar lo que esta para nuestro cuerpo.

Optar por un estilo de vida corporal saludable no tiene porqué significar costosos y estresantes sacrificios ni cuidados. El cuerpo irá pidiendo cambios en la alimentación a medida que progrese la conexión con tu ser espiritual y para ese momento, habrás desarrollado una comunicación importante con él. Empezar por elegir una actividad física diaria que genere endorfinas como caminar por una hora al aire libre, beber mucha agua y adquirir hábitos de alimentación saludable no sólo te ahorrará dinero en salud, sino que también te ayudará a mantener una comunicación fluida con tus seres de luz.

El uso de los llamados “adaptógenos” como apoyo en el aprendizaje que traemos día a día no genera dependencia, adicciones ni efectos colaterales: ashawanda para la ansiedad, turmeric para la inflamación, rhodiola rosea para la estimulación celular, el ginseng para energizar, eleuterococo para aumentar la capacidad de adaptarse en condiciones físicas adversas, hongo reishi como antihistamínico y para mejorar la memoria, sólo por mencionar algunos.

Practica activa 7: energia telurica, energía lunar, energia solar.

Aprovecha la energía del sol y de la luna para lograr tus objetivos. Con el sol puedes filtrar tu agua y potenciar sus cualidades hidratantes. Con la energía de la luna menguante puedes depilarte, cortarte el pelo (si no quieres que crezca rápido) o iniciar una dieta detox; con la energía de la luna nueva puedes hacer una lista de tus nuevos proyectos y pedirle que te ayude a concretarlos.

En la próxima luna llena, realiza una lista de emociones, circunstancias, penas, hechos, hábitos, enfermedades de los que te quieras liberar. Cuando hayas terminado, solicita expresamente a la energía de la luna que te libera de cuanto has escrito en esa lista, verifica tu poder interior utilizando tus propias palabras para hacerlo.

Al terminar puedes quemar el papel, lanzarlo al mar o a un río si tienes esa posibilidad, al tiempo de sentir, vivir con todos tus sentidos la solicitada liberación.

La Tierra, como dije ya, es una gran malla contentiva de vórtices energéticos, estos son confluencias de meridianos y paralelos de enorme proyección energética.

Existen varios estudios científicos que los comprueban[4],

verbigracia, el que se realizó en la iglesia de Santa Ana

en Barcelona, España, en donde a Escuela Politécnica Superior de Edificaciones de Barcelona llegó a cabo un estudio de las energías telúricas con aparatos de radiestesia logrando medir el campo electromagnético al tiempo de confirmar la existencia de niveles de radiación gamma en el sitio.