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INVESTIGACIÓN
En Harvard preparan píldoras de heces para combatir una bacteria resistente a los antibióticos Un equipo internacional encabe-
zado por Christopher Doughty, de la Universidad de Oxford (Reino Unido) se ha dedicado a estudiarlo. Sus resultados, publicados en la revista PNAS, nos dicen algo que no habríamos sospechado. Una de las grandes pérdidas de la extinción de los dinosaurios y los grandes mamíferos, fueron sus (¿lo digo?), sí, sus señoras mierdas. Igual que las de las ballenas diezmadas por la caza industrial. La desaparición o declive de estas
MUESTRAS de microbiota fecal humana en el banco Openbiome.
Las bacterias intestinales de otro pueden salvarte la vida
S
í, suena asqueroso y medio a broma, pero el tema es muy serio. Los trasplantes de heces de otras personas se han manifestado como la gran esperanza para los trastornos causados por el C. difficile, un microorganismo que puede
especies ha alterado el ciclo nutritivo terrestre, en particular en un proceso en el cual los excrementos animales se trasladan de las profundidades de los océanos a tierra frme a través de aves migratorias y peces (véase el recuadro a la derecha). MENOS FÓSFORO EN MAR Y TIERRA
Los autores del estudio de Oxford se han centrado en el fósforo. Sin intervención animal, los nutrientes de las plantas acaban por descomponerse y reincorporarse al suelo. Pero en un proceso muy largo y, en gran medida, en la misma zona. Los herbívoros suponen auténticas bombas de distribución, potenciadas por su corte de bacterias y las especies asociadas al excremento. Así MORTAL El microbio que los investigadores han Clostridium perseguido el reparto de fósdifficile mata solo foro en el planeta. Y han visto en EEUU que la capacidad dispersora de a 14.000 los animales terrestres es hoy personas al año. solo el 8% de lo que fue antes de la última Edad de Hielo. La del mar se ha quedado en el 5% desde que comenzamos a pescar cetáceos a gran escala. Solo los peces que pasan parte de su vida en el océano y parte en el río, y las aves marinas han pasado de sacar a tierra y PÍLDORAS de materia fecal en estudio en Harvard. al agua dulce 340 millones de kilos de fósforo al año a llevar causar la muerte. solo 78. Como consecuencia, la En EEUU es el único agricultura, las pesquerías y los ecosissitio en que pueden temas se empobrecen.
realizarse sin autorización expresa, y ya hay bancos de heces que suministran la “medicina” de donantes. También se busca crear píldoras con el cóctel de bacterias adecuado.
98 | QUO.ES | Enero 2016
CUIDAR LAS BALLENAS
“Hay que pensar que la Tierra es una bolita, con la única incorporación de elementos de fuera de los meteoritos. Se tiene que reciclar absolutamente todo para que esté otra vez disponible para las plantas. Así, ellas recogerán la
Un mundo sin fertilizar
L
a desaparición de grandes mamíferos y la reducción del número de ballenas ha empobrecido nuestra agricultura, las pesquerías y los ecosistemas. Según un estudio internacional, ahora tenemos una décima parte de las ballenas y los grandes mamíferos que vivían (y defecaban) hace 12.000 años. Los peces andrónomos (los que pasan parte de su vida en el mar y parte en los ríos) se han reducido 20 veces y las aves marinas a la mitad. Los grandes han supuesto una reducción considerable en la cantidad de heces, y los “viajeros” en su transporte a largas distancias. Como la digestión es una forma rápida de tomar nutrientes de un sitio y dejarlos en otro con sus bacterias de procesado para que otros organismos los aprovechen, esa maquinaria de reciclaje se ha visto tremendamente debilitada. Y el medio ambiente acusa las consecuencias. Este trabajo destaca el papel ecológico de la digestión de los grandes animales y plantea que aún podemos tomar medidas para fomentarlo. Por ejemplo, parar la caza de ballenas.
92%
se ha reducido desde la œltima Edad de Hielo la capacidad de los animales para repartir nutrientes desde las zonas m‡s ricas a los puntos m‡s alejados.
luz del sol y volverán a hacer nutrientes. Alguien se las comerá y será comido por alguien y todo se reciclará otra vez”, explica Jorge Miguel Lobo. Los dos grandes aceleradores de ese proceso son los cadáveres (de todo tipo, también la hojarasca) y los excrementos. ¿Qué podemos hacer, entonces, para recuperar la capacidad perdida? En el artículo de PNAS se mencionan medidas como quitar vallas a los pastos para facilitar un movimiento más amplio del