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Nora y sus monstruos
Alma Avilés Cosme Ilustrado por @mosangon
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E a l s c y o ba M l u zA
Nora acababa de cumplir 6 años. Es una niña curiosa y alegre, por eso esta mañana se había levantado emocionada.
¡Iba a visitar un antiguo castillo con el cole!
A Nora le encantaba descubrir sitios nuevos e imaginarse que era una intrépida exploradora, como cuando hacía grandes rutas con sus papás para encontrar tesoros escondidos. El antiguo castillo, cerca de un frondoso bosque, prometía ser un lugar emocionante para la pequeña aventurera. Inmensos pasillos, enormes paredes de piedra…
Nora miraba todo asombrada cuando escuchó algo extraño mientras bajaban unas grandes escaleras. Se separó de sus compañeros para oírlo mejor, y pronto se dio cuenta de que
¡alguien estaba llorando!
Nora decidió dejar el grupo y acercarse a investigar qué era aquello. El llanto venía del sótano del castillo, así que sin pensárselo dos veces, empezó a bajar las escaleras hasta que llegó a una gran puerta de madera. La empujó con cuidado, se asomó y se quedó asombrada al observar cómo una brujita de lindos rizos azules lloraba junto a la ventana. La bruja levantó la cabeza y se sorprendió al ver a la niña. —¿Quién eres y qué haces aquí? ¡Los niños no pueden bajar al sótano del castillo! —exclamó la brujita sobresaltada. —Soy Nora. ¡He bajado hasta aquí porque te oía llorar!
¿Quién eres y qué te ocurre?
La brujita, viendo que la niña solo quería ayudarla, decidió contarle su problema. —Me llamo Luna Azul. Soy una bruja buena y tengo una escoba mágica quitamiedos que me ha robado el monstruo Rabioso. —¿Una escoba quitamiedos? —preguntó Nora. —Sí —respondió Luna azul—. Con ella consigo barrer los miedos de los niños cuando están asustados por la noche. En silencio llego a su habitación y barro a su alrededor y espanto todos sus temores para que puedan dormir tranquilos, pero ahora que el monstruo me ha robado la escoba podrá ir a sus casas a asustarlos, y yo no podré ayudarlos. —Entonces, ¡hay que recuperarla! —exclamó Nora.
¡Pero puede ser muy peligroso! —replicó
—
Luna Azul—. El monstruo vive en una cueva oscura al final de un bosque tenebroso que hay que cruzar. Yo solo tengo 6 años y todavía estoy aprendiendo a hacer magia, no sé si podré sola con el monstruo.
El equilibro de Morfeo i
La importancia del valor, la imaginación, la amistad y... ¡La aventura!
ISBN 978-84-18996-48-1
9 788418
996481