Año 75 Nº 4084 - 20 de Julio de 2014 16º Domingo ordinario - Ciclo A - Color verde
Unidos por el Espíritu Las parábolas del Evangelio y las lecturas, tienen un mensaje que debe llegar a todos los creyentes y a todos los seres humanos: debemos tomar conciencia de no querer y desear lo imposible (como pretender que hayan sembrados sin maleza como lo expresa la primera de las parábolas del Evangelio).
aceptada en el tiempo de Jesús por diversos criterios religiosos (fariseos y esenios) igualmente que por los grupos económicos y políticos (herodianos, saduceos y zelotes), pues todos veían como opositores a quienes no pensaban, y opinaban según sus mismos criterios.
Jesús llama a la apertura de la mente y el corazón para acoger con alegría (no pasivamente y con indiferenComo en tiempos cia) a quienes de Jesús y duranaparecen ante te toda la historia, nuestra forma de hemos pretendido vida como diferendividir y “organizar” tes (que podemos caaparentemente la societalogar como “malos”). dad con criterios que conNecesitamos tener una apersideramos, muchas veces, justos: tura para acoger con pluralismo la buenos y malos deben estar se- diferencia, que siempre va a estar parados y puestos en los extremos presente en nuestra humanidad. opuestos a sus contrarios.
¿Oramos constantemente por toEsta opinión, de dividir entre bue- dos aquellos que nos calumnian y nos y malos, era frecuentemente nos persiguen?
«los justos brillarán como el sol»
El Día del Señor. Julio 20 de 2014
tienes el poder a tu disposición cuando lo quieras. Obrando así, enseñaste a tu pueblo que el justo debe ser humano con los otros; y colmaste a tus hijos de Rito de entrada esperanza, pues cuando han pecado les COMENTADOR: Estamos invitados a parti- das oportunidad de arrepentirse.
RITOS INICIALES
1
cipar en el crecimiento del Reino de Dios, Palabra de Dios. a desechar el mal y construir comunidad. Seamos los animadores del querer de Dios Salmo 85 en la humanidad llena de injusticias y celebremos el amor entre nosotros. El Señor nos fortalece. TODOS: Tú, Señor, eres bueno y cle-
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Oración inicial
CELEBRANTE: Mira con misericordia a estos tus hijos, Señor, y multiplica tu gracia sobre nosotros, para que, fervorosos en la fe, la esperanza y el amor perseveremos en el fiel cumplimiento de tus mandamientos. Por Jesucristo nuestro Señor...
LITURGIA DE LA PALAB R A
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Primera lectura
MONICIÓN: Dios que es el Todopoderoso, es capaz de actuar con moderación, y mostrarse infinitamente paciente, indulgente y misericordioso. Del libro de la Sabiduría 12,13.16-19
No existe ningún Dios, fuera de ti, que tenga bajo su cuidado el mundo entero y ante el cual debieras tú justificar tu sentencia. El fundamento de tu justicia es tu propio poder. Teniendo, pues, dominio sobre todos, puedes tener de todos compasión. Hace ostentación de su fuerza el que sabe que no está en posesión del poder absoluto, y por eso censura las libertades de sus propios seguidores. Tú, en cambio, por ser verdaderamente soberano nos juzgas con clemencia y nos gobiernas con gran misericordia. Tú
mente. -Tú, Señor, eres bueno y clemente, rico en misericordia con los que te invocan. Señor, escucha mi oración, atiende a la voz de mi súplica. /R. -Todos los pueblos vendrán a postrarse en tu presencia, Señor; bendecirán tu nombre: «Grande eres Tú, y haces maravillas; Tú eres el único Dios.» /R. -Tú, Señor, Dios clemente y misericordioso, lento a la cólera, rico en piedad y leal, mírame, ten compasión de mí. /R.
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Segunda lectura
MONICIÓN: La oración del hombre no es un impulso casual hacia Dios, el Inaccesible: es el Espíritu quien la suscita y traduce en ella las palabras poco adecuadas. De la Carta del apóstol San Pablo a los Romanos 8,26-27
Hermanos: El Espíritu Santo viene en ayuda de nuestra debilidad. Nosotros no sabemos qué pedir en la oración ni la forma de hacerlo: el Espíritu es quien gime en nosotros y aun sin palabras intercede. Y Dios, que penetra hasta lo más íntimo de los corazones, sabe lo que el Espíritu quiere decir y cómo su intercesión en favor de los fieles está de acuerdo con la voluntad divina. Palabra de Dios.
16º Domingo ordinario - Ciclo A - Color verde
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Canto
TODOS: Aleluya, aleluya, aleluya. -Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque revelaste los misterios de tu Reino a los pequeños. TODOS: Aleluya, aleluya, aleluya.
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Evangelio
MONICIÓN: Se sabe que un minúsculo grano de mostaza da origen a un gran arbusto, y que un poco de levadura hacer fermentar la masa. Con mayor razón podemos asegurar que el reino, cuyos comienzos son modestos, se desarrollará y transformará el mundo. Según San Mateo 13,24-43
Aquel día, propuso Jesús a la multitud esta otra parábola: «Al Reino de los cielos le sucede lo que a la buena semilla que un hombre sembró en su campo. Cuando todos dormían, vino un enemigo y sembró mala hierba en medio del trigo y se fue. Así que cuando creció el trigo y dio espigas, apareció también la mala hierba. Entonces fueron los trabajadores y le dijeron al patrón: ‘Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿Por qué hay mala hierba? Él les respondió: ‘Eso lo hizo algún enemigo’. Ellos le dijeron: ‘¿Quieres que vayamos a arrancar la mala hierba?’ Pero él les contestó: ‘No, no vaya a ser que al arrancar la mala hierba arranquen también el trigo. Déjenlos crecer juntos hasta la cosecha. Cuando llegue el momento de la cosecha, encargaré a los segadores que arranquen primero la mala hierba, la aten en gavillas y la quemen, y que el trigo lo guarden en mis silos’,» También les propuso esta otra parábola: «Con el Reino de los cielos, pasa lo mismo que con el grano de mostaza que uno siembra en su huerta. Aunque es la más pequeña de todas las semillas, cuando
crece la planta, es la mayor de toda la huerta y llega a ser un árbol, hasta el punto de que vienen los pájaros a descansar en sus ramas.» También les dijo esta otra parábola: «Con el Reino de los cielos pasa lo mismo que con la levadura que tomó una mujer y la mezcló con tres artesas de harina. Y con solo eso fermentó toda la masa.» Todo esto lo dijo Jesús en parábolas a la multitud; sin parábolas no les hablaba. Así debía cumplirse lo que Dios había dicho por medio del profeta: «Voy a abrir la boca para decir parábolas, manifestando lo que estaba oculto desde la fundación del mundo.» Entonces se retiró de la multitud y regresó a casa. Sus discípulos se le acercaron y le dijeron: «Explícanos la parábola de la mala hierba en el campo.» Él les respondió: «El que siembra la buena semilla es el Hijo del hombre. El campo es el mundo. La buena semilla son los ciudadanos del Reino de los cielos. La mala hierba son los seguidores del Maligno. El enemigo que la sembró es el diablo. La cosecha es el fin de los tiempos, los segadores son los ángeles. Como se arranca la mala hierba y se quema en el fuego, así sucederá al fin de los tiempos. El Hijo del hombre enviará a sus ángeles, y ellos recogerán de su Reino a todos los que incitan al mal y a todos los malvados, y los echarán al horno encendido; allí será el llanto y la desesperación. Entonces los justos brillarán como el sol en el Reino de su Padre, ¡El que tenga oídos, que oiga!» Palabra del Señor.
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Oración Comunitaria
CELEBRANTE: Señor nosotros que somos tu pueblo te presentamos la oración que sale de lo más profundo de nuestra oración y respondamos a la oración diciendo: TODOS: Escúchanos Señor.
COMENTADOR: Señor somos tu Igle- en la ciudad, para que sea recomsia; que va en camino de conversión pensado su trabajo con precios de hacía el Reino de Dios, dando buenos mercado justos. /R. frutos en comunidad. /R. CELEBRANTE: Oh Padre, en ti busca- Que cada uno de nosotros, seamos mos la verdad y el amor. Sé genesemillas buenas, que dan frutos que se roso con nuestras peticiones, danos convierten en alimento y fuerza para la experiencia de tu misericordia y construir la fraternidad. /R. una profunda gratitud hacia tu infi- Por los trabajadores del campo que nita bondad. Por Jesucristo nuestro producen el alimento de los que viven Señor. /R.
LITURGIA DE LA EUCARISTÍA
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Oración sobre las ofrendas
CELEBRANTE: Oh Dios, que has llevado a la perfección del sacrificio único los diferentes sacrificios de la antigua alianza; recibe y santifica las ofrendas de tus fieles, como bendijiste la de Abel, para que la oblación de cada uno en honor de tu Nombre sirva para la salvación de todos. Por Jesucristo nuestro Señor.
10
Oración después de la comunión
CELEBRANTE: Quédate, Señor con tus hijos, y a quienes has concedido participar en los misterios del Reino, concédeles abandonar el pecado y renovar su vida. Por Jesucristo nuestro Señor.
Palabra y Vida:
Dios, en su infinita paciencia y misericordia, no quiere que “fulminemos” a los malos, sino que les demos tiempo. Tal vez también ellos se den cuenta a tiempo de su error, se arrepientan y se conviertan, como el buen ladrón del Evangelio, aunque sea a la última hora de su vida. A nosotros nos toca ser buenos colaboradores de Dios: tener paciencia como Él, y darle tiempo al tiempo.
Santoral Lunes 21 Martes 22 Miércoles 23 Jueves 24 Viernes 25 Sábado 26
y
citas
San Lorenzo de Brindis Santa María Magdalena Santa Brígida San Sarbelio Makhluf Santiago Apóstol San Joaquín y Santa Ana
Misión Claretiana
bíblicas de Mi 6,1-4.6-8 Ct 3,1-4a Jr 1,1.4-10 Jr 2,1-3.7-8.12-13 Hch 4,33; 5,12.27-33 Jr 7,1-11
la
Salmo Salmo Salmo Salmo Salmo Salmo
49 62 70 35 66 83
Seman a Mateo 12,38-42 Juan 20,1.11-18 Mateo 13,1-9 Mateo 13,10-17 Mateo 20,20-28 Mateo 13,24-30