Boletín Compartiendo Nro. 23-2019

¡Por una vida productiva, sana y feliz; libre de transgénicos!

Lunes, 9 de diciembre 2019

INDICE • Buenas intenciones, por Richard Webb • POR UN PAÍS DE ESPECIALIDADES Y NO DE COMMODITIES • Formulación de una propuesta de política y estrategia para el fomento de la agricultura ecológica familiar en el PLANAF 2019 - 2021 • CALENDARIO AGROECOLOGICO 2019

Editor: Fernando Alvarado de la Fuente E-mail: bioferdi@hotmail.com Blog: http://fernandoalvaradodelafuente.blogia.com/ FaceBook: Fernando Alvarado BioFerdi WEB: www.ideas.org.pe Facebook: http://www.facebook.com/centroideas.peru

NOTICIAS Y EVENTOS DE LA SEMANA

Buenas intenciones, por Richard Webb “La reforma agraria decretada por el gobierno militar del general Velasco fue, sin dudas, el intento más extravagante y radical realizado por el Estado Peruano, hasta el momento, para reducir la desigualdad y mejorar el nivel de vida de los campesinos más pobres del país”.

En las últimas semanas hemos recibido dos veces un mismo mensaje: “Cuidado con las buenas intenciones”. Eso sí, llegaron en versiones muy diferentes. La primera consistió en un Premio Nobel de Economía otorgado a tres investigadores cuyo descubrimiento ha consistido, simplemente, en demostrar a través de experimentos sociales que “si quieres mejorar la economía o las condiciones de vida de una población, primero estudia bien cómo será recibido lo que haces”.

La segunda versión de ese mensaje llega a través de un estudio titulado “Las empresas de la reforma agraria peruana: 40 años después”, publicado por Giovanni Bonfiglio, investigador del Instituto del Perú de la Universidad San Martín de Porres. La reforma agraria decretada por el gobierno militar del general Velasco fue, sin dudas, el intento más extravagante y radical realizado por el Estado Peruano, hasta el momento, para reducir la desigualdad y mejorar el nivel de vida de los campesinos más pobres del país. Sorprende, entonces, que ni antes ni después de esa decisión sus efectos no hayan sido adecuadamente evaluados. El estudio de Bonfiglio no pretende una evaluación general de la reforma, pero sí realiza un balance de la modalidad cooperativa escogida por el gobierno militar para beneficiar a los campesinos.

Cabe explicar que la reforma se llevó a cabo en dos actos. El primero consistió en la decisión para expropiar haciendas, anunciada en el decreto de 1969. El segundo –que en realidad es el tema de Bonfiglio–, se realizó más gradualmente, empezando con la decisión de llevar a cabo el reparto no de forma individual, sino a través de cooperativas y otras formas de empresa asociativa. A fines de los años 60, el mundo vivía una etapa de entusiasmo socialista y tercermundista, impulsado en toda América Latina por la amenaza de contagio del fidelismo cubano, y en el Perú, en particular, por crecientes invasiones de tierras. Fue un contexto que favoreció la opción cooperativa, un modelo que lograba no solo el reparto, sino que además introducía un elemento anticapitalista, similar al modelo de gestión empresarial por sus propios trabajadores que se había introducido en Yugoslavia. Jaroslav Vanek, economista yugoslavo y profesor de la Universidad de Harvard, fue invitado por el gobierno militar para explicar las bondades del sistema. Pero ni antes de la medida ni en los años posteriores de su funcionamiento, los trabajadores del campo, que serían los eventuales ejecutores del nuevo sistema, fueron consultados por el gobierno.

