Leonora Balcarse

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entrevista

LEONORA BALCARCE JUEGO DE SEDUCCION Tiene los rulos rubios mas voluminosos y reconocibles tanto del cine como de la tele local, ojos celestes y timidos y piernas larguisimas, para la envidia. Alterna sus trabajos en rodajes y en tiras de ficcion con teatro independiente y campañas de moda. Quiza por eso le sale tan facil eso de posar frente a la camara, no sin antes, como en casi cada instante de su vida, musicalizar el momento.

texto Melina Barrera

L

fotos Alejandra Lopez

eonora Balcarce no sabe cómo llegar al estudio de fotografía en el que se hará la producción de la tapa de Bacanal. Pregunta coordenadas, insiste por msn para ver por dónde ir con el auto, decide googlear y, al fin, igual llega una hora y media tarde. Su pelo rubio ahora corto por los hombros, de rulos con volumen y textura poco comunes que, según ella, hoy agradece pero sufrió de chica, está en sintonía con el ritmo con el que se mueve, ahora apurada, con mucho menos tiempo para las fotos, porque después tiene otra producción en Barrio Norte. Leonora no llega sola, llega con su equipo que pareciera de amigos de la adolescencia, pero más allá de los afectos, es un team de trabajo sin el que no se anima a posar frente a una cámara. Estilista y maquillador-peinador la acompañan a su ritmo, custodiados por Kiss, una Border Collie con una mancha negra en un ojo, su amiga y compañera, que es tan buena que no podría asustar ni a un pollito, y hasta sabe moverse entre luces, percheros y escenografía. Entre la ropa elegida, muchas de las prendas son de la última colección de Allô Martínez, marca para la que la actriz es cara de campaña, aunque también trabaja esta temporada para Clara Ibarguren. Además, a fin del año pasado terminó de filmar Santiso, una

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Produccion Laura Fernandez

Estilismo Julieta Lopez Acosta

película en 3D dirigida por Brian Maya, con Carlos Belloso y Viviana Saccone como parte del elenco, y tiene planes este año de filmar otra, pero aún sin fecha de rodaje. Un trabajo que se sumará al armado de una obra de teatro con un grupo con el que ya hizo otras dos, Mar de Ajó y Emporio Caserta. En eso está Leonora mientras comparte su vida, cama afuera, con Cruz Pereyra Lucena, practica yoga, se analiza, cocina tarta de atún y sueña con viajar por el mundo y vivir en Uruguay. En eso está mientras elige un vestido negro largo bordado con lentejuelas gigantes plateadas, combinado con zapatillas, y se para sobre el infinito gris plomo ya iluminado para las fotos. En eso está mientras alguien de su equipo pone Kasabian, muy fuerte. Y comienzan las tomas. el cine, la tele, el humor y la tragedia Su formación como actriz la hizo junto a Julio Chávez. Antes había estudiado un año y medio Diseño de Indumentaria. Fue parte

del elenco de Montaña Rusa y debutó en cine con una breve aparición en Martín H. Más tarde llegó el teatro independiente, hasta la gran exposición el año pasado con su personaje de Paloma en El Elegido. -Hasta hace un tiempo, cuando te entrevistaban, solías elegir el cine por sobre la tele, pero después se empezó a notar cierto cambio de idea. ¿Tiene que ver con que estuviste trabajando más, haciendo ficción en tele? -Sí, es que en un primer momento los personajes que había hecho en cine fueron mucho más interesantes que los que me habían tocado hacer en tevé. Pero después lle-


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garon cosas que estaban buenas como Soy tu fan, La familia potente (un piloto que nunca salió al aire), El tiempo no para, Culpable de este amor, Botineras y El elegido, con un papel difícil porque era muy expuesto, pero estuvo muy bien tratado. -¿Qué te resulta más difícil, la tragedia o el humor? - La tragedia. Pero aunque el humor también es difícil, me gusta mucho más. -¿Y cuál creés que te sale mejor? -Creo que el humor, pero nadie me ve tanto en esa faceta, no sé por qué. En la película de Fito (Páez, De quién es el portaligas),

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por ejemplo, disfruté muchísimo de hacer ese humor casi absurdo. -Tuviste protagónicos, pero tenés también muchos papeles secundarios. ¿Te tomás del mismo modo unos y otros? -La verdad es que lo de protagónico o secundario no es algo que me desvele. Si el personaje está bueno, eso no importa para mí. Podés tener un protagónico que sea un plomo y un personaje secundario que puede ser mucho más rico. Tenés tanta responsabilidad protagonizando o haciendo un papel más pequeño porque son parte de una historia que tiene que ser lo más verosímil posible.

