Science & Solutions #25 Rumiantes (Español)

Número 25 • Rumiantes

Los peligros de interrumpir la gestión de riesgos de las micotoxinas Estudio de caso Explotación lechera en China

Cómo abordar la acidosis Foto: Nenadpress

Los peligros de la SARA

Foto: visual7

Foto: ET-ART/ Balakovo

Una revista de

Editorial La carrera continúa En abril advertimos que, en ausencia del sistema de cuotas de leche en la Unión Europea (UE), la competencia por producir leche de manera eficiente aumentaría considerablemente. Pocos previeron que la mayor producción de los principales mercados enfrentaría una desaceleración de la demanda en China y otros lugares, causando estragos en los precios de la leche.

Una respuesta común de los productores frente a los precios bajos es recortar los costos. En este número de Science & Solutions analizamos el caso de un productor lechero en China quien, en un esfuerzo por reducir los costos de producción, suspendió el programa de gestión de riesgos de micotoxinas de la explotación. Implementado inicialmente para contrarrestar las aflatoxinas, la eliminación del programa reveló todo un conjunto nuevo de desafíos causados por otras micotoxinas y reforzó la necesidad de una aplicación consistente de la gestión de riesgos de micotoxinas.

Pasamos luego a la acidosis ruminal subaguda (SARA), un desafío difícil de percibir que las vacas lecheras pueden enfrentar en la lactancia y que afecta la producción de leche, la salud general y la longevidad. Analizamos una serie de medidas que los productores pueden tomar para lograr un pH ruminal más estable y mantener las vacas sanas.

Se espera que la producción lechera mundial se incremente en casi un cuarto la próxima década y que los precios caigan ligeramente en términos reales (p. ej., una vez descontada la inflación). Esto sugiere que la carrera por una mayor eficiencia y por mantener la salud de los hatos continuará definiendo la industria en los próximos años.

Dra. Christine

HUNGER

Gerente de Producto, Fitógenos

Science & Solutions • Número 25

Foto: head off

Contenido

Los peligros de interrumpir la gestión de riesgos de las micotoxinas

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Un estudio de caso en lechería muestra la diversidad de riesgos que representan las micotoxinas para los hatos y las ganancias.

Foto: JannHuizenga

Por la Dra. Vet. Simone Schaumberger

Cómo abordar la acidosis y los peligros de la SARA

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Detección, causas principales y medidas para enfrentar el desafío a la producción, la salud y la longevidad.

Por el Dra. Vet. Luis Cardo

Science & Solutions es una publicación mensual de BIOMIN Holding GmbH que se distribuye de forma gratuita a nuestros clientes y socios. Cada número de Science & Solutions presenta temas relacionados con los últimos conocimientos científicos en nutrición y salud animal, centrándose en una especie (aves, cerdos o rumiantes) cada trimestre.

ISSN: 2309-5954 Para obtener una copia digital y mayor información, visite: http://magazine.biomin.net Por reimpresiones de artículos o para suscribirse a Science & Solutions, contáctenos a través de: magazine@biomin.net Redactor: Ryan Hines Colaboradores: Luis Cardo, Christine Hunger, Simone Schaumberger Marketing: Herbert Kneissl Mercadeo: Herbert Kneissl, Cristian Ilea Gráficos: Michaela Hössinger Investigación: Franz Waxenecker, Ursula Hofstetter Editor: BIOMIN Holding GmbH

Industriestrasse 21, 3130 Herzogenburg, Austria

Tel: +43 2782 8030 www.biomin.net ©Copyright 2015, BIOMIN Holding GmbH Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida de ninguna forma material con fines comerciales sin la autorización escrita del titular de los derechos de autor conforme a las disposiciones de la Ley de Derechos de Autor, Diseños y Patentes de 1998.

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Una revista de BIOMIN

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Foto: abluecup

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Science & Solutions • Número 25

Los peligros de interrumpir la gestión de riesgos de micotoxinas Por Simone

SCHAUMBERGER, Gerente de Producto, Gestión de Riesgos de Micotoxinas

La experiencia reciente del propietario de una explotación lechera demuestra el riesgo de la aplicación ocasional y destaca cómo las micotoxinas pueden afectar los hatos lecheros y las ganancias.

