Niza renace de sus cenizas

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LA

CAPITAL DE LA

CÔTE D’AZUR –LA

QUINTA CIUDAD MÁS IMPORTANTE DE

FRANCIA–

SE RESISTE A PERDER ESA

IMAGEN DE PARAÍSO TERRENAL Y GLAMOROSO QUE CULTIVÓ A TRAVÉS DE LOS AÑOS.

AUNQUE

LOS OPERATIVOS DE

SEGURIDAD SON MÁS PALPABLES QUE NUNCA, LAS CONSECUENCIAS DEL ATAQUE TERRORISTA DE

2016

TODAVÍA SE HACEN

SENTIR EN EL TURISMO, EJE DE SU

Phs: Gentilieza Office du Tourisme et des Congrès de Nice Côte d’Azur y Office du Tourisme d ‘Antibes-Juan-les-Pins

ECONOMÍA.

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Txt: Cecilia Filas

RENACE DE SUS CENIZAS a noche tenía todo para ser perfecta. Era verano, se celebraba un nuevo aniversario de la Toma de la Bastilla y cientos de personas se apostaban en la famosa Promenade des Anglais, de Niza, para ver cómo se reflejaban los fuegos artificiales en el azul del Mediterráneo. Eso fue hasta que Mohamed Lahouaiej Bouhlel estrelló –en un acto tan terrorista como teatral– un camión de 19 toneladas contra la multitud, dejando un saldo de 84 personas muertas y 50 heridas. Esa noche, el Hotel Negresco, uno de los símbolos de la Belle Époque nizarda, se transformó en un triage. El impacto fue fuerte. Para una ciudad de 400 mil habitantes que, en temporada de verano, llega casi a triplicar su población y que se jacta de tener más inmobiliarias que farmacias, el turismo es una arteria fundamental de su economía. Desde entonces, la seguridad se multiplicó. Hoy, los soldados son una postal tan común como la de la Baie des Anges. Los afiches que indican cómo reaccionar en caso de un ataque –no acer-

L

de la Promenade du Paillon (inaugurado en carse a las fuerzas del orden haciendo movimien2013, es el eje verde de la ciudad y cuenta con tos bruscos, por ejemplo–, contrastan con los 7 1.600 árboles, 6 mil arbustos y 50 mil plantas a hombres camaleónicos (esculpidos por el catalán lo largo de sus 12 hectáreas); y el jardín Albert I, Jaume Plensa a base de resina y acero inoxidable) uno de los parques más antiguos de la que se levantan a 12 metros de las baldociudad, la puerta verde a la sas blancas y negras de la Place Promenade des Anglais. Massena, una de las plazas públicas más grandes de la urbe. Inaugurada en 2007, la obra MERCADOS Y ÓPERAS Así ranquea Niza entre las ciudades probablemente resuene más que La Promenade es, precisamente, francesas. Con 400 mil habitantes, nunca en esta parte de la la avenida costera que conecta, a en temporada de verano llega a Riviera Francesa: nombrada través de 7 kilómetros de casinos triplicar su población. Y se jacta Una conversación en Niza, reprey hoteles tan majestuosos como de tener más inmobiliarias senta a cada uno de los continentes históricos, el Aeropuerto que farmacias. interactuando a través de sus constanInternacional de Niza-Costa Azul –el tes variaciones lumínicas, un diálogo de segundo más importante de Francia descolor. Ubicada en el quartier Jean Médecin y a pués del Charles de Gaulle– y el nacimiento de la las puertas de la Ciudad Vieja o Vieux Nice, la Quai des État-Unis. Fue construida en 1820 a Place Massena –cuyos edificios han superado las instancias de la clase alta inglesa, acostumbrada a numerosas transformaciones estéticas del lugar a pasar sus inviernos en la Côte d’Azur. La reina lo largo de 200 años– está bordeada, de un lado, Victoria, por ejemplo, era una habitué del hotel por el espejo de agua de 3 mil metros cuadrados Excelsior Regina Palace, a fines del siglo XIX.

Quinto puesto

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ANTIBES Vista aérea del Port Vauban, el puerto de lujo que eligen los millonarios (como el príncipe saudita Al Waleed; Paul Allen, el cofundador de Microsoft, y el ruso Roman Abramovitch) para anclar sus yates (izq.). Le Nomade, del catalán Jaume Plensa es una mega estructura de acero inxoidable emplezada sobre la ciima del Bastion Saint Jaume (centro).

quinta ciudad más poblada de Francia. Luego de un paseo por la historia viva de la ciudad, la mejor forma de volver a la modernidad es subiendo las escaleras de Les Postes Restantes de la Porte Fausse, o ‘la puerta falsa’: sus paredes de mármol y el techo dorado de forma abovedada, en perfecta sintonía con la estética del distrito, esconden la contemporaneidad de una pieza urbana realizada en 2007 por el artista de origen turco Sarkis. ¿El objetivo? Representar la transición entre la antigua Niza y la moderna.