-¿A qué personajes les guardás más cariño? -Al que hice en La ciénaga, de Lucrecia Martel -se llamaba Verónica y tenía una relación incestuosa con su hermano, contada de manera muy sutil-, y el de De quién es el portaligas. -¿Fue tan divertido como se vio en los extras de la peli filmar con Fito y todo ese grupo? -Fue exelente hacer esa película. Eramos todos amigos, en Rosario, filmando algo tan divertido... Mejor experiencia no pudo haber sido. -Y hablando de papeles, ¿te molestó que te preguntaran tanto por tu personaje de lesbiana y las escenas en El Elegido? -No, no me molestó para nada que me pregunten o se hable del tema. Era obvio que iba a pasar. Fue una novela muy vista, con excelentes actores, y además una historia de amor entre dos mujeres aún hoy llama la atención. Creo que la historia entre nosotras estuvo bien contada y no se la trató de manera burda. - ¿ C ó m o l l e g a s t e d e l Di s e ñ o d e Indumentaria a la actuación? -Ya había actuado en tevé y en cine cuando empecé a estudiar Diseño. Fue un momento en que no sabía si quería solamente trabajar de actriz y necesitaba estudiar algo. Me gustaba el diseño y quería esa rutina de estudio y aprendizaje. Después se me complicó lidiar con el trabajo y el estudio, y elegí seguir trabajando. -¿Recordás el momento en que te diste cuenta de que era actriz lo que querías ser? -Fui consiente de que me gustaba y quería hacer eso el día que terminé de filmar la primera película en la que participé, que fue Martín H, de Aristarain. Era sólo un día de rodaje y mi personaje tenía dos escenas al principio de la película. Me fui de ahí sabiendo que quería dedicarme a eso. Me trataron tan bien... Repetimos la escena de diferentes planos... Yo hasta ahí había hecho dos programas de tevé y no sabía cómo funcionaba el cine. Fue increíble. Me acuerdo perfecto de la sensación, dije: “Ojalá pueda hacer esto durante mucho tiempo”. supermodel y super critica A Leonora Balacarce no le gusta verse actuar, tampoco escucharse. Siempre cree que podría haberlo hecho mejor. A la vez, le gusta y valora la crítica cuando sirve para construir. Sí le gusta en cambio jugar a la top model por un rato. Por eso sube la música -suena ahora Prince, viejo-, y cambia su look de siempre por un peinado recogido, con un flequillo que sólo a ella puede quedarle genial. Hasta Kiss la mira con cara de aprobación.


-¿Qué evaluás y en qué orden a la hora de elegir hacer un trabajo? -El orden de los factores depende bastante de la situación que esté atravesando. Siempre priorizo lo artístico, pero si estoy en una situación en la que debo afrontar responsabilidades y se me está empezando a complicar, tengo que elegir el trabajo más por lo económico, y trato de hacerlo con la mayor dignidad posible.

le pregunto a una de las mejores estilistas y diseñadoras que hay acá, Julieta López Acosta. Ella me ayuda. Es una genia, vanguardia pura. -¿Le tenés miedo al paso del tiempo? -El tiempo está pasando tan rápido que ya ni miedo me da. Lo que me da miedo es que pase y pase y al final no haber logrado algún tipo de evolución. -¿Qué papel soñás con hacer algún día? -Me gustaría hacer a Blanche Dubois de

Siempre digo: “Por qué hice esto así, podría haberle encontrado otra forma… Y otra cosa que no me gusta de mí es tener poca paciencia”. -¿Cómo intentás corregirlo? -Hablando de la paciencia, respirando profundo y dándome un rato hasta que se me pase ese momento de intolerancia. Con respecto al trabajo, estudiando más y probando más formas y distintos puntos de vista.