No obstante, un economista español de la Universidad Católica en ese período, José María Caballero, conocedor de la agricultura de la sierra y entusiasta de la reforma, concibió la importancia de una evaluación del proceso años después de iniciada. Con un nutrido equipo de jóvenes profesionales, Caballero logró realizar un ambicioso estudio en 1978, llegando a casi una de cada cuatro empresas asociativas creadas por la reforma y repartidas por todo el país, buscando sobre todo las opiniones de los mismos socios y dirigentes de las nuevas cooperativas. Sin embargo, los descubrimientos de ese estudio nunca vieron la luz, por una secuela de accidentes personales del mismo Caballero, por lo menos hasta muy recientemente, cuando reaparecieron sus informes cual tesoro arqueológico.

En vista de la riqueza informativa de ese material, sobre todo por las opiniones de los mismos cooperativistas de hace 40 años, y además del hecho ya conocido de que casi la totalidad (99%) de esas cooperativas y otras empresas asociativas creadas por la reforma había cesado de operar, se decidió realizar una nueva entrevista a cada una de las empresas creadas por la reforma. Este trabajo se llevó a cabo en el 2018, cuatro décadas después de la primera entrevista. Así, el estudio de Bonfiglio viene a ser una encuesta panel, con datos antes y después, y basados en las declaraciones e interpretaciones de los mismos cooperativistas beneficiados por la reforma. El resultado es una extraordinaria base de informaciones y opiniones, antes y después, que nos permiten aprender sobre las razones y los factores que determinan el éxito o el fracaso de la gestión asociativa en el campo, un conocimiento que sigue siendo una necesidad central para su desarrollo. El factor más mencionado por esos cooperativistas para explicar la mortalidad casi total de sus empresas fue la desconfianza mutua y las repetidas acusaciones de corrupción en las dirigencias.

Idealmente, y siguiendo las enseñanzas de los premios Nobel, esta indagación se habría realizado antes o en las primeras etapas de la reforma, quizás logrando así un diseño operativo con más aceptación y duración, y con mejor defensa contra la desconfianza mutua. En todo caso, el estudio combinado de Caballero y Bonfiglio, que cubre 40 años de un ambicioso experimento social reformista, nos debe obligar a poner más atención a las bases de la confianza mutua y del control de la deshonestidad, indispensables para cualquier proyecto futuro que busca reducir la pobreza.

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POR UN PAÍS DE ESPECIALIDADES Y NO DE COMMODITIES Proteger nuestra agrobiodiversidad para nuestra seguridad y soberanía alimentaria

Los abajo firmantes, organizaciones, colectivos, personalidades, miembros de la sociedad civil, investigadores y ciudadanos consideramos que nuestro país ha generado a lo largo de más de 11 000 años de desarrollo de cultura de diversificación y conservación de la agrobiodiversidad convirtiéndose en uno de los centros de biodiversidad global más importantes cuya conservación ha estado en manos de las poblaciones originarias y comunidades locales sin generar costo alguno al Estado.

Este patrimonio vivo debe recibir la atención permanente y recursos necesarios del Estado para poner en valor y aportar al desarrollo sostenible del país. Recursos que deben destinarse a generar desarrollo de capacidades y a establecer territorios de conservación in situ de los recursos de la agrobiodiversidad donde se genere oportunidades para los conservacionistas y para todos aquellos que puedan generar conocimiento y puesta en valor de la diversidad de recursos que se tiene en todo el territorio nacional. Reconocemos que la biotecnología permite dar valor agregado a los recursos genéticos, pero la ingeniería genética transgénica y sintética, basada en paquetes tecnológicos que incluyen plaguicidas controversiales como el glifosato, están despertando preocupación en todo el mundo y muchas naciones ya están tomando decisiones para protegerse de esta amenaza global.

Advertimos que existen permanentes intentos de abrir el mercado a los transgénicos, especialmente semillas. El Decreto Supremo 003-2011-MINAG, Reglamento Interno Sectorial sobre Seguridad de la Biotecnología del INIA, ha sido hecho explícitamente para levantar las limitaciones y condiciones para el ingreso y uso de transgénicos en el Perú y no cuenta con el aval del órgano rector que es el Ministerio del Ambiente. Esta posición de un órgano sectorial competente desafía la rectoría ambiental y contradice la visión estratégica del Perú y la política ambiental.

En este contexto hemos realizado conversatorios con todos los sectores involucrados donde se ha destacado la importancia estratégica de nuestra agrobiodiversidad y muchos sectores empresariales nacionales están convencidos que es la mejor opción para construir el desarrollo sostenible, de igual manera la sociedad civil ha mostrado su rechazo a patrones alimentarios que solo benefician a los commodities; un país megadiverso, con una gastronomía de clase mundial que atrae a miles de turistas y gastrónomos que investigan la biodiversidad y hacen alianzas con los agricultores, en los lugares más remotos, para poner en valor aquellos productos que han preservado por milenios y que contienen cualidades que responden a los retos de la vida actual, donde la alimentación saludable libre de transgénicos y la diversidad alimentaria son sinónimos de salud, buen vivir y sostenibilidad.

Existe consenso tanto entre los pequeños agricultores y muchos agroexportadores que no necesitamos transgénicos; que somos uno de los pocos países que puede demostrar que está libre de ellos y que las tendencias mundiales en los países con los que comercia van por los alimentos orgánicos.

Las Naciones Unidas y el Banco Mundial han emitido una evaluación sobre la agricultura en el mundo que concluye que los cultivos OGM tienen muy poco potencial para aliviar la pobreza y el hambre.

Esta evaluación, que tuvo una duración de cuatro años fue denominada Evaluación Internacional de la Ciencia y Tecnología Agrícola para el Desarrollo (IAASTD) y fue realizada por un grupo de 400 expertos de la industria, los gobiernos, la academia y de las organizaciones de la sociedad civil que trabajó durante cuatro años para señalar, a los países pobres, las mejores formas y caminos para incrementar su seguridad alimentaria” La Moratoria ha permitido que el Perú se posicione con ventajas competitivas y comparativas únicas en el mundo globalizado y que la marca país nos distingue como país de gastronomía basada en nuestra diversidad pero también ha probado que necesitamos desarrollar capacidades en investigación, desarrollo tecnológico y en infraestructura para un mejor desarrollo de la ciencia y la tecnología. Tenemos cientos de especies de gran potencial por sus principios activos, sin embargo, no somos capaces de desarrollar productos y darles valor agregado para dinamizar las economías locales y regionales.

Planteamos que el Perú no abra las puertas al cultivo de transgénicos en campo. No merecemos ser el campo de experimentación de unas cuentas empresas que sólo buscan rédito y no desarrollo.

Nuestro país se merece ser el Arca de Noé viva y cuidada por los grandes domesticadores del mundo, porque ya lo hemos hecho por milenios.

Nos apoyamos en el Principio Precautorio que no sólo es recogido por el Protocolo de Cartagena y está vigente en el Perú desde el año 2004, sino que forma parte de nuestro ordenamiento jurídico.

Por lo expuesto demandamos: 1. La ampliación de la Moratoria al 2030, tiempo que debe servir para continuar las actividades que se vienen realizando para poner en valor la agrobiodiversidad, generar capacidades en investigación y desarrollar infraestructura que la apoye.

2. La necesidad de someter a evaluación el herbicida glifosato por sus impactos negativos en la salud y el ambiente 3. El reconocimiento y pago por servicios eco sistémicos a los conservacionistas de la agrobiodiversidad.

Perú, 20 de noviembre del 2019.

Formulación de una propuesta de política y estrategia para el fomento de la agricultura ecológica familiar en el PLANAF 2019 – 2021

La promulgación del DS N° 007-2019-MINAGRI que aprobó el Plan Nacional de Agricultura Familiar 2019 – 2021 (PLANAF) y que reconoce la contribución de la Agricultura Familiar (AF) “a la conservación de la biodiversidad, la seguridad alimentaria y nutricional y la preservación de las prácticas culturales que le permiten producir la tierra, gestionar el territorio; adaptarlo para procurar la sostenibilidad ambiental y adaptarse a los cambios que suceden en el medio ambiente” es un importante avance en las políticas públicas para la generación de condiciones favorables al desarrollo de la Agricultura Familiar en el país.