A

l igual que la mayoría de los productores lecheros, el propietario de una explotación lechera de 1000 cabezas al noroeste de Pekín, China, era plenamente consciente de los peligros que representa el alimento contaminado con aflatoxinas para las vacas. También era consciente del riesgo de arrastre de las aflatoxinas ingeridas hacia la leche a una tasa que varía entre uno y seis por ciento y que podría poner en peligro a los consumidores humanos.

Con esta información a disposición, decidió introducir un aditivo para la desactivación de micotoxinas a razón de 20 - 25 gramos por vaca por día. Transcurrieron algunos meses sin problemas. Los planes para construir un nuevo establo se obstaculizaron al caer el precio de la leche e incrementarse las presiones sobre

los costos de producción, haciendo que el propietario de la explotación lechera interrumpiera el programa de gestión de riesgos de las micotoxinas. En solo unos pocos días, la tasa de abortos del hato creció significativamente. La ración mixta total (TMR, por sus siglas en inglés) solo tenía trazas de micotoxinas, indicando que el ensilado de alfalfa era la fuente probable de contaminación por micotoxinas. El propietario reintrodujo la aplicación de Mycofix® a una dosis similar a la de antes y en pocos días todo había vuelto a la normalidad. Este caso revela una serie de hechos importantes acerca de cómo las micotoxinas afectan la producción lechera.

La aflatoxina no es el único peligro Los problemas reproductivos observados en este caso fueron probablemente resultado de la zearalenona, una potente micotoxina estrogénica vinculada a una serie de problemas reproductivos. Las micotoxinas

Cuadro 1. Principales micotoxinas y los peligros para las vacas.

Micotoxina

Umbral de riesgo recomendado (ppb)

Aflatoxina

2

Efectos • Pérdida y menor ganancia de peso (ganado) • Función ruminal alterada • Salud de la ubre alterada, mayor recuento de células somáticas • Menor resistencia a los factores de estrés ambientales y microbianos; mayor susceptibilidad a las enfermedades

100

• Infertilidad, disminución en las tasas de concepción • Agrandamiento de los pezones • Agrandamiento de las glándulas mamarias en terneras vírgenes • Infecciones del tracto reproductivo

300

• Función ruminal alterada • Diarrea • Trastornos metabólicos, mastitis, metritis • Cojera

T-2

100

• Pérdida del apetito • Gastroenteritis • Reducción en la producción de leche • Respuesta inmunitaria reducida

Fumonisinas

2000

•R educción en la producción de leche y aumento de los niveles de las enzimas hepáticas

Ocratoxina A

80

• La ocratoxina A (OTA) es una micotoxina nefrotóxica y los rumiantes son mucho menos sensibles a la ocratoxina A en comparación con los no rumiantes

Zearalenona

Deoxinivalenol

Fuente: BIOMIN

Una revista de BIOMIN

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Los peligros de interrumpir la gestión de riesgos de las micotoxinas

Un concepto erróneo común es que la gestión de riesgos de micotoxinas es optativa o solo necesaria en respuesta a un desafío Figura 1. Resultados del Sondeo sobre micotoxinas de BIOMIN, enero a junio de 2015 Las barras representan el porcentaje de muestras contaminadas. Los puntos muestran la incidencia de micotoxinas por encima de los umbrales de riesgo.

100%

% de muestras

80% 60% 40% 20% 0% Alimento balanceado terminado

Maíz

Ensilado de maíz

n Afla n ZEN n DON n T-2 n FUM n OTA Fuente: BIOMIN

mejor conocidas, los umbrales de riesgo recomendados y los efectos se enumeran en el Cuadro 1. Según el estudio anual sobre micotoxinas de BIOMIN, varias de las principales micotoxinas presentan alta prevalencia en los componentes comunes del alimento para vacas lecheras.

