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El Ferrocarril y sus consecuencias. Vicente Sandalinas Perruca - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - pág
EL FERROCARRIL Y SUS CONSECUENCIAS
Vicente Sandalinas Perruca
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La implantación del ferrocarril en el úl timo tercio del siglo XIX supuso un hito en la historia de la humanidad, ya que las personas dispusieron desde ese momento de un medio de transporte más rápido y seguro para desplazarse a distintos lugares. A Navajas el ferrocarril llegó a principios de año 1901, y supuso una transformación en el ir y venir de las navajeros hacia Valencia, y to dos los pueblos que se encontraban en su reco rrido, así como también supuso un gran avance para el desplazamiento de números valencianos que tenían por costumbre pasar sus vacaciones de verano en Navajas, liberándolos de los in convenientes de las vetustas “ diligencias “, del traqueteo de los caminos y del polvo que tenían que soportar en sus trayectos. Con la llegada del ferrocarril a Navajas, los nuevos y viejos veraneantes se encontra ban con un acceso muy próximo al centro de la población, y para los que llevaban exceso de equipaje, existía un vecino de la localidad que se acercaba a la estación, para con su carro y su acémila cargar los equipajes del que lo so licitaba y trasladarlos de este modo al lugar de residencia del veraneante.
Tren de alta velocidad “El Pájaro Azul” Así mismo, para los vecinos de Navajas también supuso un extraordinario avance, ya que con el ferrocarril se podían trasladar a Va lencia para vender sus productos a los habitan tes de la ciudad ( pollos, conejos, huevos, frutas, verduras, etc). Quién no recuerda, sobre todo las personas de más edad, aquellos trenes como “ El BORREGUERO”, con aquellos vagones de madera y sus asientos de tablas, con las ventanas abiertas, donde entraba el humo de la máquina y la carbonilla se nos metía en los ojos, y que el trayecto de Navajas a Valencia, duraba más que el que hoy empleamos para ir a Madrid o Barcelona. Años más tarde, se fue modernizando el material ferroviario, y conocimos “ EL TAF “, de corte futurista, de una sola unidad, que más parecía una lanzadera que un tren. Después vino “ EL PÁJARO AZUL “, que supuso un salto cualitati vo por su diseño y porque sus asientos empezaban a ser más cómodos de lo habitual. Poco a poco, y a través de los años, se fueron mejorando las estruc turas ferroviarias y sus trenes, hasta llegar al momento actual, donde contamos con los trenes
Llegada del ferrocarril “El Borreguero” a Navajas
de cercanías, y para larga distancia, con los tre nes de Alta Velocidad. Pero la reflexión que me gustaría hacer sobre el ferrocarril y sus consecuencias, es la si guiente:“ En aquellos primeros trenes como El Borreguero, se respiraba un ambiente de relaciones sociales entre los viajeros, aunque no se conocieran, en el que se contaban sus inquietudes, sus deseos, sus trabajos, sus circunstancias, ya que la composición de los trenes con sus vagones diáfanos, propiciaban estos contactos, y además, las gentes se abrían a los demás, satisfechas por poder compartir con otras personas el devenir de sus días. Con el trascurso de los tiempos, y con la implantación de las nuevas tecnologías, ( móviles, iPad, tablets, portátiles, etc, ), las relaciones sociales entre las personas se van perdiendo poco a poco, y esto lo observamos frecuentemente en cualquier ambiente en el que nos movamos, y concretamente cuando viajamos en tren, vemos como la inmensa mayoría de los viajeros están pegados a sus aparatos tecnológicos, formando un caparazón inexpugnable, que hacen prácticamente imposible que se puedan establecer esas relaciones sociales que nuestros antepasados tanto y tan bien practicaban”. Diremos que esto es el progreso, y que es tas son las consecuencias con las que tenemos que abordar el día a día, aunque tengamos que dejar de lado esa actitud ante la vida como es la relación entre las personas, sus inquietudes, sus charlas, sus juegos, en fin, todo lo que supone una manera de afrontar el día a día como seres sociales que somos, y que las nuevas tecnologías parece que se empeñan en impedirlo, porque una cosa es progreso, y otra muy distinta, progresar como seres socialmente vivos.
Desde el “Grupo de Lectura”
Desde el Grupo de Lectura de Navajas, aso ciación recientemente constituida, se han venido organizando actos de tipo cultural que han contado con el aplauso de cuantos han tenido la oportunidad de asistir a ellos: viajes para asistir a representacio nes teatrales, participación en actos que han orga nizado otras asociaciones locales, mesas redondas con autores de libros, recreaciones y otras más que no han trascendido aunque hayan tenido un impor tante peso cultural. El “Grupo de Lectura” está abierto a cual quier persona que quiera participar de las activida des que desde él se organizan, unas contando con la colaboración del Ayuntamiento y otras que se llevan a cabo de manera independiente. Todas es tán abiertas al disfrute de todos, porque una de las características del “Grupo” es la generosidad. Cada socio paga lo que le apetece pagar con un mínimo de 15 euros al año, sin que el que paga una canti dad mayor tenga mayores derechos de ningún tipo, ni siquiera de representatividad, que el resto. Re cientemente mediante un convenio con el Ayunta miento, el Grupo ha aportado a los fondos de libros para que puedan ser leídos por cualquiera que los solicite, casi cuatrocientos ejemplares que forman parte de su patrimonio. La actividad por la que el Grupo es más co nocido es la de recrear escenas de época. Empezó por hacer una durante la Pascua de 2015 que consti tuyó una sorpresa para todos por lo novedoso; luego ha seguido con otra en Pascua y la de “Un día en la Belle Époque” –cuyos resultados están a la vista de todos– por las que el Grupo ha recibido las felicita ciones de muchas personas interesadas en estos ac tos de recreación. Un ejemplo del rigor en la puesta en escena y del acierto en su ejecución es el que ilustra estas líneas:
Cuando se escribe esta nota, el Grupo está empeñado en la preparación de otra recreación que constituya un homenaje a todas las personas que trabajaron por conseguir la ampliación del término municipal de nuestro pueblo y especialmente a An tonio Aucejo Aucejo –el “tío Antón el Petra”, alcal de en 1925– Manuel Villalba –el “tío Gilo”, juez de paz a la sazón – y Ramón Aucejo Barrachina –te niente de alcalde.
El homenaje –para corresponder a la magni tud de lo conseguido– habría de ser multitudinario y por eso el “Grupo de Lectura”, con la colabora ción del ayuntamiento, y de las asociaciones locales convoca a que todos –con blusa y alpargatas, con delantal y moño– participemos en él. Gracias