Sin embargo, para hacer realidad la contribución de la Agricultura Familiar a la seguridad alimentaria y la sostenibilidad ambiental, son necesarias políticas, estrategias y modelos de gestión multiactores y multinivel que implementen las acciones y recursos del PLANAF con enfoque de desarrollo territorial por cuencas. En ese contexto, el fomento de la Agricultura Ecológica Familiar (AEF) demanda de políticas y estrategias específicas con un enfoque agroecológico Ocurre que la Agricultura Familiar tiene el potencial para ello, pero no las condiciones que lo garanticen en la actualidad. En efecto el PLANAF reconoce que de los 2 260 973 unidades productivas dedicadas a la actividad agraria en el Perú, la agricultura familiar representa el 97% del total. De estas la agricultura familiar de subsistencia AFS, con parcelas de 2 hectáreas o menos, representa el 88% del total, mientras que la agricultura familiar intermedia (AFI) y la agricultura familiar consolidada (AFC) con parcelas entre 2 y 10 ha., representa el 12%.

La evidencia muestra que la gran mayoría de la AFS, se concentra en laderas y praderas alto andina y ecosistemas frágiles de la amazonia, en zonas de pobreza y pobreza extrema rural, con recursos naturales erosionados y alta vulnerabilidad ambiental y social. Por su parte, la AFI y la AFC se concentra en valles interandinos y en la costa y tiene cultivos y crianzas con alta dependencia de agroquímicos.

Sin embargo, la Agricultura Ecológica Familiar es sólo el 6.32% del total de agricultores familiares de 5 ha o menos. Esto significa que el 93.68 % de familias agrícolas produce aun en forma convencional.

El Consorcio Agroecológico Peruano estableció como meta al 2021, lograr un 25% de agricultores ecológicos en el total de agricultores familiares del país, lo que representa un enorme desafío.

Este desafío implica un radical cambio en los enfoques, estrategias y acciones de las políticas públicas y de las cadenas productivas que incluye a las asociaciones de productores y a las empresas de transformación y comercialización para pasar de la producción convencional a una producción orgánica o ecológica que permita incrementar sustancialmente el volumen y la calidad de la oferta nacional y abastecer a mercados externos e internos en constante expansión.

Esta tendencia, en el mercado nacional se refuerza con el creciente interés de la sociedad por una alimentación saludable como parte de prácticas de salud preventiva. La promulgación de la Ley de Alimentación Saludable y su reglamento, que hace vinculante el etiquetado con octógonos e incorpora a la educación física y a los deportes como parte de un estilo de vida saludable, expandirá más la demanda interna de alimentos ecológicos y es una oportunidad a aprovechar.

El Consorcio Agroecológico Peruano considera que el PLANAF es un marco legal adecuado para el fomento de la Agricultura Ecológica Familiar. Para tal efecto, la presente consultoría recogió las opiniones de representantes de organismos públicos, asociantes de productores ecológicos, redes de ONG, universidades y cooperación internacional con distintos roles, funciones e interés en la agricultura ecológica y la alimentación saludable, en torno a los objetivos del PLANAF y formular propuestas específicas de política y estrategias favorables a la Agricultura Ecológica Familiar desde una perspectiva agroecológica, en línea con los lineamientos y Acciones Estratégicas del Plan.