La Figura 1 muestra la incidencia y las concentraciones de aflatoxinas (Afla), zearalenona (ZEN), deoxinivalenol (DON), toxina T-2 (T-2), fumonisinas (FUM) y ocratoxina A (OTA) en muestras de maíz, ensilado de maíz y alimento balanceado terminado analizadas en todo el mundo entre enero y junio de 2015.

La micotoxina más prevalente en los componentes del alimento para vacas lecheras fue el deoxinivalenol, presente en un 81% de las muestras de maíz y ensilado de maíz, así como en un 93% de las muestras de alimento terminado. Si bien los niveles promedio de deoxinivalenol en maíz y ensilado de maíz superaron las 2,000 ppb, las muestras individuales mostraron niveles por encima de 16,000 ppb, lo que claramente excede los niveles guía y recomendados para el ganado lechero impuestos tanto por la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos, por sus siglas en inglés) de EE.UU. como por la UE. Los niveles promedio de zearalenona detectados en maíz, ensilado de maíz y alimento terminado (todos por encima de 300 ppb) representan una amenaza potencial para la salud de las vacas lecheras debido a sus efectos estrogénicos.

4

Implementar nuevamente, suspender nuevamente Un concepto erróneo común es suponer que porque las vacas son menos sensibles a los efectos de las micotoxinas que otras especies animales, la gestión de riesgos de micotoxinas es optativa o solo necesaria en respuesta a un desafío de micotoxinas grave. Tal como lo demuestran el estudio de caso en China y el Cuadro 1, la realidad derriba este mito. Muchos productores lecheros en todo el mundo han tenido experiencias similares cuando, enfrentados a los bajos precios de la leche o la presión sobre los costos, abandonaron un programa de gestión de riesgos de las micotoxinas solo para sufrir problemas repentinos con relación a las tasas de inseminación, menor producción de leche, diarrea, recuentos elevados de células somáticas, mayor incidencia de enfermedades como la enfermedad de la pezuña o la mastitis y falla reproductiva. (Para más estudios de caso, véase “Las micotoxinas en la producción lechera” en Science & Solutions, número 13).

El Cuadro 2 presenta una serie de factores que pueden conducir a una menor desactivación de micotoxinas en el rumen.

Degradación no es protección La menor sensibilidad de las vacas a las micotoxinas (en comparación con otras especies) se debe a su degradación en el rumen. La biodegradación ruminal

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Simone Schaumberger Gerente de Producto, Gestión de Riesgos de Micotoxinas

de micotoxinas grave. de diversas micotoxinas ocurre a través de algunos microorganismos (p. ej. protozoarios) que tienen cierta capacidad para metabolizar micotoxinas particulares. Si bien algunos investigadores han postulado que la degradación de toxinas puede alcanzar hasta un 90% para algunas micotoxinas, las estimaciones varían ampliamente y difieren para cada micotoxina.

Varios estudios han demostrado que en presencia de algunas micotoxinas, los microorganismos del rumen se alteran y no presentan la capacidad de desintoxicación esperada.

Cuadro 2. Factores que dificultan la desactivación de micotoxinas en el rumen

Alta producción, consecuencias no deseadas La transformación ruminal no siempre vuelve inocuas a las micotoxinas. En el caso de la zearalenona, metabolizada a través de protozoarios en α- y ß-zearalenol, se ha demostrado que la forma beta es un metabolito menos tóxico, mientras que el metabolito alfa conduce a un compuesto aún más estrogénico en comparación con la propia zearalenona (Jouary et al., 2009, Dänicke et al., 2005). El nivel de degradación de la zearalenona en el rumen parece estar fuertemente vinculado al nivel de consumo de alimento y al tiempo de retención resultante del alimento. Por ejemplo, las vacas lecheras de alta producción con un consumo diario de alimento de 26 kg de materia seca presentan una mayor producción, lo que reduce el tiempo asignado a la desintoxicación.

