9
Alejo Planchart: trabajar unidos para complementarnos Constructora Sambil: Cincuenta años haciendo un país Barberos europeos La enfermería rescata espacios perdidos El Ávila: El tesoro mejor conservado de los caraqueños Tequechongos: Primera franquicia afiliada a la Cámara de Caracas Incoterms: lenguaje universal del comercio Roberto Ball: un hombre que no negocia sus principios Kiosco Génesis Nitopi: Dedicado de alma y corazón al negocio Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. Año 5, No. 9 - Abril 2009
3 4 5 6 8
Programa
10 10 12 16
Servicio de apoyo a microempresarios y nuevos emprendedores
ciudadanoempresario@lacamaradecaracas.org.ve
La Cámara de Caracas Editorial
Nuestras puertas están abiertas Los ciudadanos y empresarios de Caracas que hacemos vida en esta hermosa ciudad enfrentamos retos todos los días y en cada oportunidad que salimos de la puertas de nuestros hogares o negocios. Retos que en oportunidades se repiten a lo largo de la geografía nacional pero que en otras son únicos y típicos de las grandes urbes que conforman este mundo globalizado. Existen múltiples iniciativas en esta ciudad para hacer que estos retos resulten cada día menos violentos y más motivadores, más aun desde que se eligieron nuevas autoridades en el área metropolitana de Caracas. En La Cámara de Caracas hemos manifestado en muchas oportunidades que nuestras puertas están abiertas para cualquier iniciativa que tenga que ver con mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y hacer que las empresas que en ella conviven tengan mejores condiciones para desarrollar las actividades que les son propias. Queremos de igual forma invitar a todas aquellas empresas de comercio, industria o prestadoras de servicios a acercarse a nuestra Cámara y comprobar la cantidad de ventajas que ofrece el pertenecer a una de las instituciones más antiguas y respetadas de nuestro país. Recientemente fueron electas nuevas autoridades municipales en nuestra Ciudad y muchas veces nos hemos referido a la excelente oportunidad que tienen de diferenciarse y demostrar que sí se pueden obtener beneficios cuando empresa, gobierno y ciudadanos trabajan en conjunto. Somos la vitrina de Venezuela, por lo que todos los ojos están puestos en nosotros y por tanto tenemos una gran responsabilidad ante el país. Seamos inclusivos en los espacios donde otros apuestan a la separación y a la lucha como modo de establecer su liderazgo. De nuevo, nuestras puertas están abiertas para todas aquellas iniciativas que contribuyan a mejorar la calidad de vida de las personas que aquí habitan.
Diana Mayoral Presidente
Una era construye ciudades. Una hora las destruye. Lucio Anneo Séneca
Los profetas de la ira Ojalá nosotros pudiéramos vivir la vida feliz de Cosimo Piovasco de Rondo, mejor conocido como el Barón Rampante, un personaje inventado por Italo Calvino, el cual decidió vivir una vida arbórea, dejar la ciudad y sus peligros, y solamente beneficiarse de las bondades de la civilización y del amor de sus seres queridos. Pero esa vida de fábula es, ya lo sabemos, impracticable y utópica. Estamos condenados a los otros, y al intento de construir con ellos las bases mínimas para que haya orden social y se haga valiosa la vida de los hombres, así como el respeto a lo que los demás poseen. Así entendido, ser libres no es otra cosa que poder vivir la vida y poder disfrutarla sin que los demás conspiren contra la felicidad de cada uno. Ser libres es también estar conscientes de lo importante que es nuestra contribución a la felicidad de los otros, no tanto mediante las demostraciones de nuestro altruismo como con la dedicación propia al trabajo, el compromiso con la productividad y el valor que desde nuestra vida le demos a la eficiencia social. Tal vez nuestra ciudad sufra los efectos de cientos de Barones Rampantes que evitan cualquier cruce con los otros, que se inventaron una vida desde lo alto del árbol más lejano, vestidos con armaduras que los aíslan y que les evita el problema de pensar lo colectivo. Por eso es que lo único que se puede observar en nuestra ciudad es la rapidez y la desconfianza con la que sus habitantes transitan por calles y avenidas, y la indolencia con la que tratan los parques, plazas y otros espacios públicos. No es entonces casual que a nadie le importe a donde van y como se resuelven los desechos, y tampoco cómo termina siendo la vida de los ancianos. Mucho menos, Barones Rampantes al fin, pierden un minuto de tiempo preocupándose por la suerte de los menos favorecidos, niños, jóvenes y mujeres que
deambulan por las calles, entre otras cosas porque no tienen dónde ir. Falsos profetas, esos que algunos llaman bufones disfrazados de sacerdotes, predican intensamente una extraña solución a la ciudad que todavía no tenemos. Proclaman que en vez de tener una tengamos por lo menos dos. Una para ellos y otra para nosotros. Pregonan que entre las dos ciudades el único contacto tiene que ser la incursión y la violencia, habida cuenta de que estos predicadores insisten en que la supervivencia de unos depende de la aniquilación de los otros. Lo malo no es que en el medio de nosotros estos personajes cundan, lo realmente perverso es que tantos crean que tienen razón, obligándose y forzando al resto a vivir una vida solitaria y brutal. El dios de esos profetas es el miedo. Cualquier referencia a la fundación de las ciudades nos encuentra con una intención contraria. Las ciudades no se crearon para la injusticia sino para el derecho. Como atestigua Cicerón, dentro de las ciudades “el pueblo no es un simple agregado de individuos, sino un agrupamiento unido, por un consentimiento jurídico y por la utilidad común” de proteger la libertad de los ciudadanos contra los abusos del poder, no solamente referido a los que ostentan las riendas del gobierno, sino a los que hacen gala de la fuerza bruta y al que se impone desde la barbarie egoísta de la violencia. La expectativa de que podía imponerse la lógica del derecho, de que los hombres podían vivir y tener sobre la base del mutuo respeto, y que a lo único que se debía temer era a la ley aplicada implacablemente, fue en su momento una promesa espectacular, que aun hoy reclamamos y esperamos de nuestros gobernantes. El reto urbano del siglo XXI es recuperar para los Caraqueños una ciudad amable y competitiva, que sea un dig-
no ejemplo para el resto del país. No tiene sentido que nos conformemos con ser los menos peores, tampoco que respondamos con indiferencia al incómodo galardón de vivir en una de las Ciudades más peligrosas del mundo. Mucho menos que expiemos la culpa social poniendo de relieve esos pequeños espacios y momentos en donde reina la cordura y la paz. La clave no es exhibir las excepciones sino trastocar la regla. El éxito futuro no está en nuestros refugios arbóreos sino en enfrentar la vida con la vitalidad y el optimismo de los que se creen capaces de transformar su realidad. A Borges le gustaba decir que el papel fundamental de los Dioses era pensarnos constantemente. En eso consistía, a su juicio, el eterno papel de la creación. Es decir, “si Dios dejara de pensar en nosotros en este momento, desapareceríamos aniquilados por su olvido. Dios nos piensa en cada momento” no tiene más remedio. También afirmaba el poeta que los hombres vivían aceptando el universo, aceptando tradiciones y conformándose a las cosas. Pero hay unos pocos hombres que no se resignan a ser el resultado de Dioses que piensan, y tampoco a ser la amalgama de asentimiento con el que se someten al mundo. Apuestan a ser los recreadores del Universo a través del pensamiento, desde el mundo de las ideas hasta el genio de su aplicación. Esos pocos hombres que juegan a ser semidioses, construyeron las leyes de las ciudades que nosotros olvidamos hace mucho tiempo. Recordarlas vale el esfuerzo, reinstaurarlas tiene todo el sentido de sentir algo más que miedo al tener que vivir lejos de los árboles y distantes de las justificaciones infantiles que nos condenan a la fatua felicidad de la propia contemplación.
Víctor Maldonado C.
La ciudad ordenada de Allan Brewer-Carías
El Empresario de Caracas y el Espíritu Empresarial en tiempos de crisis
Empresario de empresarios
Rafael Arráiz Lucca
Rafael Alfonzo Hernández
Carolina Jaimes Branger
U
na de las bondades prácticas de los estudios históricos es que nos permiten remontar el río hasta las cabeceras, auscultando el origen de los problemas. Y no cabe la menor duda, para un caraqueño, que el tema de la capital es un nudo que lejos de resolverse se agrava a diario, cosa que podría suceder igual en las ciudades del interior si no se metaboliza la experiencia capitalina. Colocar el oído y la lupa sobre el origen de los ámbitos en que hoy vivimos es contribuir a esclarecer las calamidades, así como iniciar el camino de las soluciones. Por estas, y por otras razones, es que me parece tan importante el estudio del profesor Allan Brewer-Carías, que acaba de publicar la editorial Criteria: La ciudad ordenada. A lo largo de 540 páginas impecablemente diseñadas por Pedro Mancilla e impresas en Editorial Arte, el lector puede tomarle el pulso a una de las aventuras más fascinantes de la humanidad: el largo proceso de fundación de ciudades por parte de los españoles en América. Esta empresa, no huelga señalarlo, es única en toda la historia universal. Nunca antes ni después un imperio adelantó un trabajo de tal magnitud. Es cierto que tarea similar desarrollaron los romanos, pero no llegó a ser de tal envergadura, ni de tanta resonancia. Pero me adelanto a aclarar que la obra de Brewer no pernocta en el tema de la aventura poblacional exclusivamente, sino que se adentra en el laberinto en el que su autor es fuerte: el jurídico. Es así como al lector se le revela que las ciudades americanas no fueron fruto del azar de un conquistador, sino que su estructura y su basamento jurídico formaban parte de un plan minuciosamente diseñado por la Corona Española, de manera de poder poblar ordenadamente un territorio yermo. Este mito del conquistador como un sanguinario que venía en busca del oro a troche y moche es mentira, es una simplificación que repiten los incautos a diario, y que libros como este contribuyen a desbaratar. También aclara el autor que la forma reticular de nuestras ciudades no es un invento español, sino que se inspira en la experiencia griega y romana, en particular en lo que se exigía para la fundación de nuevas ciudades del imperio, y el primero que concibió la forma ortogonal para las urbes fue Hippodamus de Mileto, cuando el esplendor de Grecia no advertía nubes en la distancia. Esta forma fue probada por los peninsulares, antes de establecerse en América, en los pueblos de Castilla y Aragón, siempre de acuerdo con la casuística del derecho castellano, que fue el que se trasladó hasta aquí para la resolución de estos asuntos. No fue el derecho catalán ni el aragonés el que imperó en nuestros asuntos urbanos y municipales, sino éste castellano tan dado al pormenor, tan estupendamente preciso, que dio origen a los llamados “fueros municipales”. La formulación jurídica tuvo su base en las Ordenanzas de Descubrimiento y Población dadas por Felipe II en el Bosque de Segovia el 13 de julio de 1573, y apunta Brewer que se trata del “primer cuerpo orgánico de normas jurídicas sobre ordenación urbana que se haya dictado jamás.” Parte del interés del conquistador por fundar pueblos y ciudades, además, tiene un origen jurídico: era la garantía que se tenía sobre la tierra ocupada, de lo contrario no se generaba un derecho. Lo decía muy claramente Hernán Cortés: “Quien no poblare no hará buena conquista, y no conquistando la tierra no se convertirá la gente, así que la máxima del conquistador ha de ser poblar.” Conviene traer a cuento lo que advierte el profesor Brewer, me refiero a que la obra de fundación urbana española en América no fue tarea directa de funcionarios de la Corona, sino afán de los particulares, los adelantados, los titulares de una capitulación, que se conducían bajo la capa de un manto legal que prescribía la forma de hacerlo, una vez autorizados para la empresa. De hecho, Juan Rodríguez Suárez fundó la ciudad de Santiago de los Caballeros de Mérida sin autorización para ello, y por tal atrevimiento pesó sobre su cabeza una condena a muerte que, tiempo después, le fue conmutada por una menos severa. Las líneas precedentes, que no pretenden ser más que un aperitivo, han sido escritas con el ánimo de señalar a una de las investigaciones más completas que se ha hecho sobre la estructura jurídica de nuestras ciudades, una investigación que viene a salvar grandes vacíos y a dar pie a que las próximas que se adelanten partan de lo ya navegado por BrewerCarías. El ámbito trabajado ha sido el de toda la América española, por cierto, bastante mejor fundada, urbanamente, que las primeras poblaciones norteamericanas.
