Cuadernos 6 biored

Page 1

Julio - Diceimbre 2018 6

Depรณsito Legal: ME2016000136 ISBN: 978-980-12-9281-4

6

Julio - Diciembre 2018


Depósito Legal:ME2016000136 ISBN: 978-980-12-9281-4 Cuadernos de la Biored es una publicación de la red temática BioredIberoamerica, número 416RT0510, “RED PARA LA RECUPERACIÓN DE LA DIVERSIDAD DE SEMILLAS LOCALES Y SU ENTORNO CULTURAL EN COMUNIDADES RURALES EN LA BUSQUEDA DE SOSTENIBILIDAD PARA IBEROAMERICA” del Programa Iberoaméricano de Ciencia y Tecnologia para el Desarrollo (CYTED) que tiene como misión difundir y fomentar la investigación y producción científica, tecnológicas, cultural y humanisticas realizadas por miembros de la red. Es de naturaleza multidisciplinaria, comprometida exclusivamente con las actividades académicas, de investigación y vinculación social. Son objetivos de la publicación: 1. Facilitar la difusión de la investigación realizada por sus miembros y otras instancias que estimulen el conocimiento en los temas centrales de la red. 2.Impulsar y difundir las potencialidades e inquietudes individuales y colectivas en el marco de la actuación institucional. 3.Estimula la formación individual y la sinergia de esfuersos constructivos y creadores en el colectivo que conforma la red.

La Frecuencia de aparición de los Cuadrenos de la Biored se estipula semestralmente (dos veces al año)


Cuaderno 6 Julio - Diciembre 2018



COMITÉ EDITORIAL Biorediberoamérica Coordinador: MSc. Federico Del Cura Delgado (Venezuela) Representantes Nacionales: Argentina: Dr.Santiago J. Sarandón. Brasil: Dra. Juliana Bernardi Oglivi. Colombia: Dra. Neidy L. Clavijo Ponce. España: Dra. María D. Raigón México: Dr. Enrique Hipólito Romero Perú: Dr. David Saravia. Uruguay: Dr. Rafael Vidal André. Chile: Rene Montalba. Ecuador: Fernando Romero

Director - Editor: Federico Del Cura Delgado Colaboradora en Lengua Inglesa: Dra. Esther Rosas L. Colaboradora en lengua Portuguesa: Abog. Dalila De Caires Jimenez. Dirección de la Revista: Universidad Politécnica Territorial de Mérida, UPTM, División de Investigación, Extensión, Postgrado y Producción (DIEPP) Avenida 25 de Noviembre, Manzano Bajo, Sede Central UPTM Teléfonos: (0058) 274 - 2211591 / 2210746 Ext. 121 Correo: rediberoamerica@gmail.com Diseño y diagramación: Julio J. Briceño Nuñez. HECHO EL DEPÓSITO DE LEY: ME2016000136 ISSN: 978-980-12-9281-4 Los artículos y trabajos publicados expresan la opinión de los autores y no necesariamente la posición de la revista. La autoría de las fotografias que ilustran la portada de esta publicación pertenecen a Federico Del Cura D.


CONTENIDO

EDITORIAL

02

EXPERIENCIA DE LA RED TEMÁTICA BIOREDIBEROAMÉRICA EN EL DESARROLLO DE LA INTEGRACIÓN DE GRUPOS DE INVESTIGACIÓN – ACCIÓN EN LA RECUPERACIÓN DE LA AGRODIVERSIDAD Y SU ENTORNO CULTURAL. Federico Del Cura D.

21

PRESENÇA DO MILHO GENETICAMENTE MODIFICADO EM UM MICROCENTRO DE DIVERSIDADE, NO SUL DO BRASIL, Juliana Bernardi O.

31

TUBÉRCULOS ANDINOS EN BOYACÁ. UN PROCESO DE CONSERVACIÓN PARTICIPATIVA CON COMUNIDADES CAMPESINAS. Neidy Clavijo P.

47

CULTIVO DE VAINILLA Y CACAO EN AGROECOSISTEMAS DIVERSIFICADOS DE MÉXICO. RESCATE BIOCULTURAL DE SISTEMAS AGROFORESTALES CON ESPECIES DE ALTO VALOR ECOLÓGICO, ECONÓMICO Y SOCIAL, COMO ESTRATEGIA PARA EL MANEJO Y LA CONSERVACIÓN DEL GERMOPLASMA NATIVO, EN EL MARCO DE LA BIOREDIBEROMÉRICA. Enrique Hipólito R. José María Ramos P,, Carlos Roberto Cerdán C., Jorge Ricañó R. y Eliezer Cocoletzi V.

59


CONTENIDO

45 . CONSTRUYENDO REDES PARA LA RESIGNIFICACIÓN DEL MAÍZ DE LAS TIERRAS BAJAS DE SUDAMÉRICA. Rafael Vidal, Natalia Carolina de Almeida S. Flaviane Malaquias Costa y Elizabeth Ann Veasey.

65

INVESTIGACIÓN EN AGROBIODIVERSIDAD: LA EXPERIENCIA DEL GRUPO DE AGROECOLOGÍA DE LA FACULTAD DE CIENCIAS AGRARIAS Y FORESTALES DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE LA PLATA, ARGENTINA. Santiago Sarandón

77

11 CONSERVACIÓN DE SEMILLAS Y SABERES EN EL CINTURÓN HORTÍCOLA DE LA PLATA, ARGENTINA. María Margarita Bonicatto

99

NECESIDAD DE INCORPORACIÓN DEL ENFOQUE DE GÉNERO EN EL CONOCIMIENTO SOBRE LA BIODIVERSIDAD. Viviana Blanco

113


CONTEUDO

EDITORIAL

02

EXPERIÊNCIA DA REDE TEMÁTICA BIOREDIBEROAMÉRICA NO DESENVOLVIMENTO DA INTEGRAÇÃO DE GRUPOS DE PESQUISA AÇÃO NA RECUPERAÇÃO DA AGRODIVERSIDADE E SEU AMBIENTE CULTURAL. Federico Del Cura D.

21

PRESENÇA DO MILHO GENETICAMENTE MODIFICADO EM UM MICROCENTRO DE DIVERSIDADE, NO SUL DO BRASIL, Juliana Bernardi O.

31

TUBÉRCULOS ANDINOS EM BOYACÁ. UM PROCESSO DE CONSERVAÇÃO PARTICIPATIVA COM COMUNIDADES CAMPONESAS. Neidy Clavijo P.

47

CULTIVO DE BAUNILHA E CACAU EM AGROECOSSISTEMAS DIVERSIFICADOS DO MÉXICO. RESGATE BIOCULTURAL DE SISTEMAS AGROFLORESTAIS COM ESPÉCIES DE ALTO VALOR ECOLÓGICO, ECONÔMICO E SOCIAL, COMO ESTRATÉGIA PARA O MANEJO E CONSERVAÇÃO DE GERMOPLASMA NATIVO, NO ÂMBITO DA BIOREDIBEROMÉRICA. Enrique Hipólito R. José María Ramos P,, Carlos Roberto Cerdán C., Jorge Ricañó R. y Eliezer Cocoletzi V.

59


CONTEUDO

45

CONSTRUINDO REDES PARA A RESSIGNIFICAÇÃO DO MILHO DAS TERRAS BAIXAS DA AMÉRICA DO SUL. Rafael Vidal, Natalia Carolina de Almeida S. Flaviane Malaquias Costa y Elizabeth Ann Veasey.

65

PESQUISA EM AGROBIODIVERSIDADE: A EXPERIÊNCIA DO GRUPO DE AGROECOLOGIA DA FACULDADE DE CIÊNCIAS AGRÁRIAS E FLORESTAIS DA UNIVERSIDADE NACIONAL DE LA PLATA, ARGENTINA. Santiago Sarandón

77

11 CONSERVAÇÃO DE SEMENTES E CONHECIMENTO NO CINTURÃO HORTÍCOLA DE LA PLATA, ARGENTINA. María Margarita Bonicatto

99

NECESSIDADE DE INTEGRAÇÃO DE GÊNERO NO CONHECIMENTO SOBRE BIODIVERSIDADE. Viviana Blanco

113


CONTENT

EDITORIAL BIOREDIBEROAMERICA THEMATIC NETWORK EXPERIENCE IN THE DEVELOPMENT OF RESEARCH INTEGRATION, RECOVERING AGRO DIVERSITY AND ITS CULTURAL ENVIRONMENT. Federico Del Cura D.

02

21

PRESENCE OF GENETICALLY MODIFIED CORN IN A MICROCENTER OF DIVERSITY IN SOUTHERN BRAZIL, Juliana Bernardi O.

31

ANDEANS TUBERS IN BOYACÁ. A PARTICIPATORY CONSERVATION PROCESS WITH PEASANT COMMUNITIES. Neidy Clavijo P.

47

VANILLA AND COCOA PLANTING IN DIVERSIFIED AGROECOSYSTEMS IN MEXICO. BIOCULTURAL RESCUE OF AGROFORESTRY SYSTEMS WITH SPECIES OF HIGH ECOLOGICAL, ECONOMIC AND SOCIAL VALUE, AS A STRATEGY FOR THE MANAGEMENT AND CONSERVATION OF NATIVE GERMPLASM, WITHIN THE BIOREDIBEROAMÉRICA FRAMEWORK. Enrique Hipólito R. José María Ramos P,, Carlos Roberto Cerdán C., Jorge Ricañó R. y Eliezer Cocoletzi V.

59


CONTENT

45 . BUILDING NETWORKS FOR THE RESIGNIFICATION OF CORN IN LOWLANDS OF SOUTH AMERICA. Rafael Vidal, Natalia Carolina de Almeida S. Flaviane Malaquias Costa y Elizabeth Ann Veasey.

65

AGROBIODIVERSITY RESEARCH: THE EXPERIENCE OF THE AGROECOLOGY GROUP OF THE AGRARIAN AND FORESTRY SCIENCES FACULTY OF LA PLATA NATIONAL UNIVERSITY. Santiago Sarandón

77

SEEDS AND KNOWLEDGE CONSERVATION IN LA PLATA HORTÍCOLA BELT, IN ARGENTINA María Margarita Bonicatto

MAINSTREAMING GENDER APPROACH IN KNOWING ABOUT BIODIVERSITY. Viviana Blanco

11 99

113


EDITORIAL

Con entusiasmo mostramos en el presente número de Cuadernos de la Biored el resultado de nuestro I Seminario de la Biorediberoamérica, evento realizado en el marco del VII Congreso de la Sociedad Científica Latinoamericana de Agroecología (SOCLA), realizado en la ciudad Ecuatoriana de Guayaquil, en la sede de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil, del 02 y el 05 de Octubre del año 2018. Su realización en este marco no es un hecho fortuito, muchos de los miembros de la Biorediberoamérica hemos participado en eventos de SOCLA desde hace años y algunos son miembros relevantes de esa organización, por ello aprovechar el espacio y tiempo común era una estrategia obligada. El papel de la SOCLA en el desarrollo de la Agroecología en Latinoamérica y, en estos momentos, a nivel mundial, ha sido relevante, sus Congresos, sus publicaciones y en general todo el movimiento social generado convierten esta organización en referente imprescindible de la mayoría de los estudios en el área.

Nuestra primera experiencia personal comenzó en el IV Congreso, realizado en Lima, Perú, en la Universidad Agraria La Molina, en el año 2013. De hecho, allí nos animamos de forma definitiva a realizar el proyecto que presentamos a la Convocatoria del Programa CYTED en el 2015 y que fue el origen de nuestra Red. Allí también tuvimos contacto con la bella sede de la Universidad Agraria La Molina, que se incorporaría a nuestra Red, encabezados en la actualidad por el Dr. David Saravia. Inmersos ya en esta dinámica, pudimos asistir en el año 2015 a Argentina, donde en la sede de la Universidad de La Plata, se celebró un nutrido V Congreso, aun cuando el proyecto estaba presentado en la convocatoria de Redes CYTED, no se habían publicado sus resultados. La mayoría de


sus principales organizadores, encabezados por el Dr. Santiago Sarandón, son también hoy miembros de la Biorediberoamérica,

Una vez conformados, estaba claro que el VI Congreso, a realizarse en la ciudad de Brasilia, en el año 2017 sería el mejor punto para nuestro primer encuentro. Así fue, y aunque no logramos articular una presentación grupal en el evento, las bases quedaron sentadas para hacerlo en el siguiente. Allí por fin pudimos encontrarnos personalmente y estrechar los lazos que más allá de lo profesional, hemos construido. En este masivo evento Brasilero además de a la Dra. Juliana Bernardi, de la Universidad de Santa Catarina, pudimos conocer a la Ing. Rosenilda de Souza, miembros del Nodo Brasil.

Así en el año 2018 nos convocamos al VII Congreso, en la ciudad de Guayaquil, en Ecuador. Nuestro compromiso, además de las múltiples presentaciones individuales, fue el realizar este I Seminario, donde mostráramos al público presente el desarrollo de la Biorediberoamérica y la multiplicidad de los trabajos realizados en sus Nodos. Diversidad de temas, pero con varios ejes transversales; agroecología, biodiversidad y sobre todo el eje cultural y el conocimiento asociado a ello, Así nos lo


recuerda Viviana Blanco, en su artículo incluido en este número: La Agroecología, que reconoce la existencia de una estrecha relación entre la dimensión cultural y biológica, demuestra y acepta que el conocimiento sobre las funciones, el manejo y la conservación de la biodiversidad está, también, en mano de los agricultores y agricultoras. Y, además, propone que, para poder rescatar ese conocimiento es necesario construir una relación dialógica entre la academia, técnicos y profesionales, junto a productores y productoras, cuyas vivencias, saberes y valoraciones sobre agrobiodiversidad, resultan fundamental para diseñar y manejar agroecosistemas de manera sustentable1.

Esperamos que a lo largo de este número de Cuadernos de la Biored, nuestros lectores puedan apreciar gran parte de estos elementos en los 8 artículos incluidos. Abrimos con una presentación de los logros de la Biorediberoamérica, fundamentalmente estructurados en los productos comprometidos con el Programa de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CYTED), organismo que nos sustenta en lo económico, el artículo Experiencia de la Red Temática Biorediberoamérica en el desarrollo de la integración de grupos de investigación – acción en la recuperación de la agrodiversidad y su entorno cultural, muestra los mecanismos de enlace y divulgación abiertos al público y que buscan su impacto en las comunidades, pueden visualizarse en diversos medios y directamente enlazarse a los mismos. Siguiendo el orden de las presentaciones del Seminario, el primer artículo con experiencias específicas correspondió a la Dra.Juliana Bernardi, 1

Blanco Viviana. Necesidad de incorporación del enfoque de género en el conocimiento sobre la biodiversidad


de la Universidad de Santa Cataría en Brasil, titulado Presença do milho geneticamente modificado em um microcentro de diversidade, no Sul do Brasil, en él muestra el amplio trabajo desarrollado por su Grupo de investigación, durante varios años, en el cultivo del maíz en el estado de Santa Catarina, al Sur de Brasil. El artículo muestra la gran diversidad existente en el cultivo del maíz por parte de agricultores familiares, aun cuando existe una pérdida acelerada de variedades “criollas” y evidencia la peligrosa presencia de maíz transgénico en el área. La conservación in situ de los tubérculos Andinos es el eje central que guía los trabajos de la Dra. Neidy Clavijo en Colombia, a ella corresponde el artículo Tubérculos Andinos en Boyacá. Un proceso de conservación participativa con comunidades campesinas. Rubas, ibias y cubios, son tres de estos tubérculos sobre los cuales se hace hincapié, y especialmente en su forma de conservación, vinculado a su inclusión en la alimentación familiar. El estudio reconoce “el protagonismo de las comunidades campesinas en los procesos de conservación de especies vegetales en espacios temporales y naturales específicos”, y profundiza una de los lineamientos que mantenemos desde la Biorediberoamérica, que nuestra agrodiversidad es “una expresión de su identidad, por lo cual su interés en conservar la diversidad en sus sistemas productivos trasciende más allá de las expectativas económicas”. La experiencia de México fue presentada por el Dr. Enrique Hipólito Romero, e incluye un nutrido grupo de investigadores del “Cuerpo Académico Manejo y Conservación de Recursos Bioculturales de la Universidad Veracruzana”. Su disertación sobre el Cultivo de vainilla y cacao en agroecosistemas diversificados de México. Rescate biocultural de sistemas agroforestales con especies de alto valor ecológico, económico y social, como estrategia para el manejo y la conservación del germoplasma nativo, en el marco de la Biorediberomérica, Su desarrollo corresponde a años de perseverancia, de trabajo creador y continuo con comunidades rurales, digno ejemplo a seguir en ese diálogo universidad – comunidad. A continuación el artículo; Construyendo redes para la resignificación del maíz de las Tierras Bajas de Sudamérica, presentado por el Dr. Rafael Vidal, del Nodo Uruguay, en colaboración con Natalia Carolina de Almeida S. Flaviane Malaquias Costa y Elizabeth Ann Veasey. El artículo presenta parte de una amplia investigación binacional que pretende identificar la diversidad de variedades criollas de maíz conservadas in situ, en las denominadas “tierras bajas” de Brasil y


Uruguay, donde “aún existe una importante diversidad de variedades criollas”. El artículo difunde esta valiosa investigación plurinacional y la posiciona como un referente obligado en el rubro maíz en esta vasta región de Suramérica. Continuando con los artículos, la reflexión que plantea el Prof. Santiago Sarandón, de Argentina, está en el origen de nuestra Biored; Investigación en agrobiodiversidad: la experiencia del grupo de Agroecología de la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la Universidad Nacional de La Plata, Argentina. A través de una serie de preguntas va sentando las bases sobre las cuales se asienta nuestro accionar. ¿por qué es necesario investigar en biodiversidad en las ciencias agrarias?, Qué y cómo investigar sobre biodiversidad en los agroecosistemas. Desde la experiencia de su Grupo de investigación, va develando respuestas muy valiosas para aquellos que compartimos puntos de vista desde la agroecología. Para algunos lectores, las preguntas pudieran tener ya una respuesta o ser demasiado evidentes, personalmente considero que allí reposa su atractivo. Es la reflexión sobre elementos que quizás hemos pasado por alto y sobre los cuales la disertación de este prestigioso autor nos lleva a retomar. Para finalizar, aun cuando, por cuestiones del tiempo que nos facilitaron los organizadores, no fueron expuestas en el Seminario en Ecuador, incluimos en este número otras dos investigaciones realizadas por nuestras colegas Argentinas Margarita Bonicatto y Viviana Blanco, presentes en el evento y que aportan temas de relevancia y actualidad. María Margarita Bonicatto expone un trabajo de larga trayectoria en su territorio Conservación de semillas y saberes en el Cinturón Hortícola de La Plata, Argentina. Ratifica algunos de los principios que compartimos en la Biored y avanza resultados que nos permiten comparar el comportamiento de ciertas variables bajo análisis con otras situaciones y territorios: En un sentido más simbólico, las semillas han sido y siguen siendo parte de la identidad de las personas ya que están vinculadas a las costumbres alimenticias y a los platos típicos que expresan orígenes y tradiciones, prácticas y celebraciones. En definitiva, este cuerpo simbólico del cual las semillas forman parte es la identidad del agricultor y, por lo tanto, de su pueblo y de su vida.


Por su parte Viviana Blanco trae a la palestra un tema de relevante actualidad, la Necesidad de incorporación del enfoque de género en el conocimiento sobre la biodiversidad. El tema es tratado de forma directa desde sus planteamientos iniciales: Por otro lado, lo que la experiencia nos indica, es que a partir de una visión androcéntrica del mundo, que invisibiliza a las mujeres y niega la mirada femenina, este diálogo epistemológico entre el saber científico, universal y teórico, con el conocimiento de campesino, empírico y anclado localmente lleva, en general, a identificar como “productores portadores de saberes”, sólo a los varones, ocultando y desconociendo todo el bagaje que tienen las mujeres. Seguramente nuestros lectores encontrarán en cada una de sus aseveraciones, material para la disertación y la comparación con otras situaciones locales iguales o disímiles a las que plantea su autora. Por lo tanto, para poder comprender más acabadamente lo que ocurre en los espacios rurales, incorporamos al análisis el aporte conceptual-metodológico del enfoque de género, entendiendo que, en el marco de procesos agroproductivos, varones y mujeres en relación directa con su entorno natural generan estrategias y prácticas en las que ponen en juego sus conocimientos y sus saberes, algunos compartidos y otros diferenciados por género. En definitiva se trata de un amplio abanico de temas que esperamos resulten motivadores para el diálogo y la conexión entre todos los involucrados en los objetivos que nos plantea la Biorediberoamérica. Federico Del Cura Delgado Director - Editor


EDITORIAL

Com muita euforia mostramos-nos nesta edição do Journal da Biored o resultado do nosso I Seminário Biorediberoamérica, um evento realizado no âmbito do Sétimo Congresso da Sociedade Científica LatinoAmericana de Agroecologia (SOCLA) realizada na cidade equatoriana de Guayaquil, a sede da Universidade Católica de Santiago de Guayaquil, de 02 a 05 de outubro de 2018. A sua realização neste quadro não é um caso fortuito, muitos membros da Biorediberoamérica participaram de eventos SOCLA há anos e alguns são membros importantes da organização, a fim de aproveitar o espaço comum e tempo foi uma estratégia obrigada.

O papel do SOCLA no desenvolvimento da agroecologia na América Latina e, agora, a nível mundial, tem sido relevante, os seus congressos, publicações e em geral todo o movimento social gerado fazer esta referência essencial organização para a maioria os estudos na área.

Nossa primeira experiência pessoal começou no IV Congresso, realizado em Lima, Peru, na Universidade Agrária La Molina, em 2013. Aliás, somos definitivamente encorajados a levar adiante o projeto que apresentamos ao Chamado do Programa CYTED em 2015 e que foi a origem da nossa Rede, onde também tivemos contato com a linda sede da Universidade Agrária La Molina, que se juntaria à nossa Rede, atualmente chefiada pelo Dr. David Saravia. Já imersos nesta dinâmica, pudemos assistir a Argentina em 2015, onde um grande V Congresso foi realizado na Universidade de La Plata, apesar de o projeto ter sido apresentado na chamada CYTED Networks, ainda não foram publicados seus resultados. A maioria de seus principais


organizadores, liderados pelo Dr. Santiago Sarandón, também são membros da Biorediberoamericana.

Uma vez conformados, ficou claro que o VI Congresso, a ser realizado na cidade de Brasília, em 2017, seria o melhor ponto para nosso primeiro encontro. Foi assim, e apesar de não termos conseguido articular uma apresentação em grupo no evento, as bases estavam prontas para o próximo. Ali pudemos finalmente encontrar-nos pessoalmente e fortalecer os laços que além do profissional, construímos. Neste imenso evento brasileiro, além da Dra. Juliana Bernardi, da Universidade de Santa Catarina, pudemos conhecer a Engª Rosenilda de Souza, membros do Nodo Brasil.

Então em 2018 convocamos o VII Congresso, na cidade de Guayaquil, no Equador. Nosso compromisso, além das múltiplas apresentações individuais, foi realizar este Primeiro Seminário, onde mostramos ao público o desenvolvimento da BioRediberoamericana e a multiplicidade de trabalhos realizados em seus Nodos. Diversidade de temas, mas com vários eixos transversais; agroecologia, biodiversidade e principalmente


o eixo cultural e o conhecimento a ela associado. É assim que Viviana Blanco nos lembra, em seu artigo incluído nesta edição: A agroecologia, que reconhece a existência duma estreita relação entre a dimensão cultural e biológica, demonstra e aceita que o conhecimento sobre as funções, gestão e conservação da biodiversidade também está nas mãos dos agricultores. E, além disso, propõe que, para resgatar esse conhecimento, seja necessário construir uma relação dialógica entre academia, técnicos e profissionais, junto aos produtores, cujas experiências, conhecimentos e avaliações da agrobiodiversidade são fundamentais para a concepção e gestão de agroecossistemas em sustentável(1)

Esperamos que ao longo desta edição de Cuadernos de la Biored, nossos leitores possam apreciar muitos desses elementos nos 8 artigos incluídos. Abrimos com uma apresentação das conquistas da BioRediberoamericana, fundamentalmente estruturadas nos produtos comprometidos com o Programa de Ciência e Tecnologia para o Desenvolvimento (CYTED), uma organização que sustenta-nos no meio econômico, o artigo Experiência da Rede Temática Biorediberoamérica no desenvolvimento a integração de grupos de pesquisa - ação na recuperação da agrodiversidade e seu ambiente cultural, mostra os mecanismos de articulação e divulgação abertos ao público e procurando seu impacto nas comunidades, pode ser visto em vários meios e diretamente ligado a eles.

1

Blanco Viviana. Necessidade de integração de gênero no conhecimento sobre biodiversidade.


Seguindo a ordem das apresentações do Seminário, o primeiro artigo com experiências específicas correspondeu à Dra. Juliana Bernardi, da Universidade Católica de Santa Catarina no Brasil, intitulada Presença do milho geneticamente modificada num microcentro de diversidade, não Sul do Brasil, nele mostra o extenso trabalho desenvolvido por seu grupo de pesquisa, durante vários anos, no cultivo de milho no estado de Santa Catarina, no sul do Brasil. O artigo mostra a grande diversidade existente no cultivo do milho pelos agricultores familiares, embora haja uma perda acelerada de variedades “crioulas” e evidências da presença perigosa de milho transgênico na área. A conservação in situ dos tubérculos andinos é o eixo central que orienta os trabalhos do Dr. Neidy Clavijo na Colômbia, ao qual corresponde o artigo Tuberos Andinos em Boyacá. Um processo de conservação participativa com comunidades camponesas. Rubas, ibias e cubios, são três desses tubérculos em que a ênfase é colocada, e especialmente no seu modo de conservação, ligados à sua inclusão na dieta da família. O estudo reconhece “o protagonismo das comunidades camponesas nos processos de conservação de espécies vegetais em espaços temporais e naturais específicos”, e aprofunda uma das diretrizes que defendemos da BioRediberoamerica, que a nossa agrodiversidade é “uma expressão de sua identidade, que seu interesse em conservar a diversidade em seus sistemas produtivos transcende as expectativas econômicas”. A experiência mexicana foi apresentada pelo Dr. Enrique Hipólito Romero, e inclui um grande grupo de pesquisadores do “Corpo Acadêmico de Gestão e Conservação de Recursos Bioculturais da Universidade Veracruzana”. Sua dissertação sobre o cultivo de Baunilha e cacau em agroecossistemas diversificados do México. Resgate biocultural de sistemas agroflorestais com elevado valor ecológico, económico e social como uma estratégia para a gestão e conservação de germoplasma nativo na Biorediberomérica, seu desenvolvimento corresponde aos anos de perseverança, criador e trabalhos em curso com as comunidades rurais, um exemplo digno de seguir nesse diálogo universidade-comunidade. Em seguida o artigo; Eu construí redes de terras baixas ressignificação de milho da América do Sul, apresentado pelo Dr. Rafael Vidal, Nó Uruguai, em colaboração com Natalia S. Carolina Flaviane Malaquias de Almeida Costa e Elizabeth Ann Veasey.


O artigo apresenta parte duma pesquisa binacional abrangente que tem como objetivo identificar a diversidade de variedades crioulas de milho conservados in situ, no chamado Brasil e Uruguai, onde “ainda há uma significativa diversidade de variedades crioulas” “planície”. O artigo divulga essa valiosa pesquisa plurinacional e a posiciona como referência obrigatória no setor do milho nesta vasta região da América do Sul. Seguindo com os artigos, a reflexão proposta pelo Prof. Santiago Sarandón, da Argentina, está na origem do nosso BioRed; Pesquisa em agrobiodiversidade: A experiência do grupo de Agroecologia da Faculdade de Ciências Agrárias e Florestais da Universidade Nacional de La Plata, Argentina. Por meio duma série de perguntas, ele estabelece as bases nas quais nossas ações se baseiam. Por que é necessário pesquisar a biodiversidade em ciências agrárias? O que e como pesquisar a biodiversidade em agroecossistemas? A partir da experiência de seu Grupo de Pesquisa, revela respostas muito valiosas para aqueles de nós que compartilham pontos de vista da agroecologia. Para alguns leitores, as perguntas podem já ter uma resposta ou serem óbvias demais, eu pessoalmente considero que seu apelo está em vigor. É a reflexão sobre elementos que talvez tenhamos negligenciado e sobre os quais a dissertação deste prestigioso autor leva-nos a retomar. Finalmente, mesmo que, por razões de tempo forneceu-nos com os organizadores, não foram expostos no seminário no Equador, incluímos nesta edição dois outros inquéritos por nossos colegas argentinos Margarita Bonicatto e Viviana Blanco, participaram do evento e fornecer questões relevantes e atuais. María Margarita Bonicatto exibe uma longa carreira em seu território, Conservação de sementes e conhecimentos no Cinturão Hortícola de La Plata, Argentina. Ele ratifica alguns dos princípios que compartilhamos no BioRed e avança resultados que permitem-nos comparar o comportamento de certas variáveis em análise com outras situações e territórios: Num sentido mais simbólico, as sementes têm sido e continuam a fazer parte da identidade das pessoas, uma vez que estão ligadas ás costumes alimentares e aos pratos típicos que expressam origens e tradições, práticas e celebrações. Em suma, este corpo simbólico do qual as sementes fazem parte é a identidade do agricultor e, portanto, do seu povo e da sua vida.


Por sua vez, Viviana Blanco traz à tona um tema de relevante relevância atual, a Necessidade de incorporar a abordagem de gênero no conhecimento sobre a biodiversidade. O assunto é tratado diretamente de suas abordagens iniciais: Por outro lado, o que a experiência nos diz é que a partir duma visão de mundo centrada no homem, o que torna as mulheres invisíveis e nega o olhar feminino, este diálogo epistemológico entre o conhecimento científico, universal e teórica, com o conhecimento do camponês , empírico e ancorado localmente, leva, em geral, a identificar-se como “produtores portadores de conhecimento”, apenas aos homens, escondendo-se e ignorando toda a bagagem que as mulheres possuem. Certamente nossos leitores encontrarão em cada uma de suas declarações, material para a dissertação e comparação com outras situações locais iguais ou diferentes daquelas levantadas pelo autor. Portanto, a fim de entender melhor o que acontece nas áreas rurais, incorporar à análise do conceito metodológico do género, contribuir entendimento de que, no contexto de agro-produtiva processos, homens e mulheres em relação direta com seu ambiente natural geram estratégias e práticas em que colocam em jogo seus conhecimentos e saberes, alguns compartilhados e outros diferenciados por gênero. Em suma, é uma ampla gama de tópicos que esperamos motivar o diálogo e a conexão entre tudos os envolvidos nos objetivos que a BioRediberoamérica propõe. Federico Del Cura Delgado Director - Editor


EDITORIAL

We enthusiastically show in the present issue of Cuadernos de la Biored, the result of our First Biorediberoamérica Seminar, an event held within the framework of the VII Congress of the Latin American Scientific Society of Agroecology (SOCLA), held in the Ecuadorian city of Guayaquil, inside the Catholic University of Santiago de Guayaquil, on the 2nd to the 5th of 2018. It was not fortuitous to make it in this framework, because many of Biorediberoamérica members have participated in SOCLA events for years and, some of them are relevant members of that organization, so taking advantage of common space and time was a necessary strategy.

The role of SOCLA in the development of Agroecology in Latin America, and in other parts of the world too, has been relevant, its Congresses, its publications and, in general all the social movement generated by it, has made this organization an essential reference for the majority of the studies in this specific area. Our first experience began in the IV Congress, held in Lima, Peru, at La Molina Agrarian University in 2013. In fact, there we definitely encourage ourselves to carry out the Project that later on we presented to CYTED Program, which originated the Biorediberoamérica Network. Nowadays we are connected with La Molina Agrarian University through the Dr David Saravia. Already immersed in this dynamic, we were able to attend Argentina in 2015, where a large V Congress was held at La Plata University. Happily the majority of SOCLA organizers are also members of the Biorediberoamérica.