Las propuestas consensuadas de política son mostradas en detalle en matrices comparativas en la presente consultoría, Un resumen del diagnóstico de la situación de la AF y de los problemas que limitan su transformación en AEF es el siguiente 1. La expansión de la demanda nacional e internacional por alimentos ecológicos y saludables, choca con la limitada oferta interna de estos productos, frescos o transformados. El escaso número de agricultores ecológicos y el reducido número de empresas ecológicas en el país es una de las causas del problema, la que a su vez se basa en otras dificultades a superar.

2. La brecha de demanda descrita puede ser el motor que dinamice el incremento de la agricultura ecológica familiar y la expansión de cadenas productivas con empresas que agreguen valor a la agrobiodiversidad nacional, que es una de las principales ventajas comparativas del Perú en el mundo.

3. Esto no será posible sin políticas, acciones y recursos públicos que inviertan en reducir o eliminar los problemas que limitan la oferta nacional e internacional de productos ecológicos, tales como.

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El deterioro de los recursos naturales (agua, suelos, bosques, biodiversidad) en los territorios donde se ubica la agricultura familiar de subsistencia (AFS), incrementa la vulnerabilidad social y ambiental de las familias y sus comunidades, limita su producción de alimentos y genera pobreza y bajos ingresos. El cambio climático, como amenaza presente y en expansión, incrementa la vulnerabilidad de las familias y los ecosistemas frágiles andinos y amazónicos que éstas habitan y acelera la perdida de la agrobiodiversidad que caracteriza sus sistemas productivos.

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La reducida productividad y calidad de los cultivos y crianzas de la AFS se origina en tecnologías y prácticas productivas de bajo rendimiento, erosión de suelos y pastos, escasez de semillas de calidad y escasez de mano de obra por la migración. A esto hay que agregar los ciclos irregulares de lluvias y los cambios de temperatura generados por el cambio climático.

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La debilidad de las organizaciones de la AFS y de las comunidades campesinas e indígenas que los representan, limita su capacidad de articulación con el mercado y los hace dependientes de intermediarios que los habilitan para comprar sus cosechas a bajos precios.

Las limitaciones empresariales de sus organizaciones permiten que los intermediarios se beneficien en la cadena de proveedores de las empresas comerciales y agroindustriales.

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En cuanto a la agricultura familiar intermedia y consolidada, su dependencia de insumos agroquímicos y de sistemas intensivos de monocultivo articuladas a cadenas productivas de comercialización y financiamiento, abastecen el consumo de alimentos no siempre saludables y limitan la transición a sistemas productivos agroecológicos biodiversos y saludables.

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La inexistencia de normas vinculantes que haga realidad el Sistema Participativo de Garantías (SPG) y el alto costo de la certificación de tercera parte, limita la expansión de la producción ecológica para el mercado interno y el incremento de las familias interesadas en esta alternativa.

La carencia de personal técnico y de líderes campesinos innovadores capacitados en el enfoque y las técnicas agroecológicas, es también una limitación para la futura expansión del SPG.

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El limitado funcionamiento de los COREPO y la CONAPO es una limitación institucional que frena la expansión de la AEF. A la falta de compromiso político de los GORE, expresado en la continua rotación de funcionarios y los escasos recursos presupuestales, se une la ausencia de gobiernos locales, debilidad de las organizaciones regionales de productores orgánicos y las limitaciones financieras de las ONG agroecológicas. La actuación sectorial no coordinada con los actores regionales limita el funcionamiento de los COREPO

4. En relación a las recomendaciones de política para superar esta situación desde los objetivos y lineamientos del PLANAF, se sugiere las siguientes, desde una perspectiva agroecológica con enfoques transversales de equidad de género, intergeneración e interculturalidad :

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Mejorar la resiliencia de familias, comunidades y territorios en cuencas con ecosistemas frágiles para mitigar el impacto de cambio climático, priorizando proyectos de siembra, cosecha de agua y riego tecnificado, recuperación de ecosistemas y pastos degradados, con forestación en laderas y praderas andinas y en la amazonia, como condición para preservar y usar la agrobiodiversidad propia de la agricultura familiar.