L
a democracia para ser real necesita que exista libertad y responsabilidad. Libertad en el más amplio sentido de la palabra, o sea libertad de expresión, libertad individual, libertad económica y libertad jurídica. Responsabilidad social empresarial e individual, es decir, empresas e individuos socialmente responsables. Afrontar la modernidad como un patrón de conducta, compromiso y modo de vida es otro aspecto que requerimos de inmediato para el sostenimiento de la democracia. Debemos atacar el tema de los paradigmas que hemos venido sufriendo a lo largo de más de 5 décadas y que tanto daño han causado a los sectores más desfavorecidos, que son quienes supuestamente más defiende el populismo y el engaño de los vivos de siempre. Venezuela, por un lado lleva más de 5 décadas de políticas erradas basadas en paradigmas obsoletos y por el otro, en sus últimos 9 años viene luchando contra la implementación de un sistema totalitario que se quiere vender como defensor de la democracia y de los derechos humanos, cuando lo que ha venido haciendo es cercenando nuestra libertad. Por su parte, los actores centrales en lugar de defender a plenitud sus principios y valores democráticos han terminado en su gran mayoría hipotecando su futuro. Para decirlo más claramente, ante el atropello galopante de la pérdida de la libertad han preferido taparse los ojos y creer que a lo mejor, no es tan malo como parece el régimen y más si nos deja, “por ahora”, lograr utilidades importantes que nos hacen silenciarnos a pesar de todos los sacrificios, muertes y demás consecuencias de la resistencia democrática de los años anteriores. Lo mismo se ha hecho desde el punto de vista de la modernidad, se ha preferido depender del capitalismo de estado en lugar de buscar un sistema donde el ingenio, la competitividad y la creatividad sean los parámetros del éxito. Único mecanismo para asegurar la equidad de las oportunidades. Éste es un momento inédito en nuestra historia. Si bien se creía firmemente que el adormecimiento producido por las economías centralizadas había concluido en un despertar definitivo hacia la libertad y que, finalmente, se había encontrado un camino: el de la libertad, la democracia y la ciencia, que nos conduciría al progreso y hacia etapas cada vez más altas de bienestar material, hoy –en cambio– todo nuestro ámbito está signado por la inseguridad. Hoy en día, la ruta que creíamos despejada aparece sembrada de obstáculos. Tal parece que los viejos fantasmas del intervencionismo, la revolución y el nacionalismo nunca se erradicaron del todo y ahora recobran una fuerza que es capaz de echar por tierra los esfuerzos democráticos. Debemos salir del paradigma del subdesarrollo, que establece que el progreso se podría dar como resultado de un juego de suma cero en el cual quien gana lo hace a costa del otro y que lo verdaderamente importante para tener bienestar es la voluntad política y el uso –o, más bien, abuso– que los dirigentes políticos hagan del poder. Igualmente instituye que la razón de la pobreza no es responsabilidad nuestra, sino de terceros, de la denominada ‘dependencia externa’, además, considera a toda actividad empresarial, sin distinciones, como explotadora de sus trabajadores y perjudicial para el resto de la colectividad y, finalmente, identifica el afán de lucro y el individualismo como manifestaciones de egoísmo y de lesión permanente a los demás, que debe ser evitado a toda costa. Si queremos lograr el cambio institucional debemos cambiar este paradigma del subdesarrollo por el paradigma del progreso. ¿En qué consiste el paradigma del progreso?, consiste en definir al progreso como el resultado de una actividad en la que ambas partes ganan y que, justamente por ese doble beneficio, es realizado por los agentes económicos. Se manifiesta cuando la ley debe ser una defensa contra el poder y nunca su reflejo. El paradigma del progreso sostiene que el poder debe estar permanentemente limitado y que los políticos son servidores públicos cuyos jefes son todos los ciudadanos. A su vez, considera que nosotros somos responsables de nuestra miseria o prosperidad, y que, por tanto, podemos elegir entre permanecer en la pobreza o alcanzar el desarrollo. “Este cambio de paradigma es una de las tareas primordiales a ser impulsadas por los empresarios de Caracas y del resto del país”.
2 / Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009
F
ue uno de los grandes emprendedores de Venezuela y uno de los constructores de lo mejor que tenemos en el país. Su historia habla de trabajo, responsabilidad, constancia, tesón, sacrificio, honestidad, lealtad. Su perseverancia nos llevó de la mano hacia la luz. Su legado nos ilumina a diario. Me refiero al Ingeniero Ricardo Zuloaga (1867-1932), fundador de la Electricidad de Caracas. Acabo de terminar de leer la biografía que sobre Zuloaga escribiera Juan Rohl en 1963. Y me siento en la obligación de comentar sobre la vida y la obra de un ciudadano que fue ejemplo para otros ciudadanos, de un hombre que se sobrepuso a las dificultades con la fuerza de la dedicación, de un venezolano que amó entrañablemente a Venezuela. El “empresario de empresarios”, como bien lo definió Oscar Yanes, nació sólo cinco años antes de la muerte de su padre. La desaparición del sostén de la familia hizo que los hermanos Zuloaga tuvieran que trabajar desde muy jóvenes para poder mantenerse. Especial mérito tuvo Antonio Zuloaga, el mayor, quien enfiló sus esfuerzos para que sus hermanos pudieran asistir a la universidad. Creció Ricardo Zuloaga en la Hacienda Mopia, que apenas producía frutas y legumbres para subsistir de forma precaria. No fue sino hasta los diez años que aprendió a leer y a escribir, pues no asistía a la escuela. ¿La razón?… No tenía un par de zapatos decentes, como los demás alumnos. Sin embargo, la vida en el campo lo preparó para el trabajo que significó poner en marcha la industria de la electricidad en un país como la Venezuela de finales del siglo XIX, sumida en la oscuridad de la ignorancia, la pobreza y el caudillismo. Sus allegados cuentan que su fortaleza y su resistencia a la hora de trabajar sobrepasaban las de todos: escalaba riscos, bajaba montañas, nadaba en ríos. Como relata Juan Rohl: “Las estrecheces económicas soportadas por su madre con severa dignidad y las duras condiciones de existencia a que estaba habituado desde niño junto a sus hermanos, cuando no les era dado gozar de las más ingentes necesidades de la vida, lejos de derrotar su confianza en el porvenir y de hacer flaquear su voluntad, habían servido, al contrario, de crisol donde se templó su carácter y le preparó para enfrentarse a las vicisitudes de la existencia y poder luchar hasta alcanzar el éxito”. A la primera asamblea de accionistas de La Electricidad de Caracas, Zuloaga asistió con un traje que le prestó su hermano Carlos, pues no poseía un traje adecuado. Dice el cineasta y hombre de televisión Ricardo Tirado que el diccionario es el único lugar en el que “éxito” aparece primero que “trabajo”. La vida de Ricardo Zuloaga es la cabal demostración de la verdad que encierran estas palabras.
Alejo Planchart, presidente después de la fusión de dos cámaras
Una fuerte convicción: trabajar unidos para complementarnos L
uego de plantearse la necesidad de consolidar a dos instituciones de tradición bajo un solo gremio, la dura tarea de convencer a mucha gente y adaptar ideales a una realidad inminente, Alejo Planchart logró con mucha satisfacción y esfuerzo, ser el promotor de la fusión de las cámaras caraqueñas de industriales y comerciantes, así como ser el primer presidente (durante el período 2004-2006), de la nueva cúpula que nacía: La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. Ingeniero Industrial egresado de la Universidad Católica Andrés Bello en 1964, Planchart trabajó en la Shell, fue profesor del IESA y desde 1976 ingresó a Polar, donde un vasto desarrollo de carrera en diversas áreas, lo llevó a ocupar el cargo de Gerente General interino por varios períodos, y aunque hoy está jubilado por la compañía, es consultor permanente, miembro de la Junta Directiva, presidente del Plan de Jubilación y representante de Empresas Polar ante diversas organizaciones. Vinculado siempre con los gremios, Planchart fue presidente de Conapri y actualmente participa en Conindustria y Fundei, no obstante la experiencia de haber presidido la Cámara de Caracas le dejó un gran aprendizaje y la complacencia de haber superado ese gran reto. “Me tocó la tarea de negociar con la Cámara de Industriales para unirnos y fortalecer el trabajo de ambas y crear sinergia entre comerciantes e industriales, porque hoy día los dos sectores están muy vinculados. Aunque hubo quienes se disgustaron con la idea, al final resultó un ahorro importante al tener una sola estructura que se vinculara con los asuntos de la ciudad”. “La decisión obedeció a que nos dimos cuenta que empresas grandes estaban en diversas cámaras y cada una de ella apoyaban las mismas cosas pero tenía actividades y burocracia independientes, pues cada quien buscaba promover sus servicios y ofrecer acciones que a la larga llevaban a lo mismo y terminaban apoyando a los afiliados en idénticos aspectos, pero a veces siendo complementarios y en ocasiones contradictorios” –agregó-.
Reorganizarse para comenzar de nuevo Explicó Planchart que para conseguir con éxito la fusión, tuvieron que empezar por clasificar la composición de los miembros y reorganizar la cámara de forma activa y con más participación, pues se había convertido sólo en un sitio para presentaciones de la directiva. De manera que se reforzaron algunas áreas como la información, cursos y eventos, el Centro de Arbitraje y la Cámara Internacional, y se delegó la operatividad a un personal especializado que impulsó a la institución a lo que es hoy día. Con la filosofía de seguir amparando al sector privado, mantener la libertad de empresas, comercio e industrias y defender los valores, la democracia y la libertad de acción y pensamiento, una de las tareas fundamentales de la Cámara es se-
guirse ocupando del tema de Caracas más que de tópicos nacionales y realmente batallar sobre aspectos locales que involucren a la ciudad. “Es decir quedarse apegados al ámbito local, como el problema del tráfico capitalino, los planes urbanos, el transporte, la basura, el crecimiento de la ciudad, así como evaluar qué necesitan las empresas de Caracas para seguir viviendo y operando y abocarse hacia temas como la seguridad, vigilancia y otras áreas vinculadas” –dijo-. Por otra parte, destacó el entrevistado que la Cámara de Comercio, primera del país, fue la que dio origen al nacimiento de otros gremios, entre ellos Fedecámaras, Conindustria, Consecomercio, los cuales surgen bajo la iniciativa de la institución más antigua de Caracas, pero para abordar temas nacionales o de sectores puntuales.