“No existe la vida sin musica, es fundamental, como tambien lo es el contacto con la naturaleza. Esas dos cosas solo dan felicidad. El haber tenido novios musicos tiene que ver tambien con el amor hacia la musica.” -Leo Sbaraglia dijo una vez en Bacanal que la publicidad le da a los actores un aire económico importante que no está mal aprovechar, ya que les permite tener más libertad de elegir mejor los trabajos de actuación. ¿Te pasa eso? -Sí, obviamente te da esa posibilidad. Agradezco poder hacer campañas, publicidades. Me da respiro y tiempo para esperar a que aparezca algo bueno. -¿Y te gusta jugar el rol de modelo? -Me gusta y me divierte. Me hago la que me creo mil, pongo música que me motive y me hago la supermodelo por un rato, aunque no tenga un pelo de modelo. -Pero te importa la imagen... -Me importa cuando tengo que salir en fotos y en lugares donde me va a ver gente, por eso cuando tengo una nota o me quiero poner algo para una fiesta, algo de trabajo, lo que sea,

Un tranvía llamado deseo. -¿Tenés algún tipo de entrenamiento en la actuación, más allá de tu trabajo? -En un momento estudié canto, vocalización, y después entrené con Ana Frenkel. El año pasado estudié unos meses con Santiago Gobernori y Matías Feldman, que son actores y directores de teatro. Este año recién comienza, asi que veré qué hago con respecto a eso. -Te preguntaba porque en una ocasión te leí bastante crítica de vos misma, demasiado dura, te diría... -Sí, soy muy crítica y me cuesta verme. Creo que está bien que sea así, no me gusta que me adulen sin sentido. Me gusta la crítica constructiva y real, eso es lo que sirve. Si no, todo es mentira y no crecés ni aprendés nada. -¿Pero qué no te gusta de vos todavía? -Te vuelvo a decir, me cuesta verme, escucharme la voz... Eso sobre todo, los tonos.

vida, amor y musica Durante el último cambio de ropa para la producción de esta nota suena Madonna. Un disco viejo, más viejo que el anterior de Prince. El pop ochentoso pareciera funcionar en el estudio como sedante en un día agitado de exposición frente a la cámara, como banda de sonido de la jornada, elegida a conciencia. Está muy fuerte para ser mediodía, pero se nota que a Leonora Balcarce eso le da alegría. Se le nota en sus ojos y en su actitud distendida, muy diferente de la que tenía cuando llegó, apurada, tirando así por la borda esa idea de chica antipática que suele tener de ella cierta prensa, gente que no la conoce bajo los efectos de la música y las buenas compañías. -Suelen criticarte por ser demasiado seria con la prensa o frente a las cámaras... ¿Les escapás un poco, te incomodan, es una manera de esconder cierta timidez?

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“No soy una persona para nada seria, por ahi salgo con una cara neutra, de nada, o normal, y dicen algo. Que hablen, que es gratis, pero seria mejor hablar menos, mirar menos y hacer mas.” -Me critican sobre todo en esos blogs donde escribe la gente que está demasiado al pedo. Dicen que salgo con cara seria en las fotos, qué sé yo... Siempre algo van a decir... O que me hago la no sé qué, o cualquier barbaridad. No soy una persona para nada seria, por ahí salgo con una cara neutra, de nada, o normal, y dicen algo. Que hablen, que es gratis, pero sería mejor hablar menos, mirar menos y hacer más. -¿Te pesa esa exposición, la fama? -No sé bien qué decir con respecto a la fama. No me siento una persona famosa, realmente. Soy una actriz que trabaja y punto. Es un trabajo expuesto porque lo ven otras personas, pero sólo eso. No tengo que lidiar con nada porque no me considero famosa ni nada por el estilo. Puede acercarse alguien y decirme algo sobre mi trabajo, y está buenísimo, pero no más que eso. -¿Cómo es un día en tu vida? -Me levanto tipo 9 de la mañana, voy a entrenar o a yoga, a terapia, según el día, y después todo depende de si tengo que trabajar o no. Como el mío no es un trabajo estable, nada es muy seguro, y me gusta eso también. Sí trato siempre de hacer alguna actividad física. Me hace muy bien al cuerpo y a la mente. -Sonás ordenada. -Sí, cuando tengo horarios que cumplir, ordeno mis rutinas y el trabajo. Soy organizada, ordenada y limpia. -¿Vivís sola? -Vivo sola con mi perra Kiss, pero voy y vuelvo a lo de mi novio todo el tiempo. -¿Viviste en pareja alguna vez? -Sí, conviví con todos mis novios. -¿No tuviste nunca la idea de casarte, fiesta, viaje, hijos... Susanita, digamos? Y si no, ¿cuál es tu estado ideal? -De casarme con una ceremonia religiosa, no. A lo sumo un festejo para compartirlo con gente querida y escuchar buena música y bailar. Hijos me gustaría, pero no sé cuando. No sé si éste es el momento en el mundo, aunque eso es relativo, porque el amor siempre cura todo, entonces termino pensando que... ¡sí! La relación ideal es como le funcione bien a cada uno, no hay fórmulas. Se trata de dos personas que se encuentran y se adap-

