Dirección General – Julio -2012
MADRE MARIA BERENICE, UNA VIDA, UNA HISTORIA Y UNA PRESENCIA…
Cuando releemos la vida de nuestra querida Madre Fundadora, la Sierva de Dios, Madre María Berenice, descubrimos cómo su vida fue un paso decisivo de un largo itinerario de Evangelio, pero también una historia y una presencia… UNA VIDA. Una vida enteramente para el Amado, el “Jesús de su corazón” así dice en sus Libretas Espirituales: “desear a Jesús es una necesidad de mi corazón, para encontrarlo recorrí el mundo, busque por cielo, mar y tierra y en ninguna parte lo encontré más amante, que en mi corazón”… Experiencia del amor de Dios que marcó el ritmo de su vida. Su vida fue un actuar siempre, según las luces del Espíritu; sus motivos: dejarse mover por el Espíritu, es responder a una llamada, que es preludio del AMOR y de la VIDA, sumida en Dios” (Cfr. Testamento Pág. 2). Con su estilo de vida y de entrega sin límites, nuestra querida Madre Fundadora nos dice, y así nos lo testimonió, que Dios es su “Único tesoro”… “por quien ha dado su vida, con un sentido humilde, sencillo, fecundo y misionero, de entrega total a la Voluntad Divina” repitiendo siempre: “TE LO DOY TODO”, pase lo que pase y cueste lo que cueste”, sabe relativizar todo para dar sitio profundo a lo absoluto de Dios. Esto constituyó el Programa de su vida. Fraternidad Dirección General
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