Bajar los escalones hasta el comercio informal No obstante, según el experto, a la Cámara aún le falta meterse en lo cotidiano y bajar los escalones y no es fácil dada las condiciones políticas, pero lejos de una institución política, está el tema social y de responsabilidad. “Si las cosas funcionaran –indicó-, la Cámara tendría que participar activamente en los consejos comunales de la zona y en el acercamiento con los barrios y comerciantes informales”. Sugirió que como proyecto las organizaciones civiles podrían contribuir con el comercio informal, organizarlos y atraerlos hacia la Cámara para que se integren con los empresarios y sean partes del sistema; “que no estén excluidos y más
LA CÁMARA DE CARACAS Publicación institucional de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas, Año 5, Nº 9 – Abril 20098 Dirección: Avenida Andrés Eloy Blanco, Edif.. La Cámara Dirección: Avenida Andrés Eloy Blanco, Edif. La Cámara de Caracas, piso 8. Los Caobos. Caracas, Venezuela. Teléfonos (0212)5713222 – 5713990 Fax: (0212)5710050 Página Web: lacamaradecaracas.org.ve E-mail: comunicaciones@lacamaradecaracas.org.ve
bien funciones como redes sociales incorporadas al sistema que se integra en la Cámara”. Hay un alto porcentaje de compañías grandes afiliadas, pero el problema es con las pequeñas que no se suman, a diferencias de otros países que todas las empresas y microempresas forman parte de la cámara de su región. En Caracas eso no sucede, ocurrió en un pasado pero con el tiempo la gente no le ve sentido, pero eso es un plan a futuro –continuó-. Otras cámaras están tratando de unirse porque ven que las fronteras no existen y que los diferentes gremios enfrentan los mismos problemas a pesar que a nivel nacional ocurren otros tipo de discusiones, de allí que sería conveniente consolidar todo en una sola institución, o al menos agruparlas en un mismo espacio físico a gremios como Consecomercio, Conindustria, Fedecámaras, Cámara de Miranda y Cámara de Caracas- afirmó Alejo Planchart-. En su propuesta a largo plazo visualiza a todos esas organizaciones en un solo edificio con un personal común por áreas y especializaciones de trabajo, aunque con juntas directivas distintas, un presidente ejecutivo único que sirviera de vocero y gozara de permanencia, cuyos lineamientos estuvieran dictados por las pautas que dictamina el gremio. La idea es trabajar unidos, en concordancia y no pisarse uno con otros, sino complementarse. “No tiene sentido duplicar esfuerzos, se pierde sinergia y se aumenta la vulnerabilidad económica de la Cámara. Hacia allá es el futuro y aunque no es un camino fácil, hay que seguirlo. Tampoco fue fácil unir las dos Cámaras y aquí estamos hoy” –puntualizó-.
Director: Víctor Maldonado Comité de Redacción: Víctor Maldonado Diana Mayoral Gabriela Sandoval Letizia Buttarello Lavarte (CNP: 6.043) Redacción: Letizia Buttarello Lavarte Colaboradores: Rafael Arráiz Lucca Carolina Jaimes Branger Rafael Alfonzo Hernández Yessenia Pérez Cuetos Diseño Gráfico: María de Lourdes Cisneros
Letizia Buttarello Lavarte Anunciantes en esta edición: Automotriz Éxito Asap Banco Mercantil Banco Plaza BSN Medical Econoinvest Casa de Bolsa Fresenius Medical Care de Venezuela C.A. Manufacturas Venca Teleplastic
Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009 / 3
Constructora
Sambil Cincuenta años haciendo un país
U
na alternativa donde la gente consigue comercios, diversión, cines, restaurantes y entretenimiento, es la que ha hecho proliferar los grandes centros comerciales en las ciudades, pues no es sólo en Caracas donde la pauta la marcó el Sambil Chacao, sino que a nivel nacional los grandes mall son la mejor opción para conjugar actividades y recreación bajo un mismo espacio. La próxima apertura de Sambil La Candelaria, indica que si se continúa construyendo ciudades comerciales de igual magnitud, seguirán llenándose y la gente concurrirá en igual proporción, pues aunque suene paradójico, aún quedan muchos espacios en la capital para seguir edificando majestuosas infraestructuras. La solución a muchos problemas es quizá el motor que sigue impulsando a los inversionistas, pues además de agrupar negocios de todo tipo y variados puntos de comida condensados en un sólo lugar, se contribuye notablemente a la generación de miles de empleos directos e indirectos, de allí que los centros comerciales son indudablemente, una salida para las grandes urbes donde ya no cabe tanta gente ni hay opciones al aire libre. La disyuntiva se presenta en que lamentablemente, tenemos una ciudad muy mal planificada y los barrios siguen creciendo hacia arriba. Está colapsada y le falta de todo: servicios, vialidad, espacios de entretenimiento, esparcimiento, comercio y vivienda, afirmó Roberto Cohen, Director de Constructora Sambil. Como empresarios, siguen aportando con sus proyectos en toda Venezuela –explicó-, pero es que la gente no va más a los centros comerciales porque ya no caben en ellos, más si se siguen construyendo igualmente se llenarían, así esté uno ubicado al lado del otro. Debido a que los Sambil funcionan en horarios diferentes a las oficinas y colegios, es decir en horarios no pico de la ciudad, el tráfico no se afecta, además se les hacen amplios estacionamientos y se colabora con la planificación de las zonas aledañas y vías de acceso.
La puerta de salida Para Cohen la opción para descongestionar Caracas no es sacar a las grandes empresas, que en su mayoría se fueron hace bastante, es mudar los ministerios a donde deben estar y así se descentralizaría la capital. “Se carece de plazas, canchas y áreas verdes, por ello cree que debe dársele mejor aprovechamiento a la Carlota y a los campos de golf, por ejemplo, pero -enfatizó - por tener susto no se puede detener el progreso”.
4 / Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009
“Hay que ceder algunos espacios a la ciudad para el esparcimiento, no para construir más viviendas, sino para ampliar las vialidades, pues es una cuestión de urbanismo, de recuperar los espacios, de mejorar los centros de transporte, las estaciones de metro y paradas. Pero es un plan de gobierno, no de la empresa privada”. Aunque a su criterio ya todo está sugerido pero no se cumple, lo que hace falta es terminar algunas obras iniciadas o darle continuidad a ciertos proyectos como conectar la cota mil con el sureste hasta los Valles del Tuy, Charallave y empalmar Petare y Mariches. Pues el problema del mal servicio de la vialidad termina es afectando mayormente a los pobres. Sugiere también que los dueños de edificios viejos ubicados en El Silencio, Las Palmas, Los Caobos, La Candelaria y otras áreas similares, deberían dar la opción de compra a precios accesibles a los actuales inquilinos, pues eso resolvería uno de los actuales males que enfrenta la población como es la escasez de vivienda, además mejoraría la calidad de vida y de las edificaciones, lo que revalorizaría la zona, a la vez que al sentirse dueña de su apartamento, la gente colaboraría para mejorar sus moradas y cuidaría hasta la fachada sus residencias. “Lo que no es de nadie o simplemente es administrado por una empresa, a nadie le importa y no se consolidan fondos para su cuidado y mantenimiento” –destacó-.
Creer para defendernos del abuso político Por otra parte y como aportes pendientes por concluir en Caracas, destacó Cohen el Centro Galipán en el Rosal, el Sambil La Candelaria y los 300 apartamentos que se construyen en Maripérez, proyectos que desarrollan porque hoy más que nunca siguen creyendo en Venezuela, pues el problema de este país no es económico, sino político y social, de manera que es lo primero que hay que solucionar. “Dentro de todo en Venezuela hay una cuasi democracia, hay libertad de movimiento y de expresión, pero hay que bregar con el tema político que la mayoría de los venezolanos eligieron. Hay que buscar un próximo gobierno o enseñarle al presidente cómo es que queremos que se hagan las cosas y mientras tanto, seguir trabajando y haciendo proyectos, pues la mejor manera de defender los ideales es creando empresas, generando empleo y enseñando a trabajar para defendernos del abuso de los políticos”-señaló Cohen-. Otros proyectos son seguir haciendo edificios de residencia, el Sambil Paraguaná (Falcón), empezar para el año que viene el Sambil Lago en Maracaibo (Zulia) y evaluamos proyectos en Mérida, Puerto Ordaz, Puerto la Cruz, es decir tenemos mucho trabajo porque hay mercado. En edificaciones para ofici-
Barberos europeos nas está el proyecto de Centro Lido en Valencia y en hoteles, aparte de los de Caracas, Valencia, Margarita y San Cristóbal, la meta es seguir construyendo y terminar los que se levantan en Barquisimeto y Paraguaná –dijo-. Referente a la generación de puestos de trabajo, este fuerte consorcio da empleo directo en las oficinas del Grupo Sambil a más de 80 personas, pero hay que sumar los que trabajan en cada centro comercial en vigilancia, mantenimiento, empleados de tiendas, restaurantes y los indirectos vinculados con comercios, estacionamiento, obreros de construcción y proveedores. Para este director la gran satisfacción de la labor ejecutada es lo que se siente al ver como se cambia y construye una ciudad. “Mi tía me dijo un día, ustedes no se dan cuenta de lo que están haciendo y el aporte que dan a cada ciudad, como la transforman.” –agregó–. Ejemplo es San Cristóbal y el cambio que le dio el Sambil a la vida de esa población, además del aporte del Hotel Lidotel. La satisfacción es buena, pues así se hace un país. Lo que empezó hace 50 años es una empresa familiar donde los seis hijos trabajan con su padre, el ingeniero Salomón Cohen, fundador, quien ve complacido que ya una tercera generación empieza a involucrarse. Entre los planes venideros afirma el empresario, está continuar con los hoteles como operadores directos dentro del territorio, pues no tienen proyectos de expansión internacional, “preferimos seguir construyendo aquí porque estamos todos en casa” –indicó-. Aunque la mayoría accionaria es del grupo, suelen buscar algún socio que sea por ejemplo, dueño del terreno, como ocurre con el Banco Mercantil en el Sambil La Candelaria. Sobre esta nueva alternativa caraqueña, informó Cohen que tienen una planificación bien completa sobre las vías de acceso a la nueva edificación comercial, la cual incluye un plan de atención vial que descongestione las zonas aledañas y amplíe los cuatro frentes de la calle; la realización de un boulevard hasta la estación del metro Bellas Artes, y la construcción de un puente que conecte Puente República con la Avenida México y facilite el acceso desde San Bernardino hasta la avenida Bolívar. Aunque parte de estas obras son un proyecto municipal de la Alcaldía, se buscará un trabajo conjunto que apoye la mejora del área y el bienestar de los vecinos, comerciantes y habitantes en general, pues “la filosofía de la empresa es hacerlo bien” y contribuir con la zona, vigilando siempre los detalles para que todo funcione bien –agregó-.
La vena social Para este grupo inversor las obras de carácter social son esenciales, de ahí la importante tarea que cumplen en la construcción de escuelas y hospitales. Como muestra están los proyectos realizados como el Hospital Pérez León en Petare, la remodelación de algunos colegios en Gran Caracas y la edificación de nuevos centros educativos en Margarita, Barquisimeto, los Valles del Tuy, San Cristóbal y otros en proceso. De la mano de Thalma Cohen Kriger (hija de Roberto Cohen), quien apenas estudia 2º año de ingeniería, se consolidó hace un par de meses la Fundación Construyendo Futuro, la cual se encargará de la tarea social en procura de nuevos colegios y centros destinados a fortalecer la educación de los más necesitados, sencillamente como un aporte que se le otorgará al Ministerio de Educación, Alcaldía o Consejos Comunales de la zona, quienes tendrán la responsabilidad de administrarlos para sus comunidades.
