4 minute read

Javier Paredes Chí

Dando vueltas con Silvia

Deshumanización del cuerpo

Advertisement

Estamos no solo en una época sino un mundo en donde el odio es parte de nuestra vida. Está de moda pensar en el odio de una a otra persona, pero, ¿qué hay del odio que proviene de uno mismo? Además, del descontento por ser lo que eres, y no hablo de lo que pienso que somos, sino de lo que naturalmente y biológicamente es una persona. Aunque sé que el concepto mismo está en duda, por supuesto, depende de dónde estés parado conforme a tu visión de mundo. Y me arriesgo a escribirlo así, pero bueno, la literatura es para esto.

Si pensamos en el cuerpo, podemos argüir a la biología y a la ideología, hay un gran debate entre estos; dentro de nuestro contexto mexicano hemos de reconocer que predomina más la ideología de lo que es el ser humano, la ideología está determinando la identidad del ser humano. Pero, ¿qué si esta ideología no tiene un punto fijo, es decir, si en ella no se considera necesario que exista un absoluto? He hablado respecto a la deconstrucción en escritos anteriores y ella no presenta absolutos. Entonces nos encontramos en un mundo con ideología relativista, y sí, por supuesto, esta está paideia 1 presente y nadie la niega.

Por ende, para hablar de una humanización o deshumanización del cuerpo se tiene que hablar de qué es el ser humano en su origen, para entonces llegar a la lógica de una deshumanización. Y hablar del origen es un tema aún más complicado, ya que involucra una creencia base, o bien, fe, para creer en las presuposiciones de este origen. Si lo vemos desde una postura antropológica evolucionista tendremos la idea de que venimos de los animales, está claro. Las revistas de las universidades replican esta información como una presuposición, a eso me refiero. Esta es la lógica.

Ahora bien, he de mencionar que nuestro concepto de ser humano está influenciado por un aspecto dicótomo, es decir, en dos dimensiones y esto es precisamente lo que ha llevado a pensar que biológicamente es posible pensar en el cuerpo y además en un alma, como si estuvieran separadas. La escritora Nancy Pearcey le llama “two-story worldview” y 2

1. Paideia: Término técnico de la filosofía y la pedagogía, que significa aproximadamente educación o formación integral, o también sistema de principios, reglas y artes para una educación. Visitado el 03 de agosto en: http://etimologias.dechile.net/?paideia. 2. Nancy Pearcey es una escritora académica en la Universidad Bautista de Houston. Reconocida por The Heritage Foundation. 3. Pearcey, Nancy. 2018. Baker Publishing Group: United States of America.Love Thy Body.

en su libro “Love Thy Body” nos invita a 3 conocer más sobre lo que comento en este escrito.

Los filósofos griegos hablaban del alma como una esencia interna que estaba separada del cuerpo, posteriormente se fue entendiendo al cuerpo como un aspecto negativo y diversos monjes intentaron restringir sus deseos naturales con tal de llegar a una perfección solo en el alma. Esto, en vez de dar una libertad de vivir en armonía con ser cuerpo y alma a la vez; vivir de aquella manera llevó a que el ser humano no pudiera expresar todas las dimensiones de su vida de manera plena.

Posteriormente la postura humanista le dio esa “libertad” al cuerpo y negó el alma. Pero sabemos que la psicología del siglo XX dio paso a reconocer lo evidente, el ser humano tiene un aspecto inmaterial, y este fue denominado psiqué. Desde entonces necesitamos tener armonía entre nuestro ser emocional, mental, o como sea que le queramos llamar, si no, puede ocurrir algún desorden en nuestras cabezas, evidencia de ello son tantas enfermedades mentales y padecimientos de locura que se experimentan en este siglo XXI.

La libertad del cuerpo tampoco ha logrado hasta nuestros días una plenitud humana. De hecho, la violencia no ha disminuido, aun con todo el empuje humanista que se ha intentado, la sociedad no sigue mejor que cuando empezaron las revoluciones de la llamada libertad; todo esto me hace cuestionar el camino que ha seguido la sociedad con esta postura evolucionista, a veces materialista, pero definitivamente humanista. Y mi invitación como escritora y literata es hacerte pensar: ¿y si el problema está en nuestra voluntad humana?

Pero esta conclusión no la saco de una visión evolucionista, pues en ella no cabe, en ella está el determinismo y la lucha por el más fuerte, en ella no cabe la posibilidad ni siquiera de una moral, del bien y del mal, en esta postura no cabe pensar en la violencia como un aspecto negativo, sino solo como supervivencia. Mi labor en este momento es realizar una crítica y para ello tengo estas preguntas filosóficas: ¿por qué nos preocupa la violencia?, ¿nos duele lo malo que les sucede a otras personas?, pero entonces, ¿quién determina qué es bueno o malo?, sería arbitrario desde esta visión evolucionista.

Desde una perspectiva judeo-cristiana la moral lo determina un absoluto, y en esa cosmovisión sí cabe la bondad y la maldad, en esta visión se tiene una repugnancia hacia la violencia ejercida hacia el vulnerable, se tienen conceptos de dignidad humana y por lo tanto de humanización del cuerpo. Cabe mencionar que el absoluto está presente, pero por supuesto, ha sido puesta en tela de juicio esa visión de mundo, aunque como escritora, me parece que poco se conoce a fondo sobre esta.

Para terminar, la postura que presente en la de repensar sobre los actos de violencia de todo tipo. Aborrezco la violencia, me duele ver a la gente sufrir, sin temor digo que me parece que existe injusticia y más de uno lo hemos experimentado, la tarea es erradicarla con todos los esfuerzos posibles.

This article is from: