IGLESIA NACIONAL
El libro “Evangelicals and Political Power in Latin America” de José Luis Pérez Guadalupe fue presentado en la Parroquia Santa Brígida y San Emérico de Nueva York, en las oficinas KAS de Nueva York y en diversas oficinas de la ONU (PNUD, DDHH, UNESCO Y DPPA) el 10 y 11 de junio.
Extracto de la entrevista a José Luis Pérez Guadalupe por Salvatore Cernuzio - La Stampa
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urante treinta años, el peruano José Luís Pérez Guadalupe ha estado estudiando el fenómeno protestante en América Latina, su crecimiento, los cambios que se han producido en los últimos años, su impacto social y el desempeño más reciente en el que se ven más activos que nunca en el terreno político. «Es evidente que los evangélicos han pasado de un previsible interés por acabar con cinco siglos de monopolio religioso católico, a una clara cruzada para terminar con la hegemonía de la Iglesia Católica Romana, tanto religiosa como política», afirma el académico, que ya presentó el resultado de sus investigaciones en diversas ciudades del mundo. Además de un crecimiento tumultuoso ¿cuales son las transformaciones profundas principales que se han producido? « Al hablar del crecimiento de los grupos evangélicos, no solo nos referimos al número o porcentaje de sus miembros, sino a la relevancia social
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que han adquirido en estos años, al abandono del anonimato público y del ‘complejo de minorías’ que los caracterizaba, a la importancia en las encuestas de opinión y estudios sociales, al ingreso a las clases medias y altas de la sociedad, al abandono de sus “templos de cochera” para dedicarse a la construcción contemporánea de “megaiglesias” en zonas residenciales, a la conquista de líderes de opinión y “grupos de incidencia”, a la invasión de los medios de comunicación social, al ingreso inesperado en el mundo de la política partidaria, etcétera. Vemos pues que los evangélicos latinoamericanos, han variado muy rápidamente su relación con el mundo y su visión de la política. Prácticamente, en las dos últimas décadas los evangélicos pasaron de ser marginados sociales a ser protagonistas políticos, de la ‘huida del mundo’ a la ‘conquista del mundo’, de preguntarse si participan en política a preguntarse cómo deben participar, de guiarse por la consigna “el hermano no se contamina en po-
Lima / Mayo - Agosto / 2019
lítica”, a “el hermano vota por el hermano”, del premilenarismo celestial al postmilenarismo contemporizador con el mundo, del modelo ‘misionero-protestante-extranjero’ al modelo ‘pastor-evangélico-nacional’. Este gran cambio de paradigma teológico y social los ha llevado a rentabilizar su potencial numérico en capital electoral, y a convertirse en poco tiempo en los nuevos actores políticos de América Latina». En el estudio que ha realizado para la Fundación Konrad Adenauer “Entre Dios y el César. El impacto político de los evangélicos en el Perú y América Latina”, usted agrupa la presencia política evangélica en tres modalidades: el “partido evangélico”, el “frente evangélico” y la “facción evangélica”. ¿Cuál es su grado de “aplicación” y “éxito”? Empecemos por el primero, el partido evangélico… «Es el movimiento o partido confesional, integrado y liderado exclusi-