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Roberto Cardozo

La Niña TodoMePasa dice:

Videojuegos gratis o la esclavitud perfecta

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Por supuesto que en estos días, semanas, meses, no se puede hablar de nada que no sea el Covid-19. Ya nos hartamos de leer cifras de contagiados, de consolar a amistades que perdieron a un ser querido, etc.

Quienes estamos trabajando en casa, en lo de siempre o en alguna chamba emergente para pasarla, ya no hallamos qué más hacer. Tanto tiempo quejándonos de la falta de tiempo para descansar, tiempo para estar con la familia, tiempo para proyectos personales…

Hay quien ha recaído en los vicios de siempre. Alcohol, benzodiacepinas, opioides, marihuana: todo, todo sirve para olvidar un rato lo aburrido de un mundo que de pronto es asocial.

También hay quien nunca dejó de consumir activamente. Hasta se las ven en figurillas para conseguir su dosis habitual.

Y estamos los que hemos recaído en vicios menos “dañinos” pero igual de latosos.

En mi caso particular, primero recaí en el juego de:

Kim Kardashian: Hollywood

Este videojuego lo bajé cuando salió. Lo borré, lo reinstalé, lo volví a borrar y así. Hasta la pandemia, claro, que recaí feamente cuando creí que no tenía nada mejor que hacer.

Tuve boda en Florencia con mi novio virtual. No recuerdo cómo se llamaba. Primero me comprometí con otro (clásico), pero lo boté porque preferí ocupar mi tiempo en ser famosa (clásico). Estábamos preparando nuestra renovación de votos, como si lleváramos diez años casados, en Hawaii.

Pero entonces lo desinstalé porque apareció:

My Café: Recipes & Stories

No fue gracias a la famosa celebrity que descubrí que los videojuegos gratis son la esclavitud perfecta, sino con . A mí My Café ni me gusta cocinar, mucho menos para otras personas, ¿y aparte tener todo ordenadito? Ñeee.

Este juego lo bajé porque daban estrellas para comprar ropa y perritos y , “adoptar bebés” en el de Kim Kardashian… Y preferí borrar a la Playmate a pesar del tiempo (jamás dinero) que invertí para tener ropa linda. Hello, ¡si en la vida real tengo ropa linda que NO utilizo porque no estoy, ni estaré, lo suficientemente flaca para lucirla!

Básicamente hay que hacer monedas para comprar muebles. Y hay que juntar diamantes para comprar especias para hacer recetas que te den monedas para comprar muebles. También juntas rubíes para expandir la cafetería donde haces recetas que te dan monedas para comprar muebles.

Aparte hay festivales donde usas tus especias para hacer monedas para comprar muebles. Y compites contra otros pueblos y ganas diamantes para comprar especias que usarás para hacer monedas para comprar muebles.

Y así. Interminablemente.

Eso sin contar las horas en grupos y fanpages de Facebook para aprender tips para hacer más monedas y diamantes para comprar más especias para hacer más recetas. Solo así lograrás hacer más monedas y diamantes por atender a gente que ni siquiera existe.

Ya no hablemos de quienes han gastado desde 21 pesos por un regalo para poder hacer tu pueblo. Pensé hacerlo, pero me dio mucha pereza comprar una tarjeta de $100 de Google Play para gastar 21 pesos. Y no tengo Paypal porque la única vez que intenté usarlo me estafaron 100 pesos del único libro electrónico que logré vender.

Sí: ese libro electrónico se lo vendí a mi mamá. ¿A quién más?

También pensé en comprar una oferta de 105 pesos de . Pero me dio pereza My Café comprar una tarjeta de Google Play de 200 pesos para gastar 105 pesos. ¡Y todo para atender a gente que no existe!

Aunque debo decir que me gusta este juego. Estas semanas que estuve enferma dejé de jugar, y ahora que estoy de regreso descargué de nuevo porque…My Café ¡¡ME ENCANTAN LOS VIDEOJUEGOS GRATIS QUE SE JUEGAN SOLOS!!

Es cosa de vigi arlos nada más. Tomas l pedidos del teléfono o del pueblo, pones a los meseros y baristas a atenderlos, ¡y ya! Dejas que la programación de Melsoft haga su magia sin que apenas intervengas.

