Fiesta del Juguete, Begoña Esteves, Educación Infantil

beGoña esteves, eDucación infantil

“Mientras juega, un niño siempre se comporta más allá de su edad, por encima de su comportamiento diario. Mientras juega, es como si fuera más grande de lo que es” -Lev Vygotsky-

Los peques de “San Joselito” vuelven después de las vacaciones de Navidad muy contentos, deseando reencontrarse con sus amigos y contarles lo bien que se lo han pasado y como no, lo que les han traído los Reyes Magos.

Asambleas interminables con caras llenas de entusiasmo, contando cuál ha sido su juguete favorito, lo que les han traído en casa de los abuelos, tíos… y es el momento en el que la profesora les dice: “Chicos, ¿sabéis lo que ocurre este viernes? ¡Podemos traer nuestro juguete favorito al cole!”

De repente silencio, todos pensando qué traerse. Hacemos una ronda y nos van diciendo el juguete elegido: coches, muñecas, juegos de mesa, maquillaje…un sinfín de juguetes, algunos desconocidos por las profes porque son novedades de este año. Y es el momento en que nuevamente la profe les dice: “Sabéis que el viernes vamos a compartir los juguetes con nuestros amigos” … Caras de alegría se mezclan con caras de preocupación, lo de compartir no es tarea fácil para nuestros peques, los adultos lo tenemos claro, pero ellos: ¿Por qué tienen que dejar su juguete? ¿Y si se lo rompen? ¿Y si luego no se lo devuelven?

Llega el día (todos los viernes de enero) y llegan cargados con bolsas que contienen sus tesoros más preciados, juguetes que con tanta ilusión han pedido en sus cartas a los Reyes Magos y que están deseando enseñar a sus amigos.

Nada más llegar, hacemos una asamblea y cada niño enseña su juguete, nos explica cómo funciona y por qué ha sido “el elegido” y la profe recuerda las normas: “todos podemos jugar con los juguetes de los demás, eso sí, tenemos que cuidarlos como si fueran nuestros y jugar con todos los niños ¿de acuerdo? Pues ¡a disfrutar!”

Algunos niños, desde el principio dejan sus juguetes a los demás, otros son un poco más reticentes y les cuesta separarse de ellos, pero al final lo consiguen y se dan cuenta que no pasa nada y que es muy divertido jugar con otros juguetes. Y luego están los otros… los que de ninguna manera quieren dejar sus juguetes a los demás, que no sueltan su tesoro en todo el día y ¿sabéis qué? Que no pasa nada, que algunos necesitan más tiempo para aprender a compartir y hay que respetarles, seguro que el próximo viernes lo consiguen…

Es un lujo acompañar cada día a nuestros peques, ver cómo aprenden valores que les van a acompañar toda la vida: ¡GRACIAS!