Cuisine nissarde Ubicada sobre ese territorio ancestral de mixtura cultural que es el Mediterráneo, y a poco más de 40 kilómetros de la frontera con Italia, Niza está apegada fuertemente a sus raíces provenzales. Colonizada por griegos y ligures; invadida por los bárbaros; protegida por el Ducado de Savoya, después por el reino de Cerdeña y, finalmente, anexada a Francia a mediados del siglo XIX, la definición de la cocina nizarda es, en sí misma, una combinación de tradiciones heredadas. Para preservar el valor de su gastronomía original, en 1998 se creó la etiqueta Cuisine Nissarde: le respect de la tradition, que desde 2014 es administrada por la Oficina de Turismo y Congresos. Surgió como una forma de destacar a restaurantes y chefs que conozcan la historia de la cocina local, que incluyan al menos tres recetas tradicionales en su menú y prioricen una propuesta de calidad en sus productos. Así, además de la ensalada niçoise (una de las embajadoras del recetario local) es común ver, sobre todo en la Vieux Nice, mercados y locales gastronómicos abarrotados con platos como la pissaladière (una suerte de tarta de cebollas caramelizadas, aceitunas y anchoas), pan bagnat (pincelado con aceite de oliva y elaborado con los ingredientes de la ensalada niçoise), socca (hecha con harina de garbanzos, es muy parecida a la fainá) y petit farcies (vegetales rellenos), entre otros. La carne tiene una presencia menor en la dieta nizarda: debido a su ubicación geográfica –entre los Alpes y el Mediterráneo–, la escasez de espacios para pastoreo empujó a los habitantes a criar sólo ovejas y cabras, y reservar la carne para ocasiones especiales, por su alto costo. Irónicamente, sucede lo mismo con la pesca: dada la falta de variedad ictícola, la mayoría de las recetas se hacen a base de anchoas, pulpos y crustáceos. En contraste, los productos estrella de la región son las olivas de Niza (llamadas cailette, que cuentan con el sello de Dominación de Origen Protegida) y los vinos de Bellet (también con Denominación de Origen Controlada), que se producen en uno de los viñedos más antiguos de Francia, ubicado sobre una colina a entre 200 y 300 metros de altura.

POSTALES Vista panorámica de NIza, con la famosa Promenade des Anglais y el Monument aux Morts de Rauba Capeù (derecha arriba). Atardecer sobre el Cap d’Antibes (izquierda arriba). Especias de la Provenza, productos orgánicos en el Marché de Antibes (abajo).

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DE MATISSE

Caminando por la Prom se llega al Parc de la línea de edificios bajos y techos planos que fueColline du Château. Del castillo sólo queda el ron levantados sobre el primer camino excavado nombre, que es un homenaje simbólico a la fordirectamente desde la roca, a fines del siglo taleza que funcionó allí entre los siglos XI y XVIII–, se encuentra otro must para turistas y XVIII, hasta que las tropas francesas de Luis XIV locales: el Cours Saleya. Conocido primero la destruyeron después del tercer, y último, asecomo La Marina, y después como Le Palco, recidio de 1705. El predio estuvo más de un siglo bió su nombre actual recién a principios del abandonado, hasta que en 1829 el siglo XX: funcionó como un paseo monarca Carlos Félix ordenó la exclusivo de los nizardos más adineconstrucción de un jardín, con rados, luego como mercado y cascada incluida. En el diseño después como estacionamiento Con Denominación de Origen del parque –que hoy funciona de autos, hasta que en 1980 fue Controlada, que se producen en como un espacio recreacional transformado definitivamente uno de los viñedos más antiguos para varias actividades al aire en una zona peatonal. Hoy, de Francia, ubicado sobre una libre– se pueden encontrar varias este mercado de toldos a rayas colina a entre 200 y 300 referencias a la conexión entre blancas y azules o rojas –considemetros de altura. Grecia y Niza. De hecho, Nikaïa rado uno de los 100 más pintoresfue una de las primeras ciudades de la cos de Francia–, alterna entre el riviera fundada por los griegos, después de famoso Marché aux Fleurs –el mercado de Marsella, Cannes y Antibes. La Tour Bellanda flores, frutas y verduras que tiene lugar de marocupa un espacio protagónico dentro del parque tes a domingos, por la mañana– y el Marché a la y es el lugar por excelencia para los fotógrafos Brocante Saleya, el mercado de pulgas que abre amateurs y adictos a las selfies en busca de las solamente los lunes. mejores panorámicas de Niza, la Bahía de los A pocos metros del inicio del Cours Saleya se Ángeles y el puerto, ya que la Colline du encuentra la Opera Nice Côte d’Azur, construiChâteau es el punto más alto de la Vieux Nice. da por François Aune, discípulo de Gustave A pocas cuadras, por la Rue des Ponchettes –una Eiffel, sobre las cenizas del teatro municipal que