Letizia Buttarello Lavarte
M
uchos de ellos engrosaron la diáspora europea de la segunda posguerra. Aunque habían comenzado a llegar antes, con las políticas inmigratorias de López Contreras y Medina Angarita, los más de los musiúes arribaron a los atractivos puertos y ciudades de la Venezuela de Pérez Jiménez, con quien siempre mantuvieron una soterrada identificación. Los que habían salido de las grandes metrópolis bombardeadas y devastadas conocían, por supuesto, la urbanidad y los servicios que los venezolanos todavía asociaban con el desteñido refinamiento del Viejo Mundo. Pero muchos otros vinieron de sus provincias remotas, de sus villorrios parroquianos, a vivir por vez primera en ciudad en las bullentes capitales venezolanas de los cincuenta, en esas que Briceño Iragorry llamara las “ferias de vana alegría” de la modernización y el consumismo rampantes. Picón Salas los vio andar como paletos por algunas esquinas de la capital petrolera, absortos seguramente con el Centro Simón Bolívar y otros rascacielos del furor constructivo al que prestarían su mano de obra. Con sus vallas de neón y sus primeras boutiques, la avenida Urdaneta o la calle Lincoln pronto les hicieron olvidar las acartonadas cúpulas de la Gran Vía madrileña, o la incesante pero empobrecida muchedumbre de las ramblas; del pasaje Zingg a Chacaíto y Las Mercedes, nuestros primeros centros comerciales les hicieron creer que superaban el vetusto esplendor de la galería Vittorio Emanuele o de las primeras arcadas que, si acaso, habían recorrido en Nápoles o Bilbao, en Lisboa o La Coruña. Como en un prodigioso contraste de modernidad, en Venezuela conocieron las neveras y los televisores, visitaron los palacios de cine y manejaron sus primeros carros; quizás por ello siempre conservarían de nuestro país la imagen moderna y progresista, tropical tierra de gracia que les había acogido no sólo con profunda tolerancia, sino también con confort y sofisticación. Aunque décadas más tarde la Venezuela rezagada no pudiera ni compararse con la bonanza de la Europa comunitaria que los reclamaría a través de sus descendientes, pero a la que muchos de ellos se negaron a volver. Con una laboriosidad que ayudó a construir el país multicultural que hemos sido desde el segundo tercio del siglo XX – aunque cierta historiografía roja haya querido hacernos ver como racistas, para desembocar justamente en el chauvinismo provinciano – la inserción económica de aquellos inmigrantes europeos en las ciudades venezolanas fue productiva y varia, sin dejar de asomar patrones ocupacionales. Atraídos por el frenesí de obras públicas de Pérez Jiménez, que trataba de absorber en actividades urbanas la inmigración internacional y provinciana, muchos italianos tendieron al sector constructivo, amasando algunas fortunas que les hicieron ganar la fama de serviles a la dictadura. Españoles y portugueses tendieron, en cambio, a diversos tipos de comercio menor, incluyendo los abastos y las panaderías, de las que llegarían a hacer locales característicos en la ciudad venezolana. Entre los muchos oficios que los inmigrantes europeos asumieron estuvo la barbería. Creo que todo venezolano, hasta el más humilde, puede presumir de un buen corte pelo, gracias en parte a esa herencia que los barberos europeos, sobre todo los italianos, supieron transmitir, al igual que lo hicieran en otras partes del mundo. Anunciados con la característica barra de torneadas franjas blancas y rojas, sus rutilantes negocios aparecieron en aquellos distritos residenciales y comerciales a los que llegaron con sus familias: La Candelaria y San Bernardino, Sabana Grande y Bello Monte, entre las zonas cuyas barberías recuerdo haber visitado. Los amplios espejos biselados y las altas poltronas de cerámica y semi-cuero rojo son parte de un mobiliario que ha acompañado la escucha de las fragmentadas historias de mis barberos europeos de la edad adulta, que son a un tiempo la historia de sus países y del nuestro. Giovanni y el señor Montes llegaron de Sicilia y Galicia, respectivamente, a la sofisticada y cosmopolita Sabana Grande de los cincuenta y sesenta. El primero había estado sirviendo al régimen de Mussolini en Alemania, donde después cayó prisionero; el segundo vino huyendo de la atroz posguerra española y de los atropellos de Franco. Por muchos años los clientes de ambos maestros combinaban los ejecutivos y co-
merciantes de aquel Picadilly caraqueño, con vecinos y habituales de la zona residencial y bohemia que Sabana Grande fue por igual. Un Barrio Latino y una Zona Rosa a la vez, como la recordara todavía González León en la víspera de su muerte, pensando en los intelectuales de Sardio y Tabla Redonda, devenidos ciudadanos de la República del Este hasta los setenta, muchos de los cuales seguro pasarían por las tijeras de aquellos barberos europeos. El Metro aumentó y diversificó la clientela en los ochenta. A partir de 1983 venía más gente del oeste caraqueño a comprar en el recién inaugurado bulevar, aprovechando para cortarse el pelo en aquellos locales que, algo obsoletos ya, eran más baratos que las peluquerías unisex de los centros comerciales; también los gays los frecuentaban de manera más notoria, introduciendo en aquellas barberías pintorescas el desenfado con que habían hecho suya la Sabana Grande bohemia. Pero ya para los noventa comenzaron a notar Giovanni y el señor Montes que los distinguidos clientes tradicionales menudeaban en sus respectivos negocios, porque rara vez venían por aquel distrito en franco deterioro. El tráfico y la distancia eran las excusas que les daban cuando aparecían más bien a saludar, mientras la inmundicia, la buhonería y la delincuencia invadían las elegantes calles de otrora. Pensando en cerrar el local y regresar a Sicilia desde finales de los noventa, Giovanni se daba cuenta de que no había cotizado ninguna seguridad social en Venezuela, pero que tampoco tenía pensión del gobierno italiano. Un drama cruzado del Viejo y del Tercer Mundo: un veterano de la Segunda Guerra que había envejecido carente de todo tipo de ayuda pública en aquel local ya desvencijado, recibiendo a destajo un pago en una moneda devaluada, en un país que se adentraba en una de sus peores crisis políticas del siglo XX. Encorvado pero digno, con las facciones todavía nobles a pesar de las arrugas, su senil desazón resonaba en los escasos comentarios que me hacía, con la confianza ganada después de tantos años de repetir aquella escena tan antigua como cotidiana, mascullando para sí mismo las causas de su incertidumbre angustiante: la falta de pensión y seguridad social para sobrevivir en un país en el que no se podía estar sin pólizas privadas; la esposa de salud deteriorada pero que se negaba a regresar al frío pueblo siciliano, después de vivir en la cálida urbe venezolana; y para colmo de males, aquel “comunista disfrazado, dottore” por el que él había votado en 1998, tomándolo por un militar progresista al estilo de Pérez Jiménez… Encontraba yo la santamaría cerrada con cada vez más frecuencia, hasta que a comienzos de 2004 no abrió más: los marchantes vecinos creen que Giovanni no llegó a irse a Italia, porque evidenció los síntomas de una arteriosclerosis severa; un Alzheimer más probablemente, para dar el nombre de aquella enfermedad nefanda de la que una tarde habláramos sin mentarla. Quizás porque su nombre era parecido al de aquellos alemanes con los que había tenido que pasar tantas penurias, antes de emigrar a Venezuela. Por su parte, con su clientela disminuida y los ingresos mermados, el señor Montes, sin pensión de ningún tipo tampoco, se quejaba de la zona insegura y sucia, de los buhoneros que defecaban y orinaban en las inmediaciones, de aquellas improvisadas cuadrillas vestidas con franelas rojas, las cuales, más que barrer, parecían ensuciar las aceras... Como tantos otros comercios de la zona, un día hubo de pactar con un miembro de la población informal e invasora: arrellanada en un taburete frente a una mesa de plástico y unos auriculares cableados, la sedicente y procaz “telefonera” era el único “rebusque” posible, como me confesó una tarde el barbero gallego, para no tener que cerrar el local cincuentenario.
Arturo Almandoz Cortesía de Fundación para la Cultura Urbana
Una primera versión de este texto fue publicada en El Cautivo, Año 4, No, 33, marzo 2008, http://www.elcautivo.org. Aparece aquí reproducido por cortesía de su editora, María Antonieta Flores, a quien expresamos nuestro agradecimiento.
Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009 / 5
La enfermería rescata espacios perdidos
La profesionalización de una humana vocación
Pasión y sensibilidad son algunas de las cualidades necesarias Pasión al servicio de la salud para dedicarse a esta disciplina de la salud, la cual hoy se posiciona Esta profesión ejercida mayormente por mujeres, cuenta hoy como una de las carreras “de moda” con un grupo de hombres que cada día se suman a esta sana práctica. Uno de ellos es el Dr. Jonis Cordero, odontólogo y más buscada por los jóvenes, enfermero graduado como bachiller asistencial en 1980 y luecon una alta demanda en el mercado go diplomado en la primera promoción de TSU en el Cecilio Acosta de Los Teques. laboral. En virtud de la oportunidad de profesionalización a todos
“
Ser enfermera es una pasión donde se da todo por aliviar el dolor y prevenir enfermedades”, afirma Olivia Zurita, jubilada del Seguro Social y Abogada, quien se destaca en este campo por haber incursionado en el oficio con apenas 13 años, bajo la tutela de la pionera de la enfermería en Venezuela Paulita Santiago Sanoja, formadora de la Escuela de Enfermería de Mérida y propulsora de las primeras promociones en esta disciplina por el año 1935. Pero a partir de 1958 no bastó sólo vocación, sino que se exigió primaria cursada y cierta preparación para ejercer la enfermería, tras la creación de la Asociación Panamericana de Enfermería y la afiliación de Venezuela en 1970. Cuenta Zurita que en 1976 con el cierre de las escuelas técnicas y la apertura del bachillerato asistencial, iniciaron la lucha por una mejor formación hasta logar el nivel de Técnico Superior Universitario (TSU) y la creación del primer Colegio Universitario de Caracas, adscrito a lo que es hoy la Alcaldía Mayor. Seguidamente se fundaron otros centros para TSU, en su mayoría privados, como la Cruz Roja, el Centro Médico de Caracas y el Instituto Universitario de Tecnología. Hacia 1991 y después de una ardua labor encabezada por la doctora Zurita como Presidenta de la Federación de Escuelas de Enfermería de Venezuela, se funda la Escuela de Enfermería Experimental de la UCV, siendo desde este momento que comienzan a profesionalizarse a los bachilleres asistenciales y se brinda la oportunidad a los TSU para obtener la licenciatura en la nueva carrera universitaria. Como ex jefa de enfermeras del Hospital Pérez Carreño, docente universitario y apasionada de lo que defiende (motivo por el cual se diplomó en Derecho para ayudar a los trabajadores de su área), Olivia Zurita comentó la intensa tarea por lograr una profesión independiente de cinco años de duración, la cual dejara de estar supeditada a la medicina e incluyera formación de postgrados y de especialización, razón por la cual en los últimos 15 años ha habido una significativa y gran evolución en esta área. “En los noventa me fijé una meta con el equipo de trabajo y era la profesionalización para todos en el año 2000. Es decir, se dio un plazo de 10 años para las homologaciones, sacar el título universitario y nivelarse. Además con el cambio a Federación de Enfermeras, logramos avances, realzar al gremio y consolidar mejores estrategias” -dijo. Adicional, conseguimos implementar los estudios superiores de enfermería en la Universidad de Mérida; Universidad del Zulia; Universidad Lisandro Alvarado (Barquisimeto); Universidad de Oriente (UDO) con escuelas en Margarita, Anzoátegui y Bolívar; Universidad Miranda (Falcón) y la universidades capitalinas Rómulo Gallegos, Bolivariana, UNEFA y UCV” –afirmó-. Actualmente Enfermería, revalorizada también en salarios dado su carácter independiente y autónomo, es una de las carreras con mayor demanda y podría hasta afirmarse que “está de moda”, pero aunque es muy técnica, requiere trabajar mucho por el paciente y tener sensibilidad humana para poder ejercerla con calidad profesional. Las cifras indican que cada semestre de las diversas instituciones tiene cerca de 100 alumnos, lo que totaliza en Caracas a más de 500 estudiantes por año para nuevos ingresos, así como alrededor de 500 graduandos en el área metropolitana y 1.200 a nivel nacional.
