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ALGORITMOS: Claves para una correcta refracción en la infancia

Dr. Guillermo Gomez, oftalmopediatra, jefe Unidad Estrabismo y Oftalmopediatría Hospital de Oftalmología Dr. Pedro Lagleyze (CABA)

La detección y el tratamiento precoz de los problemas refractivos, así como evitar la aparición de la ambliopía, deben ser los principales objetivos y el mayor desafío del trabajo de los oftalmólogos infantiles. En esta tarea, debe contar también con la ayuda de otros efectores que tienen estrecha relación con los infantes: los médicos pediatras y los docentes, quienes muchas veces son los primeros en sospechar o detectar las dificultades visuales de los más pequeños.

Cuando se indican lentes a un niño debe existir la convicción de que representa siempre una “solución” y de que este hecho no debe convertirse o considerarse como un “problema”. La utilización de una lente adecuada puede permitir que el niño tenga un desarrollo psicomotriz y un aprendizaje normal, lo que a su vez redundará en una mejor calidad de vida.

Los problemas refractivos constituyen el principal motivo de consulta en la práctica diaria de la oftalmología infantil, y el estudio de la refracción ocular es el eje central de toda consulta: oftalmología Infantil es casi un sinónimo de refracción ocular. Un preciso control de la refracción en los niños es fundamental en el manejo de la gran mayoría de las condiciones oculares en la infancia, tales como estrabismo, catarata, ptosis, prematurez, síndromes genéticos, entre otros, pero, principalmente, resulta determinante en la lucha contra un enemigo siempre latente: la ambliopía.

Las alteraciones visuales que ocurren en la infancia pueden manifestarse como serios problemas durante toda la vida adulta. Cuando existe deterioro visual suele haber otros efectos sobre la salud, sobre la percepción de sí mismo, sobre los niveles de educación, sobre la elección laboral y sobre otros aspectos sociales como la relación de pareja.

El rol del oftalmólogo infantil debe tener una sola misión: asegurar y garantizar el normal –o, al menos, el mejor– desarrollo visual de los niños. Este concepto implica que una correcta prescripción refractiva es mucho más que una simple “receta de lentes”.

CARACTERÍSTICAS DE LA PRESCRIPCIÓN DE LENTES EN INFANTES

• Mejora la agudeza visual

• Previene y trata la ambliopía

• Mantiene y favorece la binocularidad

• Mejora o corrige estrabismos

• Restablece una visión confortable

En la consulta infantil, siempre debemos tener presente que la corrección óptica constituye una herramienta que le permitirá al niño o niña ver mejor y siempre constituirá una ayuda para su normal desarrollo. Para lograr una buena refracción en pacientes pediátricos, es fundamental considerar ciertas premisas:

Ø  Clave N°1: Conocer y respetar el proceso normal de emetropización

El ojo del niño forma parte de un sistema visual funcionalmente inmaduro, en desarrollo y permanente cambio. Ese desarrollo o crecimiento (proceso de emetropización) resulta fundamental para alcanzar la madurez y las características refractivas del ojo adulto.

Ø  Clave N°2: Necesidades visuales del niño

En el momento de indicar una corrección óptica deben tenerse presentes cuáles son las necesidades visuales del niño, cómo afectará su visión, su aprendizaje y su vida social. Analizar estas cuestiones ayudará a lograr la correcta indicación, basándola en una óptima modalidad de uso.

 Ø  Clave N°3: Agudeza visual

La AV es el índice que predice con mayor exactitud la posibilidad de ambliopía. Resulta imprescindible conocer cuál debe ser la AV normal a cada edad (1).

Ø  Clave N°4: Edad

La edad del niño es un factor primordial en muchos aspectos. EDAD es igual a TIEMPO, el cual juega un rol fundamental en oftalmología infantil. La edad del niño implicará una determinada AV, un determinado rango refractivo de normalidad y un requerimiento visual diferente (1).

Ø  Clave N°5: Riesgo de Ambliopía

El estrabismo y la anisometropía son las principales causas de ambliopía unilateral en la población pediátrica. La hipermetropía y el astigmatismo representan las principales causas de ambliopía bilateral.

Ø  Clave N°6: Cicloplegía obligatoria

Una perfecta cicloplegía es indispensable para eliminar el exceso de acomodación y poder medir adecuadamente la refracción en niños. Si la estudiamos sin cicloplegía, estaríamos sobreestimando los defectos miópicos y subestimando los hipermetrópicos.

Ø  Clave N°7: Alteraciones óculomotoras u otras patologías

La presencia de una alteración óculomotora, ya sea un estrabismo permanente, intermitente o una foria, serán condicionantes principales al momento de decidir la indicación o no de una corrección óptica, sobre todo en cuanto al “monto” de la misma.

Ø  Clave N°8: Indicaciones de uso de la corrección

Cuando se indica una corrección óptica a un niño siempre se debe fundamentar la decisión y explicarle detalladamente a este y a sus padres el “por qué” y el “para qué” se lo hace, y el “cómo” y “cuando” utilizarla. Es fundamental que los padres comprendan estos conceptos, ya que son los responsables de cumplir con el tratamiento de sus hijos y de transmitir las indicaciones del oftalmólogo.

 Ø  Clave N°9: Armazones y cristales

La mejor prescripción óptica no será efectiva y no cumplirá el objetivo buscado si no se concreta en un buen producto final. La selección de un correcto armazón y de unos cristales adecuados resulta primordial a la hora de concretar la indicación óptica a un niño.

 Ø  Clave N°10: Control de la prescripción

Siempre debe realizarse el control postprescripción. Se debe chequear y controlar que las lentes no solo presenten la refracción indicada en la receta, sino que también el armazón cumpla con las especificaciones recomendadas.

Bibliografía:

·        Gomez G, Fernández Irigaray L. Refracción en la Infancia, de la práctica a la teoría. 1ra edición. Buenos Aires: Ediciones Científicas Argentinas, 2022.

·        Goddé-Jolly D, Dufier JL. Oftalmología Pediátrica. Barcelona: Masson, 1994

·        Wright KW. Pediatric Ophthalmology and Strabismus. 3rd edition. Oxford: Oxford University Press, 2012

·        Gordon RA, Donzis PB. Refractive development of the human eye. Arch Ophthalmol 1985; 103: 785-789

·        Flitcroft DI. Emmetropisation and the aetiology of refractive errors. Eye (Lond) 2014; 28: 169-179

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