Fuente: BIOMIN

Invasores no detectados Las micotoxinas enmascaradas (formas conjugadas unidas a proteínas o azúcares) no pueden detectarse por métodos analíticos convencionales (HPLC, ELISA).

Durante la digestión, las enzimas intestinales pueden escindir las micotoxinas enmascaradas, liberándose las micotoxinas de origen. Luego de la liberación, pueden volverse nuevamente tóxicas para el animal.

Acidosis Un problema bien conocido en los rumiantes es la acidosis ruminal subclínica o aguda (SARA/ARA).

Este síndrome de bajo pH ruminal a menudo ocurre en explotaciones lecheras de alta producción, especialmente cuando el régimen de alimentación se ve afectado o cuando las situaciones de estrés perjudican la flora ruminal causando disbiosis.

Se supone que durante la acidosis el número de protozoarios disminuye y, siendo uno de los más

Una revista de BIOMIN

Factor

Description

Alta productividad

Mayor producción reduce el tiempo para la desintoxicación

Degradación parcial/desfavorable

Metabolitos de mayor toxicidad liberados en el rumen

Micotoxinas enmascaradas

Mayor biodisponibilidad de la micotoxina de origen

Múltiples micotoxinas en el rumen

Los microorganismos tienen menor capacidad de degradación

Acidosis

La disbiosis produce una menor capacidad de degradación

importantes agentes de degradación de micotoxinas, esto conduce a una menor degradación. Por lo tanto, mayores niveles de micotoxinas pueden pasar al intestino y ejercer efectos tóxicos.

Amenazas múltiples Varios mohos comunes presentes en el campo producen diferentes micotoxinas perjudiciales que afectan la salud y el desempeño productivo de las vacas lecheras.

Los métodos de detección de micotoxinas más avanzados disponibles comercialmente pueden identificar más de 380 diferentes micotoxinas y metabolitos (Spectrum 380®). Los diferentes grupos de micotoxinas difieren estructuralmente uno de otro. Si bien en este caso el propietario de la explotación lechera implementó inicialmente un programa de gestión de riesgos de las micotoxinas para contrarrestar las aflatoxinas, cualquier programa sólido debe combinar varias estrategias, o modos de acción, para contrarrestar un amplio espectro de micotoxinas.

Solución integral Una gestión de riesgos de las micotoxinas sólida comprende varios pasos: detección, prevención y mitigación. El análisis periódico de los componentes del alimento y los ensilados puede ayudar a descubrir amenazas potenciales para los animales. El buen manejo de los ensilados es fundamental para evitar un mayor crecimiento de moho y prevenir así la producción de micotoxinas. La aplicación regular de un desactivador de micotoxinas no puede pasarse por alto. Una gestión de riesgos de las micotoxinas adecuada es fundamental para evitar pérdidas impredecibles y mantener un hato lechero de alta producción.

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Foto: aleksandr hunta

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Science & Solutions • Número 25

Cómo abordar la acidosis y los peligros de la SARA Por Luis

CARDO, Gerente Técnico Línea Rumiantes

La acidosis ruminal subaguda (SARA) es uno de los muchos desafíos a los que una vaca lechera puede tener que enfrentarse durante la lactancia y que afecta no sólo a la producción de leche, sino también a la salud general y a la longevidad. Si bien no es fácil de detectar, la SARA puede ejercer un serio impacto sobre la producción de leche

Una revista de BIOMIN

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Cómo abordar la acidosis y los peligros de la SARA

T

Foto: nicolasprimola

écnicamente, un episodio de SARA ocurre cuando el pH ruminal cae por debajo de 5.8 para ganado lechero y 5.6 para ganado de carne por un período de al menos tres horas. En esos umbrales, la digestión de la fibra disminuye y afecta notoriamente la producción. También puede conducir a un menor consumo de alimento, menor eficiencia alimenticia y problemas podales.

