EDAD ANTIGUA

CIENCIAS SOCIALES 5º CURSO

U.D. 5

CEIP SANTA ANA (MADRIDEJOS)

LA EDAD ANTIGUA: EGIPTO, GRECIA Y ROMA

1.

EL ANTIGUO EGIPTO

2.

LA ANTIGUA GRECIA

3.

ROMA ANTIGUA

4.

ESPAÑA EN LA EDAD ANTIGUA: - LOS PUEBLOS PRERROMANOS - LA HISPANIA ROMANA

La EDAD ANTIGUA es el periodo histórico que comprende desde la aparición de la escritura en el 3.500 a. C. en la antigua Mesopotamia (Oriente Medio), hasta la caída del Imperio Romano en el 476 d.

C. (siglo V). En esta etapa aparecieron civilizaciones que crearon diferentes formas de escritura. Las más importantes fueron los egipcios, los griegos y los romanos.

1.

EL ANTIGUO EGIPTO

Egipto está situado en el N.E. de África, junto al mar Mediterráneo y el mar Rojo. El Nilo es el río que atraviesa Egipto de Norte a Sur y los egipcios vivían en las tierras situadas a orillas de este río porque eran las únicas fértiles. Todo lo demás era desierto. El río se desbordaba cada año y cuando las aguas se retiraban, quedaba una especie de barro (limo negro) que fertilizaba las tierras.

El río además era su principal vía de comunicación. Los transportes se realizaban con barcos de vela.

1.1. HISTORIA Hace más de 5.000 años (en el 3.000 a.C.), el primer rey de Egipto (faraón) unificó todas las tierras que había junto al río Nilo. Los egipcios dividían su territorio en dos partes: el Alto Egipto (el valle) y el Bajo Egipto (el delta). Por eso los dos símbolos de Egipto son el loto, que representa el valle del río, y el papiro, que representa las tierras pantanosas del delta.

Egipto llegó a ser un país muy rico y fue invadido varias veces por pueblos extranjeros, pero más tarde, en el 1.500 a.C., los faraones organizaron ejércitos poderosos, conquistaron muchos territorios en Oriente y crearon un gran imperio con capital en Tebas.

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1.2. EL FARAÓN, SEÑOR DE EGIPTO El faraón era el señor absoluto de Egipto. Se le consideraba hijo del Sol y era adorado como un dios.

Era el rey del Alto y del Bajo Egipto y por eso llevaba las dos coronas y era llamado “Señor de las Dos Tierras”.

Para gobernar el país, el faraón contaba con colaboradores y consejeros. Los más importantes eran los nobles y los sacerdotes. Los escribas eran los que sabían leer, escribir y contar y llevaban la cuentas de las propiedades del faraón, que era el dueño de todas las tierras. Los escribas escribían mediante jeroglíficos que dibujaban en hojas de papiro y esculpían en los templos.

EL FARAÓN RAMSÉS II SUJETANDO A SUS ENEMIGOS

NOBLES

ESCRIBA

1.3. EL TRABAJO Los campesinos formaban la mayor parte de la población: 9 de cada 10 egipcios trabajaban en el campo, fueran hombres o mujeres. Los niños trabajaban junto a sus padres desde que eran pequeños . También había comerciantes y artesanos: orfebres, alfareros, cesteros, tejedores, ebanistas, embalsamadores... Eran hombres libres. Los trabajos más duros los realizaban los esclavos (minería, construcción...)

1.4. LAS CREENCIAS Los egipcios eran politeístas y adoraban a las fuerzas de la naturaleza, a algunos animales y al faraón. Solían representar a los dioses son cuerpo humano y cabeza de animal. Los más importantes eran Amón (el rey de los dioses), Ra (dios Sol), Osiris (dios de los Muertos), Isis (diosa de la Familia) y Anubis (el que conducía a los muertos al inframundo). Tenían miles de dioses.

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Para adorar a sus dioses, los egipcios construían templos de grandes dimensiones. También creían en la vida después de la muerte y para ello embalsamaban el cuerpo del difunto para que se conservase en perfecto estado (momias). Los enterraban en unas tumbas muy seguras llamadas pirámides. Las más antiguas e importantes pertenecen a los faraones.

