Rogelio Salmona

María Elvira Madriñán

Gerente firma de arquitectura Rogelio Salmona

La arquitecta María Elvira Madriñán, esposa de Rogelio Salmona, ícono de la arquitectura en ladrillo en Colombia, continúa al frente de los proyectos de la empresa luego de la muerte del destacado arquitecto. Ella es la gerente de la firma de arquitectura Rogelio Salmona.

¿Cómo ve el futuro de la arquitectura en ladrillo?

Las modas van y vienen, y con ellas llegan diferentes tendencias y materiales que van dejando su huella. El ladrillo, ha sido una constante en nuestra ciudad, el material dominante. Lo hemos visto permanecer a lo largo de toda su historia y poblar barrios enteros con sus bellos colores terrosos, que le dan unidad al paisaje bogotano. Difícilmente desaparecerá de nuestro contexto, está por encima de las modas del momento.

¿Qué proyectos tiene la firma por desarrollar?

La empresa ha tenido la oportunidad de desarrollar proyectos públicos y privados de diferentes escalas. En la actualidad se encuentran en proceso de diseño, en diferentes etapas de desarrollo los siguientes proyectos: la ampliación del Museo de Arte Moderno de Bogotá; el nuevo campus de la Universidad Pedagógica en Valmaría, Bogotá; el Centro Cultural Universitario de la Universidad de Caldas, en Manizales; un edificio de vivienda en La Candelaria, en Bogotá y el proyecto del Colegio Policarpa Salavarrieta, que junto con el traslado del Colegio Mayor de Cundinamarca, permitiría liberar el lote para la ampliación del Museo Nacional.

¿Qué principios conservan estos proyectos del concepto original que les dio Salmona?

La arquitectura que la firma ha realizado parte del respeto por el entorno geográfico en el cual se inserta. No busca imponerse, sino por el contrario integrarse con ese entorno formando un todo, creando una estrecha relación con la naturaleza y proponiendo un nuevo paisaje.

En ella toman valor las vistas, los recorridos, las luces y sombras, los materiales, el agua, la vegetación, el paisaje.

El ladrillo como material predominante en la obra adquiere un gran valor. A este noble material se le ha sacado toda su riqueza y versatilidad. Los pisos, cubiertas, paredes, atarjeas, han encontrado en el ladrillo la posibilidad de enriquecerse.

¿Pero estos proyectos además tienen una intervención de parte suya, en qué consiste?

Un proyecto es algo dinámico, debe poder adaptarse a las diferentes exigencias, para cumplir no solo con los aspectos técnicos y normativos, sino también con deseos e ilusiones de quienes serán sus moradores. Es en ese momento que el proyecto se hace realidad, las proporciones, relaciones, visuales, permiten ir afinando cada espacio, se piensan los detalles y al mismo tiempo las relaciones.

La idea fundamental que dio origen al proyecto se mantiene, pero también hay libertad para explorar y continuar con nuevas búsquedas. Nuevos pensamientos afloran como parte de ese proceso, ese es mi aporte respetuoso.

¿Qué características sostenibles tiene el ladrillo?

El ladrillo es un material excepcional: modular, de bajo costo, fácil de transportar, se produce en nuestra región porque las tierras son arcillosas, cuando es cocido a altas temperaturas logra ser muy resistente y repelente al agua.

El ladrillo capta la temperatura durante el día y la libera durante la noche, lo que contribuye a generar condiciones térmicas favorables al interior de los espacios. Además, dada su versatilidad permite ser usado de diferentes maneras y con la multiplicidad de trabas y aparejos enriquece la espacialidad de los espacios.

Las investigaciones alrededor de este material no se han detenido en el tiempo, día a día vemos aparecer nuevos usos, nuevas formas, tamaños, colores, que le permiten al ladrillo estar al lado de las vanguardias y suplir todas las necesidades que el amplio mundo de la construcción demanda continuamente..

¿Qué opina sobre la utilización de nuevos materiales en la arquitectura contemporánea?

Se podría hablar de tendencias en el uso de materiales que van variando con las corrientes de cada época, pero al mismo tiempo, se podría hablar de materiales que han permanecido a lo largo de los siglos, por su perdurabilidad y riqueza y que seguirán presentes enriqueciendo nuestras ciudades, como es el caso del ladrillo.