Once conformed, it was clear that the VI Congress, to be held in the city of Brasilia, in 2017 would be the best point for our first meeting. That´s how it was, and even though we did not manage to articulate a group presentation at the event, the bases were set to do so in the next one. There we were finally able to meet personally and strengthen the bonds that beyond the professional, we have built. In this massive Brazilian event in adding to Dr Juliana Bernardi, from the University of Santa Catarina, we were able to meet Eng. Rosenilda de Souza, members of the Brazil Node

So in 2018 we convened the VII Congress, in Guayaquil city, Ecuador. Our commitment, in addition to the multiple individual presentations, was to carry out our first Seminar, where we showed to the public the development of BiorediberoamĂŠrica and multiple papers carried out by the network members. Diversity of themes were exposed, but all of them around the Biorediberoamenrica major transversal axis: agroecology, biodiversity, and especially cultural element and its knowledge associated with. Viviana Blanco refers to this in her article included in this issue:


Agroecology, which recognizes the existence of the close relationship between the cultural and biological dimension, demonstrates and accepts that knowledge about the functions, management and conservation of biodiversity is also in the hands of farmers. And, in addition, he proposes that, in order to rescue this knowledge, it is necessary to build a dialogical relationship between the academy, technicians and professionals, together with producers, whose experiences, knowledge and assessments of agrobiodiversity are fundamental for designing and managing agroecosystems in a sustainable way.1

We hope that while you read this issue of Cuadernos de la Biored, you can appreciate the biorediberoamérica main axis, which are included in the 8 following articles. We open with a Biorediberoamérica achievements presentation, which is conformed basically by products committed to the Program of Science and Technology for Development (CYTED), an organization that sustains us in the economic. The article we refer to is titled “Biorediberoamérica Thematic Network experience in the development of research integration, recovering agro diversity and its cultural environment”, it shows the mechanism of liaison and disclosure open to the public and seeking their impact in communities. You can see this information through various media or directly linking on them. Following the presentation order, like in the Seminar, the first article referred to an specific experience was presented by Dra. Juliana Bernardi, from the University of Santa Catarina in Brazil, this article is entitled “Presence of genetically modified corn in a microcenter of diversity in southern Brazil”. 1

Blanco Viviana. Need for gender mainstreaming in knowledge about biodiversity


It shows the great diversity existing in the cultivation of corn by family relatives, even when there is an accelerated loss of “native” varieties and evidence of the presence of a transgenic corn in the area. The in situ conservation of the Andean tubers is the central axe that guides the researches of Dra Neidy Clavijo in Colombia, her following article is hers “Andeans tubers in Boyacá. A participatory conservation process with peasant communities”. Rubas, ibias and cubios, are three of these tubers on which emphasis is placed, and especially on their way of conservation, linked to their inclusion in the family diet. The study recognizes “the protagonist of the peasant communities in the conservation of plant species in specific temporal and natural spaces” and, deepens one of the guidelines that we maintain from Biorediberoamérica that our agro diversity is “an expression of their interest in conserving diversity in their productive systems transcends beyond economic expectations”. The Mexican experience was presented by Dr. Romero Enrique Hipólito, and includes a large group of researchers from the “Academic Body Management and Conservation of Biocultural Resources of the Veracruzana University”. His dissertation about “Vanilla and cocoa planting in diversified agroecosystems in Mexico. Biocultural rescue of agroforestry systems with species of high ecological, economic and social value, as a strategy for the management and conservation of native germplasm, within the biorediberoamérica framework”. Its development corresponds to years of perseverance, creative and continuous work with rural communities, a worthy example to follow in the university-community dialogue. Next article is about “Building networks for the resignification of corn in Lowlands of South America”, Dr. Rafael Vidal, from the Uruguay Nodus and his colleagues Natalia Carolina de Almeida S. Flaviane Malaquias Costa and Elizabeth Ann Veasey. This article presents part of a broad binational investigation that aims to dentify the diversity of corn landraces conserved in situ, in the so-called “lowlands” of Brazil and Uruguay, where “there is still and importnt diversity of landraces”. The article disseminates this valuable plurinational research and positions it is an obligatory reference in the corn sector in this vast region of South America. Follow with the articles presentation, the teacher Santiago Sarandón, from Argentina presents a reflection that is in the origin of our network. His article, “Agrobiodiversity research: the experience of the agroecology group of the Agrarian and Forestry sciences Faculty of La Plata National


University” presents some questions that lay the foundations on which our actions are based. Why is it necessary to research biodiversity in agricultural sciences? What and how to research biodiversity in agroecosystems? From the experience of this Research Group, it reveals very valuable answers for those of us who share points of view from agroecology. For some readers, the questions may already have an answer or be too obvious, I personally consider that there rests its appeal. It is the reflection on elements that perhaps we have overlooked and about which the dissertation of this prestigious author leads us to take up again. To conclude, even though, due to the time the organizers gave us, they were not shown at the Seminar in Ecuador, but we include in this issue two other researchers conducted by our Argentine colleagues, they are Margarita Bonicatto and Viviana Blanco, because they contribute relevant and current issues. Margarita Bonicatto exposes a work with a long history in its territory, it is “Seeds and knowledge conservation in La Plata Hortícola belt, in Argentina”. It ratifies some of the principles that we share in the BioRed and advances results that allow us to compare the behavior of certain variables under analysis with other situations and territories. In a more symbolic sense, the seeds, the seeds have been and continue to be part of the identity of the people since they are linked to the food customs and the typical dishes that express origins and traditions, practices and celebrations, In short, this symbolic body of which the seeds are part is the identity of the farmer and, therefore, of his people and his life. For her part, Viviana Blanco brings to the fore a topic of relevant current relevance, the need to incorporate the gender approach in knowledge about biodiversity. The subject is treated directly from its initial approaches: On the other hand, what experience tells us is that from an androcentric vision of the world, which makes women invisible and denies the feminine view, this epistemological dialogue between scientific knowledge, universal and theoretical, with the knowledge of peasant, empirical and anchored locally leads, in general, to identify as “producers carrying knowledge”, only to me, hiding and ignoring all the baggage that women have.


Surely our readers will find in each of their statements, material for the dissertation and comparison with other local situations equal or dissimilar to those raised by the author. Therefore, in order to better understand what is happening in rural areas, we incorporate the conceptual-methodological contribution of the gender approach into the analysis, understanding that, within the framework of agro productive processes, man and women in direct relation with their natural environment generate strategies and practices in which they put their knowledge and knowledge at stake, some shared and others differentiated by gender. In short, it is a wide range of topics that we hope will be motivating for dialogue and the connection between all those involved in the objectives that BiorediberoamĂŠrica proposes. Federico Del Cura Delgado Director - Editor


Fotografia : Federico Del Cura Delgado


Experiencia de la Red Temática Biorediberoamérica en el desarrollo de la integración de grupos de investigación – acción en la recuperación de la agrodiversidad y su entorno cultural. Federico Del Cura Delgado Coordinador de la Biorediberoamérica Univ. Politécnica Territorial de Mérida “Kléber Ramírez”, Venezuela federico.delcura@gmail.com biorediberoamerica@gmail.com

RESUMEN El artículo resume la exposición de apertura del I Seminario de la Biorediberoamérica que buscaba mostrar su trabajo al público participante en el VII Congreso de la Sociedad Científica Latinoamericana en Agroecología (SOCLA), la Biorediberoamérica es una red del Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CYTED), que propicia el intercambio de experiencias entre grupos de investigación sobre el análisis del elemento cultural y las prácticas agrícolas, para el desarrollo sostenible de las comunidades rurales vulnerables ante escenarios de cambio climático, propiciando la recuperación de la diversidad de semillas locales, ante la erosión genética que amenaza la agricultura. La red inició bajo la coordinación de Venezuela e incluye otros ocho países Iberoamericanos. Metodológicamente esta red ha funcionado mediante herramientas electrónicas, gracias a las cuales puede recoger, compartir y dar visibilidad a la información contenida o producto de los trabajos de investigación. Entre los resultados se puede mencionar la creación de un sitio web (Biorediberoamerica.org), la generación de numerosos Seminarios Virtuales y videos de difusión que están disponibles al público en su canal de Youtube Biorediberoamérica. Las experiencias compartidas y validadas por cada grupo podrán ser aplicadas en cada país, por lo que la Red aspira a su fortalecimiento y continuidad más allá del apoyo externo de su organismo impulsor.

21


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Federico Del Cura Delgado. Biorediberoamérica, Nodo Venezuela

INTRODUCCIÓN Con la exposición, base para este escrito, se dio apertura al I Seminario de la Biorediberoamérica que buscaba mostrar su trabajo al público participante en el VII Congreso de la Sociedad Científica Latinoamericana en Agroecología (SOCLA), celebrado en la ciudad Ecuatoriana de Guayaquil, en la sede de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil, entre el 02 y el 05 de Octubre del año 2018. Fundamentalmente se trata de mostrar que es la Biorediberoamérica y los avances que permitan al público el acceder a más información y vincularse a este proyecto. El seminario continuó con la presentación de exposiciones particulares por parte de los Nodos miembros de la Biorediberoamérica y que dan cuenta del amplio trabajo realizado y la diversidad de temas, metodologías y aspectos tratados. La Biored tiene su origen en la convocatoria realizada por el Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CYTED) que promueve anualmente la creación de Redes Temáticas, en torno a ciertas áreas vinculadas directamente con el desarrollo de los grupos de investigación, y en general la ciencia y la tecnología en la región. En el año 2015 nos presentamos a la convocatoria con un proyecto para generar una red temática (Del Cura, 2015), denominada: Red para la recuperación de la diversidad de semillas locales y su entorno cultural en comunidades rurales, en la búsqueda de sostenibilidad para Iberoamérica. La propuesta logró su aprobación para iniciar en el año 2016 y fundamentalmente se quiere mostrar los resultados que se han alcanzado hasta la fecha. La red es coordinada por un equipo de investigación de Venezuela (Universidad Politécnica Territorial de Mérida) e integrada además por otros ocho (8) países Iberoamericanos: Argentina (Universidad de La Plata), México (Universidad Veracruzana), Perú (Universidad de La Molina), Colombia (Universidad Pontificia Javeriana), Uruguay (Universidad de La República), Brasil (Universidad de Santa Catarina), España (Sociedad Española de Agricultura Ecológica) y Chile (Universidad de La Frontera). Propiciamos en cada país miembro el fortalecimiento de la investigación en el campo de la conservación de la biodiversidad y los aspectos culturales interrelacionados. Estos grupos permanecen en interacciones científicas estables y continuadas durante al menos cuatro años (2016-2019) y aspiran la suma de otras iniciativas de los países Iberoamericanos, aún con nuevas organizaciones en aquellos países antes mencionados.

22


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Federico Del Cura Delgado. Biorediberoamérica, Nodo Venezuela

La metodología con la que funcionamos es de tipo “neuronal”, donde cada integrante es un “nodo” que a su vez articula relaciones nacionales y locales, con capacidad de decisión y funcionamiento propio, de tal forma que, basados en la información articulada en la red, cada nodo propicia dinámicas coherentes para la consecución de los objetivos comunes. De esta manera, la red reconoce y potencia las capacidades locales de cada nodo y no fomenta las categorías jerárquicas verticales. La conexión entre grupos con intereses similares que se ha dado en esta red, ha permitido conocer cómo los grupos de investigación de cada país miembro abordan este tema. Se ha podido detectar que cada uno está preocupado por el elemento cultural ligado a la agricultura, pero no todos lo tratan de la misma manera, es allí donde radica la riqueza de esta red, la cual ha permitido compartir metodologías de trabajo, resultados de investigación obtenidos, diversas visiones de la literatura consultada entre otros aspectos que desembocarán en la valoración del capital cultural como variable esencial en la mitigación de la vulnerabilidad de las comunidades rurales, fundamentalmente ante escenarios de cambio climático, en Iberoamérica. El método de trabajo que rige la red está básicamente definido por los rubros que financia el organismo a quien se le debe la rendición de cuentas. En este sentido los esfuerzos se concentran en el desarrollo de actividades que den prioridad a la visualización de los productos de trabajos realizados por los miembros de la red y en el compartir de conocimientos y experiencias que enriquezcan los procesos de investigación que se llevan a cabo en los países miembros, propiciando a su vez la capacitación en cuanto a métodos, técnicas y teorías. Así pues, se ha hecho uso de un sitio web y las aulas virtuales, incluidas todas sus bondades, para acortar las distancias entre los países miembros y propiciar el intercambio y la divulgación. Con el uso que se ha dado a estas herramientas en la red se ha logrado el cometido de comunicación entre los nodos participantes, con sus limitaciones, pero hasta el momento han resultado útiles en la medida que mejoramos nuestra eficiencia. Los resultados de esta experiencia y que podemos exhibir en este momento son los siguientes: - El desarrolló de un Sitio Web con dominio y alojamiento propio que se encuentra en la dirección http://biorediberoamerica.org/ A partir de esta base, utilizando la plataforma Moodle, referenciada 23


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Federico Del Cura Delgado. Biorediberoamérica, Nodo Venezuela

por todos los participantes como la de mayor utilización, se generó un “Aula Virtual”, donde se producen los encuentros previstos tales como los Foros.

Figura 1. Vista del sitio web - Se han generado seis (6) Seminarios Virtuales, en los más diversos temas y que están a disposición del público como “Recursos” en el sitio web y con enlaces al canal de Youtube de la Biorediberoamérica. Adicionalmente, los Seminarios son editados en DVD en formato físico, para su distribución entre el público sin acceso a internet. A continuación el detalle de cada uno: • El enfoque de género en el conocimiento y valoración de la Agrobiodiversidad en Agroecosistemas de la agricultura familiar del NEA. Una mirada desde la Agroecología. Ponente: Viviana Blanco. Argentina. • Gestión de Recursos Bioculturales. Homenaje a Silvia del Amo Rodríguez. Ponente: Enrique Hipólito. México. • Calidad alimentaria y variedades tradicionales. Ponente: Dolores Raigón. España. • El programa de Estudios Abiertos en Cultura Agroecológica. Ponentes: Jorge Rondón y María del Carmen Pérez. Venezuela. • Herramientas Participativas en la Agrobiodiversidad. Ponente: Rafael Vidal. Uruguay.

24


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Federico Del Cura Delgado. Biorediberoamérica, Nodo Venezuela

• Caracterização de variedades crioulas de milho pipoca do extremo oeste de santa catarina por espectroscopia vibracional de infravermelho próximo. Ponente: Linda Nataly Vásquez Avila (tutores: Juliana Bernardi Ogliari y Marcelo Maraschim). Brasil.

Figura 2. Imagen del CD que muestra un ejemplo del formato físico. En este caso el Seminario de España.

- Se crearon los Cuadernos de la Biorediberoamérica, publicación que facilita la difusión de los principales trabajos de los grupos participantes y sus miembros. Hasta el momento se cuenta con cuatro (4) números, todos en formato digital y de acceso público y gratuito. Se aspira estabilizar su periodicidad en semestral.

Figura 3. Composición con las carátulas de los Cuatro números publicados. 25


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Federico Del Cura Delgado. Biorediberoamérica, Nodo Venezuela

- Videos de Difusión de los objetivos de la Red. Todos los videos generados son puestos a disposición pública en el Canal de Youtube de la Biored Iberoamérica. Los videos se ordenaron en “Series” que permiten un acceso más directo a cada tema según su interés. • Difusión (3 videos). • Seminarios Virtuales. (7 videos). • Caminos de la investigación. (2 videos). • Encuentros. (5 videos).

Figura 4. Vista del canal de Youyube. Biorediberoamérica.

- Los Caminos de la Investigación son una “serie” de videos creados a fin de promover a investigadores nóveles y enfoques novedosos en el tratamiento del tema. Hasta el momento se cuenta con dos números, referidos a: • Cultura y religión en los estudios del Agro. Autoría de Esther Rosas L. • Variedades criollas de maíz dulce en el microcentro de diversidad de Zea mays L., al sur de Brasil. Autoría de Rosenilda de Souza

26


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Federico Del Cura Delgado. Biorediberoamérica, Nodo Venezuela

Figura 5. Caratulas de DVD de la serie Caminos de la investigación - Un aspecto no incluido en la planificación inicial, pero que ha recibido especial atención es el uso de las redes sociales (Facebook, Instagram, Twiter) para la difusión y vinculación de la red con el público, en este sentido creemos se ha potenciado la divulgación de los objetivos de la Biored mediante cuentas en Facebook (Biored Iberoamérica), Instagram (@Biorediberoamerica), Twiter (@Labiored), de ello se da cuenta en un documento compilatorio de estas actividades en el año 2018.

Figura 6. Carátula del documento creado

27


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Federico Del Cura Delgado. Biorediberoamérica, Nodo Venezuela

- Como tarea no prevista, pero que queremos destacar, es que el Grupo Venezuela desarrolló la creación del Centro de Preservación de Recursos Fitogenéticos (CEPREFI), como estructura administrativa dentro de la Universidad Politécnica Territorial de Mérida (desde el año 2017), Centro que impulsará y potenciará el trabajo en esta nación. Creemos que estamos en el camino correcto, en aras de cumplir con los objetivos inicialmente planteados en el proyecto Al sumar diversas experiencias de trabajo de toda Iberoamérica, se amplían las posibilidades de una comunicación efectiva de la universidad con las comunidades agrícolas, de tal manera que se habilita el surgimiento de una comprensión capaz y adecuada de transitar de forma bidireccional ambos horizontes, combinando la usanza práctica y las necesidades que suscita el trabajo de la tierra, con la cognición que emana de las investigaciones procedentes de la educación universitaria. La finalidad última es entonces, acoplar procederes que cooperen y concierten sobre la base de un entendimiento que beneficie y haga útil y fluida la asistencia de dichos ámbitos. Coherentemente articulados en la red los grupos nacionales se fortalecen, y con ellos, las capacidades locales, pues entendemos que actuando como nodos de vinculación entre variados actores y locaciones, se difunden y multiplican las experiencias que apunten hacia la consecución de los objetivos que puedan hacer resilientes a los ecosistemas y comunidades a escala local, nacional y regional. La Biorediberoamérica resulta una experiencia que suma valor a los esfuerzos de la Sociedad Latinoamericana de Agroecología (SOCLA), profundamente implicada con aspectos fundamentales de la agricultura y con un elemento transversal común como lo es el de un desarrollo agroecológico incluyente y sostenible en el sector rural, prioridad en las políticas públicas de todos los países ante escenarios de cambio climático.

1

DEL CURA Federico. Propuesta Red Temática P415RT0009. Red para la recuperación de la diversidad de semillas locales y su entorno cultural en comunidades rurales, en la búsqueda de sostenibilidad para Iberoamérica. Documento Intranet-CYTED. 2015.

28


Referencias DEL CURA Federico. Propuesta Red Temática P415RT0009. Red para la recuperación de la diversidad de semillas locales y su entorno cultural en comunidades rurales, en la búsqueda de sostenibilidad para Iberoamérica. Documento Intranet-CYTED. 2015. BIORED IBEROAMÉRICA (2018). Canal Youtube Disponible en: https://www. youtube.com/channel/UCi-Og3c7ShKgQogsQHNHk6Q Acceso 02 de Noviembre de 2018.


Fotografia: Juliana Bernardi Ogliari


PRESENÇA DO MILHO GENETICAMENTE MODIFICADO EM UM MICROCENTRO DE DIVERSIDADE, NO SUL DO BRASIL. Juliana Bernardi Ogliari Núcleo de Estudos em Agrobiodiversidade - NEABio, Universidade Federal de Santa Catarina juliana.bernardi@ufsc.br

RESUMO Milho crioulo em Santa Catarina: importância de um microcentro de diversidade Os maiores produtores de milho no mundo são EUA, China e Brasil, perfazendo juntos 66% do total produzido (1,033 bilhões de t). Além de estar entre os três maiores produtores desse cultivo, com 83 milhões de t anuais (Padrão 2017), o Brasil é o segundo país que mais cultiva culturas geneticamente modificadas (26% do total mundial), ficando atrás apenas dos EUA. Dos 50 milhões de ha cultivados com soja, milho e algodão transgênicos, cerca de 31% é de milho, o que corresponde a quase 94% da área cultivada com esse cultivo no país (CIB 2018). Apesar da agricultura familiar ocupar uma área menor com lavouras (17,7 milhões de ha) (IBGE 2006), em comparação aos 65 milhões de ha agricultáveis no Brasil (EMBRAPA 2017), ela é a principal fornecedora de alimentos básicos para a população brasileira. Segundo dados do Censo Agropecuário de 2006, cerca de 84% das propriedades brasileiras são ocupadas por agricultores familiares, a partir das quais são obtidas 46% da produção de milho do país (IBGE 2006). No estado de Santa Catarina (SC), o percentual da área de milho produzida por agricultores familiares é ainda mais expressivo, considerando que 88% das propriedades catarinenses são ocupadas por esse grupo de agricultores, que produzem 76% do total do milho do estado. O principal

31


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

destino do milho em SC tem sido a indústria de rações para animais, onde está localizado o principal parque industrial das cadeias produtivas de aves e suínos do país (IBGE 2006; Padrão 2017). Embora o estado não seja autossuficiente na produção de milho (produção varia de 2,7 a 3,3 milhões de t) (Padrão 2017), essa riqueza econômica gera mais de 1 bilhão de aves e 12 milhões de suínos por ano e sustenta mais de 150 mil empregos diretos e indiretos para o estado. Em uma pequena região do Vale do Rio das Antas, no Extremo Oeste do estado de SC (EOSC), sul do Brasil, a base do desenvolvimento rural está associada à pequena produção familiar, que representa 90% dos 100 mil estabelecimentos agrícolas da região (IBGE 2010). A produção das culturas está concentrada principalmente nas mãos de descendentes europeus, que cultivam várias espécies, principalmente milho, além de criarem aves, suínos e produzirem leite. Outra particularidade do EOSC é o fato de parte significativa dos agricultores ainda conservarem variedades locais e crioulas de vários cultivos, sobretudo de diferentes tipos de milho para consumo dentro das propriedades rurais. Com a finalidade de conhecer a diversidade de milhos crioulos conservados on farm nessa região, entre os anos de 2011 a 2012, foi realizado um censo da diversidade, a partir do qual foram entrevistadas 2.049 famílias, em 70 comunidades rurais de dois municípios (Anchieta e Guaraciaba). Nessa pesquisa, foram identificadas 1.688 propriedades agrícolas (82%) que cultivavam milho, seja por meio de sementes comerciais ou crioulas. Desse total de propriedades, 1.082 (64%) cultivavam 1.513 áreas de produção com algum tipo de milho crioulo, distribuídas em 1.078 áreas de milho pipoca, 374 de milho comum e farináceo e 61 de milho doce ou adocicado (Costa et al 2016). A relação entre o número total de campos e o número total de propriedades com variedades crioulas indicou que uma família podia estar cultivando mais de uma variedade na propriedade, com média de 1,4 variedades por família. Além dos milhos crioulos, também foram identificadas 136 populações de parentes silvestres do milho (teosintos), conhecidos na região pelo nome de “dente de burro” (Silva et al. 2015). Este dado é considerado subestimado, já que as informações da presença dos teosintos foram coletadas a partir de uma amostra de 305 agricultores e, não em censo (2.049 agricultores), tal como foi realizado para o milho cultivado (Fig. 1).

32


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

Fig. 1 Distribuição espacial de variedades crioulas e teosintos do gênero Zea, nos municípios de Anchieta e Guaraciaba, estado de Santa Catarina, sul do Brasil. Fonte: Costa et al. (2016). Para os milhos crioulos comum, farináceo e doce, dentre 939 indicações de uso direto, cerca de 85% estavam associadas à alimentação das famílias e criações de animais e 15% à doação, troca e venda de grãos secos, sementes, artesanato e milho verde. Para o milho pipoca, dentre 1.336 indicações de uso direto, cerca de 80% estavam associadas à alimentação das famílias (Costa et al. 2016). O censo também permitiu identificar os potenciais específicos de cada variedade crioula, a partir de 89 diferentes qualidades e valores indicados pelos agricultores como justificativa para a sua conservação. Aproximadamente 91% das indicações englobaram cinco categorias de uso para milho comum, farináceo e doce (Agronômica, Gastronômica, Adaptativa, Alimentação Animal e Econômica), enquanto para o milho pipoca, mais de 87% das indicações se enquadraram dentro da categoria Gastronômica. Os dados do censo evidenciaram que os milhos crioulos do EOSC fazem parte da cultura regional, pois além dos valores socioculturais, esses recursos vegetais também são relevantes do ponto de vista econômico e de segurança alimentar dessas famílias (Costa el al. 2016). A história do milho na região sul do país é muito antiga, antes mesmo da descoberta do Brasil pelos portugueses. As introduções mais antigas de milho nessa região vieram das terras baixas da América do Sul, mais especificamente da Argentina e Paraguai, que é o caso das raças de pipocas cultivadas pelos índios Guaranis. Outra parte veio das terras 33


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

altas da América do Sul (Bolívia e Peru), provavelmente pelo caminho do Peaberu (Bustamante et al. 2014). Essa história não terminou com os milhos indígenas, mas houveram outras introduções fruto da migração humana pós-colonização, que é o caso dos milhos dentados e de materiais melhorados da Argentina e EUA. O tempo de cultivo em uma mesma região é um componente importante para a adaptação de uma espécie aos componentes geográficos, incluindo não apenas os aspectos associados ao ecossistema agrícola, mas também humanos. O tempo máximo de cultivo de algumas variedades conservadas em Anchieta e Guaraciaba pela mesma família foi de 100 anos. Esse tempo de cultivo relatado pelos agricultores foi superior a chegada dos primeiros imigrantes europeus na região há quase 70 anos atrás. Também foi significativamente superior até mesmo ao tempo de cultivo citado por alguns autores (Louette et al. 1997; Bellon et al. 2003), que estudaram variedades crioulas de milho no seu centro de origem, no México. A raça é um dos primeiros níveis de diversidade estudado no milho. Baseia-se fundamentalmente na análise de um conjunto de características morfológicas associadas à espiga e ao grão e de componentes geográficos. Pode ser definida como “um conjunto de populações relacionadas com suficiente características em comum para permitir o seu reconhecimento como um grupo” (Anderson e Cutler 1942), ou ainda, como “um conjunto de populações em panmixia, ocupando uma área geográfica definida” (Brieger et al. 1958). Em estudo recente sobre as pipocas crioulas do EOSC, Silva et al. (2017) identificaram pelo menos cinco raças com base na análise de 16 características morfológicas de espiga e grão, a partir de uma coleção nuclear estabelecida a partir do germoplasma conservado on farm. Dentre elas, duas são semelhantes às raças indígenas antigas (Avatí Pichingá Ihú e Avatí Pichingá) cultivadas pelos Guaranis, e três delas, possivelmente, são novas raças, considerando a dissimilaridade apresentada por elas, em relação a outras dez raças Américas descritas na literatura. Ainda com respeito às pipocas crioulas do EOSC, as mulheres são as principais responsáveis pela sua conservação (80%) e, dentre estas, 90% fazem algum tipo de seleção. A prática de seleção das agricultoras é o principal componente geográfico associado à diversidade das pipocas, e 70% delas aprenderam a fazê-la com suas mães. Tal fato revela a transmissão geracional do conhecimento associado ao manejo desse cultivo local, que se estabelece inicialmente como uma tradição familiar e, 34


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

em um segundo momento, como parte da cultura regional. Com relação aos critérios de seleção, foram identificados 16 critérios de maior interesse das agricultoras, sendo que 10 estavam associados às características do grão e espiga, tal como é usado pelos cientistas para a caracterização de raças. Os três principais critérios foram “espiga bonita”, “arranjo das fileiras” e “forma do grão”; cor de grão foi menos relevante e ocupou sexta posição dentre as 10 características mencionadas (Silva et al. 2017). A presença do parente silvestre do milho (teosintos) desde 1949 (data mais antiga citada pelos agricultores) é outro aspecto relevante da diversidade do gênero Zea no EOSC. Este período de quase 70 anos também coincide com o processo de colonização nessa região. Segundo 43% dos agricultores entrevistados, o principal uso dos teosintos é como forragem. Todas as populações mapeadas são anuais e ocorrem de forma espontânea (75%), cultivada (15%) ou de ambas as formas (8%). Esse relato é importante, pois até então não havia sido descrita na literatura científica brasileira a ocorrência de teosinto e seus usos pelos agricultores (Silva et al. 2015). Uma quantidade de 49 agricultores relatou a ocorrência de fluxo gênico entre milhos crioulos e teosintos, de uma amostra de 136 agricultores. Com base em alterações de características morfológicas de grãos, espigas e plantas, o estudo documentou o estabelecimento de fluxo gênico bilateral entre as formas cultivadas e silvestres do gênero Zea (Fig. 2). A ocorrência de fluxo gênico bilateral pode ser explicada pela predominância de populações espontâneas de teosinto, principalmente em campos cultivados com milho. A possibilidade de cruzamento interespecífico também foi confirmada a partir da classificação taxonômica de cinco populações região, cuja espécie foi identificada como Zea luxurians (Silva et al. 2015). De fato, sob condições de cruzamento artificial entre milho e Zea luxurians, Molina et al. (2013) obtiveram elevada viabilidade de sementes e fertilidade de plantas da geração F1. A classificação botânica das populações de teosinto em uso no EOSC e as evidências de fluxo gênico inter e intraespecífico, associada à seleção praticada pelos agricultores foram descobertas relevantes, porque configura um processo de domesticação e diversificação dos teosintos fora da sua área nuclear de origem. Com base nas particularidades expostas acima, o EOSC foi indicado recentemente como um microcentro de diversidade (Costa et al. 2016), considerando tratar-se de “uma microrregião geográfica que abriga uma reserva genética do pool gênico de uma espécie (no caso, de milho) de valor real e potencial, que está em 35


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

processo corrente de diversificação, em consequência de atividade humana associada a aspectos socioculturais”.

Fig. 2 Evidências de fluxo gênico com formação de híbridos naturais entre populações de teosinto e milho, nos municípios de Anchieta e Guaraciaba, Santa Catarina-SC, sul do Brasil. (a) espiga de teosinto com grãos amarelos do tipo pipoca; (b) característica da espiga oriunda de cruzamento de teosinto com a variedade crioula de milho Palha Roxa; (c) característica da planta inteira de teosinto cruzado com milho. Fonte: Silva (2015).

