Capítulo 20 — Soy la Villana, pero Soy Invitada al Salón

“¿Salón?” La extraña palabra me hizo mirar con confusión a Minne. “¡Así es! El salón es una de las tradiciones de la academia, ¡y sólo unos pocos hijos selectos de nobles pueden ir allí! ¡Has sido invitada a unirte, Lady Astrid!” Nunca había visto a Minne tan emocionada. ¿Realmente vale la pena emocionarse tanto por eso?

“Estoy demasiado ocupada estudiando en la biblioteca. Tendré que pasar del salón o de la taberna o de lo que sea eso”.

“¡¿Qué?! ¡Ofenderás a los mayores si no te unes! Es... ya sabes... El supuesto objetivo del salón es ser un lugar donde los nobles puedan aprender modales correctos y tal"”. ¿Supuesto objetivo? Entonces, ¿qué es lo que realmente hacen?

“¿De verdad tengo que unirme?” “Sí, así es. El salón también es conocido como el consejo estudiantil en la sombra, y pueden vengarse si los desprecias. Por ejemplo, pueden establecer una norma que diga que los estudiantes de primaria no pueden tocar los libros de texto a nivel de secundaria”. ¡¿Wah?! ¡Esos monstruos! ¡Es una tiranía! ¡Un abuso de poder!

“¡Grr! ¡Esto va a reducir mi precioso tiempo de estudio! No me dejan otra opción. Es sólo otro paso necesario para derrotar al destino. ¡Aplastaré esta cosa del salón, o lo que sea!” “¡No lo aplastes!” ¿No se me permite aplastarlo? Me imaginé que podría ser el caso.

“Bueno, entonces, Minne. Vamos juntas”.

“¡¿Wah?! ¡No puedo ir! El salón es un lugar al que sólo pueden entrar los hijos selectos de unos pocos nobles. A las chicas como yo nos llaman nobles pueblerinas. Se enfadarán si voy”.

¿Huh? Eso suena como prejuicio. ¿Qué en el mundo es este lugar?

“Bien... Entraré a esta batalla sola... Con suerte, podré destruir el salón...” “¡No busques maneras de destruir el salón!”

¿No se me permite? ¿No puedo simplemente destruirlo? Creo que tres o cuatro granadas serían suficientes para acabar con eso.

“Ahhh... Esto es deprimente... No me importan los salones ni las salas ni lo que sea. No quiero ir”.

¿Por qué tengo que ir a un lugar donde un montón de niños practican ser nobles? Preferiría pasar el tiempo estudiando en la biblioteca. No es como que yo vaya a ser una buena noble de todos modos, así que todo esto de los modales y la etiqueta no me sirven de nada.

Y si algo provoca mi destrucción, entonces ni siquiera seré una noble. Si realmente quiero mantener mi condición de noble, sería mejor que me concentrara en mis estudios y en el desarrollo de armas.

Pero ahora esta sombría organización de salón va a impedirme estudiar a menos que me una a ella... ¡Que se joda esta gente! Si solo supieran el destino que me espera. En realidad, ¿tal vez negarme a unirme podría ser lo que desencadene mi destrucción?

Con gran reticencia, comencé a arrastrar mis pies en dirección a la cosa del salón.

“Bueno, este debe ser el salón”.

La palabra “Salón” estaba escrita en el cartel frente a la habitación en la que me encontraba.

En mi última escuela primaria no teníamos nada parecido a un salón, pero es otro mundo después de todo. Estas cosas deben existir aquí.

Esto es demasiado molesto. Simplemente iré a la biblioteca en su lugar y fingiré que nunca recibí el mensaje.

“Oh, Astrid. ¿También fuiste invitada al salón?” Gah. ¿Friedrich está aquí? Y sus lacayos Adolf y Silvio también. Supongo que son hijos de nobles importantes. Si me invitaron a mí, debería haber adivinado que los invitarían a ellos.

“Astrid, ¿no vas a entrar?” Preguntó Friedrich.

“E-Es sólo que estaba nerviosa...” Tengo aún menos ganas de entrar ahora que estás aquí...