Vinos de Bellet

AL

MAMAC

La ciudad ofrece pocos contrastes tan extremos como el de observar los antiguos edificios de estilo barroco que bordean la Place Garibaldi –creada en 1773, es una de las plazas más viejas y la más grande de Niza– desde los murales vidriados del Musée d’Art Moderne et d’Art Contemporain (Mamac). Dentro de sus 4 mil m2, el edificio, con un diseño futurista sobre la base de cuatro torres de tres pisos conectadas por pasarelas de vidrio, aloja colecciones temporales y permanentes, representativas de los grandes movimientos artísticos mundiales –pop art, nuevo realismo europeo, escuela de Niza, Fluxus y Art Povera, entre otros– desde la década de Ubicado en un predio de 2.400 hectáreas que solía ser un bosque de pinos a sólo 8 kilómetros al norte de Antibes y a 20 del Aeropuerto Internacional 1950 hasta la actualidad. Entre las obras de Roy Niza Côte d’Azur, se encuentra lo que muchos llaman “la réplica francesa del Silicon Valley”. Aunque, para ser precisos, sea su Lichtenstein y Andy Warhol, se destaca un espapredecesor. Construido en 1969 con el objetivo de ser un punto de interacción entre investigadores, profesores y compañías, cio dedicado al famoso nizardo Yves Klein. Sophia Antipolis es actualmente el parque de ciencia y tecnología más grande de Europa. En este polo científico conviven 5.500 El Musée Matisse es otra de las visitas destacadas estudiantes, 4.500 investigadores y 2.230 compañías –entre multinacionales, pymes y startups– que generan 36.300 puestos en el periplo cultural. “Cuando me di cuenta de de trabajo en la zona. Un dato clave: más de la mitad (53 %) son posiciones gerenciales. Sus principales áreas son: tecnologías que iba a poder ver esta luz todas las mañanas, de información (electrónica, software, telecomunicaciones, multimedia, redes, comercio digital y desarrollo web); investigación, no podía creer mi suerte”, dijo Henri Matisse educación y entretenimiento; salud y químicos (farmacéuticos, dermatología y biotecnología); medio ambiente y ahorro de sobre Niza, la ciudad en la que vivió desde 1917 energía (dedicado a la explotación de fuentes alternativas). hasta 1954. Instalado en una colina del aristocrático barrio de Cimiez, el museo ocupa un antiguo edificio fue destruido en el terrible incendio de 1881, tancia, cruzando la Place Rosetti barroco, Villa des Arènes, ubicadurante la presentación de la ópera Lucia di donde se sitúa la Catedral, se Yves Klein, el artista que do a sólo un par de cuadras del Lammermoor. De camino a la Cathédrale Saintehalla otro de los emblemas creó su propia gama de azul, Hotel Regina, donde pasó sus Réparate de Niza, el santuario más grande de la católicos del quartier Vieux es uno de los hijos dilectos últimos años, y del Monastère Ciudad Vieja, se encuentra el Palais du Justice Nice: la Iglesia Sant-Jacques-lede Niza. Hasta el 31 de julio, de Cimiez, donde se encuentra (1892), que se levantó sobre el espacio de un Majeur o, simplemente, Gesù, Fundación Proa exhibe, en Buenos su tumba. La colección permaantiguo convento dominico, en la actual Place ya que fue concebida como un Aires, una retrospectiva de nente del museo –conformada en du Palais. Más antigua, la catedral de Niza es un colegio jesuita. También de estilo su obra. gran parte gracias a las donaciones paradigma del estilo barroco que predomina en barroco, es previa a la Catedral (se del propio Matisse y de sus herederos– se el casco antiguo de la ciudad: construida entre construyó entre 1607 y 1650) y, a difetrata de la más grande dedicada al artista: consta 1650 y 1699, el edificio en forma de cruz conrencia de varios edificios de la ciudad, se ha mande 68 pinturas y gouaches, 236 dibujos, 218 tiene 10 capillas y tres órganos, además de un tenido prácticamente intacta a través de los grabados, 57 esculturas, 14 libros ilustrados, 95 campanario del siglo XVIII sobre el que descansa siglos. Más allá de la belleza de sus ornamentos y fotografías y 187 objetos y documentos personauna placa que recuerda a los muertos de la estucos, su arquitectura de la luz es un oasis insles. A metros del Musée Matisse, se encuentra el Primera Guerra Mundial. A pocas cuadras de distantáneo de espiritualidad en el corazón de la

