3 minute read

Guillermo Buitrago, el precursor del vallenato

Por Ofelia Peláez

Guillermo Buitrago es uno de esos fenómenos musicales que se presentan pocas veces en la historia. Se están cumpliendo 100 años de su nacimiento, el 1 de abril de 1920 en Ciénaga, Magdalena, y falleció el 19 de abril de 1949, hace 71 años, pero sigue siendo el infaltable en la época decembrina de los colombianos. Las emisoras desempolvan sus grabaciones y se empieza a escuchar “…me gusta

Advertisement

Guillermo Buitrago Foto. Ilustración por David Felipe Jiménez Ochoa

el ron de vinola, me gusta, me gusta Lola…” ese ron de vinola que se vendía en un establecimiento llamado La Tranca, en Ciénaga, Magdalena.

En el excelente libro Guillermo Buitrago, cantor del pueblo para todos los tiempos, escrito por Édgar Caballero Elías y editado por Discos Fuentes, se narran su vida y sus logros. Fue un verdadero precursor, además del vallenato, de otros aspectos

como el de periodista, puesto que tuvo una revista llamada La Cantaleta y un cancionero mensual llamado Cancionero GB. Fue el primer disc jockey pues en las emisoras de la región daba a conocer los nuevos temas de los cantantes de moda y como si fuera poco, fue el primero en hacer comerciales cantados (jingles) a la sastrería La Costeña, a las farmacias San José y Royal, al café Almendra Tropical, Canada Dry, Nutrimalta y a los rones Añejo y Motilón, entre otros. Empezó a recorrer todos los caminos de su región, grabó algunos temas en varias cortadoras de acetatos que había en Barranquilla y otras poblaciones. Fue cuando don Antonio Fuentes le empezó a grabar en Cartagena; su primer disco de 78 rpm. tenía Las mujeres a mí no me quieren y Compae Helidoro, dedicado a Heliodoro Eguis dueño de una panadería. Las personas compraban el ficho y a esperar la entrega del disco, pues la demanda era enorme. Una de sus grabaciones imprescindibles para el fin de año es La víspera de año nuevo, de Tobías Enrique Pumarejo. Antes de su vinculación con la disquera Fuentes, Buitrago había grabado para la Odeón argentina. Buitrago contribuyó a la difusión de la obra de Rafael Escalona y tuvo mucha influencia en otros artistas, como el caso de Julio Torres que creó el grupo Los Alegres Vallenatos. Julio Torres fue un cachaco que compuso bailables como Los camarones y El aguacero, ambas relacionadas con el agua, y también Pomponio, un bailable decembrino de grata recordación; su mayor ambición era conocer el mar y allá viajó, a Cartagena, donde falleció ahogado en el mar el 9 de enero de 1951, cuando contaba solamente 20 años.

También muchos artistas y grupos recibieron la influencia de Buitrago, como Los Vallenatos del Magdalena, Julio Bovea y sus Vallenatos, el Trío Fonseca, Los Trovadores de Barú y otros.

Se crean a veces confusiones con un connotado artista, pues cuando se habla de Buitraguito, muchos creen que es Guillermo Buitrago, pero no. Se trata de Julio César Sanjuán, amigo y admirador de Buitrago, que ha tenido mucha actividad en este estilo de vallenato; pero Buitraguito es diferente a Buitrago.

Guillermo Buitrago Foto. https://arrierias.travel.blog/2019/05/22/dos-grandes-de-lamusica-por-jaime-rico-salazar/

Algunos se preguntan por qué el éxito de Guillermo Buitrago. Posiblemente el encanto radica en que su padre era antioqueño, de Marinilla, y eso le imprime el sabor nostálgico de la música parrandera paisa, a lo que se suma la alegría y picaresca de la música de la costa atlántica colombiana, ya que su madre era cienaguera, además del maravilloso estilo para ejecutar la guitarra, que según los entendidos hace un bordoneo extraordinario. Se han tejido muchas historias acerca de su fallecimiento, pero en el libro citado se demuestra que falleció a causa de una tisis galopante, según la certera investigación de Édgar “Chichi” Caballero, que presenta en su libro todos los documentos relacionados con su muerte. Guillermo Buitrago murió el 19 de abril de 1949 y ese día nació su leyenda.

El Jilguero de la Sierra Nevada, el Trovador del Magdalena, el Precursor del Vallenato, como quiera llamársele, es y será el imprescindible e inolvidable en todos los festejos de fin de año. Se leyenda continúa.

Ofelia Peláez. Conferencista sobre bolero y música popular, jurado en varios festivales nacionales, escritora de varios libros entre los que se destaca: Alfredo Sadel, cuenta mi alma. Su historia, sus anécdotas, su discografía y fotografías inéditas, Invitada al programa El rinconcito de los recuerdos, de Radio Reloj – Q’hubo Radio, Caracol Medellín

This article is from: