MIÉRCOLES, 27 MAYO 2015
MONOGRÁFICO
ESPECIAL
LA VANGUARDIA 1
PATROCINADO POR
EMPRESAS y emprendedores
ANGEL GARCÍA, DE AMP STARTUPBOOTCAMP az “Barcelona es capaz de atraer talento; el reto es mantenerlo” PÁG. 5
COMPARAR Y LUEGO COMPRAR Los portales de comparación de precios se popularizan PÁG. 9
SOCIALCAR La barcelonesa Mar Alarcón creó la red de alquiler de coches entre particulares que hoy tiene 40.000 socios
REVOLUCIÓN COLABORATIVA: un camino imparable Colaborar está de moda. Hoy es posible compartirlo casi todo: coche, taxi, vivienda... ¿Qué esconde esta práctica y qué empresas apuestan por ella? ESTHER ESCOLÁN
P
ese a que el trueque o el intercambio de servicios no es nuevo, la economía colaborativa,
aquella que promueve el intercambio de productos o servicios e incluso su disfrute compartido entre particulares, se consolida a pasos agigantados en los últimos años. Los expertos coinciden en señalar que la actual crisis económica, así como cierto colapso
del sistema productivo, han contribuido en parte al despegue de una tendencia cuyo origen se remonta al año 2007 y que, según Forbes, mueve unos 30.000 millones de dólares al año. Y crecerá un 25% en 2015. Gerard Costa, profesor de Mar-
keting de Esade, afirma que la economía colaborativa surgió por la combinación de tres tendencias: “Una crisis económica global que pone bajo sospecha el modelo de consumismo basado en la posesión; una generación emergente de jóvenes millen-
nials buscadores de experiencias, desapegados de la posesión, cuyo sueño no es tener coche propio sino conectarse globalmente; y unas plataformas tecnológicas y un uso extensivo de internet que permiten la aparición de empresas que conectan a los ciudadanos, gestionan sus interrelaciones y les cobran por ello”. ACCESO VERSUS PROPIEDAD Andrea García, directora de Talent Garden –primera red internacional de centros de coworking enfocada al sector digital– afirma que la crisis ha comportado un cambio de mentalidad: “Cada vez consumimos de manera más inteligente y somos más conscientes de que el consumismo sin mesura trae consecuencias negativas. Nos hemos dado cuenta de que la clave está en aprovechar de manera práctica los productos y/o servicios de los que disponemos.” Sigue en la página 2 »