Año 75 Nº 4099 - 2 de Noviembre de 2014 Conmemoración de todos los Fieles Difuntos - Ciclo A - Color morado Nuestra existencia es mucho más que la desesperada búsqueda de subsistencia. Nosotros queremos el bienestar, la paz y la felicidad, pero no la podemos alcanzar si no nos comprometemos a convertir el amor, la solidaridad y la compasión en los valores fundamentales de nuestra vida.
Los Fieles Difuntos
Hoy hacemos la conmemoración de los que nos han precedido en la fe, de los que están en la memoria de Dios, de los que han resucitado ya en el Señor Jesús. Porque, para Dios nuestra vida no se detiene con la muerte, sino que continua en su presencia. Todo el amor, la compasión y la solidaridad que vivimos en nuestra existencia nos acompañaran más allá de la muerte porque esos valores sustentan nuestra vida ante Dios.
La muerte, la violencia, y el odio amenazan nuestra existencia de diferentes maneras. La muerte como límite máximo de nuestra existencia; la violencia como anticipación inesperada de la muerte; el odio como enfermedad que Roguemos al Dios de la vida para corroe el alma y la deja sumida en que el odio, la violencia y la muerte se alejen definitivamente de la miseria. nuestra existencia y podamos viAnte todas estas amenazas sólo vir plenamente en la presencia de podemos pensar en lo que nos Jesús más allá de nuestra vida o propone Jesús: una vida plena. nuestra muerte.
«lo envolvió en una sabana y lo colocó en un sepulcro»
El Día del Señor. Noviembre 2 de 2014
Los probó como el oro en el crisol y los aceptó como holocausto. Los que confían en Él comprenderán la verdad, Rito de entrada y los que le son fieles permanecerán junto a Él en el amor, porque los eleCOMENTADOR: Cristo sigue presente en nosotros. Su muerte y resurrección no es gidos del Señor gozan de su amor y su separación, sino nueva manera de presen- misericordia.
RITOS INICIALES
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cia; Él sigue presente aquí en su palabra, Palabra de Dios. en el Pan y en el Vino, en toda la Iglesia, en esta asamblea de hermanos. Por eso Salmo 61 con Él, renovando el misterio de su muerte en la cruz, vamos a celebrar nuestra eu- TODOS: Descansa sólo en Dios, alma caristía. mía.
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Oración inicial
-Solo en Dios descansa mi alma, porque de Él viene mi salvación: sólo Él es CELEBRANTE: Escucha, Señor, bonda- mi roca y mi salvación, mi alcázar: no dosamente nuestras súplicas, para que vacilare. /R. al crecer nuestra fe en tu Hijo resu- -Descansa sólo en Dios, alma mía, citado aguardando la resurrección de porque Él es mi esperanza; sólo Él es tus siervos difuntos, se afiance nuestra mi roca y mi salvación, mi alcázar: no esperanza. Por nuestro Señor Jesu- vacilare. /R. cristo. -De Dios viene mi salvación y mi gloria, LITURGIA DE LA PALAB R A Él es mi roca firme, Dios es mi refugio. Pueblo suyo, confía en Él, desahoga ante Él tu corazón. /R. Primera lectura
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MONICIÓN: No hay nada más cierto para el creyente que la existencia de la vida después de la muerte y que al final de todos los tiempos le veremos al Señor, cara a cara, gozando de su amor y de su misericordia.
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Segunda lectura
MONICIÓN: Una nueva cración, una ciudad santa descendida del cielo, enviada por Dios; no se trata de vanas esperanzas, sino de promesas cuyo cumplimiento san Juan tiene un día Del libro de la Sabiduría 3,1-6.9 el privilegio de contemplar realizadas en una Las almas de los justos están en las visión.
manos de Dios, y no las afectara ningún tormento. A los ojos de los insensatos parecían haber muerto. Su salida de este mundo fue considerada una desgracia, su partida de entre nosotros, una destrucción. Ellos, sin embargo, están en paz. Aunque a los ojos de los hombres hayan sido castigados, su esperanza está llena de inmortalidad. Por una leve corrección, recibirán grandes beneficios, porque Dios los puso a prueba y los encontró dignos de Él.
Del libro del Apocalipsis 21,1-5a.6b-7
Yo, Juan, vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra desaparecieron, y el mar no existe ya. Vi también la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que descendía del cielo, edificada por Dios y arreglada como una novia que se ha adornado para recibir a su esposo. Y oí una voz potente que decía desde el trono:
Día de los Fieles Difuntos - Ciclo A - Color morado
«Esta es la morada de Dios entre los hombres: Él habitará con ellos, y ellos serán su pueblo; con ellos estará su Dios, Dios en persona. Él secará toda lágrima de sus ojos, y ya no habrá muerte, ni luto, ni llanto, ni fatiga, porque lo de antes ya pasó.» Y el que estaba sentado en el trono dijo: «Todo lo hago nuevo. Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin. Al que tenga sed yo le daré a beber gratuitamente de la fuente de agua viva. El vencedor recibirá estas cosas, y yo seré su Dios y el será mi hijo.»