Ameaças sobre a conservação on farm no EOSC De 2001 até a presente data, apenas cerca de 3% das 1.513 populações de milhos crioulos do EOSC foram avaliadas quanto ao potencial genético, agronômico, adaptativo ou nutricional (Balbinot et al. 2005; Gonçalves 2016; Kist et al. 2010; 2014; Kuhnen et al. 2010a; 2010b; 2012; Ogliari et al. 2013). A dificuldade de avaliar o potencial genético desse elevado número de populações locais, em médio e curto prazo, tem motivado o NEABio da UFSC a elaborar estratégias integradas de conservação on farm e ex situ para o microcentro de diversidade do EOSC. Com a finalidade de otimizar o trabalho inicial de coleta de germoplasma e simplificar a subsequente etapa de caracterização, foi aplicada uma metodologia de amostragem para o estabelecimento de uma coleção nuclear que fosse representativa da diversidade de Zea mays L conservada on farm (Vidal 2016). A definição da coleção foi efetuada a partir da análise de variáveis obtidas do censo da diversidade e considerando diferentes aspectos da diversidade, tais como morfológicos, geográficos e alguns associados aos valores de uso e socioculturais e aos riscos de perda da diversidade. Durante as expedições de coleta, realizadas em 2013, foram constatadas perdas significativas por erosão genética. No caso particular das pipocas, 36


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

a magnitude das perdas de diversidade foi preocupante, em vista de tratar-se de um milho especial com pouca representatividade de acessos no principal banco ativo de germoplasma (BAG) do país (191 acessos no BAG da EMBRAPA), sobretudo de populações locais procedentes do EOSC. O milho doce é outro tipo de milho especial, cujas perdas de diversidade ainda são mais preocupantes, em relação aos milhos comuns e farináceos. Além de sua baixa representatividade de acessos no banco de germoplasma da EMBRAPA (20 acessos no BAG), também é reduzida a quantidade de populações conservada on farm, no microcentro de diversidade do EOSC. No caso do milho pipoca, cerca de 67% das 244 famílias do EOSC revisitadas em 2013 (18 meses da realização do censo da diversidade) já haviam perdido pelo menos uma variedade crioula. Das causas associadas aos processos de erosão genética, apenas três – deixou de plantar, não gostou e seca – explicaram 84% das perdas (Silva 2015). “Deixou de plantar” é uma razão importante porque está associada ao envelhecimento da população rural e à falta de sucessores, que leva à perda das tradições familiares. “Não gostou” faz parte do processo de experimentação e busca de variedades que atendam aos interesses particulares dos agricultores. “Seca” é uma razão imprevisível, porque compromete tanto os estoques de sementes armazenadas para o cultivo da próxima safra, bem como de grãos consumidos como alimento. As demais razões (16%) levantadas pelos agricultores foram: “cruzou com outros milhos” (fluxo gênico acidental e indesejável), “substituiu por outra variedade”, “descuido com animais”, “problemas durante o armazenamento” e “tornado” (Silva 2015). As consequências do fluxo gênico indesejado entre milhos crioulos comum e farináceo com outros milhos comerciais do mesmo tipo de endosperma nem sempre são perceptíveis nos grãos ou levadas em consideração pelos agricultores, uma vez que estes grãos não perdem os seus valores de uso e, muito menos, as suas qualidades culinárias. Por outro lado, para os milhos pipocas e doces, os prejuízos podem ser maiores ao se cruzarem acidentalmente com outros tipos de endosperma, uma vez que estes milhos especiais (pipoca e doce) perdem tanto as suas características culinárias, como os seus principais valores de uso. Porém, como estes cruzamentos acarretam alterações na composição do endosperma e na morfologia do grão (fenômeno xênia), é possível recuperar as variedades contaminadas por meio da seleção de atributos associados aos grãos. Por outro lado, os danos à diversidade podem ser irreversíveis para qualquer tipo de milho crioulo se os cruzamentos acidentais ocorrerem 37


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

pela migração de pólen procedente de alguma cultivar de milho geneticamente modificada. A esse respeito, o censo da diversidade fornece informações relevantes sob o ponto de vista de biossegurança, ao analisar o cenário da convivência de diferentes sistemas de produção e da presença do parente silvestre na região.

Estudo de cenário dos sistemas de produção tradicional, convencional e biotecnológico no EOSC Os cultivos geneticamente modificados/transgênicos são desenvolvidos para atender a agricultura de grande escala e para esse mesmo sistema de produção são elaboradas as normas de biossegurança. No entanto, o milho geneticamente modificado dentro de um contexto de agricultura de pequena escala traz algumas preocupações e novos questionamentos no que diz respeito à biossegurança, sobretudo em regiões de elevada diversidade. Esse é o caso do EOSC, onde as dimensões de risco são ampliadas, considerando as restrições impostas pela convivência de diferentes sistemas de produção e pela presença de rica diversidade de variedades crioulas e de parentes silvestres da espécie cultivada. Do ponto de vista de biossegurança, existem dois marcos legais relevantes no Brasil que devem ser presentemente analisados, uma vez que os mesmos afetam diretamente a convivência entre os sistemas de produção biotecnológico (uso de cultivos transgênicos associados a técnicas modernas de produção), convencional (uso de cultivos não transgênicos e nível variado de tecnologias de produção) e tradicional (uso de variedades crioulas e baixo uso de tecnologia de produção). O primeiro marco foi emitido pela Comissão Nacional de Biossegurança – CTNBio, em 16 de agosto de 2007, por meio do Parecer Técnico 1.100/2007 (Brasil 2007a), que permitiu a liberação comercial do primeiro milho transgênico no Brasil (evento MON810/milho Guardian). Esse parecer desconsiderou a presença do parente silvestre do milho, em algumas regiões do país, ao afirmar que “não há no Brasil espécies silvestres que o milho possa se intercruzar, já que a espécie silvestre mais próxima ao milho é o teosinto, encontrado apenas no México e em alguns locais da América Central, onde pode cruzar com milho cultivado em campos de produção”. O segundo marco foi emitido pela CTNBio, em 23 de agosto de 2007, por meio da Resolução Normativa no 4 (Brasil 2017b). Ela trata do princípio de coexistência entre milho transgênico e não transgênico, baseado em distâncias mínimas de isolamento entre lavouras, dispondo que “para permitir a coexistência entre dois campo de produção, a distância mínima 38


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

entre uma lavoura de milho geneticamente modificado e outra de milho não geneticamente modificado, localizada em área vizinha, deve ser igual ou superior a 100 metros ou, alternativamente, 20 metros, desde que acrescida de bordadura com, no mínimo, dez fileiras de plantas de milho convencional de porte e ciclo vegetativo similar ao milho geneticamente modificado”. Nesse caso, a norma deu uma menor importância ao fato do milho ser uma espécie alógama, cuja dispersão do pólen é realizada principalmente pelo vento, embora a própria CTNBio tenha acatado os resultados de Emberlim et al. (1999) ao admitir, no Parecer Técnico 1.100/2007, que o pólen pode chegar a distâncias de 60 m (2% do pólen), 200 m (1,1% do pólen) e 500 m (de 0,5 a 0,75% do pólen) da fonte de contaminação. No contexto da conservação on farm do microcentro de diversidade do EOSC, as possibilidades de contaminação de variedades crioulas por milhos geneticamente modificados são significativas sob o ponto de vista da espacialidade e temporalidade, em função dos seguintes aspectos: (i) reduzido tamanho das propriedades rurais; (ii) reduzida disponibilidade de áreas agricultáveis, resultante de relevo acidentado e ajuste de conduta em atendimento às exigências do código florestal; (iii) sobreposição de cultivos por um longo período de produção (Cordeiro et al. 2008; Costa 2013); (iv) pequenas dimensões dos campos cultivados com variedades crioulas de milho, em comparação às dimensões das áreas cultivadas com híbridos transgênicos; (v) cultivo de mais de um tipo de milho na propriedade (crioulo e comercial) e, consequentemente, condução de diferentes sistemas de produção (dados do censo da diversidade); (v) presença do parente silvestre na mesma área e época de cultivo do milho (Silva et al. 2015); (vi) dificuldade de rotacionar áreas de cultivo, associado ao aparecimento de plantas espontâneas indesejáveis nas lavouras de milho crioulo. O conjunto desses fatores dificultam ou, até mesmo, inviabilizam o planejamento de práticas de isolamento espacial e temporal das áreas cultivadas com variedades crioulas no EOSC. Com a finalidade de verificar a viabilidade da conservação da diversidade do gênero Zea, nos municípios de Anchieta e Guaraciaba (EOSC), à luz da Resolução Normativa no 4, consideramos pertinente analisar para a composição desse texto apenas parcialmente os dados do censo da diversidade. Informações adicionais sobre esse tema foram analisadas para o município de Anchieta por Costa (2013) e, para ambos os municípios, em material ainda em fase de elaboração.

Número de áreas de cultivo com diferentes tipos de milho Foram mapeados 5.245 campos cultivados de milho, em 1.688 39


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

estabelecimentos rurais que cultivavam qualquer tipo de milho, dos quais 1.226 (23%) foram de milho geneticamente modificado, 1.538 (29%) de milho não geneticamente modificado, 374 (7%) de variedades crioulas de milho comum e farináceo, 1.078 (21%) de variedades crioulas de milho pipoca e 61 (1%) de milhos crioulos doces e adocicados. Os resultados apresentados para o milho comercial geneticamente modificado e não geneticamente modificado podem ter sido subestimados, uma vez que 968 (19%) campos de milho comercial não tinham informação (Tabela 1). Ao analisar a área ocupada com cada tipo de milho, os percentuais favoreceram significativamente o milho modificado geneticamente, considerando que 5.063 ha (40%) foram cultivados com este tipo de milho, 3.829 (30%) com milho não geneticamente modificado, 321 ha (3%) com variedades crioulas de milho comum e farináceo, 215 ha (2%) com variedades crioulas de milho pipoca e 1 ha (0,01%) com milhos crioulos doces. Em aproximadamente 3.170 ha (25%), os agricultores não souberam informar sobre o tipo de variedade comercial que estava sendo cultivado (Tabela 1). O desconhecimento dos agricultores sobre a cultivar comercial usada em suas lavouras aumenta os riscos de contaminação das variedades crioulas, já que essa fração de agricultores não soube responder o tipo de milho comercial que cultivava (se geneticamente modificado ou não geneticamente modificado) e, possivelmente, não se preocupou em adotar procedimentos de isolamento espacial e/ou temporal. Tabela 1 - Número (N°) e frequência relativa (%) do número de campos de milhos crioulos, cultivados em Anchieta e GuaraciabaSC, na safra 2011/2012.

SI: sem informação; GM: híbrido comum geneticamente modificado; NGM: variedade ou híbrido não geneticamente modificado. Distância entre os campos de milho e dispersão de sementes como 40


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

fatores facilitadores da contaminação Como contraponto à Resolução Normativa CTNBio no4, os padrões estabelecidos pelo Ministério da Agricultura Pecuária e Abastecimento – Mapa, em 20 de dezembro de 2005, dispõem sobre a distância mínima de 200 a 400 m, para a produção de sementes de milho, dependendo do tipo varietal (Brasil 2003; 2005). Por isso, as classes de distâncias usadas para a presente análise de risco de contaminação do milho não geneticamente modificado (comercial ou crioulo) foram presentemente estabelecidas com base na legislação brasileira, considerando as distâncias mínimas de 100 metros (Brasil 2007b) e 400 metros (Brasil 2005). Com base nessas referências espaciais, foi verificado que 57% dos campos cultivados com milho comercial não geneticamente modificado e 47%, 58% e 61% dos campos com milhos crioulos comum/farináceo, pipoca e doce, respectivamente, encontravam-se a distâncias iguais ou inferiores a 100 m dos campos cultivados com híbridos geneticamente modificados. Esta classe de distância (0 - 100 m) também apresentou o maior percentual de campos cultivados com milho na região, indicando a dificuldade de ser cumprida a distância mínima pelos agricultores, conforme consta na Resolução Normativa no 4. Com distância mínima de 101 m da fonte de pólen contaminante encontravam-se os demais campos cultivados com milho comercial não geneticamente modificado (43%) e milhos crioulos dos tipos comum/farináceo (53%), pipoca (42%) e doce (39%). A distâncias iguais ou inferiores a 400 metros da fonte de contaminação encontravam-se 79% dos campos cultivados com milho comercial não geneticamente modificado e 73%, 80% e 77% dos campos com milhos crioulos comum/farináceo, pipoca e doce, respectivamente. O percentual de campos cultivados com milho comercial não geneticamente modificado e variedades crioulas de comum/farináceo, pipoca e doce e com menor risco de contaminação (distância superior a 500m) foi de apenas 15%, 18%, 14% e 13%, nessa ordem. O número de campos cultivados com milho transgênico vizinho de campo cultivado com variedade crioula é outro aspecto relevante a ser analisado em estudos de cenário sobre o potencial de contaminação. Em Anchieta e Guaraciaba, um mesmo campo de variedade crioula de milho podia ter vários campos vizinhos cultivados com milho geneticamente modificado como possíveis fontes de contaminação. Para milho pipoca, foram observados de um a nove campos cultivados com milho geneticamente modificado a distâncias iguais ou inferiores à 100 m do campo cultivado com variedade crioula e um máximo de 21 campos cultivados com milho geneticamente modificado a distâncias iguais ou inferiores à

41


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

400 m da variedade crioula. Nesses casos, o fluxo gênico pode estar contaminando as variedades crioulas para mais de um evento/transgene, uma vez que os agricultores da região obtêm suas sementes de milho geneticamente modificado de pelo menos 27 empresas diferentes. No EOSC, são comercializados híbridos de milho portadores de eventos/ transgenes únicos ou piramidados, que conferem tolerância a herbicida ou resistência à lagarta. Cultivares contendo pirâmide de transgenes podem conferir ambas as características numa única cultivar (tolerância a herbicida e resistência à lagarta) ou mais de um evento/transgene para a mesma característica (tolerância a herbicida ou resistência a lagarta). A troca de sementes é um costume frequente entre os agricultores da região e que tem contribuído para o fortalecimento das relações sociais e culturais ao longo de muitas décadas desde os primeiros habitantes migrantes na região. No entanto, essa prática está sendo ameaçada pela contaminação potencial das variedades crioulas por pólen de milho transgênico, pelo fato de ampliar os riscos de dispersão que compromete a conservação dessa diversidade. Uma quantidade de 72 agricultores que cultivava milho geneticamente modificado e crioulo nas suas propriedades, na ocasião das entrevistas, havia doado suas sementes a outros agricultores.

Presença do parente silvestre do milho A presença do teosinto no sul do Brasil, convivendo de forma simpátrica com o milho cultivado (crioulo e comercial), amplia as dimensões de risco para a conservação da agrobiodiversidade. A maioria das populações espontâneas de teosinto de Anchieta e Guaraciaba ocorre em lavouras de milho (62% de 75% de populações espontâneas), seguida pelas áreas de pastagem (14%) e por outras áreas (5%) constituídas por lavouras de cana-de-açúcar, mandioca, horta e margem de rios. A distribuição espacial das formas cultivadas e silvestres na mesma área potencializa a ocorrência de fluxo gênico bilateral entre ambas populações (milhoteosinto e teosinto-milho) (Silva et al. 2015). Cerca de 54% dos agricultores entrevistados faziam algum tipo de controle das populações espontâneas de teosinto (34% manual, 15% com herbicida e 4% ambos), para evitar a dispersão de sementes, cujas plantas eram consideradas invasoras. Quando os agricultores eram questionados sobre as características de suas populações de teosinto, 109 indicações foram de resistência a pragas e oito de tolerância a herbicida, de um total de 388 indicações. Esses dados podem ser considerados boas evidências da ocorrência de contaminações das populações de teosinto no EOSC, se for considerado que os milhos geneticamente modificados mais frequentes nessa região são portadores de transgenes que conferem resistência a insetos da Ordem Lepdoptera e tolerância a um ou dois princípios ativos de herbicidas piramidados, principalmente glufosinato de amônio e glifosato (Silva et al. 2015). . 42


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

No caso das populações de teosinto consideradas cultivadas pelos agricultores (15%), ou seja, aquelas em que os agricultores guardam sementes de uma safra para outra, a época de plantio coincide com aquela indicada para o milho na região. O período de florescimento de ambas as espécies também é coincidente, o que aumenta a chance de contaminação dos teosintos por pólen de milho transgênico. A ocorrência de cruzamento intra e interespecífico acidental e a não inclusão do teosinte nas normas de biossegurança, torna o parente silvestre do milho uma fonte potencial e imprevisível de contaminação das variedades crioulas do microcentro de diversidade do EOSC. Não menos relevante é o próprio impacto ecológico decorrente da contaminação dos teosintos com pólen de milho transgênico tolerante a herbicida, considerando a impossibilidade do seu controle, em áreas onde as plantas aparecem como invasoras. CONSIDERAÇÕES FINAIS O cenário analisado no presente estudo traz evidências irrefutáveis sobre a fragilidade das normas de biossegurança baseadas em distâncias mínimas entre lavouras, visando garantir a coexistência entre milhos modificados e não modificados geneticamente sem ocorrências de contaminação. Os subsídios científicos fornecidos no presente estudo são suficientes para recomendar medidas de restrição ou, até mesmo, de proibição do plantio de milho geneticamente modificado nesse microcentro de diversidade localizado no Extremo Oeste de Santa Catarina, Sul do Brasil, considerando que a convivência de diferentes sistemas de produção ameaça a conservação das populações locais cultivadas e silvestres do gênero Zea. A região de estudo possui duas particularidades que justificam a definição de zonas de conservação da agrobiodiversidade e, nesse mesmo caminho, livres de cultivos transgênicos. A primeira seria em razão da rica diversidade de populações cultivadas de diferentes tipos de milhos crioulos. A segunda seria pela presença dos parentes silvestres do milho, em processo de domesticação e coevolução com o milho já domesticado. A estratégia de definir zonas de conservação da agrobiodiversidade e livre de cultivos transgênicos não é novidade no Brasil (Barroso et al. 2005), pois já foi implantada para a preservação de espécies nativas e naturalizadas do gênero Gossypium Os padrões de biossegurança e os pareceres técnicos que autorizam a liberação de milho geneticamente modificado no Brasil devem ser revisados, sobretudo em regiões de rica diversidade do gênero Zea, em conformidade ao Princípio da Precaução (Princípio 15 da Declaração do Rio sobre Meio Ambiente e Desenvolvimento). A abordagem de

43


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

precaução norteou o Protocolo de Cartagena sobre Biossegurança da Convenção da Diversidade Biológica, que está em vigor no Brasil a partir do Decreto 5.705 de 16 de fevereiro de 2006. AGRADECIMENTOS O Núcleo de Estudos em Agrobiodiversidade da Universidade Federal de Santa Catarina agradece especialmente aos agricultores de Anchieta e Guaraciaba, por terem cedido todas as informações apresentadas nesse trabalho; aos estudantes de pós-graduação e graduação, por terem se envolvido com dedicação direta ou indiretamente à presente pesquisa, levantando e analisando os dados do censo da diversidade, para a elaboração de Trabalhos de Conclusão de Curso (graduação), Dissertações de Mestrado, Teses de Doutorado e artigos científicos; e ao CNPq, à FAPESC e à CAPES, pelo financiamento de projetos e/ou bolsas de estudos; à Biored Iberoamericana CYTED, por oportunizar aos seus leitores mais essa publicação.

rEFERENCIAS Y CONTACTOS Anderson E, Cutler HC. Races Zea mays: their recognition and classification. Ann Mo Bot Gard, 29:69-88, 1942. Balbinot Jr AA, Backes RL, Alves AC, Ogliari JB, Fonseca JA. Contribuição de componentes de rendimento na produtividade de grãos em variedades de polinização aberta de milho. Revista Brasileira de Agrociência, 11:161-166, 2005. Barroso PAV, Freire EC, Amaral JAB, Silva MT. Zonas de exclusão de algodoeiros transgênicos para preservação de espécies de Gossypium nativas ou naturalizadas. Comunicado Técnico 242. Ministério da Agricultura Pecuária e Meio Ambiente. Campina Grande-PB: EMBRAPA, p.1-7, 2005 Bellon MB, Berthaud J, Smale M, Aguirre JA, Taba S, Aragon F, Diaz J, Castro H. Participatory landrace selection for on-farm conservation: An example from the Central Valleys of Oaxaca, Mexico. Genetic Resources and Crop Evolution, 50:401–416, 2003. Brasil. Parecer Técnico n° 1.100/2007 de 16 agosto de 2007. Ministério de Ciência, Tecnologia e Inovação. Brasília: Comissão Técnica de Biossegurança, 2007a. Disponível em: http:// http://ctnbio.mcti.gov.br/inicio. Acesso em: 26 de setembro de 2018 Brasil. Resolução Normativa n° 4 de 23 de agosto de 2007. Ministério de Ciência, Tecnologia e Inovação. Brasília: Comissão Técnica de Biossegurança, 2007b. Disponível em: http://www.ctnbio.mcti.gov.br/index. php/content/view/4687.html. Acesso em: 03 de agosto de 2014. Brasil. Padrões para produção e comercialização de sementes de milho: cultivares não híbridas (variedades). Ministério da Agricultura, Pecuária e Abastecimento. Brasília: Diário Oficial no 243 (Seção 1), de 20 de dezembro de 2005. Disponível em: https://www.agricultura.pr.gov.br/arquivos/File/PDF/ padroes_sorgo.pdf. Acesso em: 26 de setembro de 2018. Brasil. Sistema Nacional de Sementes e Mudas: Lei no 10.711, de 5 de agosto de 2003. 318p. Disponível em: https://www.planalto.gov.br/ccivil_03/Leis/2003/L10.711.htm. Acesso em: 03 de outubro de 2014. Brieger FG, Gurgel JTA, Paterniani E, Blumenschein A, Alleoni M. Races of maize in Brazil and other eastern South American countries. National Academies, Washington, 1958. Bustamante PG, Padua VLM, Maia VH, Ferreira PCG. Evidence of maize (Zea mays mays L.) exploitation around an ancient crossroad linking different aboriginal American civilization. Acta Scientiae and Technicae, 2:9-13, 2014.

44


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Juliana Bernardi Ogliari. Biorediberoamérica, Nodo Brasil

rEFERENCIAS Y CONTACTOS CIB. Conselho de Informações sobre Biotecnologia. Notícias, junho de 2018. Disponível em: https://cib. org.br/isaaa-2018. Acesso em: 26 de setembro de 2018. Cordeiro A, Alves AC, Ogliari JB. Challenges for co-existence in small farming: the case of maize in Brazil. In: GMLS - International conference on ‘Implications of GM crop cultivation at large spatial scales’, 2008, Bremen. Theorie in der Ökologie. Frankfurt: Peter Lang - Europäischer Verlag der Wissenschaften, 2008, 14:134-139, 2008. Costa FM. Diversidade Genética e Distribuição Geográfica: uma abordagem para a Conservação on farm e ex situ e o Uso Sustentável dos Recursos Genéticos de Milho do Oeste de Santa Catarina, Brasil. Dissertação de Mestrado em Recursos Genéticos Vegetais - Universidade Federal de Santa Catarina, concluída em julho de 2013. Orientadora: Juliana Bernardi Ogliari. Costa FM, Silva NCA, Ogliari JB. Maize diversity in southern Brazil: indication of a microcenter of Zea mays L. Genetic Resources and Crop Evolution, 29:78-85, 2016. Emberlim J, Adams-Groom B; Tidmarsh J. A report on the dispersal of maize pollen. National Pollen Research Unit, University College, Worcester. Report commissioned by available from the Soil Association. Bristol House, Bristol. p.40-56, 1999. EMBRAPA. Nasa confirma dados da Embrapa sobre área plantada no Brasil. Notícias, de 29 de dezembro de 2017. Disponível em: htpps://www.embrapa.br/busca-de-noticias/-/noticia/30972444/lavouras-saoapenas-76-do-brasil-segundo-a-nasa. Acesso em: 20 de setembro de 2018. Gonçalves GMB. Caracterização e divergência genética de variedades crioulas de milho pipoca conservadas por agricultores do Oeste de Santa Catarina. Dissertação de Mestrado em Recursos Genéticos Vegetais - Universidade Federal de Santa Catarina, concluída em fevereiro de 2016. Orientadora: Juliana Bernardi Ogliari. IBGE. Instituto Brasileiro de Geografia e Estatísticas. Censo 2006. Disponível em: htpp://www.censo2006. ibge.gov.br/. Acesso em: 26 de setembro de 2012. IBGE. Instituto Brasileiro de Geografia e Estatísticas. Censo 2010. Disponível em: htpp://www.censo2010. ibge.gov.br/. Acesso em: 18 de agosto de 2015. Kist V, Ogliari JB, Miranda Filho JB, Alves AC. Genetic potential of a maize population from Southern Brazil for the modified convergent-divergent selection scheme. Euphytica, 176:25-36, 2010. Kist V, Aalbino VS, Maraschin M, Ogliari JB. Genetic variability for carotenoid content of grains in a composite maize population. Scientia Agricola, 1:480-487, 2014. Kuhnen S, Dias PF, Ogliari JB, Maraschin M. Brazilian maize landraces silks as source of lutein: an important carotenoid in the prevention of age-related macular degeneration. Food and Nutrition Sciences, 3:16091614, 2012. Kuhnen S, Ogliari J.B, Dias PF, Silva Santos M, Ferreira AG, Bonham CC, Wood KV, Maraschin M. Metabolic Fingerprint of Brazilian Maize Landraces Silk (Stigma/Styles) Using NMR Spectroscopy and Chemometric Methods. Journal of Agricultural and Food Chemistry, 58:2194-2200, 2010a. Kuhnen S, Ogliari JB, Dias PF, Boffo EF, Correia I, Ferreira AG, Delgadillo I, Maraschin M. ATR-FTIR spectroscopy and chemometric analysis applied to discrimination of landrace maize flours produced in southern Brazil. International Journal of Food Science & Technology, 45:1673-1681, 2010b. Louette D, Charrier A, Berthaud J. In situ conservation of maize in Mexico: genetic diversity and maize seed management in a tradicional community. Econ Bot, 51:20-38, 1997. Molina M del C, López CG, Staltari S, Chorzempa SE, Ferrero VM. Cryptic homology analysis in species and hybrids of genus Zea. Biol Plantarum, 3:449-456, 2013. Padrão, G. Milho. In: Síntese Anual da Agricultura em Santa Catarina 2016-2017. Florianópolis: EPAGRI/ CEPA, 2017. p. 79-86. Ogliari JB, Kist V, Canci A. The participatory genetic enhancement of a local maize variety in Brazil. In: De Boef W, Peroni N, Subedi A, Thijssen M, O’Keeffe E (Org.). Community Biodiversity Management. Promoting Resilience and the Conservation of Plant Genetic Resources. 1ed.Abingdon: Routledge, 2013, p.265-271. Silva NCA. Conservação, diversidade e distribuição de variedades locais de milho e seus parentes silvestres no Extremo Oeste de Santa Catarina, Sul do Brasil. 2015. Tese de Doutorado em Recursos Genéticos Vegetais - Universidade Federal de Santa Catarina, concluída em abril de 2015. Orientadora: Juliana Bernardi Ogliari.

45


Fotografia: Federico Del Cura Delgado


Tubérculos Andinos en Boyacá. Un proceso de conservación participativa con comunidades campesinas. Neidy Lorena Clavijo Ponce Facultad de Estudios Ambientales y Rurales,

Pontificia Universidad Javeriana. Colombia n.clavijo@javeriana.edu.co

RESUMEN En dos municipios del Departamento de Boyacá, Colombia, fueron identificados agricultores que incluyen en sus sistemas productivos tubérculos andinos: rubas (Ullucus tuberosum), ibias (Oxalis tuberosa) y cubios (Tropaeolum tuberosum), como elementos básicos de la alimentación familiar y que dado su origen precolombino, los consideran como símbolo de su identidad cultural. No obstante lo anterior, existe un alto riesgo de que estos tubérculos queden en el olvido como consecuencia de la falta de interés para su consumo por parte de los niños y jóvenes de la zona, así como por su débil proyección en el mercado nacional. Por esta razón entre el año 2008 y 2010 la Pontificia Universidad Javeriana llevó a cabo un proyecto de investigación que buscó fomentar alternativas de uso y conservación de la agrobiodiversidad de estas especies, obteniéndose los siguientes resultados: 1) caracterización de sistemas productivos correspondientes a una agricultura campesina altamente heterogéneos, con amplia variedad de especies cultivadas que en su mayoría son utilizadas para el autoconsumo; 2) identificación de 41 morfotipos locales entre ibias, cubios y rubas y el establecimiento de cuatro parcelas comunitarias de multiplicación para su conservación; 3) innovación en formas de preparación culinaria de los tubérculos como un incentivo para el consumo de todos los miembros de la familia y 4) consolidación de un grupo participativo local de pequeños agricultores jóvenes y adultos, con énfasis en conservación in situ. Palabras clave: agrobiodiversidad, conservación in situ, tubérculos andinos. 47


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Neidy Lorena Clavijo Ponce. Biorediberoamérica, Nodo Colombia

INTRODUCCION En los países andinos, además de las conocidas especies del género Solanum (papas), se logró la domesticación de un grupo de tubérculos afines morfológicamente, pero de distintas familias botánicas que han sido menos estudiadas y valorizadas en el mundo agronómico (Tapia y Fries, 2007). La ruba (Ullucus tuberosum), junto con otras especies como la ibia (Oxalis tuberosa) y el cubio (Tropaeolum tuberosum) son algunos de ellos. Están sembrados en pequeñas áreas bajo sistemas de producción tradicionales y en condiciones difíciles, pero son imprescindibles para asegurar la diversificación alimentaria y el sustento de las poblaciones que viven en mayor riesgo (Espinosa et al, 1997). En el caso particular de los Municipios de Turmequé y Ventaquemada, ubicados en el Departamento de Boyacá, se identificaron treinta y cinco familias de pequeños agricultores que cultivan estos tubérculos, como base principal de su alimentación. Sin embargo, con base en información recolectada en el trabajo de campo, se pudo evidenciar que estos cultivos están atravesando por un importante proceso de deterioro, al igual que muchos otros productos andinos tradicionales, debido a dos factores: uno de orden local expresado en un cada vez menor interés de niños y jóvenes rurales por consumirlos, y otro de orden externo representado por la presión que ejercen los mercados nacionales para el cultivo de productos más rentables como papa, fríjol, cebolla, entre otros, lo cual ha llevado a la reducción paulatina de las áreas sembradas hasta llegar a unos pocos surcos intercalados entre los cultivos de importancia comercial. Lo anterior se ha venido traduciendo en la desaparición de germoplasma expresado en la ausencia de ciertos morfotipos que según los agricultores existían años atrás en la zona, así como en la reducción de semilla disponible para su cultivo, razones por la cuales los pobladores aseguran, está aumentando el riesgo de su desaparición pese a la importancia que ellos le han otorgado 2. En este contexto y con el interés de fomentar alternativas de uso y conservación de la agrobiodiversidad del cubio, la ibia y la ruba, la Pontificia Universidad Javeriana, con el apoyo de la Corporación PBA3 dio inicio a un proceso de investigación que incluyó tres componentes fundamentales: 2 Son cultivos sanos, patrimonio de nuestros ancianos, símbolo de nuestra cultura y la base de nuestra alimentación” (Pequeño agricultor de Turmequé, 2007). | 3 Corporación para el Desarrollo Participativo y Sostenible de los Pequeños Agricultores Colombianos (Corporación PBA) http://www.corporacionpba.org/portal/index.php

48


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Neidy Lorena Clavijo Ponce. Biorediberoamérica, Nodo Colombia

1.Caracterización agroecológica, económica y tecnológica de los sistemas de producción de tubérculos andinos en los municipios de Turmequé y Ventaquemada con el fin de conocer las implicaciones que estos cultivos tienen para las familias campesinas de la población, así como las formas actuales de uso y consumo 2. Promoción de procesos locales participativos de recolección, identificación y conservación in situ del germoplasma existente en los dos municipios, 3. Innovación en formas alternativas para la preparación de recetas con base en ibias, cubios y rubas. Es importante mencionar que para este estudio agrobiodiversidad es entendida como todos los componentes de la biodiversidad relacionados con la alimentación y la agricultura4. Esta diversidad ha sido creada a lo largo de miles de años por campesinas y campesinos mediante observación, selección, intercambio y mejoramiento, por tal motivo ellos desempeñan un papel central en su mantenimiento (Casas y Parra, 2007). Al reconocer el protagonismo de las comunidades campesinas en los procesos de conservación de especies vegetales en espacios temporales y naturales específicos, la conservación in situ se considera en esta investigación como una estrategia apropiada para tal fin y acoge para ello la definición de Tapia y Rosas (1998) que la explican como la conservación basada en la participación activa de la familia campesina, que involucra el mantenimiento de variedades tradicionales o sistemas de cultivo dentro de sistemas agrícolas tradicionales . Sin embargo, frente a la advertencia de Espinosa et al (1997) de que “los esfuerzos de conservación in situ de la agrobiodiversidad no serán suficientes si no se incrementan sus posibilidades de uso pues es una lección aprendida que aquello que no se usa se pierde o se desecha”, este trabajo también se concentró en aportar mediante procesos de investigación y capacitación opciones de uso relacionadas con la alimentación, que puedan hacerlos atractivos para el consumo de toda la comunidad. Convenio Biodiversidad Biológica (2000) La conservación vista de esta manera no privilegia únicamente el valor biológico o técnico de la agrobiodiversidad, sino también el conocimiento local, el comportamiento cultural, social y económico, así como la organización local de las poblaciones campesinas (Villarroel et al, 2001). 6 Entiendase Transdisciplina como la expansión del enfoque interdisciplinario hacia la participación; en este caso, los investigadores trabajando con los grupos y usuarios afectados por un problema dado (Ruíz, O 2006). La transdisciplinariedad requiere de acuerdos comunes entre los coparticipantes para diseñar, desarrollar, practicar y evaluar acciones (Schwaninger, 1997) 4 5