Sophia Antipolis, el Silicon Valley francés

Klein, nizardo célebre

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MEDITERRÁNEO STYLE Vista del Casco Histórico de Antibes desde el mar.

Musée Arquéologique de Nice-Cimiez. Emplazado sobre los vestigios de unos antiguos baños termales de Cemenelum, sus estatuas recuerdan a la Niza que alguna vez, también, fue romana. Y es que, de los Alpes al Mediterráneo, y de los griegos a los franceses, de la Vieux Nice al moderno barrio de Libération, los châteaux ocre de estilo barroco y los palacios de la Belle Époque, Niza es más que la puerta de entrada a la Riviera Francesa: es una ciudad cosmopolita que se alimenta de contrastes.

BONUS

TRACK:

ANTIBES

Y

JUAN-LES-PINS

A 20 kilómetros del centro de Niza y sólo a 12 de Cannes, el cabo de Antibes despunta sobre la línea costera de la Côte d’Azur. Y separa geográficamente a Antibes (costa este) de Juan-les-Pins (costa oeste) aunque, en realidad, ambas forman parte de la misma ciudad. En contraste con el movimiento de Niza, esta ciudad –de 76 mil residentes durante el año y 220 mil en temporada alta– propone una experiencia más íntima y relajada. Con 2.600 años de historia, es la única que conserva sus murallas sobre la costa que, con 25 kilómetros, es la más extensa de la Riviera. Recorrer el Casco Antiguo de este refugio medieval no implica más de una hora, pero es difícil no impresionarse con el encanto intacto de sus pintorescas casas, algunas incluso construidas con piedras de antiguas ruinas romanas. Es que esta región tiene una historia milenaria, y en Antibes está más viva que en cualquier otra parte. Fundada por los griegos en el siglo V a.C., Antipolis –su nombre original– se estableció como una pequeña parada comercial. Sin

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CÓMO LLEGAR: Air France ofrece conexiones a Niza desde Buenos Aires. Privacidad, confort, servicio gourmet y atención al detalle son las claves para disfrutar de una experiencia única en su Business Class (desde u$s 4.698). DÓNDE HOSPEDARSE: Emplazado sobre el Boulevard Dubouchage, el Hotel Ellington (cuatro estrellas) combina comodidad y una ubicación ideal para conocer la ciudad. Por otra parte, el Hôtel AC Ambassadeur Antibes Juan-les-Pins, está ubicado en el corazón del Juan-les-Pins, justo detrás del Palais des Congrès. Este cinco estrellas de la cadena Marriott incluye playa privada. TOURS: Ya sea por tierra o por mar, caminando o en bicicleta, la mejor forma de conocer Niza y Antibes Juan-les Pins, es a través de las agencias de turismo locales: Office du Tourisme et des Congrès de Nice Côte d'Azur y la Office du Tourisme d’Antibes-Juan-les-Pins. INFORMACIÓN: www.sp.nicetourisme.com y www.antibesjuanlespins.com/en

embargo, en el año 125, los romanos desembarcaron en Marsella y las tribus cercanas no tardaron en someterse al Imperio. Convertida voluntariamente en un activo romano, pasó a llamarse Civitas Antipolitana e inició una época de esplendor económico gracias a la Via Aurelia, una de las principales arterias comerciales utilizadas por los galos. Después, con el colapso del Imperio Romano y ante la imposibilidad de mantenerse

