Volumen 93 No. 1 Publicado por Christian Triumph Co. jen, feb, marzo 2016
HABLANDO ACERCA DEL ENAMORAMIENTO “Alégrate joven en los días de tu juventud... aparta tu carne del mal, porque la adolescencia y la juventud son vanidad” Eclesiastés 11:9,10; 12:1. Mientras eres joven estás en la primavera de tu vida, puedes ser alegre o despreocupado. No siempre tenemos todos los días calor, sino también hay frío. Ten cuidado que tu juventud no se marche por una locura; hay jóvenes que a veces quieren a Dios y quieren salir con la suya propia. Estás pensando dejar de ser niño intermedio, pre-adolescente o adolescente. Hay jóvenes adolescentes que desean ser adultos para tomar sus propias decisiones y propios caprichos. Lee Eclesiastés 11:9. Joven adolescente no tomes decisiones de adultos que luego traerá tristeza sobre ti. Me hace recordar cuando trabajaba en Ecuador, los exportadores de bananas cortaban muy verde el plátano y luego le colocaban en un deposito parecido a un horno y con algunos químicos alrededor de 3 días estos plátanos estaban amarillos, pero al romper por dentro todavía eran verdes. Los adolescentes a veces quieren madurar muy rápido, todo tiene su tiempo. No adelante a la naturaleza divina. La juventud tiene muchos goces especiales y debes aprovecharla. Mucha juventud busca un compañero o compañera en su adolescencia y luego desarrollan una aventura amorosa. El problema que no han llegado a la madurez para tomar tales decisiones. Solamente decimos al
joven, si desea ser un cristiano fiel y victorioso, recibe los consejos bíblicos de tus amigos mayores espirituales. La atracción entre los dos sexos es una parte del plan de Dios. Que el joven se enamore no es malo. Que se sienta atraído por el sexo opuesto es divino. Que se aproveche y llegue al manoseo y de allí al acto sexual, eso no es de Dios. Eso se llama pecado. La relación matrimonial, como la relación entre Cristo y la iglesia es sagrada. Dios ideó la atracción entre un hombre y una mujer con el fin de crear familias fuertes y hogares estables para criar hijos sanos. (Malaquías 2:15). La Bíblia prohíbe cualquier abuso de esta atracción sagrada, la impureza en el asunto del sexo es uno de los peores pecados. Nunca se debe estimar como un juego o una broma. El plan de Dios exige a personas maduras lo correcto de una amistad entre dos sexos, es establecer un hogar. Ningún jovencito adolescente está suficientemente maduro para tomar esta decisión para ser un marido o una esposa. Es fácil ver la locura de los amores de los jovencitos, tomar decisiones antes de haber nacido de nuevo, tener suficiente edad y asegurarse para su futuro. No están listos para suplir ninguna necesidad de un hogar ni suficientemente preparados para criar y educar hijos. El joven apenas puede manejar sus propias necesidades y sus propios problemas, sin comprometerse cuidar a otra persona. Por lo tanto ningún joven, señorita tiene ningún derecho de pensar en escoger a un marido o una mujer. Muchos jóvenes se enamoraron de una chica bonita pero no se dieron cuenta que