los técnicos con cargos asistenciales en hospitales, Cordero se licencia en enfermería en la Universidad del Zulia y culmina en paralelo su formación de odontólogo en la UCV. Por lo que hoy es uno de los primeros enfermeros graduados en Venezuela que junto a la Dra. Zurita trabaja en procura de impulsar y defender la profesionalización y mejoramiento de este sensible gremio. Según Cordero, quien egresa se inserta inmediatamente al mercado de trabajo porque sólo en Caracas hay un déficit de 3.060 enfermeros, repitiéndose en igual proporción en el interior, por lo que la gran mayoría de estos profesionales tienen 2 y hasta 3 cargos; es decir ocupan varias plazas en salud, sea Ministerio de Sanidad, Seguro Social, Alcaldía o clínica privada. La alta demanda de trabajadores para el área, sumado a la carencia de centros asistenciales y hospitalarios del país, a la falta de presupuestos, más la crisis de la seguridad social venezolana, comprueban que los enfermeros no son suficiente dado el crecimiento poblacional y la merma en nuevas instalaciones de salud. Por otra parte, durante los últimos 8 años por la falta de recursos asignados y el sobrecargo en la nómina del estado, quienes trabajan en el sector público están en calidad de contratados y eso les genera inseguridad, de manera que prefieren irse al sector privado y hacer una especialidad, pues las clínicas les brindan mejores oportunidades. “Aquí no se inaugura hospitales desde 1986 con el Domingo Luciani, pero los hospitales periféricos llamado “de choques” que atienden determinadas emergencias, como el Leopoldo Manrique Terreiro (que recibe lo que viene del Sur, Panameri-
6 / Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009
cana y Valles de Tuy); Pérez de León en El Llanito (los procedentes de Miranda, oriente y este de Caracas); Barquero González en Catia; Lídice y el Hospital Vargas que reciben del centro, del este y del interior; y el Universitario en la ciudad universitaria, no son suficientes para atender a la inmensa población de la Gran Caracas y sus alrededores” – señaló Zurita-. “Los problemas de salud se agravan por las dificultades de acceso a estos hospitales ya que no hay planificación de ciudad, pues la capital está llena de improvisaciones” –afirmó-. “A nivel latinoamericano estamos muy bien posicionados dado el grado de preparación de los venezolanos, además el método local aplicado para formalizar la carrera fue ejemplo de logro en la región, no obstante, no todos pueden ser enfermeros porque es una cuestión de vocación y pasión”. Con un enfoque orientado al servicio de la institución y el paciente, optimizar la capacitación es una de las tareas más interesantes por las que siguen luchando, de ahí los estudios de postgrado que por ahora sólo se imparten en la Universidad de Carabobo, así como la búsqueda de expandir la carrera a propósito del importante papel dentro de la sociedad, y motivar a los jóvenes por crear conciencia que en la medida que la formación sea mejor, habrá nuevos caminos y la actividad será más atractiva. Indicó Zurita que se adelanta un proyecto de ordenanzas de salud integral para todos los profesionales de enfermería, que busca un camino hacia las mejoras del gremio. Para concluir Cordero aseveró que las máximas alegrías de la profesión es la gratificación de ver al paciente recuperado con una sonrisa y agradecido por la atención que se le dio, pues no es cuestión de sueldo, es satisfacción. “Además hemos rescatado espacios perdidos en la enfermería para que ocupe el lugar que le corresponde”. La clave de la profesión es el amor y saber que se cumplió tratando de ayudar al paciente, además de la labor preventiva para tener un país sano y gente con salud” –puntualizó Zurita-.
Letizia Buttarello Lavarte
Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009 / 7
El Parque Nacional El Ávila
El tesoro mejor conservado de los caraqueños
E
l Ávila fue declarado Parque Nacional en 1958 mediante el decreto Nº 473 de la junta de gobierno provisional presidida por Edgar Sanabria, para ese momento tenía una superficie de 66.192 hectáreas; posteriormente en 1974, el área fue ampliada en 19.000 hectáreas, para totalizar las 85.192 hectáreas que conforman al parque hoy en día. Pero mucho antes de ser decretado Parque Nacional, el Ávila era sitio ideal para los asentamientos agrícolas, y aún en la actualidad se observan los vestigios de las haciendas cafetaleras y de complejos sistemas de canalización que proveían agua a los cultivos. Existen distintas versiones sobre el nombre que inicialmente daban los pobladores originales a la montaña: hay quienes aseguran que se referían a ella como Guaraira Repano (Sierra Grande) y otros afirman que el vocablo correcto era wariarepano, que significa lugar de las dantas, debido a la gran cantidad de mamíferos de esta especie que poblaban las montañas. En todo caso, el nombre actual proviene de los antiguos propietarios de estas tierras; durante la época colonial el tramo central de la silla de Caracas fue cedido a Juan Álvarez de Ávila, y la gente empezó a referirse a la montaña como Cerro de Ávila (haciendo alusión a su propietario). El vocablo se arraigó y actualmente se conoce con este nombre a todo el parque y al pico donde esta ubicado el Hotel Humboldt y el teleférico. Dentro del parque pueden realizarse actividades diversas, tales como entrenamiento físico (a pie o en bicicleta) debido a sus pronunciadas pendientes, o recorridos más pausados para entrar en contacto con la naturaleza.
Lo que no puede dejar de conocer El “Pico Naiquatá” es el más alto de toda la Cordillera de la Costa y además uno de los lugares más hermosos en El Ávila. Para un excursionista promedio la caminata dura aproximadamente 6 horas subiendo por el guardaparque “La Julia”. A distintas alturas se aprecia una gran variedad de vegetación y la primera ascensión al Pico fue realizada por el inglés James Spence en 1872
Justo al Norte del casco central de Caracas, se encuentra la cumbre que da nombre al Parque Nacional el Ávila, se trata del “Pico El Ávila” con 2.140 metros el cual está coronado por una de las obras de arquitectura más interesantes y peculiares de la capital: el Hotel Humboldt. Las obras para la construcción del Hotel y el sistema de teleférico para llegar a él se iniciaron durante la dictadura de Marcos Pérez Jiménez; el arquitecto Tomás Sanabria fue el encargado de dar forma al proyecto que se inauguró a finales de 1956, constituyéndose en uno de los símbolos de la Venezuela moderna. Las instalaciones incluían varios restaurantes y salones temáticos, una pista de hielo, un funicular para transportar a la gente desde la estación hasta el hotel, piscina temperada, etc. El sistema de teleférico incluía una ruta que bajaba hasta las playas del litoral central en Macuto, representando una maravilla de la ingeniería civil que permitía disfrutar de la ciudad, la montaña y la playa en cuestión de minutos. La “Julia” es quizás el segundo sitio más visitado del parque y su entrada está ubicada en la parte Norte de la urbanización El Marqués. Por esta misma vía se accede a numerosos sitios de interés como son El Edén, Rancho Grande, Pico Goering y el Pico Naiquatá, siendo ésta la vía más transitada para subir al Pico debido a su pendiente más administrada y a las facilidades para acampar en varios sitios del camino. En la zona de “Rancho Grande” se encontraba antiguamente la residencia del Sr. Juan Gómez, comisario de la zona, quien en honor a su esposa Julia le colocó el nombre a la colina donde hoy se encuentra ubicado el Puesto de Guardaparque. Subiendo aproximadamente 2 horas por la entrada de “Galindo” se puede llegar a un sitio tan misterioso como hermoso, se trata de “Las Ruinas de Mestiatti”. Mestiatti fue un conde italiano que dejó en el altar a la condesa con la que debía casarse, lo que lo obligó a huir de su país. Aparentemente el conde era un jugador empedernido, y el día de la boda alguien le dijo que se había abierto un nueva Casa de Juego donde podía fácilmente ganar dinero apostando. El juego al parecer se extendió más de lo esperado y el Conde nunca llegó a la boda. Después de este desplante el Conde debió huir del país y se estableció en Venezuela a principios de siglo XIX.
8 / Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009
Mestiatti fijó su residencia en las montañas del Ávila donde se dedicó al cultivo del café. Hoy en día todavía se pueden observar las ruinas de la hacienda: los muros de la casa, los canales para conducir el agua de las quebradas cercanas y los patios donde se secaban las semillas de café. Se conoce con el nombre de “Fila del Ávila”, al camino que recorre el parque sobre la cresta de la montaña, atravesando sus elevaciones principales. Debido a la altura del camino la vegetación es del tipo sub-páramo, en su mayoría conformada por matorrales. Uno de los mayores atractivos del recorrido de la fila son las vistas que se observan a ambos lados del camino: de un lado el valle de Caracas y del otro las costas del litoral central. La parte más fuerte de la Fila es la que une el Pico Oriental de la silla con el Pico Naiquatá, también conocida como “Fila Maestra”, se trata de más 6 Km. de camino a una altura promedio de 2.300 metros, con una única toma de agua en la zona del pico Naiquatá (y las praderas cercanas). Los Picos Oriental y Occidental forman la llamada “Silla de Caracas”, debido a su semejanza con una silla de montar. El oriental, con sus 2.640 metros es el segundo Pico más alto de la Cordillera. La manera más directa de acceder a él es a través de las entradas de “Sabas Nieves” o “Cachimbo” con aproximadamente 3 horas de camino. En el pico no existen fuentes de agua, por ello es conveniente abastecerse en los manantiales de “No te Apures” o “Tenería”. “Papelón” es toda la zona adyacente a la sub-estación de teleférico entre Maripérez y El Pico El Ávila. Debido al relieve de la zona, el tendido de las guayas del teleférico no se hizo de forma directa y debió colocarse una torre intermedia o sub-estación en esta loma denominada Papelón. “Lagunazo” es una extensa explanada ubicada al principio de la “Fila Maestra” justo detrás del Hotel Humbolt. Es un sitio muy concurrido por excursionistas debido a las facilidades para acampar y a la hermosa vista que ofrece. El nombre de Lagunazo se debe a la gran explanada para acampar que posee. En el Parque Nacional El Ávila se encuentra una pequeña población conocida como “Galipán”. Los primeros pobladores, provenientes de las Islas Canarias, llegaron hace más de
Ávila ¿dónde estás? El Parque Nacional El Ávila se encuentra ubicado en la parte centro-norte de Venezuela, ocupando una amplia región montañosa de 85.192 Ha. (210.509 Acres); con alturas que varían desde los 120 m. a los 2.765 m. (394 a 9072 pies). Sus limites son: al Este las poblaciones de Chuspa y Barlovento, y al Oeste el Norte de Caracas y el pueblo costero de Catia La Mar. Las principales elevaciones están localizadas en el suroeste del Parque; esta región es la más concurrida ya que las principales rutas y servicios se concentran en esta zona. Sin embargo, es también el área menos virgen del parque. Por el contrario, en la vertiente Norte puede encontrarse naturaleza casi intacta, pero existe poca documentación sobre las rutas, y en algunos casos los caminos han desaparecido. La montaña presenta alturas que varían desde el nivel del mar 0 m. hasta 2.765 m. (Pico Naiguatá), esta variedad de alturas trae consigo diferentes tipos de vegetación. Observando la montaña desde el valle de Caracas es fácil distinguir los tipos de vegetación dispuestos en franjas horizontales: en las laderas inferiores se observa una vegetación baja del tipo sabanero o arbustivo (zona I), seguida hacia arriba de bosques caducifolios o veraneros (zona II). La fauna del parque es muy abundante y variada, la mayoría se encuentra concentrada en la vertiente Norte del Parque, ya que es la parte menos visitada y menos intervenida por el hombre. Sin embargo, en la vertiente Sur es posible observar una variedad amplia de animales, especialmente aves. Las especies que conforman la fauna constituyen muestras representativas de la fauna de toda la cordillera de la Costa: mamíferos, aves y reptiles. 200 años a la vertiente norte del Ávila, en una gran extensión de terreno accidentado. En la región donde recogen la Palma Bendita, los palmeros tienen un campamento que denominan “Cueva de Los Palmeros”. Se encuentra en plena montaña, a 1.620 metros de altitud. Allí se destacan gigantescos árboles centenarios como el Matapalo, Uvito o Higuerote (Ficus). El sitio esta cerca de las cabeceras de la “quebrada Quintero”, posee abundantes cascadas y esta rodeado de grandes peñones en los cuales existen cuevas. Una de estas cuevas la utilizan los Palmeros como altar sagrado en el cual colocan Cristos adornados con rosarios y luminarias. En este campamento suelen pasar días y noches hasta tener recogidas suficientes palmas para transportarlas a Chacao. El “Centro Recreativo Los Venados” está ubicado a una altura de 1.437 metros sobre el nivel del mar, en el Parque Nacional El Ávila y la vía de acceso más idónea para llegar allí es por la entrada que esta en San Bernardino. Allí se puede disfrutar de sitios especialmente acondicionados para picnic, un área para acampar, un campo de deportes, un museo, un auditorio, biblioteca, capilla, cafetín y dormitorios colectivos, además de las extensas áreas verdes con kioscos para el esparcimiento. Ahí también opera la Oficina de Superintendencia del Parque, donde se puede obtener más información, así como el “Plan de Ordenamiento y Reglamento de Uso”.