49


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Neidy Lorena Clavijo Ponce. Biorediberoamérica, Nodo Colombia

METODOLOGIA Esta investigación se llevó a cabo bajo un enfoque transdisciplinar6 que busca que las comunidades estén involucradas desde el principio en todas las fases del proceso de investigación. Bajo este enfoque, para conservar la agrobiodiversidad de tubérculos andinos, los procesos de conservación in situ parecen ser los más apropiados, ya que éstos reconocen el conocimiento y las prácticas tradicionales de manejo de los agricultores como uno de los ejes fundamentales para su persistencia a través del tiempo (Casas y Parra, 2007). En esta investigación se hizo imprescindible comprender la lógica de los sistemas productivos locales, su funcionamiento, su biodiversidad y la participación de los miembros de la familia en procesos de conservación y uso de ésta diversidad. De esta manera se llevó a cabo la caracterización de 20 fincas a través de las siguientes herramientas y actividades participativas: mapas mentales de las fincas; muestreo e identificación de especies de importancia económica, cronograma general de actividades de los cultivos de tubérculos andinos, flujograma de actividades para el cultivo de las tres especies de tubérculos, flujograma de participación de los miembros de la familia en el manejo de tubérculos andinos. De otra parte, para puntualizar temas de seguridad alimentaria se usó la descripción del menú diario7 y la herramienta conocida como “la olla”8. Para la identificación de la diversidad de tubérculos andinos y los usos dados por los agricultores de la zona, se llevó a cabo un diagnóstico de diversidad intraespecífica de ibias, rubas y cubios en fincas de agricultores y talleres participativos para validación de información. Posteriormente con el fin de fomentar procesos de conservación in situ, se llevó a cabo la Primera Feria de Agrobiodiversidad de tubérculos andinos, cuyo objetivo principal fue el de colectar germoplasma local y proveniente de otros municipios vecinos, que luego de ser clasificado e identificado, material que sirvió de insumo para el establecimiento de dos núcleos de conservación in situ, uno por cada municipio, con dos parcelas sembradas con el material colectado tanto en Turmequé como en Ventaquemada. También se llevaron a cabo talleres semanales con el fin de rescatar, junto con la comunidad, recetas tradicionales de la zona que fueron estandarizadas y balanceadas a través de la participación de hombres, mujeres, jóvenes y niños. 7

Descripción de los distintos alimentos consumidos durante el día. Esta herramienta participativa, consiste en que los agricultores especifiquen qué ingredientes utilizan para la preparación de sus platos en cada momento de alimentación en un día promedio y expliquen de que manera los obtienen. 9 En 12 de las fincas caracterizadas se encontró relictos de bosque con especies nativas de la zona, en un grado muy bajo de intervención humana para su modificación estructural. 8

50


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Neidy Lorena Clavijo Ponce. Biorediberoamérica, Nodo Colombia

RESULTADOS Los sistemas productivos con tubérculos andinos en Turmequé y Ventaquemada. Los sistemas de producción en los cuales se producen tubérculos andinos en los municipios de Turmequé y Ventaquemada, son típicamente de agricultura campesina. Están constituidos por cuatro subsistemas: agrícola, pecuario, bosque con especies nativas9 y la casa familiar. Se caracterizan por mantener sistemas de policultivos que contribuyen a la diversidad biológica espacial y temporal; la utilización de herramientas agrícolas tradicionales como el azadón; el uso de mano de obra generalmente familiar y tienen una escasa utilización de insumos externos como plaguicidas o fertilizantes, lo que hace que los cultivos tengan un amplio potencial de comercialización, dirigidos a segmentos de mercado que buscan esta cualidad en los alimentos. La presencia de rubas, ibias y cubios se hizo evidente en todas las fincas, desde su presencia en pequeñas franjas dentro de la huerta familiar hasta en medianas áreas que los convierten en cultivos principales en los sistemas productivos. Su consumo es frecuente y están vinculados estrechamente con la cultura alimentaria y agrícola de la zona, lo que ha permitido su conservación hasta hoy. También se pudo determinar que la responsabilidad de su manejo, se encuentran a cargo de toda la familia, sin embargo sobresale la participación de la madre y los hijos en labores culturales por tratarse de cultivos con extensiones reducidas ubicados cerca de la casa, lo cual facilita el acceso y cuidado, a diferencia de la papa y el fríjol cuyas áreas son mayores y por ser cultivos que generan excedentes son responsabilidad directa del padre 10. Con respecto a la alimentación de las familias, se pudo evidenciar que poseen en su dieta amplia diversidad de alimentos, la cual se deriva en su mayoría de los productos obtenidos en sus propias fincas. No obstante, otros productos de consumo diario son adquiridos en el mercado local, y otros provienen del intercambio entre familiares y vecinos. En cuanto a los alimentos diarios, se usan distintos ingredientes para preparar los diferentes menús, entre ellos sobresalen los tubérculos andinos, cuya forma de consumo en los hogares puede ser en coladas, sopas, guisos, 10

Si bien los varones son los que responden en general por el manejo de cultivos como una tarea social que se les adjudica en la comunidad, las mujeres y los niños participan activamente también en labores agrícolas, entre ellos la conservación de semillas y otras labores de menor importancias económica (Tapia y De la Torre 1997;Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán 2001; Lahoz, 2005 y Castiñeiras et al 2008)

51


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Neidy Lorena Clavijo Ponce. Biorediberoamérica, Nodo Colombia

bebidas como la chicha y otras maneras alternas de preparación. Entre los ingredientes usados para la preparación de los menús se identificaron grupos alimentarios bien definidos como el de los carbohidratos representados por los tubérculos (papa, cubio, ibia y ruba) pasta y arroz; granos como fríjol y arveja con una amplia aceptación entre las familias debido a que son producidos en las mismas fincas y hay tradición de consumo. Aunque las proteínas animales provenientes de carne o pollo, no son alimento de todos los días, se encontró que éstas en promedio son consumidas dos veces por semana, esta frecuencia aumenta cuando en los sistemas productivos se cría especies menores. Las frutas se hacen presentes en esta comida con el jugo, el cual es elaborado aprovechando aquellas que se producen en la finca y algunas como el mango o la piña que se compran en el mercado. Las hortalizas son poco consumidas a pesar que algunas son producidas en la huerta familiar. Cabe señalar que la incorporación de tubérculos andinos en la dieta familiar de la zona contribuye con un aporte energético y un complemento nutricional importante si se considera su contenido proteico, calórico y mineral11, por lo tanto su contribución a la seguridad alimentaria de la zona resulta relevante, sobre todo si se además de lo anterior se toma en cuenta el escaso o nulo uso de productos químicos para su cultivo, lo cual los ubica en la categoría de cultivos sostenibles, la diversidad que le aportan a la dieta cuando son combinados con otros alimentos al momento de ser dispuestos en la mesa, y su alta disponibilidad por ser cultivos producidos en la finca y a los cuales se puede tener acceso incluso a través de procesos de intercambio vecinal y familiar. Además del autoconsumo, los agricultores consultados, reconocen que históricamente los tubérculos andinos han tenido un uso medicinal trascendente en la zona. Los cubios los han utilizado “para bajar el ácido úrico, bajar el colesterol, purificar la sangre y para problemas de prostata. Las ibias se usan para las personas que necesitan subir el azúcar. Las hojas de rubas para desinflamar la ubre de las vacas. Igualmente a las rubas se les conoce como buenos para los riñones, el hígado y los pulmones. Esto permite reconocer que estos cultivos han generado toda una riqueza 11

Ver Espín, S; Brito, B; Villacrés, E; Rubio, A; Nieto, C y Grijalva, J. 2001. Composición química, valor nutricional y usos potenciales de siete especies de raíces y tubérculos andinos. Acta científica Ecuatoriana, 7 (1), 49. 12 Taller participativo de manejo y uso de tubérculos andinos con los agricultores de Turmequé y Ventaquemada. Octubre 2009.

52


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Neidy Lorena Clavijo Ponce. Biorediberoamérica, Nodo Colombia

cultural manifiesta en ritos, creencias y costumbres de la zona que puede contribuir a la vigencia de una riqueza varietal fundamental para la vida de las familias andinas (Villarroel, et al 2001). Agrobiodiversidad y procesos de conservación in situ de tubérculos andinos. En el caso de los municipios de Ventaquemada y Turmequé, mediante visitas de campo en fincas y talleres participativos, se pudo evidenciar la diversidad de material genético de rubas, cubios e ibias, mantenidos in situ (tabla 3). Tabla 3. Diversidad de tubérculos andinos, usos y características en Turmequé y Ventaquemada, 2009

*Característica con base en la cual los agricultores diversidad de tubérculos andinos.

identifican la

Fuente: Esta investigación Con el fin de colectar semilla y establecer parcelas de conservación in situ, se llevó a cabo en el municipio de Turmequé la Primera Feria de 13

Cocido Boyascence, plato preparado con cubios, rubas, arvejas,habas, papas y tres tipos de carnes.. 14 Premnotrypes vorax (Hustache) es la plaga más importante del cultivo de papa en las zonas altas de Colombia (Valencia, L 1987) en Revista Latinoamericana de la Papa, Vol 2: 57-70.

53


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Neidy Lorena Clavijo Ponce. Biorediberoamérica, Nodo Colombia

Agrobiodiversidad de tubérculos andinos15, evento en el cual participaron además de los 35 agricultores del proyecto, cerca de cuatrocientos asistentes, la mayoría de ellos campesinos de municipios aledaños tanto del departamento de Cundinamarca como de Boyacá, que trajeron consigo semillas producidas en sus fincas para exponer e intercambiar en la feria. De esta manera se identificaron 41 accesiones16 entre ellas morfotipos con expresión de color distintos a los previamente identificados en las fincas de estudio, dando la pauta de que la zona y sus alrededores pudiera ser una evidencia de la aseveración de Parra (2001): “en los andes nororientales y particularmente en los departamentos de Boyacá, Cundinamarca y Santander se puede encontrar una sorprendente variabilidad de tubérculos andinos cultivados y conservados en pequeños bancos de semilla de pequeños agricultores” (Tabla 2). Tabla 2. Accesiones de tubérculos andinos colectados en la primera feria de agrobiodiversidad.

Fuente: Esta investigación Con estas 41 accesiones se establecieron dos núcleos de investigación participativa de conservación in situ17 en fincas de pequeños agricultores, uno en el Municipio de Ventaquemada y otro en el Municipio de Realizada el 17 de mayo del 2009 en la plaza central del Municipio de Turmequé. La Feria estuvo organizada en cinco componentes principales: Conocimiento local; Manejo de cultivo; Usos y consumo; Diversidad de semillas; y Muestra cultural. Los agricultores fueron los expositores en cada uno de los stands. Hubo un espacio destinado para el intercambio de semillas. 16 Semillas de una misma especie que denotan distinta procedencia, en este caso según la vereda, el municipio o el departamento de donde provengan, 17 Cada núcleo de investigación estaba conformado por quince pequeños productores que distribuyeron entre sí, responsabilidades de manejo, seguimiento y monitoreo del material genético sembrado, en compañía de un investigador. 15

54


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Neidy Lorena Clavijo Ponce. Biorediberoamérica, Nodo Colombia

Turmequé, cada núcleo integrado por dos fincas, dentro de las cuáles se instalaron parcelas donde se sembró el material colectado en la feria. Una vez cosechadas las parcelas, la mitad de las semillas fueron repartidas de manera equitativa entre todos los agricultores para que puedan ser multiplicadas en sus fincas y posteriormente usadas según las formas tradicionales de la zona, mientras que la otra mitad se volvió a sembrar en los núcleos de conservación, con el fin de volver a multiplicar semilla y distribuirla en una segunda campaña a todos los agricultores. Desarrollo de alternativas participativas de uso de la agrobiodiversidad de tubérculos andinos en la zona de estudio. El proyecto de investigación fomentó el rescate de formas locales de consumo de tubérculos andinos con el propósito de promover e innovar la preparación culinaria de los mismos buscando volverla más atractiva al paladar, ya que según versiones de las madres de familia de los dos municipios “los niños y los jóvenes ya no tienen mucho gusto por estos cultivos a pesar de ser nutritivos y propios de la zona, lo cual puede ser una razón para que se sigan perdiendo” . Estas actividades fueron guiadas por una nutricionista del equipo de investigación de la Pontificia Universidad Javeriana18 e incluyeron talleres participativos que estaban estructurados en tres secciones: una primera parte de formación en nutrición, una segunda de preparación de diferentes recetas, la mayoría propiciada por los mismos agricultores y otras provenientes de fuentes secundarias19 y una tercera de degustación y evaluación de por parte de todos los asistentes. Los principales temas trabajados en cada taller giraron alrededor de una alimentación saludable, preparación y conservación de alimentos, estandarización de recetas, biodiversidad y seguridad alimentaria. Producto de este proceso se obtuvieron 27 recetas validadas y finalmente publicadas en un recetario20 las mismas que por ser de fácil preparación, atractivas al gusto y a la vista, han sido incorporadas por los agricultores en los menús de los distintos momentos de su alimentación, con tan buenos resultados que a través de un proceso de difusión de la misma comunidad fueron incluidas en los almuerzos escolares de la escuela del Municipio de Turmequé como un aporte al fomento del consumo de estos tubérculos por la población infantil que según se mencionó tiene poca preferencia por estos alimentos. 18

María Teresa Barón. Nutricionista y MSc en Desarrollo Rural Espinosa (1997) y Ugarte (2007) 20 Barón, M; Clavijo, N y Combariza, J. 2010. Recetario. Tubérculos Andinos de Turmequé y Ventaquemada, Departamento de Boyacá, Colombia. Javegraf, Bogotá . Pontificia Universidad Javeriana. 19

55


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Neidy Lorena Clavijo Ponce. Biorediberoamérica, Nodo Colombia

Este componente socio-cultural, que buscó poner en evidencia el saber local ligado a procesos de conservación de agrobiodiversidad, se vio reforzado con la conformación por iniciativa propia de los agricultores, de un Grupo Participativo Local (GPL) que actualmente trabaja alrededor de los tubérculos andinos en los dos municipios con el fin de recuperar todo el conocimiento sobre estos productos e innovar en técnicas para su procesamiento y transformación. CONCLUSIONES • Los tubérculos andinos están ligados íntimamente con la cultura campesina de los municipios de Turmequé y Ventaquemada, haciendo que las expresiones culturales y técnicas de cultivo se hayan mantenido desde la época indígena hasta hoy con pocas modificaciones y sus formas de uso sean diversas y únicas, convirtiéndolos en una expresión de su identidad, por lo cual su interés en conservar la diversidad en sus sistemas productivos trasciende más allá de las expectativas económicas. • La ibia, el cubio y la ruba, son productos cuyo aporte a la seguridad alimentaria de los habitantes de la zona es importante, debido a que se encuentran ubicados como alimentos básicos de su dieta diaria y su consumo es alternado con otros cultivos producidos en las propias fincas, contribuyendo de alguna forma a incrementar la diversidad de alimentos disponibles en la mesa, con un alto grado de calidad que les otorga la nula aplicación de productos químicos durante su cultivo. No obstante, la falta de interés por parte de las nuevas generaciones para su consumo puede ser un factor de riesgo para su desaparición, la misma que debería abordarse a través de estrategias que los vuelvan agradables a la vista y al paladar pues como pudo apreciarse en este estudio esto logró estimular su interés no solo en el consumo, sino también en su cultivo. • Respecto a los procesos de conservación in situ de germoplasma, es importante resaltar la participación de la familia como unidad que dinamiza la conservación de los tubérculos andinos en la comunidad. Unidad que se encarga de su cuidado y distribuciónz, ya sea en sus parcelas y/o en parcelas colindantes, así como en su selección y consumo, dando un peso importante a la participación de la mujer y los niños. • Bajo el enfoque metodológico utilizado para este estudio, los procesos de aprendizaje y cooperación muestran evidencias

56


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Neidy Lorena Clavijo Ponce. Biorediberoamérica, Nodo Colombia

concretas de que las distintas etapas de encuentro y participación entre los agricultores y los investigadores, fueron el escenario adecuado para la organización social en torno a la conservación de tubérculos andinos. Organización que se expreso mediante un Grupo Participativo Local para la conservación y el Grupo de Niños Guardianes de los Tubérculos Andinos, ambas expresiones de capital social funcionando activamente desde noviembre del 2010.

Referencias y contactos Altieri, M 1999. Agroecología. Bases Científicas para una agricultura sustentable. NORDAN-Comunidad, Montevideo 315p. Barón, M; Clavijo, N y Combariza, J. 2010. Recetario. Tubérculos Andinos de Turmequé y Ventaquemada, Departamento de Boyacá, Colombia. Javegraf, Bogotá . Pontificia Universidad Javeriana. Casas, A y Parra F. 2007. Agrobiodiversidad, parientes silvestres y cultura, LEISA, Revista de Agroecología, 23 (2) 1-8. Clavijo, N; Prins, C; Sanchez, V; Soto, G y Staver, C 2006. Calendarización, Uso Racional, Sustitución y Rediseño. Una Comparación entre horticultores orgánicos y convencionales de Costa Rica. Revista Manejo Integrado de Plagas y Agroecología, 78 (2) 17-27. Espinosa, P; Vaca, R; Abad, J y Crissman, C. 1997. Raíces y Tubérculos Andinos Cultivos Marginados en el Ecuador - Situación Actual y Limitaciones para la Producción. Quito. Ediciones Abya- Yala. Espinosa, P. 1997. Volvamos a Nuestras Raíces-Recetario de las Raíces y Tubérculos Andinos. Ediciones Abya Yala. Quito, Ecuador. 52 p. Parra, M. 2001. Colecta, conservación y análisis de la diversidad genética de ulluco (Ullucus tuberosus Caldas) de Colombia. Tesis de Maestría. Facultad de Agronomía- Universidad Nacional de Colombia. Bogotá. 233 p. Tapia, E y De la Torre, 1997. La Mujer campesina y las semillas andinas: Género y el Manejo de los Recursos Genéticos. IPGRI- FAO, Disponible en http://www.fao.org/ DOCREP/x0227s/x0227s00.htm Tapia, E y Rosas, A.1998. Agrobiodiversidad en la Encañada. Sistematización de las experiencias de conservación in situ de los recursos fitogenéticos, Perú. CONDESAN, ASPADERUC, CIP y GTZ, Cajamarca, 26pp. Tapia, E y A. Fries. 2007. Guía de campo de los cultivos andinos. Lima.FAO y ANPE. Villarroel, T; Salazar, D; Delgado, R 2001. La biodiversidad de los tubérculos andinos: Importancia en la vida de las familias de una comunidad altoandina de cochabamba, en Bilbao, J (Eds) Memorias del 1er Seminario Taller Cosmovisión indígena y biodiversidad en América Latina (pp. 295-308) Cochabamba, AGRUCO - COMPAS

57


Fotografia: Enrique Hipolito Romero


Cultivo de vainilla y cacao en agroecosistemas diversificados de México Rescate biocultural de Neidy Clavijovalor Ponce sistemas agroforestales con especies de alto ecológico, económico y social, como estrategia para el manejo y la conservación del germoplasma nativo, en el marco de la Biorediberoamérica. Enrique Hipólito Romero José María Ramos Prado Carlos Roberto Cerdán Cabrera Jorge Ricañó Rodríguez Eliezer Cocoletzi Vásquez Centro de EcoAlfabetización y Diálogo de Saberes. Manejo y Conservación de Recursos Bioculturales, Universidad Veracruzana, Campus USBI. México. ehipolito@uv.mx

RESUMEN Como una iniciativa del Cuerpo Académico Manejo y Conservación de Recursos Bioculturales de la Universidad Veracruzana, México; en el año 2012, surge la intención de establecer pequeñas parcelas experimentales para generar alternativas de producción diverisificada, que brindara nuevas oportunidades a los hogares campesinos en comunidades indígenas totonacas y mazatecas, del sureste mexicano. Este proyecto es el resultado del interés compartido por la restauración ecológica productiva, como una herramienta pertinente para incentivar acciones de conservación activa, donde los participantes son co-responsables, asumiendo su papel como actores clave del proceso: a) Las comunidades de productores. El conocimiento agrícola de los productores en cada comunidad y su perspectiva sobre el aprovechamiento sustentable de sus recursos bioculturales, como un medio para el sostenimiento de sus hogares que les permita mantener su integridad familiar, el arraigo a sus raíces identitarias y asegurar que la cosmovisión ancestral sobre su entorno natural, heredada de generación en generación, prevalezca; b) La iniciativa privada. La visión rectora del Plan Cacao Nestlé de México sobre la Creación del Valor Compartido, donde se fomentan relaciones solidarias con los grupos de productores bajo trabajo comunitario de las Escuelas de Campo; con lo que la empresa busca asegurar el abastecimiento de materias primas bajo una visión “GanarGanar”, basada en principios de co-participación; y c) La academia. El 59


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Enrique Hipólito Romero, José Ramos Prado, Carlos Cerdán Cabrera, Jorge Ricañó Rodríguez, Eliezer Cocoletzi Vásquez. Biorediberoamérica, Nodo Mexico

eje vinculador del Centro de EcoAlfabetización y Diálogo de Saberes de la Universidad Veracruzana, a través del Cuerpo Académico Manejo y Conservación de Recursos Bioculturales; cuyo interés está fundado en la Investigación-Acción-Participativa, que busca la generación del conocimiento a través de la participación activa de los actores clave que se convierten en sujetos de la investigación proceso de intervención sobre el rescate biocultural. Palabras claves: Agroforestería, sostenibilidad y medios de vida. Descripción de la experiencia El proyecto comenzó formalmente a mediados de 2012, realizando una serie de visitas a las tres comunidades en estudio: Cerro Camarón, en el estado de Oaxaca, y Nuevo Ojital Rancho el Papayal en el estado Veracruz, México; donde se explicó a un grupo de representantes comunitarios de la región, sobre la importancia de cada una de las zonas de estudio para el manejo y la conservación de los recursos bioculturales, en este caso cacao y vainilla, los objetivos del proyecto y las expectativas a futuro. Por su parte, los productores, comentaron su experiencia con el cultivo de cacao, la problemática del mismo en la zona y la forma en que ellos han buscado alternativas para mantener sus actividades agrícolas. Posteriormente se realizaron talleres de sensibilización, buscando motivar nuevamente al desarrollo de actividades agrícolas en torno a la vainilla, cultivo que prácticamente ha sido abandonado en las regiones de interés, planteando la oportunidad del establecimiento de sistemas de producción diversificada que puedan generar otros beneficios económicos y ambientales. En una exploración previa, se pudo constatar que aunque no existía presencia del cultivo intensivo de cacao en estos sitios, se han encontrado varios ejemplares que son mantenidos como especie ornamental en los traspatios; lo que abrió el interés entre los productores para rescatar las actividades en torno a este cultivo. Durante la visita se constató, además de la presencia de plantas de cacao en traspatio, que las condiciones ambientales eran propicias para el desarrollo del cultivo en forma intensiva. Finalmente se realizaron recorridos por cada uno de los predios, a fin de realizar un diagnóstico rápido de las condiciones ambientales, buscando el mejor sitio para el establecimiento de las plantas. Durante estos recorridos, se identificaron los sitios específicos para la ubicación de los experimentos, la orientación de la parcela y las actividades necesarias para acondicionar el espacio y la sombra requeridos por las plantas de cacao.

60


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Enrique Hipólito Romero, José Ramos Prado, Carlos Cerdán Cabrera, Jorge Ricañó Rodríguez, Eliezer Cocoletzi Vásquez. Biorediberoamérica, Nodo Mexico

La primer parcela se ubica en las coordenadas geográficas 18º 09’ 10” Latitud Norte (N) y 096º 34’ 47” de Longitud Oeste (O), a una altitud de 320 metros sobre el nivel del mar (msnm). La segunda parcela se estableció en las coordenadas geográficas 20º 28’ 17” N y 097º 23’ 32” O, a una altitud de 210 msnm. Mientras que la tercer parcela se sembró en las coordenadas 20º 03’ 13.65” N y 96º 44’ 00.64” a una altitud de 113 msnm. Con base en la información recopilada en campo, la superficie determinada, la densidad de siembra, la diversidad de variedades a experimentar y los tipos de tratamientos a implementar los investigadores responsables desarrollaron una propuesta de diseño experimental en bloques. Las dos parcelas de manejo comunitario (Cerro Camarón, Oax. y Nuevo Ojital, Ver.), cuentan con una superficie de 5,000 m2 (0.50 ha); mientras que la parcela de manejo privado (Rancho El Papayal, Ver.), presenta una superficie total de 1,000 m2 (1.00 ha). El esquema general de las tres parcelas consideró la siembra de las plantas de cacao a una distancia de 3.00 x 3.00 m, en una distribución de “tres bolillo”. Una vez establecido el cultivo de cacao, se dio seguimiento al sistema agroforestal, evaluando el comportamiento fenológico de las plantas durante un primer periodo de cuatro años, con el objetivo de generar alternativas de producción diverisificada, que brindara nuevas oportunidades a los hogares campesinos en comunidades indígenas totonacas y mazatecas, determinando la adaptabilidad ecológica de los cultivos (cacao & vainilla) al agroecosistema existsneta en cada sitio y de la actividad propia del cultivo y aprovechamiento a los medios de vida de los productores en cada sitio. Resultados y Análisis Ante el evidente grado de deterioro ambiental, pobreza y marginalidad que caracteriza al sector rural de nuestro país, es urgente el desarrollo de actividades coherentes al manejo y a la conservación de los recursos bioculturales, bajo el enfoque en el fortalecimiento de los medios de vida de los hogares. Este tipo de sistemas diversificados muestra que al utilizar especies de un alto valor ecológico, económico y cultural; cuya interacción además de satisfacer económicamente las necesidades de los productores, permite mantener la seguridad alimentaria de la comunidad. Bajo este esquema integrador se planifica la producción estratificada con especies de interés maderable, especies de consumo directo,

61


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Enrique Hipólito Romero, José Ramos Prado, Carlos Cerdán Cabrera, Jorge Ricañó Rodríguez, Eliezer Cocoletzi Vásquez. Biorediberoamérica, Nodo Mexico

ornamentales y/o medicinales de uso tradicional y además, con especies de alta demanda en el mercado. De tal forma que los ingresos se distribuyen a lo largo del año, en función de los ciclos productivos de cada especie; el trabajo es más redituable pues las actividades de limpieza y mantenimiento de la parcela, atienden a varios cultivos al mismo tiempo; y se fomenta la cohesión familiar al requerir de todos los miembros del hogar para hacer diversas funciones (cultivo, procesamiento, empaque, venta, etc.)

Figura 1 Estructura general de las parcelas bioculturales, beneficios y servicios potenciales. De esta forma a lo largo de la duración del Proyecto hemos podido observar que la composición biocultural particular de los sistemas agroforestales de las comunidades de Cerro Camarón, Nuevo Ojital y Rancho el Papayal, está compuesta principalmente por maíz, mandarina, naranja, noni, plátano, papaya, tepejilote, tomate, vainilla, cacao y cedro siendo estas especies usadas principalmente para el autoconsumo, ventas o ambas.

62


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Enrique Hipólito Romero, José Ramos Prado, Carlos Cerdán Cabrera, Jorge Ricañó Rodríguez, Eliezer Cocoletzi Vásquez. Biorediberoamérica, Nodo Mexico

De esta forma, el manejo de los sistemas agroforestales ha permitido la conservación de los recursos bioculturales y evitado la migración en ciertos hogares de las comunidades estudiadas; siendo las actividades del campo las más representativas y llevadas a cabo dentro de la misma comunidades. Los principales cultivos de las comunidades estudiadas que se muestran vulnerables ante el aumento de la temperatura y a las afectaciones, tanto por las lluvias como por sequias, son: el plátano, la vainilla y el café. Los capitales que se muestran como una fortaleza para las comunidades son los naturales y humano. Por el lado del capital natural, el aprovechamiento y conservación de los recursos bioculturales, a través de los sistemas agroforestales, genera oportunidades que se pueden ver reflejadas en el capital financiero. Los capitales social, físico y financiero muestran una sería debilidad, la cual puede ser expuesta ante ciertos factores de vulnerabilidad. En términos financieros el sistema agroforestal estudiado muestra una inversión inicial de $119,000.00 integrada únicamente por el terreno y las plantas de cacao. Los únicos costos que genera son el pago de jornaleros y especies que no se producen, permitiendo tener ingresos mayormente generados por la venta del tepejilote. La diversificación de los productos como es el caso del plátano, café y cedro en el sistema agroforestal estudiado, permite diversificar los ingresos; lo cual genera una rentabilidad a mediano plazo (cinco años) y solventar las variaciones de los precios de los otros productos. Esto nos permite concluir que el cultivo diversificado de cacao & vainilla bajo un esquema agroforestal es una actividad ecológicamente viable, económicamente rentable, y compatible con los medios de vida de los hogares productores, en las tres parcelas en estudio; al no haber comprometido la base de sus propios recursos bioculturales.

contactos ehipolito@uv.mx

63


Fotografia: Rafael Vidal


Construyendo redes para la resignificación del maíz de las Tierras Bajas de Sudamérica.

Rafael Vidal 1 Natalia Carolina de Almeida Silva 1 Flaviane Malaquias Costa 2 Elizabeth Ann Veasey 2 1

Fitotecnia, Departamento de Biología Vegetal, Facultad de Agronomía, Universidad de la República. Uruguay rvidal@fagro.ed.uy almeida.rgv@gmail.com 2

Departamento de Genética, ESALQ, Universidade de São Paulo, Brasil flavianemcosta@hotmail.com eaveasey@usp.br

RESUMEN El maíz (Zea mays L. ssp. mays) es un cultivo con una amplia variabilidad y adaptación, distribuido en diferentes ambientes y contextos culturales. Su variabilidad genética es una de las mayores entre las especies cultivadas, con aproximadamente 400 razas identificadas en el mundo. La región oriental de América del Sur es considerada un centro secundario de diversidad de la especie y se la denomina Tierras Bajas por comprender altitudes inferiores a los 1.500 metros sobre el nivel del mar. Los últimos relevamientos de la diversidad de variedades criollas de maíz llevan más de cuatro décadas de realizados. El presente trabajo se propuso identificar la diversidad de variedades criollas de maíz conservadas in situ – en finca en Brasil y Uruguay. Para dar sustentación a la investigación se construyó una red colaborativa de investigación lo que permitió entrevistar a 134 agricultoras y agricultores e identificar 430 variedades criollas, demostrando que aún existe una importante diversidad de variedades criollas de maíz conservadas in situ- en finca en ambos países. Palabras clave: agrobiodiversidad, conservación in situ – en finca, variedades criollas. 65


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Rafael Vidal, Natalia Carolina de Almeida Silva, Flaviane Malaquias Costa, Elizabeth Ann Veasey. Biorediberoamérica, Nodo Uruguay

INTRODUCCION Las variedades criollas existen desde los orígenes de las agriculturas, son el resultado de la selección de los agricultores, de sus formas de producción y del ambiente en que son cultivadas. De acuerdo con Camacho Villa et al. (2005), se caracterizan por ser poblaciones dinámicas, genéticamente diversas, localmente adaptadas, asociadas a sistemas de producción tradicionales y reconocidas por quienes las conservan. Las variedades criollas son creadas, conservadas y evolucionan en las manos de los agricultores tradicionales que las cultivan. La conservación de variedades criollas por parte de los agricultores en el mismo ambiente en que son cultivadas se denomina in situ, en finca, en oposición a la conservación ex situ en bancos de germoplasma fuera del ambiente de cultivo. Esto quiere decir que las variedades criollas tienen un valor intrínseco y un valor de uso. El primero, se refiere al valor como un elemento cultural e identitario de los agricultores. El segundo, es el valor como alimento, producto comercial, forraje y otros usos en el predio, y para el mejoramiento como fuente de alelos de resistencia a enfermedades y de tolerancia a factores abióticos; estas características son particularmente relevantes en coyunturas de cambio climático. El maíz (Zea mays L. ssp. mays) es un cultivo con una amplia variabilidad y adaptación, distribuido en diferentes ambientes y contextos culturales. Los primeros estudios sobre la diversidad de variedades criollas del maíz fueron desarrollados por Sturtevant (1899), quien las clasificó en seis grupos según los tipos de grano (dentado, duro, pisingallo o palomero, dulce, harinoso y tunicado). Posteriormente, Kulesov (1929) propuso la clasificación en razas del maíz, concepto revisado por Anderson y Cutler (1942) y definido como “un grupo de poblaciones emparentadas, con suficientes características en común para permitir su reconocimiento como grupo”. Estos autores consideraron que el análisis de los elementos raciales debería ser un análisis grupal y no de individuos separados de las características morfológicas de la espiga y del grano. Posteriormente, Brieger et al. (1958) ampliaron el concepto y definieron a las razas como “un conjunto de poblaciones en panmixia que ocupa un área geográfica definida”’. Este concepto está, por lo tanto, basado en el agrupamiento de poblaciones que comparten características morfológicas, su origen geográfico y cultural.

