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iene
I
No t
Plás tico
y al
man
os
umi nio
Hermosa madre tierra no tengo más que versos de agradecimiento por resistir a tantos años de padecimiento a causa nuestra, por la pereza, no hacemos enmienda Usted, quien bota el papel, el vaso a la calle, sin pensar en ti Madre Tierra, desde su auto, caminando arroja la colilla de cigarro, nada nos cuesta sin que le importe un rábano dejar de consumir en grandes tiendas ignorando el daño. plástico y aluminio por donde sea que veas, Hace caso omiso a lo que está pasando; en casa sin separar nada olor a oxidado, alcantarillas tapadas por el vicio, todo a una caneca, el exceso, el descaro… sabiendo del daño crece la indiferencia. Ríos con mercurio, peces, mamos, ¿Qué es lo que tanto nos cuesta? niños, animales hermanos están siendo envenenados, ¿Retribuir en algo a quien nos alberga? desplazados por las mafias, el monopolio, el monstruoso humano… a quien con buenos ojos La tierra lamentablemente ¡no tiene manos! nos despierta con olor a panela, pa’ ver si despiertas de un solo coñazo, a hierba, a café, a arena. en la zona de confort más que amañado La medicina en los campos espera, pagando por lo que no es necesario. la combustión de miel con amor Es usted la piedra en el zapato, da movimiento al planeta. retrasando esta revolución, involucionando. Agradecer, retribuir de algún modo, ¿A dónde irá si desea un descanso? los buenos actos se hacen sin público ¿Aire limpio, meditar, del fresco verde estar rodeado? estando solos, el ejemplo forjará el cambio Trabajaremos por agua en un futuro no muy lejano, y enseñará a otros. lagunas y ríos, montes sagrados, extintos hermanos Garrapatas de acero cercenan montañas, que a gritos claman con urgente llamado destruidas, desangradas, la vida aniquilada, a ser parte del cambio. agua que todo te llevas Peor es no querer a conciencia intentarlo, cuando eres abundante y no hacer nada por nuestra madre, y cuando escaseas… que todo, todo no lo ha dado. ¡Cuida, defiende, respeta! Somos uno y todos hijos de la Madre Tierra.
II