“Entonces permíteme mostrarte el interior. Hay varios estudiantes de secundaria aquí, pero estoy seguro de que alguien como tú no se sentirá intimidada”.

“S-Sí. Espero que tengas razón...” No quiero ir. No quiero ir. No quiero ir...

“Vamos a entrar”.

Ahhh...

Friedrich abrió la puerta sin importarle en absoluto mis sentimientos.

¡Ooh! ¡El amueblado de esta habitación es tan grande como el de nuestra sala en casa! Los sofás, las cortinas, ¡todo es magnífico! ¡Y hay toneladas de postres en las mesas! ¡Y hasta tienen sirvientes aquí!

Espera... Si tienen los recursos para armar una habitación tan elegante, deberían darnos un plan de estudios más rico. Y deberían conseguirnos el mejor personal docente que esté a la vanguardia de sus campos. Podrían dejar que los alumnos que quieran aprender más estudien el plan de estudios del siguiente año. Bah...

“Oh, Su Alteza, por favor pase”. Mientras estaba en medio de un desvarío mental, una estudiante dentro del elegante salón llamó a Friedrich. La chica que se acercó corriendo a Friedrich llevaba la corbata azul de la escuela secundaria de la academia como parte de su uniforme.

“Espero no causarte ningún problema, Vallia”.

“En absoluto. El mero hecho de que nos hayas agraciado con tu presencia aumentará el prestigio del salón, Su Alteza”.

Tengo la sensación de que esta chica es la jefa del salón.

Sus rasgos la hacían parecer testaruda y a la vez hermosa, su pelo era rubio y sus ojos verde esmeralda. Incluso con su uniforme, pude comprobar que su cuerpo estaba bien proporcionado, y su piel parecía tan suave que sentí el impulso de tocarla.

¿Así que la jefa del salón es una belleza sorprendente? Aunque lo que importa es su personalidad.

“¿Y quién podría ser esta chica?” preguntó la jefa.

“Es Astrid, hija del duque Oldenburg”, respondió Friedrich. “Es su primera visita”.

“Encantada de conocerte. Soy Astrid Sophie von Oldenburg, estudiante de primer año. Es un gran honor ser invitada aquí”.

“Oh, vaya. Eres precisamente la linda señorita que he escuchado que eres. Encantada de conocerte. Soy Vallia Marianne von Wallmoden, estudiante de segundo año y actual presidenta de nuestra Mesa Redonda de los Espíritus”.

Lo sabía. Ella es la jefa. Derrótala y todo el salón caerá. ¿Pero qué pasa con el nombre "Mesa Redonda de los Espíritus"? ¿Creen que son como los Caballeros de la Mesa Redonda? Supongo que eso me convertiría en el yanqui de Connecticut.

“¿Qué asunto tiene la gran Mesa Redonda de los Espíritus con alguien como yo? Estoy seguro de que hay estudiantes mucho más dignos”.

“¿Qué estás diciendo? Si eres la hija del duque Oldenburg, eso es prestigio más que suficiente para el salón. De hecho, debo insistir en que te unas a nosotros. Eres famosa incluso en la escuela secundaria de la academia”.

¿Incluso los estudiantes de secundaria saben de mí? Supongo que ayudé a muchos estudiantes de secundaria con sus tareas. Tanto como un estudiante de primaria puede ayudar, de todos modos...

“Así que los rumores eran realmente ciertos”, dijo Vallia.

“¿Rumores?” Ahora tenía mi interés.

“Hay rumores de que tú y el Príncipe Friedrich están prometidos el uno al otro”.

“¡¿Huh?!” ¡¿Huh?! ¿Qué? ¿En serio? ¡¿Pero qué?!

“Oh cielos. Esa mirada de sorpresa es muy poco femenina... aunque parece que tenía razón”.

“¿P-Puedo preguntar cómo empezó este rumor?” ¡He estado haciendo todo lo posible para mantenerme alejada de Friedrich!

“Dicen que es el único que te llama por tu primer nombre, y que fuiste tú quien protegió a Su Alteza cuando un cocatriz amenazó su vida durante la orientación. Y ahora has llegado con Su Alteza como tu acompañante. La situación es obvia para cualquiera”.