El problema es que puedo estar horas y horas sin jugar, sino viendo cómo se juega solito el videojuego de turno.

Así he “jugado” durante más de diez años la saga de…

Bloons Tower Defense

No sé si ya sacaron el 7. Pero sí he de decir que lo conocí desde la primera entrega, y cada versión es mucho mejor que la anterior. Del 5 me salté a , porque Bloons Monkey City no solo puedes hacer tu ciudad a tu gusto, sino que también te avientas rounds contra los globitos.

Hace tiempo escribí en inglés sobre este juego. Lo resumo en tres palabras: Changos revientan globos. Eso es todo.

Y no sé por qué me resulta excepcionalmente RELAJANTE ver a unos changos reventando globos. Todos los globos, excepto el rojo, contienen más globos. A estas alturas puedo decir de memoria el orden de los colores y todo.

Lo único que hay que hacer es elegir los changos adecuados según el mapa, y la posición donde los dejarás. Y observar. Comprar mejoras y actualizaciones con las monedas del juego. Y ya.

Este juego apenas lo desinstalé porque mi hija se la pasa pidiendo jugar a los changos. Y es clásico que los niños descubren tu contraseña de desbloqueo sin importar cuán rebuscada sea.

Aquí también puedes comprar cosas con dinero real. Y en el de también. Kim Kardshian Y en todos los juegos freemium.

El tiempo es dinero. Los videojuegos gratis no son tan gratuitos: hay que pagar tiempo, dinero, o ambos, por el dudoso beneficio de jugarlos durante días, meses o años enteros.

Pero por mí está perfecto. No tengo el menor problema con dejar a mis meseros atendiendo mientras leo Charlie y la fábrica de chocolate Bloons . Hacía lo mismo con los de Monkey Defense Kim Kardashian. Con el de no tanto, ahí sí tienes que estarle apretando para viajar a otras ciudades y demás.

Por eso lo borré primero.

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Incipit.

La cotidianidad de la indiferencia

El peor pecado hacia nuestros semejantes no es odiarlos, sino tratarlos con indiferencia: esa es la esencia de la inhumanidad. George Bernard Shaw

Formamos parte de una sociedad global, estamos interconectados hacia todas las aristas de la vida, esto nos parece ser individuos más informados y más conscientes de lo que ocurre en el planeta. Sin embargo, todo parece apuntar a un escenario desolador, somos la generación de la indiferencia, sabemos, pero no actuamos, permanecemos inertes ante las problemáticas que aparecen y vivimos de una manera mecánica o aún peor, resignada.

Paul Valery expresó que ningún imperio es 1 inmortal y que las formas culturales se imponen a través de la dominación social, somos el resultado de lo que los que nos han antecedido y lo que vivimos en el presente. No podemos hablar de una cultura pura o que no haya tenido influencias durante su existencia, de ahí la importancia de reflexionar sobre lo que acontece en el entorno a través del conocimiento pertinente, el cual según Edgar Morin se logra cuando más información se 2 posee y se contextualiza en los diferentes espacios sociales. Pienso en la violencia simbólica de la que nos habló Pierre Bourdieu, aquella que emplea conductas estereotipadas, mensajes, valores y signos para transmitir y reproducir dominación, desigualdad y sobre todo discriminación.

Así se naturaliza la subordinación del estado ante una ciudadanía que no distingue o percibe esta violencia, ya que se encuentra en la cotidianidad y es reforzada por los medios de comunicación que legitiman la violencia a través de un lenguaje naturalizado.