frente a las constantes invasiones de los pueblos bárbaros, cambió nuevamente de nombre, a Antiboul. Por siglos, la región fue escenario de constantes asedios y batallas hasta, que en el siglo XVI, el rey Luis XIV le ordenó a Vauban –el ingeniero militar más grande de su época, sus 12 fortificaciones que protegían las fronteras este, norte y oeste de Francia fueron designadas por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad en 2008–, rediseñar el Fort Carré. Gracias a ello, en 1746 la ciudad logró resistir el peor asedio de su historia: 57 días bajo ataque. El Fort Carré –al que se accede a través de un camino amurallado, a 40 metros sobre el nivel del mar– funcionó como un enclave defensivo hasta 1860, año en que el Condado de Niza fue anexado oficialmente a Francia. El sitio, que de fortaleza militar devino en uno de los puntos turísticos más fuertes de Antibes, le debe su eterna vigencia a una ubicación estratégica que permite obtener vistas panorámicas de toda la Riviera y, en especial, al Port Vauban. Ubicado justo frente al fuerte, este puerto con 10 kilómetros de muelles es el lugar donde los megamillonarios –como el príncipe saudita Al Waleed; Paul Allen, el cofundador de Microsoft o el ruso Roman Abramovitch, dueño de Eclipse, el yate privado más grande del mundo– anclan sus embarcaciones. Sobre la costa, a unas pocas cuadras del puerto, se alza uno de los hitos turísticos más importantes de Antibes, el Musée Picasso. Siguiendo la historia de la propia ciudad, también está emplazado en un sitio milenario (fue un fuerte romano, y en la Edad Media, residencia de obispos); y también sufrió un cambio de nombre en 1966 cuando el, hasta entonces, Château Grimaldi –que perteneció a la familia real de Mónaco, entre 1383 y 1608–, tomó el nombre del artista, convirtiéndose en el primer museo dedicado a Picasso. En 1925, el

municipio de Antibes, en colaboración con un grupo de 60 personas, le compró el edificio –reducido casi a ruinas– al Estado francés por 80 mil francos. Así, el castillo devino en el Museo Grimaldi, con Romuard Dor de la Souchère como primer curador. En 1946, Dor de la Souchère le pidió a Picasso –que estaba veraneando junto a Françoise Gilot, madre de Paloma Picasso, a unos pocos kilómetros de Antibes– que pintara un pequeño cuadro para el museo. Y le ofreció el hall del segundo piso como estudio. Con la promesa no sólo de pintar sino de “decorar el museo”, Picasso se instaló en el castillo entre septiembre y noviembre de ese año. Durante su estadía, pintó 23 cuadros y 44 dibujos que luego donó al municipio de Antibes –que lo designó ciudadano ilustre en 1957– con la condición de que nunca salieran del museo. Hasta hoy, las obras permanecen allí, junto con dos esculturas y una colección de 77 piezas de cerámica que Picasso diseñó en Vallauris. Advertencia: tal vez sea difícil reconocer alguno de sus gestos icónicos. La excepcionalidad de estas piezas se debe a el tipo de materiales con los que trabajó Piccaso, absolutamente atípicos en su producción general. Primero intentó pintar

PICASSO ESTUVO AQUÍ Vista aérea del museo en honor al pintor malagueño, inaugurado en 1963. Allí se exhiben 23 cuadros y 44 dibujos que pintó por encargo y donó, con la condición que nunca abandonaran ese reducto.

directamente sobre las paredes centenarias del museo, pero la humedad boicoteó su experimento; entonces, se enfocó en materiales como pintura a base de esmalte, madera contrachapada, e incluso cemento, en parte debido a su deseo de probar nuevos elementos, y en parte debido a la escasez de recursos en un mundo que acaba de salir de la Segunda Guerra. Más allá de la omnipresencia del padre del cubismo, el museo también cuenta con una colección de esculturas de

artistas como Joan Miró, Anne y Patrick Poirer, Germaine Richier y Bernard Pagès. Del otro lado del cabo, asoma Juan-les-Pins. A diferencia de Antibes, la historia de la costa oeste es bastante más reciente y está íntimamente ligada a la élite estadounidense. Por años, este lugar fue un pequeño pueblito pesquero, sin mayor trascendencia para los habitantes de Antibes que la de un bosque de pinos. Fue ganando popularidad progresivamente gracias a los soldados gringos que iban a repostar allí después de la I Guerra Mundial. Hasta que Frank Jay Gould, un rico heredero estadounidense, decidió abrir el primer resort y, más tarde, un casino. Eso marcó el inicio de un constante desfile de figuras como Scott y Zelda Fitzgerald, Ernest Hemingway, Charlie Chaplin, Marlene Dietrich, Pablo Picasso y Rodolfo Valentino, quienes proyectaron a Juan-les-Pins, hasta el día de hoy, como un glamoroso lugar de descanso para ricos y famosos, a minutos de Niza.◆


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