1.5. LAS DIVERSIONES Cada uno de los dioses egipcios tenían sus días de fiesta. Esos días se celebraban grandes procesiones y danzas en honor del dios y todos los habitantes participaban en ellas.

Los egipcios más ricos celebraban en sus casas grandes banquetes a los que asistían tanto hombres como mujeres, y lo que más les gustaba era oír música y ver a las bailarinas mientras se servía la comida.

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2.

LA ANTIGUA GRECIA

Grecia se halla situada en el S. E. de Europa y está bañada por el mar Mediterráneo. La Grecia clásica abarcaba tres partes: la península Balcánica, muchas islas diseminadas por el mar Egeo y las costas occidentales del Asia Menor. Esas tierras estaban habitadas desde hace más de 3.000 años.

2.1. LAS CIUDADES GRIEGAS Los antiguos griegos hablaban una misma lengua y creían en los mismos dioses pero no formaban un único Estado. Por el contrario, se agrupaban en pequeñas ciudades que eran independientes: cada una tenía sus gobernantes , sus costumbres y su ejército. Los griegos las llamaban polis o ciudades-estado. En las polis, la población vivía diseminada en los alrededores de la ciudad y en caso de guerra se refugiaba en una zona alta y fortificada llamada acrópolis.

Las dos ciudades-estado más destacadas en aquella época eran Esparta y Atenas. 

Esparta era un estado organizado militarmente y educación de los ciudadanos se encaminaba a formar soldados valientes y sufridos. Era una polis que vivía para la guerra.

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Atenas era una polis más brillante, rica y próspera. Sus habitantes se dedicaban al comercio y a la navegación. El pueblo ateniense, sumamente culto e instruido, luchó por conseguir sus libertades políticas y en el siglo V a.C., en tiempos de Pericles, Atenas adquirió el pleno desarrollo de la democracia. En esa época construyeron los más bellos edificios (el Partenón, en la Acrópolis) y vivieron los sabios y artistas más famosos (Sócrates, Platón, Aristóteles, Homero, Fidias...)

Los griegos llevaron a cabo importantes descubrimientos y grandes avances en matemáticas, astronomía, medicina y filosofía. Inventaron el teatro y las competiciones deportivas. Su pensamiento es una de las bases de la cultura occidental.

Polis griega

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Las polis se enfrentaron muchas veces entre sí pero en los momentos de peligro se unían formando ligas (asociación de polis) para derrotar a los invasores.

Muchas polis fundaron además colonias en otros territorios del mar Mediterráneo, como en el sur de Italia o en la península Ibérica (Ampurias y Rosas en la actual Cataluña) por interés comercial. En esas colonias se conservaba la forma de gobierno, la lengua, las costumbres y los dioses griegos. El gran desarrollo que alcanzó la marina griega, facilitó la fundación de esas colonias.

Ruinas de Ampurias Mapa de las colonias griegas 2.2. EL TRABAJO La mayor parte de los griegos eran campesinos y artesanos. Muchos de ellos eran esclavos, propiedad de una familia. El comercio era muy importante. Los comerciantes navegaban a las colonias del Mediterráneo y del mar Negro y a Oriente e intercambiaban productos con los pueblos indígenas. Los griegos vendían vino, aceite, cerámica, perfumes, tejidos, distribuían metales... La invención de la moneda como medio de pago facilitó mucho las cosas.

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2.3. LAS CREENCIAS Los griegos eran politeístas. Pensaban que los dioses eran como la personas pero mucho más poderosos, inmortales y eternamente jóvenes. Vivían en el sagrado monte Olimpo y el más poderoso de todos era Zeus. Tenían también héroes, como Hércules, Ulises y Aquiles, que eran hijos de dioses y de mortales. Creían que tanto las ciudades como las familias nobles, estaban fundadas por estos personajes, cuyas historias se narraban en unos relatos llamados mitos. La mitología griega es, pues, el conjunto de mitos y leyendas que tratan de los dioses y los héroes de la antigua Grecia.