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Asegurar la participación de mujeres y jóvenes en el acceso, uso y gestión de los RRNN de propiedad de las comunidades campesinas e indígenas, promoviendo ordenanzas municipales y acuerdos internos en las organizaciones

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Impulsar la transferencia tecnológica agroecológica en los sistemas de cultivos familiares, validando y expandiendo las experiencias exitosas de familias innovadoras en prácticas sostenibles de RRNN, conservación in situ de semillas nativas, control biológico de plagas y enfermedades, cultivos con riego tecnificado y técnicas de post cosecha y transformación, recuperando e innovando los saberes locales campesinos e indígenas.

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Incidir en políticas y recursos del PLANAF para reconocer a la agricultura ecológica biodiversa como generadora de servicios ambientales adaptados al cambio climático y generadora de externalidades positivas para las personas, comunidades y territorios, creando sistemas públicos de retribución similares al MERESE

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Ampliar con recursos públicos la formación técnica agroecológica de líderes innovadores campesinos e indígenas (yachachiq, camayos y otros) validando y aplicando módulos de formación validados, a fin de crear un sistema de base de asistencia técnica y capacitación campesino a campesino.

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Ampliar con recursos públicos la formación agroecológica de técnicos y profesionales agropecuarios, desde los CETPRO, institutos tecnológicos y universidades en coordinación con MINEDU y MINAGRI y los GORE, aplicando experiencias validadas y exitosas, como condición para expandir los sistemas participativos de garantías (SPG).

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Desarrollar investigación básica y aplicada desde universidades e institutos regionales con fondos del canon para intensificar la producción agroecológica en sistemas de cultivos, en particular con tecnologías que masifiquen la producción de materia orgánica y controladores ecológicos de plagas y enfermedades, mecanización agrícola y técnicas de post cosecha y transformación para ampliar la oferta de calidad de la producción ecológica familiar con valor agregado.

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Generar espacios de validación y replica de estas tecnologías entre universidades, asociaciones de productores ecológicos, empresas y fondos públicos de innovación. Promover cadenas cortas entre las organizaciones de productores ecológicos y las empresas culinarias vinculadas al turismo interno y externo y agreguen valor a la agrobiodiversidad campesina e indígena.

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Fortalecer las capacidades técnicas y empresariales de las asociaciones de productores ecológicos para el mercado regional y nacional, adaptando experiencias exitosas de las cooperativas de exportación de cultivos orgánicos.

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Facilitar a las asociaciones de productores el acceso a financiamiento y crédito para componentes de la cadena productiva (post cosecha, logística, transporte) que mejoren su capacidad de negociación directa con empresas comerciales, culinarias y agroindustriales que buscan poner en valor la agrobiodiversidad y las culturas locales como ventaja competitiva y abastecer la demanda nacional e internacional de productos orgánicos.

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Incidir en las estrategias y recursos del PLANAF para erradicar el uso de los agrotóxicos en la producción comercial de alimentos, regular las empresas que los comercializan y reducir los subsidios e incentivos a su importación como un tema de salud pública y ambiental y garantía de implementación de la Ley de Alimentación Saludable y de las estrategias de salud preventiva del MINSA.

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Incidir en los GORE, los municipios, las ONG, las asociaciones de productores ecológicos y las empresas para reactivar los COREPO con recursos públicos, liderando la implementación de los SPG luego de promulgado el Reglamento como parte de estrategias de competitividad regional y posicionamiento nacional de productos ecológicos emblemáticos. Fortalecer los Biomercados y Ferias locales y regionales de alimentos ecológicos y garantizar la agrobiodiversidad desde el SPG, adaptando los PROCOMPITE regionales y municipales para financiar complementariamente los SPG.