tan a compartir la vida lo mejor que pueden. Hay que estar dispuesto a entregarse, ceder, dar, resignar, reír, amar y acompañarse. -¿Cómo desconectás cuando lo necesitás? -Veo una película o serie que me guste, o escucho música. -¿Cocinás? -Cocino pollo salteado con hongos, tarta de atún, entre varias cosas más. El secreto de mi tarta de atún es ponerle un tomate cortado en el relleno para que no salga seca. -¿Cuál es tu bebida? -Vino tinto. -¿Tus restaurantes? -Me gusta Tenkuu, un sushi increíble, el mejor de todos. Y Chan Chan, el mejor ceviche. -¿Sos de las fumadoras que piensan un día dejar el vicio o de las que odian que todo se haya vuelto hoy tan sanitario y no se pueda ya fumar en ningún lado? -Está perfecto que no se pueda fumar en los lugares, nadie tiene por qué fumarse el pucho del otro. Incluso a mí, que fumo, me molesta el olor. Trato de fumar cada vez menos y algún día dejar, cuanto antes... -Ya que hablamos de lugares y de cambios en la cultura porteña, ¿cómo ves la noche hoy? -La realidad es que no voy a boliches hace años. Cuando era chica iba a Tequila, en la época que pasaban hip hop, música excelente. Entonces también iba a Morocco, donde pasaba música Carlos Alfonsín, y a Animal, donde ponía música Nico Cota. Hoy no hay nada, al menos que yo conozca. La música de los lugares es David Guetta, regeatton, no sé qué, pero es el horror. Hace falta un lugar, al menos uno, donde se pueda escuchar música real, es necesario. -¿Qué libro tenés en tu mesa de luz? -Hace bastante que no leo un libro de principio a fin, pero tengo varios que agarro cada tanto, como El libro del desasosiego, de Fernando Pessoa, uno de cuentos de Clarice Lispector, y el de los signos, de Linda Goodman. Esos están ahora en mi mesa de luz. -¿Y qué suena en tu ipod? -Estoy escuchando mucho el disco nuevo

de Junior Boys, y uno que me pasó una amiga, Sexuality, de Sebastian Tellier, que lo acabo de descubrir. -Tuviste novios músicos, ¿la música estaba en tu vida más allá de estas relaciones? -La música está en mi vida desde muy chica. Lo primero que escuché fue Thriller, de Michael Jackson. Tenía 4 años y enloquecía. Lo bailaba y escuchaba sin parar. Me lo hizo escuchar mi hermana, y hasta hoy se lo agradezco porque fue la primera vez que sentí la música. No existe la vida sin música, es fundamental, como también lo es el contacto con la naturaleza. Esas dos cosas sólo dan felicidad. El haber tenido novios músicos tiene que ver también con el amor hacia la música. -Te leí muy enojada con las críticas a la campaña de menosmal! del año pasado, incluso respondiste vía Twitter a un medio, con un texto muy fuerte. (Se trató de las críticas de un periodista por la campaña de una marca de ropa que la tenía a Leonora junto a la madre de Gustavo Cerati, Lilian Clark, posando divertidas). -No me banco que se hable tanta estupidez y con tan poca sensibilidad sobre algo de lo que no tienen idea. Parecen robots programados por un balde de caca. El twitter es un lugar más para expresarse y ese día necesité hacerlo. -Sé que no hablás del tema, pero en relación al estado de salud de Gustavo viajaste a Venezuela a acompañarlo ni bien te enteraste de lo que le había pasado, y lo visitás aquí en Buenos Aires-, ¿sos una persona de fe? -Creo en la música, en el amor, en el arte. Eso es vida pura y atraviesa cualquier situación. Gustavo es un músico enorme, y eso es para siempre. -¿Escuchás su música? -Claro que escucho su música, es una forma más de estar cerca de él. -¿Qué le pedirías al genio de la lámpara, si alguna vez apareciera? -Poder ayudar a todos los que necesitan, vivir en un lugar de campo y mar, rodeada de perros, niños, viajar por el mundo... Y que la humanidad evolucione hacia un buen lugar, cuidando el planeta donde vivimos. Cuidar y preservar la vida.

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