E-Eso es realmente tergiversar los hechos... Sí, me llama por mi nombre por alguna razón, y sí, fui yo quien derrotó al cocatriz. ¡Pero esto fue menos un acompañamiento y más una marcha forzada!

“Me temo que no. Ciertamente no hay arreglos que me involucren a mí y a Su Alteza”.

“Estoy terriblemente apenada. Debería haber sabido que aún es un secreto”.

“N-No… Escucha, Su Alteza y yo realmente no estamos…” “Sí, sí, lo entiendo. Estas cosas deben seguir el procedimiento adecuado, después de todo”.

Ah... Ni siquiera puedo discutir con esta chica.

“L-Lo que realmente quiero saber es qué pasa en tu grupo de la Mesa Redonda”.

“Este es un lugar donde los nobles pueden trabajar en su etiqueta y formar conexiones más allá de su año escolar. Todos los que asisten a la Mesa Redonda llegan a ser un graduado excepcional con una posición de alto rango en el Imperio Plusen”. “Wow...”

Aburrido. Esos postres de aspecto tan apetitoso me están tentando, pero en general, creo que sería una mejor graduada si pasara mí tiempo estudiando en la biblioteca en lugar de charlar en este lugar.

“He oído que la magia es tu fuerte, Astrid, pero ¿en qué campo específico destacas?” “Veamos. A menudo me encuentro utilizando magia elemental de tierra y magia de sangre”.

La magia de tierra y la de sangre son las que necesito cuando uso armas modernas, después de todo.

“M-Máster... ¿No prefieres el elemento de viento sobre el de tierra?” Blau salió de mi bolsillo con lágrimas en los ojos. “¿Tenerme cerca no hace al de viento mejor?” “Oh, lo siento, Blau. También puedo usar la magia elemental de viento bastante bien”.

“¿Ya tienes un contrato con un hada?” Dijo Vallia. “Tengo un contrato con un hada propia. Muéstrate, Lina”.

Un hada de pequeñas proporciones con pelo y ojos verdes se asomó desde detrás de un plato lleno de postres.

Supongo que esa es Lina.

“Su elemento es la tierra. ¿Por qué no te haces amigo de ella, Blau?” “¡Claro! Todas las hadas deberíamos llevarnos bien”. Blau se acercó flotando a Lina luciendo muy emocionada.

“¡El nombre de Blau es Blau! Encantada de conocerte, Lina”.

“Estos postres son de Lina. No puedes tenerlos”.

“¡¿Hah?! ¡Comparte algunos conmigo!”

Wow, las hadas realmente carecen de habilidades sociales.

“¿Por qué no nos sentamos y relajamos mientras charlamos?” sugirió Vallia. Mientras Blau y Lina todavía luchaban por la propiedad de los postres, nosotras dos nos sentamos en una mesa. La postura sentada de Vallia era tan sofisticada como podrías esperar de una noble. Yo sólo di lo mejor de mí para sentarme en una manera que no molestaría a nadie, justo como lo hacía en casa. No podría ser llamado sofisticada.

Friedrich y sus dos compinches también se sentaron. Irritantemente, ambos lucieron más sofisticados que yo.

“Déjame explicar las actividades de la Mesa Redonda”, dijo Vallia mientras la sirvienta estaba sirviendo té para todos nosotros.

La academia realmente está malgastando su dinero. No puedo creer que tengan a esta hermosa sirvienta aquí por el bien de unos cuantos niños jugando a pretender ser nobles.

“La Mesa Redonda es un lugar donde los estudiantes de escuela secundaria, media y primaria pueden juntarse sin barreras y pueden profundizar entre ellos el conocimiento de las asignaturas que estudiamos. También es un lugar donde podemos formar las conexiones interpersonales que formarán la sociedad futura mientras todavía estamos en la academia, y es donde podemos reevaluar el orgullo y las obligaciones que vienen con ser un noble”. “Wow…”

La parte sobre profundizar mi conocimiento es interesante, pero puedo prescindir del resto…