66


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Rafael Vidal, Natalia Carolina de Almeida Silva, Flaviane Malaquias Costa, Elizabeth Ann Veasey. Biorediberoamérica, Nodo Uruguay

Las primeras caracterizaciones de razas que incluyeron maíces de Uruguay fueron realizadas por Brieger et al. (1958) en el relevamiento de los maíces de Brasil y Sudamérica Oriental, dejando en evidencia la importante diversidad existente. En el territorio identificado como Tierras Bajas de Sudamérica (Brasil, Uruguay, Paraguay, parte de Argentina y parte Bolivia, Guayanas y Surinam), Paterniani y Goodman (1977) describieron 19 razas y 23 subrazas de maíz. Esta clasificación fue realizada mediante evaluaciones de las características de planta, espiga y granos. En 1979, De Maria et al. hicieron la caracterización de la Colección Nacional de Maíz de Uruguay y identificaron 10 razas y una subraza presentes en Uruguay. Estos trabajos permitieron valorizar los recursos genéticos de maíz de esta región de América, postulada como un centro secundario de diversidad de la especie. Luego de cuatro décadas desde la última clasificación de razas del territorio de la Tierras Bajas de Sudamérica no se han propuesto nuevos estudios que actualicen el conocimiento sobre su diversidad, su variación a nivel de regiones ecológicas, microrregiones, y grupos raciales. Está carencia es explicada en parte porque se consideraba que una amplia área geográfica ya fue contemplada y que no existen cambios en las variedades criollas de maíz conservadas in situ, en finca. Sobre este aspecto, los estudios posteriores a la primera clasificación de Wellhausen et al. (1951) para las razas de maíz de México, permitieron ampliar la cantidad de razas de 25 para 59 (Perales y Golicher, 2014). En el sur de Brasil (Silva et al. 2017; Costa et al. 2017) identificaron 1.513 variedades conservadas por agricultores familiares locales y al menos tres nuevas razas de maíz pisingallo o palomero en un territorio de 500 km2, en el que colectas anteriores habían registrado apenas una veintena de variedades (Silva et al. 2017). Colectas recientes realizadas al norte de Uruguay, en Tacuarembó (Porta et al. 2013), indicaran la existencia de variedades no colectadas anteriormente y pérdida de otras. Esto demuestra la necesidad de trabajos de valorización, prospección periódicos y caracterizaciones raciales realizados en microrregiones que permiten una valorización de las variedades criollas de maíz. En ese sentido se presentan resultados de los trabajos desarrollados en el ámbito del Proyecto “Razas de Maíz de las Tierras Bajas de Sudamérica”. Este proyecto está siendo desarrollado por el Grupo Interdisciplinar de Estudios en Agrobiodiversidad (InterABio) de la Universidad de São Paulo (Brasil) y la Universidad de la República (Uruguay).

67


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Rafael Vidal, Natalia Carolina de Almeida Silva, Flaviane Malaquias Costa, Elizabeth Ann Veasey. Biorediberoamérica, Nodo Uruguay

Diversidad y distribución de variedades criollas de maíz de brasil y uruguay METODOLOGÍA Para el desarrollo del trabajo, fue construida una Red de Investigación Colaborativa la que involucra Universidades, organizaciones que actúan en la agricultura familiar, instituciones de investigación y extensión, lo que posibilitó la ejecución de un Proyecto de alcance binacional y un desarrollo en nueve regiones, seis de Brasil y tres de Uruguay (Figura 1). Las Redes de Investigación buscan impulsar la creación de conocimientos y el proceso de innovación resultado del intercambio de informaciones y sobre todo de la combinación de competencias de grupos que unan sus esfuerzos en la búsqueda de metas comunes, pudiendo o no compartir instalaciones (CNPq, 2019). La Red de Investigación Colaborativa tiene el objetivo de permitir la ejecución del Proyecto de forma compartida, buscando la interacción entre personas e instituciones para la construcción de las acciones, metodologías y actividades. En cada una de las regiones se desarrollaron cuatro actividades: i) Reuniones para presentación de Proyecto; ii) Talleres con agricultores sobre “Razas de maíz para la Conservación de Variedades Criollas”; iii) Entrevistas a los agricultores; iv) Mapeo y colecta de muestras de variedades criollas; v) Caracterización fenotípica de acuerdo con 19 descriptores, siendo 12 de espiga y 7 de grano. Durante los Talleres, en el momento de la recepción de los participantes, las espigas fueron recibidas por el equipo local, el cual realizó la identificación del germoplasma, incluyendo en la etiqueta informaciones generales como el nombre del agricultor, comunidad, municipio, el nombre de la variedad, tiempo de la conservación, origen y usos. Cuando era posible, la entrevista ya era realizada en esa misma ocasión, cuando no, al final del Taller. Para viabilizar la realización de las entrevistas con todos los agricultores un equipo fue entrenado previamente, con el objetivo de dar más agilidad al proceso. Los agricultores que no pudieron participar en el Taller recibieron al equipo en sus casas (visitas in loco), antes o después de la fecha de realización del encuentro. Fueron evaluadas de una a cinco espigas por variedad y 10 granos por cada espiga caracterizada de cada variedad.

68


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Rafael Vidal, Natalia Carolina de Almeida Silva, Flaviane Malaquias Costa, Elizabeth Ann Veasey. Biorediberoamérica, Nodo Uruguay

Figura 1. Mapa Institucional de la Red de Investigación Colaborativa del Proyecto Razas de Maíz de las Tierras Bajas de Sudamérica. Fuente: archivo InterABio.

RESULTADOS

Talleres con agricultores “razas de maíz para la conservación de variedades criollas” La primera etapa del Proyecto consistió en un espacio de formación sobre las razas de maíz, el cual fue diseñado para agricultores y agricultoras, técnicos, investigadores, profesores y estudiantes. Esta capacitación se realizó bajo el formato de talleres didácticos, en los que se presentó el proyecto, la historia del maíz (origen, domesticación, dispersión y diversificación), los antecedentes de los estudios de razas de maíz en Uruguay y Brasil, y los principales desafíos para la conservación de variedades criollas. 69


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Rafael Vidal, Natalia Carolina de Almeida Silva, Flaviane Malaquias Costa, Elizabeth Ann Veasey. Biorediberoamérica, Nodo Uruguay

Construyendo El Concepto De Razas De Maíz Para nivelar el conocimiento de los participantes involucrados en el proyecto sobre el concepto de raza de maíz fue desarrollada la metodología participativa denominada “Ronda de las Espigas”, aplicada durante los Talleres. La dinámica fue realizada por medio de una colección didáctica de espigas, con una muestra representativa de la variabilidad fenotípica existente en las razas de maíz, como, por ejemplo, diversidad de color de grano, arreglo de las hileras de granos, formas de las espigas, forma de los granos, color del marlo, etc. Las diferentes espigas eran mezcladas por los investigadores y los participantes eran invitados a agruparlas de acuerdo a sus criterios de preferencias, en general de acuerdo a la similitud de las espigas. El diálogo fue establecido y los participantes describían las diferencias y similitudes entre los grupos formados. Luego los participantes eran invitados a reflexionar y responder colectivamente las siguientes preguntas generadoras: i) ¿Cuantos grupos de espigas se formaron? ii) ¿Qué características eligieron para separar los grupos de espigas? iii) ¿Existe algún uso asociado a los grupos de espigas formados? iv) ¿Algunos de esos grupos de espigas parecen con sus variedades criollas? Las respuestas eran registradas de forma que todos pudieran verlas. Mediante este ejercicio, los participantes fueron preguntados acerca de lo que ellos entendían por “raza de maíz”. Fueron realizadas ocho Talleres (Figura 2), cinco em Brasil (Rio Grande do Sul, Minas Gerais, Acre, Paraíba y Mato Grosso do Sul), y tres en Uruguay (Canelones, Rocha y Tacuarembó), llegando de forma directa a 364 personas capacitadas. Adicionalmente se realizaron otros dos talleres: uno em la Universidad Federal do Acre para estudiantes del curso de agronomía y, a otro en la Universidad de la República para el grupo del Programa Huertas en Centros Educativos. El número de grupos de espigas que los participantes separaron varió de seis a 22, conforme la percepción de los agricultores de cada localidad. Los criterios utilizados también variaran de acuerdo con el público. En total fueron citados nueve criterios: tipo de grano, tamaño de grano, forma de la espiga, tamaño de la espiga, color de grano, color del marlo, diámetro del marlo, organización de las hileras de granos y número de hileras.

70


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Rafael Vidal, Natalia Carolina de Almeida Silva, Flaviane Malaquias Costa, Elizabeth Ann Veasey. Biorediberoamérica, Nodo Uruguay

Figura 2. Etapas del Proyecto Razas de Maíz de las Tierras Bajas de Sudamérica: a) reunión de presentación del Proyecto con organizaciones de semillas criollas, Rio Grande do Sul, Brasil; b) dinámica de “Ronda de las Espigas” durante el taller con pueblos indígenas, Rio Branco, Acre, Brasil; c) Entrevistas a agricultoras durante el Encuentro de la Red de Semillas Criollas en Rocha, Uruguay; d) Colecta de espigas de agricultores en Paraíba, Brasil.

Las características utilizadas por los agricultores para formar los grupos de espigas están contempladas en los descriptores científicos de maíz considerados claves para el estudio de razas. Destacamos que las características color de granos, tipo de grano, tamaño do grano y tamaño de la espiga fueron comunes a todas las localidades en que se realizaron los talleres. En relación con los usos asociados a los grupos de espigas, los agricultores citaron aquellos relacionados a: i) platos típicos y al uso directo para la alimentación humana (broa, pan de maíz, farinha de beiju, angu, polenta, maíz dulce, harina de maíz, pororó, mazamorra, canjiquinha, maíz verde (choclo), harina de maíz con maní, fubá, cuscuz, munguzá); ii) alimentación animal: (marlos o tusas para animales, silos, ración, granos para gallinas); iii) uso medicinal (marlos o tusas para hacer infusiones diuréticas, barbas de maíz para remedio, remedio de maíz encapado para dolor de estómago y para el hígado); iv) otros usos, como ceniza de marlos o tusas para hacer jabón, artesanías, ofrendas, marlos como brasa para plancha de ropa.

71


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Rafael Vidal, Natalia Carolina de Almeida Silva, Flaviane Malaquias Costa, Elizabeth Ann Veasey. Biorediberoamérica, Nodo Uruguay

Concluida la dinámica “Ronda de las Espigas” se realizó una nueva actividad en grupo con los participantes, para el relevamiento de las Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas (FODA) en relación con la conservación de la agrobiodiversidad, sobre todo de las variedades criollas de maíz. Los participantes fueron divididos en grupos menores (la cantidad de subgrupos varió de acuerdo con el número de participantes, los cuales fueron divididos por municipio, comunidad y / u otro criterio), en que cada uno discutió los cuatro componentes de la matriz FODA. A continuación, los grupos fueron invitados a compartir las principales discusiones. Los investigadores hicieron la validación de las informaciones con los participantes resaltando algunos puntos de acuerdo con el contexto local, y cuando hubo interés del grupo, se establecieron las orientaciones. En los estados de Paraíba y de Acre, la matriz FODA fue sustituida por otras actividades. En Paraíba los participantes optaron por hacer el relevamiento de las variedades que se tenían, variedades que se conocían y de las variedades que se perdieron. En el Acre, la actividad propuesta fue el relato de las etnias indígenas sobre el origen, mitos, usos y cantos del maíz. La principal lección de la Ronda de las Espigas fue que el estímulo a la observación de las características de los granos y de las espigas, siendo que los criterios utilizados por los participantes para la formación de los grupos fueron coincidentes con los descriptores utilizados en el Proyecto para la clasificación de las razas de maíz. De esta forma, el conocimiento colectivo fue nivelado a partir de un saber preexistente, y el concepto de razas, así como los criterios utilizados para su clasificación, fueron comprendidos por los participantes de forma práctica e interactiva. Además, permitió el rescate de las historias sobre las variedades criollas y la importancia de la conservación de todas las razas para el mantenimiento de la diversidad del maíz.

Mapeo de la diversidad de maíz En total fueron entrevistados 134 agricultores y agricultoras, se identificaron 438 variedades criollas de maíz y se recolectaron 305 variedades criollas. Para cada variable (pregunta de la entrevista) fue realizado un análisis exploratorio e inferencia de los datos por medio de estadística descriptiva, conforme al número de observaciones que presentaron datos completos. Los resultados se resumen en el Cuadro 1. El tiempo mínimo, medio y máximo de conservación de uno, 15 y 100 años, respectivamente. De los 161 nombres locales que los agricultores 72


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Rafael Vidal, Natalia Carolina de Almeida Silva, Flaviane Malaquias Costa, Elizabeth Ann Veasey. Biorediberoamérica, Nodo Uruguay

atribuyen a sus variedades criollas, sólo 21 son comunes a dos o más regiones, siendo los demás endémicos de cada localidad. Para el tipo y color de grano la riqueza fue de ocho y 11, respectivamente, siendo que la riqueza de tipo de grano fue superior al reportado en los estudios de la década de 1970 (cuatro para Brasil y seis para Uruguay). De los 14 orígenes de las variedades identificadas, las cuatro más frecuentes fueron Herencia Familiar (21%), Vecino (16%), Ferias de Intercambio de Semillas (11%) y donaciones de amigos y / o parientes (11%). Se identificaron 34 categorías de usos culinarios (con hasta cinco usos por variedad), 22 categorías de valores de uso agronómico y un total de 16 motivos que contribuyen a la conservación de las variedades criollas. Cuadro 1. Diagnóstico de variedades criollas de maíz de las Tierras Bajas de Sudamérica.

CONCLUSIONES • Respecto a los procesos de conservación in situ- en finca de variedades criollas se destacan la riqueza de características, la importante proporción de nombres endémicos, diversidad de usos y tiempo de conservación como indicadores del mantenimiento de variedades de maíz tanto por su diversidad cuanto por la importancia que tiene para las familias de agricultores que las conservan. • Las informaciones generadas permitirán auxiliar la identificación de microcentros de diversidad en ambos países como uno de los posibles mecanismos de protección de variedades criollas y, consecuentemente, en la identificación de áreas prioritarias para conservación in situ-en finca.

73


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Rafael Vidal, Natalia Carolina de Almeida Silva, Flaviane Malaquias Costa, Elizabeth Ann Veasey. Biorediberoamérica, Nodo Uruguay

AGRADECIMIENTOS Estas investigaciones han sido posibles gracias al apoyo de las agencias CNPq y FAPESP de Brasil y CSIC de Uruguay. Todos los resultados del presente artículo fueron presentados en el congreso de SOCLA 2018, Guayaquil, Ecuador y el V Congreso Brasileiro de Recursos Genéticos 2018, Fortaleza, Brasil.

74


referencias y contactos

Anderson E., Cutler HC. (1942). Races of Zea mays: I. Their recognition and Classification. Missouri Botanical Garden, 10. Brieger FG, Gurgel JTA, Paterniani E, Blumenschein A, Alleoni MR. (1958). Races of maize in Brazil and other eastern south american countries. pub. 953. nas-nrc, Washington, d.c. Camacho Villa TC., Maxted N, Scholten M., Ford-Lloyd B. (2005). Defining and identifying crop landraces. Plant Genetic Resources, 3(3), 373-384. CNPq. 2019. Glossario Lattes [http://lattes.cnpq.br/web/dgp/glossario] consultado en 4 de abril de 2019. Barón, M; Clavijo, N y Combariza, J. (2010). Recetario. Tubérculos Andinos de Turmequé y Ventaquemada, Departamento de Boyacá, Colombia. Javegraf, Bogotá . Pontificia Universidad Javeriana. Casas, A y Parra F. (2007). Agrobiodiversidad, parientes silvestres y cultura, LEISA, Revista de Agroecología, 23 (2) 1-8. Clavijo, N; Prins, C; Sanchez, V; Soto, G y Staver, C (2006). Calendarización, Uso Racional, Sustitución y Rediseño. Una Comparación entre horticultores orgánicos y convencionales de Costa Rica. Revista Manejo Integrado de Plagas y Agroecología, 78 (2) 17-27. Espinosa, P; Vaca, R; Abad, J y Crissman, C. (1997). Raíces y Tubérculos Andinos Cultivos Marginados en el Ecuador - Situación Actual y Limitaciones para la Producción. Quito. Ediciones Abya- Yala. Espinosa, P. (1997). Volvamos a Nuestras Raíces-Recetario de las Raíces y Tubérculos Andinos. Ediciones Abya Yala. Quito, Ecuador. 52 p. Parra, M. (2001). Colecta, conservación y análisis de la diversidad genética de ulluco (Ullucus tuberosus Caldas) de Colombia. Tesis de Maestría. Facultad de Agronomía- Universidad Nacional de Colombia. Bogotá. 233 p. Tapia, E y De la Torre, (1997). La Mujer campesina y las semillas andinas: Género y el Manejo de los Recursos Genéticos. IPGRI- FAO, Disponible en http://www.fao. org/DOCREP/x0227s/x0227s00.htm Tapia, E y Rosas, A.(1998). Agrobiodiversidad en la Encañada. Sistematización de las experiencias de conservación in situ de los recursos fitogenéticos, Perú. CONDESAN, ASPADERUC, CIP y GTZ, Cajamarca, 26pp. Tapia, E y A. Fries. (2007). Guía de campo de los cultivos andinos. Lima.FAO y ANPE.Villarroel, T; Salazar, D; Delgado, R (2001). La biodiversidad de los tubérculos andinos: Importancia en la vida de las familias de una comunidad altoandina de cochabamba, en Bilbao, J (Eds) Memorias del 1er Seminario Taller Cosmovisión indígena y biodiversidad en América Latina (pp. 295-308) Cochabamba, AGRUCO - COMPAS.


Ingeniero Agrónomo de la Universidad de Caldas (Manizales); magister en Agroecología y Desarrollo Rural Sostenible de la Universidad Internacional de Andalucía (España) y Doctor en Agroecología de la Universidad Nacional de Colombia. Su experiencia profesional incluye trabajo con comunidades indígenas en el sur del Tolima, la dirección por 18 años de la Escuela Granja Agroecológica SOS en Armero Guayabal – Tolima, reconocido como uno de los proyectos relevantes en educación agroecológica en Colombia. Inició su ejercicio de docencia universitaria en la universidad del Tolima (Ibagué). Ha escrito libros y artículos en el campo de la Agroecología y la Agricultura Familiar destacando el papel potencial de la agroecología para fortalecer distintas formas de agriculturas tradicionales. Actualmente es profesor e investigador del departamento de Desarrollo Rural y Agroalimentario de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia sede Bogotá; adicionalmente es miembro de la Red Nacional de Agricultura Familiar donde lidera el eje de investigaciones.

Fotografia: Margarita Bonicatto


Investigación en agrobiodiversidad: la experiencia del grupo de Agroecología de la Facultad de Neidy Clavijo Ponce Ciencias Agrarias y Forestales de la Universidad Nacional de La Plata, Argentina. Santiago Sarandón Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales, Universidad Nacional de La Plata. Argentina sjsarandon@gmail.com

INTRODUCCIÓN: ¿Por qué es necesario investigar en biodiversidad en las ciencias agrarias? La conciencia creciente acerca de las consecuencias ambientales y sociales del sistema moderno de producción de alimentos, plantea la necesidad de diseñar y manejar ecosistemas alimentarios sustentables que sean económicamente viables, ecológicamente adecuados y social y culturalmente aceptables. Esto requiere modificar una de las características más distintivas y negativas del modelo productivista dominante: su alta (y creciente) dependencia de agroquímicos, fundamentalmente pesticidas. Esto genera dos graves problemas: a) altos costos de producción y elevada dependencia (y, por lo tanto, riesgo), ya que la mayoría de los insumos tienen patentes internacionales, y no son producidos en los países de nuestra región, y b) la toxicidad de los pesticidas para los seres humanos y/o para otras especies y su capacidad de trasladarse largas distancias de su lugar de aplicación. Ante la evidencia creciente del problema, durante mucho tiempo negado o minimizado, se ha comenzado a promover el uso “racional” de estos pesticidas, en lo que se denomina buenas prácticas agrícolas (BPA). Estas asumen que estos productos son peligrosos, pero consideran que es necesario (incluso imprescindible) seguir usándolos pero de manera “racional”. Para ello se proponen medidas como: respetar el período de carencia (tiempo entre aplicación y cosecha del producto), usar equipos apropiados (máscaras, ropa adecuada, protecciones), no aplicar con viento y mantener distancias prudentes de los centros poblados. Aunque 77


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

tomar estos recaudos es, por supuesto, mejor que no hacerlo, no discute, no va al fondo del problema. De alguna manera, intenta buscar soluciones dentro del mismo paradigma que originó los problemas. Esto es lo que se ha venido haciendo desde hace años, con resultados desalentadores. Esto es un callejón sin salida. Hay que buscar soluciones novedosas al viejo problema. Surge, entonces, el convencimiento de que este paradigma predominante: simplista, reduccionista, productivista y cortoplacista, que no tiene en cuenta los costos ambientales y sociales debe ser reemplazado por otro. Y aquí es donde surge cada vez con más fuerza la Agroecología como ese otro paradigma, como “un campo de conocimientos, un enfoque, una disciplina científica que reúne, sintetiza y aplica conocimientos de la agronomía, la ecología, la sociología, la etnobotánica, y otras ciencias afines, con una óptica holística y sistémica y un fuerte componente ético, para generar conocimientos y validar y aplicar estrategias adecuadas para diseñar, manejar y evaluar agroecosistemas sustentables.” (Sarandón, 2002).

Las presencia de plagas; un síntoma de baja diversidad y no la raíz del problema Desde el enfoque de la Agroecología, la alta dependencia de pesticidas de los sistemas modernos de producción requiere ir a la raíz del problema y no a disminuir los síntomas. Debemos pasar de la típica pregunta: ¿qué le pongo? a ¿por qué aparecen las plagas? Desde esta mirada y con el aporte de otras disciplinas como la ecología de poblaciones, la aparición de plagas aparece como un síntoma claro de un problema mayor. Se debe a un diseño (la distribución de componentes en el espacio y el tiempo) de baja diversidad (pocas especies), que debilita o anula los mecanismos naturales que mantienen bajo control las poblaciones silvestres en los agroecosistemas. Los agroecosistemas modernos, poco diversificados, proporcionan, por un lado, a) una alta concentración de alimento para los fitófagos (plagas), de alta calidad nutricional, en forma instantánea, mecanismo conocido como “bottom up” (de abajo para arriba). Y, por el otro, y simultáneamente, b) disminuyen la posibilidad de control o regulación de estas poblaciones por sus enemigos naturales al eliminar lugares de refugio y/o alimentación alternativa (mecanismo “top down”, de arriba para abajo). Las especies benéficas no tienen lugar en los actuales agroecosistemas.

78


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

La agrobiodiversidad; un elemento clave en el manejo sustentable de los agroecosistemas. Sin embargo, es posible fortalecer o reconstruir estos mecanismos debilitados a fin de evitar o disminuir la aparición de plagas. Esta sería la solución de fondo, lo que resolvería el problema de raíz. Y aquí surge que la llave para lograr esto, el instrumento que podemos usar, gratuito y accesible para todos los agricultores/as y técnicos/as, es la biodiversidad funcional presente en los agroecosistemas. Pero esto no es sencillo; un concepto que ha estado durante muchos años en el campo disciplinar de los biólogos, ecólogos, naturalistas, parece ser el mecanismo, el instrumento agronómico que soluciona gran parte de los problemas. Esto abre grandes expectativas, pero a su vez genera otros interrogantes. La agronomía en general, no se ha ocupado de este tema. Nuestro conocimiento sobre qué es la biodiversidad, qué es la agrobiodiversidad funcional, cómo promoverla, cómo medirla, cuál es su valor, cómo la perciben los y las agricultoras, cómo se genera y transmite ese conocimiento, y otras muchas cuestiones es bastante incipiente y, tal vez, insuficiente aun para poder atender la demanda de muchos agrónomos que están en el medio y de mucho/as agricultores/as que quieren utilizarla. Es necesario, entonces, generar información que permita construir un cuerpo de conocimientos útiles, basado en principios generales, pero localmente adaptables, que permitan diseñar y manejar agroecosistemas menos dependientes de insumos. En la Universidad Nacional de La Plata, Argentina, existe desde el año 2000, la Cátedra de Agroecología en la Facultad de Cs. Agrarias y Forestales, y actualmente el Laboratorio de Investigación y Reflexión en Agroecología (LIRA), que se ha propuesto abordar este tema. El objetivo de este artículo es presentar los principales interrogantes que nos planteamos en el área de la biodiversidad en agroecosistemas, cuáles estamos abordando, los principales resultados obtenidos y analizar los desafíos, amenazas y oportunidades que esta Investigación representa.

Qué y cómo investigar sobre biodiversidad en los agroecosistemas La idea de Biodiversidad en los agroecosistemas ha evolucionado desde una percepción puramente biológica, a un concepto complejo, multidimensional que abarca aspectos ecológicos, pero incluye 79


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

dimensiones económicas, culturales y sociales, debido a que son los seres humanos quienes manejan y definen la biodiversidad presente en sus fincas. Por lo tanto, un concepto tan complejo no puede ser abordado exitosamente desde una visión simplista, reduccionista de la ciencia, por una sola disciplina. La Agroecología constituye entonces el marco adecuado para abordar esta complejidad. Desde su visión de la complejidad, su enfoque holístico y sistémico y su visión pluriepistemológica a través de equipos interdisciplinarios, permite afrontar algunos interrogantes que surgen acerca de la biodiversidad en los agroecosistemas. Investigar en el campo de la biodiversidad en los agroecosistemas (agrobiodiversidad) dispara varias preguntas. Algunas son propias del proceso de investigar en sí mismo. Entre ellas pueden mencionarse algunas como ¿hay que investigar en biodiversidad?, ¿cómo investigar?, ¿presenta este tipo de investigación alguna característica especial a tener en cuenta o simplemente es lo mismo que la investigación que hemos llevado hasta ahora, pero con otros temas?, ¿cuáles son los principales interrogantes en este campo? En Instituciones con recursos (humanos y materiales) limitados es importante también reflexionar sobre qué investigar y otra igualmente importante es dónde (en qué escenarios) debemos investigar sobre agrobiodiversidad.

¿Es necesario investigar en agrobiodiversidad? Una de las primeras cuestiones que surgen es si es necesario investigar, generar conocimiento en este campo, o este ya existe y lo único que hay que hacer entonces es “desempolvarlo”, ir a buscarlo a las bibliotecas y ponerlo en práctica. La respuesta es bastante sencilla. Si entendemos que la biodiversidad puede ser un instrumento importante para el diseño y manejo de agroecosistemas sustentables menos dependientes de insumos, entonces aparece claramente que estas no eran (y no son aún) preocupaciones de las instituciones científicas o de investigación en el campo de las ciencias agropecuarias. Por lo tanto, no existe un cuerpo de conocimientos sobre la biodiversidad funcional de los agroecosistemas que pueda servir de base para un manejo sustentable de los agroecosistemas. Es necesario, e imprescindible (y bastante urgente) generar conocimiento y, por lo tanto, investigar en este tema tan importante.

¿Cómo investigar? La búsqueda de más conocimiento sobre el rol funcional de la biodiversidad en los agroecosistemas nos desafía a replantearnos el 80


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

modo de investigar. Ante la gran cantidad de especies, familias, o grupos funcionales y sus interacciones que constituyen la biodiversidad de cualquier agroecosistema, puede existir la tentación de mantenernos dentro del enfoque clásico, donde nos sentimos cómodos y “científicos”. Un ejemplo de esto sería detectar y aislar un grupo de posible interés (por ejemplo, una especie que actúe como enemigo natural, de una importante plaga); estudiar sus características en condiciones controladas de laboratorio, medir su capacidad teórica de parasitar o consumir al hospedante, sus tasas de natalidad, etc. Este enfoque clásico, puede ser adecuado para elegir, criar y distribuir un enemigo natural específico para una plaga específica el que funciona dentro de ciertas características ambientales (y que actúa como un insumo biológico). La idea subyacente es que si logro hacer esto con muchos enemigos naturales podré ir entendiendo el sistema complejo. Aunque no está mal, su enfoque está situado dentro de una idea reduccionista prevaleciente, donde el todo (el agroecosistema) puede ser entendido como la sumatoria de las partes. El problema es que el comportamiento de esta especie en el medio natural, interactuando con muchas otras, en diferentes condiciones ambientales, como ocurre en el campo de los agricultores, no necesariamente funciona de la manera estudiada en condiciones de laboratorio. Además, lo que necesitan los/las agricultores/as es que, bajo diferentes circunstancias y distintas plagas, los mecanismos de control de plagas funcionen siempre. Por lo tanto, las investigaciones en biodiversidad funcional exigen nuevas metodologías, nuevas maneras de plantearse los problemas. Quizás nos enfrentamos a un gran dilema: perder precisión (diseños estadísticos precisos, repeticiones, diseños aleatorizados propios de las estaciones experimentales, prueba de significancia estadística) pero ganar en acercarnos a las condiciones de los sistemas reales. Esto nos enfrenta a otro dilema: ¿dónde hay que hacer la investigación? Y surge cada vez con más claridad que en las investigaciones sobre biodiversidad funcional como instrumento para el manejo más sustentable de los agroecosistemas, el escenario de los propios campos de los/as agricultores/as adquiere una importancia fundamental. Este es el mundo real, acá ocurren los procesos, acá está la complejidad real, la incertidumbre, y acá están los gestores (los/as agricultores/as) de esa biodiversidad. No existen dos fincas iguales, no es posible, entonces, muchas veces, hablar de repeticiones. Esto representa un enorme desafío para todos los investigadores formados en una ciencia analítica fuertemente disciplinar, donde el control de los factores es fundamental, y la significancia estadística es lo que define muchas veces la posibilidad de publicar y “ser” científico. 81


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

¿Qué investigar en biodiversidad? Esta es otra de las preguntas básicas. Teniendo en cuenta que la capacidad de llevar adelante investigaciones está limitada por los recursos humanos con que cuenta el equipo (principalmente), y el tiempo y materiales disponibles, es importante plantearse cuáles son las preguntas que hay que abordar. Y, estrechamente asociado a esto, es importante reflexionar de dónde obtenemos (o debemos obtener) estas preguntas. ¿Cómo hacemos para elegir temas importantes, trascendentes, que constituyan problemas reales? Aquí es donde la relación de los equipos de investigación, de sus instituciones, como la universidad o los Institutos nacionales de Investigación agropecuaria con quienes son los destinatarios de sus conocimientos (principalmente los/ as agricultores/as) adquiere gran importancia. Hay que reconocer que, en general, en las universidades y en las instituciones de investigación las relaciones con los grupos de agricultores/as familiares no han sido una prioridad y, por lo tanto, no siempre están bien desarrolladas. En la decisión de investigar sobre agrobiodiversidad, surge otra preocupación que es la relacionada con cómo generar y mantener un equipo de investigación interdisciplinario en esta temática. Por ejemplo, ¿es posible investigar en estos campos emergentes, complejos, y sobrevivir (y progresar) en los sistemas científicos académicos de nuestras instituciones?, ¿cómo lograr resultados prácticos y aplicables por los agricultores y/o técnicos y publicar en buenas revistas científicas?, ¿cómo pensar a largo plazo y publicar en el corto? Otra duda importante es ¿cómo generar proyectos de investigación que intenten responder a demandas reales y traducirlos en proyectos de tesis doctorales de calidad, que sean capaces de “atravesar” los filtros de los comités académicos de nuestras universidades, muchas veces aún disciplinares y fuertemente impregnados de una mirada científica “dura”? Todos estos interrogantes han surgido en nuestro equipo, que busca generar conocimientos teóricos y prácticos, desde el enfoque pluriepistemológico, de la Agroecología, que permitan la evaluación, el diseño y el manejo de agroecosistemas sustentables, entendiendo por esto que sean ecológicamente adecuados, económicamente viables y socioculturalmente aceptables. La pregunta que nos guía es: ¿Como diseñar y manejar agroecosistemas sustentables, que logren reemplazar insumos (costosos y peligrosos) por procesos ecológicos? Desde un punto de vista más práctico intentamos saber cómo evaluar (cómo darnos cuenta) si existe suficiente biodiversidad funcional en 82


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

un agroecosistema para evitar el uso de pesticidas. Claramente el objetivo de nuestra investigación apunta a poder brindar elementos de diagnóstico, de diseño y manejo para que puedan ser incorporados por profesionales, técnicos y los propios/as agricultores/as. Esto no impide analizar o abordar algunos aspectos teóricos, pero siempre con la idea de su futura utilidad en el sentido mencionado.