El Ávila, pulmón de Caracas, es un extraordinario reservorio natural que ofrece sin costo alguno infinitas posibilidades de salud, aventura y hasta investigación, además brinda a la mirada de los que se adentran en su seno las bellezas escénicas naturales de su flora, fauna y la emoción de lo imprevisto. El Ávila en palabras Reconocidas personalidades de la metrópoli opinaron acerca de El Ávila, luego que se le formularan dos preguntas básicas: ¿Qué significa para usted el Ávila? y ¿Qué propone para conservarlo? A continuación sus respuestas:
Nelson Maldonado Presidente de Consecomercio: “El Ávila, recuerdo vivo y diario de mi ambiente ancestral: Los Andes. Su verdor, sus crespones blancos y su contrafuego (ya casi invisible). Más tarde, recuerdos de los primeros amores en ‘el teleférico’, en su pista de patinaje, caminatas y ya más crecido, el bar del hotel Humboldt y la música imborrable del maestro Emilio… Pero como tantos recuerdos gratos, dramáticamente borrados en los últimos años”. Una historia: “papá cómprame un cuadro del Ávila, pero que se vea la ciudad... y me lo envías a España” Lo busco, y descubro que nuestros pintores no se dan abasto en copiar al cerro, con la ciudad incluida… Es el cordón umbilical que une a millares de nuestros jóvenes emigrados con sus recuerdos y su Caracas. Descubrimiento que nos arruga el corazón… Adiós a los gratos recuerdos. El Ávila continúa allí pero ahora los recuerdos son tristes, expresó Maldonado. “Considero que para conservar El Ávila es necesario parar drásticamente en ambas laderas y a cualquier costo, sobre todo político, las construcciones; educar y organizar masivamente a la población, desde la primera infancia, en la necesidad de protección a El Ávila”.
Jorge Botti Empresario del sector ferretero: “El Ávila, en primer lugar, simboliza mi infancia y adolescencia. El haber tenido la fortuna de vivir a sus pies y tenerlo como jardín en la casa donde crecí, aparte de haber sido un privilegio, ocupa un lugar imborrable en mi memoria. Luego llegó el progreso, y con él la construcción de la llamada ‘Cota Mil’ que me robó mi jardín... el jardín de todos los de la cuadra. Hoy, El Ávila es una pintura que admiro cada mañana cuando encaro la ciudad y su enjambre inhumano de tráfico y angustias. La montaña es un escape, una invitación a respirar hondo cada vez que se me antoja pensar que estoy en su cima, cada vez que pienso que solo ella, altiva e imponente, me separa de una pasión mayor, el mar...” “El Ávila es la última frontera de una ciudad ultrajada por el desorden y el desdén de los que la habitamos y quienes la gobiernan. Su conservación, a mi juicio, no es solo cuestión de conciencia ecológica colectiva. Es la comprensión fehaciente de que su eventual deterioro, lento pero incesante, significaría la muerte de la ciudad; la desaparición de sus valores históricos más sustanciales; y con ello, la desaparición final de nuestra identidad social”. Es imprescindible, por ende, mantenerlo aislado del crecimiento de la ciudad; así como protegerlo como parque nacional, regulando su uso y disfrute y desarrollando planes permanentes de reforestación de áreas afectadas, afirmó Botti.
Mercedes Pulido Ex Ministra de la Mujer: “Lo permanente, la pertenencia y la identidad son significados simbólicos del Ávila en nuestras vidas. Es la referencia de lo que trasciende y nos arraiga. Descubrirlo es una conversación continua con la vida”.
“Su conservación y enriquecimiento es parte del amor a la vida. Para ello hay que descubrirlo día a día. En los niños la información, unida a sus paseos, es parte de hacerlo propio en nuestra cotidianidad. En la población, disfrutarlo como se disfruta lo propio”. Para Pulido “la información pero también su inserción en nuestro inventario de disfrute es fundamental”.
Ramón Campos Representante de Inparques: “Para mí El Ávila o Waraira Repano es mi vida, por eso trabajo para su protección y conservación. Este Parque Nacional me ha dado la oportunidad de ver la naturaleza desde otro punto de vista y de sentirla a plenitud”. Para conservarlo no se debe proponer, sino hacer –dijo-. “La sensibilización ambiental, especialmente en los más pequeños; a mi juicio es una de las cosas más importantes, ya que así estamos asegurando su protección. La recuperación de las zonas afectadas por los incendios de vegetación, esto a través de las jornadas de reforestaciones en donde participan voluntarios, visitantes, guardaparquitos, empresa privada y pública”.
Pedro De Armas Director Centro Excursionista Loyola: “Para mí el Ávila es un gran regalo de Dios para Caracas y para todos los que la habitamos. Por una parte es el gran pulmón vegetal de la ciudad y por otra parte es un lugar maravilloso al cual podemos realizar excursiones para conocerlo y poder pasar gratos momentos en armonía con la naturaleza”. “Ante todo es necesario desarrollar en la colectividad una gran conciencia conservacionista, destacando la importancia de que todos hagamos el mayor esfuerzo para proteger el Ávila contra incendios, deforestaciones, invasiones, maltrato a las especies existentes en el mismo; también es importante promover campañas de arborización y mejorar los mecanismos existentes para combatir incendios, invasiones y otros problemas que pudieran presentarse” –consideró De Armas-.
Diana Mayoral Presidenta de La Cámara de Caracas: “Todos los que hemos tenido la oportunidad de ver El Ávila en algún momento de nuestras vidas sabemos que hay pocas cosas tan maravillosas en el mundo. Tengo un amigo que dice que una de las razones por la que no se iría de Caracas es porque si tuviera que despertarse día tras día sin ver el Ávila, se moriría. El Ávila es una de las pocas cosas que los ciudadanos de Caracas no hemos podido echar a perder, tenemos por él un respeto especial que nos ha permitido mantener nuestro ‘pulmón vegetal’ como tal”. Ojalá en el futuro podamos seguirlo manteniendo así y que podamos ver campañas de concientización y educación para los habitantes de esta ciudad y sobre la importancia que tiene en nuestras vidas, expresó Mayoral. “Pienso que no hay suficientes planes de conservación estructurados, como resiembra en caso de incendio, mantenimiento de corta fuegos, asistencia en caso de derrumbes etc., lo cual podría ser un buen programa de responsabilidad social empresarial”.
Yessenia Pérez Cuetos
Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009 / 9
Primera franquicia afiliada a la Cámara de Caracas
Tequechongos
Incoterms:
una marca que crece en sabores
lenguaje universal del comercio
iniciaban, de manera que comenzaron a proyectar la marca y el modelo del negocio bajo la modalidad de franquicia, así como a consolidar una planta propia que operaba de manera artesanal y cuenta con un personal que hoy día sobrepasa de 100 trabajadores directos. Con 23 puntos a nivel nacional, cuyo primer centro fue en la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) en el año 2004, para los actuales momentos han frenado el crecimiento para posicionarse bien antes de continuar la expansión, sin embargo gozan de 11 establecimientos en Caracas entre centros comerciales, hipertiendas y universidades, mientras que en el interior están en los estados Sucre, Bolívar, Anzoátegui, Lara, Barinas, etc. y tienen pendiente por abrir este año 6 ó 7 puntos más, lo que incluye Caracas, Los Teques y otras ciudades.
Un pequeño gran negocio
E
sta primera franquicia afiliada a la Cámara de Caracas, es además la ganadora de la categoría “Microfraquicia del año 2008”, de acuerdo con la premiación anual que otorga la Cámara Venezolana de Franquicias (Profranquicias), pues no sólo ha destacado como una compañía en pleno crecimiento, sino que su visión a futuro la consolida como una pujante empresa que apunta hacia un norte bien definido, entre ellos rescatar y seguir posicionando, un producto cien por ciento venezolano, preparado al estilo casero con ingredientes de la más alta calidad. Sin duda Tequechongos ya suena entre los consumidores venezolanos, pues no sólo basta con ver el stand donde se comercializan los productos, que semeja al empaque donde se venden los productos, sino que la marca tiene un interesante grado de recordación entre el público, quien además de consumirlo en centros comerciales, ferias de comidas y diversos puntos de venta del territorio, puede adquirirlo en supermercados, cines, eventos públicos, fiestas y actividades infantiles, entre otros. Argenis Carpio, Gerente de Franquicias, explicó que la empresa nació hace 6 años bajo la razón social de Inversiones Papachongas, cuando Enrique Croes, Gerente General, tuvo la idea de replicar la venta de conitos con papas fritas como lo hacen en otros países; pero un día probó sustituir las papas por tequeños elaborados con una antigua receta familiar y además consolidó una buena alianza con Cinex, lo cual cambió totalmente el paradigma de comer tequeños también en el cine. “El éxito fue inmediato y apostamos, nos arriesgamos y ganamos. Empezamos a expandirnos bajo el modelo de concesiones donde dábamos el equipo para operar, aunque en los cines sería manejado por ellos mismos. Así comenzaron las contrataciones en fiestas, eventos corporativos y grandes actividades, hasta lograr un posicionamiento paulatino de la marca, ya que toda la promoción había sido boca a boca por recomendaciones”. “Nos ayudó que el producto es conocido, sin embargo el éxito se obtiene por rescatar algo típico que existía y es oriundo de Venezuela. Empezamos a explotarlo como un producto autóctono, dignificado y darle calidad y servicio tipo franquicia para colocarlo al alcance del público, además lo acompañamos con una buena estrategia y concepto”agregó Carpio-. Explicó el gerente que la disyuntiva se les presentó en cómo crecer sin invertir, pues eran emprendedores que apenas se
Sin reglas para ubicarse, pero con el propósito de seguir posicionándose y estar presente en lugares de tráfico peatonal considerable, el consumo de este producto obedece en parte, a una compra impulsiva que atrapa por el concepto visual y de imagen, además hasta ahora viene en tres variedades: tradicional de queso paisa, papelón con queso y jamón ahumado con queso, a la par que evalúan nuevas versiones como queso crema, guayaba y nutella. El respaldo de alianzas productivas con marcas como Paisa, Cinex y Pepsi, corroboran la calidad de los productos, toda vez que se perfilen nuevos respaldos que seguirán reforzando la marca y ofreciéndole a los consumidores novedosas alternativas con jugos y café. El gerente de franquicia detalló que el modelo de negocio que ofrecen es tamaño estándar y requiere una inversión aproximada de 80 mil bolívares fuertes, más la reposición de mercancía que variará según las ventas de cada punto, pero se estiman sobre 6 mil bolívares fuertes cada mes. El margen de rentabilidad para un franquiciado puede estar entre 16 y 23 por ciento con un tiempo de recuperación de inversión de 8 a 11 meses. El volumen de venta mensuales en Caracas es de 50 mil bolívares fuertes, lo que significa cerca de 2 mil bolívares fuertes diarios por punto bruto, mientras que en el interior el promedio es el doble, es decir de 90 a 100 mil bolívares fuertes cada 30 días, pues las franquicias criollas en el interior tiene mas éxito que en Caracas. Referente al volumen de producción, Carpio indicó que el tequeño que manufacturan es tipo premium y tienen como meta llegar próximamente a 600 mil unidades mensuales, para ello el crecimiento con miras a satisfacer la demanda y penetrar nuevos mercados. Entre los planes futuros, comentó que planifican la proyección al exterior mediante la exportación del producto congelado a través de canales de distribución, inverso que en Caracas donde se posicionó primero en el punto de venta y luego lo llevaron a los supermercados. En paralelo, aspiran abrir al menos 20 nuevas franquicias para 2009 en centros comerciales nuevos e ir llenando los mercados en el interior. Finalmente, agregó Carpio que la logística, comercialización y distribución la realizan empresas externas porque son conocedores de estos procesos, sobretodo porque son alimentos que deben mantenerse bajo ciertas condiciones especiales. Tras el reciente cambio de la razón social a inversiones INVEPA, CA y la mudanza de la planta a instalaciones más amplia que les permita consolidar la estructura organizacional de la compañía, la empresa busca darle un toque diferente al negocio, entre ellos retomar la venta de papas fritas pero servidas con concha, para que sea un elemento diferenciador que vendría acompañado de salsas diferentes. Aunque actualmente son una marca poderosa a nivel de marketing, el gerente resaltó la importancia de agremiarse porque eso les da fuerza y agrega valor, a la vez que los consolida como una empresa con un buen norte que cuenta con el respaldo de instituciones sólidas y con credibilidad.
