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cómo manE jar los ErrorEs

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corr E cta

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¿Te sientes mal porque “la regaste”, porque has cometido uno, varios o muchos errores? Deja de preocuparte. ¡Seguirás cometiéndolos!

por: Geor Ge Méndez En un negocio comercial siempre hay tareas que al realizarlas podemos cometer errores, procura que éstos no te impidan continuarlas; sigue haciéndolas, pero ahora de manera diferente; cambia tu enfoque o tu procedimiento porque si no, podrías volver a cometerlos.

Puedes seguir cometiendo errores, pero procura que nunca se repitan los mismos.

¿Qué podemos hacer ante un error? Enseguida de percatarnos de ello, inmediatamente preguntarnos, ¿qué es lo que hice mal? ¿Qué debo aprender de ello?

Que tus errores nunca te derroten, nunca te des por vencido.

En el caso de un negocio, ya sea uno nuevo o una ampliación o expansión de éste, los errores que llegamos a cometer son comunes en muchos de sus propietarios: pasa a la páGina 22

• Nos desesperamos; no le damos el tiempo suficiente para que empiece a dar frutos.

• Lo implementamos sin analizar el mercado, la competencia, el contexto socioeconómico del momento, etc.

Viene de la páGina 20

• Queremos darle gusto a todos, olvidando que, en el día a día, realmente habrá clientes que jamás gustarán de nuestros productos o servicios.

• Tomamos decisiones en base a meras opiniones de amigos y familiares, en vez de consultar a los expertos.

• Intentamos ser como los exitosos, pero brincándonos las tareas que ellos tuvieron que hacer para serlo.

• Nos olvidamos de la originalidad intentando copiar, tal cual, el estilo de otros.

• Intentamos cambiar a las personas cuando en la práctica eso es imposible porque nadie cambia por imposición, sólo por voluntad propia.

• Desconocemos nuestras fuerzas y debilidades, lo que nos impide potencializar las primeras y manejar las segundas.

Para que nos vaya bien en nuestros asuntos personales y empresariales es necesario que aprendamos de nuestros errores, de los pequeños y los grandes, pero no sólo de éstos, sino también aprendamos de nuestros aciertos. Poniendo en práctica lo aprendido en ambos, “nos estaremos reinventando continuamente.

Ante los errores, los sentimientos más comunes que nos invaden son de frustración, enojo y miedo, pero algunas personas en lugar de lamentarse o rendirse deciden aprovechar la experiencia para aprender y salir adelante.

Tengamos siempre presente que, en todas las decisiones que tomamos, en nuestra vida personal o empresarial, siempre existirá el riesgo de equivocarnos. Sin embargo, si no aceptamos nuestros errores o culpamos a otros por ellos, nunca creceremos.

Ante nuestros errores:

• Reconozcámoslos y hagámonos responsables de ellos.

• Si afectamos a otros, pidamos perdón, si es necesario.

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