2.4. LAS DIVERSIONES Los espectáculos favoritos de los griegos eran el teatro y las competiciones deportivas.

Las principales eran los Juegos Olímpicos, que se celebraban cada cuatro años en Olimpia en honor al dios Zeus. En ellos participaban todas las polis griegas y durante su transcurso, se declaraba una tregua en las guerras para que todos los habitantes pudieran acudir.

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3.

ROMA ANTIGUA

En el centro de la península de Italia vivían hace 2.800 años varias tribus que en el año 753 a.C. fundaron la ciudad de Roma, cerca del río Tíber y del mar Tirreno.

3.1. HISTORIA La historia de Roma tiene tres etapas: Monarquía, República e Imperio.

Roma nació como otras ciudades-estado de la época. Poco a poco fue creciendo y enfrentándose a sus vecinos hasta ser cada vez más poderosa. En ella se establecieron sus reyes (Monarquía). Hubo siete, siendo Rómulo el primero de ellos. El rey era elegido por un consejo de ancianos (Senado) Unos 500 años antes de Cristo. Los romanos expulsaron al último rey y proclamaron la República, que duró casi cinco siglos. En la época republicana, los romanos participaban en el gobierno reuniéndose en asambleas y sometiendo las decisiones importantes al Senado. Durante este periodo, Roma conquistó toda Italia y además los territorios que bordean el mar Mediterráneo. Para ello los romanos tuvieron que vencer a numerosos pueblos gracias a un ejército especial: las legiones.

Al final de la época republicana , en el siglo I a.C., hubo en Roma muchas revueltas sociales y militares que desembocaron en una guerra civil. Esta guerra terminó con la llegada al poder de un importante general: Julio César. La República acaba y su sobrino Octavio Augusto se proclamó emperador (César) en el año 27 a.C. Durante su reinado se produce el nacimiento de Jesucristo.

Así comienza el Imperio Romano, que amplió sus conquistas y disfrutó de largos periodos de paz. El cargo de emperador era hereditario y gobernaban de una forma absolutista sin tener en cuenta al Senado. El Imperio Romano duró unos cinco siglos y abarcó casi todo el mundo conocido hasta la época. Duró hasta el 476 d.C., fecha en la que Roma fue tomada por los germanos y el Imperio desapareció.

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3.2. LA VIDA EN LAS CIUDADES La civilización romana fue esencialmente una civilización urbana. Las ciudades eran el centro de la vida social, económica, política y cultural del mundo romano. Toda la población de los alrededores acudía a la ciudad para comprar, vender, hacer negocios, asistir al culto en los templos o a los espectáculos.

Normalmente la ciudad romana estaba amurallada y tenía un trazado en forma de cuadrícula. En el centro urbano estaba el foro, una gran plaza rodeada de edificios públicos, templos, comercios... En él se celebraba el mercado y se impartía justicia.

La ciudad disponía además de: 

Termas (baños públicos y gimnasio)

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Teatros, edificio con forma semicircular donde se representaban tragedias y comedias.

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Anfiteatros (dos teatros), edificio con forma ovalada o circular, que se usaban para las luchas de animales o de gladiadores. El más famoso es el Coliseo de Roma.

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Circo, pista alargada, en cuyo centro se colocaban estatuas (espina) y se usaba para las carreras de cuadrigas.

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Columnas y arcos de triunfo, monumentos conmemorativos utilizados para exaltar a los gobernantes.

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Acueductos, grandes obras de ingeniería que transportaban el agua a la ciudad.

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Calzadas, que eran las vías de comunicación que unían la ciudad de Roma con el resto de ciudades del Imperio

En las ciudades había casa muy lujosas (domus), donde vivían los más ricos y casas con varios pisos (ínsulas), donde vivían las familias más humildes. Estos hacían mucha vida en la calle y solían comprarse la comida ya hecha en las tabernas.