Acidosis ruminal aguda La acidosis ruminal aguda ocurre cuando el pH del rumen cae a un nivel muy bajo (menos de 5.2) con una acumulación de ácidos grasos volátiles y ácido láctico en el rumen, normalmente debido a un exceso de carbohidratos rápidamente fermentables junto con una falta de fibra efectiva. Si no se corrige, causará acidosis metabólica y hará que el agua de la sangre ingrese al rumen debido a la alta presión osmótica causando diarrea, deshidratación y finalmente poniendo en riesgo la vida. Esta afección grave no es común en explotaciones de ganado de carne y menos aún en explotaciones lecheras.

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¿Qué causa la SARA? Por un lado, la SARA es causada por un desequilibrio entre la producción de ácidos grasos volátiles (AGV) y su absorción por las paredes del rumen y por otro lado los propios mecanismos de amortiguación del rumen. Si el pH ruminal continúa bajando, cambios en la población bacteriana y sus vías metabólicas conducirán a la sobreproducción de ácido láctico, un ácido mucho más fuerte que está involucrado en la acidosis aguda.

Las fermentaciones ruminales producen ácidos grasos volátiles que causan un descenso del pH. Los alimentos más ricos en carbohidratos generan un descenso del pH por un período mayor. Esta es la razón por la cual la ración mixta total (TMR por sus siglas en inglés) es capaz de mantener un pH ruminal más estable y genera consistentemente mejores resultados que los sistemas donde las vacas ingieren comidas más voluminosas (kg), menos veces por día.

Los métodos para detectar SARA y sus principales causas prácticas se muestran en los Cuadros 1 y 2. Los efectos de la acidosis ruminal subaguda pueden dividirse básicamente en efectos sobre la eficiencia del rumen, sobre el consumo de alimento y finalmente sobre la salud podal.

Efectos en el rumen La SARA afecta la eficiencia alimenticia, incrementando así los costos de alimentación, debido principalmente a la disminución de la digestibilidad de la fibra.

Cuando el pH cae por debajo de 6.0, las poblaciones y el crecimiento de bacterias celulolíticas y los hongos ruminales disminuyen, afectando la digestibilidad de la fibra.

De acuerdo con varias fuentes (Calsamiglia et al., 2002; Yang et al., 2002) cada disminución de pH de 0.1 reduce la digestibilidad de la fibra en 3.6%. La mala digestibilidad de la fibra y la menor eficiencia alimenticia resultantes de la SARA se traducen en mayores costos de alimentación para los productores.

Un estudio mostró que los episodios breves de SARA (menos de 30 minutos) no reducen la digestibilidad de la fibra detergente neutra (FDN), mientras que los episodios repetidos de cuatro horas sí lo hacen. Estos hallazgos justifican el uso de TMR y el acceso libre de 24 horas al comedero como herramientas de manejo claves para controlar la SARA. Efectos en el consumo de alimento Normalmente la SARA causa patrones de alimentación erráticos y reduce el consumo de alimento. Cuando el pH cae, la vaca reduce el consumo de alimento, disminuyendo la producción de ácidos y llevando el pH nuevamente a niveles normales. Luego la vaca volverá a comer, provocando otro episodio de SARA y repitiendo el ciclo. Esta variación no solo disminuirá la producción debido al menor consumo de alimento, sino que también reducirá la eficiencia de las fermentaciones ruminales debido a la variación en el aporte de nutrientes, causando mayores pérdidas económicas.

Cojera La cojera es una preocupación importante en la producción moderna de leche y carne debido a sus enormes consecuencias en el bienestar y la rentabilidad. Existe una clara relación entre la acidosis y la inflamación del tejido lamelar de la pezuña, una afección conocida como laminitis que no solo causa problemas en sí misma, sino que también es el primer paso para otras afecciones como úlceras plantares y hemorragias de la línea blanca.

Si bien el mecanismo de la laminitis aún no está totalmente claro, se cree que la afección se debe a un menor pH sistémico durante la acidosis y a sustancias como la histamina (involucrada en la respuesta inflamatoria) y endotoxinas que ingresan al torrente sanguíneo.