10 / Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009
Letizia Buttarello Lavarte
L
a globalización de la economía da a las empresas un acceso más amplio, así como un alcance a los mercados de todo el mundo; las mercancías se venden en más países y en mayores cantidades y variedad. Sin embargo, a medida que aumenta el volumen y la complejidad de las ventas internacionales, crecen proporcionalmente las posibilidades de malentendidos y de litigios costosos cuando los contratos de compraventa no se redactan adecuadamente. Los Incoterms, que son normas oficiales de la Cámara de Comercio Internacional (ICC) para la interpretación de los términos comerciales, facilitan la gestión de las transacciones internacionales. La referencia a los Incoterms en un contrato de compraventa define claramente las obligaciones de cada parte y reduce el riesgo de complicaciones legales, pues forman parte de ese lenguaje común que la ICC ha tratado de instituir en el mundo de los negocios a través de la creación de herramientas como esta. La finalidad de los Incoterms consiste en establecer un conjunto de reglas internacionales para la definición de los términos comerciales más utilizados en las transacciones mundiales. De ese modo, podrán evitarse las incertidumbres derivadas de las distintas interpretaciones de dichos términos en países diferentes o, por lo menos, podrán reducirse en gran medida. Debe recalcarse que el alcance de los Incoterms se limita a los derechos y obligaciones de las partes en un contrato de compraventa y en relación con la entrega de las mercancías vendida “tangibles”, sin incluir las “intangibles” como el software de computadora, a la vez que son en total 13 Incoterms divididos en 4 grupos. Dos equivocaciones en relación a los Incoterms son muy frecuentes: la primera de ellas es que a menudo se interpreta incorrectamente que los Incoterms se aplican al contrato de transporte y no al contrato de compraventa; segundo, que se da por sentado erróneamente que regulan todas las obligaciones que las partes deseen incluir en el contrato de compraventa. La ICC siempre ha destacado que los Incoterms se ocupan sólo de la relación entre vendedores y compradores en un contrato de compraventa, y más aún, sólo de algunos aspectos bien determinados. Mientras que es esencial para los exportadores e importadores tomar en consideración la vinculación práctica entre los diversos contratos necesarios para ejecutar una venta internacional –donde no sólo se requiere el de compraventa, sino también los de transporte, seguro y financiación-, los Incoterms se refieren sólo a uno de esos contratos: el documento de compraventa. Los Incoterms fueron concebidos para ser utilizados cuando las mercancías se venden para entregarlas más allá de las fronteras nacionales; por lo tanto, son términos comerciales internacionales. Sin embargo, en la práctica también se incorporan a veces a contratos de compraventa en plazas puramente nacionales. Cuando los Incoterms se utilizan así, las cláusulas A2 y B2 y cualquier otra estipulación de otros artículos relativa a la exportación y a la importación se tornan superfluas. No obstante, la Cámara de Comercio Internacional (ICC Venezuela) es la única institución autorizada en el país para certificar a las personas en el correcto uso de los Incoterms.
Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009 / 11
Cálido homenaje a un Ex Presidente
Roberto Ball:
un hombre íntegro y transparente que no negocia sus principios
E
l pasado mes de octubre en un ambiente de mucha emotividad y calidez, tuvo lugar un encuentro entre amigos, familiares y compañeros de labores para rendirle homenaje a Roberto Ball Zuloaga, empresario venezolano que luego de una interesante trayectoria gremial, fue agasajado por la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas, mediante un sincero acto que reconoció su gestión como presidente de esa institución. Fue así como el Auditorio de la institución abrió un lugar para colocar un retrato de Ball junto al resto de los hombres que rigieron los destinos de ambos gremios, y la excelente fotografía se integró a la Galería de Ex Presidentes ubicada en dicho recinto, donde además reposan antiguas imágenes que datan del siglo XIX, cuando se funda la Cámara de Comercio de Caracas, institución pionera del país que sentó las bases para la creación de otros gremios y de lo que es hoy La Cámara de Caracas. Roberto Ball Zuloaga, quien llevó las riendas de la Cámara durante el período 2006-2008, recibió un afectuoso homenaje, producto de su sensatez, calidez humana y trayectoria profesional, virtudes que lo han llevado a ser reconocido como un hombre cabal, íntegro, trabajador y fiel creyente de lo que hace. En tal sentido, la Cámara preparó un video como reconocimiento al Expresidente, el cual fue bastante conmovedor dado el elemento sorpresa para el protagonista de la velada. En el mismo se recogen algunas manifestaciones dignas de resaltar como las expresadas por su madre, la señora Mercedes Zuloaga de Ball, quien dijo “él nació responsable (…) nunca habló mal, siempre fue como un viejo en miniatura”. Diana Mayoral, Presidenta de la Cámara de Caracas, lo considera una persona fuerte, bien plantada, que ha logrado llevar adelante la empresa y la industria que le tocó dirigir y no por ser empresario ha dejado de ocuparse de los intereses de su gremio. Nelson Maldonado, Presidente de Consecomercio, afirma que es la persona más transparente que ha conocido. “Es incapaz de mentir, inclusive en los momentos más difíciles se
atreve a decir, a dar opiniones de la manera más franca, transparente y valiente. Aunque tenga una sonrisa en la cara es sumamente dramático, drástico, claro y yo diría a veces hasta duro, pero es transparente. Yo admiro eso de Roberto Ball: su transparencia. No tiene dobles caras jamás”. Marisol Fuente, Ex Gerente General de la Cámara de Industriales, afirma que Roberto es un hombre íntegro, con unos valores y con unos principios familiares muy importantes de trabajo, de responsabilidad y muy comprometido con el presente y con el futuro de su país, porque además es un gran conocedor de la historia de Venezuela. Por su parte Nicolás Vegas, compañero de la Junta Directiva, expresó “Roberto es una persona fiel creyente en las libertades económicas en los mercados, es una persona que cree en las instituciones y en su fortaleza y en que los grandes países están hechos de grandes instituciones”. Se le pidió a cada entrevistado que definiera con un elemento la personalidad de Roberto Ball. Para su madre y Diana Mayoral es un roble, para Nelson Maldonado y Marisol Fuente es el mar, por lo fuerte, mientras que para Nicolás Vegas es un bombillo, porque es una persona que le gusta irradiar su luz en los temas donde se involucra. Aunque es difícil autodefinirse, Roberto Ball se ve a sí mismo como un hombre de negocio que le gusta trabajar muy duro y que su vida está centrada en su familia; es de la convicción que los valores no son negociables. “No hay tonos grises cuando se trata de los principios, de los valores y la honestidad. En las cosas fundamentales de la vida
12 / Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009
hay blanco y negro. Las cosas que son correctas son correctas y las que no, lo son no lo son” –indicó-. Asimismo lo ven sus amigos y familiares, pues Doña Mercedes Zuloaga afirma que para él no hay matices, las cosas son o blancas o negras, al igual que Nelson Maldonado y Marisol Fuentes. Diana Mayoral lo considera totalmente inflexible y Nicolás Vegas lo observa como una persona que está muy clara en sus principios, los cuales por supuesto, no negocia. Para todos Roberto es un hombre íntegro en quien se puede confiar, de ahí algunos mensajes sinceros y afectivos que ratifican el verdadero aprecio y el alta estima que le tienen, a la vez que lo impulsa a seguir trabajando y luchando por lo que cree, pues personas de ese “calibre” tiene un gran papel que jugar por el futuro de Venezuela. Finalizado el reconocimiento, el homenajeado se dirigió al auditorio con un breve discurso y agradeció a los presentes por las atenciones, en especial a la directiva y personal de la Cámara de Caracas. Seguidamente y gracias al patrocinado de Econoinvest Casa de Bolsa, Banco Mercantil, Automotriz Éxito y Grupo Fuller C.A., se compartió un ameno concierto a cargo del trompetista Francisco Flores Colmenares, del cuatrista Héctor Molina y el bajista Rodner Padilla, y se culminó con un sociable brindis, donde compartieron junto a Roberto Ball sus más cercanas amistades, así como sus familiares y compañeros de labores. Entre los presentes destacaron: Diana Mayoral (Presidenta de la Cámara de Caracas), Eduardo Gómez Sigala (Presidente de Conindustria), Nelson Maldonado (Presidente de Consecomercio), Rafael Alfonzo (Presidente de Cedice), Francisco Mendoza (Presidente de AVEX), Lope Mendoza (Primer Vicepresidente de Fedecámaras), Carlos Larrazábal (Primer Vicepresidente de Conindustria), José Luis Betancourt (Ex presidente de Fedecámaras), Alejo Planchart (Ex presidente de La Cámara de Caracas), Enrique Conde Delfino (Ex presidente de la Cámara de Industriales de Caracas); Mercedes Zuloaga de Ball (madre del homenajeado), Ismael Pérez Vigil (Director Ejecutivo de Conindustria), Víctor Maldonado (Director Ejecutivo de la Cámara de Caracas), Anneke Ball, Alexandra Arreandiaga, Mercedes Margarita Ball, Alejandro Chumaceiro, Carlos Vogeler, Haydeé Cisneros de Salas, Cira Romero, Marisol Fuentes, Ana Teresa Machado, Marisabel Otaola; Eduardo Rivas, Juan Ríos, Ingrid Marín, Ray Castillo y miembros de la Junta Directiva y personal de la Cámara de Caracas.
Letizia Buttarello Lavarte
Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009 / 13
Línea de Tiempo Octubre
Acto de Develación de la caricatura del ex presidente de la Cámara de Industriales Jorge Jezerkas (2001-2003), que tuvo lugar en la sede de Cámara de Caracas el 9 de octubre de 2008. De esta manera el cuadro se integró a la Galería de Presidentes que honra la Sala de Conferencias de la institución, donde reposan retratos y caricaturas de hombres que han llevado las riendas de la Cámara de Industriales y de la Cámara de Comercio desde su fundación en 1894. Es así como se atesoran en un mismo espacio antiguas fotografías en blanco y negro y las obras dibujadas de tres diferentes caricaturistas, las cuales ordenadas cronológicamente, permiten hacer un recuento y recordar los rostros de importantes empresarios que han contribuido a formar parte de la historia de Venezuela. Homenaje y Develación de retrato de Roberto Ball Zuloaga, evento signado de mucha emotividad y calidez que se celebró en el Auditorio de la Cámara de Caracas el 21 de octubre de 2008, como un sincero reconocimiento a la gestión como presidente de la institución durante el período 2006-2008. De esta forma, la imagen de Ball pasó a integrar la Galería de Ex Presidentes ubicada en el recinto. Asimismo, se exhibió un conmovedor video preparado con la participación de amigos y familiares, a la vez que se destacó su profesionalismo y virtudes personales, hasta concluir con un agasajo entre compañeros y buenas amistades.