Roma se convirtió durante el Imperio en la ciudad más grande y hermosa del mundo. Llegaron a vivir en ella más de un millón de personas. A ella llegaban mercancías de todos los rincones del Imperio en grandes naves y caravanas de caballerías. En Roma trabajaban miles de artesanos y comerciantes.

3.3. LA VIDA EN EL CAMPO Aunque las ciudades eran el centro de la vida económica y social, la mayoría de los habitantes del Imperio vivían en el campo, dedicados a la agricultura y la ganadería.

Las explotaciones agrícolas se organizaban alrededor de grandes casas de campo llamadas villas.

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Una villa estaba compuesta por una gran edificio donde vivían los propietarios, construcciones para usos agrícolas (establos, graneros, caballerizas...), otras construcciones para usos artesanales (horno, herrería, carpintería, la prensa de aceite...) y las casas de los esclavos.

Los romanos mejoraron las técnicas agrícolas que había hasta el momento. Avances inventados por ellos son el arado romano, los molinos de tracción animal para moler el grano, la prensa de aceite, nuevas técnicas de regadío y el uso de abonos.

Arado romano Molino de grano Prensa de aceite 3.4. LAS PROVINCIAS Los romanos dividieron el imperio en provincias. Cada provincia se gobernaba desde Roma, tenía las mismas leyes, usaban la misma moneda, recaudaban tributos con el mismo sistema y se hablaba la misma lengua, el latín. En todas ellas se construyeron ciudades y había guarniciones militares que se encargaban de asegurar el orden y de controlar las rebeliones.

De Roma partían las principales calzadas que comunicaban las provincias con la capital. Estas calzadas favorecían el rápido desplazamiento de las legiones hasta los puntos más apartados del Imperio y el comercio de productos agrícolas y artesanales. Roma obtenía materias primas de los lugares que conquistaba y vendía a las provincias productos elaborados y objetos de lujo y arte.

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3.5. LA SOCIEDAD ROMANA Para la civilización romana todos los hombres no eran iguales y había distintos grupos sociales: los hombres libres y los esclavos.

Los PATRICIOS dominaban la sociedad y eran dueños de tierras y esclavos. Ocupaban los puestos más importantes de la política y el ejército. Eran los únicos que podían pertenecer al gobierno y al Senado. Se enriquecieron con las conquistas y acumularon grandes propiedades. Vivían en lujosas villas o en los domus de la ciudad.

Los PLEBEYOS eran hombres libres como los patricios, pero tenían que trabajar a cambio de un sueldo. Eran campesinos, comerciantes o artesanos. Muchos entraron en el ejército. Eran representados en el gobierno por los tribunos de la plebe.

Los ESCLAVOS eran personas sin ningún derecho que podían se compradas o vendidas.

Realizaban todo tipo de trabajos, desde los más duros de las minas o del campo a los trabajos domésticos. Si ahorraban lo suficiente, podían comprar su libertad y se convertían en libertos.

3.6. LAS DIVERSIONES

Los espectáculos favoritos de los romanos eran los combates de gladiadores, que se celebraban en el anfiteatro, y las carreras de cuadrigas, que lo hacían en el circo.

También asistían al teatro o a las termas, para hacer ejercicio, bañarse o charlar con los amigos. Las personas adineradas solían celebrar grandes banquetes.

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3.6. LAS CREENCIAS Los romanos eran politeístas y llegaron a adorar a muchos dioses. Como admiraban mucho a Grecia, los dioses griegos (Zeus, Hera, Atenea) se convirtieron en los principales dioses romanos: Júpiter, Huno y Minerva. En su honor se construían templos y se ofrecían sacrificios de animales. También levantaban templos a los dioses propios de las tierras que conquistaban.

Como los romanos eran tan supersticiosos, antes de tomar cualquier decisión consultaban la voluntad de los dioses (los oráculos) Además de los grandes dioses, cada familia tenía otros dioses protectores de su hogar, los lares, y les dedicaban un altar en cada casa.

El emperador también era considerado un dios y recibía culto como tal en todo el Imperio.

