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AU TO B I O G R A F Í A - M e g a n R a p i n o e
DECISIONES QUE MARCAN UNA VIDA CONSIDERADA UNA DE LAS MEJORES FUTBOLISTAS DEL MUNDO, LA ESTADOUNIDENSE MEGAN RAPINOE HA CONVERTIDO SU VIDA EN UN ALEGATO CONTRA LA INJUSTICIA. EN EL LIBRO ONE LIFE CUENTA LAS RAZONES DE SU COMPROMISO. TEXTO J. L. GALLEGO
UNA VIDA DIFERENTE One Life, editado por Libros Cúpula, se presenta en España como “la autobiografía de la mejor futbolista del mundo”. Una frase de la escritora Mary Oliver encabeza el texto: “Dime, ¿qué planes tienes para tu única, salvaje y preciosa vida?”.
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MEGAN RAPINOE ES UNA DE LAS MEJORES FUTBOLISTAS actuales, quizás de todos los tiempos, lo que viene a ser casi lo mismo en un deporte prácticamente invisible hasta hace muy poco. Centrocampista con visión de juego y técnica elaborada, ha conseguido junto a la selección estadounidense dos Copas Mundiales de Fútbol y una medalla de oro olímpica. Californiana, con 35 años en estos momentos, es, además de todo eso, un auténtico símbolo en la lucha por los derechos del colectivo LGTB –ella misma decidió dar a conocer su homosexualidad en 2012–, por la igualdad salarial entre hombres y mujeres y también contra el racismo y toda clase de discriminación, sumando su voz al movimiento Black Lives Matter. “No tiene sentido luchar por una causa sin alinearte con otras. Aquellos que están siendo discriminados no deberían luchar solos y dejar su defensa únicamente en manos del grupo marginado”, afirma. No es por tanto One Life, la biografía que acaba de publicar la editorial Libros Cúpula, un libro cualquiera. Porque la vida de Rapinoe no es como de cualquiera otra deportista. No solo es una historia de superación, esfuerzo y éxito deportivo, también de compromiso permanente,
con todo lo que ello implica en una sociedad que no siempre acoge con buenos ojos que aireen sus miserias. Pero es también un libro incómodo para el lector. Porque Rapinoe ha querido no solo contar su historia, sino también formular una pregunta: “¿Qué vas a hacer tú”. One Life arranca con uno de esos episodios que pueden marcar la vida de una jugadora. Era septiembre de 2016 y Rapinoe disputaba con su selección un partido amistoso en el estadio de Chicago ante poco más de 3.000 espectadores. Pero cuando sonó el himno nacional, su decisión de hincar la rodilla en tierra, como había hecho días antes el quaterback de los San Francisco49ers para protestar contra la brutalidad policial y el racismo que habían tomado las calles de Estados Unidos, desvió hacia ella toda la atención, convirtiéndola en el centro de un escándalo que centralizó en ella la ira de miles de aficionados e hizo peligrar su continuidad en el combinado nacional. “Sé qué significa mirar a la bandera y sentir que
} Megan Rapinoe, vistiendo
la camiseta de la selección estadounidense.