Definiendo la biodiversidad agrobiodiversidad

de

los

agroecosistemas

o

La investigación en biodiversidad requiere definir claramente el objeto de estudio. En este sentido, nuestro interés no está centrado en la biodiversidad en general, sino en aquella que influye directa o indirectamente en el funcionamiento de los agroecosistemas. Esta puede estar ubicada dentro o en los alrededores de las fincas; es la llamada biodiversidad agrícola o agrobiodiversidad, y, de acuerdo a la COP V (UNEP, 2000) “está constituida por todos los componentes de la diversidad biológica pertinentes a la alimentación y la agricultura, y todos los componentes de la diversidad biológica que constituyen el ecosistema agrícola: las variedades y la variabilidad de animales, plantas y microorganismos en los niveles genético, de especies y de ecosistemas que son necesarios para mantener las funciones principales de los ecosistemas agrarios, su estructura y procesos”. El concepto de agrobiodiversidad es mucho más amplio que lo cultivado e incluye a todos los componentes y especies espontáneas o silvestres presentes en los agroecosistemas y sus ambientes. Esta distinción es importante ya que muchas veces se aplica el término agrobiodiversidad relacionado exclusivamente con las poblaciones cultivadas o domésticas y sin considerar el componente cultural. Reconocemos una gran interdependencia entre aspectos socioculturales y la biodiversidad, al entender que son los/as agricultores/as quienes administran la agrobiodiversidad. Todos los componentes bióticos que hay en un agroecosistema y su ensamblaje e interacciones, dependen, por acción u omisión de la decisión del agricultor/a. No hay dudas, entonces, de la estrecha relación existente entre lo cultural y lo biológico (Sarandón, 2009).

Principales interrogantes acerca de la agrobiodiversidad Varios son los interrogantes que nuestro equipo intenta abordar. En primer lugar, entendemos que la base de la biodiversidad es el componente vegetal (los autótrofos). Ya que este constituye el hábitat 83


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

que ofrece “nichos ecológicos” (oportunidades) para el resto de los componentes heterotróficos de la biodiversidad. Entender, por lo tanto, en nuestra zona qué (biodiversidad vegetal) hay y de qué manera esta es influenciada o varía según las prácticas de manejo fue uno de los primeros interrogantes. Esto fue abordado por la tesis de Susana Stupino, sobre “la diversidad vegetal espontánea en agroecosistemas hortícolas de La Plata y su relación con diferentes estilos de agricultura: importancia para la sustentabilidad”. En este tema hemos obtenido mucha información de gran valor local, que nos permite entender la importancia de los ambientes rurales, o agroecosistemas agrarios (en este caso los hortícolas) como reservorios de la biodiversidad vegetal. Por otro lado, hemos comprendido la importancia que tienen los sistemas de manejo de bases más agroecológicas sobre esta biodiversidad. Por ejemplo, se encontraron más familias botánicas, más géneros y especies en los sistemas con manejo más agroecológico que en aquellos más intensivos, lo que confirma el impacto que los sistemas de cultivo tienen sobre este componente básico de la biodiversidad. Se encontró que, a mayor diversidad de cultivos existentes en las fincas, hay una mayor diversidad de ambientes y, por lo tanto, una mayor diversidad de plantas espontáneas que aprovechan esta mayor cantidad de recursos. (Stupino et al., 2008, 2009, 2015, 2017). El conocimiento y valoración de esta diversidad de espontáneas por parte de los productores fue otro tema de interés abordado en un trabajo de tesis final ((Vicente y Sarandón, 2013). Una mayor diversidad cultivada es, entonces, fundamental para lograr una gran biodiversidad vegetal de espontáneas. Esto requiere contar con dos recursos básicos: a) el material de propagación (las semillas) y b) el conocimiento asociado a sus propiedades y su cultivo. Entender, por lo tanto, cómo es que los agricultores y agricultoras guardan esas semillas, las razones por las que lo hacen y todos los aspectos culturales relacionados con este proceso resulta fundamental. Este es el tema abordado por la tesis y los trabajos de Margarita Bonicatto. “Sustentabilidad y agrobiodiversidad: conocimientos, usos y prácticas de conservación in situ de “semillas locales” en agroecosistemas de producción familiar del Cinturón Hortícola Platense (Bonicatto, et al., 2010, 2014, 2015a, 2015b, Bonicatto, 2018). En esta investigación se confirmó la variedad de razones que los agricultores tienen para conservar las semillas de índole sentimental, culinario, innovador, comercial, independencia y otros más. Demostrando, de esta manera, la compleja racionalidad de los agricultores familiares y la necesidad de un abordaje desde la complejidad. 84


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

Para la conservación de la diversidad cultivada de especies vegetales nos preguntamos cuál es la importancia que tienen las variedades locales, que muchos grupos de agricultores conservan y siembran, desde hace muchos años, a pesar de que no tienen una gran demanda de mercado. La conservación de una alta variabilidad de material genético es una estrategia para disminuir la incertidumbre y conservar “in situ” la diversidad genética. Desde ese punto de vista, su relevamiento ya resulta muy importante. Pero es interesante, además, entender cuál es el aporte que estos materiales pueden hacer para modelos de agricultura más sustentables, menos dependientes de insumos. Este es el tema de la tesis abordada por Paula May: ¿Aportan las semillas locales a una agricultura más sustentable? Estudio de variedades hortícolas, lógicas y prácticas de productores familiares en el Gran La Plata. Nos preguntamos si tienen las variedades locales una mejor adaptación a las condiciones de la región de manera tal que permitirían su cultivo sin tanto uso de insumos. ¿Son más rústicas, son menos propensas a ser atacadas por las plagas? Esto ¿se correlaciona con alguna característica morfológica en particular: cutículas más gruesas, presencia de pelos, tricomas, ceras, etc.? (May et al., 2017) En la búsqueda de aumentar la biodiversidad vegetal cultivada, intentamos indagar cuáles son las posibilidades y los mecanismos con que los agricultores incorporan o no nuevos materiales. Y este es el caso de un cultivo como el amaranto, que tiene un enorme potencial en la zona como cultivo rústico y de gran valor alimenticio, a pesar de lo cual no se han observado avances importantes en su incorporación. Entender cómo funcionan estos mecanismos es entonces el tema de tesis de Florencia Ciocchini: “Incorporación del cultivo y consumo de Amaranto (Amaranthus sp) en Agricultores Familiares del Cinturón Hortícola Platense. Análisis de los factores que condicionan su apropiación”. (Ciocchini et al., 2015). La relación que existe entre las características de los agricultores y agricultoras de determinadas regiones y las decisiones de manejo de la biodiversidad surge como uno de los aspectos más interesantes y novedosos de la investigación sobre la biodiversidad en los agroecosistemas. Los aspectos culturales. Tal ha sido el tema abordado en la tesis de Claudia Noseda, realizada con agricultores familiares de la región norte de nuestro país. Lógica y saberes campesinos en la zona Norte del Alto Paraná, Misiones y su aporte a una propuesta de Desarrollo Rural Sostenible. Esta región de pequeños agricultores con superficies relativamente pequeñas se caracteriza por una gran diversidad vegetal. Y esto responde a una lógica que estos agricultores familiares mantienen desde

85


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

hace tiempo, que se opone a la visión empresarial que predomina en la región en la cual convive. Mantener pues esta manera de pensar y estos conocimientos, muchos de ellos muy complejos, es lo que garantiza la conservación de esta gran biodiversidad que permite el funcionamiento de los agroecosistemas. Su tesis demuestra que este conocimiento es muy complejo y que se trasmite de generación en generación, pero que a su vez no es estático, sino que evoluciona incorporando las novedades, pero siempre conservando ciertos criterios relacionados con su cosmovisión de la naturaleza y la biodiversidad como generadora de muchas funciones esenciales para su modo de vida. (Girard et al., 2015, Noseda et al, 2011, Noseda, 2019). Tal como señalamos, los niveles de biodiversidad presentes en los agroecosistemas dependen del grado de conocimiento y valoración que tienen los y las agricultoras de determinada región. Y su relevamiento requiere una metodología y un marco conceptual adecuado para poder entenderlo. Este ha sido el objetivo central de la tesis de Agustina Gargoloff, “Manejo, conocimiento y valoración de la agrobiodiversidad en fincas familiares de La Plata. Su relación con un manejo sustentable de los agroecosistemas” (Gargoloff et al., 2011, 2016, Gargoloff y Sarandón, 2015, Gargoloff, 2018). El estudio incluye una propuesta de intervención y diagnóstico a y través de la denominada “entrevista paisajística” que tiende a permitir un diálogo con los agricultores “in situ” respetando su idiosincrasia y su lenguaje. En este avance hacia aspectos culturales y sociales de los agricultores como forma de entender la biodiversidad presente en sus fincas, comenzamos a comprender, cada vez más claramente, la importancia de tener en cuenta el enfoque de género. No es lo mismo el conocimiento y valoración de parte de los varones que de las mujeres, conocimiento casi invisibilizado en el modelo de agricultura predominante, aun con un fuerte sesgo androcéntrico. Estos aspectos son abordados por otra integrante del equipo, Viviana Blanco en su tesis “Agroecología y Enfoque de género: Saberes excluidos. Análisis de la importancia del enfoque de género en el conocimiento y valoración de la agrobiodiversidad en productores familiares”. Tanto en esta Tesis, como en la de Agustina Gargoloff, donde el componente cultural es una parte fundamental, contamos con el apoyo de dos antropólogas: Tany Pochettino y Cristina Salva, que nos aportan su visión y marco conceptual, y metodologías para poder comprender estos aspectos complejos que no están tan incorporados en los agrónomos. Por ejemplo: ¿cuál es la percepción de los agricultores/as acerca del “valor” de la agrobiodiversidad?, ¿cuál es su actitud respecto a su conservación?, ¿cuál es la importancia del enfoque 86


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

de género en la valoración y conocimiento de la agrobiodiversidad? (Blanco y Sarandón, 2017, 2018). Los resultados de esta interacción con otras disciplinas han sido excelentes, aunque también todo un aprendizaje dentro del equipo.

Rol funcional de la biodiversidad. Tal vez uno de los objetivos más interesantes de nuestra investigación, es el de poder desarrollar criterios e instrumentos para poder reconocer en las diferentes fincas, en diferentes regiones, si los niveles de biodiversidad presentes son suficientes para sugerir que las funciones ecológicas pueden estar ocurriendo y con ello evitar el uso de insumos para reemplazarlos. El problema con este objetivo es que no hay mucha información acerca de cómo medir la biodiversidad funcional. Esta es una de las preguntas que se hizo María José Iermanó en su tesis: Sistemas familiares mixtos de agricultura y ganadería pastoril de la región pampeana: eficiencia en el uso de la energía y rol funcional de la agrobiodiversidad. (Iermanó, 2015, Iermanó et al, 2015) Uno de los aspectos destacables de esta investigación es que se logró desarrollar un conjunto de indicadores sencillos (adecuados a esos sistemas) para evaluar el “potencial de regulación biótica”, entendida como la capacidad teórica del sistema para mantener controladas las plagas, que es una medida de la biodiversidad funcional. Se demostró que 1) es posible simplificar conceptos complejos en indicadores sencillos que permiten medirlo a campo, y 2) que es posible comparar sistemas. La Tesis de María José Iermanó se introduce, además, en otro tema interesante y de gran actualidad: el de la eficiencia energética en los agroecosistemas. La agricultura moderna es en general, debido a su alta dependencia de insumos, altamente demandante de energía, principalmente fósil. Muchos de estos insumos, energéticamente caros, son aplicados para suplir algún proceso ecológico que, debido a la baja diversidad, está ausente o debilitado. Nos preguntamos si es posible disminuir el uso de energía suplantando esos insumos por procesos ecológicos. Los resultados demuestran que es posible mediante un manejo de bases agroecológicas. Se buscó contestar preguntas como: ¿en qué procesos se gasta la energía necesaria para manejar los agroecosistemas?, ¿cómo puede optimizarse el uso de la energía en los agroecosistemas?, ¿se pueden reemplazar insumos (energéticamente costosos) por procesos ecológicos?, ¿cómo puede contribuir una mayor biodiversidad a mejorar la eficiencia energética de los agroecosistemas?

87


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

(Iermanó et al, 2019, Iermanó y Sarandón, 2019). La posibilidad de medir la biodiversidad funcional ha sido encarada también otro tipo de sistemas más complejos como lo son los sistemas hortícolas Valentina Fernández en su tesis: Heterogeneidad vegetal en sistemas hortícolas familiares: Análisis desde una perspectiva funcional para la regulación biótica de plagas. Se busca cuantificar, también a través de un conjunto de indicadores, la heterogeneidad presente en sistemas hortícolas como indicadores del potencial de regulación biótica. Los resultados son también muy interesantes y confirman a) que es posible traducir aspectos muy complejos de la vegetación presente en distintas zonas de las fincas, en indicadores relativamente sencillos de evaluar y b) que los sistemas bajo manejo con los principios de la Agroecología presentan un mayor potencial de regulación biótica. (Fernández y Marasas, 2015).

El componente heterotrófico en los agroecosistemas Otras líneas de investigación han estado centradas en entender mejor a los componentes de la heterofauna (los consumidores) que puede explicar la regulación de plagas y otras funciones ecológicas. Por ejemplo, hemos abordado algunos grupos como los artrópodos y, dentro de estos, alguna familia de coleópteros, como los carábidos, que cumplen importantes roles en los agroecosistemas como el control biológico, o la remoción de los suelos, entre otros. Dos tesis doctorales se han realizado en este sentido. La primera, de Mariana Marasas, ha abordado el “Efecto de los sistemas de labranza sobre la abundancia y diversidad de la coleopterofauna edáfica, con especial referencia a las especies de carabidae, en un cultivo de trigo y los ambientes naturales circundantes” (Marasas et al., 2011, Marasas, 2002). La otra es la realizada por la Dra. María Fernanda Paleologos, sobre “Los carábidos como componentes clave de la agrobiodiversidad. Su importancia como indicadores ecológicos de sustentabilidad en agroecosistemas de Berisso, Provincia de Buenos Aires”. (Paleologos, 2012), En ambas investigaciones se trató de entender las variaciones en abundancia y diversidad de este grupo de coleópteros, asociadas con las características de manejo de los agroecosistemas, por ejemplo, la distancia a los bordes de las parcelas, la composición de la vegetación, y la importancia de la diversidad intra y extra-parcelas. Los resultados han sido muy interesantes y se han volcado a varias publicaciones. En uno de los trabajos, Paleologos analizó la relación existente entre las 88


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

características de manchones de vegetación silvestres (ambientes seminaturales) muy comunes en varios agroecosistemas de la región, con las características en composición y abundancia de los principales grupos de la artropodofauna. Se observó, como aspecto muy interesante, que no son los mismos atributos los que interesan si lo que interesa es la fauna epifita que la fauna epigea o edáfica, (Paleologos et al., 2008, 2015, Paleologos, 2012). Por otro lado, uno de los desafíos más interesantes es poder medir la heterogeneidad o la diversidad ambiental de diferentes sistemas productivos, es decir, como una medida indirecta de la oferta de nichos ecológicos, que puede darnos una idea del potencial de soporte de diversidad de fauna, sobre todo de artrópodos. Esto ha disparado la búsqueda de indicadores biológicos capaces de variar acorde a las variaciones ambientales o micro ambientales. En este sentido, hemos estudiado a los carábidos como indicadores de condiciones de diversidad estructural en agroecosistemas. Su importancia para una agricultura sustentable. El ensamble carabidológico, que es la estructura de dominancia entre varios géneros de carábidos, ha resultado un muy buen indicador de la mayor o menor diversidad ambiental. (Paleologos et al., 2015). En esta línea se enmarca también la tesis de Nadia Dubrovsky Berensztein “Estudio de la Entomofauna en Agroecosistemas del Cinturón Hortícola de La Plata, para el Diseño Participativo de Estrategias de Control Biológico por conservación” (Dubrovsky Berensztein, 2018). Uno de los resultados más interesantes de esta tesis es haber demostrado los cambios en las redes tróficas entre sistemas de manejo convencional y manejo denominado agroecológico. La composición de esta red, pero, sobre todo la complejidad, dada por el número y tipo de relaciones entre sus componentes es mucho mayor en aquellos sistemas agroecológicos que en los sistemas de cultivo intensivo. Un aspecto muy interesante ha sido que no se encontraron muchas diferencias entre las redes tróficas de los bordes que rodean a las parcelas o a las fincas de cultivo. Esto indica que, en la zona hortícola de nuestra región (y tal vez esto sea similar a otras regiones de otros países) existe un potencial ecológico, que los agricultores pueden utilizar para un control biológico o regulación biótica y que, tal vez para ello sólo deberían dejar de aplicar pesticidas. Este resultado merece ser comprobado “in situ” con más estudios, pero permite comprender el potencial que existe en la región y, por otro lado, la importancia de conservar esta diversidad extra-parcelas en estos sistemas productivos.

89


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

Sin embargo, preservar estos ambientes seminaturales que aparentemente no tienen “valor, no es sencillo. Aquí se presenta el dilema del “valor” de la biodiversidad. El control o la eliminación de los manchones de vegetación espontánea que realizan muchos agricultores en sus fincas se debe a la percepción que tienen acerca de que esa diversidad no tiene valor alguno. Sin embargo, lo tiene; pero es un tipo de valor intangible, más abstracto, que difícilmente puede ser traducido en un precio adecuado. Esto es justamente una de las dificultades para preservar la biodiversidad: que presenta valores abstractos, intangibles, no fácilmente percibidos. Esto, por lo tanto, puede llevar a su deterioro. En nuestro equipo hemos abordado también líneas de investigación que pretenden contestar estos temas. Como, por ejemplo, ¿Como valorar los bienes ambientales? ¿Puede ponerse un precio? Si es así, ¿cómo se determina el mismo, quién lo define? Si no se pone un precio, ¿cómo puede expresarse este o estos valores? Es decir: ¿Cuál es el valor de la biodiversidad y de sus componentes? Capital natural y capital “intangible”. La puesta en valor de la biodiversidad no es sencilla, pero puede hacerse a través de ponerle precio a su deterioro midiendo, por ejemplo, el costo de reposición. Aunque no es sencillo, el equipo tiene algunos trabajos realizados por Claudia Flores que van en este sentido; ponerle precio a las externalidades para poder medir los “costos ocultos” de los sistemas intensivos de cultivo. (Flores y sarandón, 2003, Zazo et al., 2011). Por otra parte, en el área que hace al diseño y manejo de agroecosistemas uno de los aspectos estudiados por el equipo y en el que se viene trabajando hace muchos años es en las posibilidades de incrementar la biodiversidad cultivada a través de la siembre de policultivos o cultivos intercalados. Incluso como medio para incrementar la biodiversidad para el control de malezas, uno de los principales problemas en agroecosistemas extensivos de la República Argentina. (Sánchez Vallduvi, 2012)

Algunas enseñanzas y reflexiones sobre nuestra experiencia de investigar en agrobiodiversidad. El estudio de la biodiversidad funcional en los agroecosistemas empleando el enfoque de la Agroecología permitió resolver varias dificultades propias de un concepto complejo (multidimensional) como lo es la agrobiodiversidad. El enfoque holístico, sistémico y desde la complejidad de la Agroecología, fue muy útil para evitar la tentación de realizar estudios, tal vez en profundidad, pero de aspectos o componentes aislados.

90


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

Otro aprendizaje es que no es posible encarar estos estudios sin un equipo interdisciplinario que permita entender las diferentes dimensiones de la biodiversidad. El poder comprender la relación entre aspectos ecológicos, sociales, culturales, conocimientos, percepción, el enfoque de género y todo lo que implica entender por qué existe tal o cual biodiversidad en diferentes sistemas ha sido un aprendizaje muy interesante que requirió dejar de lado ciertas certezas y seguridades para poder comprender la realidad. La incertidumbre no puede ser eliminada, solo manejada. Por otro lado, el tener como meta lograr aportar conocimientos que fueran directa o indirectamente útiles para los agricultores familiares o técnicos que trabajan con ellos permitió dejar de lado muchas trabas que surgen en diferentes equipos de investigación relacionadas, por ejemplo, con la presión para publicar en revistas especializadas de alto impacto, definir el orden de los autores (quienes van primero), o la necesidad de recortar la realidad a fin de poder emplear diseños estadísticos como un requisito sine qua non. Este último punto es tal vez uno de los aprendizajes más interesantes. Muchas veces la preocupación por publicar como única meta de los investigadores los conduce a desechar cualquier estudio o investigación que no puede medirse o controlarse de manera tal de poderla ubicar dentro de alguna prueba estadística determinada, so pena de ser no científico. Sin embargo, hemos comprendido que la realidad, aunque mucho más compleja, es el escenario donde ocurren las cosas. Y, sobre todo, entender que la agrobiodiversidad tiene un componente cultural indisoluble por lo que no es posible reducir todo a experimentos en condiciones controladas de tamaños reducidos y alejados de la variabilidad propia de los campos de los agricultores. Esto podrá ser preciso. Pero no es la realidad. La complejidad misma de las preguntas que, a medida que ganábamos experiencia y conocimientos, iban surgiendo, ha llevado también a promover la colaboración entre los integrantes del equipo. Esto es un aspecto sumamente valioso: sumar y no competir. Por otra parte, aunque la investigación en agrobiodiversidad tiene que recorrer aún mucho camino, hay muchas cuestiones aun sin resolver y tal vez muchas preguntas que ni siquiera podemos formular, el futuro es esperanzador. Varios aspectos nos permiten este optimismo como: - El auge de la Agroecología. En Latinoamérica, la Agroecología está impregnando a muchas instituciones de enseñanza e investigaciónextensión.

91


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

- Una conciencia ecológica o ambiental de la población en aumento, asociada al uso de medio masivos de comunicación donde registrar y trasmitir información es sumamente sencillo, como lo son las redes sociales, Internet, etc. es una realidad que no tiene vuelta atrás. Una vez percibido y entendido el problema, es difícil retroceder. - Demanda por alimentos saludables (libres de pesticidas). Asociado a lo anterior, existe una conciencia e interés por la alimentación saludable y variada, lo que conduce a la valoración de la existencia de muchos sistemas productivos que generen esta amplia oferta de comidas. - Leyes más favorables (principio de precaución). En varios países del mundo las legislaciones se están adaptando a las demandas de la sociedad a través de la implementación o reconocimiento de nuevos derechos que hasta hace 10 años no existían. Las constituciones de Ecuador y Bolivia son un ejemplo de ello. La aplicación del principio de precaución en varias legislaciones nacionales ha sido también un hito en este sentido. - Prohibiciones de aplicar pesticidas (franjas de no fumigación) en muchos municipios. No hay dudas que esto que ha ocurrido recientemente en forma masiva en la región sojera de Argentina, donde se han establecido miles de hectáreas alrededor de los pueblos donde no se puede usar pesticidas, ha provocado o favorecido la búsqueda de alternativas productivas que puedan hacerse sin su uso. Y claramente aparece la biodiversidad como la estrategia adecuada y la Agroecología como el enfoque necesario.

Dificultades, amenazas y debilidades Sin embargo, debemos reconocer que existen aún debilidades o dificultades para encarar investigaciones en agrobiodiversidad. Entre ellas podemos citar: - Aún incipiente masa crítica de investigadores formados en la complejidad ambiental, y con posibilidades y capacidad para dirigir becas y tesis. - Todavía algunas dificultades metodológicas. ¿Estadística? - Dificultad para asegurar la continuidad de los equipos de investigación en los sistemas académicos científicos. Muchas veces no es tan complicado armar un equipo, como mantenerlo en el tiempo. Es necesario brindar oportunidades de mediano plazo para que los jóvenes se sientan atraídos por la investigación en estas áreas emergentes y posibilidades para que

92


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Santiago Sarandón. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

permanenzcan en los sistemas científicos-académicos. Entre las amenazas podemos citar: - Existencia y predominio todavía de parámetros inadecuados de evaluación: demasiado cuantitativo. - Prevalencia de ciencia más dura, que otorga más prestigio. - La prevalencia del interés por el “paper duro”, favorece líneas de investigación de valor universal. - Parámetros de evaluación Institucionales que no están adecuados a favorecer los equipos y la investigación interdisciplinaria.

CONCLUSIONES La biodiversidad aplicada a la agricultura es uno de los campos más apasionantes e interesantes que han surgido en los últimos tiempos en el área agropecuaria. Parece ser el camino para resolver gran parte de los problemas que enfrenta la agricultura actual. Sin embargo, su enorme complejidad dificulta su estudio desde una visión reduccionista, por lo que se requiere un abordaje desde el marco conceptual de la Agroecología. Esto permite discutir y poner en análisis varios aspectos de la investigación. Desde cómo y qué investigar, hasta cuáles son los escenarios más apropiados y la necesidad de conformar equipos interdisciplinarios que puedan abordar la complejidad ambiental desde un enfoque pluriepistemológico. La experiencia del equipo de Agroecología de La Plata, Argentina, demuestra que aun con todas las dificultades la agrobiodiversidad puede ser abordada y se pueden obtener grandes avances y conocimientos valiosos para el diseño y manejo de agroecosistemas sustentables.