Símbolos cristianos Tras la muerte de Jesucristo, a mediados del siglo I se empezó a extender el cristianismo por todo el Imperio. Los cristianos fueron perseguidos y martirizados porque se negaban a dar culto al emperador y defendían la igualdad entre las personas, fueran libres o esclavas. A pesar de ello, el número de cristianos creció mucho y en el año 313, el emperador Constantino toleró su práctica. Poco después, en el 381, el cristianismo pará a ser considerado religión oficial del Imperio (Edicto de Teodosio) 12

3.7. LA DESAPARICIÓN DEL IMPERIO A partir del siglo III d. C. , los pueblos bárbaros (“extranjeros”), que presionaban las fronteras por el Norte y por el Este, amenazaban al Imperio. Para defenderlo mejor, el emperador Diocleciano dividió el imperio en dos: Oriente y Occidente. Pero eso no bastó: en menos de un siglo los bárbaros saquearon Roma y la entrada de otras tribus violentas destruyó el Imperio romano de Occidente en el 476 d.C. (Sº V) El de Oriente pervivió hasta el siglo XV (1453) La invasión de los pueblos bárbaros que produjo la desaparición del mundo romano no se hubiera producido si en el Imperio no hubiera habido una crisis muy profunda. Todas sus estructuras políticas, económicas y militares se estaban destruyendo por las luchas por el poder y la corrupción de las costumbres, y esto facilitó su caída.

4.

ESPAÑA EN LA EDAD ANTIGUA

4.1. LOS PUEBLOS PRERROMANOS La península Ibérica se introdujo en la Historia gracias a pueblos que conocían la escritura y la navegación, que vivían en ciudades y sabían comerciar, como los fenicios, los griegos y los cartagineses.

Los FENICIOS eran un pueblo asentado al este del Mediterráneo, en la actual Líbano. Se dedicaban al comercio de perfumes, joyas, maderas... a cambio de metales (oro, plata y estaño) y mantenían relaciones comerciales con los pueblos asentados a orillas del mar Mediterráneo. En la península Ibérica crearon ciudades como Cádiz (Gades) y Málaga (Malaka). Son los que nos trajeron la vid, el olivo y la técnica del salazón para conservar alimentos. También nos dejaron la moneda y el abecedario.

Los GRIEGOS nos dejaron su importante cultura. Fundaron en la actual Cataluña las ciudades de Rosas y Ampurias. Los CARTAGINESES procedían del norte de África. Comerciaban con metales y tejidos.

Fundaron Cartagena, Alicante e Ibiza.

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Aparte de esos pueblos del Mediterráneo, que establecieron sus colonias en la península, existían en el I milenio a.C. otras poblaciones nativas como: LOS CELTAS.- Son pueblos procedentes del centro de Europa y se instalaron en el norte y centro de la península Ibérica. Vivían en unos poblados amurallados circulares (castros), situados en zonas elevadas y de fácil defensa. Las cabañas eran circulares, con paredes de adobe y piedras y los techos de ramas y paja. En el centro del poblado se encontraban los edificios dedicados a funciones políticas y religiosas.

Eran un pueblo rural y guerrero. Se dedicaban a la ganadería, a la agricultura de cereales y sabían hacer cerámica y tejidos de lana, pero sobre todo dominaban la metalurgia: fabricaban armas y eran excelentes herreros y carreteros. También destacaron en el arte de la orfebrería. No conocían la escritura ni la moneda. Los intercambios de productos entre los pueblos eran poco frecuentes.

Los cántabros, astures y gallegos eran pueblos celtas.

LOS ÍBEROS.– Fueron un conjunto de pueblos que habitaban el sur y el levante (este) peninsular.

Vivían en poblados amurallados situados en zonas elevadas que contaban con una fortaleza, una calle central a cuyos lados se situaban las viviendas, y una plaza donde se reunían los habitantes del poblado.

Los íberos vivían de la agricultura y la ganadería.

Cultivaban cebada, trigo y mijo y plantas para hacer tejidos como lino y esparto.

Conocían el hierro y fabricaban armas, como la falcata ibera, y objetos de orfebrería. Utilizaron el torno para la cerámica.