Pensándolo de nuevo, formar conexiones fuertes con otros nobles podría ser una manera de evitar que mi familia pierda su dominio. Por otra parte, mi final malo llega cuando todavía estoy en mi tercer año de secundaria, mis mayores van a ser estudiantes universitarios o nuevos miembros de la sociedad. No voy a ser capaz de prevenir que el país confisque el dominio de mi familia por mí misma. Tal vez, sólo tal vez, ¿uno de ellos podría ser el esposo o esposa de un noble con influencia? Eso podría cambiarlo todo… “Vallia, ¿supongo que no tienes la intención de casarte con la familia imperial, o quizás con la familia de un duque?” “Sí, estoy prometida a Lord Eugen de la casa del Duque Schleswig…” “Espero que nos volvamos buenas amigas”. ¡Tengo que hacer esas conexiones! ¡Amo la Mesa Redonda!

“Aunque sería más preciso decir que este es un lugar donde los miembros de la Mesa Redonda se olvidan sobre estudiar, conexiones personales, obligaciones, y todo eso. Nos gusta relajarnos y charlar junto con unos cuantos postres”. “Oh…”

¿Me estás diciendo que aquí es donde los nobles de alto rango vienen a holgazanear?

“¡Deberíamos estudiar! ¡Deberíamos formar conexiones! ¡Deberíamos evitar mi destrucción!”

“¿Destrucción?” ¡Quiero usar este lugar para poder darles un vistazo a las asignaturas de secundaria, hacer conexiones con personas que podrían ser influyentes algún día, y evitar la destrucción que probablemente está esperando por mí en el futuro!

“Siéntete libre de hacer lo que te plazca. Ven aquí a charlar, o ven aquí a estudiar si lo prefieres. Solo quiero que la Mesa Redonda sea donde todos puedan venir a relajarse. Aquellos de nosotros que vienen de hogares con un status elevado a menudo nos sentimos mal con nosotros mismos y nos aislamos. Es por eso que creo que necesitamos un lugar como la Mesa Redonda”.

Hmm. Eso me hace pensar en Minne y Lotte. Ambas chicas insisten en llamarme Lady. Quiero ser más cercana a ellas, pero se siente como si me alejaran. Es justo como Vallia dice: si el status de tu familia es sólo un poco demasiado alto, terminas aislado, como si hubiera una barrera entre tú y todos los demás.

“Nunca tuve ese problema yo mismo” , intervino Adolf. “Cualquiera que se sienta atrapado por el linaje o lo que sea sólo necesita intentar más duro. Siempre le he hablado a la gente sin preocuparme por su status. Si alguien se pone todo soberbio debido a su linaje, los golpearé”. Bueno, Adolf seguro que habla a lo grande. Sin embargo, supongo que no puedo acusarte de ser pura habladuría dado el cómo tratas a Friedrich como un igual. Cualquiera que pueda hablarle a un príncipe de esa manera no va a asustarse de los nobles. ¿Pero no eres tú el que espanta a la gente en vez del que es asustado? Esperemos que no esté así de confundido.

“Considero esta una buena oportunidad. Me preocupa que sea incapaz de hacer algún amigo además de Friedrich y Adolf. Desearía que otros en la sociedad noble sean menos conscientes con el linaje y los títulos…” Silvio dijo, sonando muy sensible.

Desearía poder hacer amigos que no les importe que sea la hija de un duque. Sólo quiero algunos amigos que se queden conmigo incluso si mi familia pierde su dominio.

Pero Silvio, sé cómo es. Las cosas están yendo geniales entre tú y Lotte.

“¿Qué piensa, Su Alteza?” “Hmm… Si sólo los nobles de alto rango se reúnen aquí, entonces eso en sí mismo crea una barrera innecesaria. Aunque me gusta ser capaz de juntarme con las divisiones de la escuela primaria, media y secundaria. Creo que puedo aprender bastante aquí”. ¡Sólo has tus estudios por tu cuenta! Mantente lejos de mí.

“Ahora que todos entienden el propósito de la Mesa Redonda, ¿por qué no usar el día de hoy para hablar con sus miembros y acostumbrarse al lugar? Mi deseo es que esto sea un refugio seguro para todos ustedes”. ¿Refugio seguro? Definitivamente no es un refugio seguro para mí. Mientras estos intereses amorosos todavía estén respirando, siempre tendré que preocuparme sobre que mi familia pierda su dominio.