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Credo de los Apóstoles
Creo en Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Palabra de Dios. Padre Todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos. Canto Creo en el Espíritu Santo, la santa TODOS: Aleluya, aleluya, aleluya. Iglesia católica, la comunión de los ¡Felices los que mueren en el Señor! Que santos, el perdón de los pecados, la descansen de sus fatigas, porque sus resurrección de la carne y la vida obras los acompañan. eterna. Amén
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TODOS: Aleluya, aleluya, aleluya.
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Evangelio
MONICIÓN: Jesucristo se enfrentó a la muerte y venció. La muerte no quedó en un sepulcro. Los cristianos estamos llamados a seguir sus pasos en la vida para lograr un día la resurrección con Cristo. Según San Lucas 23,44-46.50.52-53
Era alrededor del mediodía. El sol dejó de brillar, y se oscureció toda la tierra hasta las tres de la tarde. El velo del templo se rasgó por medio. Y Jesús, con voz potente, dijo: «Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu.» Y dicho esto expiró. Llegó entonces un miembro del sanedrín, llamado José, hombre recto y justo, y fue a ver a Pilato para pedirle el cuerpo de Jesús. Y después de bajarlo, lo envolvió en una sabana y lo colocó en un sepulcro cavado en la roca, donde nadie había sido sepultado. Palabra del Señor.
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Oración Comunitaria
CELEBRANTE: Hermanas y hermanos: Oremos en la fe y en la esperanza de la Vida Eterna no sólo por nuestros hermanos difuntos, sino también por la Iglesia, por la paz del mundo y por nuestra salvación. Digamos: TODOS: Te rogamos, óyenos. COMENTADOR: Por la Iglesia Santa de Dios, para que en medio de su peregrinar terreno anuncie la esperanza del Reino Eterno a todos los hombres /R. -Por la paz entre la naciones, el progreso de todos los pueblos, la justicia y la libertad. /R. -Por las almas de nuestros hermanos, parientes y bienhechores, para que, el Señor les conceda el premio eterno por sus trabajos. /R. -Por quienes estamos aquí reunidos en la fe y en el amor, para que el Señor se digne reunirnos en la Asamblea de los santos./R.
CELEBRANTE: Oh Dios creador y redentor estas súplicas fraternas, alcancen de Ti de los hombres, concede a tus siervos la misericordia que siempre desearon. el perdón de todos sus pecados y por Por Jesucristo nuestro Señor.
LITURGIA DE LA EUCARISTÍA
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10 Oración sobre las ofrendas CELEBRANTE: Acoge, Señor, nuestras ofrendas, para que tus siervos difuntos participen en la gloria de tu Hijo cuyo sacramento de amor celebramos. Por Jesucristo nuestro Señor.
Oración después de la comunión
CELEBRANTE: Te pedimos, Señor, que tus siervos difuntos, por quienes hemos celebrado este Misterio pascual, vivan ya en la mansión de la luz y de la paz. Por Jesucristo nuestro Señor.
Palabra y Vida:
En este día nos podemos preguntar: cómo se explica, la devoción a los Fieles Difuntos? No queremos establecer comparación con otras culturas no cristianas, que no tienen nuestra esperanza, y que son también muy apegadas al culto de sus muertos. Hablamos de nosotros porque tenemos fe. Sabemos que los que nos precedieron están en el seno de Dios. Y sin embargo, pensamos mucho en ellos, rezamos mucho por ellos, y los muertos están presentes en nuestras familias como lo estuvieron en vida. Aceptamos esta realidad: los difuntos nos dicen mucho al corazón, y los recordamos, rogamos por ellos, y los seguiremos encomendando siempre al Señor. Qué es el purgatorio? Es indudable que muchos católicos nos cuestionamos qué será eso tan misterioso, porque lo hemos escuchado de pequeños en la catequesis, en casa, en algunas oraciones, etc. En pocas palabras, el Purgatorio es el estado en el que van todas las almas, que, aún muriendo en gracia de Dios, no han llegado en su vida a purificar el daño que han ocasionado con sus pecados. Pero... ¿De qué hay que “purgarse”? ¿No se supone que se nos perdonan todos los pecados en la confesión? Con la confesión quedan perdonados nuestros pecados y quedamos libres del castigo eterno que nos merecíamos. Pero la confesión no repara el daño que hemos ocasionado. Ése, debemos repararlo nosotros con nuestras buenas obras o con nuestro sacrificio.
Santoral Lunes 3 Martes 4 Miércoles 5 Jueves 6 Viernes 7 Sábado 8
y
citas
San Matín de Porres San Carlos Borromeo San Pedro Celestino San Alejandro San Teófilo San Andrés Avelino
Misión Claretiana
bíblicas de Flp Flp Flp Flp Flp Flp
2,1-4 2,5-11 2,12-18 3,3-8a 3,17 - 4,1 4,10-19
la
Salmo Salmo Salmo Salmo Salmo Salmo
130 21 26 104 121 111
Seman a Lucas Lucas Lucas Lucas Lucas Lucas
14,12-14 14,15-24 14,25-33 15,1-10 16,1-8 16,9-15