14 / Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009
Noviembre
Presentación y Bautizo del libro El Comercio diario en la Caracas del siglo XVIII, celebrado el 6 de noviembre en el Auditorio de la Cámara de Caracas, el cual fue escrito por Rosario Salazar Bravo y editado con el apoyo de la Fundación para la Cultura Urbana y la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UCV. Con esta obra el lector se adentra en el estudio del desarrollo del mercado y el flujo económico en la ciudad colonial de Caracas; fenómeno al cual obedece el crecimiento disparejo y la complejización de relaciones que, a través del tiempo, dio nacimiento a la vertiginosidad característica de la ciudad capital moderna. El V Encuentro Empresarial de Caracas realizado el 26 de noviembre de 2008 en el Hotel Tamanaco Intercontinental, sirvió de escenario para agrupar a empresarios y reconocer la labor de profesionales, quienes con su trabajo han dado un importante aporte a la sociedad. Se entregaron los reconocimientos al Empresario del Año, Servidor Público, Premio de Periodismo Audiovisual, Premio de Periodismo Impreso y Mejor Aporte Arquitectónico y Urbanístico para Caracas. Para amenizar el evento se contó con la participación especial de Oscar D´León, quien con su toque de alegría hizo de la jornada una fiesta bailable muy especial donde concurrieron más de doscientos invitados.
Enero
El 21 de enero de 2009 en la sede de la institución, la Directiva de la Cámara de Caracas le entregó al Alcalde Metropolitano Antonio Ledezma una propuesta “De la Cámara de Caracas para Caracas”, la cual muestra múltiples y positivas posibilidades para lograr una alianza entre sector público y privado con el propósito de mejorar la vida de la ciudad. El documento presenta alternativas para promover más empresas en la región capital y en consecuencia, generar nuevos puestos de trabajo que mejoren y dignifiquen la calidad de vida de los ciudadanos. Asimismo, plantea otros puntos como el portal metropolitano (taquilla única digital); Sistema de Atención al Empresario del Cuerpo de Bomberos Metropolitano; Programa de Formación y Certificación de artes y oficios; Modelo de Control de Gestión “Caracas cómo vamos”; Experiencias exitosas en RES y Desarrollo de comunidades populares y Modelos de desempeño y la Atención Pública La ocasión fomentó el intercambio de ideas y acercamiento institucional entre empresarios, comerciantes y la autoridad gubernamental, a fin de buscar resolver los problemas que atañen a los venezolanos y su área metropolitana.
Gerencia Estratégica para afrontar una Situación de Crisis fue el foro que realizó la Cámara el 22 de enero donde se facilitaron estrategias para resistir la difícil situación económica que se avecina y no escapa a Venezuela, como consecuencia de la recesión mundial y la caída de los precios del petróleo. Fue así como un importante grupo de especialistas se reunieron para analizar la coyuntura actual y suministrar herramientas, que sirvieran como referencia para paliar las contingencias en los entornos laboral y personal. Con un importante grupo de expertos que trataron temas de gerencia, finanzas, mercadeo y recursos humanos, los presentes tuvieron un panorama general para saber hacia dónde y cómo manejarse en el nuevo entorno.
Febrero
Con dos destacados expertos en materia laboral, el 19 de febrero se llevó a cabo el foro “Solución de las diferencias laborales frente a entornos cambiantes”, el cual brindó a la concurrencia una serie de recomendaciones con el objeto de minimizar los impactos negativos de algunas leyes y normativas vigentes. Evaluando los problemas más graves para las empresas y presentando algunas salidas posibles, se comentaron las implicaciones y se hizo hincapié en la necesidad de contar con especialistas asesores en derecho laboral y en recursos humanos.
Marzo
Dudas Tributarias, conozca sobre los Impuestos Empresariales y Cómo evitar sanciones, fue el foro efectuado el 19 de marzo en la Cámara de Caracas, en el que un grupo de especialistas dieron a los participantes las herramientas necesarias para declarar adecuadamente los tributos y evitar sanciones. Igualmente se evaluaron las nuevas disposiciones legales y las erogaciones que deben cumplir las empresas, así como todo lo relativo a los impuestos municipales y las consecuencias de su incumplimiento. Quinta Asamblea General Ordinaria.El 26 de marzo de 2009 la Cámara de Comercio Industria y Servicio realizó su Quinta Asamblea General Ordinaria, la cual tuvo lugar en horas de la tarde en el Auditorio ubicado en el edicio de la institución. En el marco del evento se celebró una sesión especial de Consejo Metropolitano de Gobierno, donde se dieron cita los Alcaldes de Caracas para compartir con el público presente los avances en los planes y programas sobre Seguridad Ciudadana, Promoción Empresarial y Espacio Público. Asimismo, quedó ratificada la actual junta Directiva encabezada por la Dra. Diana Mayoral para el perído 2009-2010. Por último, la jornada estuvo amenizada por el reconocido guitarrista, compositor y arreglista venezolano Aquiles Báez y culminó con tradicional brindis entre amigos, afiliados y relacionados.
Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009 / 15
Kiosco Génesis Nitopi Dedicado de alma y corazón al negocio
V
einticuatro años continuos de actividades y un nuevo concepto de venta es lo que marcó la diferencia de esta microempresa, cuando un 3 de septiembre empezó bajo el formato de un pequeño kiosco y un capital adquirido bajo préstamo de cien mil bolívares (hoy 100 bolívares fuertes), financiados a cinco mil bolívares mensuales (5 bolívares fuertes actuales), el cual desde sus inicios redefinió un estilo que ha servido de modelo a otros negocios posteriores. El trato personalizado y el concepto de auto-kiosco, donde la gente sin bajar del vehículo podía efectuar su compra y continuar su recorrido, hoy nada innovador, hace casi un cuarto de siglo impulsaron un salto a la tradicional forma de comercializar la prensa, pues este pequeño comercio además de vender periódicos y revistas aumentó la oferta de “chucherías”, cigarrillos e introdujo algunos productos importados, lo que cautivó una potencial clientela demandante de revistas especializadas que sólo las adquirirían en puntos de ventas específicos. Fue así como Roberto y Lía Nitopi, socios, esposos y licenciados en Educación de la UCV, dejaron los libros y clases en aulas, para dedicarse de domingo a domingo a consolidar en un kiosco el proyecto propio de una “especie de mini-librería”, lo cual sin duda prometía mayor rentabilidad porque serviría de base para iniciar otra actividad en el futuro. Pero la suerte fue otra, y el kiosco ubicado en una vía de paso bastante concurrida de Colinas de Bello Monte, creció, aumentó sus clientes y consolidó amigos, atraídos por el buen trato y servicio donde la calidad, amabilidad y atención personalizada (hasta en diferentes idiomas), lo convirtió en más que un punto de referencia en una intersección, pues cuenta con más de 1.000 títulos entre nacionales y extranjeros, prensa, tarjetas telefónicas, refrescos y los demás artículos frecuentes que se expenden en los kioscos. Bajo el concepto de ofrecer comodidad al comprador y llevarle su mercancía hasta el vehículo para que la gente se sintiera bien, la idea de hacer algo distinto dio resultados, pues el consumidor se percató que estos jóvenes emprendedores estaban haciendo algo fuera de lo normal, enmarcados en el buen humor y la alegría, aunque partieran del simple hecho de vender periódicos.
Con el pasar de los años, Génesis Nitopi se convirtió también en mayorista de prensa a las zonas aledañas, reparto a domicilio y sostuvo por un tiempo una especie de galería de antigüedades con piezas interesantes de colección para la venta, proyectos insostenibles por motivos de tiempo y espacio, pero que en su momento funcionaron de manera excelente y resultaron satisfactorios para sus dueños y clientes. Asimismo, bajo el diseño del propio Roberto Nitopi construyeron un kiosco con una estructura moderna apropiada para el espacio donde está ubicado, el cual goza de electricidad y cumple legalmente con todos los requisitos y permisos exigidos por la Alcaldía, a la par que prestan un servicio beneficioso para los pobladores de la zona y comunidad en general. No obstante y luego de tantos años de trabajo, además de la pérdida hace 6 años de su esposa Lía, hace que el cansancio se apodere del cuerpo y mente de Roberto, razón por la cual este brasileño de padres italianos que llegó a Venezuela a los 14 años, ha decido darle un nuevo rumbo a su vida y comenzar a disfrutar lo cosechado, con la incursión en otras áreas comerciales y proyectos diferentes que prefirió reservarse.
“El dinamismo adoptado incentivó a otros a copiarnos” “Aunque el negocio se mantiene y sigue su marcha, la situación económica y las limitantes en las importaciones por consecuencia del control de cambio hacen que las cosas no sigan iguales, pues la inflación obliga que la gente compre publicaciones especializadas de manera más pensada y quizá sólo por motivos laborales, pues sin duda ya no se invierte igual” -afirmó Roberto-. “Muchos de los bienes ya no llegan y todo se ha incrementado; por ejemplo una revista que hace 5 años costaba 15 bolívares fuertes, hoy vale 45 bolívares fuertes, motivo por el cual las ventas se han contraído a pesar que trabajamos con un público target AB. Es decir los clientes se limitan, se vuelven más selectivos, miden mejor sus gastos y distancian la frecuencia de compra” –agregó-.
16 / Publicación Institucional de La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas. / Año 5, No. 9 - Abril 2009
Explicó que la mayoría de su clientela es fija, generalmente vecinos de la zona y 60 por ciento de lo que comercializa es nacional, pues lo importado está presentando fallas de distribución, no obstante, están las colecciones que traen los periódicos locales cuyos obsequios (libros, DC, DVD, etc.) son traídos de Colombia, España, México y Perú. Señaló el empresario que el margen de ganancias de este tipo de negocios es apenas de 20 por ciento sobre las ventas bruta, por eso debe estar atento a las pérdidas y no delegar el kiosco en alguien que pueda llevarse lo que se gana. Como único propietario, las inversiones mensuales están alrededor de 40 y 50 mil bolívares fuertes con una rotación de productos diaria, mientras que el stock de mercancía fijo va de 50 a 70 mil bolívares fuertes, excluyendo tarjetas prepagadas. Para Roberto Nitopi lo más difícil de estos 24 años para sacar el negocio adelante ha sido acostumbrarse a la metodología de trabajo y a la rutina de 7 días de la semana, que te hace “esclavo del trabajo”, con jornadas muy fuertes que obligaban a levantarse a la 1 de la madrugada para empezar la faena “hubo una gran cuota de sacrificio”. “Quizá la misma dinámica que adoptamos fue la que nos impulsó a servir de ejemplo y a que otros adoptaran nuestro comportamiento, cosa que fue positiva y nos alegra. Fuimos un elemento multiplicador e incentivamos a otros a copiarnos” –afirmó-. Hoy Génesis Nitopi con un registro diario que sobrepasa de 500 vehículos, opera con Roberto, Carla su actual compañera quien lo ayuda frecuentemente, y dos muchachos que le colaboran (uno de ellos Renato con 14 años trabajando en el Kiosco), pero requiere mayor organización en la parte contable como toda microempresa, además de necesitar una persona de confianza que trabaje con dedicación y mística en quien se pueda delegar. Igualmente, la distribución de prensa está limitada sólo a Embajadas, Alcaldía y algunos comercios y clientes puntuales, a pesar que Roberto sigue madrugando cada mañana para buscar el mismo los periódicos. A pesar que no lo vio nunca como un proyecto de vida, sino como un trampolín hacia otra cosa, el negocio resultó, se expandió y aún permanece. Complacido y sin arrepentirse manifestó sus logros y satisfacciones económicas y profesionales, pero detenidamente analiza si lo volvería a repetir de la misma manera. Este interesante oficio que acarrea aprendizaje y conocimiento de mucha gente me ha dejado mucho a nivel personal –dijo-, pero es necesario involucrarse y tener verdadero deseo de trabajar, así como establecer objetivos generales para ir diseñando estrategias que deberán mantenerse o modificarse de acuerdo con los resultados y cercanía a la meta. “Lo importante es tener la voluntad para crecer y llenar tu vida con algo positivo, que te guste y sea rentable”- puntualizó-. Comentó que tiene proyectos en mente pero hay dudas por la inestabilidad jurídica para invertir del país, pues no hay estimulo y todo es más difícil y competitivo. “Me he dedicado de alma y corazón al negocio”, por ello Nitopi prefiere pensar muy bien antes de tomar una nueva decisión, pero esta vez dejar espacio para comenzar a disfrutar de la vida.
Letizia Buttarello Lavarte