“Bien, entonces. ¿Estarías dispuesta a hablar un poco conmigo, Astrid?” ¿Por qué Friedrich tendría que juntarse conmigo?

“N-No creo que haya algo que tengamos que discutir”. “Entonces permíteme introducir un tema. ¿Cómo estás encontrando la vida en la academia?”

¡Maldición! Friedrich es tan jodidamente persistente.

“Me va bien. He hecho amigas, y mis estudios han ido sin problemas gracias a mi antiguo tutor a domicilio. Y ahora que he sido invitada a este grupo, siento como si mi vida en la academia será bastante satisfactoria”.

“Me alegra escucharlo. Tu talento para la magia es excepcional, pero eres única de muchas maneras, me preocupa que te encuentres aislada como resultado”. No necesito tu preocupación por mí. ¡Ni siquiera un poco! ¿Y a qué se refiere con que soy única? Soy una estudiante de primaria totalmente normal. El que es único aquí es nuestra pequeña alteza imperial.

“¿Te has ido acostumbrando a la vida en la academia, Príncipe Friedrich?” Supongo que mejor debería preguntarle educadamente. Siento como que podría activar mi propia destrucción al ser demasiado fría con Friedrich. Necesito un cuidadoso equilibrio. Tenemos que ser más que conocidos, pero menos que amigos.

“Estoy encontrando la vida en la academia bastante satisfactoria. Siento como si unirme a la academia me hubiera liberado”.

“¿Liberado?” No pude evitar preguntar su elección de palabras. “Así es. Se me ha hecho estudiar y entrenar para el combate desde que era muy joven, y mi pad—Su Majestad Imperial puede ser bastante demandante. Esas lecciones no fueron fáciles. Luego de ser castigado muchas veces, llegué a temerle”. Ah, así es. Su papá es Wilhelm III: el notorio militarista quién se ganó el nombre de Rey Soldado. Apuesto a que la crianza de Friedrich fue como un entrenamiento militar. El Dr. Wolff siempre me enseñaba lo que sea que yo quisiera aprender, así que me siento un poco apenada por Friedrich.

“Bueno, eso está bien entonces”, respondí. “Estás consiguiendo excelentes notas aquí en la academia, y…” “¿Y?” Friedrich me repitió mi propia palabra de vuelta. “Y pareces bastante complacido cuando tus amigos te hablan casualmente. Te debes de haber liberado de un montón de presión. Algunas personas podrían sólo querer acercarse al niño que será el próximo emperador, pero creo que amigos como Lord Adolf y Lord Silvio son atraídos a ti debido a tu carisma”. Él podrá ser un idealista a veces, pero es principalmente realista. Estoy segura de que un montón de personas ven una amistad con Friedrich como más que sólo una conexión con el siguiente emperador. ¡No es que su carisma tenga algún efecto en mí!

“Me hace feliz escucharte decirlo. Dada mi posición, soy incapaz de mostrar signos de debilidad”.

Si quieres alguien a quien llorarle, tienes a Adolf y Silvio. Mientras tanto, estoy totalmente por mi cuenta aquí. Nadie sabe sobre mi futura destrucción aparte de mí. Incluso padre no me creería si intentara hablarle. Apesta. Desearía tener a alguien con quién quejarme.

“¿Por qué no saludamos a nuestros mayores y a los otros miembros juntos?” “Me encantaría”.

Sin forma de salir de esto. Será mejor que vaya con él.

Con algo de reticencia, me presenté con los otros miembros de la Mesa Redonda.

Recordaré estos nombres y rostros. Con suerte uno de ellos pueda rescatarme en el futuro.

Mientras tanto, las hadas se habían envuelto en una disputa sobre la custodia de los postres durante todo este tiempo.

“Lina tiene un reclamo histórico por la propiedad de los postres. Te prohíbo que los toques” .

“¡Eres mala! ¡¿Por qué no podemos ser amigas?!” Debe ser agradable el ser tan despreocupado…