93


referencias PaBlanco VL & SJ Sarandón (2017). Identificación de resistencias a la incorporación del enfoque de género en el trabajo de extensión rural en la Argentina. Una propuesta metodológica. VI Congresso Latino-americano de Agroecologia (SOCLA) y X Congresso Brasileiro de Agroecologia (ABA). Brasilia, 12-15 de septiembre de 2017. Cadernos de Agroecologia – ISSN 2236-7934 – Anais do VI CLAA, X CBA e V SEMDF – Vol. 13, N° 1, Jul. 2018. Resumen expandido, 5pp. Blanco VL & SJ Sarandón (2018) Identificación de Resistencias Ocultas a la Incorporación del Enfoque Agroecológico en Técnicos del Noreste Argentino. Un Paso Necesario Para Su Superación. VII Congreso Latinoamericano de Agroecología, SOCLA, Guayaquil Ecuador, 1 al 4 de Octubre de 2018. Aceptado. 5 pp. Bonicatto MM (2018) Análisis de la conservación de semillas y conocimientos asociados en agroecosistemas familiares del Cinturón Hortícola Platense. Tesis Doctoral, Facultad de Ciencias Agrarias Y Forestales, UNLP, 260 pp. http://sedici. unlp.edu.ar/bitstream/handle/10915/66552/Documento_completo__.pdf-PDFA. pdf?sequence=1&isAllowed=y Bonicatto MM, ME Marasas, ML Pochettino, SJ Sarandón (2014). La semilla en la conservación de los gustos y la historia. LEISA 30 (4): 24-27. www.leisa-al.org Bonicatto MM, ML Pochettino, SJ Sarandón & ME Marasas. (2015ª). Conservación de semillas por agricultores familiares en un contexto periurbano en La Plata, Argentina. Memorias Del V Congreso Latinoamericano De Agroecología. Archivo Digital: descarga y online ISBN 978-950-34-1265-7, La Plata, 7, 8 y 9 de Octubre de 2015, A5-615, 6pp. Bonicatto MM; Fernández V; Gargoloff NA, Marasas M; Muscio L, Pérez M & ML Pochettino. (2010). Sembrando Esperanza. III Feria Provincial de Semillas Nativas y Criollas. En defensa de la vida de la soberanía alimentaria. Por una economía solidaria, construyendo la casa de todos. Ediciones INTA. Publicaciones IPAF- Región Pampeana. La Plata, Argentina. 44 Pp. ISBN 978-987-1623-74-7. Bonicatto, M.M.; M.E. Marasas; S.J. Sarandon & M.L. Pochettino. (2015b). Seed Conservation by Family Farmers in the Rural–Urban Fringe Area of La Plata Region, Argentina: The Dynamics of an Ancient Practice. Agroecology and Sustainable Food Systems, 39:6, 625-646. DOI: 10.1080/21683565.2015.1020405. Ciocchini, FI, SJ Sarandón, A Carbone; C Palladini, MJ Mutti & S Rocha (2015) Policultivo De Amaranto con Leguminosas, Una Alternativa de Manejo Agroecológica de Malezas Para Agricultores Familiares De La Provincia De Buenos Aires. MEMORIAS DEL V CONGRESO LATINOAMERICANO DE AGROECOLOGÍA Archivo Digital: descarga y online ISBN 978-950-34-1265-7, La Plata, 7, 8 y 9 de Octubre de 2015, A1-506, 5pp Dubrovsky Berensztein, Nadia (2018). Estudio de la entomofauna en agroecosistemas del Cinturón Hortícola de La Plata, para el diseño participativo de estrategias de control biológico por conservación. Tesis Doctoral, Facultad de Ciencias Agrarias Y Forestales, UNLP, 403 pp, http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/71094 Fernandez V & M Marasas (2015) Análisis comparativo del componente vegetal de la biodiversidad en sistemas de producción hortícola familiar del Cordón Hortícola de La Plata (CHLP), provincia de Buenos Aires, Argentina. Su importancia para la transición agroecológica. Revista facultad de Agronomía. La Plata 2015, edición especial “Agricultura Familiar, Agroecología y Territorio”. Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales, UNLP. ISSN 0041-8676/ISNN (on line) 1669-9513. Flores CC & SJ Sarandón (2003) ¿Racionalidad económica versus sustentabilidad ecológica? El análisis económico convencional y el costo oculto de la pérdida de fertilidad


referencias del suelo durante el proceso de Agriculturización en la Región Pampeana Argentina. Revista de la Facultad de Agronomía, La Plata: 105 (1): 52-67, ISSN 0041-8676, Con referato. Zazo F, CC Flores, SJ Sarandón (2011) El “costo oculto” del deterioro del suelo durante el proceso de “sojización” en la región de Arrecifes, Argentina. Revista Brasilera de Agroecología. 6(3): 3-20 (2011) ISSN:1980-9735. http://www6.ufrgs.br/seeragroecologia/ojs/. Gargoloff NA (2018). Manejo, conocimiento y valoración de la agrobiodiversidad en fincas familiares de La Plata Su relación con un manejo sustentable de los agroecosistemas. Tesis Doctoral, Facultad de Ciencias Agrarias Y Forestales, UNLP, 297 pp. http://sedici.unlp.edu.ar/bitstream/handle/10915/69856/Documento_completo.pdf-PDFA2u. pdf?sequence=1&isAllowed=y Gargoloff NA y SJ Sarandón. (2015). Conocimiento Ambiental Local y Manejo de la Biodiversidad. Su Importancia Para La Sustentabilidad De Fincas Hortícolas De La Plata, Argentina. Memorias Del V Congreso Latinoamericano De Agroecología Archivo Digital: descarga y online ISBN 978-950-34-1265-7, La Plata, 7, 8 y 9 de Octubre de 2015, A1-613, 5pp. Gargoloff NA, Bonicatto MM & SJ Sarandón. (2016) Agrobiodiversidad Cultivada y Resiliencia ante la variabilidad climática en Agroecosistemas Familiares. Memorias del V Congreso Internacional de Cambio Climático y Desarrollo sostenible. La Plata 14 al 16 de septiembre de 2016. 7 pp. Gargoloff NA, C Albadalejo y SJ Sarandón (2011) La entrevista paisajística: un método para situar las prácticas y saberes de los agricultores. Resumos do VII Congresso Brasileiro de Agroecologia, Fortaleza/CE, 12 a 16/12/2011, Cadernos de Agroecologia – ISSN 22367934 – Vol 6, No. 2, Dez 2011. Resumen Expandido Nº 10906: 5pp. Girard N, D Magda, C Noseda C & SJ Sarandon (2015) Practising agroecology: management principles drawn from small farming in Misiones (Argentina). Agroecology and Sustainable Food Systems, 39:7, 824-840, DOI: 10.1080/21683565.2015.1020081, http:// dx.doi.org/10.1080/21683565.2015.1020081, ISSN: 2168-3565 print/2168-3573 online Iermanó MJ (2015) Sistemas mixtos familiares de agricultura y ganadería pastoril de la región pampeana: eficiencia en el uso de la energía y rol funcional de la agrobiodiversidad. Tesis Doctoral, Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales, UNLP, 306 pp. http://sedici.unlp.edu.ar/bitstream/handle/10915/46343/Documento_completo. pdf?sequence=6 Iermanó MJ SJ Sarandón, AD Maggio & LN Tamagno (2015) Evaluación de Parámetros Composicionales, Estructurales y Temporales de la Agrobiodiversidad en sistemas extensivos Pampeanos. Memorias Del V Congreso Latinoamericano De Agroecología Archivo Digital: descarga y online ISBN 978-950-34-1265-7, La Plata, 7, 8 y 9 de Octubre de 2015, A1-613, 5pp. Iermanó MJ, Tamagno LN, Maggio AD & Sarandón SJ (2019). Aporte de los sistemas ganaderos a la conservación de la agrobiodiversidad en agroecosistemas pampeanos. Importancia del “potencial de regulación biótica”. En Sistemas extensivos del Sur de la Región Pampeana: abordaje agroecológico / Liliana Gallez... [et al.]; coordinación general de Liliana Gallez; Cecilia N. Pellegrini. -1.a ed.- Bahía Blanca: Editorial de la Universidad Nacional del Sur. Ediuns, 2018. Libro digital, PDF. Archivo Digital: descarga y online ISBN 978-987-655-206-6.. Cap 2: 17-33. Iermanó MJ & Sarandón SJ (2019). Eficiencia en el uso de energía en sistemas agrícolas


referencias y mixtos en la región pampeana argentina. Su relación con procesos ecológicos. En Sistemas extensivos del Sur de la Región Pampeana: abordaje agroecológico / Liliana Gallez... [et al.]; coordinación general de Liliana Gallez; Cecilia N. Pellegrini. -1.a ed.- Bahía Blanca: Editorial de la Universidad Nacional del Sur. Ediuns, 2018. Libro digital, PDF. Archivo Digital: descarga y online ISBN 978-987-655-206-6. Cap 1: 5-16. Marasas ME, SJ Sarandón y AC Cichino (2001) Changes in soil arthropod functional group in a wheat crop under conventional and no-tillage systems in Argentina. Applied Soil Ecology 18: 61-68. ISSN: 0929-1393 Mariana Marasas (2002). Efecto de los sistemas de labranza sobre la abundancia y diversidad de la coleopterofauna edáfica, con especial referencia a las especies de carabidae, en un cultivo de trigo y los ambientes naturales circundantes. Tesis para optar al grado de Doctor en Ciencias Naturales, Universidad Nacional de La Plata. Rendida y aprobada en abril de 2002. 113 pp. May MP, Fauret S, Ciocchini F, Ahumada A, Bonicatto MM (2017). Cultivos tradicionales y saberes culinarios en el cinturón hortícola de La Plata, Argentina. Su rol en la conservación de agrobiodiversidad.. Brasil. Brasilia. 2017. Congreso. VI Congreso Latinoamericano de Agroecología. Sociedad Científica Latinoamericana de Agroecología SOCLA Noseda C, SJ Sarandón, D Magda, N Girard, G González, R Gorriti (2011) Lógica y saberes campesinos en dos localidades ubicadas en la zona Norte del Alto Paraná, Misiones, Argentina: aportes para la producción agroecológica. Resumos do VII Congresso Brasileiro de Agroecologia – Fortaleza/CE – 12 a 16/12/2011, Cadernos de Agroecologia – ISSN 2236-7934 – Vol 6, No. 2, Dez 2011. Resumen Expandido Nº 11538: 5pp. Noseda Claudia (2019) Lógica y saberes campesinos en la zona norte del Alto Paraná, Misiones y su aporte a una propuesta de desarrollo rural sostenible. Tesis de Maestría. Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales, UNLP, 419 pp. http://sedici.unlp.edu.ar/bitstream/handle/10915/72781/Documento_completo.pdf-PDFA. pdf?sequence=1&isAllowed=y Paleologos MF, CC Flores, SJ Sarandón, SA Stupino, MM Bonicatto (2008) Abundancia y diversidad de la entomofauna asociada a ambientes semi-naturales en fincas hortícolas de La Plata, Buenos Aires, Argentina. Revista Brasilera de Agroecología 3 (1): 28-40. Brasil. ISSN: 1980-9735. Paleologos María Fernanda (2012).“Los carábidos como componentes clave de la agrobiodiversidad. Su importancia como indicadores ecológicos de sustentabilidad en agroecosistemas de Berisso, Provincia de Buenos Aires”. Tesis para optar al grado de Doctor en Ciencias Naturales Universidad Nacional de La Plata . Directores SJ Sarandón y P Pereyra. http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/20646 Paleologos MF, SJ Sarandón, PC Pereyra (2015) El rol de los ambientes semi-naturales en la abundancia y diversidad de coleópteros edáficos en los viñedos de la Costa de Berisso, Argentina. Rev. Fac. Agron. La Plata (2015) Vol. 114 (Núm. Esp.1) Agricultura Familiar, Agroecología y Territorio: 74-84. ISSN 0041-8676 - ISSN (on line) 1669-9513. Paleologos MF; AC Cicchino & Santiago J Sarandón; (2015) El ensamble Carábidológico: un indicador de Sustentabilidad en los Agroecosistemas de Vid de la Costa de Berisso, Buenos Aires, Argentina. Memorias del V Congreso Latinoamericano de AgroecologíA


referencias Archivo Digital: descarga y online ISBN 978-950-34-1265-7, La Plata, 7, 8 y 9 de Octubre de 2015, A4-626, 6pp. Sanchez Vallduví G (2012) Manejo de malezas en lino. Evaluación de la competencia cultivo-maleza con un enfoque agroecológico.Tesis doctoral, Facultad de Ciencias Agrarias Y Forestales, UNLP, 171 pp. http://sedici.unlp.edu.ar/bitstream/handle/10915/26043/Documento_completo.pdf?sequence=1&isAllowed=y Sarandón SJ y CC Flores (2014). La insustentabilidad del modelo agrícola actual. Agroecología: Bases teóricas para el diseño y manejo de Agroecosistemas sustentables. SJ Sarandón & CC Flores, (Editores) Programa Edición Libros de Cátedra, Editorial Universidad Nacional de La Plata, UNLP, Capítulo 1: 13-41. E-Book: ISBN 978-950-341107-0. http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/37280 Sarandón, SJ (2009) Biodiversidad, agrobiodiversidad y agricultura sustentable: Análisis del Convenio sobre Diversidad Biológica. En Vertientes del pensamiento agroecológico: fundamentos y aplicaciones, Tomas Leon Siccard, Miguel A. Altieri (Eds.), IDEAS 21, Sociedad Científica Latinoamerica de Agroecología (SOCLA), Universidad Nacional de Colombia, Opciones Graficas Editores, Bogotá., DC , Colombia, Cap 4: 105-130. ISBN: 978-958-719-572-9. Stupino AS, JL Frangi, SJ Sarandón, MF Arturi & AC Ferreira (2008) Plant agrobiodiversity in two horticultural farms under organic and conventional management in La Plata, Argentina. Revista Brasilera de Agroecología. Brasil. 3 (3): 24-35. ISSN: 19809735. http://www6.ufrgs.br/seeragroecologia/ojs/ Stupino S, SJ Sarandón & J Frangi (2017). La flora espontánea en sistemas hortícolas del periurbano de la ciudad de La Plata (Buenos Aires, Argentina). Un importante reservorio de biodiversidad. VI Congresso Latino-americano de Agroecologia (SOCLA) y X Congresso Brasileiro de Agroecologia (ABA). Brasilia, 12-15 de septiembre de 2017. Cadernos de Agroecologia – ISSN 2236-7934 – Anais do VI CLAA, X CBA e V SEMDF – Vol. 13, N° 1, Jul. 2018. Resumen expandido, 5pp. Stupino SA, JL Frangi & SJ Sarandón (2015) Efecto de manejo sobre la diversidad de plantas espontáneas en cultivos del Cinturón Hortícola de la ciudad de La Plata, Argentina. MEMORIAS DEL V CONGRESO LATINOAMERICANO DE AGROECOLOGÍA Archivo Digital: descarga y online ISBN 978-950-34-1265-7, La Plata, 7, 8 y 9 de Octubre de 2015, A5-623, 5pp. Stupino SA, SJ Sarandón & JL Frangi (2009) Características de la Diversidad Cultivada y su Relación con la Diversidad Vegetal Asociada en Fincas Hortícolas Bajo Diferente Manejo en La Plata, Argentina. II Congresso Latinoamericano de Agroecologia (Curitiba, Brasil, de 09 a 12 de novembro de 2009). Pags: 2758-2761. UNEP/CDB/COP/5 (2000) The Biodiversity Agenda. Decisiones adoptadas por la conferencia de las partes en el convenio sobre la diversidad biológica en su quinta reunión. Apéndice. Nairobi, 15-26 de mayo 2000. Vicente L & SJ Sarandón (2013) Conocimiento y valoración de la vegetación espontánea por agricultores hortícolas de la plata. Su importancia para la conservación de la agrobiodiversidad. Rev. Bras. De Agroecologia. 8(3): 57-71. ISSN: 1980-9735. http:// www6.ufrgs.br/seeragroecologia/ojs/


Fotografia: Margarita Bonicatto Ajies para moler.


Conservación de semillas y saberes en el Cinturón Hortícola de La Plata, Argentina. María Margarita Bonicatto Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales, Universidad Nacional de La Plata, Argentina. mbonicatto@yahoo.com.ar

INTRODUCCIÓN La conservación y reproducción de semillas es una práctica que se encuentra entre las actividades agrícolas antiguas que ha realizado el ser humano y permite a las agricultoras y agricultores cultivar variedades adaptadas al ambiente local, a sus necesidades y gustos, fortaleciendo la soberanía y la autonomía alimentaria. En un sentido más simbólico, las semillas han sido y siguen siendo parte de la identidad de las personas ya que están vinculadas a las costumbres alimenticias y a los platos típicos que expresan orígenes y tradiciones, prácticas y celebraciones. En definitiva, este cuerpo simbólico del cual las semillas forman parte es la identidad del agricultor y, por lo tanto, de su pueblo y de su vida (Pochettino et al., 2011). Según Altieri (2000), los agroecosistemas manejados mediante prácticas tradicionales en sintonía con el ambiente son considerados reservas de diversidad genética in-situ. Se entiende por tradicional el corpus acumulativo de prácticas, conocimientos y creencias sobre las relaciones entre los seres vivos (incluidos los seres humanos) y de los mismos con su entorno (Berkes, 1993; Gadgil et al., 1993; Hunn, 2002). En este trabajo, si bien se toma la definición de Berkes (1993), se reemplaza el rótulo de tradicional por el de local como lo proponen Reyes-García & Martí Sanz (2007), el cual implica una mayor amplitud al incorporar los saberes derivados de otros grupos, incluso el científico, tamizados a la luz de las prácticas propias. A su vez, los términos saberes y conocimientos serán utilizados indistintamente. El término diversidad biocultural se incorpora a fin de hacer referencia a la diversidad de la vida en todas sus manifestaciones -biológica, cultural y lingüística- interrelacionadas conformando un sistema adaptativo socio-ecológico (Maffi, 2005; Terralingua, 2010). Según Harwood (1979) y Nicholls (2013) la diversidad biocultural, permite a las y los agricultores, minimizar el riesgo de sus 99


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. María Margarita Bonicatto. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

producciones, estabilizar los rendimientos a largo plazo, promover la diversidad de dietas y maximizar los ingresos en situaciones de recursos limitados. Dichos aspectos positivos se basan en gran medida, en el hecho de contar con una amplia disponibilidad de semillas para ser sembradas, entendiendo el término semilla en sentido amplio, como todo órgano o parte vegetal que permita la propagación de un cultivo (Bonicatto et al., 2009). En este sentido la agrobiodiversidad conservada por las y los agricultores es un componente de vital importancia para la resiliencia y sustentabilidad de los agroecosistemas. A pesar de la importancia resaltada anteriormente, la autoproducción de semillas es una de las actividades productivas más afectadas por el modelo de la Revolución Verde. Este modelo introdujo y difundió la idea de modificar el ambiente mediante la utilización de paquetes tecnológicos basados en semillas industriales de alto potencial de rendimiento en lugar de conservar una alta variabilidad genética que se adecuara a la diversidad de ambientes y costumbres (Sarandón & Flores, 2014). Esta situación, la cual implica la simplificación y homogeneización de los agroecosistemas, ha generado la reducción y pérdida de diversidad biocultural. En el Partido de La Plata, Provincia de Buenos Aires, existe uno de los cinturones hortícolas más importantes de la Argentina. Allí la producción nace con la fundación de la ciudad a fines del Siglo XIX. En ese entonces y con el paso del tiempo, se estableció una “cultura de producción biodiversa” a través de la selección y conservación de hortalizas realizada por las familias agricultoras, llamadas “quinteros”, la llegada de nuevas inmigraciones y la dinámica particular de la producción hortícola (Garat et al., 2007; 2009). Posteriormente se provocó una lenta reducción y desuso de un gran número de semillas locales, a causa del avance de formas intensivas de producción, con baja diversificación, semillas híbridas, agroquímicos y un mercado exigente en rendimiento y estética de los productos. Los cambios ocurridos establecieron un territorio heterogéneo respecto a la agrobiodiversidad cultivada, al origen de los agricultores, la organización social del trabajo (familiar o asalariada), los estilos de producción y los niveles de incorporación tecnológica (Cieza, 2004), pero homogéneo en cuanto a la presión del modelo hegemónico. En el contexto planteado, los conocimientos propios de las y los agricultores y la agrobiodiversidad por ellas y ellos seleccionada y conservada ha sido desvalorizada e invisibilizada. El propósito de este trabajo es reflexionar sobre la situación la que se

100


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. María Margarita Bonicatto. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

encuentra la práctica de autoproducción de semillas y el mantenimiento en vigencia de los saberes asociados a ella, en un territorio en constante cambio y adaptación como el cinturón Hortícola de La Plata (CHP). Para esto se enunciaron algunas preguntas: ¿se mantiene activa la conservación de semillas en los agroecosistemas familiares del CHP?, ¿de dónde provienen las semillas que se están conservando?, ¿qué motiva su conservación? y ¿qué impedimentos para la conservación se visualizan? METODOLOGÍA Ubicado al nordeste de la provincia de Buenos Aires (34º 54’ 24’’ de latitud sur y 57º 55’ 56’’ de longitud oeste) se ubica el Cinturón Hortícola Platense (Figura 1), inserto en el Cinturón Hortícola Bonaerense, el cual comprende una franja de territorio de 5 a 12 Km de ancho que se extiende entre el suburbio de la ciudad y el medio agropecuario extensivo (Bozzano, 2003). El clima es templado semi húmedo sin estación seca. La temperatura media anual es de 16,3 °C, con un promedio de 26,3 °C en enero y 10,5 °C en julio. La precipitación anual promedio es de 1023 mm. El municipio de La Plata es la región hortícola más importante del Cinturón Hortícola Bonaerense por poseer la mayor producción hortícola de la región, la mayor superficie hortícola y el 49% de las explotaciones del Cinturón Hortícola Bonaerense (Dirección Provincial de Estadística, 2005). Según el Censo Hortiflorícola (Dirección Provincial de Estadística, 2005), La Plata cuenta con 761 unidades productivas que ocupan 4184 has, representando una superficie promedio de 5,5 has por unidad. Sin embargo, desde distintos ámbitos, se coincide en que el incremento del número de productores es superior al cuádruple del registro realizado en el último Censo Hortiflorícola (Cieza et al., 2015). En cuanto a la producción, el CHP es responsable, de más de la mitad de la superficie implantada en el Cinturón Hortícola Bonaerense, y participa con casi el 60% de la producción regional (Dirección Provincial de Estadística, 2005). Según estimaciones de García (2012) para el año 2010, la actividad hortícola de la capital bonaerense pasó a ser responsable del 72% de la producción regional. Para el año 2010 los sistemas exclusivamente bajo cubierta son los que predominaban en el Partido, con unas 2500 hectáreas bajo invernadero para el Gran La Plata (Staviski, 2010). Esta mayor superficie bajo cubierta ha provocado un incremento de la producción de hortalizas, siendo La Plata en la actualidad la responsable de la provisión del 82 % de hortalizas que se comercializan en el Mercado Central de Buenos Aires (Cieza et al., 2015)

101


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. María Margarita Bonicatto. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

Figura 1

Figura 1: Localización del área de estudio. Provincia de Buenos Aires, Argentina. Para la realización de este trabajo se tomaron herramientas metodológicas de la etnobotánica donde los “datos” se refieren a la amplia gama de información que se obtiene acerca de cómo se relaciona la gente local con el medio ambiente (Martin 1995). Se tomó como unidad de análisis la finca de producción familiar. Se hizo un estudio exploratorio en 26 agroecosistemas familiares. Se realizaron entrevistas semiestructuradas y recorridas a campo. La información fue registrada a través de medios gráficos y audiovisuales con el consentimiento de los entrevistados. Cada planta cultivada fue considerada un registro. Los mismos se agruparon por familia botánica, nombre científico y nombre local, discriminando entre aquellas de las cuales se conservan semillas y de las cuales no. Se cuantificó la riqueza de especies y de etnoespecies, es decir los grupos de plantas percibidos y agrupados por los agricultores como entidades botánicas diferentes (Pochettino, 2015). Desde esta perspectiva, los rótulos utilizados por las y los agricultores dan cuenta de una importante información que de otra manera quedaría invisibilizada, ya que se entiende que el nombrar de manera diferente está vinculado a diferentes valoraciones, prácticas de manejo y usos (Bonicatto et al., 2010; Hilgert et al., 2013; Lambaré & Pochettino, 2012; Veteto 2014). Para 102


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. María Margarita Bonicatto. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

cada semilla conservada se analizaron los criterios de conservación y el origen de la semilla. Los criterios de conservación se cuantificaron a partir del número veces (citas) que fueron utilizados por las y los entrevistados para justificar la conservación de una semilla. Los criterios propuestos surgen de la fundamentación de los informantes, sin embargo, los rótulos de estos fueron puestos por la autora a posteriori del relevamiento. El criterio comercial no fue cuantificado, pero sí descripto. Se consideró que dicho criterio opera para toda la diversidad cultivada dada la lógica de comercialización de la actividad relevada. RESULTADOS Y DISCUSIÓN ¿Se mantiene activa la conservación de semillas en los agroecosistemas familiares del CHP? Se documentaron 454 registros de plantas hortícolas cultivadas. El 53.7% (244) de los registros corresponde a cultivos cuyas semillas son conservadas in situ. Dicha agrobiodiversidad corresponde a una riqueza de 10 familias botánicas, 41 especies y 152 etnoespecies. El promedio de cultivos hortícolas por agroecosistema fue de 18, y 10 el de cultivos hortícolas conservados. Trabajos realizados en el CHP sugieren valores entre 6 y 35 especies (Stupino et al., 2008), y 1 y 19 cultivos por hectárea según Blandi et al., (2016). Estos resultados permiten ver que la autoproducción de semillas es una practica en vigencia para las y los agricultores del CHP. Sin embargo, al considerar los cambios históricos que ha transitado este territorio y el avance sobre el mismo del modelo de la Revolución Verde, es necesario profundizar en las particularidades de las semillas que se están conservando para comprender los dinamismos de esta práctica ancestral.

¿De dónde provienen las semillas que se están conservando? Los datos registrados permiten ver que la conservación de semillas es una práctica que involucra semillas de diferentes orígenes (Figura 2). Las 5 vías de ingreso de las semillas incorporadas a los agroecosistemas y que luego ingresan a la lógica de la autoproducción, dan cuenta de una situación compleja de vínculos y relaciones entre las y los agricultores, Instituciones estatales, mercados y el sistema de semillas industriales. Dos vías de ingreso son las más representadas. Por un lado, la conservación de semillas obtenidas por vínculos interpersonales, el conservar lo tradicional, las variedades locales, las semillas con historia familiar o semillas novedosas obtenidas en intercambios y, por otro lado,

103


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. María Margarita Bonicatto. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

la conservación ligada a semillas industriales. Esta segunda estrategia se une a semillas industriales ya sean de condición híbrida, o no, pero que cumplan con las exigencias del mercado, posicionándose como una alternativa de permanencia en el territorio ante los estándares de un modelo productivista que impone materiales genéticos acorde a criterios externos. En menor magnitud ingresan semillas desde Universidades o el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA). La resiembra espontanea refiere a cultivos años de permanencia en las producciones y que se resiembran naturalmente, pero cuya permanencia esta mediada por el deseo de las y los agricultores.

Figura 2:

Figura 2: Vías de ingreso de las semillas hortícolas conservadas en agroecosistemas familiares del Cinturón Hortícola Platense, Argentina. Es así, que la conservación de semillas se establece como una práctica dinámica y que acompaña los cambios del territorio. Esta situación se materializa en el lograr conservar semillas industriales y resignificar una práctica anteriormente ligada con exclusividad a la conservación de semillas obtenidas por vínculos interpersonales. Según Wood & Lenné (1997) las y los agricultores han demostrado la habilidad de generar diversidad de variedades y manejarla dinámicamente. Estos autores sostienen que el amplio acceso a la agrobiodiversidad del sistema formal, lejos de generar conflicto, se posiciona como una oportunidad 104


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. María Margarita Bonicatto. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

de complementariedad. Lo que queda claro, es que, para cada nuevo desafío, en este caso el deseo de conservar semillas, sean locales o industriales es necesario adaptar la práctica. Este nuevo reto sugiere una estrategia emergente y novedosa de un territorio complejo y mercantilizado y conlleva experimentación, aprendizaje, incorporación de conocimientos técnico-científicos, en definitiva, generación de nuevos conocimientos locales. Las particularidades de la conservación de semillas en el CHP nos invitan a preguntarnos las motivaciones de las y los agricultores para comprender con mayor profundidad la situación en torno a la conservación de diversidad biocultural de este territorio.

¿Qué motiva la conservación de semillas? A partir del análisis de las entrevistas se describieron 10 criterios que operan sobre la conservación de los cultivos hortícolas: Afectivo: vinculado a la historia familiar, a personas por las cuales se siente afecto. Culinario: tradición culinaria de la zona de origen/ recetas familiares. Innovador: actitud experimentadora, predisposición a incorporar semillas “raras”, desconocidas o re-encontradas. Independencia: representa la intención de independizarse en la compra de semillas. Medicinal: propiedades curativas. Diversificador: intención de incrementar la diversidad en la quinta. Morfológico: caracteres morfológicos y/u organolépticos. Productivo: intención de fortalecer servicios ecológicos. Económico: intención de ahorrar dinero. Comercial: venta del producto. A su vez, estos criterios operan de manera diferente según el origen de la semilla conservada. El 41,2 % de las semillas industriales se conserva por motivos económicos (criterio económico), seguido por el criterio morfológico (19,3%) e independencia (16,6%), exponiendo la realidad que se transita en cuanto a la necesidad de cumplir con las expectativas del mercado y buscar estrategias que reduzcan el costo implicado en la compra de semillas industriales. Un escenario diferente se plantea alrededor de la conservación de semillas obtenidas por intercambios, herencias, regalos. Esta conservación está ligada a una mayor diversidad de criterios que aquellas de origen industrial. En la conservación del 33,1 % de estas semillas interviene el criterio Innovador. Este criterio representa la actitud de experimentar, de conservar nuevos cultivos o de mejoramiento según criterios propios que históricamente a generado la gran diversidad biocultural agrícola. En concordancia con lo propuesto por Pochettino et al. (2011), el criterio afectivo (10.4%), culinario (10.4%) y medicinal (0,5%) con mayor o exclusiva presencia en la conservación de estas semillas, tienen la particularidad 105


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. María Margarita Bonicatto. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

de relacionarse a la diversificación para la casa, al hacer cotidiano de las familias en torno a la preparación de alimentos, atención de la salud y al mantenimiento de la historia familiar. Estos criterios, son comúnmente aquellos que perduran más en el tiempo, ya que inclusive continúan en la familia a través de los recuerdos y relatos, aún en ausencia del material genético necesario para su concreción. Este saber guardado en la memoria, permite que, ante la recuperación del material reproductivo, se ponga en juego el conocimiento, para sembrar la semilla deseada y reactivar el saber y la práctica. En cuanto a las semillas obtenidas de instituciones estatales, así como aquellas de resiembra espontánea, están ligadas principalmente al criterio innovador. Este motivo representa la inquietud o curiosidad por probar el cultivo de nuevas semillas hortícolas. Por último, las semillas conservadas cuyo ingreso se dio a través de la recolección en el mercado, verdulerías, espacios públicos, sustentada por el criterio culinario y económico, expone una práctica de subsistencia ligada al ahorro de dinero para la alimentación diaria. La complejidad que otorgan las y los agricultores familiares a los motivos por los cuales conservan determinadas semillas, se relaciona con la dimensión económica, ecológico productiva y sociocultural de la vida de las familias agricultoras. Es a través de estos criterios, que es posible interpretar los momentos vinculados al hogar, su economía, la salud y tradiciones. A su vez, expresan las coyunturas actuales y nos permiten ser testigos de cómo, aun en presencia de un contexto desfavorable, que presiona para la desaparición de aquellos cultivos sin “lugar” en el mercado concentrador, los agricultores y agricultoras del Cinturón Hortícola Platense mantienen dinámico el cultivo y la autoproducción de hortalizas que responden a sus gustos y tradiciones y permanecen “ocultas” ante una mirada productivista del territorio.

¿Qué impedimentos para la conservación se visualizan? El tiempo que las semillas pasan esperando ser sembradas, así como el origen y la condición de la semilla que se desea conservar, son decisivos para lograr con éxito el aumento de la agrobiodiversidad basado en semillas de autoproducción. Durante las entrevistas realizadas 24 de los 26 interlocutores describieron alguna dificultad en torno al proceso de conservación de semillas, uno de ellos no conserva semillas y el otro dijo no tener problemas.

106


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. María Margarita Bonicatto. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

A partir de los relatos se describieron cinco categorías que agrupan las dificultades mencionadas: 1. Bióticas y abióticas: la cual incluye semilla comidas por ratas, polillas, gusanos, o semillas perdidas por humedad. 2. Ecológicas: incluye aquellas semillas que no se adaptaron a las condiciones ambientales. Esta dificultad está vinculada a semillas obtenidas por intercambio o traídas de otras zonas del país y del mundo. 3. Recursos productivos: incluye aquellas dificultades sujetas a la insuficiente superficie productiva para poder dejar los surcos ocupados con las hortalizas semillando. A la falta de mano de obra necesaria para la cosecha, limpieza y acondicionamiento, y a la tenencia de la tierra, la cual limita las posibilidades de decisión sobre las tareas y cultivos a realizar al no ser propietarios. 4. Tecnológicas: la imposibilidad de conservar semillas cuando son de condición híbrida, o en el caso de hacerlo, la obtención de un producto poco homogéneo, o que no cumple con los estándares del mercado. 5. Políticas: vinculado a la imposibilidad de ingresar semillas deseadas desde otras regiones u otros países. El principal factor que limita la conservación de semillas según las entrevistas realizadas es la variable tecnológica (38%). El desánimo generado ante una semilla de condición híbrida, que en palabras de las y los entrevistados “no se puede guardar” o que “se degenera, no te rinde, y le pones el mismo trabajo que si fuese comprado”, estaría accionando como la mayor dificultad que atraviesa esta práctica. Sin embargo, esta limitante, a la vez que condiciona la conservación en el tiempo, también estimula la actitud innovadora que deviene en nuevos conocimientos que les permiten sortear el obstáculo ligado a su conservación. Las categorías bióticas y abióticas (26% de las menciones) y recursos productivos (24% de las menciones), se vinculan entre sí en relación con las características internas del agroecosistema. Estas dos categorías muestran necesidades en los recursos de la producción necesarios para una exitosa conservación de semillas. La insuficiente mano de obra y disponibilidad y tenencia de tierra, actúan restringiendo el cumplimiento del ciclo completo que hace a la conservación in situ. La categoría dificultades ecológicas (9,6% de las menciones) implica semillas que fueron obtenidas en intercambios en zonas con diferentes condiciones

107


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. María Margarita Bonicatto. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

ecológicas o ingresadas a raíz de viajes. Por último, la dificultad política (2,4% de las menciones) refiere a semillas que no llegaron a ser sembradas por ser retenidas en la aduana. Esta situación invita a reflexionar sobre los históricos viajes y migraciones que han realizado las personas junto a las semillas que les identifican, y que hubiese sido de los pueblos migrantes si sus cultivos, sus tradiciones y simbolismos no las y los hubieran acompañado.