La realidad se ha permeado con la problemática social: la globalización, el neoliberalismo, la constante exploración científica y el desarrollo tecnológico e industrial, el cambio climático, los abusos del poder y la defensa de los derechos humanos; esto ha implicado un desajuste en el proceso de reconocimiento, lo que ha generado que los actores sociales encuentren vacíos y se perciban extraviados en el panorama globalizador que hace de la indiferencia una cotidianidad. 3

Puedo intentar que sí pero no cuándo, pudiera levantarme aunque si no podría seguir siendo tanteo, puedo hasta no incluir incluso sí, pero sigo anteponiendo que aquel pero pudiera ser el cómo, el dónde, el ya, puedo creer que creo aunque no dudo que así como acomodo un modo casi

1. Escritor francés (1871 – 1945) que formó parte del movimiento simbolista y quien consideró la posibilidad de explicar el sentido de la existencia a través de la contemplación y la acción del arte. Escribió , , Introducción al método de Leonardo da Vinci La joven Parca

Cementerio Marino, entre otras obras. 2. Edgar Morin. (2011). . España: Paidos. p. 151La Vía para el futuro de la humanidad 3. Ángel Carlos Sánchez. (2012). . México: IMC.Pasión por la indiferencia

puedo decir que todo pero nada, pudiera yo poder, quizá pudiera.

Una violencia simbólica que es reforzada por los procesos educativos (de cualquier institución) se presenta cuando se es indiferente a aquellos acontecimientos de la humanidad que dañan y eliminan no sólo al otro, sino que también olvidan los ideales colectivos “… somos lo que olvidamos.” Se requiere de observar a 4 través de otras miradas del tejido social y entender las exigencias sobre el respeto a la identidad, se cree que los seres humanos tenemos capacidades mentales que nos han permitido desarrollar estructuras lingüísticas complejas, sin embargo, conforme se va experimentando sobre estos procesos sociales se percibe que el lenguaje sólo queda como un elemento para la palestra política y el proceso mal llamado “democrático”.

La indiferencia en la educación no permite la reflexión porque no visibiliza el discurso de ningún grupo social (El reclamo de las mujeres es considerado alienante, no se considera su lucha a través de los años para ser reconocidas dentro de las normas jurídicas y como seres humanos que requieren libertades para construir sus identidades) Peter Burke en Obertura: La 5 nueva historia, su pasado y su futuro menciona que lo apremiante de relacionar la vida cotidiana con los acontecimientos importantes que se van gestando en la sociedad brinda la oportunidad de modificar lo construido.

Así la indiferencia al hecho puede transformarse en el hacer; la construcción social es colectiva, diversa y relativa, es por ello que no se puede estandarizar el todo y tomar sólo una parte para entenderla, las subjetividades indican que se vive en una interculturalidad y que si se desconoce esa interacción todo dentro de ella se lesiona. Algunos grupos sociales consideran importante la cohesión y la visibilización de los otros, algunos más se disgregan por no saber cómo llevar a cabo ese proceso de contacto y el cómo vivir con normas que les influya en un mejor desarrollo local y por ende nacional e internacional.

Visibilizar construye la propia identidad, por ello es una de las encomiendas de este tinglado humano, consecuencia de la deshumanización y la falta de credibilidad en las instituciones, con la convicción como mencionaba Baudelaire de que “…en un acto 6 social, cada uno disfrute y conviva con los demás”.

El extranjero

–¿A quién quieres más, hombre enigmático, dime, a tu padre, a tu madre, a tu hermana o a tu hermano? –Ni padre, ni madre, ni hermana, ni hermano tengo. –¿A tus amigos? –Empleáis una palabra cuyo sentido, hasta hoy, no he llegado a conocer. –¿A tu patria? –Ignoro en qué latitud está situada. –¿A la belleza? –Bien la querría, ya que es diosa e inmortal. –¿Al oro? –Lo aborrezco lo mismo que aborrecéis vosotros a Dios. –Pues ¿a quién quieres, extraordinario extranjero? –Quiero a las nubes..., a las nubes que pasan... por allá.... ¡a las nubes maravillosas! 7

Itasavi1@hotmail.com Facebook: Blanca Vázquez Twitter: @Blancartume Instagram: itasavi68

4. Néstor A. Braunstein. (2008). . México: Siglo XXI. p. 13La memoria, la inventora 5. Peter Burke, et al. (1991). . España: Alianza Editorial. Formas de hacer Historia 6. Escritor francés. Autor de y .Las Flores del mal Los paraísos artificiales 7. Poema número 1 de ( ). Traducción de Enrique Díez Canedo, 1935El spleen de París Los pequeños poemas en prosa

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