La cojera, a su vez, puede exacerbar la SARA ya que las vacas que sufren de esta afección cambiarán sus patrones de alimentación debido al menor número de comidas causado por el dolor sufrido al moverse hacia el comedero.

Mejor manejo El control de SARA debe basarse en la adaptación de las papilas y microflora ruminal y en el adecuado consumo de fibra efectiva. El Cuadro 3 proporciona una lista de prácticas de manejo para mitigar el riesgo de SARA

Science & Solutions • Número 25

Luis Cardo, Gerente Técnico Línea Rumiantes

Cuadro 1. Detección de SARA. 1. Verificar los patrones de alimentación en la TMR. Si las vacas están eligiendo selectivamente su alimento,lo que se evidencia por la presencia de numerosos agujeros en la TMR, entonces la fibra y los concentrados ingeridos pueden diferir considerablemente de la ración 2. Evaluar periódicamente y mantener registros de indicadores de posible SARA: contenido de grasa en la leche, evaluación de las heces, laminitis y patrones de consumo de alimento individuales Cuadro 2. Causas principales de la acidosis ruminal subaguda.

1.

Mala adaptación de la microflora ruminal a los cambios en la dieta. Común en el parto, en combinación con otras enfermedades metabólicas como la cetosis y afecciones relacionadas. (Véase “Cómo abordar el balance energético negativo en vacas lecheras” en Science & Solutions, Número 17)

2.

Patrones de alimentación inadecuados y vacas que eligen selectivamente su alimento.

La fibra físicamente efectiva unida en el tiempo a los concentrados es absolutamente necesaria para que la vaca rumie y mezcle así el contenido del rumen, aumentando la absorción de AGV por las papilas del rumen y para que produzca la saliva que amortigua el contenido ruminal. La evaluación de la calidad física del alimento es un paso crucial para controlar la SARA

3.

Tamaño de forraje inadecuado. Si es demasiado largo, las vacas elegirán los concentrados frente a los forrajes; si es demasiado corto, no proporcionará el efecto físico necesario para estimular la rumia

4.

Errores de formulación

1.

Asegurar la adecuada adaptación del rumen, especialmente en el parto al mover las vacas del grupo seco al grupo de lactancia

2.

Controlar la palatabilidad de los ingredientes

3.

Asegurar la homogeneidad de la TMR y un corte de longitud adecuada en el forraje.

Mantener registros de mantenimiento del carro mezclador (balanzas, cuchillas)

4.

Asegurar un acceso apropiado a los comederos y un suministro adecuado de agua

5.

Evitar situaciones de estrés como mover demasiado a los animales entre los grupos de producción

6.

Mantener las terneras de primer parto separadas de las vacas mayores, siempre que sea posible

7.

Área de descanso. Asegurar una correcta disposición, mantenimiento y una buena cama.

Un tiempo de reposo insuficiente hará que las vacas cambien el patrón de alimentación

8.

Cuando se cambian fórmulas o forrajes es altamente recomendable que la transición sea gradual

Evaluación de las heces y detección de SARA Consejo: La heterogeneidad de las heces en un grupo de vacas en la misma etapa de lactancia puede ser causada por SARA; en esta situación algunas heces serán normales y otras demasiado sueltas. Se puede utilizar el sistema de puntuación de 1 a 5 para evaluar las heces

Puntaje 3

Una revista de BIOMIN

Puntaje 1

Los lipopolisacáridos (LPS) son parte de la membrana externa de las bacterias Gram-negativas y se liberan durante el crecimiento masivo, la lisis o la muerte de las bacterias. El control de las endotoxinas y su producción debe ser una piedra angular en el control de la laminitis.

Las consecuencias prácticas son de amplio alcance, ya que los lipopolisacáridos no solo se producen en situaciones de SARA, sino también en otras situaciones que afectan la fermentación ruminal, como en situaciones con contaminación por micotoxinas. Estas situaciones deben considerarse al evaluar la situación de SARA/laminitis a nivel de la explotación.

Foto: Scharvik

Endotoxinas

Cuadro 3. Medidas para enfrentar la SARA.

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