Comerciaron con otros pueblos mediterráneos y acuñaron moneda. Gracias a esos contactos, difundieron el uso del arado, el cultivo de la vid y el olivo, y aprendieron a conservar el pescado en salazón. Crearon un sistema propio de escritura, aunque siga sin poder traducirse en la actualidad.

Los íberos incineraban a los muertos en necrópolis. Colocaban las cenizas del difunto en urnas de cerámica y las enterraban en una fosa con el ajuar funerario (joyas, armas y objetos de la vida cotidiana) 14

CELTÍBEROS.– Pueblo que recibía influencias celtas e íberas. Su zona de asentamiento estaba en torno a lo que es actualmente Soria y Guadalajara. Conocían la escritura y la moneda. Eran excelentes guerreros.

TARTESSOS.– Pueblo poco conocido que pasó a la historia por comerciar con sus riquezas mineras y agrícolas.

También vivían de la obtención de la sal. Se asentaron en el sur de Andalucía, en lo que es el valle del Guadalquivir. Fue una civilización muy próspera pero que desapareció sin dejar rastro.

4.2. HISPANIA, PROVINCIA ROMANA Cuando los romanos dominaron la Península Itálica (a partir del siglo III a.C.), su objetivo fue controlar el comercio en el Mar Mediterráneo y convertirse en un gran imperio.

Sus enemigos fueron los cartagineses, pueblo originario de Cartago, en el Norte de África. Cartago era un importante centro político y comercial en el Mediterráneo, que ya se había establecido en nuestras costas con la intención de conseguir oro, plata y soldados. Fundaron colonias como Cartago Nova (Cartagena) y Ebussus (Ibiza) Los romanos querían derrotar a los cartagineses y apoderarse de las riquezas de la Península Ibérica. Para ello comenzaron una conquista que duró mas de 200 años y tuvo tres fases: 1ª) Desembarcaron en Ampurias, conquistaron el litoral mediterráneo y derrotaron a los cartagineses.

2ª) Penetraron en el interior para conquistar la Meseta. Esto les costó mucho tiempo porque los pueblos indígenas ofrecieron mucha resistencia.

3ª) Subieron hacia la cornisa cantábrica y la conquistaron. El dominio completo de la península se completó en el 19 a.C., en tiempos del emperador Augusto.

Octavio Augusto dividió Hispania en tres provincias: la Tarraconense, la Bética y la Lusitania.

Averigua quién fue VIRIATO y qué ocurrió en NUMANCIA 15

4.3. LA ROMANIZACIÓN Es el proceso de adaptación a la forma de vida romana que experimentaron los pueblos conquistados por los romanos. Los pueblos indígenas fueron adoptando la lengua de los romanos (el latín) y su cultura. Del idioma latino se originaron las “lenguas romances” que se hablarán en las futuras naciones europeas (español, francés. Italiano. portugués, rumano...)

Adoptaron también el Derecho romano, las formas de gobierno, las monedas, la forma de hacer las ciudades y las casas, las construcciones públicas, su vestimenta, su religión y sus costumbres.

La conquista de la Península se llevó a cabo utilizando un poderoso ejército formado por legionarios. Cuando éstos llegaban a un territorio, levantaban campamentos fortificados que luego se convertían en ciudades. Poco a poco la población conquistada se fue mezclando con los romanos. Así pasaron a ocupar puestos en el ejército, a trabajar en el campo, el comercio, la construcción... Con el tiempo, algunos hispanos también pasaron a ocupar altos cargos. Este fue el caso de Trajano y Adriano, que llegaron a ser emperadores.

Los romanos en Hispania hicieron muchos edificios y obras públicas como el acueducto de Segovia, el teatro de Mérida, el puente de Alcántara (Cáceres) sobre el río Tajo, el arco de triunfo de Bará (Tarragona) y fundaron ciudades como Lugo, León o Segóbriga (Cuenca)

Acueducto de Segovia

Puente de Alcántara

Arco de Bará (Tarragona)

Teatro de Mérida 16