Cuídate en la nieve

CuĂ­date en la nieve.

Consejos de

seguridad en la nieve Los cascos salvan vidas. Es la pieza más importante del equipamiento para prevenir lesiones graves en el cerebro, en caso de accidentes. Es importante que se ajuste cómodamente y asegurar con la correa.

Respeta tus límites: no esquíes en pistas que estén por encima de tu nivel de habilidad.

Realiza pausas si estás cansado.

Cuídate de la hipotermia: viste ropa en capas con prendas que sean livianas, repelentes al agua, y principalmente de lana, seda o polipropileno.

Sigue las reglas: no te salgas de la pista. Obedece el cierre del sendero y otras señales de advertencia.

Esquía acompañado: no importa lo bueno que seas en este deporte, las caídas son habituales y, en algunos casos, puede que necesites ayuda.

Siempre es más seguro esquiar con un amigo para que puedan cuidarse.

Acuerda con amigos y familia un punto de encuentro por si se separan del grupo.

Mantén la ingesta de líquidos y alimentación durante tu estadía en la nieve.

Recomendaciones

para el cuidado de la piel Utiliza un fotoprotector solar con factor 30 o 50 en rostro, orejas y cuello principalmente.

La aplicación debe realizarse 15 minutos antes de exponerse al sol, y luego repetir cada 2 horas.

Usa un fotoprotector labial, mínimo factor 15.

Los niños son susceptibles de perder temperatura, asegúrate de vestirlos en capas con ropa resistente al agua y de secado rápido.

La nieve es una de las superficies que refleja los rayos ultravioletas (UV) en mayor porcentaje.

Protecciรณn ocular: utiliza lentes con protecciรณn UV comprobada y cerrados en los costados.

Elige ropa adecuada: usa parka, gorro que cubra las orejas y guantes resistentes al agua para proteger las manos.

Adaptación

a la altura

Cuando se está a cerca de los 2.100 metros sobre el nivel de mar, la concentración de oxígeno en sangre comienza a disminuir. Los síntomas más comunes son: dolor de cabeza, náuseas, vómitos, pérdida del apetito, fatiga anormal, dificultad respiratoria, y dolor de oídos, entre otros.

Consejos Preventivos • Come adecuadamente: los alimentos ricos en carbohidratos, como cereales, pan, pastas y frutas, permiten utilizar el oxígeno más eficientemente y ayudan a mantener los niveles de energía.

• Si estás con vómitos, evita alimentos sólidos y toma pequeñas cantidades de agua para prevenir una deshidratación.

• La deglución y el bostezo ayudan a igualar la presión de los lados del tímpano, lo que evita el dolor de oídos.

• No consumas alcohol y limita la cafeína ya que podrían aumentar los síntomas.

Ten en cuenta que las personas se aclimatan a diferentes ritmos, en especial, niños, embarazadas o ancianos.

En caso de presentar síntomas de apunarse, se recomienda mantener una actividad ligera durante el día. Esto es mejor que dormir, ya que durante el descanso la frecuencia respiratoria disminuye, lo que exacerba los síntomas.

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