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Fortalecer la cooperación entre MINSA, MINEDU y MINAGRI con las instituciones participantes en la Plataforma de Alimentación Saludable (PAS) e impulsar campañas de educación alimentaria y salud preventiva presentes en la Ley de Alimentación Saludable, reforzando y ampliando la demanda de productos ecológicos en relación con empresas de comercialización y transformación en cadenas de valor.

5. El PLANAF identifica acciones y recursos sectoriales diversos para apoyar a la Agricultura Familiar.

A estos recursos se pueden sumar los aprobados en los PPR de los sectores que forman parte de la Comisión Multisectorial de Agricultura Familiar como MINAGRI y sus OPD, MINAM, MINCETUR, MINSA, MIDIS, MIMP, MINEDU y PRODUCE, así como recursos de GORE y municipios presupuestados para este fin 6. Sin embargo, los presupuestos de estos organismos obedecen a objetivos y políticas sectoriales o subnacionales, que no siempre dialogan entre sí, originando duplicidad de acciones en problemas de naturaleza multidimensional, limitando logros y resultados. Otro problema es la limitada ejecución de fondos de inversión de sectores y gobiernos subnacionales, creando la paradoja entre necesidades crecientes insatisfechas y recursos que revierten al Tesoro Público.

7. Las mejores intenciones del PLANAF pueden chocar con las limitaciones descritas, frenando el logro de sus objetivos y metas. Urge un cambio radical de los sistemas de gestión del PLANAF, optando por un enfoque territorial en cuencas que fije objetivos, estrategias y recursos con la participación de todos los actores interesados en el desarrollo sostenible del ámbito, al cual deben articularse los objetivos y lineamientos del PLANAF. 8. La gestión territorial por cuencas hidrográficas, sean occidentales, centrales u orientales y que abarquen diferentes niveles para articular lo rural y urbano, fue el principio ordenador del territorio que validaron las culturas originarias y que abandonó la lógica productiva y de ocupación humana vigente desde la colonia y la república, El interés creciente de los últimos gobiernos en aprobar políticas y normas favorables al enfoque territorial es el inicio de una recuperación y modernización de este principio ancestral.

9. El Consorcio Agroecológico Peruano propone validar diversos modelos piloto de gobernanza territorial en cuencas, como la estrategia principal para implementar las recomendaciones de política para el fomento de la AEF en el marco del PLANAF. Existen experiencias exitosas de modelos de gobernanza territorial que concertan a mancomunidades municipales, comunidades campesinas, asociaciones de productores, empresas, gobiernos regionales y programas sectoriales para formular planes de desarrollo socio económico y ambiental por cuenca que articulen las inversiones a favor de la agricultura ecológica familiar y faciliten el acceso a mercados locales y regionales, desde presupuestos participativos municipales y regionales y recursos sectoriales complementarios.

CALENDARIO AGROECOLÓGICO DICIEMBRE * domingo 1 diciembre, Día de la Prevención del SIDA * martes 3 diciembre, Día Internacional del No Uso de Agroquímicos. * martes 3 diciembre, Día nacional de la promoción de la Agricultura Ecológica. * domingo 8, Día de la Inmaculada Concepción * sábado 8, (1999-2019) Vigésimo Aniversario de la BioFeria de Miraflores. * martes 10 diciembre, Día de la Declaración de los Derechos Humanos * sábado 14 diciembre, día del Cooperativismo Peruano * miércoles 25 diciembre, Navidad, feriado * miércoles 1 de enero 2020, feriado

COMPARTIENDO #23- 2019 ¡ Por una vida productiva, sana y feliz, libre de transgénicos !

Miembro de ▪ Centro IDEAS: Innovando procesos de calidad de vida ▪ RAE Perú (Red de Agricultura Ecológica del Perú) Promoviendo sociedades con cultura agroecológica ▪ CCE (Comité de Consumidores Ecológicos): Por una vida productiva, sana y feliz; libre de transgénicos ▪ SEPIA (Seminario Permanente de Investigación Agraria) Perú: el problema agrario en debate