El rol de la vanguardia y la figura del traidor en la concepción marxista: la contribución del testigo, el testimonio y la ficción para la historia Matías Calfucurá »
Palabras claves: vanguardia – marxismo-leninismo - figura del traidor – testigo – testimonio – traidor –ficción
› Resumen
El concepto de Aufhebung en Marx encierra los siguientes aspectos: el de la abolición, el de la superación, el de la transfiguración y el de la conservación. ¿Cómo podría leerse la Aufhebung según la interpretación marxista del partido de vanguardia? Para poder transfigurar y superar el modo capitalista, es necesario, previo al comunismo, conservar la división de clases, creando una vanguardia que se impone como clase dirigente. Se conserva la autoridad, la disciplina, se conserva la negación de la libertad porque la dirección es la que porta la conciencia, la lectura correcta del socialismo científico. Para abolir el modo de producción capitalista, es necesario abolir cualquier elemento que resulte hostil, cualquier elemento que presente ideas diferentes de las emanadas de la dirección. En este trabajo se analiza como operó la figura del traidor en la Rusia leninista, en la España del 36, en la Checoslovaquia comunista de los años sesenta a la luz del testimonio de escritores que fueron partícipes y testigos de estos hechos para luego revisar cómo operó la figura del traidor en la Argentina de los años setenta.
› Presentación
En esta monografía me interesa partir de la contribución de Marx al estudio de la historia para luego analizar de qué manera interpretaron a Marx, qué hermenéutica desarrollaron las direcciones de diferentes partidos marxistas en diversos procesos revolucionarios del siglo XX. Para ello intentaré encontrar puntos en común en la crítica que presentan los testimonios de diferentes testigos ya sea en formato de biografía o de ficción literaria. En este marco se evaluará el rol de la vanguardia y la figura del traidor en la Rusia leninista, en la España del 36, en la Checoslovaquia comunista de los años sesenta y en la Argentina de los setenta. Creo que una buena manera de introducir el desarrollo de esta monografía es con una frase de Michael Löwy 1:
“En realidad, ahora que el marxismo dejó de ser usado como una ideología de Estado oficial por parte de regímenes burocráticos y parasitarios, hay una oportunidad histórica para redescubrir el mensaje marxiano original y desarrollarlo de una manera creativa. Por mi parte, todavía creo, así como en 1970, que la teoría de la revolución del joven Marx –la filosofía de la praxis y, dialécticamente ligada con ella, la idea de la autoemancipación de los trabajadores– sigue siendo la mejor brújula para conocer el propio camino en el actual y confuso panorama histórico.”
1
Löwy, M., La teoría de la revolución en el joven Marx, Herramienta, 2010.