CONCLUSIONES Si bien en el Cinturón Hortícola Platense las prácticas hortícolas y los conocimientos que las orientan son el resultado de un tiempo relativamente corto de experiencia de las agricultoras y agricultores con el entorno local, pueden considerarse conocimientos y prácticas ligadas a tradiciones e incorporaciones tecnológicas, que han resultado en nueva agrobiodiversidad y en acciones sobre el entorno. Dichas prácticas y conocimientos reflejan la adaptación a la situación socioambiental, por ejemplo, la presencia de tradiciones familiares, las preferencias culinarias, las estrategias desarrolladas para subsistir ante un mercado exigente en estética y rendimiento y la diversidad de criterios que operan en la conservación in situ. Así, la puesta en práctica de la autoproducción de semillas, mediada por los conocimientos implicados, se retroalimenta, para dar continuidad a la conservación de diversidad biocultural. En base a los relatos que sustenta este trabajo se destaca una característica fundamental para la continuidad de esta práctica. La cualidad de las agricultoras y agricultores a favor de la exploración y experimentación. En esta actitud de aprendizaje, de adaptación al cambio, está la clave de la resiliencia. En este contexto, las múltiples variables y alternativas para conservar semillas se establecen como un conjunto de herramientas puestas en juego cuando el contexto lo amerita. En estas estrategias se funden conocimientos provenientes de diferentes vías. La vinculación con otros actores del territorio, la interpretación y adaptación de los conocimientos sean científicos o locales abre las puertas a nuevos escenarios. Según Toledo & Barrera-Bassols (2008) los saberes locales no son sistemas estáticos sino diseños innovadores alimentados por redes sociales y sus relaciones internas y externas. En este sentido, la incorporación de vocabulario y prácticas provenientes de otros ámbitos, la inquietud y generación de preguntas, la experimentación y puesta a prueba de las ideas, se posicionan como elementos que indican una actitud comprometida con la conservación de agrobiodiversidad. En definitiva, este proceso ocurrido tanto en el plano individual como grupal genera capacidades aplicadas y aplicables durante la conservación de 108


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. María Margarita Bonicatto. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

semillas, ¿qué semillas? algunas serán rarezas obtenidas en intercambios, o variedades ligadas a la historia familiar, semillas obtenidas a través de Instituciones o recolectadas eventualmente, mientras que otras serán semillas industriales obtenidas en comercios. En este punto, todas ellas, accionan para el mantenimiento en el tiempo de la práctica de conservación in situ. Queda claro que estas semillas son conservadas a través de una práctica dinámica, que es a la vez ancestral y actualizada, que hoy en día se materializa, perdura y resignifica a través de la conservación de semillas de diferentes orígenes, expresando la actitud investigativa de quienes las conservan. Nuevos interrogantes surgen para futuros estudios en un territorio que cuenta con agricultoras y agricultores que producen sus propias semillas. ¿Conservarán las generaciones más jóvenes variedades locales ligadas a la soberanía alimentaria? ¿se están transmitiendo generacionalmente los saberes sobre conservación? qué pasará con aquellos saberes que no se están utilizando?, en caso de que el costo de las semillas industriales bajase y el criterio económico dejara de estar presente ¿se seguirían conservando estas semillas? es decir, ¿se hacen propios los criterios externos de selección de las semillas de origen industrial? Mientras tanto, las agricultoras y agricultores familiares conviven con el modelo productivo de la Revolución Verde mientras que custodian la diversidad biocultural del Cinturón Hortícola Platense. La clave del mantenimiento de esta agrobiodiversidad está en las semillas que ellas y ellos conocen, cultivan, usan, conservan y se resisten a perder. AGRADECIMIENTOS: A las familias del Cinturón Hortícola Platense que compartieron su tiempo, sus saberes y semillas.

109


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Federico Del Cura Delgado. Biorediberoamérica, Nodo Venezuela

referencias Altieri, M.A. 2000. Biodiversidad multifuncional en la agricultura tradicional latinoamericana. Boletín de ILEIA Pp.14. Berkes, F. 1993. Traditional ecological knowledge in perspective, en: J.T. Inglis (editor). Traditional ecological knowledge: Concepts and cases. Pp. 1-9. International Development Research Centre, Ottawa, Canadá. Blandi, M.L.; M.S. Cavalcante; N.A. Gargoloff & S.J. Sarandón. 2016. Prácticas, conocimientos y percepciones que dificultan la conservación de la agrobiodiversidad. El caso del Cinturón Hortícola Platense, Argentina. Cuadernos de Desarrollo Rural, 13 (78): 97-122 Bonicatto, M.M.; S.J. Sarandón & M.L. Pochettino. 2009. El concepto de “semilla” y su relación con la agrobiodiversidad en una zona hortícola (Buenos Aires, Argentina). Actas del Vth Internacional Congress of Ethnobotany. 21 al 24 de septiembre de 2009. Bariloche. Bonicatto, M.M.; V. Fernández, N.A. Gargoloff, M. Marasas, L. Muscio, M. Pérez & M.L. Pochettino. 2010. Sembrando Esperanza. III Feria Provincial de Semillas Nativas y Criollas. En defensa de la vida y de la soberanía alimentaria. Por una economía solidaria, construyendo la casa de todos. Ediciones INTA. Publicaciones IPAF- Región Pampeana. La Plata, Argentina. Bozzano, H. 2003. La Plata, sistemas de objetos, sistemas de acciones. Propuesta de territorialización, en: Pensar La Plata. Políticas públicas, sociedad y territorio en la década de los noventa. Contribuciones desde la geografía, ed. P. Pintos, 173–201. La Plata, Argentina: Ediciones Al Margen. Cieza, R.I. 2004. Asesoramiento profesional y manejo de nuevas tecnologías en unidades de producción hortícolas del gran La Plata, Argentina. Scientia Agraria 5 (1-2): 79-85. Cieza, R.I.; G. Ferraris, C. Seibane, G. Larrañaga & L. Mendicino. 2015. Aportes a la caracterización de la agricultura familiar en el Partido de La Plata. Revista Facultad de Agronomía La Plata. 114 (Núm. Esp.1) Agricultura Familiar, Agroecología y Territorio: 129-142. Dirección Provincial de Estadística. 2005. Censo Hortiflorícola de la Provincia de Buenos Aires. La Plata, Ministerio de Asuntos Agrarios, Dirección Provincial de Economía Rural, Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, Ministerio de Economía. Gadgil, M.; F. Berkes & C. Folke. 1993. Indigenous knowledge for biodiversity conservation. Ambio 22 (2/3):151-156. Garat, J.J.; A. Ahumada, J. Otero, L. Terminiello, G. Bello & M.L. Ciampagna. 2009. Las Hortalizas típicas locales en el Cinturón verde de La Plata: Su localización, preservación y valorización. Horticultura Argentina 28 (66) 32-39. Garat, J.J.; A. Castro, S. Gramuglia, A. Nico & A. Ahumada. 2007. El rescate de la biodiversidad local y la acción colectiva: una estrategia de desarrollo a través de la revalorización de hortalizas locales en el cinturón verde de La Plata, Buenos Aires, Argentina. Revista Brasilera de Agroecología 2 (1): 430-434. García, M. 2012. Análisis de las transformaciones de la estructura agraria hortícola platense en los últimos 20 años. El rol de los horticultores bolivianos. Tesis doctoral. Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales, UNLP. 432pp. Disponible en: http://hdl. handle.net/10915/18122 Harwood, R.R. 1979. Small farm development-understanding and improving farming systems in the humid tropics. Westview Press, Boulder, CO.

110


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Federico Del Cura Delgado. Biorediberoamérica, Nodo Venezuela

referencias Hilgert, N. 2007. La Etnobotánica como herramienta para el estudio de los sistemas de clasificación tradicionales, en: A. Contreras-Ramos.; C. Cuevas Cardona.; I. Goyenechea & U. Iturbe (editores). La sistemática, base del conocimiento de la biodiversidad. México: Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo. Hunn, E.S. 2002. Evidence for the precocious acquisition of plant knowledge by Zapotec children, en: J.R. Stepp, F.S. Wyndham and R. Zarger (editores). Ethnobiology and biocultural diversity. Pp. 604– 613. University of Georgia Press. Lambaré, D. A., & M.L. Pochettino. 2012. Diversidad local y prácticas agrícolas asociadas al cultivo tradicional de duraznos: Prunus persica (Rosaceae), en el Noroeste de Argentina. Darwiniana, nueva serie, 50(2), 174-186. Maffi, L. 2005. Linguistic, Cultural, and Biological Diversity. Annual Review of Anthropology 29:599–617. Nicholls, C.I. 2013. Enfoques agroecológicos para incrementar la resiliencia de los sistemas agrícolas al cambio climático, en: C.I. Nicholls Estrada.; L.A. Ríos Osorio, & M.A. Altieri (editores.) Agroecología y resiliencia socioecológica: adaptándose al cambio climático, pp. 18-29. Medellín, Colombia: REDAGRES-CYTED Pochettino, M.L. 2015. Botánica Económica. Las plantas interpretadas según tiempo, espacio y cultura. Sociedad Argentina de Botánica. Buenos Aires, Argentina. Pochettino, M.L.; V. Fernández, N.A. Gargoloff, L. Muscio, L. Pérez, L. González Espinosa, M.M. Bonicatto, M. Pérez, A. Cremaschi, E. Barreto, M.P. May, J. Cababié & M.E. Marasas 2011. I Feria Nacional, IV Feria Provincial de Semillas Nativas y Criollas. “Sembrando Esperanza”. Editorial INTA. Reyes-García, V. & N. Marti Sanz. 2007. Etnoecología: punto de encuentro entre naturaleza y cultura. Ecosistemas 16 (3): 46-55. Staviski, A. 2010. Situación de la plasticultura en Argentina. Actas XXXIII Congreso Argentino de Horticultura. Rosario. Santa Fe. ASAHO. Stupino, S.A.; J.L. Frangi, S.J. Sarandón M.F. Arturi & A.C. Ferreira. 2008. Plant diversity in two farms under organic and conventional management in La Plata, Argentina. A case study. Revista Brasilera de Agroecología, Asociación Brasilera de Agroecología, 3 (3): 24-35. Terralingua. 2010. Published on the Internet: http://www.terralingua.org/basics/intro. html [consulta noviembre de 2016]. Toledo, V. M. & N. Barrera-Bassols. 2008. La memoria biocultural. La importancia ecológica de las sabidurías tradicionales. Serie Perspectivas Agroecológicas. Ícara. Barcelona. Veteto, J.R. 2014. Seeds of Persistence. Agrobiodiversity in the American Mountain South. Culture, Agriculture, Food and Environment 36 (1) 17-27. Wood, D. & J.M. Lenné. 1997. The conservation of agrobiodiversity on-farm: questioning the emerging paradigm. Biodiversity and Conservation 6: 109-129.

111


Fotografia: Jose Quintero


Necesidad de incorporación del enfoque de género en el conocimiento sobre la biodiversidad Viviana Blanco Laboratorio de Investigación y Reflexión en Agroecologia, Departamento de Desarrollo Rural, Facultad de Cs. Agrarias y Forestales, Universidad Nacional de La Plata, Argentina.

INTRODUCCIÓN: A partir de un cuestionamiento a la revolución verde, surge la Agroecología que parte del reconocimiento de que ese paradigma de la agricultura, hasta hoy hegemónico, generó importantes consecuencias negativas en términos de exclusión social, degradación de medioambiente, y dependencia económica. La Agroecología, como enfoque multidisciplinar y pluriepistemológico, surge como el paradigma adecuado para intentar resolver los problemas ecológicos y sociales ocasionados por la revolución verde. Desde este nuevo paradigma contrahegemónico1, se busca reemplazar las tecnologías insumo dependientes de la revolución verde por otras basadas en procesos ecológicos. Esto se consigue a través del rediseño de los agroecosistemas hacia modelos de base agroecológica. Para ello, uno de los elementos centrales es el conocimiento y el manejo de la biodiversidad cultivada y espontánea, cuyo rol es brindar bienes y servicios ecológicos para el reciclado de nutrientes, control de plagas y enfermedades y mantener una amplia disponibilidad de genes, aspectos que resultan especialmente importante para la pequeña agricultura, cuyos actores no siempre cuentan con capital de trabajo para la compra de insumos. Teniendo como objetivo el rediseño de los sistemas productivos, la Agroecología, que se autodefine como práctica, ciencia y movimiento, apunta, entre otras cosas, al rescate de los saberes de los agricultores familiares, campesinos e indígenas. Estos conocimientos son de carácter local, situado y, en general, ecológicamente sustentables están asociados 1

Hegemonía en términos de Gramsci, se refiere a la dominación cultural y política de las clases dominantes, que imponen como norma culturalmente aceptada, su ideología, valores y creencias (entre otras), sobre la sociedad.

113


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Viviana Blanco. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

a formas de producción y de organización que buscan el equilibrio entre tres dimensiones, la socioeconómica y cultural, la ecológica y la política.

La importancia de la Biodiversidad en los agroecosistemas Varios estudios reconocen el rol que la biodiversidad cumple en los ecosistemas, y la utilidad que ésto tiene para la humanidad. Nuestra supervivencia como especie depende de ello, a tal punto que en el marco de las Naciones Unidas (ONU), el 5 de junio de 1992 se firmó el Convenio de diversidad biológica, que apunta justamente a, conservar la biodiversidad, la utilización sostenible de sus componentes, y la distribución justa y equitativa de los beneficios que deriven de su utilización. La Conferencia de las partes (COP V), realizada en el año 2000 en Nairobi, definió qué es la Agrobiodiversidad y cómo está compuesta, a la vez que destacó el lugar que tiene la cultura en el conocimiento, manejo y preservación de la agrobiodiversidad. La pregunta que cabría es ¿por qué debemos considerar los aspectos culturales en la conservación de la agrobiodiversidad? La respuesta es clara, porque todo lo que se hace, cómo se hace, para qué se hace, y quién lo hace, en los agroecosistemas, está determinado por la cultura propia, particular, de cada tiempo y lugar. Esto marca una profunda diferencia con los ecosistemas naturales. El convenio de diversidad bilógica reconoce una coevolución, a veces milenaria, o de siglos, entre la diversidad biológica y el conocimiento tradicional local de los agricultores y agricultoras, las comunidades campesinas y originarias. Esta coevolución ha permitido la adaptación de las especies a su entorno, junto a un conocimiento asociado a ese proceso, que permanece en manos de las comunidades. En este devenir, que está en continua transformación, las comunidades han podido desarrollar prácticas e innovaciones, obtenidas a partir de la experiencia acumulada durante tantos años. La Agroecología, que reconoce la existencia de una estrecha relación entre la dimensión cultural y biológica, demuestra y acepta que el conocimiento sobre las funciones, el manejo y la conservación de la biodiversidad está, también, en mano de los agricultores y agricultoras. Y, además, propone que, para poder rescatar ese conocimiento es necesario construir una relación dialógica entre la academia, técnicos y profesionales, junto a productores y productoras, cuyas vivencias, 114


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Viviana Blanco . Biorediberoamérica, Nodo Argentina

saberes y valoraciones sobre agrobiodiversidad, resultan fundamental para diseñar y manejar agroecosistema de manera sustentable. Este conocimiento, al menos de manera teórica ha comenzado a ser reconocido y comprendido por la Agroecología. Sin embargo, llevarlo a la práctica no siempre resulta sencillo, y, muchas veces, no conocemos o no disponemos de las herramientas necesarias para hacerlo. Por otro lado, lo que la experiencia nos indica, es que a partir de una visión androcéntrica2 del mundo, que invisibiliza a las mujeres y niega la mirada femenina, este diálogo epistemológico entre el saber científico, universal y teórico, con el conocimiento de campesino, empírico y anclado localmente lleva, en general, a identificar como “productores portadores de saberes”, sólo a los varones, ocultando y desconociendo todo el bagaje que tienen las mujeres. Por lo tanto, para poder comprender más acabadamente lo que ocurre en los espacios rurales, incorporamos al análisis el aporte conceptualmetodológico del enfoque de género, entendiendo que, en el marco de procesos agroproductivos, varones y mujeres en relación directa con su entorno natural generan estrategias y prácticas en las que ponen en juego sus conocimientos y sus saberes, algunos compartidos y otros diferenciados por género. Sin embargo, debemos aclarar primero algunos conceptos.

¿De qué hablamos cuando hablamos de género? En primer lugar, género no es lo mismo que sexo, ni tampoco hablar de género es hablar de mujeres. Vamos aclarando estas ideas: sexo (ver Figura 1) se refiere a las características biológicas que vienen dadas por la naturaleza, y que divide a la humanidad, prácticamente en dos categorías: macho/hembra, hombre/mujer.

2

El androcentrismos es la visión parcial del mundo, que sitúa al hombre como centro de todas las cosas. “Es la visión a través de la cual se cree que todo lo que ha realizado la humanidad ha sido realizado por los hombres, es creer que la experiencia masculina incluye y es medida de las experiencias humanas”. (Meana Suarez 2002:2)

115


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Viviana Blanco. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

Figura 1: Relación Sexo – Género, construcción social de las diferencias

Elaboración propia En cambio, cuando hablamos de género nos referimos relaciones construidas culturalmente. Estas relaciones son singulares de cada lugar y tiempo, y determinan lo que se espera de hombres y mujeres para ser aceptados por la sociedad; son ese cúmulo de cualidades que adquirimos en nuestro proceso de socialización, en el que aprendemos e incorporamos, las mujeres lo femenino, y los varones lo masculino. Este proceso se refleja en estereotipos, roles y funciones de género (Cuadro 1). Cuadro1: Estereotipos, roles y funciones en la ruralidad

Elaboración propia

116


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Viviana Blanco . Biorediberoamérica, Nodo Argentina

Ahora bien ¿es ésto un problema? En sí mismo, no debería serlo. Sin embargo, ocurre que los roles y funciones asignados a los varones, vinculados a lo económico-productivo, a la representación política y al espacio público están social y económicamente valorados positivamente, mientras que los asignados a las mujeres, asignados al espacio privado, están invisibilizados y no tienen reconocimiento social ni económico. Esto implica que cuando una sociedad, en un momento histórico dado, determina qué es ser mujer y qué es ser varón, coloca a las mujeres en condición subalterna respecto de los varones, justificando y legitimando mecanismos de exclusión y dominación social, cultural, económica y política sobre ellas (Lamas, 1996). Estas jerarquías atraviesan trasversalmente a las sociedades, y en los espacios rurales pueden estar entrecruzadas con otras opresiones como la de clase y de etnia. Vemos entonces que al hablar de género debemos considerar dos dimensiones de análisis: una cultural, en donde se construyen las relaciones de género, y otra política, sobre las que se manifiestan las desigualdades de género. Estas dimensiones, se expresan juntas y son complementarias, y pueden medirse a través de las “brechas de género” entre varones y mujeres. Comúnmente, esas brechas se expresan en las diferencias de oportunidades respecto al acceso y ejercicio de derechos, en la participación pública y política, en el reconocimiento económico, productivo, cultural y social, entre otros. Entonces ¿cómo se expresan estas jerarquías en el medio rural? Para comenzar, debemos considerar que las ideas que propondremos se restringen a la experiencia acumulada en los modelos de agricultura familiar y campesina en Argentina. En ellos, el ámbito de lo productivo y lo doméstico se solapan, porque el lugar de trabajo, la unidad de producción es también el sitio donde vive la familia, y donde ella realiza el trabajo productivo, sin distinción de sexo y edad. En estos sistemas, tanto para la ciencia, para la academia, y para los servicios de extensión, la idea que prevalece sobre quién es “productor”, es la de un varón adulto: luego, los jóvenes varones trabajan, y las mujeres jóvenes y adultas “ayudan”. Es decir, el trabajo de ellas, aunque muchas veces igual en dedicación al de los varones, queda invisibilizado, y reducido a una “extensión del trabajo doméstico”. Tan es así, que ni las mismas mujeres se reconocen como productoras, y suelen decir de ellas mismas: “yo no trabajo, el que trabaja es mi marido (o en tal caso mi hijo), …yo solo ayudo…” 117


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Viviana Blanco. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

Las consecuencias son claras, la perspectiva androcéntrica llevará a creer que, al hablar con los varones, se tendrá una visión del todo, y aquí se materializan las jerarquías. Porque, si las mujeres no son registradas, miradas, consideradas como productoras, ellas van a tener restringido el acceso al uso y control (las decisiones) sobre los recursos productivos, así como a los ingresos que su trabajo genera. Y tampoco serán identificadas como destinatarias de los servicios de asistencia técnica, ámbito en el que los valores, los conocimientos y el saber-hacer que las mujeres portan en general, y en particular sobre la biodiversidad, serán desconocidos y desaprovechados. Y es aquí donde debemos poner especial atención ya que, desde el paradigma agroecológico, se reconoce la importancia del enfoque de género, como herramienta teórico-metodológica de aproximación a la realidad de los territorios rurales. Sin embargo, se percibe que la Agroecología aún está en una etapa incipiente de su utilización, apenas sobrepasando lo discursivo, y esto se debe en parte, a dificultades metodológicas para el abordaje del enfoque de género en la ruralidad. Pero también y, sobre todo, a que somos producto de una sociedad que nos formó culturalmente, varones y mujeres, para vivir, aceptar y reproducir las jerarquías. La pregunta entonces, es, ¿por qué funcionan y se reproducen las jerarquías en las relaciones de dominación? ¿por qué opresores y oprimidas, las aceptamos como jerarquías “naturales”? Los aportes teóricos del sociólogo francés Pierre Bourdieu, nos brindan algunos elementos para comprender mejor estos procesos de reproducción. Para este autor, existen en el mundo social, estructuras objetivas, independientes de la conciencia y de la voluntad de las personas, que orientan y coaccionan nuestras prácticas, nuestro modo de percibir, de pensar y de actuar. Estas estructuras de génesis social están, son “estructuras estructurantes” de lo individual, la mediación entre lo social (la estructura), y lo individual (la estructuración), es lo que el autor define como habitus3 . En su obra, “La dominación masculina”, Bourdieu expresa: 3

El habitus se define como un sistema de disposiciones durables y transferibles -estructuras estructuradas predispuestas a funcionar como estructuras estructurantes- que integran todas las experiencias pasadas y funciona en cada momento como matriz estructurante de las percepciones, las apreciaciones y las acciones de los agentes cara a una coyuntura o acontecimiento y que él contribuye a producir” (Bourdieu, 1972: 178, en Diccionario crítico de ciencias sociales).

118


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Viviana Blanco . Biorediberoamérica, Nodo Argentina

“…son las diferencias visibles entre el cuerpo femenino y el cuerpo masculino las que, al ser percibidas y construidas de acuerdo con los esquemas prácticos de la visión androcéntrica, se convierten en el garante más indiscutible de significaciones y de valores que concuerdan con los principios de esta visión del mundo…. esta visión del mundo, al estar organizada de acuerdo con la división de género relacionales, masculino y femenino, puede instituir el falo, y la diferencia entre los cuerpos biológicos, en fundamentos objetivos de la diferencia entre los sexos, en el sentido de géneros construidos como dos esencias sociales jerarquizadas” (Bourdieu 2000: 20). Estas relaciones sociales jerarquizadas, son adquiridas y reproducidas a través del habitus de género. Por lo tanto, si estas relacione sociales han sido construidas de esa manera, podemos reconocerla y cambiarlas, y para ello necesitamos un cambio cultural, debemos vencer ciertas resistencias que permanecen ocultas y naturalizadas, las que se expresan en discurso y actitudes que tienden a mantener el statu quo.

Diferenciación de género en el conocimiento local de la agrobiodiversidad: Entonces, si esto es así, debemos asumir que cuando hablamos de conocimiento local sobre agrobiodiversidad, éste es el que poseen agricultores y agricultoras, campesinos y campesinas, hombres y mujeres pertenecientes a comunidades originarias. Y esto es tan efectivamente así, que la COP 12 del CDB realizada en Corea en octubre de 2014, aprobó el “Plan de acción de género 2015-2020 (PAG 2015-2020), en el marco del Convenio sobre Diversidad biológica”. El PAG, “define la función que la Secretaría del Convenio sobre la Diversidad Biológica desempeñará en esfuerzos de estimulación y facilitación, tanto internos como de socios y Partes a nivel nacional, regional y mundial, para aprovechar oportunidades de promoción de la igualdad entre los géneros en su propia labor y vencer las limitaciones que la obstaculizan” (UNEP/CBD/COP/DEC/XII/7, 2014:2) Así mismo, se propone en su tercer objetivo estratégico, “demostrar los beneficios de la incorporación de la perspectiva de género”, y la necesidad de garantizar para las mujeres “la participación justa y equitativa de los beneficios que se deriven de la utilización de los recursos genéticos.” Por otro lado, el PAG avanza, proponiendo dentro de sus acciones, la identificación de miembros de comunidades indígenas y locales para que

119


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Viviana Blanco. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

promuevan la incorporación de consideraciones de género y diversidad, en sus estrategias y planes de acción nacional en materia de biodiversidad. Para ello, apela a reconocer los conocimientos tradicionales y prácticas consuetudinarias que poseen hombres y mujeres con respecto a la protección de la diversidad biológica, e incorporarlos, “…y aprovecharlos para apoyar la aplicación de las estrategias y planes de acción nacionales en materia de biodiversidad” (UNEP/CBD/COP/DEC/XII/7, 2014:4).

Algunos ejemplos: Si bien sobre este tema hay mucho escrito, nos interesa en este punto tomar los aportes de Husinga4 1993), quien, describe cuatro diferenciaciones de género sobre el conocimiento local para el manejo de sistemas biológicos: 1. Los varones y las mujeres tienen conocimientos sobre cosas diferentes 2. Los varones y las mujeres tienen conocimientos diferentes sobre las mismas cosas; 3. Los varones y las mujeres pueden estructurar sus conocimientos de maneras diferentes; 4. Los varones y las mujeres pueden recibir y transmitir sus conocimientos utilizando diferentes medios. Algunos de estos elementos señalados por Husinga, se reflejan en la práctica cotidiana de agricultores y agricultoras, y población indígena. La FAO, reconoce que las mujeres tienen un rol fundamental en la recolección de plantas silvestres, su domesticación, y preservación de las semillas. Esta función es muy importante, porque más allá del valor de la conservación ex situ, hay que reconocer la necesidad de la conservación in situ, y este tipo de conservación de la biodiversidad está determinado por factores culturales. Es así como, desde esta perspectiva, se rescata el valor que tiene el mantenimiento de “pool” genético, pero, además, se reconoce el valor del conocimiento asociado a él. Es decir, cada especie

4

Husinga, N (2001) “Indigenous agricultural knowledge and gender issues in Third World Agricultural Development, cited in Food And Agriculture Organization of the United Nationos, Socio-Economic and Gender Analysis Programme, FAO. Roma.

120


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Viviana Blanco . Biorediberoamérica, Nodo Argentina

domesticada, y conservada es acompañada del conocimiento de cuál es su ciclo, fechas de siembra y cosecha, sus particularidades morfológicas y fisiológicas, cómo se cultiva, consociaciones más adecuadas, cómo interactúa con otros cultivos y con los polinizadores, para qué se usa, qué propiedades tiene. Otro ejemplo es el rol que cumplen las mujeres como guardianas de las semillas de variedades nativas, y/o localmente adaptadas. En este caso, la FAO reconoce que las mujeres producen, seleccionan y almacenan hasta el 90 por ciento de las semillas y el germoplasma que es utilizado como material de siembra por los(as) pequeños(as) agricultores(as). La FAO también da cuenta de los diferentes conocimientos y preferencias que tienen varones y mujeres acerca de la biodiversidad y su uso, por ejemplo, las mujeres reconocen en la agrobiodiversidad una fuente de provisión de alimentos para el autoconsumo, plantas medicinales y aromáticas, así como es destacable su conocimiento sobre el manejo de los animales de granja y de la pequeña ganadería. Por este motivo, ellas pueden seleccionar animales y plantas para el consumo, por el sabor, el tiempo de cocción, la facilidad con que se encuentran y cosechan, tiempo de preservación entre otras cualidades. Esto marca una sustancial diferencia con los varones, para quienes es más común que a la hora de disponer sobre la biodiversidad, pongan su atención en aquellos elementos vinculados a lo productivo y comercial. Otros estudios con mujeres han observado que los cultivos de plantas medicinales son realizados por ellas en espacios que resultan de la ampliación de los huertos familiares, y que el conocimiento sobre el cultivo y uso de las plantas medicinales está relacionado al rol del cuidado (prevención y tratamiento de enfermedades), asignado a las mujeres dentro de las familias (Marques, 2008). CONCLUSIONES: La biodiversidad ha sido señalada como un elemento fundamental e irremplazable a la hora de diseñar y manejar agroecosistemas sustentables, a la vez que representa un mecanismo de inclusión productiva para aquellos productores y productoras familiares y campesino-indígenas que no siempre cuentan con el dinero necesario para una agricultura de altos insumos. El CDB reconoce el rol de los productores y productoras en la conservación de la biodiversidad. Por lo tanto, es fundamental rescatar la valoración,

121


Cuadernos de la BioRed . Cuaderno 6 - Diciembre 2018. Viviana Blanco. Biorediberoamérica, Nodo Argentina

el conocimiento y las prácticas de manejo que agricultoras y agricultores realizan en el medio rural. El CDB reconoce, además que el conocimiento asociado a la conservación y manejo de la agrobiodiversidad es cultural, y está diferenciado por género. Este conocimiento es sumamente valioso para el diseño de agroecosistemas sustentables, así como para conservar in situ las variedades nativas y localmente adaptadas. La Agroecología, que surge como un nuevo paradigma que pretende dar solución a los problemas económicos, ecológico-productivos, y sociales que generaron las tecnologías de la revolución verde, reconoce el valor de los conocimientos en manos de agricultores y agricultoras, para el diseño de agroecosistemas sustentables. Fruto de la mirada androcéntrica que prevalece en la sociedad, y de la cual la academia, la ciencia y la tecnología forman parte, el diálogo epistemológico que debería darse con agricultores y agricultoras, está siendo sesgado sólo hacia el reconocimiento de los varones como únicos interlocutores válidos, dejando fuera a las mujeres con todo su bagaje de conocimientos. Por lo tanto, y a fin de poder comprender acabadamente de lo que estamos hablando, es indispensable incorporar los elementos teóricometodológicos que aporta el enfoque de género, para ampliar nuestras miradas, venciendo los rasgos culturales que portamos, que alimentan el androcentrismo, y así rescatar los conocimientos sobre el uso, manejo y conservación de la agrobiodiversidad que portan las mujeres, para incorporarlas a ellas y sus valores a las decisiones sobre el diseño de agroecosistemas sustentables.

122


Referencias y contactos Bourdieu, P (2002). La dominación masculina. Editorial Anagrama, Barecelona. http://www.nomasviolenciacontramujeres.cl/wp-content/uploads/2015/09/BondiuPierre-la-dominacion-masculina.pdf Husinga, N (2001) “Indigenous agricultural knowledge and gender issues in Third World Agricultural Development, cited in Food And Agriculture Organization of the United Nations, Socio-Economic and Gender Analysis Programme, FAO. Roma. Lamas M (1999). “Género: los conflictos y desafíos del nuevo paradigma” (9 pp), en “El siglo de las mujeres, Portugal y Torres, editoras. ISIS Internacional. Ediciones de las mujeres N° 28. Marques F (2008). Biodiversidad y salud: casos de trabajos comunitarios de mujeres agricultoras en la región sur de Brasil. Cuaderno de Resúmenes. VIII CONGRESO SEAE sobre “Cambio climático, biodiversidad y desarrollo rural sostenible”. IV Congreso Iberoamericano Agroecología y II Encuentro Internacional de Estudiantes de Agroecología y Afines. BULLAS (Murcia). 16 - 20 de septiembre 2008. Mouffe, C (2013) Hegemonía y educación en Gramsci. https://elsudamericano.files.wordpress.com/2013/06/hegemonia-e-ideologia-engramsci-mouffe.pdf Criado E M (2009). En Reyes R, Diccionario crítico de Ciencias Sociales. Editorial Plaza y Valdés, Mexico y Madrid, 2009. ISBN 978-84-96780-14-9. Nómadas. Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas – ISSN 1578-6730 https://webs.ucm.es/info/eurotheo/diccionario/index_b.html Sarandón SJ & CC Flores (2014). Agroecología: Bases teóricas para el diseño y manejo de Agroecosistemas sustentables. SJ Sarandón & CC Flores, (Editores) Programa Edición Libros de Cátedra, Editorial Universidad Nacional de La Plata, Universidad Nacional de La Plata, Arg. 1a ed. - La Plata : Universidad Nacional de La Plata, 2014. 460 pp. E-Book: ISBN 978-950-34-1107-0. http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/37280 Scott J (1996). El género: Una categoría útil para el análisis histórico. En: Lamas Marta Compiladora. El género: la construcción cultural de la diferencia sexual. PUEG, México. 265-302p. Toledo VM (2005) La memoria tradicional: la importancia agroecológica de los saberes locales. LEISA, Revista de Agroecología. Abril 2005. (pp 16-19). UNEP/CBD/COP/DEC/XII/7 (2014) Conferencia de las partes en el Convenio sobre la diversidad biológica. República de Corea. 6 al 17 de octubre de 2014 co




Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.